¡Hola!

Se que he tardado mucho en actualizar el fic, pero estaba muy bloqueada (y lo sigo estando jejejeje) Este ff me resulta muy difícil de escribir porque aún no tengo muy claro qué es lo que va a ocurrir. Bueno, en realidad si que tengo pensado lo que va a pasar, pero tal vez la historia sea más corta de lo que esperaba (aparte de lo que tengo pensado no se me ocurren más cosas). Además se me borraron todos mis ff de mi cd donde los guardo (sí, un horror total T.T) y he tenido que reescribir este capítulo casi entero porque perdí lo que había escrito.

Gracias a todos por seguir mi ff, y me alegro que os esté gustando. Espero que os guste este capítulo. No tenía pensado incluir nada de lo que ocurría fuera de la isla, pero me propusieron que escribiera algo de lo que pasa en el ministerio después de la noticia y no me pareció mala idea.

Espero vuestras opiniones ¡y dejadme reviews!

5 PRESIONES EXTERNAS

En esos momentos, una extensa discusión se mantenía en el Ministerio de Magia. Demasiadas coincidencias en un mismo día auguraban una nueva etapa de terror para el mundo mágico.

El día anterior, todo estaba preparado en Hogwarts para la llegada de los estudiantes. En Hogsmeade, Hagrid esperaba a los muchachos para realizar la tradicional travesía por el lago, acompañando a los alumnos de primero, y numerosos carros llevados por threstrals aguardaban a sus ocupantes. Pero algo raro pasaba… el tren no llegaba, y no habían sido avisados de que hubiera ocurrido algún contratiempo mecánico. Después de casi una hora de retraso, una lechuza del colegio llegó a la estación de Hogsmeade con la noticia de que los alumnos habían sido secuestrados. Hagrid no podía creérselo, aunque la evidente ausencia del tren no dejaba lugar a dudas. Acudió a Hogwarts en busca de una explicación para semejante horror, y fue recibido por una alterada profesora McGonagall. Dumbledore no estaba, había sido requerida su presencia de inmediato en el Ministerio de Magia.

Poco después de que el tren desapareciera dentro del túnel, algo rompió la seguridad del Ministerio.

Cornelius Fudge se encontraba en su despacho cuando, súbitamente, una pequeña nube de humo se formó en el centro de la habitación. Sólo aquel hecho ya hizo saltar la alarma de que algo raro pasaba. Desde que ocurrió la batalla del Departamento de Misterios, el Ministerio había sido reforzado en seguridad mágica, de manera que nada o nadie pudiera aparecerse en el interior del edificio. Y ahora… una nube de humo se formaba delante de sus propios ojos, en el despacho del Ministro, un lugar especialmente reforzado con hechizos anti-intrusiones.

De la nube de humo surgió un aparentemente inocente pergamino, que cayó al suelo planeando despacio. Estaba firmado por la Marca Tenebrosa, y en él se desvelaba el reciente secuestro de los chicos de Hogwarts, y su macabro propósito.

La relación entre Fudge y Dumbledore siempre había sido tensa, y la tirantez era aún más evidente después de que la aparición de Voldemort a principios de verano, dejara la imagen de Fudge con la reputación por los suelos. Pero ahora no tenía más remedio que acudir a Dumbledore, eran sus alumnos los que habían sido tomados como rehenes, eran sus alumnos los que iban a ser obligados a matarse entre ellos si no satisfacían las peticiones de Voldemort y sus mortífagos.

De esta manera, Fudge avisó a Dumbledore, y también a los miembros destacados del Ministerio así como a los aurores. Se avecinaba una difícil reunión.

Albus Dumbledore estaba tranquilamente en su despacho de Hogwarts. Un nuevo curso iba a comenzar, y el hombre se sentía especialmente contento por aquello, siempre le había gustado el alegre bullicio de los estudiantes que llenaba el castillo. Fue entonces cuando vio que los retratos de su despacho comenzaban a murmurar entre sí, nerviosos y desapareciendo de sus cuadros, seguramente para ir a avisar de algo en algún otro lugar donde hubiera otro de sus retratos. No tuvo tiempo de preguntar, pues en ese momento unas llamas aparecían en la chimenea de la sala, y dentro de ellas, la poco estimada presencia de la cabeza de Fudge.

'Albus, ha ocurrido algo terrible, tienes que venir al Ministerio inmediatamente. Vamos a convocar una reunión urgente del Wizengamot.' dijo Fudge con voz alterada.

'¿Qué ocurre, Cornelius?' dijo Dumbledore sabiendo que el hecho de que Fudge acudiera a él en busca de ayuda, no significaba nada bueno. Tenía que ser algo realmente grave como para que Fudge dejara a un lado las rencillas que había entre ellos.

'El Expreso de Hogwarts ha sido secuestrado. Los mortífagos tienen a los muchachos. ¡Van a matarlos!' dijo Fudge despareciendo entre un pequeño estallido de llamas.

Aquello era demasiado horrible para ser cierto. Apenas si tuvo tiempo de poner al corriente a Minerva McGonagall y dejarla al cargo de Hogwarts, antes de dirigirse hacia al Ministerio.
Cuando llegó, ya estaban reunidos bastantes miembros del Wizengamot además de algunos de los aurores.

'La situación es crítica.' comenzó Fudge y sacó el pergamino como prueba. 'Los mortífagos y el Señor Tenebroso tienen en su poder a los muchachos que iban camino a Hogwarts. Dicen que si no liberamos a los mortífagos capturados en Azkaban y no nos rendimos ante ellos y devolvemos el poder al Lord Oscuro, los chicos irán muriendo a razón de mínimo diez bajas por día… a manos de sus propios compañeros.'

Después de oír el resumen, se levantó un continuo murmullo en la sala.

'Ya sabemos que han estado actuando los últimos meses, que han matado a familias enteras, que ahora los dementores están de su parte… y hoy han roto la seguridad del Ministerio al hacer que el pergamino apareciera en mi despacho. Todo apunta a que se han vuelto mucho más poderosos de lo que pensábamos.' continuó Fudge. 'Así que ahora estamos reunidos para decidir qué hacer.'

'Reuniremos a todos los aurores y los enviaremos a rescatar a los chicos.' dijo el jefe del Departamento de seguridad mágica.

'Eso no es posible. Según el pergamino los chicos se encuentran en un lugar protegido con un hechizo ilocalizador.' explicó Fudge.

Se hizo un silencio de derrota, no habría forma de que los encontraran.

'Creo que los padres de los estudiantes deberían ser avisados.' dijo Dumbledore.

'Sí, claro, les avisaremos.' dijo Fudge.

'Si no podemos localizar el paradero de los chicos, podríamos intentar localizar a los mortífagos.' dijo uno de los presentes.

'Eso tampoco es posible. Voldemort siempre fue inencontrable, y después de lo ocurrido en el Departamento de Misterios, también el resto de sus mortífagos.' dijo Dumbledore.

'Pero tenemos a los de Azkaban, ellos fueron arrestados justo aquel día. Si los liberamos, no sólo cumpliríamos con uno de sus objetivos sino que además nos podrían servir para averiguar donde están los demás.' propuso Shacklebot.

La reacción en general fue favorable a la propuesta. Dentro de las posibilidades, el liberar a los mortifagos presos resultaba la solución menos peligrosa, mucho menos peligrosa que el devolver el poder a Voldemort, más aún si les servían para conducirles al paradero del resto de los mortífagos.

'Se les podría interrogar por si supieran algo.' dijo Fudge.

'Dudo que sepan algo, han estado incomunicados en Azkaban, y en el caso de que supieran algo ¿crees que lo dirían? Esa gente es capaz de dar su vida por Él.' dijo otro de los asistentes.

'Nadie se resiste a un buen veritaserum.' dijo Shacklebot. 'Y no perdemos nada con intentarlo.'

'Está bien. ¿Alguien se opone al interrogatorio y liberación de los mortífagos de Azkaban?' preguntó Fudge.

Nadie parecía estar en desacuerdo, de momento, no había otra alternativa.

'Por cierto ¿Dónde está Tonks?' preguntó Dumbledore a Shacklebot.

'Estaba en una misión, tal vez no se haya enterado.'contestó Shackelbot.

'Dumbledore ¿qué haces que no avisas a "tu" Orden del Fénix?' preguntó irónicamente Fudge.

'Sí, claro, ahora mismo.' dijo Dumbledore llevándose una mano a su antebrazo derecho.
'Te veo… no sé… demasiado tranquilo ¿me equivoco, Albus?' dijo Fudge. '¿No pensarás que de nuevo el "héroe" de Potter nos va a salvar de todo?'

'No menosprecies a Harry. Y, por supuesto que confío en él. Él sabe algo que Voldemort no sabe y podría ser muy útil.' dijo Dumbledore con tono tranquilo. 'Pero como es la vida de todos los chicos, y no sólo la de Harry, pienso que debemos hacer algo.'

Fudge se quedó mirando a Dumbledore como pensando "no se qué ve de especial en ese niño." Pero lo que Fudge no sabía era que Harry era el único con poder para vencer al Señor Tenebroso.

'Empieza por llamar a "tu" Orden del Fénix.' repitió Fudge.

'Ya lo he hecho.' dijo Dumbledore.

Fudge lo miró con escepticismo. No habían dejado de hablar desde que propuso que llamara a la Orden del Fénix y no había visto en qué momento lo había hecho. Lo cierto era que, la Orden del Fénix había desarrollado un medio de comunicación muy parecido al de los mortífagos y Voldemort, y ahora todos llevaban la Marca del Fénix en su antebrazo derecho. Todos menos uno. Severus Snape era el único que no la llevaba, debido al peligro que podía suponer para su condición de espía entre los mortífagos.

Varios aurores fueron enviados a Azkaban a interrogar y liberar a los presos. Y así fue pasando el resto de la noche, debatiendo sobre qué hacer. Poco a poco fueron llegando el resto de los aurores y miembros de la Orden del Fénix, que fueron puestos al corriente de la situación. Entonces llegó Minerva McGonagall, muy alterada y preocupada, haciendo un corro con sus compañeros de la Orden, para evitar los oídos curiosos de Fudge y otros miembros del Ministerio que no debían saber algunos planes secretos de la Orden.

'¿Qué ocurre, Minerva?' dijo Dumbledore al ver a la mujer tan nerviosa.

'Albus… No está. Le he buscado por todo el castillo…y no está ¡Snape no está!' dijo McGonagall con un halo de desconfianza en la voz.

Sin duda, Snape podía ser el miembro más escurridizo de la Orden, no estaba vinculado por la Marca del Fénix y había sido hecho inencontrable por su posición de espía entre los mortífagos, como uno más. Y no estaba en Hogwarts…

'¡No entiendo como confiaste en él¡No se puede confiar en un Slytherin y menos en uno como él!' amenazó Lupin agarrando a Dumbledore de la túnica.

El hombre lobo estaba muy afectado después de la muerte de Sirius, todos sus amigos de la infancia habían muerto, o traicionado, como el caso de Peter. Y ahora, su único consuelo, Harry, estaba encerrado en no se qué sitio amenazado de muerte.

Los Weasleys, ya bastante traumatizados por la noticia de la suerte que corrían sus hijos pequeños, tomaron la noticia de la desaparición de Snape también como un mal augurio.

'Siempre le di un voto de confianza, pero… ¿no es esto muy sospechoso?' dijo McGonagall.

'Yo confío en Snape.' murmuró Dumbledore ante la mirada furiosa del resto de la Orden.

Obviamente, ninguno entendía por qué Dumbledore no aceptaba ver que Snape les había traicionado. Su papel en la Orden era informar de los planes de Voldemort, y estaban seguros de que algo como lo que había ocurrido, no era algo que se pudiera hacer improvisadamente, por lo tanto, Snape debía saber algo y no se lo había dicho. Si no ¿por qué razón estaba desaparecido precisamente ahora?

La noche había pasado lentamente. Y entonces, una nueva nube de humo apareció en la sala. Todos se acercaron a ver qué noticia traía. En el pergamino había una lista con diez nombres. La lista con las diez primeras bajas. Supieron que aquello iba en serio. Entonces, los aurores que habían ido a Azkaban, volvieron. Los que estaban en la sala se giraron esperando encontrar alguna declaración de los presos.

'Se han escapado. Cuando llegamos no estaban. ¡No queda ni un maldito mortífago en Azkaban!'

Entretanto, en otro lugar marcado como inencontrable, se respiraba cierto aire de victoria. En una gran sala se encontraban Voldemort y sus mortífagos, como si asistieran a una macabra fiesta. Voldemort, sentado en sillón en la penumbra de la habitación, observaba y esperaba el desenlace final con la seguridad de quien ha ganado una batalla. Mientras, los demás se entretenían como podían, y desde luego, tenían con lo que divertirse. Casi ocupando una de las paredes completamente, un enorme holograma a modo de pantalla mostraba una vista aérea de la isla, en la cual se distinguían con una luz verde parpadeante aquellos nombres que seguían con vida y su ubicación, y con luz roja y fija, la situación de los cadáveres. La reunión se desarrollaba de forma distendida aunque los asistentes, en la situación relajada estaban desprovistos de sus máscaras, seguían aún con sus túnicas negras, por si fuera necesaria una actuación de urgencia.

La voz de un hombre sollozante despertó a Voldemort de sus sueños de grandeza.

'Señor¿es necesario continuar con esto?' dijo la voz quebrada de una enorme figura arrodillada a sus pies.

'Por supuesto, Crabbe.'

'¡Pero mi hijo ha muerto!' dijo el hombre elevando su mirada hacia su Señor.

'Por una buena causa' dijo Voldemort deslizando su mano dentro del bolsillo de su túnica y agarrando la varita. '¿Acaso olvidaste que me juraste lealtad hasta el día de tu muerte?'

'Fui yo quien juró lealtad, no él, y ahora él está muerto mientras que yo…'

'Crucio' susurró con voz melosa a la vez que se levantaba del sillón.

Crabbe comenzó a retorcerse de dolor en el suelo. Voldemort odiaba aquellos síntomas de debilidad. Las vidas de sus mortífagos eran de su propiedad, ellos debían dar voluntariamente su vida o la de cualquiera si eso significaba darle poder. Alguien que separa su vida privada de sus obligaciones no era digno de servirle como él se merecía.

Se oyeron algunas risas entre los gritos de dolor del hombre. Sin duda, había algunos de sus siervos que comprendían lo que significaba ser mortífago, pero nunca estaba de más una demostración pública de quien era el que tenía el poder allí. Cuando Voldemort pasó de largo de Crabbe, dejó de apuntarle con la varita, el hombre permaneció un rato encogido en el suelo.

'Eso pasa por tener hijos' dijo una voz alegre como si aún siguiera riendo. 'No dan más que problemas.'

'¿Qué sabrás tú?' dijo Crabbe.

'Por eso mismo, yo decidí no cargar con ese lastre. Soy demasiado buena para conformarme con tener hijos a quienes cuidar. Me merecía algo mejor' dijo Bellatrix mirando de reojo a Voldemort, que ahora estaba a su lado. 'Deberías sentirte orgulloso de que tu hijo haya muerto por algo tan noble.'

Crabbe miró a Bellatrix con incomprensión. Siempre había sido bastante radical en ese sentido, pero ahora empezaba a confirmar que Azkaban le había afectado más de lo que creía.

'Nunca fuiste un buen mortífago, Crabbe' dijo Voldemort, y Crabbe abrió mucho los ojos esperando un nuevo Cruciatus o incluso un Avada Kedavra. 'Pero te estoy dando otra oportunidad, considérate afortunado. Deberías tomar ejemplo de los alumnos aventajados.'

Voldemort dio una palmada en el hombro a Bellatrix y la mujer se sonrojó por el halago. Entonces, un débil resplandor iluminó la sala. Los fugados de Azkaban acababan de llegar. Antes de que diera tiempo a advertir el desmejorado estado en que se encontraban o incluso de ponerles al tanto de los últimos acontecimientos, Voldemort les puso el hechizo ilocalizador. Después de eso, fueron informados de lo que estaba ocurriendo. La noticia fue acogida con gran expectación y excitación.

'Te sorprendería saber lo bien que lo está haciendo mi sobrino' dijo Bellatrix a Lucius.

'Nunca he dudado de que actuaría bien cuando llegara el momento, después de todo es un Malfoy' dijo Lucius con ojos orgullosos. La noticia de que Draco se había erigido líder de los Slytherins y estaba sembrando el terror entre los demás, era motivo para estar orgulloso.

'Y un Black, no lo olvides' dijo Bellatrix, acercándose con paso seductor a Rodolphus.

Pasaron horas y llegó un nuevo día. La lista de bajas había sido remitida al ministerio hacía mucho rato y faltaba muy poco para enviar la nueva lista. El ministerio estaba reaccionando demasiado despacio. El hecho de haber liberado a los mortífagos de Azkaban en ese preciso momento sólo había sido una demostración de fuerza. Todo era más divertido si sabían las nuevas fuerzas que poseía el bando de Voldemort.

Resultaba muy aburrido esperar una reacción por parte del bando contrario. Los mortífagos pasaban el rato charlando con copas de vino en las manos, otros incluso hacían apuestas sobre quienes serían los próximos en morir, pero la visión de la muerte y los meses de inactividad de los recién llegados, despertaban en ellos el deseo de acción. Era un juego muy divertido como para no querer estar allí.

'¿Por qué no vamos a la isla?' comentó Bellatrix por fin.

La sugerencia de la mujer fue secundada por exclamaciones de apoyo.

'Vaya…así que mis mortífagos quieren diversión' dijo Voldemort con una sonrisa divertida y maliciosa.

'Me desespera ver cómo tratan de mantenerse con vida' dijo Bellatrix sonriendo también 'Además estoy segura de que hay un par de ellos que estarían muy contentos de verme.'

Voldemort pensó en la posibilidad que proponía Bellatrix.

'Está bien, supongo que no estaría mal una recompensa' dijo Voldemort a lo que siguieron exclamaciones de triunfo. 'Pero nada de matarlos, romperíamos nuestras propias reglas además de que el juego perdería diversión. Tenéis una hora.'

Todos sabían que no podían desobedecer las órdenes del Señor Tenebroso, sólo tenían que recordar lo que le había ocurrido momentos antes a Crabbe. Aunque la isla estuviera protegida por un hechizo que la hacía impenetrable, ese hechizo sí podía ser roto por quien lo había conjurado, en ese caso Voldemort, o quienes él decidiera que podían entrar. De ese modo, los mortífagos se reunieron en el centro de la sala, con ojos brillantes de excitación, y fueron enviados a la isla.

Entre ellos, se encontraba Severus Snape, quien se había mantenido al margen durante todo ese tiempo, pero alerta y reuniendo toda la información que pudiera conseguir. Él no tenía conocimiento de lo que iba a ocurrir hasta que la Marca le quemó en el antebrazo como llamada. El plan había sido trazado por el propio Voldemort y un par de mortífagos más, era demasiado arriesgado que muchas personas lo supieran, además de que sería sospechoso si algunos padres Slytherins se negaban a enviar a sus hijos para el nuevo curso. Por supuesto, dentro de esas personas se incluía Snape. Él Señor Tenebroso sabía que era un especialista en Oclumancia, pero no podía poner en juego sus planes haciendo que alguien cercano a Dumbledore tuviera información comprometida.

Cuando llegaron a la isla, Snape supo que era el único que podía hacer algo por salvar a los alumnos.

Jejejeje ¡no podía hacer a Snape malo! (mmmm aunque me habría gustado ;-P) Es que la autora tiene sus debilidades jejeje. Sólo tienen una hora los mortífagos, a ver qué les da tiempo a hacer jijijiji.

Sorry, no podía evitar darle un papel destacado a mi querida Bellatrix ¡es mi ídola!

Y realmente me imaginaba a los mortífagos viendo la pantalla mientras comían palomitas y cerveza y hacían apuestas, pero tal y como yo me lo imaginaba habría parecido cómico jejejeje, así que he puesto lo que pensaba pero de forma más seria.

Respondo a los reviews:

Ana María: Ya se verá que ocurre con los chicos, es que como este capítulo se aparta un poco de la línea…Pero como imaginarás ¡Snape puede ser el gran héroe! Seguro que te gustaría ¿no? Jejeje. Para el próximo habrán más muertes, y seguro que alguna te gustará ;-D. Muchos Besitos.

Marin Black: Jajajaja si¡a Marietta la hice explotar! Mmm creo que eso sería demasiado light para Cho….;-D Espero que lo que tenga preparado para ella no os resulte demasiado cruel ¡seguro que no! A mi también me dio penita matar a Lavender and company, pero si no mataba a gente conocida pues la gente se me aburre jijijiji. Muchos besitos.

Magu: Ay, no pensaba abandonar el ff, pero es que me resulta complicado de escribir además de que se me borró lo que tenía escrito, pero yo soy constante y no me gusta dejar sin acabar lo que empiezo. Me alegra que te guste como escribo. Besitos.

Anthony Golds: ¿no quieres que me cargue a Harry? Jejejeje supongo que si me lo cargo me mataréis entre todos. Por supuesto que habrá un Malfoy vs Potter. Muchas gracias por tus comentarios, sorry si me equivoqué, pero se agradece que me digas lo que está mal. Lo que dices de Malfoy y el Avada… pues si, los del curso de Harry dieron la teoría, porque Moody dio el tema pero no creo que los demás profesores lo hicieran porque es un tema prohibido por el ministerio. Pero tienes razón, los que ese año estaban con Harry y Malfoy en 4º dieron la teoría. Malfoy es el único que sabe hacer la práctica, pero los demás no saben que sólo hay que quererlo para poder hacerlo (no escucharon a super Bellatrix jejejeje) pero lo tomaré en cuenta ;-D. Sobre lo del encantamiento petrificador… tienes toda la razón, no me di cuenta de eso, pero bueno, es que ahora se me hace un lío cambiar todo lo que tenía pensado para los petrificados. SORRY! Muchos besitos y espero que lo sigas leyendo ;-D

Dimebonitareina: me alegra que te gustara la reacción de Hermione, ella será muy útil para sus compañeros, por algo es la más lista…y si, al menos ella tiene la cabeza para pensar fríamente y no volverse loca como las mentes débiles. Puede que aprendan a usar el Avada, pero de momento sólo sabe Malfoy, así que serían muertes manuales. Espero que te haya gustado este capítulo, aunque se aleje de la línea del resto. Besitos

Agus Lupin: Me alegro que te haya gustado! A ver si lees este también. Oye, por casualidad…¿tu también tienes el nick de Agus y Moony? Es que me dejaron un rewiew en mi ff de Bellatrix/Sirius pidiéndome permiso para poner el link de ese ff en una pagina, y ya les contesté. Sorry si no eres tú. Muchos besitos.

Joanne Distte: Jijijiji a nadie le dio pena Marietta ¡tu verás cuando le toque a Cho! Haremos fiesta y todo! Jajaja. Espero que este capítulo te haya gustado, con nuestra querida Bellatrix ¡no pude evitarlo! Pero tengo que contenerme de darle más protagonismo porque no es un ff de ella…(T.T ¡yo quiero una Bella matando niños en la isla!) ¿Adivinas a quien buscará ella? Seguro que si. Bueno, cuando te vea por el msn te tengo que pedir unos ff que se me han borrado todos los que tenía en mi cd T.T ¡Muchos besitos! Y para mi es todo un placer leer tus ff ;-D

Pilika last hope: ¡Órale! Jejeje. ¿Mortalmente bueno? Supongo que ese adjetivo le viene perfecto jejeje. Espero que leas este tb y que te guste, aunque haya dejado a los chicos un poco de lado. Pero próximamente habrá más muertes. ¡Besitos!

Harly Grace: Apuntado tu voto para Cho, lleva muuuuuchos votos jijijiji. Si has leído este capítulo sabrás por qué he tardado tanto en actualizar. Sorry. Y no me asusto de que te guste eso del ff, de eso se trata…;-D ¡Besitos!