SEQ CHAPTER h r 1
Aquí está la pesada esta de nuevo... dando un poco porculo... ala. Antes de leer, sabed una cosa: que los fallos de exclamaciones, interrogaciones esas y toda la polla no son míos... me los hace fanfiction cuando subo los caps. Ala, a disfrutar (si es que se puede disfrutar con una cosa así... en fin... qué masoquistillos que sois... amados míos...).
Neville Longbottom estaba deprimido. O más, porque decir que estaba deprimido es poco. Joder, el chaval tiene a los padres dementes, la abuela lo maltrata psicológicamente, el Snape más de lo mismo (y yo creo que durante los castigos lo acosa sexualmente e incluso le llega a meter mano...), McGonagall le tiene un poco de asquito, sus amigos lo miran en plan "este niño es tonto", la Granger no le hace ni puto caso, no es squib de milagro. Y encima encima encima, podría haber sido él el prota de los libros y va el capullo de Potter y lo desbanca... ¿Por qué? (Se pregunta Nev, levantando los puños al cielo) ¿Por qué! (los agita).
Pero ese día estaba feliz de la vida porque Parvati Patil le había metido mano. Sí, le había metido mano descaradamente en Historia de la Magia (oh, sí, Nev, yo te sacaré de la desgracia en la que Rowling te ha introducido... sí... ¡vas a mojaaar, tronco! y además con la Parv, te quejarás...). Y, vaya que sí, Parvati estaba buena. No, no estaba buena. Estaba muy buena. Así que allí iba Neville, caminando sonriente por los pasillos que ni Granger cuando la hicieron prefecto: sonrisa resplandeciente, cabeza alta, casi que saltaba de la alegría. Vaya, lo que se suele hacer cuando uno está feliz de la vida. Además, ahora tenía Herbología, y nada mejor que una clase de Herbología para ser feliz. Porque, qué sé yo, si hubiera tenido Pociones, pues fíjate, que hombre, no dejaría de estar feliz, pero el día no le saldría tan redondo como con Herbología.
Entonces apareció ella.
—Hola, Nev —dijo, con una sonrisa, y recogiéndose la estupenda melena pelirroja en una cola de caballo, y Neville, cuan Ron Weasley delante de una veela (o de Pansy, que a estas alturas como que ya era lo mismo...), boqueó sin saber que decir.
Un día normal, en el que Parvati Patil no le hubiera metido mano en Historia de la Magia, pues Neville podría haber correspondido al saludo de Ginny de forma natural, cortés, e incluso simpática. Pero en ese momento, en ese pasillo, después de Historia de la Magia, de esa Historia de la Magia, a Neville no le llegaba suficiente sangre al cerebro (sí, Neville es un chico tímido, bastante Hufflepuff, es decir, bastante mojigato, pero es un chico... un tío, vaya, y después de sufrir... hummm... corrijo, disfrutar de las delicias de Parvati Patil, el corazón bombeaba más sangre a partes que su cerebro se había creído que tenía posibilidad de utilizar), si a esto sumamos que el cerebro la había flipado y se había hecho la picha un lío como quien dice ante una situación realmente inesperada, pues Neville andaba más alelado que Crabbe y Goyle con un hechizo aturdidor encima, que ya es decir (bueno, no, no tanto, que creo que la vena literaria me ha hecho exagerar un poquito). Así que, resumiendo, tras un boqueo, sólo consiguió articular:
—E-Ey...
Y sonreír de forma un poco boba.
(Pero como ya he dicho que voy a portarme bien con Neville en este fic, pues allá vamos con la reacción de Ginny). Con otro tipo, la Weasley seguramente lo habría mirado raro, habría fruncido el entrecejo, puesto cara de asco (muy Narcisa ella, que en el fondo tenía un complejazo de no poder ser Malfoy que te cagas de gordo...), y se hubiera pirado sin despedirse. Pero como era Neville (y lo estoy tratando bien y tal), sonrió y le pellizcó los cachetes:
—¡Ay, qué mono eres Nev!
Y le estampó un besito dulce en la mejilla.
Y ahora a Longbottom sí que se le cayó todo todo todo. ¡Por Merlín que eso tenía que ser un sueño! (oh, no querido... No es un sueño... Soy yo... muahahaha) Pero entonces se percató de que Ron Weasley, unos metros más allá, lo miraba. Lo miraba con cara de perro rabioso, con cara de hermano mayor superhipermegaultraprotector, en plan "grrr... como se te ocurra tocar a mi hermanita pequeña te la corto, y después llamo a mis tropecientos (Neville no recordaba cuántos eran... Y yo no tengo ganas de contarlos...) hermano mayores, que son todos tíos y también superhipermegaultraprotectores, y además a mi padre, y ya es que te mueres chaval". Nev entonces tragó saliva y decidió que ya era hora de escapar del trance sexual en el que se había caído.
—Jejeje... Ay, Ginny... Jejeje.
Y con unos golpecitos amistosos en el hombro, apartó a la pelirroja, y le lanzó una mirada a su hermano superhipermegaultraprotector en plan "¿ves, joder¿ves como no llevaba malas intenciones...? Que sigo siendo el pajo de siempre... eh...", y sonrió en plan lelo de Hufflepuff, dejando a Ron más tranquilo, y a Ginny un poco bastante pillada.
—Bueno... Pues te veo luego eh... —dijo la chica, y se volvió a acercar. Y le principio de Acción y Reacción se cumplió: Ginny se acercó (acción), Ron volvió a clavar unos ojos llameantes en Neville (reacción), que empezaba a descomponerse.
—Ay... Pues no sé si voy a poder eh... ¡Ala, ala¡Que llegas tarde a... a... a lo que sea que tengas...¡Ala!
Y ahora sí que empujó a Ginny de una forma nada caballerosa que tranquilizó sobremanera a Ron, que volvió a lo suyo. Y lo suyo, según captó Nev con su antena parabólica, era una discusión con Granger (muy típico...) sobre no sé qué en la biblioteca la otra noche, y muchos gritos, y muchos aspavientos con los brazos.
Así que Nev se encogió de hombros, chascó la lengua, y se consoló con que, bueno, aunque no hubiera conseguido el trío (¡casi lo había tocado, por Merlín!), al menos tenía a Parvati que ya era mucho más de lo que podía exigir (vaya, que se habría contentado con Eloise Midgen si se le hubiera puesto a tiro... pero como que tampoco... ¡Vaya, que Nev iba más salido que el pico de una mesa!... ufff... qué lentitos, eh...). Se sonrió, conforme (un poco resignado, la verdad, pero bueno...), y siguió su camino a Herbología.
En el invernadero 5, que era el más apartado del colegio de todos, hacía mucho calor. Era también uno de los más grandes y de los más bonitos, y no sólo porque las plantas que conservaba eran extrañas y muy coloridas, sino porque una parte estaba sumergida debajo del lago, y todo aquello a Neville le encantaba.
Aquel día feliz, la profesora Sprout había mandado a sus alumnos más aventajados a aquel invernadero a trasplantar los delicados cardos negros, y entre los afortunados se encontraban Neville, por supuesto, Hermione Granger (¿cómo no...? ¬¬U) y Hannah Abbott (que, añado, más que ser una alumna aventajada, le caía bien a la profesora... que aquí mucho Snape favoritista, mucho Snape favoritista... pero que no jodan... que todos los profes acaban pecando en lo del favoritismo... y el que no lo haga que levante la mano...).
Total, que allí andaban los tres, concentrados en las plantas, y los dos (Neville y Granger), concentrados en que Abbott no la cagara, porque una flor de esas cuesta un huevo, y, por lo menos por parte de Neville, ya había estado apunto de perder parte de su masculinidad, como para arriesgarse a perder otra parte otra vez. Y Hermione no sé... Supongo que para no matar a la flor, o yo qué sé... En fin, que en eso estaban, cuando sonó el timbre. El tiempo había pasado más rápido de lo que Neville se esperaba.
Guardó los libros y todos los útiles en la mochila y se la colgó al hombro, al mismo tiempo que Hermione salía como una bala porque, decía, llegaba tarde a las clases particulares de Aritmancia que ella misma impartía.
—No puede ser... —murmuró Abbott, una vez la chica ya hubo salido del invernadero, y mientras ella recogía sus cosas y le daba un codazo a una maceta que Nev salvaba de milagro de la destrucción— Ernie me dijo... —frunció el entrecejo, recordando— Que ya no daban clases...
Pero a Neville, que le daba bastante igual Hermione Granger, Ernie Macmillan y las clases particulares de Aritmacia, porque sólo le importaba él mismo y la noche loca de sexo salvaje con Parvati Patil, se encogió de hombros y se encaminó a la puerta.
Hannah se le interpuso en el camino.
—Neeev... —suspiró, bajando la mirada, y Neeev se mordió la lengua— ¿Sabes que la Weasley está por ti?
—No —soltó Nev. Era verdad, no lo sabía, pero en realidad no pensó mucho la respuesta de la pregunta porque su cerebro se había vuelto a embotar completamente. Y es que Abbott se acercaba a él tentadoramente, mesándose las trenzas en plan niña buena (Britney Spears en el video clip de "ups! i did it again!", pa entendernos...).
—Neeev... —repitió la Spears de Hogwarts— ¿Y ella te gusta a ti?
—Pues... —gimió Neville, mirando a un lado y dando un paso atrás.
—...Es queee... Tú me gustaaas... —lloriqueó la Abbott, y en su camino hacia Neville tiró una maceta y a Neville se le pusieron los huevos de corbata porque lo que acababa de tirar era una Orquídea del Polo.
—¡Hostia, Hannah, la que has liado!
Sí. Neville salió de su bloqueo gracias a la Orquídea.
—¡AAAAAGH! —esa era la profesora Sprout en plan Macaully Culkin o como carajo se escriba en "Solo en Casa", cuando se echa el aftershave, pero poseído— ¡Fuera de aquí¡LOS DOS!
Neville, en su carrera en pos de la puerta (es que la Sprout cabreada pero a la vez llorando por una planta da muuucho mucho mucho cague), se preguntó si a la Sprout le iba la florafilia o como se diga, vaya, que le fueran las plantas en vez de las personas. Y a la Abbott se le debió de pasar la calentura, porque corrió corrió y corrió, y adelantó a Nev (es que Nev no es muy dado a los deportes que digamos...), y desapareció por ahí (Neville no miraba porque le había entrado flato y se retorcía en el suelo con los ojos cerrados).
Pero se recuperó pronto (¿Por qué? Os preguntaréis, queridos lectores¿una poción¿un hechizo¡No! Neville seguía más salido que una pulga en celo -es una cosa rara que me acabo de inventar porque no quiero repetir otra vez lo del pico de la mesa, así que supongamos que una pulga en celo va muy salida-). Tenía una misión¡SEXO SALVAJE CON PATIL! Y además si tenía suerte a lo mejor se apuntaba la gemela y ya sería la polla (Neville tenía mucha fantasía como podéis ver... en fin...), porque, eso sí, se le habían pasado todas las ganas de follar que hubiera podido tener con Ginny y con Abbott (que también estaba buena, así en plan ups! i did it again!).
Y en eso que Neville, entre fantasía y fantasía, llega a la sala común con la tienda de campaña montada (si no lo entendéis, os jodéis, lelos... que es M, pero no tanto...), pero da igual porque el chaval va flipando en colores (todavía no se cree todo lo que le está pasando, y además sigue con lo de que Parvati se traiga a la hermana) y no se da cuenta de que lo miran mal.
Así que sube al dormitorio, se ducha (cantando... y no es que lo hiciera demasiado bien), se arregla, y baja a la sala común, donde ya se encuentra su amada: Parvati Patil discute acaloradamente con Ron Weasley.
Pero, como atraída por un imán, se vuelve hacia Nev y le sonríe seductoramente, dejando al pelirrojo y a sus gritos.
—¡Neeev! —chilla, corriendo a sus brazos (y Longbottom la flipa, la flipa, la flipa mucho).
—¿Pero a dónde vas! —brama Weasley, con la mandíbula casi desencajada del cacho de corte que le ha metido la otra.
—¡Métete en tus asuntos, idiota! —le grita ella. Agarra la mano de Neville, que está un poco en plan "¡Jorl! Oô" y tira de él hacia fuera de la sala común.
Y ahora, llegados a este punto, os pregunto¡oh, afanados lectores¿A dónde creéis que fueron? Va... Que es fácil... Os doy cinco segundos:
5
4
3
2
1
(Para los que pensaron que a la Sala de los Menesteres) ¡SÍÍÍ¡LO HABÉIS ACERTADO NO ME LO PUEDO CREER¡Sois los mejores¡Os quierooo! os achucho cuan niña achucha a sus peluches de trapo (y lo siento por vuestras espaldas U)
(Para los que pensaron otra cosa o simplemente no pensaron nada o no sé... Para los otros, vaya) ¡NO ME LO PUEDO CREER¡Panda de incultos¡Que sois una panda de incultos!... ¡Sois los mejores¡Os quierooo! os achucho cuan niña achucha a sus peluches de trapo (y lo siento por vuestras espaldas U) (Hombre, encima de que leéis esta guarrería no os voy a dejar sin achuchar... ¬¬U aish...).
Efectivamente, derechitos a la Sala de los Menesteres.
Y bueno, afanados lectores, no me voy a detener en explicar las mil y una exquisiteces a las que se dedicaron nuestro protagonista (que esta vez no es Potter... ofús, qué aliviazo) y la guapa más guapa y pija más pija de Hogwarts (sí, ya sé que algunos creéis que la más pija es Parkinson, pero en realidad no... ¿que por qué¡PUES PORQUE LO DIGO YO Y PUNTO EN BOCA¡HOMBRE YA!), sólo os diré que al final Neville acabó exhausto, porque, quitando el pequeño detallito insignificante del principio... ejem ejem... (imagináos lo que pasó... yo no sigo nada... silba...), luego el chaval se portó, se portó. Y si no os lo creéis preguntádselo a Parvati.
Ah, y que no se me olvide. No so creáis que Hannah y Ginny se quedaron sin Nev. ¡Nooo! Nev es un chico solidario (y yo soy una escritora de fics chorras solidaria con Nev): Con Ginny quedó cuando Ron no miraba (Harry les dejó la capa invisible. "¡Qué buen chaval!" pensaréis... ¡Pues no! Se la dejó para ver si así se quitaba a Ginny de encima, que la pava está todo el puto día babeando encima de él... Y así el poder ir a babear detrás de Cho... en fin... ironías de la vida...); y con Abbott... en fin... a Abbott dejó que lo asaltara detrás del invernadero 7, que está todo muy oscurito y muy en plan romanticón y taaal. Y tanto con la pelirroja como con la Britney Spears se lo pasó de arte.
¡Ala, Nev¡Te quejarás...¡Menudos homenajes que te has pegado!
Y desde entonces vivió feliz para el resto de sus días.
(Os contaré un secreto: Nev no duró mucho más... Todo el mundo sabe que en el séptimo libro la Warrowling se lo va a cargar... xDDD).
¡Ehhh¡Acérrimos lectores (o como se diga...)! Sois fabulosos, superchachis, supergryffindors y todo todo todo... porque hay que ser muy todo para seguir aguantándome. Ala, y seguid con los reviews, tanto para decirme "guay guay, sigue así y sufriremos todos una lesión cerebral irreversible" o "pufff... sigue así y no te va a volver a leer nadie... así que mejor te vas prejubilando güapa..." lo que quiere decir que se aceptan críticas buenas y malas (de las de arriba ni yo sé deciros cuál es la buena y cuál es la mala... pero en fin...). Y ala, ya sabéis: a vivir la vida y a reirse mucho que son 3 días... (sobre todo para Nev, que ya sabéis... xDDD). ¡Un besituuu: muaka! Locatis.
p.d.: Por ahí he cogido cierta frasesilla... y para que no haya denuncias ni nada por el estilo pues...: "¡PUES PORQUE LO DIGO YO Y PUNTO EN BOCA¡HOMBRE YA!" lo de punto en boca y hombre ya no me pertenece. Se lo ha inventado Jose Luis Moreno o quién sea para "Aquí no Hay quien Viva". Ala, y siempre aparece en boca de Loles León. Yastá.
