Le dedico este capi a Tamie Honda, que está traduciendo "Cuando el presente conoce el pasado" al portugués... ¡qué pasada! ¿verdad? Al final del capitulo hay una nota muy importante relacionada con otra historia. ¡No me acuséis de plagio demasiado pronto, eh!

Capi sixteen: La redención de un Slytherin

Una vez Hermione terminó los hechizos sobre los dos chicos, ella y Cathy corrieron al agua, para jugar con Simon y Sarah. Draco y Harry iban a seguirlas cuando un extraño ¡plop! les detuvo.

Dándose la vuelta descubrieron que Snape acababa de aparecerse en la playa, con cara de autosatisfacción y escondiendo algo entre su eterna ropa negra. Los dos chicos se quedaron mirando para él fijamente.

-Eh... tío Severus...-se aventuró Draco- ¿no tienes calor con esa ropa?

Snape miró fijamente a su ahijado y luego al bañador que el muchacho lucía, dejando que su vista se detuviese unos segundos en el inmaculado antebrazo izquierdo del chico, tal vez con algo de envidia.

-Sí... ahora me cambio.

Movidos por la malsana curiosidad de sus casas, los dos chicos se quedaron mirando fijamente al profesor.

-Y que... ¿creéis que podré obtener algo de intimidad para quitarme los pantalones o os vais a quedar ahí todo el día?-comentó agriamente.

Draco y Harry intercambiaron una mirada. La curiosidad iba a tener que esperar.

Sin pensarlo mucho, corrieron hacia el agua, para unirse a todos los demás. Pero Snape no llegó a unírseles nunca.

Al atardecer, cuando el hambre les agobiaba y volvieron a las toallas, se encontraron con que él aún estaba allí. En lugar de la túnica negra llevaba una ligera camiseta negra... de manga larga y cuello subido y en lugar de los pantalones negros lucía un bañador de diseño idéntico al de Harry y Draco pero también de color negro.

Al percibir la mirada extrañada del grupo, se encogió de hombros y murmuró:

-¿Qué?

El resto de la tarde fue muy tranquilo, repleto de juegos y risas. Un par de horas antes del atardecer Hermione y Sarah consiguieron quitarle la camiseta a Snape (previa distracción para quitarle la varita, por supuesto), y ayudadas por las otras tres chicas lo arrastraron al agua. Sin embargo él huyó de ellas en cuanto tuvo oportunidad, apretando su brazo izquierdo contra su pecho y mirando a la distraída Cathy de reojo. En pocos segundos estaba de nuevo seco y vestido con la camiseta y los pantalones.

Sirius, Harry, Draco y Lupin no pudieron evitar echarse a reír cuando vieron la cara de derrota de las chicas descubriendo que su víctima estaba leyendo, tan tranquilo.

Al terminar de cenar las recién reunidas parejas se dividieron en grupos: Canuto, Dalia, Alexia y Remus en un grupo de rocas lejanas. Sarah, Simon, Harry, Draco y Cathy recogían las cosas para volver a casa. Snape estaba sentado en una roca, alejado de todos; y Harry vio con aprehensión que Hermione se dirigía hacia él. *****

-Hola- saludó Hermione.

-Hola... ¿porqué no estás con los demás? Están convirtiendo un simple sencillo trabajo en una verdadera fiesta.

-Éste paisaje...-murmuró la chica, señalando con un brazo el sol del atardecer-... es mucho más bonito. Me obliga a creer en un futuro mejor.

-A veces me pregunto si vale la pena esperar un futuro.

-Tu siempre tan positivo...

-Unos cuantos años como profesor pueden tener ese efecto... Empiezo a darme cuenta del verdadero significado de la palabra desaliento. Lo creas o no, me gustan los niños, sino no tendría mi propio hijo. Pero tratar de enseñarles es una responsabilidad demasiado grande. Más que ser médico, por ejemplo. No es lo mismo luchar contra una enfermedad o una herida para darle a un niño la oportunidad de llegar adulto que tratar de formar a un adulto a partir de un niño. Un mal médico puede causar la muerte de su paciente o dejarle secuelas para toda la vida, un mal maestro puede dañar a una sociedad entera. Hay demasiadas cosas que nunca me pasaron por la mente hasta que me vi al frente de una clase.

-Apuesto algo que hubo muchas otras que nunca imaginaste hasta que nació Simon.

-Tienes razón. Simon es la verdadera razón de que me gusten los niños... y tú la única por la que aún me gusta enseñar.

-¿Yo?

-La esperanza de que realmente existan brujas y brujos como tú.. esa.. necesidad de aprender, de demostrar lo que sabes.. Tú eres la razón por la que sigo enseñando.

-¿Y antes?

-¿Antes de qué?

-Antes de conocerme. Tú dabas clase mucho antes de que yo llegase al colegio.

-Pero no antes de que nacieses.. de hecho empecé a dar clases cuando tú apenas tenías tres años..

-¿Y cual fue tu motivación entonces?

-Ya te lo he dicho: tú.

-¿Me conocías?- exclamó Hermione asombrada.

-Sí. Por eso te tenía tan bien localizada cuando te fui a buscar.

-¿Porqué me conocías?- preguntó Hermione, asombrada. Snape acarició su mejilla.

-No te imaginas cuanto me alegro de que no lo recuerdes. Sólo tenías unos meses, así que es normal..

-Severus..

-¿Realmente necesitas saberlo? Es una historia triste y penosa.. la redención de un Slytherin, a manos de una Gryffindor.. ya entonces supe que serías una Gryffindor. Tal capacidad de.. amar por encima de cualquier cosa se escapa a la comprensión lógica de cualquier otra casa.. Este no es el momento adecuado para hablar de ello.. hay demasiada felicidad, tranquilidad en el aire para recordar tiempos tan sombríos..

-Severus..

-Está bien, está bien.. no te daré más largas. Hace unos catorce años.. creo que fue un par de meses antes de lo de Potter. Voldemort me encargó mi primera misión realmente peligrosa. Recuerda que aunque todos mis.. ex- amigos, tenían 19 años, yo tenía 17, acababa de alcanzar la mayoría de edad. Hasta entonces me habían reservado para los interrogatorios.. algo para lo que había demostrado un..- Snape tragó saliva, evitando mirar a Hermione a los ojos- talento natural- gimió.- Me encargó secuestrar a una pareja de muggles escogidos al azar. Tenía que llevarlos ante él y torturarlos hasta su muerte.. pero algo salió mal, algo que el Lord no había previsto. La pareja tenía una hija. Una pequeña y adorable niña muggle.. la miré embobado unos segundos, mientras tenía a sus padres inconscientes. Y ella hizo algo..- Hermione le limpió una lágrima despacito y él le cogió la mano- Me quitó la máscara, Hermione. Me miró fijamente y arrancó la máscara... magia sin varita...Una magia poderosa y antigua que, como mortífago me obligó a darme cuenta de que me había cambiado de bando sin enterarme.. La niña extendió sus bracitos hacia mí, y aunque me sentía avergonzado por lo que había estado a punto de hacerle.. me vi forzado a cogerla en brazos. Quiero creer que fue más magia sin varita y no.. otra cosa. Pero la cuestión es que la niña se aferró a mí... todavía recuerdo con certeza la confianza de aquellos grandes ojos marrones.. cuando aquella criaturita inocente rozó con sus labios mi mejilla.. ¡a mí! Un monstruo que ella sabía que había estado a punto de dejarla huérfana.. En ese momento supe que nunca, jamás podría hacerle daño. Me acordé de Lily, ella también era hija de muggles. Recordé su increíble poder.. De modo que dejé a la niña en la cuna, borré la memoria de los padres y me entregué a Dumbledore. Pasé dos años en Azkaban, y allí me enteré de que le había contado a Voldemort una historia sobre un par de aurores llamados Longbottom que me habían descubierto con los muggles.. entenderás ahora porque el profesor Snape odia tanto al joven Longbottom.. es parte de mi coartada.. Al salir de Azkaban, Dumbledore me acogió, pues en teoría yo había sido.. reformado. Y allí, desde Hogwarts busqué a la niña que me había cambiado la vida. Y la guié y protegí lo mejor que supe sin que ella me viese jamás, hasta qué, al cumplir los once años, yo mismo me encargué de llevarle su carta. Como se suele hacer con los hijos de muggles.

-Severus.. - susurró Hermione. Aunque no sabía si reír o llorar ante semejante historia.

-Hermione.. tengo algo para ti. Iba a dártelo después de tu iniciación como musa, pero ya que me has obligado a contarte esto ahora.. lo mereces ahora.

Snape sacó del bolsillo de su pantalón una caja negra alargada.

-Mandé que lo hiciesen ayer. Hoy fui a recogerlo, por eso tardé tanto.

Hermione recibió la cajita con manos temblorosas y duda en los ojos.

-¡Adelante! Quería que te la pusieses con la Lágrima de Cristal, pero te lo has ganado antes.

Hermione abrió la cajita. Dentro había una preciosa gargantilla con una finísima cadena de plata y una única piedra, esférica de color verde de las esmeraldas. Y es que eso era lo que parecía, una pequeña esmeralda esférica.

-No.. no puedo aceptarlo.- musitó Hermione, extasiada.

-No sólo puedes aceptarlo, sino que TIENES que aceptarlo..

Con eso cogió la cadenita y apartándole el pelo se la prendió alrededor del cuello. Dentro de la esmeralda ocurrió algo: empezó a parpadear una pequeña e insistente lucecita.

-¿Que le ocurre?-preguntó la chica, extrañada, con la piedra entre sus dedos.

-Se ha activado sola. En un par de días activará la mía, estoy seguro.. aún me sorprende lo poderosa que eres,

Hermione enrojeció profundamente.

-¿Que quieres decir?

-Mira..- Snape bajó un poco el cuello de la camiseta, dejando al descubierto una gargantilla idéntica.. salvo que la cadena era de oro, y la piedrecilla un rubí.

-No brillaba así desde hace quince años.. No te la quites nunca, pequeña. Te ayudará a focalizar tu energía. Si algún día el fuego de alguna de las piedras disminuye, significará que el otro está en peligro o sufriendo. Sólo se apagará cuando el otro muera. Y hasta entonces, es el símbolo de lo que significas para mí. Y, espero, yo para ti.

Hermione gimió. Probablemente este era el momento más importante de toda su vida. Y su boca estaba seca.

-Yo..- carraspeó- no tengo nada para darte.

-¿Bromeas? Lo más importante que me darás será la luz en esta piedra- musitó- cuando estés lista para hacer el hechizo. Eso si aceptas esta carga, por supuesto. Por lo demás.. no te preocupes.. mi gargantilla.. me la dio Lily, por supuesto. Vosotras sois de la misma casa, así que no habrá problema.

Hermione meditó. ¿Cómo rechazar aquel regalo? En unos minutos ese hombre le había regalado los oscuros secretos de su corazón y su alma en forma esférica. No dudaba en aceptarlo, pero el precio que ella debía pagar a cambio era muy bajo. ¿Qué hacer?

Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por la llegada de alguien con quien Hermione jamás podría volver a sentirse cómoda.

-¿Se lo has dado ya, Severus?- preguntó Sarah- pensé que esperarías a después de la Iniciación.

Fue entonces cuando lo vio: del cuello de Sarah pendían dos cadenas. Una era una gargantilla idéntica a la de Snape, la otra una larga cadena de cuero con una pequeña piedrecilla azulada en forma de lágrima. Esta última quedaba a unos centímetros del ombligo de la mujer, y Hermione se preguntó cómo era posible que nunca antes se hubiese fijado en ella.

-¿Tu también la tienes?-murmuró Hermione, sin poder apartar la vista del cuello de Sarah.

-Todas la tenemos... Lenise, Gratia y yo la tenemos de Gryffindor. La de Ruber era como la tuya.

-¿Remus y Sirius también la tienen?

-Por supuesto... Azabache con una amatista para Remus, plata y esmeralda para Sirius... y James, dondequiera que esté.. cobre y zafiro. Ya verás las de Remus y Sirius. Siempre han estado ahí, pero ahora podrás verlas.

-¿Cómo? ¿Porqué nunca antes las había visto?

-Porque se protegen a sí mismas. Nadie que no tenga una de las joyas la puede ver. Imagínate qué habría ocurrido en Azkaban con las de Sirius y Severus si no fuese así... probablemente los dementores los habrían matado para obtener esa fuente de poder. De ese modo también Lily y Dalia habrían muerto.

Hermione miraba fijamente la hermosa piedra roja que pendía sobre la camiseta de Snape.

-Y esto... ¿decís que me protegerá?- murmuró, tocando con la punta de sus dedos su propia piedra verde.- Dá la sensación de que te haga aún más vulnerable.

-No-murmuró Snape- estas piedras son símbolos de fuerza, de humanidad. La verdad es que cuando estábamos en Azkaban no brillaban, por lo menos que yo recuerde. Las piedras no te hacen más vulnerable, pero te hacen ver que no eres invencible, que... incluso aunque no te importe morir, existe alguien a quien si le importará, y que le harás mucho daño.

-¿Y que utilidad tiene saber eso?- replicó Hermione- Más en estos tiempos, donde todo sacrificio debe ser bien recibido por el bien mayor.

-Espero que realmente no creas eso... ¡luchamos por una vida mejor, Mater! Si todos estamos dispuestos a morir... ¿para quién estaremos salvando el mundo? –exclamó Sarah.

-Hermione, yo también creí eso durante un tiempo. Por eso Lily se empeñó en que hiciésemos este pacto. Por eso me dijo aquello... estoy vivo porque puedo dar, recibir y compartir mi vida... Me parece increíble que yo le tenga que decir esto a una Gryffindor, pero... hay cosas por las que vale la pena luchar, pequeña. Y una de ellas es sobrevivir para disfrutarlas. Si luchas para darle una oportunidad a los demás, sin importar lo que te pase a ti... imagínate por un momento que le pase algo a alguna de esas personas... ¡te quedarás sin más deseo que la venganza! Y aun no he visto ninguna batalla ganada por la venganza. Esa desesperación nos llevará a todos a una derrota y muerte segura.

Hermione miró a ambos adultos boquiabierta, consciente de que acababan de darle una de las lecciones más importantes de su vida.

-Tras tu iniciación como Musa debes activar el hechizo sobre la piedra de Severus. Así el encantamiento alcanzará su máximo potencial... ¿sabías que todo esto... las gargantillas, las Lágrimas... fue idea de Lily?

Hermione agitó la cabeza negativamente. Era obvio que era un encantamiento muy poderoso.

-Ella era... muy fuerte, ¿verdad?

Sarah asintió.

-Sin ninguna duda era la más fuerte de nosotras. Las cuatro éramos las únicas stregas del colegio en nuestra época, pero Lily... ella era diferente. Era aún más poderosa que una strega normal. Creo que era por su hermana. Pet también debería haber sido una strega, pero tuvo miedo, y su fuerza se depositó sobre Lily. La mayor fuerza de las Musas era la de Lily.

Hermione compuso una mueca de dolor. Si eso era lo que esperaban de ella se iban a quedar muy decepcionados. Ella no tenía ninguna gemela... no tendría esa fuerza... Nunca sería tan poderosa como Lily Evans.

-Nadie espera eso de ti, Mater. Pero serás una gran ayuda... ¡mírate! Tu cuerpo sólo tiene 15 años, pero carga las responsabilidades de una mujer de 30, y la mentalidad de una strega de 17... no eres consciente de que una bruja de tu edad se desplomaría ante semejante peso...

-Pero yo... si me desplomé... antes, en casa de Lupin...-gimió Hermione.

-Porque ante todo eres humana. Y créeme, que eso es reconfortante- suspiró Snape.- Pánico tendría si no fueses vulnerable por alguna parte... Porque, aunque aún no estén desarrollados... puedo ver en tus ojos la luz de los poderes de Lily. Tal vez no sea en este tiempo, para esta guerra o para ayudar a Potter, pero algún día serás tan poderosa como Lily. Lo sé.

Hermione agachó la cabeza. Snape le pasó un brazo por los hombros, haciendo que se acercase a él, apoyando la cabeza sobre su pecho.

Hizo un gesto a Sarah para que se sentase del otro lado. Y así, con las dos Musas apoyadas contra él, se quedó mirando el horizonte, pensativamente.

***

Después de cenar volvieron a Hogsmeade. Al llegar a casa de los Snape, el grupo se dividió. Sarah y Harry llevaron a Simon a su cuarto, que había permanecido tranquilo todo el día, y no tardó mucho en dormirse. Dalia, Canuto, Alexia y Remus acompañaron a Cathy a su casa. Draco se duchó y cambió de ropa para volver a su casa. Mientras Hermione y Snape lavaban y ordenaban las cosas que habían llevado a la playa.

Cuando Simon dormía y Draco había terminado de vestirse, bajaron Harry y Sarah para despedirse del chico.

-Nos veremos en Hogwats- dijo Harry, alegremente.

-Por supuesto, Potter... tendré preparado un arsenal de insultos para ti, el pobretón y la sangresucia, no te preocupes.

-Draco, técnicamente yo no soy...

-Lo sé.- contestó el rubio- es como si se me diese por llamarte mulata.... sólo estás morena. Pero Crabbe y Goyle no lo saben- añadió, guiñándole un ojo.

Riendo, Hermione se abalanzó sobre él, abrazándole con fuerza. Draco dudó unos segundos, pero luego la abrazó también.

-Potter... cuidado con lo que le haces a esta chica... vale más de lo que tu mereces.- murmuró, casi inaudiblemente, al coger la mano que Harry le tendía. Harry sonrió con orgullo.

Snape le puso una mano en el hombro a su ahijado, mientras el cuervo Hugin volaba desde lo alto de un armario y se posaba en el hombro de su joven amo. Harry intuyó que aquella imagen del profesor, el odiado Slytherin y el siniestro pájaro sería lo último que vería del Draco amable por una buena temporada. Y pocos segundos después, ya los tres se habían marchado.

-Yo... me voy a la cama, chicos...- anunció Sarah, reprimiendo un bostezo.- no tardéis mucho en acostaros, y si lo hacéis antes de que vuelva Severus, aseguraos de que todas las puertas estén cerradas.

La mujer besó a los dos en la mejilla. Y tras un "buenas noches" subió a su habitación.

Harry se sentó en el sofá, pero Hermione permanecía en pie.

-Voy a dar un paseo.- dijo.

-¿Quieres que te acompañe?- preguntó Harry, bostezando sonoramente. Hermione sonrió.

-No es necesario, sólo voy a tomar el aire y vuelvo enseguida. Puedes irte a la cama si quieres. No haré ruido al volver.

-te esperaré aquí- dijo Harry, acomodándose en el sofá. Hermione sonrió y se marchó.

Harry se estiró en el sofá. Cogió un cojín que resultó ser la mochila de Hermione, que aún conservaba varias cosas dentro. Incluidas su varita y varias prendas de ropa de color negro. Frunció el ceño ligeramente, pero no tenía importancia... sólo sería un momento el que estaría sin varita, y no se iría muy lejos. De modo que apoyó la cabeza en la mochila, sintiendo que sus párpados se hacían más y más pesados, hasta que se quedó profundamente dormido.

***Continuará***

Bueno, lo más importante de este capitulo es la conversación sobre profesores que mantienen Hermione y Sevi en la playa. El texto, palabra por palabra está copiado del maravilloso cuento de Daga "El corazón del Dragón" Y digo bien, palabra por palabra. Porque no encontré otra manera de explicar esas mismas ideas, y de todas formas dicen que la imitación es la mejor forma de elogio. Bueno, Daga lo hizo tan bien, que no sólo la imito, además la copio. Espero que reciba bien mi imitación y lo tome como incentivo para terminar esa historia ambientada en el cuarto año de Harry, antes de que Rowling publique el séptimo libro... je, je, je...

Las piedras que se protegen a sí mismas de quien no debe verlas, están inspiradas en el pendiente que el unicornio le regaló a Hermione en Pawn to Queen, y el hecho de que contengan el alma del que las regala, en el anillo que Sevi le da a Hermione en Letter from exile one merciful morning...

Creo que no hay nada más... solo decir.... ¡viva! LotR!! Merecían más de 11 oscar!! Y... viva Jonnhy Deep incluso aunque no ganó!! Ja, ja! Es el mejor!!

Silvara-Waylan: Bueno... yo ya advertí que había que quererle mucho para aguantarle en este fic. Si este capitulo se llama "La redención de un Slytherin" el otro debería ser "La redención de un Gryffindor" Después de todo, ya has visto lo bien que se portó con Hermione. Neopreno... dudo que los magos conozcan esa cosa... ¿Remus en bañador? ¿Porqué? Todos sabemos que los lobitos buenos están aun más buenos sin ropa....

Annita69 Lupin-Black: Porque es evidente el que? La pareja de Remus/Alexia o el porqué Sirius intentó violar a Alex? Mejor te explico las dos cosas... no es que sean tiernos los dos. De hecho Alexia es pura energía... Remus es su polo opuesto, tan tranquilo... la equilibra. Además es un chico muy normal, mientras que Alexia es una autentica belleza. Así los dos tienen la certeza de que el otro les quiere de verdad. Porque Sirius intentó violar a Alex... bueno, se explica en las reacciones de Harry. Recordad que él básicamente es un niño, y aun así entiende que Alexia es demasiado guapa para su propia seguridad. Sirius siempre fue demasiado impulsivo, y tal vez no escuchó su "No!" Después de dejarle quedar como un animal de bellota por hacerle daño a sus seres queridos, necesitaba que Sirius hiciese algo bien. Y Hermione era quien más angustiada estaba en ese momento. Remus lo habría hecho bien, también, pero ese era el momento de Sirius. ¿Cómo te lo diría....? No sé exactamente a quienes te refieres, pero... ¿qué chico pretendes que se quede con qué chica? Porque las parejas que hay formadas ahora mismo son las que habrá en el final... ni más ni menos... Ni Remus, ni Harry, ni Sirius, ni Sarah... no creo que lo averigüéis...

Gen Potter: A mi tambien!! Siempre gano jugando con esas. Y dale... la verdad, en esa situación quien mejor le podía ayudar es Sirius, ¿no? Es cierto que Remus podía acudir filosóficamente a su castigo de ser hombre lobo, pero esa idea ya estaba muy pisoteada... Ron jamás me caerá bien, lo siento. Está contra mi voluntad y todo lo que creo. Para mi solo es el niño y amigo perfecto con un corazón de oro y que parezca que no tenga defectos- A parte de su egoísmo, egocentrismo y machismo, por supuesto. Solo pensar que alguien vea a Hermione como la próxima perfecta señora Weasley me hace subir la bilirrubina... (si, si me pone del hígado, como a J.L. Guerra) Que quieres decir?! Insinúas que soy una Gryffindor!!?? ¿Y en que te basas para afirmarlo? Porque lo que es yo no tengo ni idea de que casa soy... pero se me hace raro imaginar a una gótica en Gryffindor, francamente... Depende de lo que consideres toda la vida... yo no puedo imaginarme a Harry casándose, teniendo hijos y viviendo feliz para siempre después de derrotar a Voldemort. Del mismo modo tampoco me lo imagino para Hermione. He visto las noticias, pero... ¡no han dicho ni una palabra de Venezuela! Maldita campaña electoral... se creen que pintándonos un país rosa basta para que les votemos... de todas formas... ¡resiste! Hugo Chávez es un luchador...

Gen Potter(Whispers): Bueno... teniendo en cuenta que sólo te contesto porque está en español... evidentemente no contesto a los reviews que me mandan a los fics en inglés. Porque esos seguro que no leen esto, je, je, je... Desde luego... ya te lo he dicho... no me creo que todos acaben felices y comiendo perdices. No creo que ni la cursi de Rowling lo haga, ¿porqué tendría que hacerlo yo? ¿Te gusta? Yo creo que es por eso que se llama así... que Rowling tiene pensado utilizarla como conexión entre los muggles y los magos...

Gen Potter (Últimos minutos): Oh, bueno, tómatelo con calma... ff.net se enloquece demasiado a menudo...

Bueno, creo que esto es todo. Hasta el próximo capi, people!!

Iremione