Viviendo con Ryuichi.

N/A: Este es POV de Yuki… Si se puede decir. Los personajes no me pertenecen, y se lo dedico a mi hermano… "sombra" para los que siguen mis fics, mi gran amigo, compañero y confidente, que hace un poco mas mágica mi vida, y da ese asomo infantil que a veces me falta.

Si… fue esa tarde. Shuichi había llegado temprano de trabajar… y yo no tenía tanto atraso con la novela. Estaba como siempre, hablando sin parar, y yo ya estaba aburrido. Mirábamos tele en la cama, y yo comencé a juguetear haciéndole cosquillas en su ombligo y sus costillas. Creo que se enojó, y procuré arreglar las cosas… después de cenar, nos fuimos a tender de nuevo, sin la tele, le ordené que la dejara en su cuarto (era suya, después de todo), y arrepentido por su anterior pataleta, parecía que íbamos a tener una sesión bastante fuerte de sexo, y entre beso y beso, me preguntó:

¿Cómo es que soportas a un baka como yo? –Habíamos estado de costado, y entonces me puse sobre él.

-Porque antes ya he vivido con uno.

Cuando no respondió el siguiente beso, supe que había metido la pata.

¿Qué?

-Es una larga historia.

Dejó de mirar al techo, para mirarme muy fríamente.

-Pues quiero saberla ahora.

Conocía esa mirada… esa que decía que no le importaba el puto mundo de no cumplirse sus deseos. Me senté en la cama, de frente a él.

-Mira… Con todo lo de… Ya sabes… Mika todavía estaba de novia con Tohma, y lo acompañaba a las giras, como has de suponer, yo no deseaba quedarme de monje con mi padre, y era ella la que tenía que cuidarme, pero mas que nada yo hacía de percherona.

¿Y?

-Pues dormía con ella, y Tohma con Ryuichi… Noriko se tenía que encargar de su pequeña hija, y Mika del alojamiento, y la comida. Se suponía que era Noriko la que cuidaba a Ryuichi, pero siempre él iba y se apegaba a Mika. Yo ayudaba a Tohma, y escribía mi primera novela en mi laptop.

"pero fue un día que Noriko y Mika discutieron amargamente. Tohma me mandó fuera con Ryuichi, e intentó conciliar. Cuando me enteré… Me enojé mucho… pero qué es un hombre ante Mika y Noriko juntas.

"Así que de ahí en adelante, era mi deber cuidar de Ryuichi durante esa gira, que duraría cuatro meses, pero al parecer se alargaba.

Perdido entre esas memorias, que creía perdidas ante el accidente, no se percató de la mirada acristalada de Shuichi.

-Así… Así que… Tú… cuidabas de mi ídolo… Y dime cómo era…

Lo miró con su carita brillante… aún sobre la cama, con las piernas abiertas en torno a su cintura. Recorrió sus rodillas, hasta sus caderas, y presionándose contra él, llego hasta su boca, y le dijo:

-Luego de que terminemos con esto.

Creyó que iba a encontrar resistencia, pero el beso fue bien respondido.

-Está bien… Pero luego me cuentas…

sssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss

Shuichi se había quedado dormido. Dormía sobre su pecho. Abrazado. Las piernas entrelazadas. Y él con la nuca entre sus manos. La colcha les cubría bien… sintió que su mano se adormecía, y la bajó, rozando accidentalmente el cuerpo de Shuichi, que se movió.

-Lo siento. ¿Te desperté?

-Mh… Yuki… -Sonrió en silencio, y estiró la mano buscando sus cigarrillos, parecía que no había despertado. – Yuki, cuéntame de tu vida con Sakuma… Onegai.

Sólo suspiró profundamente antes de prender el cigarrillo que estaba en su boca, y empezar a contar.

-Al principio nada extraño, ya te imaginarás al extravagante Ryuichi que es hoy en día con algunos años menos. Nunca pasó nada entre nosotros, si tienes celos, ese idio… perdón, ese tipo me deja frío. Pero tenía sus momentos.

"Costaba mucho a veces hacerlo trabajar, al final era un verdadero dolor de cabeza para Noriko y Tohma hacerlo que practicara todos los días. Pero siempre que quería hacía cosas realmente asombrosas. Aunque la verdad, se la pasaba haciendo burbujas. Todo el día. Tohma la compraba las cosas para ello, así se estaba tranquilo.

"Mh… cosas que le pudieran interesar a un fan… Recuerdo que una noche… Ya me estaba recuperando de sensei, para fue fácil entonces tener muchas chicas, aunque Mika se enfadara, y una me afectó un poco mas que las otras, y estaba de noche escribiendo, bastante sombrío, era un historia bastante trágica, y los demás aún no volvían del ensayo. Mika me mandó a tenerle listo el baño a Ryuichi, y lo hice de mala gana. Me volví a escribir… En ese hotel, las tres habitaciones compartían baño. Dejé la puerta con seguro, no me gustaba que Ryuichi me asustara, solía hacerlo con frecuencia…

-Ya, pero cuenta, qué pasó.

-No seas impaciente… Creo que vi por la puerta del baño, apoyado en el dintel, un conejito rosa que saludaba. Luego estaba sobre la cama, y al rato en mi escritorio.

"-Ryuichi, vete a bañar.

"-No soy Ryuichi, soy Kumagoro, nanoda.

"-bien Kumagoro, entonces, dile a Ryuichi que se vaya a bañar.

"-Es que dice Mika que tú no te has bañado aún, y Ryuichi que quiere bañarse contigo.

Tomé al Kumagoro por el cuello, y le dije:

"-Mira, Kumagoro, dile a Ryuichi que no quiero bañarme con él, que a Mika no le gustaría. Y deja ya de molestarme.

Ryuichi salió de su escondite hecho una furia, y me gritó:

"¡No debiste hacerlo¡Has tocado a Kumagoro, y la maldición de Kumagoro caerá sobre ti!

"¿Qué?

"¡La maldición del conejo rosa caerá sobre todo aquel que lo toque!

"-Ah, si, y cual es esa maldición…

"-Se volverá yaoi…

Ahí perdí los estribos que no tenía, y lo fui arrastrando hasta el baño, donde de no sé donde saqué fuerzas, y lo tiré a la bañera con ropa y todo.

"¡No me vengas con huevadas que tiño tu mierda de conejo rosa en azul! (Adaptación chilensis)

Ryuichi tenía los ojos llenos de lágrimas y se abrazó a Kumagoro, y me dijo:

"¡Pues no! –Y me agarró de la ropa, y me lanzó a la bañera con él.

Alertados por los gritos, Tohma y Mika fueron a ver que pasaba y nos encontraron así. Mika se enojó bastante, por el desastre que hicimos, pero eso tuvo consecuencias. Ryuichi jugaba todo el tiempo con Kumagoro, y no se apartaba de él. Solía hacer maldades… tonterías de un par de chiquillos…Tohma me decía que debía tenerle paciencia. No se atrevían a dejarlo solo, y no lo querían cuidar.

"Un día, al volver de compras, me encontré a Kumagoro sobre la cama. Lo dejé bajo la mía, y corrí a la farmacia a comprar tinte para ropa. Yo le caía bien a una cocinera, y me hizo el favor de teñirlo mientras ellos no volvían hasta tarde. Mika, Tohma, y Noriko se habían dado cuenta, y me regañaron porque Ryuichi iba a llorar

"Ryuichi lo tomó, me dio las gracias por haberlo cuidado, y al día siguiente jugaba con el en la terraza, donde los demás tomaban té. De repente interrumpe la conversación para decir:

"-Este conejo debería ser rosado.

Shuichi reía sobre la cama, me miró a los ojos, y me preguntó, sonriendo:

¿en serio?

-Si quieres pregúntale a cualquiera de los tres.

-Pero y que pasó después.

-Nada… creo que ya le habían advertido, pero él hasta ese momento no notó el cambio, y luego le gustó azul. Es mas, dijo que le había quitado el aura maligna, y que ahora podría jugar con él.

-Mh… se apoyó con ambos brazos sobre mi pecho, y me besó en la comisura de los labios. Se acostó sobre mí, su frente en mi cuello.

-Después se compró varios conejos rosa… Yo le dije que estaban todos malditos, y él que por eso los tenía, para proteger al mundo de la devastación.

-Y te acuerdas de algo mas…

-Nada tan especial… Por ejemplo, me a acuerdo cuando fue muy formal a algo, una premiación, parece, y en vez de flor, se puso un Kumagoro chico en la chaqueta, o cuando llegó con el pelo verde, y una sotana de cura… Cuando tomó mi arma de práctica y mató un gato… O una vez que… mira, solía quedarse mirando como yo escribía, siempre molestaba así que yo lo echaba. En una de esas estaba jugando con burbujas, y ya dejó de funcionarle. Entonces se tapó de golpe una oreja y dijo

"¡Tengo una mosca en mi oreja!

"-ya…- Le dije yo ��

"¡Mira! –Se destapó, y salió de allí una polilla.

Él estaba feliz.

Shuichi reía por las ocurrencias de su ídolo, y más con los tonos de voz que contaba su adorado amante.

-A veces llegaba con el conejo rosa, a rogarme que le deje dormir con él. Cuando finalmente acepté, de noche se cayó de la cama. O esa vez que se tapó la cara con un plato dibujado para no ser reconocido. Una vez una fan le quitó el Kumagoro, y la salió persiguiendo. Solía perderse con facilidad…

Y no le gustaba ser encontrado.

Comía cualquier cosa… como comida de perro. Le encantaba tener perros por eso. Normalmente dormía la mitad de la noche en el suelo, y en puros boxer. A veces se levantaba de su cama para dejarse caer en un diván. Dormía mucho.

¿Y cual era su comida favorita? –Preguntó Shuichi.

-Pues… los postres. Como yo cocinaba, normalmente tenía que dejar horas del día para hacerle postres. Era un fresco como tu, ni siquiera sabía como lavar la loza. Como has gravado con él, sabrás lo duro que es en la mañana levantarlo, y luego, siempre pelea por el baño.

-Mh… Se echa una hora. Y deja mas salpicado que yo.

¿aun no se baña si no está su patito de hule amarillo?

-Y su barco crucero de vapor.

-Vaya con ese crío de treinta años. Él tenía su propia laptop, al finalizar el concierto, porque antes siempre me quitaba la mía… jugaba Sims, todos los posibles, y Age Of Empires en todas sus versiones, on-line.

-Si… tiene muchos videojuegos. Por eso es que no te gustan…

-Mh… Si.

-Aun yo encuentro que es difícil vivir con el… -Yuki empezaba a quedarse dormido.

-Lo realmente difícil, es vivir con sus pataletas. Fue un alivio cuando se separaron… En realidad, las cosas entre ellos iban demasiado mal. Fue como un matrimonio que se acaba para ellos… Todos quedaron mal.

Shuichi ya no contestó. Y Yuki ya no pudo seguir hablando de sueño.

No sé si les habrá gustado… sencillamente quise transcribir algo… Pero creo que me quedo corta. La complejidad de una persona no puede ser descrita así… Ryuichi serio asusta, y creo que puede haber continuación.

No esperen lemon… Esta es otro tipo de historia.

Cualquier duda… si quieren agregarme al msn, vale, pero si nunca están conectados, los borro. OK?