UN JOUR, UNE NUIT...
Nota aclaratoria: Los personajes que aparecen no son mios, simplemente me divierto con ellos.
CHAPITRE 1... ESPRITS (Pensamientos)
El publico estallo en aplausos y vitores, era verdaderamente magnifico escucharlo cantar, el agradecia como siempre: con la mano derecha a la altura del pecho y la otra dedicando una graciosa reverencia a sus espectadores.
El telon bajo dejandolo cubierto de las miradas de admiracion de las personas que ocupaban las butacas y palcos del auditorio, camino tambaleandose hasta su camerino sin escuchar las felicitaciones que le daban al pasar los trabajadores y agentes de seguridad, no estaba de humor para escucharlos y ya tenia bastantes problemas tratando de desatar el moño blanco de seda y encajes, eso por no decir el maquillaje que se escurria de su rostro derretido por el sudor de los nervios y los reflectores.
Llego a la habitacion, la puerta con su nombre escrito, lo miro y sonrio debilmente, si, estaba en la cuspide de su carrera, ¿que mas podria pedir?, entro a la alcoba y la cerro con un fuerte portazo, ya dentro se saco la chaquetilla de saten negro arrojandola sobre el biombo de madera de ebano con la alegoria a los cinco sentidos pintado en el; en una mesilla estaba una botella de vino blanco espumoso, fría y descorchada, se sento irreverentemente en una silla cercana, con las piernas laxas e ignorando la copa de cristal cortado que le habian dejado, tomo el vino a tragos directamente de la botella permitiendo que un fino hilo de la bebida escapara por la comisura de los labios limpiandolo con la manga rematada en encaje...
Tenia planes de embriagarse, sino era en el camerino, seria en la recepción de los Petrasizky, pero si algo era definitivo seria la juerga que se daria esa noche... el rostro comenzo a picarle, a regañadientes se levanto y fue directamente al tocador, y ahi, sentado, viendo su propio reflejo en el espejo oval se quito lentamente la gruesa capa de maquillaje blanco hasta que la palida piel quedo limpia de esa pasta horrible; desato su larga cabellera rubia dejando que cayera libre por sus hombros y espalda, suspiro apoyandose en el respaldo de la silla sin apartar la mirada del espejo, y lo que vio no le gusto mucho: tenia ojeras que hacian que el brillo de sus ojos celestes se perdiera considerablemente y se notaba cansado, pero un ruido lo hizo salir de su auto examen.
Llamaban a la puerta, detestaba que lo interrumpieran cuando pensaba, pero no le quedaban muchas opciones a la mano.
Adelante – Dijo con su voz gruesa, a pesar de que cuando cantaba era demasiado aguda.
Draugr... – Era un hombre que asomaba su cabeza calva a traves de una rendija de la puerta – Sera mejor que te des prisa, el auto te espera.
Si, si, ya voy – Contesto fastidiado, cuando el hombre desaparecio detras de la puerta, se levanto y con movimientos languidos y cansados se desnudo cambiando la ropa de la presentacion por un traje sport formal gris plomo; antes de salir dio un ultimo vistazo a su reflejo acomodando algunos mechones de cabello ondulado, cogio la botella de vino y dando un par de tragos largos salio del camerino.
****** Cuatro meses después ******
¿Cuanto cuesta esta? –
Tienes suerte – Contesto Youji a la chica que sostenia un hermoso rosal en flor dentro de una maceta – Esa tiene un descuento especial por el dia de hoy.
¿En verdad? – Pregunto ella con una mirada picara – Entonces debo sentirme feliz.
Youji miro a la chica, tenia el cabello muy corto y rojizo, unos pomulos hermosos, ojos brillantes y por encima de la ropa se distinguia una silueta bien definida con cintura angosta y un busto lleno.
Si, puedes sentirte feliz – Dijo el muchacho despues de su rapida inspeccion y haciendo uso de su experiencia, miro de manera seductora a la chica.
Youji ya va a empezar – Dijo Ken que se recargaba sobre el mango de la escoba, Omi estaba al lado suyo echando agua a las violetas africanas que acababan de llegar; desde donde estaban podian ver a su amigo que le susurraba algo al oido a la chica que respondia con risitas tontas.
Si, ya me di cuenta – Respondio Omi tratando de hacer caso omiso, pero por dentro se sentia arder al ver a Youji coqueteando con aquella niña tarada.
Ponte a trabajar Kudou – Era Aya que llevaba cargando cajas llenas de papel celofan, listones y tarjetas, al pasar junto a su compañero le dio un codazo "accidentalmente" en las costillas.
Bien – Dijo la chica enfurruñada – entonces a las ocho en mi casa, aqui esta la direccion – y discretamente bajo la mano hasta el pantalon de Youji metiendo una tarjeta perfumada justo detras del cierre.
Claro, ahi estare – Respondio el viendo como la chica salia de la floreria.
Mejor llamale y dile que no podras ir – Dijo Aya despreocupadamente mientras enredaba las cintas de colores en carretes para el mostrador.
Y... ¿puedo saber por que no podre ir? – Pregunto Youji poniendo los brazos en jarras.
Por que esperaba pasar una velada romantica en tu compañia – Contesto el pelirrojo dejando a un lado los listones y tijeras, Youji lo miro al parecer un poco desconcertado.
Ya tiene una semana que no nos han dado algun trabajo – Continuo Aya divirtiendose enormemente en secreto por la expresion en el rostro de Youji – hoy vendra Manx y quiero que todos esten aqui para que no haya dudas, ¿entendido?
Vaya, era eso, pense que por fin habias aceptado lo nuestro – Esta vez Youji le había dado la estocada a Aya, este, un tanto incomodo tomo las cajas vacias y salio por la puerta lateral.
El crepusculo caia lentamente comiendose los vestigios del dia, Ken se acerco a la puerta y bajo la cortina, ese dia debian de cerrar temprano y seguramente tendrian trabajo en la noche. Omi estaba detras del mostrador guardando las notas de remision y facturas y Youji junto a el lo miraba guardar esos papeles con aquellas manos delicadas... para ser de un asesino; le molestaba admitirlo, pero tenia ya bastante tiempo que no podia quitar la mirada de encima del chico, "es sorprendente lo que pueden hacer las hormonas" penso "el ya no es un niño".
Por la puerta lateral entro Manx acompañada de Aya y de dos hombres totalmente desconocidos ambos vestidos de negro.
+++++
Notas de la autora: Aqui esta el primer capitulo que espero haya sido de su agrado, es algo corto, pero tratare que los siguientes sean mas largos, pero, todo dependera de las opiniones que deseo que sean muchas; otra cosilla, en los siguientes capitulos habra yaoi asi que advertidos ya estan, que a mi los reclamos me entran por una oreja y me salen por la otra; y quiero pedir una disculpa por la ortografia, pero esta cosa no me acepta las correciones.
Vini, vidi, vinci...
Nota aclaratoria: Los personajes que aparecen no son mios, simplemente me divierto con ellos.
CHAPITRE 1... ESPRITS (Pensamientos)
El publico estallo en aplausos y vitores, era verdaderamente magnifico escucharlo cantar, el agradecia como siempre: con la mano derecha a la altura del pecho y la otra dedicando una graciosa reverencia a sus espectadores.
El telon bajo dejandolo cubierto de las miradas de admiracion de las personas que ocupaban las butacas y palcos del auditorio, camino tambaleandose hasta su camerino sin escuchar las felicitaciones que le daban al pasar los trabajadores y agentes de seguridad, no estaba de humor para escucharlos y ya tenia bastantes problemas tratando de desatar el moño blanco de seda y encajes, eso por no decir el maquillaje que se escurria de su rostro derretido por el sudor de los nervios y los reflectores.
Llego a la habitacion, la puerta con su nombre escrito, lo miro y sonrio debilmente, si, estaba en la cuspide de su carrera, ¿que mas podria pedir?, entro a la alcoba y la cerro con un fuerte portazo, ya dentro se saco la chaquetilla de saten negro arrojandola sobre el biombo de madera de ebano con la alegoria a los cinco sentidos pintado en el; en una mesilla estaba una botella de vino blanco espumoso, fría y descorchada, se sento irreverentemente en una silla cercana, con las piernas laxas e ignorando la copa de cristal cortado que le habian dejado, tomo el vino a tragos directamente de la botella permitiendo que un fino hilo de la bebida escapara por la comisura de los labios limpiandolo con la manga rematada en encaje...
Tenia planes de embriagarse, sino era en el camerino, seria en la recepción de los Petrasizky, pero si algo era definitivo seria la juerga que se daria esa noche... el rostro comenzo a picarle, a regañadientes se levanto y fue directamente al tocador, y ahi, sentado, viendo su propio reflejo en el espejo oval se quito lentamente la gruesa capa de maquillaje blanco hasta que la palida piel quedo limpia de esa pasta horrible; desato su larga cabellera rubia dejando que cayera libre por sus hombros y espalda, suspiro apoyandose en el respaldo de la silla sin apartar la mirada del espejo, y lo que vio no le gusto mucho: tenia ojeras que hacian que el brillo de sus ojos celestes se perdiera considerablemente y se notaba cansado, pero un ruido lo hizo salir de su auto examen.
Llamaban a la puerta, detestaba que lo interrumpieran cuando pensaba, pero no le quedaban muchas opciones a la mano.
Adelante – Dijo con su voz gruesa, a pesar de que cuando cantaba era demasiado aguda.
Draugr... – Era un hombre que asomaba su cabeza calva a traves de una rendija de la puerta – Sera mejor que te des prisa, el auto te espera.
Si, si, ya voy – Contesto fastidiado, cuando el hombre desaparecio detras de la puerta, se levanto y con movimientos languidos y cansados se desnudo cambiando la ropa de la presentacion por un traje sport formal gris plomo; antes de salir dio un ultimo vistazo a su reflejo acomodando algunos mechones de cabello ondulado, cogio la botella de vino y dando un par de tragos largos salio del camerino.
****** Cuatro meses después ******
¿Cuanto cuesta esta? –
Tienes suerte – Contesto Youji a la chica que sostenia un hermoso rosal en flor dentro de una maceta – Esa tiene un descuento especial por el dia de hoy.
¿En verdad? – Pregunto ella con una mirada picara – Entonces debo sentirme feliz.
Youji miro a la chica, tenia el cabello muy corto y rojizo, unos pomulos hermosos, ojos brillantes y por encima de la ropa se distinguia una silueta bien definida con cintura angosta y un busto lleno.
Si, puedes sentirte feliz – Dijo el muchacho despues de su rapida inspeccion y haciendo uso de su experiencia, miro de manera seductora a la chica.
Youji ya va a empezar – Dijo Ken que se recargaba sobre el mango de la escoba, Omi estaba al lado suyo echando agua a las violetas africanas que acababan de llegar; desde donde estaban podian ver a su amigo que le susurraba algo al oido a la chica que respondia con risitas tontas.
Si, ya me di cuenta – Respondio Omi tratando de hacer caso omiso, pero por dentro se sentia arder al ver a Youji coqueteando con aquella niña tarada.
Ponte a trabajar Kudou – Era Aya que llevaba cargando cajas llenas de papel celofan, listones y tarjetas, al pasar junto a su compañero le dio un codazo "accidentalmente" en las costillas.
Bien – Dijo la chica enfurruñada – entonces a las ocho en mi casa, aqui esta la direccion – y discretamente bajo la mano hasta el pantalon de Youji metiendo una tarjeta perfumada justo detras del cierre.
Claro, ahi estare – Respondio el viendo como la chica salia de la floreria.
Mejor llamale y dile que no podras ir – Dijo Aya despreocupadamente mientras enredaba las cintas de colores en carretes para el mostrador.
Y... ¿puedo saber por que no podre ir? – Pregunto Youji poniendo los brazos en jarras.
Por que esperaba pasar una velada romantica en tu compañia – Contesto el pelirrojo dejando a un lado los listones y tijeras, Youji lo miro al parecer un poco desconcertado.
Ya tiene una semana que no nos han dado algun trabajo – Continuo Aya divirtiendose enormemente en secreto por la expresion en el rostro de Youji – hoy vendra Manx y quiero que todos esten aqui para que no haya dudas, ¿entendido?
Vaya, era eso, pense que por fin habias aceptado lo nuestro – Esta vez Youji le había dado la estocada a Aya, este, un tanto incomodo tomo las cajas vacias y salio por la puerta lateral.
El crepusculo caia lentamente comiendose los vestigios del dia, Ken se acerco a la puerta y bajo la cortina, ese dia debian de cerrar temprano y seguramente tendrian trabajo en la noche. Omi estaba detras del mostrador guardando las notas de remision y facturas y Youji junto a el lo miraba guardar esos papeles con aquellas manos delicadas... para ser de un asesino; le molestaba admitirlo, pero tenia ya bastante tiempo que no podia quitar la mirada de encima del chico, "es sorprendente lo que pueden hacer las hormonas" penso "el ya no es un niño".
Por la puerta lateral entro Manx acompañada de Aya y de dos hombres totalmente desconocidos ambos vestidos de negro.
+++++
Notas de la autora: Aqui esta el primer capitulo que espero haya sido de su agrado, es algo corto, pero tratare que los siguientes sean mas largos, pero, todo dependera de las opiniones que deseo que sean muchas; otra cosilla, en los siguientes capitulos habra yaoi asi que advertidos ya estan, que a mi los reclamos me entran por una oreja y me salen por la otra; y quiero pedir una disculpa por la ortografia, pero esta cosa no me acepta las correciones.
Vini, vidi, vinci...