Capítulo nueve. Y las cosas se complican todavía más...

¿Qué cosa? ¿Ella es tu hermana?.- le preguntó una sorprendida Marife a una estresada Lily.- Ni siquiera sabía que tenías una hermana...

Sorpresa, sorpresa.- musitó Lily, con amargura.- Nunca creí que vendría hasta acá a buscarme...

Pero, si es tu hermana... ¿Por qué no sales a su encuentro?

Por varias razones: la primera es que, si está aquí buscándome, es porque muy probablemente mi madre la mandó. En segunda, se supone que yo no soy Lily Del Valle, sino Lily Shiozaki y si me aparezco enfrente de Sarah en estos momentos se nos caerá el teatrito. Y en tercera, realmente no tengo ganas de darle explicaciones a nadie en estos momentos...

¿Explicaciones de qué tipo? ¿Y por qué tu madre mandaría a tu hermana en tu busca?.- Marife cada vez entendía menos.

Es una larga historia, Marife.- Lily suspiró.- La historia de mi vida... Por favor, tienes que ayudarme, saca a Sarah de aquí...

Uhm... Bueno, pero a cambio tendrás que convencer a Hades de que no mate a Misaki...

Demonios... .- murmuró Lily.- Preferiría besar a Ken Wakashimazu...

¿Quieres que te ayude o no?

Está bien, está bien, solo saca a Sarah de aquí...

¿Y cómo es tu hermana, físicamente?.- le preguntó Yoshiko a la recién llegada.- Para ayudarte a buscarla.

Alta, delgada, cabello castaño oscuro, aunque como tengo más de cuatro años sin verla ya no estoy tan segura de si en verdad era ella o no a quien vi entrar aquí... .- respondió la chica, con tristeza.

No te preocupes, si ella está aquí te ayudaremos a encontrarla.- intervino Wakabayashi, queriendo darle ánimos a la muchacha.

Eso tenlo por seguro.- Misaki sonrió.

Hades... ¡Hades!.- Marife le gritaba a su hermano con discreción.

Hades, creo que tu hermana te llama.- hizo notar Alisse.

Es un intento muy pobre de tratar de hacer que no golpee a Misaki.- refunfuñó Hades, molesto, aunque fue tras de su hermana, jalando a su novia con él.

¿Cuál es tu nombre?.- preguntó Wakabayashi, notando que de pronto el grupo había disminuido de manera considerable.

¡Qué modales los míos!.- se disculpó la chica.- Con la emoción de ver a mi hermana se me olvida presentarme... Soy Sarah Del Valle.

Yoshiko Yamaoka.

Taro Misaki.

Genzo Wakabayashi.

Un placer conocerlos a todos. Y gracias por la ayuda.

No hay de qué. Por cierto que el que trataba de golpearme era Hades, supongo, la chica que estaba tratando de detenerlo era su novia, supongo, aunque no me sé su nombre, y la chica con quien discutía era su hermana Marife.- aclaró Misaki

Ya veo... ¿Y a dónde fueron? Yo me acerqué porque tenía la esperanza de que ellos me ayudaran... .- preguntó Sarah.

No deben de tardar en regresar.- supuso Wakabayashi.- Por lo pronto, cuéntanos por qué estás buscando a tu hermana.

Pues es que hace tiempo huyó de la casa, sin motivo aparente.- explicó Sarah.- He tardado todos estos años en averiguar a dónde se marchó, ya que es muy buena para irse sin dejar huellas. Por pura casualidad averigüé que vino a Japón y por eso estoy aquí.

¿No sabes entonces por qué huyó de tu casa?.- preguntó Misaki, sorprendido.

No. Yo le pedí que no se fuera, sabía que algo la estaba molestando pero nunca conseguí que me dijera qué era lo que le pasaba. Le dije que, fuera lo que fuera, lo resolveríamos juntas pero no me escuchó...

Ya regresamos.- anunció Marife, quien venía en compañía de Alisse.- Disculpa por haberte dejado sola, pero se nos presentó una emergencia. Me llamo Marife Takeuchi.

Y yo soy Alisse Farfán.- dijo la chilena.

Soy Sarah Del Valle, gusto en conocerlas.

Bueno, pues vamos, te ayudaremos a buscar a tu hermana.- dijo Alisse, al tiempo que le ponía una mano en el hombro a la muchacha y la alejaba del grupo.

Vamos con ustedes.- ofreció Wakabayashi, pero Marife lo detuvo.

¡No!.- dijo.- Tú tienes que buscar a Lily, ¿en dónde la dejaste?

¡Ah! Pues no tengo ni idea de en donde se metió, ella fue quien me abandonó.- respondió Genzo.

Ya, deja de hacerte la víctima y mejor ve a buscarla.- Marife casi empujó al joven hacia el lado opuesto de donde se habían marchado Alisse y Sarah.- Taro, Yoshiko, ¿me acompañarían a hacer una llamada?

Claro, Marife, pero, ¿no le vas a ayudar a Sarah a buscar a su hermana?.- preguntó Yoshiko.

Alisse la ayudará por ahora, después las alcanzamos, es urgente lo que tengo que hacer.- dijo Marife.

De acuerdo.- aceptó Misaki.

Genzo Wakabayashi miraba hacia el sitio por donde se habían marchado Alisse y Sarah. Esta última le recordaba muchísimo a alguien, pero no podía precisar a quien... Además, estaba el hecho de que los latinos se habían comportado de una manera extraña desde la llegada de Sarah. De pronto, se le ocurrió que, quizás, su hermana perdida era alguien que ellos conocían...

Se alejó en busca de Lily; no tenía ni idea de en dónde podía estar, pero debía buscarla ya que, después de todo, él la había invitado a salir y no sería cortés irse sin ella. Sin embargo, no tuvo que buscarla mucho; muy cerca de allí estaban Lily y Hades, éste se encontraba recargado contra un árbol, apretando los puños, y ella intentaba tranquilizarlo.

Hasta que te apareces, chico.- le dijo Lily, al verlo.- Me preguntaba en dónde te metes cuando te necesito.

No sabía que podías llegar a necesitarme, de lo contrario nunca me habría separado de ti.- respondió Genzo, galante.

Hades comenzó a reírse pero Lily le dio un codazo en las costillas.

Tú cállate.- le dijo, por lo bajo.- Ayúdame con este muchachote, que aun tiene ganas de molerse a golpes a tu amigo.

¡Ja! No me digas que tú necesitas ayuda para detener a alguien, eres la mujer más fiera que he conocido hasta ahora.- se burló Genzo.

Hades es mucho más fuerte que yo, por si no lo habías notado.- gruñó Lily.- Por eso necesito que tus músculos y tú me ayuden a detenerlo.

Wakabayashi no respondió, solo sonrió. Tomó a Hades de un brazo mientras que Lily le tomaba el otro, y los tres salieron del festival.

Aquí me quedo yo, a esperar a Alisse.- anunció Hades, cuando Lily y Genzo hicieron el intento de marcharse.

Uhm, no sé si será prudente dejarte solo... .- comentó Lily.

Ya se me pasó el coraje, ya no tengo deseos de golpear a Misaki.- gruñó Hades.

Lily le lanzó una mirada de incredulidad.

Es en serio.- Hades se mostró tranquilo.- Tú marcharte con tu galán.- añadió, en español.

Lily le dio un puntapié en la espinilla, antes de marcharse furiosa en dirección del coche de Wakabayashi.

Es una fiera, ¿eh?.- comentó Wakabayashi, divertido.

Te compadezco.- resopló Hades, al tiempo que se sobaba la pierna lastimada.

Ya en el coche, Wakabayashi no resistió las ganas de comentarle a Lily sobre la presencia de Sarah.

Pasó algo muy extraño hace rato, mientras estabas desaparecida.- comentó Genzo, mirándola de reojo.- Por cierto, ¿a dónde fuiste?

Al tocador.- contestó Lily, sin más.- ¿Qué fue lo que pasó?

Apareció una chica llamada Sarah, que buscaba desesperadamente a su hermana...

Es normal que los niños se pierdan en los festivales grandes...

Uhm, no, según entendí, su hermana no es una niña...

¿Ah, no?

No. Supuestamente, la hermana de Sarah desapareció hace varios años, al parecer se escapó de su casa y ella vino a buscarla aquí a Japón. Al igual que tú.- Genzo aprovechó que el semáforo estaba en rojo para mirar a Lily de frente.

¿En serio?.- Lily se sintió cohibida por esa mirada. Por un momento creyó que Genzo había descubierto todo... .- ¡Qué coincidencia!

Sí, y mucha. Es demasiada casualidad que dos latinas vengan a Japón a buscar a sus hermanas porque supuestamente es aquí en donde están residiendo...

¿Qué tratas de decir?

Nada, solo lo comento. Lo que sí es que Sarah se me hizo muy familiar... Me recuerda a alguien.- Genzo volvió a mirar a Lily de reojo.

Lily ya no contestó. Presentía que Genzo se acercaba cada vez más a descubrir lo que estaba pasando...

En cuanto llegaron al departamento, Lily se bajó del coche musitando apenas un "hasta luego", pero Genzo se bajó también y la siguió.

¿Qué pasa?.- preguntó ella.

¿Te alejaras de Matsuyama?.- respondió él, con otra pregunta.

Voy a pensarlo.- prometió ella.

Una suave brisa comenzó a soplar. Genzo percibió el aroma del perfume de Lily, así como ella percibió el de él. Lily se acercó un poco y entreabrió sus labios de una manera muy provocativa. Genzo se acercó aun más y le puso las manos en la cintura, mandando al demonio la vocecita que le decía que no fuera a cometer otro error... Lily sentía que esas manos le quemaban, pero tampoco pudo hacerle caso a la voz de su conciencia que le gritaba que estaba actuando de una manera muy poco profesional... Los labios de ambos casi se rozaban, estaban a tan solo unos milímetros... Y en ese momento, el celular de Lily comenzó a repiquetear.

Gracias por traerme. Hasta pronto.- Lily se separó inmediatamente y entró presurosa al departamento.

Wakabayashi la vio entrar, pensando en que los teléfonos celulares podían llegar a ser una verdadera molestia...

¿Hola?.- Lily contestó su teléfono, al tiempo que trataba de dominar su respiración agitada.

Lily.- era Marife.- Conseguimos sacar a tu hermana del festival sin que volviera a toparse con Misaki o con Wakabayashi. Se va a quedar en el mismo hotel que Alisse, ella la vigilará, así que no te preocupes.

Muchas gracias. Yo me encargué de que tu hermano no se golpeara a tu amorcito.

¡No es mi amorcito!.- protestó Marife, ante las carcajadas de Lily.- ¡Deja de reírte! Pues si Taro Misaki es mi amorcito, entonces Genzo Wakabayashi es el tuyo.

¡Ah!.- súbitamente, Lily dejó de reírse.- Ni me lo menciones...

¿Paso algo con Wakabayashi?

Nada, afortunadamente me interrumpiste antes de que cometiera un error estúpido...

Bueno... .- Marife notó la extrañeza en la voz de su amiga y optó por cambiar el tema.- ¿Qué vamos a hacer con tu hermana?

Un problema a la vez, no tengo cerebro para tanto.- gruñó Lily, al tiempo que pensaba en cómo hacerle para dejar de pensar en el beso que no le dio a Wakabayashi minutos antes.

Éste, por su parte, se quedó unos minutos afuera, esperando a ver si Lily regresaba a terminar lo que habían dejado inconcluso. Se moría de ganas de morder los labios de la mexicana y percibir su respiración al compás de la de él, pero ella ya no regresó. Genzo suspiró y subió a su automóvil, pensando en cuánto tiempo más podría seguirse negando a sí mismo que no estaba enamorándose de Lily.

A tan solo unos cuantos metros de la puerta del departamento, había un joven que había presenciado la inconclusa escena de amor entre Lily y Genzo. El joven apretaba los puños y resistió las ganas de salir al encuentro del portero japonés para golpearlo.

Debí de haberlo supuesto.- musitó Matsuyama, en voz baja.- No puedo darte ni un segundo de ventaja porque te aprovechas, Wakabayashi. Pero no creas que esto se va a quedar así, no voy a permitir que me robes a Lily así como me robaste a Yoshiko.

Matsuyama se perdió en la noche, procurando no pensar en la mirada de anhelo y deseo que Lily tenía cuando Genzo estuvo a punto de besarla.

Notas:

Recuerden que Lily detesta a Ken Wakashimazu con toda su alma, igual que yo xD.