Wuenas chente! ke paxa?jejej, pos nada, akí estamos de uevo, os pido perdón por el retraso pero eske el fin de semana es lo ke tiene (ke hace perder a una la cabeza XD) Bueno, pos nada, nos leemos más abajo, espero no haberos hecho esperar mucho y nada, ke os guste!

besazos!

YaS;-)

#08# Lágrimas de fuego

El día ya había caído, y de una manera bastante pesada. Escasos rayos de sol se filtraban por las pequeñas ventanas que ocupaban el exterior de la celda en dónde se encontraban los dos guardias dormidos con la partida a cartas a medias. Se podría llegar a decir que el ambiente era incluso tranquilo, a causa de la luz apenas perceptible entre los barrotes, el lugar se encontraba sumido en sombra , incluso menos iluminado que la noche anterior, ya que las luces eléctricas se habían apagado y únicamente utilizaban cómo fuente de iluminación una pequeña lámpara de aceite que parecía fallecer en cada soplido de viento que penetraba por la ventana.

Tirados en la pequeña escalera que se desplazaba en frente de la pequeña celda, los dos guardias habían caído víctimas del cansancio pero habían tenido la precaución de quedarse lo suficientemente apartados de los barrotes para no ser alcanzados por ninguno de los huéspedes.

Leonardo había permanecido despierto durante todo el resto de la noche. No por velar por la seguridad de los demás, que también, si no más bien por la preocupación y el agobio de verse encerrado de una manera tan rastrera y no tener ni la mínima idea de cómo reaccionar para poder escapar.

Raphael, por su parte, también se había mantenido en vela sin alejarse de los barrotes de la celda. Había estado toda la noche estudiando uno a uno los movimientos de los guardias, pero tras caer estos dormidos, había renunciado a sus observaciones y permanecía de pie, husmeando en el ambiente, cómo intentando encontrar alguna posible fallida en el lugar que les pudiera entregar una pequeña oportunidad de salir de allí:

.- Estás cansado…..duérmete – la voz de Leo sonó casi cómo una orden a la que Raph arrugó la nariz mientras se sentaba cerca de Michelanggelo que dormía plácidamente – yo ya me quedaré despierto.

.- ¿Bromeas? No me fío ni un pelo de este lugar…..- Raph bostezó mientras estiraba sus músculos entumecidos por el cansancio y el ajetreo de la noche anterior - ….además….aunque quisiera no podría dormirme.

.- Ya.- Leo miró al resto de ocupantes que permanecían esparcidos por la celda aprovechando las pocas horas de sueño que habían podido tener – envidio su manera de despreocuparse.

.- Duermen porque saben que nosotros estamos despiertos.

.- Sí….eso es lo que envidio….el poder ser vigilado por alguien – Raphael miró a su hermano interrogándolo con la mirada pero comprendiendo a lo que se refería.

.- ¿no te cansa?

.- ¿El qué?

.- El tener que estar siempre pendiente de la gente que te rodea. Aunque sean completamente ajenos de la familia….siempre haces lo mismo……yo no podría.

.- No digas eso – Leonardo paseó la mirada hacia April que permanecía profundamente dormida apoyándose en su hombro – sabes que no es verdad….- Raphael gruñó en forma de protesta por la contraria de su hermano. La tortuga pareció dar la conversación por finalizada, pero Leonardo volvió a interrumpir el silencio pasados unos segundos:

.- ¿Porqué no te has dormido? – Raph miró incrédulo a Leonardo que lo taladraba con la mirada.

.- Ya te lo he dicho. Simplemente no puedo dormirme en esta situación.

.- ¿Aún sabiendo que yo permanecía despierto y que os avisaría en el caso de que ocurriera algo? – Raph asintió con la cabeza mientras apoyaba sus codos en sus rodillas intentando averiguar a dónde quería llegar Leo con esa pregunta – sabes que no es así…….no te has dormido para vigilar a Kyara.

.- ¿Para qué? Si lo hubieras hecho tú de todos modos….

.- Pero yo no me hubiera preocupado si Havoc despertara e intentara acomodarse junto a ella. – Leonardo echó un vistazo a la chica que permanecía cerca de Lídia y a escasos centímetros de Havoc – en cambio tú sí. Pondría la mano en el fuego que te preocupaba eso – Raph soltó una pequeña carcajada silenciosa que resonó por los vacíos pasillos de la zona justo antes de mirar a su hermano con una sonrisa maliciosa en la cara.

.- ¿De verdad lo crees así?….es una tontería.

.- Para ti no lo es, al igual que tampoco lo es para mí dejar de vigilaros aunque sólo sea por unos minutos.

.- ¡Bah! Ese imbécil no tiene nada que pintar aquí. En cuánto todo esto acabe pienso hacerle una cara nueva – Raphael le echó el ojo a April que, aún dormida, pareció susurrar algo en sueños. Casi inconscientemente su mirada se desplazó hacia el vientre de la chica protegido por sus manos. Todavía no le cabía en la cabeza que la jovencita de April, aquella muchacha risotona, alegre, que les había estado prestando tantas atenciones en los últimos años, aquella que se empeñaba una y otra vez a que la enseñaran ninjutsu y de aquella de la que todos huían cuándo se encontraba de mal humor…. No le cabía en la cabeza que aquella April estuviera embarazada, y mucho menos por uno de sus hermanos.

Casi sin poder evitarlo, Raphael miró a Leonardo intentando encontrar aquél rincón en su mente que tan bien había guardado, aquél rincón oscuro y secreto en el que él y April se acostaban. Apenas podía imaginárselo, es más, le resultaba extraño que Leo hubiera podido esconderlo tan bien durante algunos meses.

Antes de darse cuenta, Raphael se encontró a sí mismo fusilando con la mirada a su hermano ,que lo observaba sin comprender, y pronunciando la maldita pregunta:

.- Leo. ¿te has acostado con April? – la tortuga se quedó absorta por unos instantes intentando digerir aquella directa pregunta de su hermano que parecía tener mucho más que fundamentos en sus palabras. Leonardo permaneció con la boca semi abierta a la espera de que alguna inteligente respuesta pasase y se deslizase por su lengua. Pero eso nunca llegó:

.- ¿porqué………..porqué lo preguntas, Raph? – Raphael pareció acomodarse contra la dura pared por unos momentos, momentos en los que Michelanggelo se deslizó hacia el hombro de su hermano, en el que se quedó cómodamente ubicado.

.- Tal vez…….deberías hablar con ella.

.- ¿Qué ocurre¿le pasa algo grave?

.- Bueno, podría decirse así….sí – Leonardo no pudo evitar mirar a la chica que permanecía apoyada en él y perdida por algún profundo sueño del que no parecía que tuviera ganas de despertar por miedo de volver a toparse con la dura realidad. Leo le apartó un mechón de la cara con cariño antes de recostarla contra la pared para poder levantarse. Se dirigió hacia Raphael con paso firme a pesar de la rudeza de sus músculos por permanecer tanto rato sentado de la misma forma:

.- Me parece que tenemos que hablar – soltó con una voz monótona y grave que imponía respeto. Raph negó con la cabeza haciendo que uno de los dos extremos de su bandana se deslizase por delante de sus hombros:

.- No es conmigo con quién tienes que hablar Leo. Si no con ella – Leonardo apartó la mirada con preocupación en sus ojos y, por unos instantes, pareció morderse el labio inferior en una muestra de inseguridad. Después de unos segundos largos, se dio la vuelta y se apoyó en los barrotes de la celda, perdiendo la vista en los dos guardias:

.- No me has contestado – la exigencia de Raphael pudo parecer ruda pero no lo era. Sólo intentaba saber algo más de su hermano, ya que a causa de su afán por proteger a los demás, pocas veces solía contar detalles sobre sí mismo. Tal vez esa era la única característica en que los dos coincidían.

Leonardo se giró intentando esbozar una sonrisa algo forzada en su rostro. No había hecho falta que Raph le dijera nada para que en su cabeza se presentase el problema bien claro y explícito, pero, tal y cómo le había dicho su hermano, era April quién debía aclarar las cosas:

.- No me has contestado – volvió a repetir

.- ¿para qué? Si ya sabes la respuesta.

.- …….¿cuándo fue?……..- Leonardo negó con la cabeza mientras volvía a agachar su mirada al suelo y se mantenía apoyado con los codos en las barras de la celda:

.- No lo sé……no llevo la cuenta de los días¿qué quieres que te diga?

.- ¿cómo pasó?

.- Estás curioso ¿eh¿Acaso te he preguntado yo cómo te acostaste con Kyara?

.- Eso fue un secreto a los cuatro vientos , Leo. No cómo lo vuestro. Ni siquiera yo quería creerlo – Leonardo giró su cara a un lado de nuevo mientras volvía a morderse el labio inferior, después de devolver la vista a los ojos de Raph que derrochaban curiosidad a puñados, fue a sentarse cerca de Mickie, dejándolo a éste entre él y Raphael:

.- Fue extraño. ¿qué voy a decirte?…..apenas lo vi llegar, pero si que hacía muchos días que el contacto entre nosotros había cambiado….era cómo más….

.- ¿íntimo?

.- Ajá. – Leo se recostó contra la pared quedándose casi tumbado. En aquella posición se mantuvo en silencio por unos minutos - ¿recuerdas la noche en qué a Donatello le dio por salir a probar tu moto?

.- Cómo no, acabé estrellándome contra el primer muro que se me cruzó. El muy desgraciado olvidó los frenos……- Leonardo soltó una carcajada al recordar aquél momento.

.- Pues aquella noche yo permanecí con April en la tienda. Cómo siempre, tenían que llevarle una carga de no sé qué……una vez terminó el reparto iba a reunirme con vosotros……pero fue ella la que no me dejó marchar. Cuándo me quise dar cuenta la tenía desnuda en frente de mí y…..bueno, no soy humano pero aparento serlo….y…sobretodo….no dejo de ser macho ¿no?- Leonardo miró vagamente a Raphael que escuchaba intentando imaginarse la situación- ¿a ti que voy a contarte?- un pequeño gruñido delató el semi-despertar de alguien. Ambos hermanos pasearon su mirada hacia las dos chicas, en dónde Kyara ya había abierto los ojos y permanecía observando al techo, cómo intentando ordenar todos y cada uno de sus pensamientos y recuerdos de la noche anterior:

.- Buenos días – le susurró Leo. La chica bajó la mirada descubriendo a las dos tortugas sentadas en el suelo junto a Mickie. Leo la sonreía y Raphael se mantenía indiferente con la vista perdida al frente. La chica trató de incorporarse sin despertar a Lídia, tambaleante a causa de sus cansadas piernas, consiguió desplazarse hacia los barrotes para luego echarle una mirada a Havoc, que aún permanecía dormido.

Por unos momentos la chica pensó lo peor y, al comprobar que la gran herida de su cabeza se encontraba protegida por sangre seca, decidió acercarse y asegurarse de que el hombre respiraba, pues no había sido muy favorable para él estar sangrando durante toda la noche.

Se arrodilló delante de él y, colocando su mano en su nariz, se aseguró de que aún respiraba antes de mirarle por encima esa enorme herida que lucía infectada:

.- No parece que esté muy bien la cosa….- susurró

.- Lo sé, tiene mala pinta….- apoyó Leo

.- ….ahí se muera…..

.- ¡Raph!- se quejó la chica

.- Te estoy diciendo la verdad me daría completamente igual – Raphael volvió a levantarse dirigiéndose hacia los barrotes, allí, estudiando la situación, empezó a gritarles a los guardias, que se levantaron confundidos a causa de los gritos de la tortuga que les sonreía maliciosamente por haberlos despertados:

.- ¿No vais a traernos el desayuno?

.-

La guarida se encontraba sumida en una eterna calma. Tal vez por que la mayoría de sus ocupantes no se encontraban allí o porqué Kasey, el único capaz de hacer tanto alboroto cómo las 4 tortugas juntas, se había dormido dócilmente en el sofá dejando a Donatello y al Maestro toda la faena.

Don bostezó mientras clicaba en el "enter" para finalizar el trabajo de toda una noche en vela. Estiró sus músculos por encima de su cabeza mientras se dirigía a la cocina, el maestro no tardó en aparecer siguiendo a su pupilo mientras lo inetrrogaba:

.- ¿Ya está?

.- Ya está – Donatello se preparó café volteándose hacia la anciana rata mientras la tetera se calentaba en el fuego – escribí todo lo que me dijo. Serio. Convincente. Claro y sin rodeos ni información de más.

.- ¿cómo lograste introducirte en el ordenador se Oroku Saki? – Donatello soltó una leve carcajada:

.- No en su ordenador maestro, en la red informática de la empresa de Los Foot. Es sencillo si conoces los códecs y sabes desplazarte ágilmente por la red mundial sin ser visto. – Don se giró para prestarle atención a la tetera que empezaba a silbar – Los Foot no requieren una seguridad optimizada para sus redes informáticas, teniendo en cuenta que Oroku Saki sólo las utiliza para los negocios intentando no entrometer en ella sus trapos sucios, resulta relativamente fácil poder ponerse en contacto con uno de los ordenadores principales y mandarle el e-mail cómo si se tratase de uno de sus colaboradores.

.- ¿Cómo has sabido a quién poner de remitente?

.- Los Foot tienen un gran archivo dónde guardan la información de cada uno de sus cooperadores. Pensé que si Shredder anda detrás de las crías, así cómo de Hun, la manera más fácil de atraerlo y hacer que la nota sonase convincente era hacerme pasar por uno de sus principales doctores e de I.D. Jefferson Namura, creo que se llamaba. Enviándole el e-mail con ese nombre y su ficha de identificación, he informado a Oroku Saki del lugar exacto en dónde tienen encerradas a las crías: el "Red Flamingoo".

.- Pero nosotros no sabemos si los pequeños se encuentran ahí.

.- Y ellos tampoco. Lo que sí sabemos es que están ahí Leo y el resto.

.- Exacto – Splinter empezó a retirarse de la cocina en dirección a la sala de monitores – si los Foot atacan el lugar, el kaos y la confusión será tanto que tus hermanos lograrán salir de allí, y más si nosotros les ayudamos a ello – la anciana rata soltó un fugaz sopapo hacia Kasey, que despertó envuelto en confusión y con un grave dolor en su pecho a causa del golpe:

.- ¡Qué demonios…..!

.- ¡Arriba señorito Jones! No tenemos todo el día cómo para pasarlo durmiendo – Splinter se deslizó hacia su habitación – Donatello, preparaos, partiremos de aquí en cuánto caiga la tarde. No creo que Saki ataque el lugar hasta que no se ponga el sol – la tortuga asintió mientras le acercaba una taza de café a Kasey que permanecía sentado en el sofá frotándose la cara intentado recuperarse de su sueño roto:

.- ¿Ya está todo? – preguntó el chico cogiéndole la taza a Donny.

.- Sí, pero no gracias a ti. Eres un maldito vago.

.- ¿qué quieres? Llevo toda la noche galopando por la ciudad.

.- ¡Bah! Ya te acostumbrarás. – Don tomó un trago de su taza.

.- Sí sí, ya me lo contarás cuándo tú no puedas ni levantar ese palo que llevas por no haber dormido.

.- Bo Staff Kasey, es un bo.

.- Es un maldito palo de todas formas.

.-

El mediodía había entrado y de la misma manera que la mañana. Casi irreconocible. La pequeña oscuridad que caracterizaba los sótanos del "Red Flamingoo" seguía persistente ante la capacidad de que algún débil rallo de sol pudiera penetrar en ellos, provocando que al ambiente fuera frío y que la humedad de las viejas piedras y losas que formaban aquellos estrechos pasillos se dejase entrever asomando un débil aroma cada vez que el viento soplaba penetrando por las pequeñas ventanas.

Lídia se encontraba más nerviosa que nunca y no podía dejar de dar vueltas por toda la celda echando miradas Havoc que, despierto, no se movía demasiado a causa del fuerte dolor de cabeza que le suponía la herida abierta, seca e infectada. La chica n pudo evitar observar de palmo a palmo cada una de las tortugas allí presentes. Había sido capaz de verlas entre los focos de la discoteca y en la débil luz de la lámpara de gasolina. Pero ahora que el ambiente era algo más iluminado, las miraba una y otra vez investigándolas extremidad por extremidad intentando imaginarse cómo demonios habían alcanzado ese tamaño y esa inteligencia. Todos y cada uno de sus movimientos, así cómo su manera de hablar, eran completamente humanos y no podía dejar de descartar la idea de que se tratasen de más experimentos llevados a cabo por I.D:

.- ¿Qué? – se quejó Raphael después de sentirse algo observado.

.- Nada nada…sólo qué….

.- Sí, ya. Somos mutantes, ninja y tortugas – se mofó Michelanggelo soltando una débil risita:

.- Olvidaste adolescentes – replicó Raph. La chica se los miró intentando averiguar a qué venía aquella descripción tan implícita. Eran tortugas grandes y punto, eso y el echo de que supieran pelear era lo único que le importaba. Podrían resultar de gran ayuda para salir de allí:

.- ¿Cómo te va Mickie? – preguntó Kyara sentándose al lado de la tortuga que aún no se había movido del sitio.

.- Psé, tirando, ya sabes. Encerrado en una cárcel junto a un grupo de terroristas españoles y con una maldita herida en la pierna derecha que no deja de darme pinchazos……. de verdad que vuelve a dolerme a horrores.

.-¿ terroristas?- balbuceó Havoc levantando la mirada de una manera muy fría y amenazante hacia Mickie – no creo que sea esa la palabra.

.- Si quieres os llamamos justicieros- Raphael habló de una manera muy sarcástica intentando buscarle las cosquillas al muchacho moreno que lo fusiló con la mirada justo antes de volverse hacia Leonardo:

.- ¿Leonardo verdad? – la tortuga asintió – controla a ese enjendro que tienes por hermano si no quieres perderlo. – a la vez que Leo entornaba los ojos suspirando Raphael se levantó veloz colocándose delante de Havoc con los brazos cruzados invitándole a encararse. El humano lo imitó:

.- Parece que no te aprecias mucho la vida ¿no?

.- Un ignorante cómo tú ¿qué va a saber de cómo me tomo la vida?

.- Pues no lo sé, pero por lo que has estado demostrando parece que no dejas de verla cómo un estúpido juego – Havoc apretó su puño delante de la tortuga que le aguantaba la vista cruzando los brazos sobre el pecho - ¿terroristas? Pues sí, diría que precisamente es esa la palabra.

.- ¡Oye, no me vengas juzgándome sabiendo de lo que hablas porqué no tienes ni pizca de idea de qué va todo esto!

.- Pues no nos estaría de más saberlo – introdujo Leonardo aún sentado contra la pared – nosotros también estamos metidos en ello ¿no? – Havoc se volteó dándole la espalda a Raph que lo observaba desafiante deseoso de que el humano le atacase para darle de una vez su merecido. El chico moreno se acercó a Kyara, apoyándose en la pared detrás de ella. Adoptó un posado muy serio, cómo recordando antiguos sucesos que todavía le carcomían por dentro. Tras girar la vista hacia un lado perdiéndola entre las losas frías de una de las paredes, pareció dispuesto a hablar:

.- Quiero matar a Hun…….él acabó con todo lo que quería en menos tiempo del que yo estoy tardando en arreglarlo.

.- ¿Arreglar¿Crees que haciendo saltar por los aires locales de tu enemigo y cargándote a centenares de inocentes es la mejor manera de arreglar las cosas?- la voz de Michelanggelo sonó fría y consistente. Sus hermanos no pudieron evitar girarse a verlo algo impresionados por el tono adulto que había adoptado en decir eso. Havoc miró a Mickie algo nervioso:

.- ¡Es mi manera de arreglarlo! – dijo golpeándose en el pecho para hacerse referencia a sí mismo – no pararé hasta que haya logrado hacerle tanto daño a él cómo nos ha estado haciendo a nosotros! – Leonardo miró a Kyara sin comprender del todo esa frase, esperando a que la chica pudiera explicarse, pero ésta únicamente agachó la cabeza lavándose las manos sobre el tema y frotándose el amuleto que colgaba de su cuello. Fue Lídia la que se prestó a explicarlo todo con más precisión:

.- Nuestros ataques a Los Dragones Púrpuras siempre han sido puntos importantes intentando destruir sus pilares más fuertes para enderrocar la organización des de arriba. Puntos estratégicos…..pero ellos en cambio, para poder destruirnos han optado por hacerlo de una manera sentimental – la chica se señaló a sí misma – destruyeron mi lugar de trabajo haciéndolo volar por los aires matando a la gran mayoría de mis compañeros. Asaltaron en casa de Havoc y mataron a toda su familia, menos su hermano pequeño de dos años…..que ha quedado paraplégico. Y a Kyara, así sin más, la raptaron y se la llevaron al otro lado del charco para convencerla a base de estar encarcelada de que se uniera a ellos.

.- Al principio Los Toros no era nada más que una banda callejera que empezó a rivalizar con los escasos grupos de Los Dragones Púrpuras de la península. Pero después de que fueran atacándonos uno a uno en nuestros puntos más débiles, el enfrentamiento se convirtió en una guerra que no pensamos perder. – Havoc tomó algo de aire y volvió a fijar su mirada en la de Raphael – es por eso que no dejaremos que ese perro de Hun sobreviva. Si hemos viajado hasta aquí, fue porque Kyara nos pudo informar de las ubicaciones de sus locales y de su organización cómo banda en Nueva York.

.- Ah. claro¿por eso estuviste tanto tiempo con nosotros? – Raphael arqueó ambas cejas incriminando con la mirada a la chica.

.- Ni hablar, esa no fue mi prioridad, pero a medida que pasaba el tiempo y al enfrentarme junto a vosotros con ellos, pude recaudar una información bastante valiosa.

.- si lo he entendido bien……os da igual los métodos a utilizar mientras podáis llegar hacia su jefe Hun. Aunque tengáis que cargaros a media banda por el camino ¿no? – otra vez Mickie heredaba su vena más picarona y sádica de su hermano Raphael y ha hacia intrusión en la conversación de una manera muy seria y adulta. Havoc lo fulminó con la mirada aún apoyado en la pared de detrás de Kyara:

.- No os hemos pedido que intervengáis, si estáis aquí es porqué os ha dado la gana así que , sólo sois unos invitados a este enfrentamiento y si no os gustan nuestros medios, estáis invitados a marcharos cuándo os de la gana – Havoc miró nuevamente de una manera muy pesada a Rapahel – pero Kyara va a quedarse hasta que esto termine. – Leonardo se incorporó de su sitio acercándose a April que había escuchado la conversación manteniéndose alejada de ella:

.- Ahora, ya es nuestra lucha. Des del momento en que entraron en su apartamento y se llevaron a las crías, nosotros estamos metidos en esto, así que, o compartimos enemigo o habrá que apuntarse uno nuevo en la lista. – Kyara lo miró frunciendo el ceño enfadada por aquella intimidación de considerar a Los Toros cómo a enemigos, pero la chica sabía que Leo sólo estaba quemado a causa de lo de April y los niños y no le dio mucha importancia. Raphael por su parte, había analizado una a una las palabras de Havoc y había llegado a la conclusión de que todo se trataba de una maldita venganza privada en la que muchos otros reclutas de Los Toros, se habían visto sumergidos y habían muerto a causa de una venada de su jefe. La tortuga no pudo evitar acercarse al chico moreno que lo miraba con superioridad y, después de detenerse unos segundos frente a él cargando con su mirada, le soltó un puñetazo girándole la cara por completo:

.-¡Oye! – Kyara fue la más rápida e, incluso antes de que Havoc pudiera cubrirse la zona herida, la chica agarró el puño de la tortuga pidiéndole que no volviera a hacer eso. Raphael se soltó de ella y agarró a Havoc por la solapa clavándolo contra la pared:

.- Si estás vivo es gracias a ella. Tenlo muy en cuenta – le susurró amenazadoramente.

.- ¡Raphael! Basta. – la orden de Leonardo fue breve e intensa. Su hermano lo obedeció soltando a Havoc y alejándose de la zona sin dejar de mirarlo de reojo deseoso de poder partirle el labio la próxima vez.

Kyara se apresuró a mirar los daños del chico, pero éste la apartó violentamente a causa de su enorme enfado y la miró fríamente a los ojos:

.- Nunca voy a entenderlo, eso que lo sepas – la chica le apartó la mirada algo molesta. Sabía a que se refería, Havoc siempre solía repetirle que no entendía cómo demonios se había colgado de unas tortugas, y mucho menos de una de ellas en especial.

Kyara siempre le había contado todo al muchacho, y éste estaba enteradísimo de todo acerca de la vida de la chica en Nueva York, acerca de sus amigos y acerca de Eddelwise y, mucho más, acerca de Raphael, al cual había distinguido la primera vez que lo vio por los pasillos del segundo local que volaron por los aires. Topándose con un grupo de tortugas enormes, Havoc los reconoció al instante, y por la descripción que Kyara le había dado de cada una de ellas, al chico no se le izo difícil ver a Raphael resaltando entre el resto. Tal vez por eso no le soportaba. No sólo era a causa de su inmutable carácter y esa arrogancia suprema que lo caracterizaba….si no también a causa de todo lo que la chica le había contado de él.

Havoc se sentó en una de las esquinas intentando dormirse una vez más, Kyara, observándolo frunciendo el ceño, quiso dejarlo en paz y se dirigió hacia las tortugas:

.- No se quién de los dos es más desagradable – le replicó a Raphael.

.- Olvídame – le dijo este secamente girando la mirada hacia un lado sin ningún síntoma de alteración en ella-. La chica entornó los ojos y se dirigió a Leo y Mickie intentando encontrar algo de atención:

.- Sé que no es precisamente de lo mejorcito, pero lo aprecio mucho. Y no quiero problemas entre vosotros ¿vale?

.- No van a haber problemas mientras él no los cree, nena – le contestó Mickie sin dejar de frotarse la pierna herida.

.- Descuida – rectificó Leo – ahora lo más importante es salir de aquí y encontrar a las crías. Y en eso estamos juntos ¿verdad? – Kyara le sonrió a modo de respuesta.

Lídia pegó un grito de queja cuándo la puerta de la celda se abrió estrepitosamente atrapándola a ella contra la pared, fue Raphael el que la sacó de allí salvándola de quedarse atrapada entre los enormes visillos de ésta. Al otro lado del umbral, Hun observaba airoso a los recluidos.

La tensión que se cruzó en el ambiente fue insuperable. Todos los músculos se tensaron esperando algún tipo de ataque o algo parecido. Pero no llegaba, el hombretón únicamente se dedicaba a mirarlos con arrogancia y superioridad paseando la vista por encima de todos y cada uno de ellos. Su mirada se paró en Kyara, fue entonces cuándo Havoc reaccionó:

.-¿Qué? – Hun soltó una carcajada.

.- Tú pelirroja – dijo señalando a Kyara – conmigo.

.- ¿No quieres que te acompañe yo? – le preguntó Raphael crujiéndose los nudillos al colocarse delante de la chica. Hun pareció no estar en su cuerpo durante algunos segundos, después de los cuales, sonrió a la vez que se movía a gran velocidad y lanzaba a Raphael a un lado de un manotazo para poder colocarse delante de la chica. El caparazón de la tortuga crujió al golpearse contra la pared y la desgracia de darse en la cabeza contra la fría y consistente piedra lo dejó casi desmayado intentando aclarar su vista:

.- Si vienes a lo de siempre, ya sabes lo que voy a responderte – desdeñosa, Kyara se alejaba de él intentando retroceder en el pequeño espacio. Leonardo, nuevamente, encontró un hueco y, deslizándose hacia la puerta abierta, atacó a los dos guardias que escoltaban a Hun arrebatándoles sus armas. Lídia lo imitó y buscó el apoyo de Michelanggelo pasándole una de las pistolas de los guardias que la tortuga escondió detrás de sí incapaz de levantarse.

Hun se volteó curioso por el ruido y observó que la tortuga y la chica se encontraban fuera de la celda y lo amenazaban con la pistola en las manos. En un movimiento fugaz, el hombretón agarró a Kyara por uno de sus brazos y la colocó delante de sí arrastrándola a su paso. La chica luchó por soltarse, pero el poderoso antebrazo de Hun le aprisionó el cuello impidiéndole respirar.

Leo observó la situación y descifró la maldita sonrisa de Hun que le invitaba a entrar de nuevo en la celda si no quería perder de vista a la chica. Leo bajó la mirada frustrado y dejó caer la pistola deslizándola entre sus dedos para luego levantar ambas manos al aire. Lídia izo lo mismo y ambos se metieron de nuevo en la celda, dónde Hun los encerró justo cuándo llegaba un pequeño pelotón de reclutas al que Hun ordenó que vigilasen.

Kyara se revolvía inquieta en los brazos de su agresor intentando escapar de aquella fuerte presión que la agarraba por la cintura. Cuándo Hun empezó a caminar pasillo a través, la chica se percató de que su fuerza no era nada cómo para poder soltarse de esas garras, y optó por empezar a desesperarse en tan sólo pensar lo que podrían llegar a hacerle:

.- ¡Leo¡Mickie! – Kyara gritó estremecida cuándo el hombretón aumentó la presión de su agarre intentando que la chica se callase - ¡Raphael!

Leonardo se agarró a las barras escuchando los últimos berreos de la chica. Empezó a preocuparse en serio en tan sólo pensar lo que Hun podía tener planeado para ella, después de haber escuchado algunas de las riñas de Los Toros contra Los Dragones, se temía de lo peor y creía que, con tal de poder vengarse de Havoc, Hun era capaz de cualquier cosa:

.- ¿Y ahora que? – preguntó April con la voz temblorosa mirando a la tortuga. Leo se sintió desorientado y una vez más, no supo cómo reaccionar ante esa situación.

La tortuga se dejó resbalar por la pared hasta quedar nuevamente sentada en el suelo junto a April. Posando los codos en sus rodillas, se recostó sin perder la vista del techo:

.- ¡Leo?- le insistió Mickie. Leonardo suspiró preocupado:

.- Esperar……eso es lo que haremos. Esperar a que Donny, Kasey y el maestro nos saquen de aquí….

.- ¿Y si no pueden?- preguntó April - ¿qué pasa con Kyara? Y….¿qué pasa con nosotros?

.- ¡No lo sé¿vale¡No tengo ni puta idea de nada! – Leo acabó por estallas contra la pobre April que observaba temerosa cómo la tortuga perdía su paciencia y su confianza en puñados. Leonardo observó a April, que lo miraba algo asustada. La tortuga se fregó las sienes antes de volver a mirarla- lo siento…….es sólo que……

.- Ya – empezó la chica – tranquilo…..es normal que estalles al aguantar tanta presión.

.- ¿Presión? No, que va, apenas – bromeó – no hay nada de nuestra parte……Mickie apenas puede moverse…..Raph está medio inconsciente, Havoc tiene un buen golpe que lo hace muy vulnerable y tú estás…….-un silencio incómodo pasó por la boca de Leonardo buscando alguna manera de arreglar la inmensa metedura de pata que acababa de hacer aún sin haber acabado la frase. April parecía no haberse percatado y continuaba atenta:

.- ¿Estoy?……- la tortuga agachó la mirada mientras cerraba los ojos. Al cabo de unos segundos, volvió a mirar a la chica por el rabillo del ojo de una manera muy compasiva y con una débil sonrisa en la cara. A April no le izo falta saber nada más, sólo por aquella manera de actuar de Leonardo lo había comprendido todo así que, resoplando de preocupación y nervios, su rostro cambió por completo cuándo la tortuga se lo preguntó sin indirectas y susurrándole para que sólo ella pudiera oírlo:

.- ¿estás……embarazada? – April se incomodó y empezó a ponerse muy nerviosa. Sin poder evitarlo, lanzó una mirada fusilante a Raphael que permanecía en el suelo con la cabeza ladeada luchando por tragar fuertes bocanadas de aire. No podía evitar odiarlo por haberle dicho algo a Leonardo antes de que ella misma lo hiciera.

Después de un par de minutos de silencio, la chica volvió al mundo dándose cuenta de que todavía no le había contestado a Leo:

.-…….sí……así es. – Leo escondió su rostro entre sus manos en un suspiro – ¡pero! No……no es seguro…..bueno, quiero decir, seguro si lo es…..el test me dio positivo…..

.- ¿Qué test?

.- El que Kasey y tu hermano encontraron en mi basura – soltó la chica fríamente fusilando de nuevo con la mirada a Raphael que parecía incorporarse poco a poco. Leo volvió a hundir su rostro entre sus manos.

.- Bueno, lo que quiero decir es que…..el problema es saber…..de quién es….- la tortuga se sobresaltó asustada antes de voltearse rápido a mirar a April frunciendo el ceño:

.- ¡Qué que!

.- ¡Pero tranquilo! Raphael tiene que haber hablado con Donny para pedirle que me hiciera pruebas, así lo sabré antes de tiempo.

.- ¿pero que demo……? Raphael y Don no se hablan des de hace algunas semanas.

.- ¿Ah no?

.- ¡Bueno, ese no es el tema! – Leonardo parecía empezar a desesperarse y procuraba mantener el volumen de voz bajo para que los demás no se percatasen de la discusión – April……¿con quién más……? – la chica lo miró compadeciéndose de él, la tortuga pareció entenderlo y destensó todos los músculos volviendo a apoyarse en la pared- oh……ya……..Kasey ¿no? – April asintió con la mirada justo antes de abrazarse a la tortuga, que permaneció inmóvil con la mirada perdida en la pared sin corresponder a los achuchones de la chica. Algo andaba mal, Leo sabía del cierto que entre Kasey y April siempre había habido algo, pero cuándo la chica se le lanzó, creyó que tal vez fuese lo que fuese que hubiera entre ellos había terminado finalmente….pero nunca pudo llegar a imaginarse que la muchacha realmente estuviera con los dos.

De alguna forma, Leonardo se sintió algo engañado, pero no encontró que fuese un buen momento para discutirlo, pues de todas formas, si April estaba embarazada de él, también era culpa suya, así que muy a pesar del golfeo de la chica, él y Kasey eran los tontos que ahora tendrían que sufrir las consecuencias.

Michelanggelo se arrastró cómo pudo hasta su hermano, que permanecía de cuatro patas en el suelo luchando por recuperar su consciencia:

.- Todo bien ¿hermano? – Raph susurró a algo parecido a un "sí" justo antes de apretar con fuerza los puños y rabiándose de lo lindo en tan sólo pensar que se habían llevado a Kyara. La tortuga se incorporó de un salto y se pegó a los barrotes berreándoles al grupo de guardias que permanecían en corro hablando entre ellos. Ëstos ignoraron por completo la rabieta de la tortuga y únicamente le sonrieron:

.- Tranquilo – calmó uno a su compañero que caía en la baza de Raphael – esta noche podrás partirle la cara a gusto.

.- ¡Quién me va a partir el qué, listillo!

.- ¿de qué hablan? – preguntó Mickie a Lídia mirándola sin comprender. La chica arrugó los hombros antes de prestar atención a la conversación de los guardias, de la que no pudo sacar nada en claro.

.-

.- No pongas esa cara.

.- ¿a caso quieres que te sonría? – Kyara permanecía impasable ante los comentarios de un que, sentado en su enorme butaca, la observaba por encima de unos papeles.

Arrastrándola por los pasillos, el deseable la había traído hasta uno de los numerosos despachos que quedaba contiguo a la pequeña oficina reconstruida de I.D. Un despacho pequeño, oscuro, y poco adornado, únicamente contaba de una mesa y algunas sillas, nada del otro mundo. La chica permanecía de pie, estática cómo un palo, sin perder de vista al grandullón que parecía estar esperando a alguien. Tal vez por el silencio del ambiente o la tensión que recorría cada uno de sus músculos, la chica no se movía y estudiaba uno a uno los rincones de la sala. Se sorprendió cuándo una de las pequeñas puertas de madera se abrieron, por dónde entró uno de los del personal de I.D.

Vestido con su bata blanca y sus lentes, Jefferson Namura entraba en la sala intentando pasar lo máximo desapercibido. Kyara abrió la boca unos centímetros cuándo lo vio, sorprendida, no pudo evitar sonreír entre dientes:

.- Ya era hora – gruñó Hun levantándose – ahora, si eres tan amable de acompañarnos…..

.- ¿Para qué? – replicó la chica retrocediendo antes de que una de las enormes manos de Hun la agarrase de nuevo por el cuello. Podía llevar a cabo una evasiva contra el hombretón, agarrada por el cuello, tan sólo debía zafarse a él con las piernas y tumbarlo impidiéndole mover las piernas, tal vez luego, agarrando uno de los rotrings de la mesa, podría llegara herirle para degollarlo con calma. Toda esa táctica pasó por la cabeza de la chica en unos segundos, pero la presencia de Namura lo había cambiado todo, y tal vez escapar le iba a resultar mucho más fácil de lo previsto.

Arrastrando de nuevo a la chica a través de la puerta, Hun condujo a ambos hacia el pequeño laboratorio de I.D, una sala blanca, muy iluminada, y con muchos ordenadores y material puestos sin orden aparente recubriendo todas las paredes:

.- ¿siguen igual los sujetos?

.- Así es, no dejan que se les acerque nadie y tener que sedarlos tan a menudo podría resultar peligroso para ellos – Namura contestó a Hun mientras se dirigía a uno de los rincones de la sala. Entrando en una pequeña puerta, se les apareció delante una habitación muy equipada con equipos informáticos des de la que se apreciaba a través de un inmenso cristal, otra habitación toda completamente blanca en dónde se acurrucaban las crías de tortuga en uno de los rincones de ésta.

Kyara no pudo evitar llamarles cuándo los vio a través del cristal. Pero ni Raphi ni Pequeño Mickie se percataron de nada, continuaban agazapados entre ellos vigiland sin para la única puerta de entrada al cuarto:

.- No te molestes, no pueden ni verte ni oírte . aclaró Namura echando un vistazo a una de las computadoras:

.- ¿Qué coño queréis de mí?- gruñó la chica envolviendo con sus manos la enorme muñeca de Hun que le aprisionaba el cuello sin apretarle.

.- A eso podrá contestarte el Doctor ¿verdad? – Hun lo miró sospechosamente, tras lo cual Namura no pudo evitar sudar la gota gorda. Hun entregó una pistola a Namura y se marchó de la habitación después de lanzar a Kyara contra la pared para soltarla – estaré cerca.

La chica se levantó frotándose el cuello. Tras comprobar que Hun había desaparecido de la habitación, se dirigió a Namura a paso tranquilo:

.- Siento mucho lo de Número dos – susurró éste

.- Ya….él se lo ha buscado

.- Igual que me la buscaré yo si Los Dragones se percatan de esto.

.- No te preocupes, estoy dispuesta a hacer cuento, si eso es lo que te preocupa – Namura negó con la cabeza mientras continuaba tecleando en la computadora. No podía evitar mostrarse muy frío con la chica a causa del pánico que le recorría el cuerpo en tan sólo pensar lo que podrían hacerle si descubrían su intrusión. Fue Kyara la que rompió de nuevo el silencio:

.- Cuándo informaste a Inteligéncia de experimentos genéticos…..¿te referías a las crías?

.- Así es……

.- ¿se trataba del mismo experimento que tú estabas llevando a cabo?…..vaya tela Jeff

.- Aquí solo soy un mandado Número Uno. Cumplir las órdenes sin rechistar es lo que precisamente debo hacer para que no sospechen nada. – el profesor se sacó las gafas para limpiarlas con un paño – si una de esas órdenes se trataba de crear unos clones biológicamente más avanzados de esas tortugas, pues tuve que hacerlo. ¿Qué menos podía hacer que avisar de ello? – la chica se apoyó en el respaldo de la butaca en dónde Namura estaba sentado:

.- Ese no es el tema……¿qué le has dicho a Hun para conseguir que nos dejase a solas?

.- Únicamente necesito inyectar un tranquilizante a las crías, y si yo entro allí van a despedazarme, así que pensé que, al haber estado tu con ellas, tal vez te tenían más cariño.

.- ¿Pretendes que entre a pinchar a las crías?

.- No. Quiero que te las lleves de aquí.…….- Kyara lo miró fijamente para luego volver a mirar a Raphi y Pequeño Mickie. Después de meditar durante unos segundos, la chica se incorporó con las manos en la cintura:

.- ¿Cómo?

Bueno bueno Bueno, pues akí estamos.éste capi me ha quedado algo más largo que el resto, (pa ke veáis! cómo he tardado tanto en actualizar pues al menos si lo hago lo hago a lo grande! Tomad peazo de capítulo! juasjuasju XD(mentira, no estab previsto, la cosa ha salido cómo ha salido) jejej XD)

Pues nada Hadita, akí tienes a tus chikitines (!Owwwwwww) y tranki ke el momento leo y April ya ha pasado. jejej ya tocaba,ya . Leonardo no se lo ha tomado muy muy muy muy a mal (ya ke la cosa se podría haber echo más dramática de lo que lo he escrito) xk tampoco era el lugar ni el momento y xk Raphael ya le había preparado el terreno concienzándolo de ello (a mi lo que me parece eske le da más rábia que April se haya acostado con Kasey que no ke ésta pueda estar embarazada de un Pequeño Leo (cómo Pequeño Mickie XD, ke parida...)

XD XD, sí si, cierto que Donny y Kasey no són el mejor dueto de salvamaiento, pero bueno, teniendo el apoyo de Splinter alomejor la cosa funciona y, por lo visto (tal y cómo dijo Medeah), la cosa va de cabecitas, así que Donatello se encuentra en su terreno (si Kasey no se lo destroza antes), además, pobre Don, siempre tiene el papel de secundário que se encuentra todo el día con las narices metidas en algún asunto importante (para él, xk para el resto...--U), así que, ke demonios, pos ala! Ahora le ha tocado salvar al resto! Porque yo lo digo! (y quién si no? XD, no os creáis, las cosas van así en mi cabeza, pienso eso y lo pongo, y si digo que Donatello las pasa putas para sacarlos de alí, pos las pasa! JuasjuasjuXD)

Pos nada gentuza, nos vemos en el próximo capi, haber que tal avanza la cosa, ya me diréis vuestras opiniones (malas y buenas (primero las buenas por favor, jejejeje)) por los reviews!

Ah! por cierto! que parece que la sección ha aumento de tamaño paulatinamente! La cosa está que arde! Nuevos autores se han apuntado a los batallones de los escritores y la cosa está llenando la sección de TMNT en español! FELICIDADES! des de aki envío ánimos a Kitty-enid con su nuevo fic, a Yui Yamagisawa por actualizar después de taaaaaanto tiempo(so long! XD) y, cómo no, a la veterana de Medeah (Shinagami me mola mucho!kawai kawai), pos nada, besus a todos y a todas y nos estamos leyendo nenas!

YaS;-)