Niv Riddle: Hola Niv gracias por tus ánimos. Y si, en este capítulo se forma el encuentro entre el trío amoroso (supongo que es esa parte como la que consideras tu favorita) aunque solo hay un pequeño adelanto. Para saber el resto tendrás que esperarte al siguiente capítulo de Sueño. Muajajajaja. Espero que te guste el resultado. Y si no te gusta también dímelo. Acepto de todo sugerencias, criticas, comida, dinero...
Náyades: ¡Hola amiga!. Elegí a los gemelos para representar el papel de Puck, porque pensé que eran los más adecuados. Aunque al hacerlo he tenido que acoplar sus personalidades a la historia. Con la consecuencia de que también he tenido que desviarme del argumento original. Puck es travieso, y le gusta gastar bromas pero también es servicial a su rey. En cambio los gemelos van (digamos) más a su aire. Quiero decir que ¿tu te los imaginas obedeciendo fielmente a Ron?.Yo tampoco. Solo acuérdate de la historia original, cuando leas el capítulo entenderás de lo que estoy hablando.
Y ya nada más que decir solo que este va a ser el penúltimo capítulo de Sueño, y también el más largo de los he escrito hasta la fecha. Solo les diré que espero que disfruten el capítulo y que sigan dejando reviews, que a pesar de ser pocos son muy bien recibidos. Muchas gracias.
Cap 4.
Pansy se sentía como en un sueño, no porque le gustara el beso que Harry le estaba dando, sino porque no había asimilado del todo lo que estaba pasando.
Potter, me esta besando- pensó Pansy con los ojos abiertos como platos, pero sin responderle al beso. ¡Un momento!. ¡¿Potter me esta besando!. Y fue en ese momento cuando Pansy fue realmente consciente de lo que estaba ocurriendo.
Pero antes de que Pansy pudiera hacer algo por separarse de él, Harry termino el beso con un último roce. Después de mirarla a los ojos y dedicarle una sonrisa, se separo de ella un poco. Después de eso, el primer impulsó de Pansy fue tocarse los labios. Y entonces se dio cuenta de que realmente eso había ocurrido. Su siguiente reacción fue ponerse roja, no solo de vergüenza sino también de rabia.
¿Con que derecho la había besado?- pensaba cada vez más roja si es que eso esa posible. Es más ¿por qué la había besado?.
¡SE PUEDE SABER PORQUE ME HAS BESADO!- le gritó furiosa.
Harry al verla tan furiosa, se alejo un poco de ella, y le pidió disculpas. -Pansy yo... lo siento, no lo he podido evitar. Pero tampoco me arrepiento de lo que he hecho, es más lo volvería ha hacer. Y sabes por que. Por que te quiero- le dijo recobrando la confianza en si mismo y dando unos pasos hacía delante.
Pansy no estaba segura de haber oído bien.
O.o ¡¿Qué!.
Qué te quiero- le volvió a repetir Harry. No sé como no me di cuenta antes, he estado tan ciego todo este tiempo. Siempre has estado a mi lado y nunca me di cuenta de que... Hay Harry se quedo callado, mirando a Pansy fijamente, la cual no sabía como tomarse todo aquello.
Pansy- dijo Harry haciendo ademán de acercarse a ella de nuevo, pero se lo pensó mejor y se quedo donde estaba. Yo... yo te amo. Esta noche, cuando me he despertado y te he visto a mi lado me he dado cuenta de todo, todo este tiempo he estado engañado. No era de Ginny de quien estaba enamorado sino de ti. Pero si me das una oportunidad, te prometo que no te arrepentirás.
Para Pansy oír eso fue demasiado. Una de dos o Potter se había comido alguna valla de esas que hay en el bosque y le había afectado de tal forma que le provocaba alucinaciones o era muy buen actor y le estaba gastando una broma realmente pesada. Probablemente lo segundo- pensó Pansy. Así es que decidió acabar de una vez por todas con esa estúpida broma.
Potter te crees que soy idiota. De verdad pensabas que me iba a tragar ese cuento. Que tu estas enamorado de mi- dijo señalándose con el dedo.
No sabía que tenías un sentido del humor tan retorcido. Y pensar que he estado a punto de ayudaros- dijo Pansy mientras miraba a Harry con el ceño fruncido y los brazos bruzados.
Pero Pansy...
No Potter, se acabó- le cortó ella. Esta noche he perdido al hombre que amo (en el sentido más literal de la palabra), estoy cansada tanto física como moralmente, y te puedo asegurar que no estoy de humor para aguantar tus bromas. No se que motivos tienes para querer hacerme esto, pero desde luego no tiene ninguna gracia. ¡Adiós Potter!- dijo antes de dar media vuelta y marcharse por donde había venido.
Harry se quedo como clavado en el suelo, la mujer que amaba le acababa de rechazar, y no solo eso sino que además no le creía. Harry sintió como el alma se le partía en mil pedazos. Pero no el no podía quedarse así, tenía que hacer algo, no podía permitir que Pansy pensara que se había burlado de ella por que no era verdad, él la amaba y desde luego no estaba dispuesto a renunciar a ella. Tenía que conseguir que le creyera, y con esta decisión y sin ni siquiera dirigir ni una mirada a Ginny se marcho por el mismo camino por donde Pansy se había ido.
Y así la pobre Ginny se quedo sola. Pero cuando aun no hacía ni un minuto que Harry se había marchado, Ginny se despertó sobresaltada.
Que pesadilla tan horrible- pensó con la respiración aun agitada. Parecía tan real.
Ginny lo nuestro se acabó- le decía Harry con una mirada inexpresiva.
-¿Qué? ¿Porqué?. Harry por que dices eso.
- Tenias razón hay demasiados problemas. Nunca podremos estar juntos, Malfoy nunca lo permitiría. Es mejor que lo dejemos.
-¡No Harry no me dejes te quiero, Harry por favor no te vallas!- gritaba Ginny intentando alcanzar a un Harry que cada vez estaba más lejos.
-¡¡Harry!- gritó Ginny por última vez antes de despertar.
Ginny tranquilízate- se decía mentalmente recordando la pesadilla. Solo ha sido un sueño, un estúpido sueño. Harry nunca te dejaría él te quiere. Y muy pronto estaréis juntos y nadie os podrá separar jamás.
Pero cuando Ginny giró la cabeza hacía donde había estado durmiendo Harry descubrió que no estaba. Asustada se levanto de golpe y empezó a buscarlo por los alrededores. Tal vez se había despertado y había ido a dar una vuelta. Pero al ver que no aparecía por ninguna parte y que tampoco le contestaba se empezó a preocupar.
¿Y si le había ocurrido algo?- se preguntó. O vamos Ginny no seas paranoica, que le podría haber ocurrido que le atacara una ardilla rabiosa. Se rió ante este pensamiento. Si es verdad, pero si no le ha ocurrido nada ¿dónde estaba?.
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Mientras en otra parte no muy lejos de donde estaba Ginny, Ron se paseaba de un lado a otro bastante agitado. Lo que ese chico le había dicho a la mortal, que cuando despertó y la vio a su lado, se dio cuenta de que la quería. No paraba de darle vueltas en la cabeza. Y por enésima vez, volvió a recordar lo que había visto.
Flasback
Ron se sentía satisfecho consigo mismo, su plan había salido como él (o la menos eso pensaba) esperaba. Gracias a esa pequeña flor y a los dos morales, por fin le podría demostrar a Hermione que no era un inútil. Ahora lo único que tenía que hacer era esperar a que el mortal se despertara, el néctar de la flor que le habían aplicado en los párpados los duendes harían el resto. Momento en el cual Ron iría a buscar a Hermione para explicarle lo que había hecho y mostrarle a la feliz pareja. Ante esto no pudo más que sonreír de oreja a oreja.
Pero como aun era pronto, decidió que por una vez que estaba libre de compromisos, y dado que no tenía nada que hacer se fue a dar un paseo por los alrededores.
Hacía mucho que no venía por aquí- pensaba mientras disfrutaba del silenció de la noche. Por eso cuando oyó una voz que provenía de detrás de unos arbustos se sobresalto un poco. Decidió acercarse, ya que le picaba la curiosidad. Quería saber quien era. Pero cuando se acercó y vio lo que estaba pasando se quedó mudo.
Allí habían dos mortales. A la humana la reconoció enseguida, se trataba de la joven que había sido despechada por aquel rubio, pero quien era el otro. Y la chica que estaba durmiendo cerca de ellos. No entendía nada, así es que decidió acerarse un poco más, ya que desde donde estaba no escuchaba bien de lo que hablaban.
Pansy- oyó como le decía el chico. Yo... yo te amo. Esta noche, cuando me he despertado y te he visto a mi lado me he dado cuenta de todo, todo este tiempo he estado engañado. No era de Ginny de quien estaba enamorado sino de ti. Pero si me das una oportunidad, te prometo que no te arrepentirás.
Ron vio como la mortal simplemente se le quedaba mirando con cara de incredulidad.
Potter te crees que soy idiota- le contestó la chica. De verdad pensabas que me voy a tragar ese cuento. Que tu estas enamorado de mi- le dijo señalándose con el dedo.
No sabía que tenías un sentido del humor tan retorcido. Y pensar que he estado a punto de ayudaros- le contesto ella mirando al moreno con el ceño fruncido y los brazos bruzados.
Pero Pansy...
-No Potter, se acabó- le cortó ella. Esta noche he perdido al hombre que amo, estoy cansada tanto física como moralmente, y te puedo asegurar que no estoy de humor para aguantar tus bromas. No se que motivos tienes para querer hacerme esto, pero desde luego no tiene ninguna gracia. ¡Adiós Potter!-le dijo antes de dar media vuelta y marcharse.
Ron vio como la mortal se marchaba y como el otro se quedaba como una estatua, viendo como se alejaba la chica hasta que la perdió de vista. Al poco el chico de gafas salió de su ensoñación, y sin ni siquiera mirar a la mortal que estaba durmiendo a poca distancia de él se marcho, detrás de la chica.
Fin del Flasback
Ron se sentía desconcertado. ¿Y si los duendes se habían equivocado, ¿y si le habían aplicado el néctar a otra persona?. Le preocupaba que sus sospechas fueran ciertas. Así es que llamó a los duendes tenía que hablar con ellos.
¡Fred! ¡George!- les llamó. ¡Vengan! ¡Es urgente!
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Media hora antes:
Fred y George los cuales estaban sentados en las ramas de un árbol, y desde donde vigilaban a la compañía de teatro acababan de perfilar su plan.
Ya sabes lo que tienes que hacer. Tú le alejas del grupo, y yo me encargo del resto- le dijo George a su hermano.
De acuerdo- fue lo único que dijo Fred antes de desaparecer.
George desde lo alto del árbol observo como Fred se acercaba al mortal que habían elegido para una de sus bromas. Después de comprobar que Fred estaba llevando a cabo su parte del plan, George se fue al lugar que habían acordado, en donde él haría el resto del trabajo. Pero mientras esperaba a que su hermano llegara con su victima, se le ocurrió una gran idea. Era incluso más retorcida que la que iban a hacer y en la que el mortal era una parte muy importante. Esto puede llegar a ser más divertido de lo que pensábamos en un principio- pensó mientras se le formaba una sonrisa maquiavélica en la cara.
Después de despedirse de su hermano, Fred se acerco al grupo, el cual seguía ensayando. Se les quedo observando durante unos segundos, antes de fijar su atención en el mortal que habían elegido para "divertirse". Es perfecto- pensó mirándolo de arriba a bajo y con una sonrisa de oreja a oreja.
Neville estaba apoyado en el tronco de un árbol repasando su papel en la obra, cuando le pareció oír un silbido. Se giró extrañado mirando hacía donde parecía que procedía el sonido, pero no vio nada ya que esa parte del bosque estaba muy oscura.
Debe haber sido algún búho o alguna ave nocturna- pensó quitándole importancia y volviendo otra vez a su papel. Pero cuando aun no había terminado de leer la primera frase de su dialogo, volvió a oír el mismo silbido, solo que esta vez más cerca. Neville giró la cabeza tan bruscamente que se hizo daño en el cuello.
Otra vez ese silbido- pensó mirando de nuevo hacía el mismo lugar oscuro de antes. Y por tercera vez lo volvió a escuchar.
Esta vez estaba seguro de que no eran alucinaciones suyas, lo había oído de nuevo. Miró hacía sus compañeros para ver si ellos también lo había escuchado. Pero al mirarlos se dio cuenta de que no habían escuchado nada, ya que seguían ensayando como si tal cosa.
Eh... chicos, chicos- les llamaba Neville. Pero no sirvió de nada. Dean y Colin estaban muy metidos en su papel, y Seamus estaba atento a cada falló de la pareja. Ante la falta de atención de sus compañeros, Neville se sintió un poco ofendido.
Y entonces lo volvió a oír más cerca incluso que antes. Miró por última vez a sus amigos para ver si por fin lo habían oído, pero vio que seguían sin escuchar nada. Así es que armándose de valor, se fue el solo hacía el lugar de donde provenían los extraños silbidos.
Eso es ven aquí- pensó Fred viendo como se acercaba Neville hacía donde estaba él.
Fred volvió a silbar, mientras se alejaba un poco más. Neville le seguía, sin darse cuenta de que el camino se iba haciendo más frondoso y oscuro.
Cuando se quiso dar cuenta, se encontraba en lo más profundo del bosque. O al menos eso pensaba él. Por que en realidad estaba a solo unos metros de sus amigos. Pero como esa parte del bosque era tan frondosa y al ser de noche le daba un aspecto un tanto lúgubre.
Entonces Fred volvió a silbar. Vamos ven aquí, solo unos pasos más- susurro.
Neville al oír otra vez ese silbido se adentro un poco más en el bosque. A pesar de que no se sentía cómodo allí cada vez que oía ese silbido no podía evitar seguirlo. Al final llegaron donde estaba George, el cual los esperaba impaciente.
Muy bien hecho Fred- le dijo George cuando este apareció su lado.
Gracias George, ha sido pan comido, me ha seguido como un corderito- contesto este mirando a Neville.
Bien ahora viene la mejor parte- dijo George frotándose las manos y sentándose en una rama que estaba justo encima de la cabeza de Neville.
El silbido ha cesado- pensó Neville prestando atención para ver si lo volvía a oír. Quería saber quien o que producía ese silbido.
George aprovechando que Neville estaba parado justo debajo suyo decidió que era el momento perfecto.
Y así fue, de repente a Neville le salió una barba alrededor de la cara, el pelo le creció de una manera desmesurada y le salieron unas grandes orejas de burro encima de la cabeza.
Pero Neville no pareció darse cuenta del cambio. Únicamente se rasco la cara porque le picaba un poco. Ya no lo oigo- pensó Neville rascándose la mejilla derecha.
Fred al ver lo que su hermano le había hecho al mortal, comenzó a reírse de una manera escandalosa y desenfadada, mientras se sujetaba la tripa. No sabía que le hacía más gracia si el aspecto que tenía el humano o el hecho de que no se hubiera dado cuenta de lo que le había ocurrido.
¿Te ha gustado el truco?- le pregunto George.
Me ha encantado- le contestó este cuando consiguió calmarse un poco.
Pues se me ha ocurrido algo muchísimo mejor.
¿El que hermano?
Pues había pensado que...
Pero no pudo terminar la frase, por que de repente oyeron como el rey les llamaba. ¡Fred! ¡George! ¡Vengan! ¡Es urgente!
Justo ahora que nos estábamos divirtiendo- dijo Fred chascando la lengua.
No te preocupes hermano la diversión no ha hecho más que empezar- le contestó George.
¿A que te refieres? ¿Qué tienes en mente?
Ahora no puedo contártelo. Fred necesito que me hagas un favor. Necesito que me disculpes ante el rey, ahora no te puedo acompañar. Tengo que hacer algo importante.
Pero... Fred miró a su hermano extrañado, no era normal en el ese tipo de comportamiento.
Luego te lo contaré todo, ahora no puedo- le dijo George. ¿Puedes hacerme ese favor?
Si tranquilo te disculpare ante el rey.
Gracias- le dijo antes de desaparecer.
Espero que valga la pena- pensó Fred antes de desaparecer también.
Y allí se quedo el pobre Neville sin saber como volver con sus amigos y con un horrible picor de cara.
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¡Fred! ¡George! los volvió a llamar Ron. ¿Dónde están estos duendes cuando se les necesita?- pensó empezando a perder la paciencia. Pero justo cuando iba a volver a llamarlos, al lado de Ron apareció Fred.
Aquí estoy su majestad uno de sus más fieles súbditos- dijo Fred haciendo una reverencia burlona.
No estoy de humor para sus burlas- le contestó Ron enfadado.
¿Dónde esta tu hermano?- le preguntó al darse cuenta de que había venido el solo. No era normal que viniera uno solo, siempre iban juntos a todas partes.
Oh... mi hermano le presenta sus más humildes disculpas. El pobre se encontraba un poco indispuesto- le dijo intentando parecer serio.
Ya veo. Espero que no sea nada grabe. Ron no sabía si creérselo, no le extrañaría que fuera alguna de sus tretas. Juntos eran peligrosos, pero separados eran más difíciles de controlar. De todas formas esa no era su principal preocupación ahora.
Bien- dijo Ron carraspeando. ¿Se acuerdan del mortal al que tenían que aplicar el néctar?
Si claro que me acuerdo- le contestó Fred. ¿Qué ocurre algo? ¿Es que el mortal se ha despertado y el néctar no ha hecho efecto?
Si creo que si ha hecho efecto- contestó Ron acordándose de lo que había visto.
Lo que quiero que me digas es si recuerdas como era físicamente el mortal. Como iba vestido o el color de pelo.
El como iba vestido no lo recuerdo, no preste atención pero si que recuerdo su color de pelo. Era moreno.
Ron al oír eso se le pusieron los ojos como platos. Has dicho que era mo... moreno- dijo mientras le daba un tic en el ojo.
Sí, era moreno- le contestó Fred encogiéndose de hombros. No entendía porque le daba tanta importancia a eso.
Y la chica que estaba durmiendo con él pelirroja- le volvió a contestar sin darle la mayor importancia.
Sus sospechas se habían confirmado, se habían equivocado de humano.
¿Por qué lo pregunta?- le pregunto Fred.
Qué que ¿por qué lo pregunto?- le contesto intentando controlar las ganas que tenía de ponerse a gritarle.
¡Pues porque se han equivocado de mortal!- le gritó Ron sin poder contenerse.
¿Cómo que nos hemos equivocado?- le preguntó confuso Fred. Usted nos dijo que lo encontraríamos durmiendo. Y así fue cuando llegamos estaba durmiendo. Nosotros hicimos nuestro trabajo, que era aplicarle el néctar. Si hay otro mortal durmiendo esta noche en el bosque no es nuestra culpa- le contesto Fred ofendido.
¬¬ aunque me moleste admitirlo, tienes razón- le contesto Ron. Vosotros no tenéis la culpa.
Claro que no- le contesto Fred cruzándose de brazos.
De todas formas no puedo dejarlo así, hay que arreglarlo.
¿Por qué? ¿De quien se ha enamorado? ¿De una lechuza?- dijo Fred aguantándose la risa.
No, es peor que eso. Se ha enamorado de la mortal que ha sido despechada por al que "supuestamente" teníais que haber aplicado el néctar.
Oh vaya.
Si uu .
Bueno y por que no lo dejamos así, al fin y al cabo ese mortal no estaba enamorada de ella. Le hemos hecho un favor. Ahora si que hay alguien que la quiere- le dijo Fred.
Ron se le quedo mirando analizando lo que Fred acababa de decir. Uhm... no es mala idea, pero hay un problema.
¿Cuál?
Que ella no esta enamorada del moreno, sino del otro.
Entonces lo único que tenemos que hacer es aplicarle a la mortal el néctar y así se enamorara de él- le dijo Fred como si fuera lo más normal del mundo.
No, no podemos jugar con esas cosas- le reprocho Ron.
Pues usted lo esta haciendo- le contesto Fred.
No es lo mismo, yo lo que estoy haciendo es ayudarla a conseguir el amor de su vida.
Si usted lo dice.
¬¬
Igualmente esto hay que arreglarlo. Fred ¿tienes la flor?
No no la tengo, majestad.
Bueno no importa. Ves al prado y consigueotra.
Muy bien majestad- dijo antes de irse.
Este asunto me esta dando dolor de cabeza - dijo Ron mientras se masajeaba las sienes.
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Después de unos cuantos intentos, Neville consiguió encontrar el camino de vuelta.
Por fin- pensó ya creía que me iba a pasar aquí toda la noche. Ya oigo la voz de Seamus. Cuando les cuente lo que me ha pasado no se lo van a creer.
Después de la misteriosa desaparición de Neville, de la cual sus amigos habían tardado un poco en darse cuenta, se pusieron a llamarlo.
¡Neville!- gritaban los tres, cada uno por un lado distinto.
¿Y si le han secuestrado?
Seamus no digas tonterías. ¿Quien lo iba a querer secuestrar?- le dijo Dean.
¿Cómo que quien?. Pues la competencia por supuesto. Si nos falta aunque solo sea uno de los actores, ya no podremos representar la función- dijo Seamus convencido de sus palabras.
Seamus- dijo Colin girándose la cabeza y mirándole con el ceño fruncido ¡Deja de decir tonterías! ¡¿Quieres!. Ahora lo que tenemos que hacer es encontrar a Neville.
Pero no tuvieron que buscar mucho más por que de repente oyeron las pisadas de alguien que se acercaba. Automáticamente, los tres miraron hacía donde provenían los pasos.
¿Neville eres tu?- pregunto Dean.
Si soy yo chicos- oyeron como les contestaba este.
Al oír la voz de Neville, los tres suspiraron aliviados.
¿Neville donde te habías metido?. Menudo susto nos has dado- dijo Seamus.
Lo siento chicos no era mi intención, pero cuando os cuente lo que me ha pasado no os lo vais a creer- contesto este a medida que se iba acercando y su silueta se iba haciendo visible.
Pero cuando Neville salió al claro en donde se encontraban sus amigos, y le vieron se quedaron horrorizados. Ese no era Neville era un monstruo.
¡¡¡AAAHHHH!- gritaron los tres asustados.
Neville no entendía porque gritaban de esa manera.
Chicos- dijo haciendo un ruido parecido a un rebuzno.
¿Que os pasa por qué gritáis?- les pregunto acercándose a ellos.
Dean, Colin y Seamus al ver que el monstruo se acercaba a ellos, volvieron a gritar y salieron corriendo.
¡Os lo dije os dije que nos harían algo para estropearnos la obra!- gritaba Seamus mientras corría como alma que lleva el diablo.
¡Seamus cállate y corre!- le contesto Dean.
¡Chicos! ¿a dónde vais?- dijo Neville intentando seguirlos, pero ellos eran más rápidos (el pánico que sentían también ayudo) y les perdió de vista.
Y así Neville se quedo allí sin entender el porque de esa repentina huida.
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En el Bosque de la Hadas, la fiesta ya había llegado prácticamente a su fin. La mayoría de los sátiros, duendes y hadas ya se habían marchado. Solo quedaban unos pocos, entre los que se encontraban algunos fieles súbditos de la reina.
Pimienta- dijo Hermione a un hada que había allí cerca. Preparadme el lecho, me quiero ir a dormir, estoy cansada- termino de decir reprimiendo un bostezo.
Enseguida majestad- le contesto el hada haciendo una reverencia lo que provoco que la corona de flores que llevaba se le fuera hacía la cara.
Después de colocarse bien la corona de flores, la pequeña hada se fue a comunicarle a las demás hadas el deseo de la reina. No tardaron ni dos minutos en tener listo el lecho. Este estaba cubierto de flores silvestres hojas y plumas. Y en cada una de las esquinas había una enredadera que tenían la función de levantar la cama, ya que estaba situada entre las ramas de un árbol.
Su majestad puede ir a descansar cuando lo desee- le comunico la misma hada.
Gracias- le respondió Hermione.
Herminone se acostó en el lecho que le habían preparado, pensando en Ron. Tal vez he sido demasiado brusca con él. No debería haberle tratado tan mal. Cuando vuelva le pediré disculpas- pensaba mientras le ascendían la cama. Al poco se quedo dormida.
La hadas también se fueron a descansar, pero sin dejar de velar el sueño de su reina. Todo quedo en silencio, momento que alguien aprovechó para entrar en acción.
Ahora es la mía- pensó cierto duende pelirrojo. Aprovechando que todos estaban durmiendo, decidió que ese era el momento perfecto para actuar. Y así lo hizo, se acerco sigilosamente a su victima. No quería despertar a nadie.
Buenas noches querida reina- susurró en voz baja mirando a Hermione que dormía placidamente. Os tengo reservada una gran sorpresa- le volvió a susurrar.
Acto seguido saco la flor de Cupido y le aplico una gota de néctar en cada párpado.
Pero tuvo que volver a esconderse porque oyó el aleteo de un hada que pasaba por allí. Después de que el hada pasara de largo, volvió a salir de su escondite. ¡Uf! Por poco me descubren- pensó George. Creo que será mejor que me valla, no sea que aun me cojan. Después de dirigirle una última mirada a la reina, George desapareció con un sonoro ¡plop, y se fue a buscar a la otra pieza de su plan.
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Mientras tanto Fred que ya había vuelto con otra flor de Cupido se encontraba junto con Ron, el cual había decidido acompañarle no fuera que hubieran más mortales esa noche durmiendo en le bosque y se volviera a equivocar.
Y así rey y duende se encontraban en esos momentos frente al que en un principio tenían que haberle aplicado el néctar.
¿Cree que ese color de pelo es natural?- le pregunto Fred.
Ron se quedo observando el cabello de Draco. La verdad es que tenía el cabello muy claro. Pero ellos no estaban allí para averiguar si su color de pelo era natural o no, estaban allí para arreglar el enredo que por accidente los duendes habían causado.
Fred no estamos aquí para averiguar si ese color es autentico hemos venido aquí porque...
Si ya se sé- le corto Fred agitando la mano y poniendo cara de ya conozco la historia. Mientras que Ron le miraba con el ceño fruncido. Le molestaba que le interrumpieran cuando estaba hablando.
Pues como ya sabes a lo que hemos venido ya sabes lo que tienes que hacer- le contesto Ron señalando a Draco con la cabeza.
Fred se acerco a Draco y le aplicó las dos famosas gotas de néctar en los párpados. Y alejándose de el- dijo ya esta.
Bueno ahora que ya hemos hecho lo que veníamos a hacer ¿puedo marcharme?- le pregunto con cara de no haber roto un plato en su vida.
No- le contesto Ron tajante. Aun hay algo que tenemos que hacer.
¿El qué?- le pregunto Fred un poco cansado de toda esa historia.
Tenemos que anular el efecto de la flor en el otro mortal.
¿Y como vamos a hacer eso?
Pues de la misma forma en la que has aplicado el néctar de la flor de Cupido- le contesto. Ron continuo hablando. Como ya sabes con la flor de Cupido se consigue el amor de una persona, pero igual que se puede conseguir se puede perder.¿Cómo te estarás preguntando? Pues muy fácil, cerca de donde están las flores de Cupido, hay otra flor con las mismas características que esta solo que es de color blanco. Esta flor tiene el poder de anular los efectos de la flor de Cupido. Se aplica de la misma forma cuando la persona esta dormida se le ponen sobre los párpados una gotas de néctar, y así automáticamente se anula el poder de la otra flor.
Fred estaba impresionado. Realmente el rey era un erudito en ese tema. Fred le iba a contestar, cuando oyeron a alguien que se acercaba. Decidieron quedarse a observar para ver lo que ocurría (hay que ver lo cotillas que son)
Y no hacía ni un minuto que Ron y Fred se habían escondido que vieron como aparecía Pansy. Y por lo que parecía estaba bastante enfadada.
Estaba tan ofuscada, que no se dio cuenta que Draco estaba allí y tropezó con él. Con lo que la pobre se dio de bruces contra el suelo. ¡¡Ah!- gritó cuando se calló.
¡¿Qué! ¿Qué pasa?- se despertó Draco sobresaltado. Al mirar abajo vio a Pansy que estaba echada sobre sus piernas.
¡Ay! Se quejo la chica antes de levantarse. Mientras se preguntaba con que había chocado. Pero cuando consiguió incorporarse, sentándose sobre sus rodillas, se le vino el mundo encima. ¡Dra... Draco! consiguió balbucear.
¿Te encuentras bien?- le preguntó este bastante preocupado mientras la ayudaba a levantarse.
Sí, creo que si- le contesto Pansy sorprendida por la preocupación de este. Lo normal hubiera sido que hubiera empezado a gritarle y a llamarla inútil como hacía desde un tiempo, más exactamente desde que Weasley se cruzo en su camino.
Pansy estaba tan impactada por el comportamiento de Draco, que ni se acordaba de quien estaba huyendo. Pero su memoria no tardo en refrescarle el porque de su huida, ya que al poco apareció un agitado Harry. Al cual después de haber salido detrás de Pansy le había costado dar con ella, y cuando por fin la encontró tuvo que echar a correr para poder alcanzarla.
Pansy- dijo Harry apoyando su mano derecha en el tronco de un árbol mientras intentaba normalizar su respiración. Tenemos que hablar- termino de decir un poco más calmado.
A Pansy se le estaba acabando la poca paciencia que le quedaba. ¡Por Dios Potter aun esta con eso!- le gritó enfadada. ¿Cuántas veces voy a tener que decírtelo?. No-te-creo- le deletreo Pansy para ver si así ya se daba por enterado. No voy a caer en tu estúpida broma. ¡Vuelve con Weasley y déjame en paz!- le volvió a gritar.
Pero Harry no se movió, más bien todo lo contrarío se acerco hacía donde estaban Pansy y Draco.
No voy a moverme de aquí hasta que me escuches- le respondió firme.
Pero entonces Draco que había estado callado hasta el momento hablo. Que no la has oído Potter márchate- le contesto Draco poniéndose al lado de Pansy.
Pansy por favor escúchame- le volvió a decir Harry con mirada suplicante y haciendo caso omiso a las palabras de Draco.
¿Es que no me has oído Potter? ¡Te he dicho que te largues!- le volvió a gritar Draco.
No te metas Malfoy. No estoy hablando contigo- le contesto Harry enfadado.
Todo lo que tenga que ver con mí prometida me incumbe- le respondió Draco pasando un brazo alrededor de la cintura de Pansy y acercándola a él de una manera protectora.
Ante esto Pansy no supo como reaccionar. Simplemente levanto la cabeza y se quedo mirando a Draco el cual seguía observando a Harry con el ceño fruncido.
Pansy no estaba segura de haber oído bien, la había llamado su prometida. Y no solo eso, sino que además la estaba protegiendo de Potter. Nada de todo eso tenía sentido, pero si solo hacía unas horas la había rechazado y le había dicho que estaba enamorado de Weasley. Y ahora de repente... Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por Harry que volvió a hablar.
¿Has dicho tu prometida?- dijo Harry con sorpresa. Si no recuerdo mal habíais roto vuestro compromiso porque te habías enamorado de Ginny- le dijo con una ceja levantada.
Ese es un error que pienso arreglar. En cuanto volvamos a Hogsmeade hablaré con mi padre para que Pansy y yo nos podamos casar-dijo Draco acercándola un poco más.
Siento decirte Malfoy que llegas tarde para eso. Tuviste tu oportunidad con ella y la dejaste escapar. No la supiste valorar en su momento. Tu no sabrías hacerla feliz, pero yo si porque la amo.
¿Qué tu la amas?. Por favor Potter no me hagas reír. Todo el mundo sabe que tu estas enamorado de Weasley. Harry le iba a replicar, pero fue callado por una muy enfadada Pansy.
¡Basta! ¡Ya he oído suficiente!- dijo mientras se zafaba de Draco. Los dos chicos la miraron sorprendidos.
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Ginny se sentía perdida y desorientada, no solo no encontraba a Harry, sino que además no sabía salir de allí. ¿Y si Harry se había arrepentido? ¿Y si el sueño que había tenido se había hecho realidad?. El simple hecho de pensarlo le producía escalofríos. Pero enseguida desecho esa idea de su cabeza, oh vamos Ginny no pienses eso otra vez. El te quiere se volvió a recordar. Llego a un camino que se dividía en dos, y no le quedo otra opción que elegir uno. Así es que después de pensarlo decidió ir por el camino de la izquierda.
Pero cuando a un no había dado ni tres pasos, por ese nuevo camino. Oyó la voz de Harry. Harry- pensó feliz. Por fin lo había encontrado. Y corrió a su encuentro. Pero cuando solo le faltaban unos pasos para llegar, oyó la voz de Pansy que gritaba ¡Basta! ¡Ya he oído suficiente!. Pansy ¿que hace aquí?- pensó. Así es que decidió acercarse con un poco de cautela, no sabía con que se iba a encontrar. Cuando estuvo más cerca vio a Pansy, Malfoy y Harry.
Ya lo entiendo todo- oyó como hablaba Pansy os habéis unido los dos para burlaros de mi ¿verdad?- dijo mirando a Draco y a Harry. Pensasteis que sería divertido reíros de mi un rato. Pues siento deciros que vuestro plan no ha funcionado.
No Pansy te equivocas- le dijo Harry yo no me estoy burlando de ti. Cuando yo te dije que te amaba lo decía de verdad.
Y entonces justo detrás de ellos, oyeron un gritó. Automáticamente los tres se giraron y vieron aparecer la figura de Ginny, la cual tenía una cara de sorpresa.
¿Qué es lo que has dicho Harry?- le preguntó Ginny. No se podía creer lo que Harry había dicho.
Lo que oyes, le dijo Harry sin pizca de emoción al mirar a Ginny. Estoy enamorado de Pansy. A Ginny no le salían las palabras, simplemente abría y cerraba la boca como un pez fuera del agua.
Oh fantástico- oyó como decía Pansy. Tu también estas metida en esto.
¿De que hablas?- le pregunto Ginny apartando la mirada de Harry.
Lo sabes perfectamente. No te hagas la tonta- le dijo Pansy.
Pansy, no se de que me estas hablando. Lo único que se –dijo apartando la mirada de Pansy y fijándola en Harry es que mi prometido me acaba de decir que esta enamorado de ti- dijo frunciendo el ceño.
Y es verdad- le contesto este estoy enamorado de Pansy.
Pero... Harry que te ocurre ¿por qué me dices eso?
Sabéis les corto Pansy harta de esa pantomima deberíais ser actores los tres. Es la actuación más realista que he visto en toda mi vida. Lastima que no funcione conmigo- termino de decir haciendo ademán de irse.
No Pansy espera- dijo Harry intentando evitar que se fuera otra vez. Pero no pudo hacer nada para evitarlo, porque Ginny le había cogido del brazo.
Momento que Draco aprovechó para coger a Pansy de la mano y llevársela de allí.
Harry vio como Draco se llevaba a su Pansy. Ginny- dijo mirando a la pelirroja. ¡Suéltame!.
No hasta que no me expliques que significa todo esto- le contesto sin soltarle el brazo.
Harry arto de ella decidió cortar por lo sano. ¿Que quieres saber la verdad?. Pues muy bien te la diré. La verdad es que ya no te quiero. ¡Me oyes ya no te quiero!- le volvió a repetir Harry. Yo amo a Pansy, la amo más que a nada- termino de decir Harry soltándose de Ginny. Y ahora si no te importa, tengo que ir a buscarla. Y con esto último, dio media vuelta y se fue corriendo detrás de Pansy y Draco.
Ginny se quedo como en estado de shock sin poder reaccionar. Eso no podía estar ocurriendo. No podía ser verdad. Harry su Harry no podía estar enamorado de Pansy. No tenía sentido. Tenía que hacer algo. Y así con esa decisión, Ginny se fue detrás de Harry.
Después de que los cuatro mortales se marcharan, ni Fred ni Ron habían dicho nada. Uno porque no sabía como tomarse todo aquello y el otro porque estaba demasiado ocupado dándose cabezazos contra el tronco de un árbol.
Fred se quedo mirando como el rey se daba golpes contra el tronco. En otras circunstancias le habría parecido muy divertido, pero el verlo así de mal le daba pena. Así es que se acerco para consolarlo.
Majestad- dijo Fred no os preocupéis. Ya veréis como lo arreglamos.
¡Pero tu has visto lo que ha ocurrido!- le dijo Ron girándose de forma brusca con la frente roja y los ojos llorosos a causa de los golpes.
Si lo he visto- le contesto este de manera tranquila. Pero igual que se ha enredado también se podrá arreglar. Pero lo primero es que recuperéis la compostura.
Si tienes razón. Ante todo hay que guardar la calma- dijo Ron más tranquilo. Bien lo primer que hay que hacer es ir a buscar el antídoto.
De eso ya me encargo yo- dijo Fred.
Gracias Fred. Primero trae la flor después ya veremos que hacemos.
Si majestad- dijo Fred antes de irse.
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Mientras todo eso ocurría, Neville andaba sin rumbo fijo. Intentando encontrar el camino a casa. No entendía porque sus amigos al verle se habían ido corriendo asustados. Desde luego si era una broma no le encontraba la gracia- pensaba Neville enfadado mientras se rascaba distraídamente la cara. Pero de repente vio algo que le hizo pararse en seco.
Continuará...