Konichiwa! aquí vuelvo con el penúltimo capi de ángel T-T...me dará pena dejar de escribir est fic pero ia q T-T...ahora los agradecimientos
kagome-anti-kikyo :
Kagome-chan! nOn...q bueno es recibir tu review...jajaj tonces si era Mizuho la q tu creías?...q bien le apuntast XDDD...jejej wno a ver q te parece este capi amiga...mushias grax x por ánimos y un abrazote tb para ti! nOn...grax x tu review...
Rerry
Konichiwa! nOn...jajajaj pues como verás aquí se resuelve lo de la pareja de InuxKagxSessho n.n...la verdad los reviews han tado raros o.o por lo menos t dejó poner...mushias gracias por tu apoyo! nOn...
Akeru Fujimi:
Sis! nOn...jajaja si verdad a todos nos gustaría ver así a Sessho y a Inu n®...pero ia q nos tendremos q conformar con q en la tercera peli Sessho lo protega nOn...en fin u.uU...me alegro q t haia gustado sis..espero q est cap tb te guste ...grax x todos tus ánimos y por tu review!
Mushias gracias a todas las personas q leen este fic
Disclaimer: Inu y Co no me pertenecen si no a la sensei Rumiko Takahashi. Solo Saiko, Mizuho e Ícaro son de mi invención ia saben si los queren ocupar en algún fic solo díganmelo...
18. Volviendo a la normalidad
El sol relucía en todo su esplendor, no había nubes y el cielo se encontraba más azul que nunca, los prados mostraban hermosos verdes y las flores estaban por doquier.
Hermosos paisajes, frutos jugosos y mucha felicidad era lo que se respiraba en el Sengoku, menos para un grupo de personas que aún no podían disfrutar de aquel paisaje, sobre todo un hanyou quien ya ni siquiera tenía ganas de pelear.
Sus amigos intentaban hablar la mayor parte del tiempo y reír como si nada hubiese pasado, recordando viejas anécdotas o simplemente apartando de Miroku a todas las chicas a las cuales el se les acercaba para pedir un hijo siendo novio de Sango, todo porque le gustaba ponerla celosa, después lo arreglaba con un tierno beso pero aún así ella no le hablaba en todo el día para castigarlo.
Shipo también seguía las artimañas de Miroku y cada ves que llegaban a una aldea buscaba una joven amiga para estar en su estadía, la otra parte del tiempo la pasaba molestando a Inu Yasha o simplemente durmiendo o comiendo.
Esos banquetes los conseguía como siempre el monje diciendo que una nube de la desgracia se posaba sobre el lugar y que él la exterminaría, había veces en que era verdad y de pronto aparecía el espíritu o demonio por sorpresa y todos debían volver a pelear, normalmente no eran fuertes si no débiles criaturas que disfrutaban de estar en lugares de humanos pero causando molestias, así que ellos se deshacían y conseguían comida, un caliente baño y cómodas habitaciones.
Un mes completo había pasado desde que habían derrotado a Saiko y todo era una rutina. En un principio les había costado mucho asumir el hecho de que su mejor amiga no estuviera con ellos, pero con el tiempo intentaron olvidar aquel triste sentimiento pues sabían que a ella no le gustaba verlos mal, aunque era casi imposible esconderlo, ya que faltaban sus risas, sus enojos con Inu Yasha, sus Osuwari, sus caricias para alegrarlo o simplemente las cosas extrañas del presente del cual ella venía para entretenerlos a todos y distraerlos de malas pasadas.
Su meta era hacerlos sentir feliz y normalmente lo lograba, verla triste era causa de que todos se preocuparan y ahora la única preocupación que tenían era Inu Yasha, cada día se veía mas desolado, sin ganas ya de vivir, peleaba sin ánimos, no reía, no molestaba a Shipo y cuando este si lo hacía se limitaba a dirigirle una mirada algo fría pero que todos comprendían al observar sus dorados ojos que había soledad y una infinita tristeza que le carcomía el alma con cada día que pasaba.
En otro lugar se imponía un fuerte castillo, muchas flores estaban en el jardín, desde que esa niña había llegado ellas estaban allí, pues antes solo era un castillo, un simple castillo en el cual vivía uno de los más fuertes Taiyuokai…
Desde que le dieron la triste noticia la niña no estaba tan alegre como antes, seguía riendo, jugando y hablando mucho como siempre, pero…se podía notar en minutos que extrañaba a su gran amiga, después de todo la acompañó durante un tiempo y fue suficiente para crear un gran lazo de amistad.
El Taiyuokai se veía como siempre, serio y frío pero…por dentro no se sentía igual, desde aquella batalla las cosas habían cambiado para él, tanto con su hermano como con Aome, ahora a veces se encontraba con Inu Yasha y hablaba un poco con él, podía entender lo triste que se sentía, de verdad esa mujer significaba muchísimo para él, pero bueno esas eran cosas que a él no le importaban….no le tenían que importar….no le tenían que importar….oh diablos! pero si le daban vuelta a la cabeza todo el día, como la odiaba, ella era la causante de que se pusiera a pensar tanto en cosas que no debía, en fin…
No sabía porqué el sol estaba tan fuerte últimamente, hacía mucho calor y tenía que ir todos los días con la pequeña niña al lago pues si no moría de calor y sed en ese castillo tan oscuro, aunque nada servía mucho, se bañaba un rato y al siguiente ya tenía calor de nuevo, así el Taiyuokai aprendió a que era mejor no moverse del lago en todo el día o si no tenía ir cada diez minutos para devolverse y no era ninguna gracia.
Jaken era el menos contento con esto pero no podía desobedecer a su amo, menos cuando lo veía tan cambiado, el ambiente era mucho menos tenso que antes y ya no habían tantas discusiones.
En otro lugar una joven caminaba de un lado para otro sin detenerse ante la mirada de todos sus amigos que la habían ayudado y aconsejado durante todo este tiempo.
Estaba nerviosa y era normal, no podía evitarlo aunque todos intentaran tranquilizarla era imposible, así que al final terminaron riendo cosa que a ella no le agradó en lo más mínimo y les dio la espalda, pero en vista que podía mantenerse quieta volvió a moverse de un lado hacia otro.
Oh vamos quédate quieta harás un agujero en el piso –le decía divertido un joven alto y bastante guapo-
Cállate cállate que estoy pensando –respondió la joven mirándolo de una forma a la que él prefirió callar-
Jajaja tu pensando eso lo dudo –exclamó sonriendo otro chico quien hizo reír a todos los que se encontraban a su alrededor-
Ya deja de molestarme u-uXX –murmuró la joven dándole un golpe-
Hai x-x –todos los demás rieron y se dieron cuenta que a pesar de todo la joven había logrado salir adelante y reír otra ves como lo hacía antes.
Frente a ellos había dos grandes puertas que parecían ser de oro y dentro de ellas solo podían entrar algunos privilegiados. Necesitaba que se abrieran pronto para traerle la respuesta si no se volvería loca por la espera, ya solo le quedaba un día en la tierra y aquí eso sería como una hora o quizás menos, no tenía aún la noción del tiempo angelical y el terrestre.
Porqué no salen porqué no salen – repetía una y otra ves mientras los jóvenes le ponían sus manos en sus hombros y las chicas le decían palabras para tranquilizarla y decirles que todo estaba bien que lograría llegar y que todo saldría planeado según lo propuesto.
Aunque ella tenía un gran temor pues no sabía como reaccionaría después de todo un mes que para ella claro fue mucho menos tiempo, aunque sus sentimientos lo sintieron como si hubiese sido así.
Las puertas se fueron abriendo poco a poco y la joven pudo calmarse por fin, se dio media vuelta y juntando sus manos se quedó frente a ella esperando a sus dos grandes amigos que tanto la estaban ayudando.
En un principio solo se vio una luz muy fuerte blanca y silencio absoluto que fue apagado por los pasos de los jóvenes que se iban acercando, con el tiempo se pudieron ver sus sombras, oscuras y ya después se pudo observar su figura completa tal y como los conocían.
Habían tardado mucho ahí dentro y sus caras no expresaban nada, venían serias, sus ojos tampoco decían alguna pista y esto solo puso más nerviosa a la ángel quien antes intentaba leer en sus ojos algún rastro, esta ves no pudo hacer nada.
Se quedaron frente a ella y las puertas se cerraron con un estruendoso sonido al juntarse para no volver a abrirse en un buen tiempo más.
La chica no podía articular palabra y solo en sus ojos se podía notar la preocupación que tenía por saber la respuesta, los demás ángeles comenzaron a preguntarles que había sucedido adentro y fue entonces cuando la tensión se desató.
Pusieron sus manos en los hombros de la joven y la miraron a los ojos como diciéndole que no habían conseguido nada, a lo cual la joven se asustó.
Ya hablen! –gritó sin mas poder, el nerviosismo la estaba matando por dentro y si no le decían pronto iba a morir de la angustia-
Aome….-hubo una larga pausa en la que Aome presintió lo peor pero de pronto sus rostros se llenaron con una sonrisa- vas a volver n-n
Y entonces porqué diablos traían esas caras me estaba muriendo de la ansiedad! –les replicó la joven no sabiendo como expresar su felicidad-
Gomen esque queríamos asustarte n-nU –explicaron los dos haciéndose hacia atrás-
Ahhh! Ya van a ver!
Aome deja de gritar x-x –sus gritos eran muy fuertes y resonaban por todo el lugar, lo que menos querían era que eso pasara y los ángeles la habían provocado nuevamente como ya era costumbre-
Lo sentimos Aome pero alégrate volverás con Sesshoumaru n-n –dijo Mizuho-
Co…Con…Se…Sesshoumaru? –murmuraba sorprendida-
Así es…podrás estar con él en el día y luego irás con tu amado en la noche –explicó Ícaro al ver la cara de desconcierto de la joven-
No le pareció tan mala idea, después de todo molestar un poco a Sesshoumaru y volver a ver a Rin y a Jaken era también cosas que deseaba hacer.
Su vestido cambió por uno más lindo, igual de blanco que era corto por delante pero por detrás iba alargándose en una cola que tocaba el suelo, apegado a su cuerpo y sin nada para cubrir sus hombros era el conjunto perfecto para esa noche, su cabello estaba recogido de forma desordenada y con su maquillaje suave de siempre se veía hermosa.
Todos se lo dijeron y ella no pudo evitar sentirse alagada, los extrañaría a todos pues había creado una linda amistad con ellos, se despidió de cada uno con lágrimas y un fuerte abrazo mientras todos le deseaban la mejor suerte y que la irían a visitar si podían a lo cual ella no se negó y sonrió por última ves en aquel lugar.
Sus amigos la tomaron por los hombros y desaparecieron del lugar para llegar a uno que ella conocía muy bien, el olor a pasto, las flores, los árboles y el sonido del agua corriendo le daba a entender que se encontraba de nuevo junto a ese terco que por poco y no le hace caso a todo su esfuerzo cuando aún Saiko se encontraba por liberar, parecía como si hubiese sido hace mucho tiempo, como historia del pasado y ahora solo se podía percibir tranquilidad.
Los dos le dijeron que avanzara, y sus alas fueron desapareciendo poco a poco, le explicaron que podría seguirlos viendo cuando ellos fueran a verla pero, que ya sus poderes de ángel habían desaparecido, desde el momento que le dieron la oportunidad para decir si o no estos se suprimieron, pero que los de sacerdotisa aún los conservaba, lo cual le pareció bueno ya que podría ocuparlos de manera correcta.
Se despidió de ellos rogándole que se cuidaran y que fueran muy felices pues estaba claro que algo sentían el uno por el otro y después de todo jamás pudieron esconderlo, por lo menos no a ella, haciendo esa pequeña promesa y la de volver para verla junto con los demás, le desearon suerte y desaparecieron poco a poco dejando a Aome sola en la mitad del bosque.
Por suerte a estos terrenos no viene ningún monstruo…jejej veamos…por aquí –caminó lentamente observando aquellos parajes que tanto había extrañado en esa tierra de infinita y extraña hermosura, los árboles estaban llenos de frutas y las flores en el campo parecían muy bien cuidadas, estaba segura que en eso Rin tenía mucho que ver.
De seguro se encontraban en el lago aún, el sol estaba decayendo dando paso a unos matices rosas y morados, jugando con los colores a su gusto para darle el toque especial a la aparición de la joven que hace ya un mes no pisaba la tierra que ella conocía desde que nació. Una leve brisa comenzó a jugar con los cabellos que habían dejado caer sobre su rostro y le causaban cosquillas de pronto en su rostro a lo cual ella solo sonreía y cerraba sus ojos para que no la molestaran.
Caminó un buen rato así y de pronto al abrir los ojos se encontró con un hermoso paisaje, el cielo con sus matices, el agua con un leve reflejo del sol, prados verdes, flores, se quedó maravillada unos buenos segundos hasta que unos gritos la despertaron de su sueño trayéndola a la realidad.
Aome! –gritó la pequeña mientras se lanzaba a abrazarla frente a un asombrado Jaken y un Taiyuokai que se maldecía por tenerla de nuevo-
Pe…pero como esq o-ó –balbuceaba el sapo sin dar crédito a lo que veía aún-
Rin-chan! Pero que gusto me da de poder verte otra ves! –exclamaba la joven mientras sonreía sin dejar de abrazar a la pequeña que no dejaba de decirle lo linda que se veía-
Maldita sea que alguien me despierte de esta pesadilla –murmuraba el Taiyuokai rogando que nada de eso fuera verdad-
Esque tu jamás vas a cambiar eres una molestia! –le gritaba la joven mientras sonreía al ver la peculiar manera de saludar que tenía su amigo-
La molestia eres tu sigues igual de gritona….
"Esperen…aun tengo algo de tiempo antes de ir a la aldea…jejej Sesshoumaru sufrirás" –pensó la joven mientras comenzaba a reír y no dejaba de mirar al guapo Taiyuokai quien no comprendía que locura se le había metido ahora en su cabeza-
Que te pasa Aome? o.o –preguntó la joven niña que era apartada de manera suave del cuerpo de la miko quien se acercaba a Sesshoumaru poco a poco.
La mirada de la joven tenía un dejo de...insinuación?...que diablos pretendía ahora, fuera lo que fuera no dejaría que cometiera más locuras por fin se había librado de ella y no la quería de nuevo a su lado. Se levantó pero antes de que pudiera decirle o hacer algo la joven ya estaba frente a él mirándolo a los ojos.
No podía evitar ponerse mas nerviosa ella que él pues después de todo lo quería molestar para hacerlo pagar pero esos ojos….y esa mirada tan penetrante…solo deseaba darse vuelta y no hacer nada pero tenía que resistir…solo serían unos segundos solo unos segundos.
Jaken y Rin estaban totalmente desconcertados ante el extraño comportamiento de su amiga, no comprendían que era lo que pretendía.
"Deja de mirarme maldito baka T—T….tengo q hacerlo ahora.." –intentó darse ánimos-
Quieres decirme que diablos tienes en esa cabeza….
Sessho! nOn…. -gritó la joven de pronto y se lanzó a su cuello mientras lo abrazaba a lo cual todos quedaron sumamente sorprendidos, más él quien nunca la había tenido tan cerca.
Que…que diablos …haces! –le gritó quitándosela de encima de manera poco sutil, Aome solo sonrió y luego se levantó limpiando su traje- pero…q…diablos tienes en la …cabeza! Baka!
Nervioso?...-preguntó con una sonrisa amplia en su rostro a lo cual el solo quiso matarla pero algo en su interior de lo impedía- Me la debías por ser tan terco y por hacerme estar durante toda la batalla hace un mes con la duda si iban a matar a InuYasha o no! no sabes cuando te odie así que molestarte un poco es lo mínimo!
En realidad no sé porqué lo ayudé –desvió su mirada a lo cual todos comenzaron a reír- pero de que diablos se están riendo!
De ti tonto de quien mas si estás nervioso n-n –le explicó Aome-
Esa tarde Sesshoumaru tuvo que usar los límites más grandes que pudiera tener de paciencia con aquella mujer pero el que no se salvó del golpe fue Jaken y otra discusión más comenzó entre los dos porque Aome le replicaba que no lo golpeara y el le decía que no se metiera, Rin solo los veía divertida pues claramente Sesshoumaru era más alegre cuando la chica estaba a su lado, aunque no lo admitiera ella sabía que la estimaba como una amiga.
Cuando por fin se quedaron solos le pidió disculpas por haberse lanzado sobre él pero necesitaba reírse un poco y hacer mas ameno el ambiente porque con el se sentía algo de tensión, además quiso hacer reír a Jaken y a Rin y lo consiguió.
Se le quedó mirando un rato a lo cual ella no pudo evitar sonrojarse y este le dio un golpe, la chica le gritó e hizo todo lo que estuvo de su lado para que se arrepintiera pero solo logró divertirlo mas al verla siendo como era con un traje que parecía el de una princesa y que claramente no iba con su actitud, la chica no tuvo mas opción que volver a aceptar que le había ganado y le explicó la razón del porqué estaba allí.
La noche cayó en el Sengoku y nuestros amigos se preparaban para ir a una fiesta en la aldea por algo que se llamaba navidad, Aome les había explicado cuando se encontraba allí y les dio algo que se llamaba calendario.
Todos vestían sus mejores kimonos, y las estrellas formaban un camino para que los amantes disfrutaran caminando por él demostrando todo su amor, Inu Yasha recordó que esa vista era la que mas quería Aome y se la imaginó caminando por ellas vistiendo como un ángel con su hermosura y recogiendo estrellas para después usarlas en su cuerpo o en algún juego ingenioso.
Sus amigos golpearon su espalda y lo obligaron a salir del lugar. Sango vestía un kimono naranjas con flores que iban en distintos colores, apegado un poco a su cuerpo y el cabello tomado en una coleta, Miroku llevaba su traje de monje y Shipo su traje de kitzune, todos estaban disfrutando mucho pues los niños jugaban, había música y el ambiente era muy grato.
Por favor no vayas a hacer alguna idiotez –le pedía la joven quien iba en los brazos del Taiyuokai quien corría a grandes velocidades-
Tal ves podría molestar al patético de mi hermano
Ay Kami que piensas decir –la joven comenzó a rogar porque no fuera a decir alguna idiotez que hechara todos su planes abajo.
Ahora si se sentía nerviosa, podía escuchar la música de la aldea y sabía que en un par de segundos se encontraría con el hanyou que tanto amaba pero…que pasaba si el se había ido con Kikio, que ella aun supiera no estaba muerta, si la olvidó?...no eso jamás pasaría, porqué pensaba esas cosas ahora, si debía estar contenta, si..contenta….pero muy insegura….
El joven dio vuelta su cabeza sin poder creer el aroma que sentía mezclado con el de su hermano, Miroku también se detuvo unos momentos y se acercó al hanyou diciéndole si no estaba equivocado en la presencia que sentía a lo cual respondió asintiendo con su cabeza, pero como sería posible, el ya se estaba intentando hacer a la idea de que jamás volvería a ver a su amada Aome….pero la mayor duda de todas era que hacía con su hermano en caso que fuese ella.
De entre la espesura de los árboles dos ojos rojos se pudieron notar haciendo que los niños y algunas mujeres se asustaran y se pusieran tras Inu Yasha y su grupo, todo lo que sucedió después fue en un par de segundos.
Una pareja saliendo del lugar, la mujer en sus brazos el hanyou mirándola sin saber que hacer y su hermano sosteniéndola de la cintura.
Nadie creía lo que veía, Aome estaba de vuelta, con un gran traje, pero no se apartaba de Sesshoumaru y este tampoco la dejaba ir donde Inu Yasha.
Aome….-susurró el hanyou sin dar crédito a que la mujer que estaba frente a él era la misma mujer que el amaba-
Ella es mi mujer ahora –respondió su hermano dejando a todos congelados menos a Aome quien solo suspiró y cerró sus ojos comprendiendo por fin que había querido decir en el bosque con sus palabras el orgulloso Taiyuokai-
Bueno aquí se termina el penúltimo capi...les dejaré un adelanto del último
"- De verdad eres la mujer de él? –inquiría su mejor amiga-
- Oh Sesshoumeru ves en que lio me acabas de meter ? –le dijo la joven miko quitando la mano que él tenía puesta en su cintura-
Diablos quería hacer sufrir a mi hermano porque no me dejaste! –protestó cual niño que lo detienen antes de hacer una travesura a lo que Inu Yasha movió sus orejas y sus ojos se agrandaron mas de lo que los tenía.
Eso significaba que los dos no eran novios?...o sea que Aome seguía siendo Su Aome?...
La escena era divertida y pudo darse cuenta pues vio a todos reír. Al mirar hacia el lugar Aome le estaba reclamando al yuokai por todas las cosas hechas y el al mismo tiempo la reprochaba y le daba un golpe, un golpe que hace mucho tiempo no le daba y se lo tenía merecido según le decía a lo cual la chica le gritaba sabiendo que por su delicada audición lo dañaría en algo."
jejej no daré mas avance, solo les haré la pregunta, quieren un lemon en el último capi?...nunca he hecho uno pero supongo q si las lectoras quieren tendré q hacerlo no? XD...estaré esperando sus respuestas y sus reviews para saber q tal con el capi...los estaré esperando en el último capítulo de Ángel!...Matta ne!
