De nueva cuenta disculpas por la tardanza. Pero ya está aquí el siguiente capítulo. Ojalá les guste. Habrá un pequeño lemoncito Muajaja. Ah! pero una cosa muy importante. Debo avisarles que para fines del capítulo, habrá una escenita het… �� es necesario lo siento. Si no desean leerlo no lo hagan y se pasan hasta que termine, pero es importante. Y… habrá lenguaje bastante subidito, o sea obsceno Gulp! Espero que después de esto no me vayan a vetar u.u
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CAPITULO 16
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Vuelve a repetir, eso… Eso que haz dicho… Creo… Creo que no escuché bien…
Que estoy E-M-B-A-R-Z-A-D-O.
¡Harry! Esto no puede ser cierto… ¡Pero, cómo!
¿Por qué pones esa cara? Pensé que te daría gusto saberlo ¿y cómo sucedió? Tu bien sabes cómo, no tengo porqué explicártelo… -Harry se sintió ofendido, e incluso irritado, quizás su estado le hacía tener esos cambios tan repentinos. Así que le dio la espalda.
Harry, claro que lo estoy… ¡ESTOY MUY EMOCIONADO! Tu y yo… Vamos a… ¡Vamos a ser padres¡Voy a ser padre! Y tú lo llevas dentro… Una criatura… ¡Merlín!
Draco se incorporó de inmediato. La noticia lo había afectado. Caminó por aquí y por allá… Veía a Harry, luego volvía su mirada al suelo… Se llevaba ambas manos a la cabeza y la movía afirmativamente, luego negativamente. Hasta que finalmente se tiró en los brazos del ojiverde y lo cubrió con muchos besos desesperados.
¡Me vas a acabar con tanto beso Draco!- A Harry le daba gracia la reacción del rubio.
¡Muchas gracias Harry! Eres lo mejor que me ha pasado…
(Más besos)
¡Un hijo! tuyo y mío…
Podría ser una hija…
Una mujer… ¡Una mujer! (Mas y más besos)- No importa lo que sea, pero… Quiero que se parezca a ti. Que tenga tus mismos ojos, tu misma sonrisa… Tu tono de piel…. Pero eso sí, que tenga mi porte y mi inteligencia…
¿Qué estás insinuando Draco Malfoy? –Harry le dio un pequeño golpe juguetón en el brazo, haciendo que Draco se quejara un poco…
Cuando Dimitri se entere… ¿crees que le va a gustar la idea?
No lo sé Draco. El niño es muy inteligente y sabe perfectamente de dónde vienen los bebés. Me refiero a que salen del vientre de una mujer. Y como no sabe mucho a cerca del mundo mágico, pudiera confundirse.
Tienes razón… Pero ya habrá tiempo para eso, todavía no se te nota… De repente se me han ocurrido miles de ideas para hacer en familia… ¡Mi familia!
(Toc-Toc)
Adelante, puede pasar- Dijo Harry.
Cuando la puerta terminó por abrirse, reveló a un anciano y a una mujer muy madura…
Profesor Dumbledore, Profesora McGonagall. Tanto tiempo sin verlos.
El gusto nuestro es Harry. Draco… también en un placer verte de nuevo… -McGonagall extendió su mano y el rubio la apretó con fuerza- Ya no eres aquel adolescente que abandonó Hogwarts. Ya eres todo un hombre.
Es todo un honor estrechar su mano profesora… Si antes no lo hice fue porque…
No tienes por qué darme explicaciones. Todos sabemos lo que pasó.
Bien, es una escena bastante rara… Ni yo mismo hubiese podido vaticinar éste encuentro, años atrás. Eso demuestra que nuestro destino no está trazado. –Comentó Albus Dumbledore- ¿Cómo te sientes Harry?
Mejor, gracias por darme asilo… Y, bueno… Creo que yo también le debo una disculpa profesor. Yo no… Quiero decir… Al terminar el colegio y… En fin…, fui poco cortés con usted. Me sentía molesto por todo, con todos… Me sentí acorralado. No debí ser tan idiota.
Harry, por mi todo está olvidado. En cuanto al pasado… Pasado es. Ahora se vislumbra una buena vida. Una vida al lado de Draco, Dimitri, y ese bebé que llevas en las entrañas… Oh, vamos no tienes por qué ruborizarte… Serán una familia feliz, por fin. A partir de ahora, no deben de haber secretos entre ustedes. Es un pequeño consejo de mi parte. Siempre hablen con la verdad, tengan comunicación, que es la base de todo.
Ya no quiero tener más secretos para Harry, y todavía le debo uno. –Comentó Draco- Estoy dispuesto a revelárselo delante de ustedes, en éste mismo momento, si así lo desea.
Draco… No es urgente. Yo puedo esperar. Además, debe ser algo muy íntimo para ti…
Draco tiene razón Harry, ése recuerdo debe ser "visto" por algunas personas más… La profesora McGonagall y yo, no nos incluimos por supuesto. Me refiero a la familia Weasley. Es vital que se den cuenta de lo que verdaderamente sucedió aquella noche de fiesta juvenil… Tienen a Ginevra Weasley en un pedestal, y... buenohasta cierto punto los comprendo, no es fácil digerir el que su única hija, prácticamente haya sido asesinada. Pero la chica tenía un negro pasado.
Pero… Se darán cuenta de que Dimitri no es mi hijo… Y entonces harán hasta lo imposible por quitármelo. De eso hablábamos Draco y yo hace unos momentos. Cuando se enteren de que Draco es el padre biológico, moverán sus influencias para… No sé… Podrían hacerle pasar un mal rato.
No harán tal cosa, no pueden. Tienes a la ley mágica de tu parte Harry. Legalmente tú eres el padre del niño.
Albus tiene razón Harry, confía en sus palabras. Los Weasley tendrán que comprender que no pueden hacer nada en contra de ustedes. Molly tendrá que resignarse a perderlo. Si Harry… Draco. Porque veo en sus ojos, la posibilidad de marcharse lejos nuevamente. Y harán bien.
Si profesores, tenemos esa idea… Quiero que nuestros hijos crezcan en un ambiente diferente. –Draco acarició el vientre del moreno.
Pero nos estamos olvidando de algo importante. Y esta idea es la que más me atemoriza. Draco y yo no somos una pareja "normal" y Molly Weasley es una de las muchas mujeres moralistas que existen en el mundo mágico. Puedo imaginarla haciendo una manifestación por todo Hogsmeade en contra mía y de mis preferencias sexuales… ¿Todavía creen que la ley estará de mi parte? Puede alegar que no es sano para Dimitri, vivir en un hogar de magos homosexuales… ¿Comprenden ahora?
Ciertamente Harry, comprendemos perfectamente… Aún así recomiendo lo que anteriormente dije. Pero es su decisión y ustedes tienen la última palabra.- Bien, debes seguir descansando, en seguida le pediré a un elfo que les traiga de comer… ¿O prefieren pasar al comedor? Hermione está de visita…-Albus guiñó el ojo. -¿Qué dice tu brazo Harry¿Dejará que te muevas?
Er, supongo que si…
Entonces tendré que "aparecer" dos cubiertos más. Los esperamos… ¿Profesora McGonagall? –Albus le ofreció su brazo a la anciana mujer.- Con su permiso.
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¿Draco podrías ayudarme a levantar?
Con mucho gusto Harry…
Ouch, me duele todo… Parezco un viejo reumático…
Es que ya lo estás San Potter. Acéptalo. Eres más grande que yo… Mírame, casi al borde de la muerte y tan fresco como la mañana.
Si claro. Son apenas un par de meses, no te hagas ilusiones… ¿Dónde queda el sanitario?
Mmm quieres ir al sanitario… Supongo que no podrás bajarte la bragueta con una sola mano… Yo puedo ayudarte a hacerlo. -Draco lo rodeó con los brazos por al espalda y empezó a hacerle caricias subidas de tono-.
Draco… Para…
(Mordiditas en la oreja)
¿En serio quieres que pare?
No estamos en casa… Alguien podría venir… Anda, si quieres… Podemos esperar a la noche… ¿Te… parece?
Me parece, pero creo que me consolaré por el momento con un anticipo.
Draco guió a Harry hasta la puerta del sanitario, la abrió y en cuanto ambos estuvieron dentro, selló la puerta. Acorraló a Harry en la pared, cerca del lava manos y una de sus manos comenzó a buscar el botón del pantalón. No tardó mucho en encontrarlo; lo desabotonó y en seguida la prenda cayó al piso…
Dios… -Harry ya tenía los ojos cerrados. Ya sabía lo que iba a venir.
Efectivamente… Tenía razón, Draco comenzó a jugar con su miembro por encima de la trusa, dándole pequeños mordiscos. Después las manos blancas del rubio acabaron por dejarle al descubierto. El objeto de su deseo ya estaba listo. Lo metió a su boca… Al principio pasó delicadamente su lengua por toda la punta, hasta que lo metió hasta su garganta. El vaivén de Draco era espectacular; tanto, que Harry solo podía morderse la lengua para no gritar. Estaba sintiendo delicioso. Apretó la cabeza de su amante contra su cuerpo, como si quisiese aprisionarle por siempre. Draco por su parte, tomó uno de los glúteos de Harry con la mano libre y los apretó con mucha fuerza.
Mmm, ahhhh…. Ohh!
Y entonces vino lo inevitable… Harry terminó. Y lo hizo dentro de la boca de Draco que lo bebió todo. Después se levantó y beso a Harry con mucha pasión, tratando de ser cuidadoso. Su pareja aún estaba delicado, al igual que el… Pero así era la naturaleza de Draco… Al diablo con el dolor!.
¿Ese… fue tu anticipo?
Si mi querido San Potter… ¿Te gustó?
Ya me imagino el pago completo… Mmm…. Y por supuesto que me gustó. Lo hiciste sensacional. Y si no fuese porque nos esperan en el comedor… Me habría gustado pagarte en su totalidad…
Todo a su tiempo… Mi amor. Recuerda que ahora llevas a mi bebé dentro. Debemos ser cuidadosos. Ahora lávate tú primero, que olemos a varios kilómetros a la redonda…
Draco te amo…
Yo también Harry…
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La comida resultó de la más amena. Albus y Minerva tenían un buen sentido del humor. Hicieron que Harry riera como poseso al igual que Draco pero con sus reservas. Al ojiverde le complacía observarlo. Tan refinado al comer… al expresarse corporalmente. Era una total y completa elegancia. Irradiaba sensualidad hasta estando lastimado… ¡Era tan perfecto! Y ahora era solo suyo.
Fue Dimitri quien lo hizo volver a la realidad, puesto que se colgó de su cuello y comenzó a bombardearlo con cientos de besos. Ahora fue el turno de Draco de observar. ¡Cuánto le hubiese gustado ser el quien recibía las muestras de cariño! Definitivamente iba a ser difícil hacer que el niño hiciese lo mismo con el. Pero tendría mucho tiempo por delante y a Harry como cómplice.
Después de varias horas, Hermione Granger se despidió y desapareció en la calle a bordo de un taxi muggle. McGonagall lo hizo una hora después por la chimenea principal. Dimitri se fue a jugar con su juego de videos a la biblioteca y finalmente quedaron Albus, Draco y Harry.
Ha sido una tardeada estupenda ¿No lo creen? Comí como nunca en mi vida, esos panecillos que apareció Minerva estuvieron exquisitos. Deberé pedirle la receta después.
Profesor… Ahora soy yo quien debe pedirle un favor… Ahora que estamos solos y que el ambiente es ideal
Lo que quieras Draco…
Necesito… Bueno…
Ah si, por supuesto… Vengan acompáñenme.
Albus les hizo pasar hasta un pequeño cuarto repleto de objetos raros. Y entre ellos, colocado en medio de una pequeña mesa. Un pensadero. Dumbledore extendió su varita a Draco y éste la tomó. Harry veía todo desde lejos. El rubio dirigió su varita hacia su cabeza y un hilillo plateado salio desde su cabeza y fue a parar al objeto redondo. Un torbellino comenzó a desarrollarse dentro.
Harry… Ahora sabrás la verdad.
E-¿Estás seguro amor?
Completamente. Creo que vas a encontrar muchas cosas interesantes e inesperadas. Anda… estaré aquí esperándote.
Yo cuidaré a Draco Harry. Tengo un buen repertorio de música clásica y sé que le va a gustar.
¿Tanto voy a tardar? La última vez que estuve en un pensadero fue muy poco…
Tárdate cuanto tengas que tardar. No hay límite de tiempo. Ve, no tengas pendiente. Te esperaré impaciente, recuerda que tenemos algo interesante por la noche.
Harry se aproximó nervioso. ¿En verdad quería ver que sucedió aquella noche? La idea no le agradaba, sobre todo tratándose de Ginny Weasley. Su "esposa" y madre de Dimitri. Pero ya no había marcha atrás. Acercó su rostro al pensadero y fue absorbido ipso facto.
Va a ser una larga noche… Vamos Draco. No estés tan afligido. Hiciste lo correcto.
Son recuerdos muy funestos para mí, llevaba una vida alocada llena de vicios y ahora Harry los verá… Sé que han quedado en el pasado pero no me enorgullece, porque esa noche fue el clímax de mi perversión… Dentro de lo que recuerdo, porque estaba completamente ebrio y drogado.
La vida te ha dado una segunda oportunidad Draco. Vea lo que vea Harry, no cambiará en lo absoluto. El te ama por lo que eres hoy en día. Eso ya deberías saberlo ¿acaso no te ha dado suficientes señales de ello?
Sí lo ha hecho. Aún así sentiré vergüenza al verle cuando regrese…
Tranquilo. Ahora dime que quieres hacer. Lo de la música clásica lo dije para que Harry se fuese tranquilo. En lo particular me aburre –Otro guiño de ojo- Que te parece si mejor jugamos una buena partida de ajedrez mágico.
De acuerdo. ¿Listo para perder profesor Dumbledore?
Eso ya lo veremos Draco Malfoy.
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Vagaba de nueva cuenta por los amplios corredores de Hogwarts, pero ésta vez rumbo a la sala común de Slytherin. El ojiverde seguía muy de cerca al trío busca pleitos de todo el colegio. Crabbe, Goyle y Draco. Harry no pudo dejar sentir cierto aire de nostalgia al volver a "pisar" aquel suelo que alguna vez consideró sagrado.
Seguro que será una fiesta impresionante, Pansy -junto con Millicent- se han encargado de todo.- Comentó Goyle.
Mas te vale estúpido, quiero que ésta noche quede en la memoria de todos aquellos que asistan a ella. Se trata de mí fiesta, así que no quiero errores de ningún tipo. ¿Compraste todo lo que te encargué Crabbe?
Todo… Absolutamente todo.
Perfecto… Habrá muchas y muchos vírgenes a quienes desvirgar ésta noche.
¿Otros más?
Por su puesto Goyle, ya sabes que yo no tengo saciedad. Soy activo sexual al ciento por ciento. No puedo vivir sin el sexo. Una vez que lo pruebas, no puedes dejarlo… Pero claro, tú no puedes saberlo. Nadie en su sano juicio dejaría que se la metieras. Eres tan asqueroso que no sé cómo es que puedo soportar tu compañía.
Como siempre sucedía, Goyle se quedó mudo.
Bueno ahora platícanos como te fue con Lavander, Draco… ¿Siempre sí te la pudiste follar? Te tardaste más de dos horas en el aula de transformaciones. -Crabbe estaba muy curioso. Harry escuchaba de cerca-.
Ah! la pobre imbécil, se creyó todo el cuento… Las mujeres tan ingenuas como ella, se creen todo lo que les dices. Primero hice aparecer una cama, las flores, las velas… Eso nunca falla… ¿En verdad te importo Draco¿Me va a doler Draco? -El rubio imitaba la voz de la chica en tono de burla- Siempre hacen las mismas jodidas preguntas…
¿Pero qué más pasó¿Te la chupó?
Cuando le quité la ropa, temblaba como gelatina… Y se tapaba sus senos con una mano y abajo con la otra… Se veía tan ridículamente cómica.
En ése momento, entraron a la sala común. Harry aún seguía dudando de su aventura. Pero ya estaba inmerso en aquel recuerdo y no había marcha atrás. Aquel sitio estaba espeluznantemente lúgubre y frío. Subieron un par de escaleras más y entraron a lo que parecía ser la habitación común de los hombres. Draco se dejó caer en su cama, pasó sus brazos por detrás de la cabeza y continuó el relato de su aventura sexual. –Harry se sentó a su lado-.
Tuve que besarla, eso fue asqueroso. La tipa me repugna. Pero tuve que hacerle creer que lo estaba disfrutando. Ya saben, se hubiese visto forzado y se me habría escapado la ramera… Y tal vez habría dicho que intenté violarla.
Si, es una asquerosa ramera- Goyle ya se había animado a hablar por fin.
Después del lengüeteo, la recosté… Cerró los ojos y ¡Pum! Se la metí hasta el fondo… La desgraciada sangró en abundancia. Después de todo sí era virgen, Jajaja. –Los regordetes amigos rieron también a todo lo que daban- ¡Me duele Draco¡Me duele¡Para, para! –Draco seguía burlándose de la pobre desafortunada.
Luego le metí los dedos en la vagina… ¿quieres oler Crabbe? Así conocerás como olía una vírgen –El cerdo se aproximó hasta la mano de Draco y olfateó.
Déjame oler otra vez… Mmm, virgen…
¿Pero te la chupó o no…?
Por supuesto que no. Era demasiado para ella. Sólo puede hacerlo a quien yo considere digno o digna de ello.
Como por ejemplo, Ernie McMillan ¿Verdad? – Preguntó Crabbe frotándose las manos.
Parecía una aspiradora… No puedo quejarme, me dejó hacerle todo lo que yo quise. Tan manso como un cordero. Tenía el culo muy apretado, según el, era su primera vez. Pero después me hizo dudar. Casi me arranca el pene cuando se lo metió a la boca. Parecía todo un experto lame pijas.
Enseguida apareció Zabini, cargando una bolsa blanca
Ya todos están listos… Y yo por supuesto también. Aquí esta lo que me pediste.- Y arrojó el objeto hacia Draco.
Genial… Esta sí que va a ser una gran orgía. Vamos a bajar y que comience la diversión.
En cuestión de minutos, la sala común de Slytherin se vio rodeada de varios estudiantes adolescentes de varias casas. La música estridente comenzó a sonar por todos los rincones. Era tanto el ruido que ni siquiera se escuchaban hablar, aún estado a escasos treinta centímetros. El degenere no tardó en llegar. El licor, mezclado con los estupefacientes, hizo que todos los ahí reunidos comenzaran a intercambiarse de parejas. Draco observaba como Pansy se subía a la mesa, comenzaba a bailar de forma exótica y los hombres y mujeres le metían mano sin pudor.
Harry estaba sorprendido, nunca se había enterado de la tan mencionada fiesta. ¿O sería acaso que aquella noche estaba cumpliendo un castigo en el aula de pociones de Snape, limpiando los calderos sin magia? -Después, regresó su vista hacia el rincón más oscuro de la sala común. Ahí estaba Zabini… Sentado encima de Draco besándole como loco. Comenzó a tener unos celos terribles-.
Calma, es sólo un recuerdo. Esto no fue en tu tiempo…
Zabini comenzó a desabotonarle la camisa y jugueteó con las tetillas de Draco, que seguía muy divertido, tomando mucho licor en su baso mágico. Se acababa el líquido y de inmediato se volvía a llenar. Después, el amante del rubio fue bajando lentamente, hasta que sacó el miembro de Draco y empezó a devorarlo. El rubio platinado no parecía inmutarse, al contrario, parecía ser que ya estaba acostumbrado… Porque de su boca no salía ni un solo quejido. Por el contrario, apareció un cigarro y le dio varias bocanadas…
Vamos Zabini esfuérzate más…
Blaise hacía mucho esfuerzo, tanto que acabó derramándose el mismo.
Eres patético Zabini, largo de aquí…-Draco lo aventó con un punta pié. Mas tragos, mas fumadas… Mas perdido al igual que su vista que ya veía doble. Pero eso no impidió que sus ojos grises captaran la presencia de una figura con cabello pelirrojo que parecía algo asustada. Aunque con un vaso en la mano.
Vaya, vaya, la zorra Weasley en persona… La echaré de aquí, no quiero pobretonas en mi fiesta…
Se levantó tambaleante.
¿Tú que haces aquí, puta de quinta? –Ginny se quedó recargada en el muro muy asustada…. Pero después pareció armarse de valor y enfrentó a Draco.
Vine a la fiesta porque así me apeteció… Quiero divertirme. Quiero tomar, quiero fumar… Quiero follar… Quiero perderme ¡Ya no me importa nada!
Después de todo, si eres una puta… ¡Atención todos¡ATENCION!
El ruido de la música y el barullo de las voces cesaron…
Tenemos una invitada ésta noche… Y quiere hacer de todo, con todos… Y es justamente lo que le vamos a dar… Esta apestosa Griffyndor quiere chupar pijas como primer número… ¿Quién es el primero?
No, no… Por favor.
Ginny parecía haber regresado a la normalidad y comenzaba a retroceder hacia la salida.
Ah no, tú no vas a ningún lado… Ahora nos vas a complacer a todos, maldita piruja.
Draco arrancó de un tirón las prendas de vestir y Ginny quedó sólo con las prendas interiores. Entre Crabbe y Goyle la cargaron a la fuerza -a pesar de los gritos histéricos de la pelirroja- La colocaron encima de la mesa en la que bailaba Pansy, y la sujetaron de pies y manos. Draco entonces la roció con el vino de su vaso en varias ocasiones y colocó varias hileras de cocaína entre sus muslos… Luego el sostén salió por los aires y sus pezones fueron llenados con más polvo blanco. Después sus calzoncillos desaparecieron. Ahora sí estaba completamente desnuda.
Harry estaba desesperado, por más que gritaba que pararan, era inútil, no podía ser escuchado por nadie. Optó por retirarse de ahí y no mirar. Estaba apunto de presenciar una violación y no podía hacer nada al respecto.
Bien, bien… Ahora, veamos… Crabbe, Goyle… Acérquense… Ustedes nunca han follado. Así que ésta será su primera vez, así que aprovéchenla… ¡Ah, pero métansela por el culo, la vagina es mía!
Noo, por favor, no me hagan daño…
¡Cállate maldita! - Draco le dio una bofetada- Nadie te trajo a la fuerza ¿querías follar no? Pues eso tendrás…
Crabbe y Goyle ya se habían desnudado. Y el más grande de ellos fue quien se subió sobre el cuerpo de la pelirroja y chupó el polvo blanco por principio de cuentas. Lo hizo con tanto fervor, que le dejó dos grandes moretones en cada seno. El otro lamía las hileras de los muslos.
No, noo…, Ayyyy.
Crabbe ya estaba dentro de Ginny de una sola estocada… Tomó un ritmo impresionante y jadeó como loco. No tardó mucho en correrse adentro. Y como ya le había facilitado el camino a Goyle, éste no tuvo mayores esfuerzos por entrar.
¿Te está gustando pequeña apestosa? Jajaja.
Harry se tapó los oídos. La risa de Draco le estaba perforando el cerebro.
Cuando Goyle terminó, se unieron otros más haciendo fila. Todos los hombres ultrajaron a Ginny… Aunque, con los últimos, dejó de gritar. Ahora parecía estar disfrutando. Draco se dio, perfecta cuenta porque con sus dedos tocó la zona de Ginny y estaba húmeda.
La maldita se corrió… ¿pueden creerlo? La muy maldita ha estado fingiendo todo el tiempo… ¡Suéltenla!
Ginny ahora era la que jadeaba. Una de sus manos llegó hasta su clítoris y empezó a estimularlo delante de todos, sin pudor.
Ahora te quiero dentro Draco… Ven… Te estoy esperando con impaciencia… Fóllame, fóllame… Métemela hasta el fondo.
Eso quieres puta, eso te daré…
Draco ya estaba completamente perdido. Lo primero que hizo fue colocar sus dedos dentro de Ginny y moverlos en zigzag.
Mmm, ahhh, que bien lo haces…
¿Te gusta putita¿Eh¿TE GUSTA?
S-si, s-sii
No te escuchan ¡Dilo más fuerte¿Te gusta?
SI, SI ME GUSTA… Ahhhh.
Harry volvió a observar. Ahora Ginny estaba cooperando. ¿No se suponía que estaba llorando y gritando?
Ahora vas a conocer a un verdadero hombre… No como el estúpido de Potter.
Se trepó encima de la pelirroja y la penetró…
Siéntela toda… Siéntela toda maldita Griffyndor.
La histeria era total. Todos estaban alabando a Draco, como si la posesión de Ginny fuese un trofeo para la casa de las serpientes. "Marcar" a una leona era un trofeo que no se podía despreciar. Ginny se aferró al cuerpo de Draco, como si no quisiese dejarlo escapar nunca. Le arañó la espalda y le mordió los hombros.
¡Estúpida! Me mordiste… -Draco trató de salirse, pero la pelirroja se lo impidió.
Vamos, termina… Termina ya… ¡Termina¡Córrete dentro de mí… Córrete…! Harry, Harry… Ginny parecía estar delirando. Y se aferraba a los glúteos del rubio.
Y como todo hombre excitado, lo inevitable llegó. Draco descargó su semen en Ginny. De inmediato se apartó.
Ahora lárgate de aquí… ¡Fuera! No queremos basura rondando. Y cuidadito con decir una sola palabra de esto, o será lo último que digas.
Draco tomó por la muñeca a Ginny y la acercó hasta la salida. Le arrojó su ropa y la puerta de entrada se cerró. Harry estaba pálido y con ganas de volver, y lo hizo… Tenía el estómago revuelto.
¿Vieron? Así es como se trata a una perra como ella… Personas así no valen nada… Ni un solo galeón. ¡Que siga la fiesta! Todavía hay mucha bebida y estupefacientes suficientes para todos…
La música estridente hizo su aparición. Draco tomó a Zabini por los brazos, le hizo voltearse y bajó su pantalón. Pero esto, ya no lo pudo ver Harry… Por que fue entonces que las imágenes se fueron haciendo más borrosas; el recuerdo terminaba. El ojiverde salió del pensadero completamente bañado en sudor. Nadie estaba en la habitación, mejor para el, porque volvió a vomitar… Draco y Dumbledore dejaron de platicar, porque escucharon ruidos en la habitación contigua. Entraron de prisa y vieron a Harry agarrándose el estómago.
¡Harry! Amor ¿Estás bien? –El rubio le ayudó a enderezarse.
Necesito ir al sanitario… Tengo muchas náuseas.
Por aquí Draco sígueme…
Dumbledore les llevó hasta un pequeño sanitario para visitas. Harry entró solo, no quiso que Draco lo acompañara. De inmediato volvió a "limpiar" el estómago sobre el retrete...
Harry ¿necesitas ayuda? –Decía Draco desde afuera.
No, yo puedo solo. Dame unos minutos. Ya se me pasará.
Enjuagó su rostro con agua fría para despejarse. Todo lo que había visto le había perturbado. Draco sí que era un chico despreciable sin pudor en aquel entonces. Y el también… En el fondo sabía que Ginny había acudido a aquel sitio de perdición por su culpa. Recordó a medias, una plática de el con Ginny, en el que la rechazó olímpicamente. Y todo porque estaba enojado al ver a Draco con… Otro tipo. Todo se había conjugado. Los tres eran culpables, en mayor o en menor grado. El único inocente de todo… Dimitri.
¿Harry en verdad estás bien…? Contéstame. Estoy preocupado.- Draco seguía insistiendo. Y por fin Harry abrió la puerta. Serían los cambios en su físico, que se echó a sollozar en sus brazos. Dumbledore comprendió que era momento de desaparecer de ahí. Así que los dejó solos.
Lo siento Harry… Hubiese querido evitarte ésta impresión pero…
Ahora lo que necesito es dormir. Me siento muy cansado ¿podrías acompañarme al cuarto? Creo que no tengo fuerzas para llegar solo.
Claro…
Una vez, que Draco arropó a Harry, el ojiverde le pidió que lo dejara a solas. El rubio obedeció de inmediato. Si el moreno quería estar solo para analizar todo lo que había visto, así sería.
Que duermas tranquilo Harry… Y recuerda que… Te amo.
La puerta se cerró…
OoOoOoO
Continuará…
Sorry si herí la susceptibilidad de alguien u.u. Pero ya se aclaró todo… ¿algún comentario? No me maten jajaja. No me queda lo dramático a lo que Ginny se refiere. La tipa no me cae muy bien que digamos.
Saludos.