Cap.9 Daimonions
Nath y Naurloth resultaron ser muy buenos alumnos en idiomas, y aprendían rápido al ser tan curiosos.
Todo lo que veían preguntaban en seguida que era, incluso las más insignificantes plantas o animales, todo lo preguntaban y nunca lo olvidaban, al menos la mayor parte de las cosas, y al cabo de un mes, con esfuerzo eran capaces de mantener con esfuerzo una pequeña conversación, y de hacer todo tipo de cosas levantando objetos.
Un
día, en furnost, por la noche, galdor dijo:
-creo que ya
estáis preparados para esto… - dicho esto, saco de su
mochila un bote lleno de una sustancia extraña, como Polvo.
Abrió el frasco y esa sustancia voló hacia los dos.-
Mañana sabréis que es esto.
Al
día siguiente, junta a Nath y a Naurloth aparecieron durmiendo
unos animales, un armiño al lado de Naurloth y un puma junto a
Nath. Se sobresaltaron y los animales dijeron:
- Tranquilos, somos
vuestros daimonions.
¿Qué sois?-pregunto Nath.
Partes de vuestra alma convertidos en animales, el Polvo que os dio Galdor, era distinto al otro, permitirá que nos transformemos a voluntad, el polvo normal no permite transformarse en la edad adulta. Me llamo Naule (Nota: en el rol sigue siendo Nayra), y ella es Tanna- Fue el daimonion de Naurloth quien respondió esta vez.
¿Ya sabéis todo lo que queríais?- Los chicos se sobresaltaron, Galdor había aparecido detrás de ellos.
Pues si-Nath respondió por ambos- ¿Qué haremos hoy?
Creo que ya estáis preparados, comenzaremos a atravesar el desierto del Haradac para continuar vuestro entrenamiento.
Vendieron los caballos en Furnost, y Naule se transformo en un dragón dorado y fue montado por Naurloth, para que Galdor montara a Alandir.
Tardaron tres fatigosos días en cruzar el desierto, vieron partidas de kulls, pero por fortuna ellos no fueron vistos por los kull.
Llegaron a un valle y Galdor dijo unas palabras en el idioma antiguo, y un enano les abrió.
Nuevos jinetes-dicho esto, Galdor se desvaneció dejando a los niños a la puerta con lágrimas en los ojos y la certeza de que no lo volverían a ver.
