Gracias a todos los que me han enviado r/r y también a aquellos que no, pero que sin embargo, siguen leyendo este fic ^-^

Lizbeth: qué puedo decir? Gracias!!! ^-^

Angie Weasley: te comprendo, yo tampoco sé que decir en los r/r... y a veces tampoco sé que escribir en las respuestas!!! =S.... gracias *Myung se sonroja *, que genial que te guste mi fic =D...

Kathy: quizás... ¿quién te dice que todo será tan fácil, que todo será feliz? * risa macabra* no te lo puedo decir, pues la verdad no lo sé, aunque tu review me hace pensar y tener ciertas ideas... ^-^

Joyce Granger: ojalá que mi mente quiera que las cosas se le resuelvan a Siri-boy (TT), pobechito él...¿lo estoy torturando mucho? ojalá que no .

Kitiara : si sigues leyendo sabrás el porqué, sólo te digo que...nah, mejor no te digo, lee ^_^

Norm: O_O...

Ok, continuemos con el fic...

Sirius comenzó a subir las escaleras, teniendo como única preocupación e esos momentos, a Harry. No le importaba si al final terminaba en Azkaban de nuevo, mientras Harry se encontrara bien.

- ¡Harry!- gritó Sirius. Harry estaba teniendo pequeñas convulsiones, mientras que con sus brazos trataba de protegerse de aquello que lo estaba atormentando.

Sirius no sabía que hacer, no entendía bien lo que sucedía a Harry, hasta que escuchó algunas palabras:

- Por favor... Tío Vernon...no...me lastimes...más.

Mientras, en la cocina , Remus miró a Dumbledore con algo de culpa. No sólo por el hecho de que Dumbledore hubiera visto a Sirius reaccionar así, si no por el hecho de que habían revelado que Harry estaba ahí, y que se lo habían ocultado.

Dumbledore volvió a dejar inconsciente a Wormtail, lo ajustó unas cadenas mágicas a sus muñecas y tobillos. Y con un leve asentimiento a Remus, comenzó a subir las escaleras. Éste, con cierta cautela y con una última mirada a Wormtail, se dispuso a seguirle.

Sirius se acercó a Harry y trató de despertarlo, no obteniendo éxito alguno. Comenzó a desesperarse cuando una voz tranquila dijo desde la entrada de la habitación, "Enervate"

Un rayo proveniente desde donde la voz había hablado, tocó a Harry despertándolo inmediatamente. Sirius miró hacia la puerta, y no se sorprendió al ver a Dumbledore allí. Después de murmurar un "gracias", volvió a fijarse en Harry. Éste tenía la cara cubierta por sudor y lágrimas, estaba respirando agitadamente y miraba hacia todos lados, con miedo de encontrar algo inusual ahí, o alguien inusual.

- ¿Harry te encuentras bien?- preguntó tímidamente Sirius.

Harry observó unos segundos a Sirius, antes de abrazarlo y ponerse a llorar desconsoladamente.

- Fue horrible...Tío Vernon no paraba de golpearme y luego de que se cansaba me pateaba hacía la calle, donde habían personas encapuchadas. Luego oí una horrible risa y vi un rayo de luz verde...- Harry continuó sollozando en los brazos de Sirius, quien tiernamente acariciaba el desordenado pelo de Harry, tratando de calmarlo y confortarlo. Después de un rato logró tranquilizarse. Volviendo a apoyarse en las almohadas, por fin se fijó que él y Sirius no eran los únicos en a habitación.

Ahí se encontraban Remus y un señor extraño que él no conocía, pero que sin embargo le resultaba vagamente familiar.

- De acuerdo Harry.- Dijo Sirius, haciendo dar un pequeño saltito al nombrado.- Sé que quizás no te agrade mucho la idea, pero creo que deberías decirnos todo lo que te han hecho los Dursley.

- ¿ A ustedes... ustedes tres? ¿TODO? Es... es que...es que...- Harry no terminó la frase, ya que no sabía que decir. Resignándose, suspiró, y respondió: De acuerdo, es sólo que...bueno en fin, será mejor que se los diga ahora...

Los tres adultos, pusieron toda su atención al relato de Harry:

- Ellos me golpeaban bastante y me molestaban diciéndome cosas cómo "anormal" o "inútil fenómeno". Creo que los peores recuerdos que tengo fueron cuando sin querer quemé el desayuno de Dudley, o cuando me dijeron que mis padres eran unos estúpidos buenos para nada y yo les dije que porque no mejor se fijaban en su hijo. Pero por el motivo que me echaron fue porque me dijeron que mis padres merecían haber muerto y que yo debería estar agradecido con ellos y yo hice que Dudley saliera rebotando por toda la casa.

Sirius estaba bastante molesto cuando miró a Dumbledore, quien aparentaba ser más viejo que nunca y el brillo de sus ojos se había ido.

- En las manos que lo dejaste Dumbledore...- La voz de Sirius estaba llena de odio y rabia. Remus estaba algo confundido, pero en su interior concordó con Sirius.

- El error más grande que he tenido en mi vida, creo que será mejor que arreglemos tu situación lo más pronto posible, Sirius. Iré a hablar con el Ministro enseguida, me llevaré a Pettigrew y le diré que debe haber un juicio. Hasta que no haya seguridad de uno, te pido que te quedes aquí, sería muy peligroso de otra manera.

Sirius, aún molesto, asintió de mala gana. Harry, por mientras, se había vuelto a dormir.

- Bien, creo que debo marcharme si quiero encontrar al señor Ministro en su oficina. Nos veremos mañana.- Con un leve "pop!", Dumbledore hizo que Wormtail apareciera en la habitación y con otro pop! desaparecieron.

Remus observó a Sirius durante un momento ¿ Cómo Sirius podía volverse así tan sólo por un niño? Ciertamente, Harry no era un niño cualquiera, pero Padfoot ni siquiera reaccionaba así cuando James o Lily eran molestados por los de Slytherin. Debía tener un sentimiento muy fuerte." No debe, lo tiene" concluyó Remus.. Era culpa, remordimiento, pero más que nada le tenía cariño. Lo quería como si fuera su propio hijo, y tan sólo se había encontrado con él hacía un día o algo así.

- Sirius, creo que sería bueno que descansaras, debes estar agotado.

- Me quedaré aquí con Harry.

- Pero...

- Escucha Moony, me quedaré cuidándolo. No quiero, que vuelva a tener una pesadilla así y que se encuentre sólo de nuevo.

- De acuerdo. Estaré en la habitación para los invitados- los cuales no tengo muy seguido- si me necesitas. Está al otro lado del pasillo. El baño está en medio de las dos habitaciones. Buenas noches Padfoot, trata de descansar.

- Buenas noches Moony.- Respondió el aludido, sin dejar de mirar a Harry.

Remus suspiró y salió de la habitación. Sirius se sentó a lado de Harry, cuidando no despertarlo.

- Espero que todo salga bien. No por mí, sino por ti Harry.- Susurró Sirius, mirando por la ventana que dejaba ver la noche sin luna.