DUELO EN LA TORRE EIFFEL: SHERLOCK HOLMES Vs MAYOR MISTERY

Sherlock Holmes estaba preocupado por Conan, Kaito Kid se lo había llevado volando y los había perdido de vista. Aturarse e ir a buscarle sin saber siquiera donde estaba era tontería mientras que su enemigo lo estaba esperando en lo alto de la torre. Cuando llegó bajó del caballo, cogió el sable del guardia del desfile y se encaminó hacia el ascensor. El aparto subió rápidamente la enorme torre. Al llegar al último piso se aturó, ala vez que se iban abriendo las puertas Holmes iba distinguiendo como aparecía poco a poco la figura de Moriarty, esta vez vestido como su alter ego, el Mayor Mistery.

-Te estaba esperando Holmes- dijo de espaldas mientras contemplaba la ciudad

-¿Todavía jugando a los disfraces a tu edad? Vamos Moriarty ya no engañas a nadie con ese estúpido traje. Has perdido, en pocos minutos todo el mundo sabrá que el eminente catedrático James Moriarty no es más que un asesino y da gracias que no revelen el secreto de la organización.

-¿Cómo lo sabes?- pregunto Moriarty sorprendido.

-Conan es mas de lo que parece, ahora mismo le estara contando a Kaito Kid lo que hiciste con su padre. Exacto Moriarty, no pongas esa cara, Conan y yo lo sabemos todo y supongo que ahora Kid también, te has quedado solo- dijo lentamente- Entrégate ahora que estas a tiempo, eso o bien morir a manos de la organización, cuando sepan la que has armado no creo que te perdonen.

-¿Entregarme? Tu imaginación es bastante limitada Sherlock Holmes, ellos buscaran a James Moriarty, no al Mayor Mistery- dijo su enemigo con una carcajada burlona

-Ellos no, pero yo si, creo que la policía de todo el mundo estará encantada de saber quien se oculta tras ese casco. Ocultar una identidad no es tan fácil incluso para Conan.

-¿Cómo dices?- preguntó Moriarty muy rápido intrigado por las ultimas palabras de Holmes.

-Vamos Moriarty, ya le viste actuar. Conan tiene una mente brillante, cuando se encuentra con un crimen le cuesta mucho no hacer nada. Lo mismo te ocurrirá a ti, tarde o temprano cometerás un error que te costará claro- dijo Holmes intentando enmendar el lápsus que había tenido.

-¡Basta de palabrería inútil! No le vas a decir nada a nadie porque no saldrás vivo de esta torre. ¿No es un mal lugar para morir verdad?

-Si tanto te gusta…Quédatelo- replicó Holmes

El detective alzó su sable sin ni siquiera desenvainarlo y se dirigió hacia Morarte, éste ni siquiera se puso en guardia, simplemente sabia que el detective desenfundaría en el ultimo momento y le clavaría el sable en el corazón como en tantos otros duelos. Efectivamente Holmes siguió ese método pero el sable quedó bloqueado por algo que se interponía entre él y el corazón de su enemigo.

-Eres tan penosamente predecible...- dijo mientras metía la mano dentro del traje y sacaba una pequeña caja de metal- ¿Ves esto? Es un veneno creado por mi organización, lo llamamos APTX 4869, es un veneno que no deja ningún rastro en la autopsia. No te preocupes, lo usare contigo después de hacerte sufrir un poco.

Ahí estaba, delante de sus propias narices tenia el veneno que encogió a Shinichi Kudo, sería la única oportunidad que tenía de conseguirlo. La batalla contra Moriarty era inevitable, debía derrotarle si quería conseguir esa caja. Pero tanto mirarla hizo que Moriarty se percatara del interés de Holmes por el veneno.

-¿A que viene tanto interés Holmes?- el detective ni siquiera respondió- ya la has visto suficiente. Que empiece el duelo.

-¡En guardia!- dijeron a la vez.

Se miraron el uno al otro levantando lentamente los sables y en el momento en que Moriarty desenvainó empezó la pelea. Holmes dirigió un golpe directo contra su enemigo, pero éste lo esquivó apartándose, el detective en seguida se giró y bloqueó el ataque directo de Moriarty hacia su estomago. Los dos espadachines dieron un paso atrás y volvieron a cruzar sus espadas que con cada nuevo ataque rebotaban. Holmes la blandía muy rápidamente para despistarle pero Moriarty paró el ataque y dirigió el suyo contra el brazo derecho de Holmes que lo esquivó girando sobre si mismo para contraatacar con un golpe mortal en la espalda a Moriarty, pero éste se agachó antes de recibir el golpe horizontal y volvió a encarar su sable contra el de Holmes. El detective intentaba acorralarlo en una de las esquinas pero su enemigo conocía esa estrategia y se las ingeniaba para esquivar los ataques de Holmes y tener espació suficiente para atacar. Entonces Holmes dirigió el sablazo contra las piernas de Moriarty, él lo esquivó de un salto pero justo en el momento en que aún estaba en el aire el detective le dio una fuerte patada en el estómago. Moriarty consiguió caer de pies en el suelo pero había perdido el equilibrio y la concentración. Sherlock Holmes aprovechó la ocasión para lanzarle una lluvia de estocadas que su enemigo apenas era capaz de parar, pero Holmes consiguió su objetivo, acorralarlo. Moriarty sujetaba el sable de forma vertical mientras que Holmes lo hacia en diagonal. El detective hizo ver la dirección en la que dirigiría el próximo ataque, pero rápidamente dirigió el ataque en dirección contraria, el golpe fue tan fuerte que guío el sable de Moriarty al suelo. Holmes, aprovechando que su enemigo tenia la cara descubierta le propinó un puñetazo tan fuerte que el impacto hizo que Moriarty cayera de la torre, o eso era lo que el detective creía, antes de poder reaccionar un brazo agarró el suyo y lo empujó también hacia el vacío. Afortunadamente el detective tenía buenos reflejos y pudo agarrarse a la misma biga que había salvado a Moriarty. Estaban frente a frente con un brazo apuntándose en la biga y el otro sujetando la espada. Moriarty no se rendía, intentó atacar a Holmes, que interpuso el sable para evitar al ataque y luego fue el detective quien se puso a la ofensiva.

-Esto tiene que acabar ya- dijo Moriarty

-Resolvámoslo arriba- contestó Holmes

Los dos se concedieron una tregua y escalaron unos pocos metros hasta llegar al lugar donde había empezado la pelea. De nuevo en la cima cada uno se puso en guardia y dirigieron una envestida contra e contrario, en el ultimo momento Moriarty lanzo un tajo al cuello de Holmes pero este lo esquivo rodando por el suelo y al levantarse de repente y sin darle tiempo a Moriarty para defenderse Holmes alzó el sable en diagonal provocando un profundo corte en el estomago de su enemigo. Moriarty cayó al suelo sangrando abundantemente.

-Ahora me darás esa caja y luego irás a la cárcel- dijo amenazándole con el sable

-¿Quieres esto?- dijo enseñando la caja con el veneno- ¡Pues ve a buscarla!

Reuniendo las pocas fuerzas que tenía lanzó la caja al aire con la intención de que cayera por la torre. Holmes corrió rápidamente hacia la cornisa y aunque casi cae por ella logró coger la caja justo a tiempo. Por desgracia Moriarty aprovechó ese momento para huir por el ascensor. Holmes no logró detenerlo y vio como su enemigo descendía rápidamente. En el suelo Moriarty había dejado una nota.

Bonito duelo Holmes. Tenemos que repetirlo más a menudo aunque no creo que eso sea posible. Por si acaso perdía escribí esta nota para decirte que aproveches estos últimos cinco minutos de gloria porqué es el tiempo que le queda a la bomba que he colocado para que explote. Y no te tomes la libertad de tomar el ascensor, cuando este abajo pienso bloquearlo. Nos vemos en el infierno Sherlock Holmes

Mayor Mistery.