Misao13: perdonen la inmensa tardanza (bueno... si es que todavía se acuerdan de este fic). Anyway, la causa de mi demora fue mi querida vagancia. Sip, mi vagancia tengo que admitirlo, a mí, me gusta escribir, pero soy muy vaga.

Yary: ven, Misao13 no tiene muchos enemigos.

Misao13: ¿y por qué dices eso?

Yary: es que no los necesitas, digo, si contigo misma es mas que suficiente.

(sonrisa malvada)

Misao13: muchas gracias, Yary, no eres de mucha ayuda ¿sabes?

Yary: así soy y así me quieren, ¿verdad Jc?

Jc: (nervioso por que Yary y Misao13 lo miran raro) umm... este... mejor vamos con el capitulo ¿no creen?

Lectores: Sí, por favor.

Cap. 7 ¿Quien diría?

Yary: vamos a arreglar esto, ¿si?

Jc: sí, vamos.

Akane se encontraba en los columpios del parque llorando y repitiéndose lo tonta que era por haberle creído a Ranma. Era un atardecer hermoso, pero ella estaba demasiado triste como para notarlo.

Mientras tanto Ranma caminaba cerca de allí. Rompiéndose la cabeza por que no sabía como explicarle a Akane que lo que vio hace un rato, no fue culpa de él.

Ranma: (frustrado) ¿por qué tenía que pasar esto? ¿Por qué? Si ya estábamos bien. – decía tratando de contener las lagrimas.

Jc Y Yary los miraban la escena y recordaban su propia historia.

Yary: (con varias lagrimas en los ojos) Jc, no puedo soportar esto, no quiero que ellos terminen como nosotros.

Jc: No te preocupes, todo va a salir bien. Ya verás...

Cuando iba cerca de los columpios, Ranma ve que Akane esta llorando. Algo que le parte el alma, pues era lo menos que él deseaba en el mundo.

Ranma: Akane...

Akane lo mira con ira.

Akane: ¡DEJAME EN PAZ!

Ranma: Akane, déjame explicarte. Nada de eso fue mi culpa, no sé ni me interesa, que fue lo que quiso hacer shampoo.

Akane: ay, si. ¿y tu crees que yo me voy a tragar ese cuento otra vez?

Hazme un favor, ¡MUERETE!

Y empieza a correr en dirección a la calle.

Ranma: Akane, ¡AKANE!

Akane estaba en el medio de la calle y no se había dado cuenta de que venía un camión en su dirección.

Ranma: ¡AKENE CUIDADO!

Ranma corrió lo más rápido que pudo para sacar del medio a Akane. Yary y Jc al ver esto intentaron enviar toda la energía positiva que les fuera posible para ayudar, pues no podían intervenir directamente esta vez.

Yary: ¡ay, no! Jc, es muy tarde ya.

Jc: la verdad, lo que hicimos fue retrasar esto.

Yary: ¿que dices?

Jc: que esto iba a pasar tarde o temprano y nosotros no íbamos a poder intervenir.

Yary: quieres decir, ¿qué con nosotros iba a pasar lo mismo? ¿No había forma de evitarlo?

Jc: sip.

Yary: (llorando otra vez) entonces... ellos están...

Jc la abraza para reconfortarla.

Jc: no nos adelantemos. ¡Mira!

Ranma corrió lo mas que pudo y logro salvar a Akane pero cuando cayeron en otro extremo de la calle Ranma se golpeó fuerte y quedó inconsciente.

Akane: (levantándose poco a poco) Ranma...

Ella al ver que el no respondía se puso nerviosa

Akane: Ranma, no estoy jugando ¡contéstame!.

Ranma no contestaba.

Akane: (llorando) ¡NOOOOO! ¡NO PUEDE SER! ¡RANMA, NO ME DEJES SOLA!

En el hospital...

Todos los habitantes del dojo Tendo se encontraban tratando de consolar a Akane y es que no había quien le sacara de la cabeza que ella era la culpable de que Ranma estuviera en coma.

Kasumi: pero, Akane, tranquilízate.

Akane: (llorando) ¿qué me tranquilice? Como quieres que me tranquilice, si la única que tiene la culpa de que Ranma esté allá adentro en coma es mía.

Kasumi: (la abraza) ya, ya, no llores. Por favor.

Akane: perdón Kasumi.

Kasumi: esta bien.

Ya era tarde en la noche y todos se habían ido al dojo, pero no hubo quien moviera a Akane de allí.

Akane se acerca al cuarto donde tienen a Ranma y una enfermera que estaba cerca le dice.

Enfermera: trata de hablarle, estoy segura que te va a escuchar y va a volver contigo.

Akane: esta bien. Gracias.

Yary: ¿que podemos hacer?

Preguntó Yary que seguía preocupada por lo que podría pasar.

Jc: por ahora lo único que podemos hacer es asegurarnos que Ranma la escuche para que tenga una razón de vivir. (Para sí mismo) lo que quizá nos faltó a nosotros.

Akane se acerca a la cama en donde estaba Ranma y se sienta en una silla que había cerca.

Akane: Ranma, lo siento mucho. Yo sé que todo esto fue mi culpa por nunca querer escuchar y siempre desconfiar en ti. (Comenzando a llorar) Pero por favor no me dejes aquí sola.

Bip... Bip... Bip... Bip... Bip... Bip... Bip... Bip...

Akane: la verdad es que ya no me imagino la vida sin ti. No solo eres mi mejor amigo y yo espero que tu sepas eso... si no, por fa, despierta para poder decírtelo. (Reposando su cabeza en el pecho de Ranma) por favor, Ranma, te necesito conmigo... por que... te amo.

Akane seguía llorando encima de él y no se dio cuenta de que él estaba moviendo su mano.

Ranma: (un poco desorientado) Akane... te amo.

Akane: (sorprendida y feliz) ¡Ranma! Gracias a Dios que estas bien.

Ella no espera a que el diga otra cosa y le da un beso en la boca.

Akane: que no se te ocurra nunca asustarme así otra vez, ¿me entendiste?

Ranma: (sonriendo) mira quien lo dice, la que por poco me provoca un infarto cuando vi ese camión encima de ti.

Jc: bueno creo que nunca cambiaran.

Yary: por lo menos se tienen uno al otro.

Jc: como nosotros. (besa a Yary)

En algún otro lugar

Cupido: yo que tuve que pasar las de Caín intentando juntar a estos dos y al final se unen como quiera. Bueno... que todo sea por el amor.

Y entonces se escucha la canción a dúo de Luis Fonsi Y Olga Tañón: "Quien diría"