ANGEL DE LA VIDA, ANGEL DE LA MUERTE.
CAP13: LA REINA DE LOS CONDENADOS.
En medio de la sala la figura de Voldemort rodeado de sus mortifagos hizo que todo el mundo se estremeciera.
Que quieres Riddle.- pregunto Dumbledore.
A ella.- dijo señalando a Hermione.
Ella sintió como si una cuerda la atrapara y estirara de ella, se agarro fuertemente a Draco, quien respondió de igual manera, pero el hechizo era más poderoso y se la arrebato de los brazos.
Suéltame, no quiero unirme a ti.
Mi señora no puedes negarte a unirte a mí, tú eres la señora de todos nosotros y debes afrontar tu destino.
No lo haré, yo no tengo vuestros ideales, no tengo el alma oscura como ellos.- dijo mirando a los mortifagos.- como tu.
Claro que la tienes, pero aun no ha despertado el espíritu de la heredera.
Eso es mentira, nunca seré como tu.
Claro que lo serás, serás mi esposa, mi reina, nuestra reina y si no aceptas lo harás a la fuerza, traer a los chicos.
Unos mortifagos aparecieron con sus amigos presos. Harry, Ron, Ginny, Lavender, Parvaty, Luna, Neville, Seamus, Dean, todos.
No te atrevas a hacerles daño Voldemort o lo pagaras caro.
Si no me obedeces lo haré, no lo dudes, recuerda que uno de ellos es Harry Potter.
No me amenaces.
No lo hago, yo actuó.- y lanzo un cruciatus a Ginny, su mejor amiga.
Ginny, no.- gritaba mientras luchaba por zafarse del hechizo.- Esta bien, déjala en paz, acepto, pero júrame una cosa, no les harás daño, a ninguno, o yo misma seré quien te mate, lo juro.
Voldemort soltó una carcajada de superioridad al igual que sus seguidores, excepto Draco Malfoy que no podía hacer nada o se delataría, pero en su cabeza se perpetraba una gran lucha, apretaba los puños con ira, pero confiaba en Hermione, sabia que ella era fuerte y que tenia grandes poderes, la había visto en acción, además el conocía el corazón de la chica, no se uniría al lado oscuro.
Ves preciosa, no es tan difícil.- toco la frente de la chica y pronuncio unas palabras, de repente el rostro de Hermione se torno frío, sus ojos oscuros como sin vida.
Postraos ante vuestra reina.- todos los mortifagos lo hicieron.- yo ya no soy vuestro peor enemigo, ahora lo es ella, su poder es infinito, ella es la heredera y con ella a mi lado caeréis todos, mi señora demuéstrales tu poder.
Hermione con un movimiento de manos hizo que cualquier cristal que se encontraba en el comedor estallara, copas, ventanas, adornos, lámparas, hiriendo a muchos de los presentes. Su poder había aumentado al 1000
Veis lo que puede pasar, con solo un movimiento podríais desaparecer todos ahora mismo.
No!.- grito alguien.
Quien ha dicho eso.- dijo Lucius Malfoy.- que de la cara.
He sido yo padre, ella no es así, yo la conozco y no permitiré que hagáis del ser más puro que conozco una asesina como vosotros.
Cállate Draco, sin duda me alegra que te relaciones tan bien, pero tu no tienes vela en este entierro.
No dejare que os la llevéis.
Todos miraba la escena atónitos, Draco Malfoy intentando salvar a Hermione Granger, que estaba pasando, sin duda Draco había decidido afrontar su destino.
Tu y cuantos más lo vais a impedir?
Todos nosotros lo haremos.- dijo Dumbledore.
La Orden al completo mas los componentes de ED estaban formando ejercito frente a Voldemort y sus mortifagos. Dumbledore les había preparado después de lo que le había contado Draco.
Unos luchaban contra mortifagos, otros contra Voldemort. Draco mientras tanto luchaba contra su padre.
Cuando Draco consiguió desmayar a su padre, corrió hacia Hermione que se encontraba en el centro de todo como en trance.
Hermione vamonos, salgamos de aquí.
No mi futuro esta aquí, junto a Voldemort.- dijo con voz monótona.
No Hermione, no lo permitiré, no permitiré que seas como ellos, no permitiré que te conviertas en una asesina, tú eres increíble.
Este es mi destino debo de afrontarlo.
Pues cámbialo, tu puedes hacerlo, como yo lo hice, como lo estoy haciendo ahora.
Ya no puedo, mi corazón es oscuro.
Nunca lo ha sido y nuca lo será, eres la persona con el alma más pura que conozco, yo mismo lo he comprobado, no me dejes, no te vayas, te necesito.
No lo entiendo, tu me odiabas.
No te odio, Hermione, te quiero, quiero estar contigo, que estemos juntos para siempre, te amo, te quiero, no lo entiendes.
TE QUIERO, TE QUIERO, TE QUIERO!
Estas palabras comenzaron a retumbar en la mente de Hermione, una lagrima comenzó a bajar por su mejilla y salió del trance.
Draco...- fue lo único que pudo decir mientras hacia al suelo sin conocimiento.
Draco la tomo en brazos, alhajándola de todo y se escabullo. Entro en una habitación secreta de las que había en Howarts. La tumbo en un sillón que había, recostándola sobre sus rodillas.
