Notas de Autora: Rk no es mío y blablabla(no se para que escribo esto V.vU) y bueno al fic...

-Cap3:Yo vivo para quererte-

!Cof, cof, cof...! -tosía Misao echando lo que quedaba de café en su boca a la mesa- ¿Niños? –preguntó ella con miedo en los ojos...

Claro...si están casados deberán tenerlos y así tener descendencia...-dijo sonriente Okon sirviendo un poco de café a Kaoru quien estaba impasible a todo lo que ocurría...

De...demo...no...¿no es demasiado pronto todavía?...-preguntó Misao intranquila observando los bollitos en la mesa...

Misao...no dijiste que querías tener uno o dos o tres hijos con Kenshin? –preguntó Kaoru tranquilamente bebiendo un sorbo de su café y observando a Misao seriamente y por dentro riéndose maligna...

Emm...bueno...pues en verdad si...pero aún es pronto...-dijo Misao excusándose

Pues ayer no parecía que dijeras lo mismo...-se burló Kaoru cogiendo un bollito y mordiendo un trozo...

Ante esto a Misao se le cayó al suelo el tenedor...y permaneció con los ojos llenos de furia agarrando el mantel con fuerza...

Si pues parece que tú y Aoshi ya os habéis dado mucha prisa, ayer ya os oí haciéndolo y todo...-dijo ganando terreno...

Kaoru no pudo beber de su café por lo oído, así que alzó la vista y observó entrar a Kenshin todo sonriente acompañado de un Aoshi serio...

Konnichiwa! –saludó Kenshin sentándose de rodillas al lado de Misao y dándole un suave beso en los labios...

Hola...-dijo secamente Aoshi sentándose al lado de Kaoru enfrente de la otra pareja y besando delicadamente a su esposa...

Bueno Kenshin debo ir a hacer unas compras ¿vale amor? –preguntó Misao sonriente...

Claro...y yo como buen caballero y esposo que soy te voy a acompañar...¿ok?...-preguntó sonriente Kenshin...

Hai...-asintió Misao sonriente...

No Kenshin, ya la acompaño yo, ya que debo comprar una cosas para poder limpiar mis kodachis...-dijo Aoshi mirando fijamente a Misao como esperando un si por respuesta y nunca un no o si no se arrepentiría...

Bueno...esta bien...creo que Aoshi te va a proteger más que nadie así que...claro Aoshi te dejo al cargo de mi esposa...-sonrió como tonto Kenshin...aún no se daba cuenta del olor a mala espina que se calentaba en el lugar en esos momentos...

¡ Arg...Aoshi no! –suplicaba Misao, mientras Aoshi la tenía acorralada entre la pared de aquella casa abandonada en el bosque y él, con sus besos por su cuello manteniéndola sujeta de las manos...

Vas a ser mía...no aguanto que estés con otro...-decía con excitación y rabia el joven ninja...

Pues parece...que tu y...Kaoru no pensaban lo...mismo ayer...-intentaba decir Misao entre pequeños suspiros de amor...

Aoshi bajó su mano hasta su muslo y otra hasta su obi mientras lamía el lóbulo de su oreja...

Misao...Kaoru y yo lo hicimos por que es nuestro deber como marido y mujer...-explicó Aoshi...

Pu...pues no haberte casado con ella y haberte quedado con migo, demo como nunca demostraste nada...ahh! –gemía Misao al sentir la mano de Aoshi bajo su blusa a medio quitar...

Pero debía hacerlo Misao...y nunca me había dado cuenta de cuanto te amaba desde que estás con otro...te amo, te amo y te amo y no quiero verte con otro...-dijo besando los hombros finos y blancos de la ninja...

Pu...pues yo...amo...amo a Kenshin...-debía mentir si, pero para quitarse de encima a Aoshi, no debían hacer aquello...!estaban casados!

Aoshi se separó bruscamente de Misao y con sorpresa en sus ojos la miró a la cara sin poder creerlo...

Es cierto eso?...-preguntó Aoshi sin creer...

Si...y no quiero serle infiel...por que...por que me he dado cuenta de que tú eres un casanova que no vale la pena...si en realidad me amas...debes demostrarlo de verdad no intentando hacerme el amor a escondidas, por que mi virginidad va a acabar con Kenshin igual que la de Kaoru contigo...- dijo segura de si misma Misao abrochándose el obi de nuevo y colocándose un poco los mechones del pelo sueltos...

Entonces si que me amas...demo haces esto para jorobarme...-recapacitaba Aoshi mirando como Misao se acercaba a la puerta de salida para salir de esa casa en mitad del bosque...

Pues en cierto modo...sí...-sonrió sarcástica Misao abriendo la puerta y yéndose de allí...

Aoshi permaneció unos segundos inmóvil memorizando todo y haciéndose entender...entonces se dio cuenta de que debía volver a casa con Misao y no dejarla sola, así que rápidamente salió de allí y fue corriendo a llegar a Misao...

Kenshin paseaba por el lugar solitario...Todos los Oniwabanshus habían salido a comprar y Misao y Aoshi aún no habían vuelto...habrían ido a dar una vuelta...Demo Kaoru si que estaba...

Fue al cuarto de Aoshi y Kaoru, entonces oyó unos sollozos provenientes del cuarto...Abrió un poco la puerta y...se encontró a Kaoru llorando encima del futón...

Le dio pena...mucha pena...pobre Kaoru...todo por que se había casado con Aoshi...¿Aún le amaría?...no estaba seguro...demo...él a ella si...¿o en realidad no?...

¿ Kaoru-dono? –preguntó Kenshin entrando en el cuarto y viendo a Kaoru sentarse y limpiarse las lágrimas...

Si...¿qué quieres Kenshin?...-preguntó haciendose la fuerte y que no se notara que había llorado...

Pues...es que estaba paseando por aquí cuando oí unos sollozos...¿está usted bien?...-preguntó preocupado sentándose con ella en el futón...

Por favor Kenshin no me trates de usted...me haces sentir vieja...-sonrió tristemente Kaoru mirando los preciosos y lindos ojos violetas de su amor...

Esta bien Kaoru...dime...¿qué te ocurre para que llores de tal manera?...-volvió a preguntar más confiadamente el pelirrojo...

Pues que yo...yo...YO TE SIGO AMANDO KENSHIN –gritó Kaoru tirándose a los brazos del joven espadachín y comenzando a llorar como una loca...

Kenshin no sabía como responder, demo sus sentimientos por ella eran aún más fuertes que cualquier cosa en el mundo...así que, la agarró de los hombros y mirando sus bonitos zafiros llorosos, más serio que nunca se sinceró...

Yo también te amo Kaoru...más que a nada en este mundo...por eso...por eso no quiero permanecer lejos de tu lado...- dijo acercando a Kaoru a él y besándola con pasión...

Bueno Aoshi llegamos...-dijo Misao contenta de llegar al Aoiya y entrando seguidamente de Aoshi...

Si...ya estamos en casa...-susurró más para si mismo que para ella...

Misao corriendo fue directamente al cuarto de ella y de Kenshin para verle, quería verle, era su esposo y estaba deseosa de un beso de bienvenida...

Aoshi seguía lentamente a Misao a donde fuera, observándola fijamente y pensando en lo bella que era y en lo que había perdido por imbécil...

Misao observó que en su habitación no había nadie y le pareció extraño, a lo mejor había salido...no estaba segura...pero miraría...

Mientras tanto Misao ya llevaba medio Aoiya recorrido y no encontraba a Kenshin por ninguna parte, Aoshi ya se cansó de seguirla y decidió ir a su cuarto y el de Kaoru a descansar un poco...Y mientras iba para allá notó como Misao se le adelantaba y mientras corría paso al cuarto de él le decía...

Me falta tu cuarto Aoshi-sama...-dijo llegando a la puerta del susodicho y abriéndola se encontró nada más y nada menos que a Kenshin besando apasionadamente a Kaoru...

Aoshi que observó como Misao se mantenía como una estatua enfrente del cuarto con la puerta abierta, se acercó a su lado y miró lo que tanto la dejó sin habla...Y cuando observó la escena...se quedó sin palabras...no sabía que decir...

Kaoru y Kenshin dejaron de besarse y los dos rápidamente miraron a la puerta y vieron a Aoshi y Misao mirarles sin habla...

Kenshin tú...¿qué estás haciendo?...-preguntó Misao sin creer lo que veía...

Kenshin iba a responder, demo Misao salió corriendo de allí sin siquiera despedirse de nadie...

Bueno llegamos...-dijo un hombre con pelo pincho y respirando el aroma a aire nuevo...

Si amor...¿qué te parece Kyoto, hijo?...-preguntó una mujer de cabellos negros, piel muy blanca y labios carmín...

Chi mami...Kyoto ez mu bonito...me guzta...a ver zi volvemoz de nuevo...-dijo sonriente un pequeño niño de pelo negro y muy bien peinado con ojos café como su padre y pelo como su madre...

Si mi amor...volveremos otra vez también...-dijo su madre cogiendo en brazos a su pequeño hijo Aki de tres años...

Bueno ahora a visitar a los ninjas, ne Kitsune?...-preguntó divertido el hombre a su esposa "Kitsune"...

Si gallo...y no le enseñes malas palabras a tu hijo...-dijo la mujer con mirada fulminante a su esposo...

Continuará...

Notas de la Autora: Espero que este capítulo les haya gustado por que a mi si...bueno espero sus tantos y tantos reviews ansiosa, besitos...chaoooo