Wuenas nenass! Nos volvemos a ver de nuevo, jejeje, esta vez he tardado algo más, pero ske stoy perrilla (vaga) cómo siempre. jejej. Pues ahí os dejo con esto, espero ke os guste.

Nos leemos más abajo!

YaS ;-P

#04# Errores a los dos pasos

.- La invisibilidad en las sombras es uno de los factores más importantes de un ninja. Pero eso no se puede llevar a cabo a menos que no se tenga un completo control sobre los movimientos a realizar para no producir ningún ruido – Splinter se colocó la venda en los ojos atándosela detrás con un nudo y, seguidamente, sacó de debajo de sus ropas dos pequeñas pulseras llenas de cascabeles. Los pequeños se lo miraron sin comprender – silencio. Eso es lo único que quiero oír.

Leonardo se acercó frunciendo el ceño sin saber a lo que se refería y dirigió una mirada a Don y a Mickie que también lo observaban confundidos.

.- El que consiga robarme los cascabeles sin que yo me percate y éstos no suenen. Se gana la tarde libre.

.- ¿sólo eso? – preguntó Michelanggelo con sorpresa - ¿robar cascabeles? – la pequeña tortuga se acercó aprovechándose de la ceguez de su maestro y agarró un cascabel con la mano para tirar de él.

Le fue imposible, Splinter azotó un golpe a la tortuga con el bastón justo cuándo Mickie puso sus dedos en la bolita.

La tortuga se incorporó aturdida y algo sorprendida:

.- Michelanggelo, se supone que no debo darme cuenta, y si haces que el cascabel suene, lo sabré – Mickie se lo miró sin comprender como había adivinado que se trataba de él si llevaba la venda en los ojos. – Leonardo, empieza tú. – La pequeña tortuga obedeció y, pasando por el lado de su hermano tirado en el suelo, se acercó con sigilo rodeando al maestro que permanecía completamente quieto. Agudizando sus sentidos al máximo esperando poder notar un paso en falso por parte de la tortuga para atacarle.

La tortuga se colocó a sus espaldas controlando por completo cada uno de sus pasos. Observó a Splinter que no movía ni un músculo, así que alargó temerosamente la mano hacia la muñeca de Splinter y, cuándo fue a agarrar uno de los cascabeles, el maestro se giró veloz y lo golpeó alejándolo unos metros:

.- Respiras demasiado fuerte. Pude oírte – Leo gruñó asqueado y volvió a incorporarse – Donatello, tu turno.

Don se acercó por uno de los costados y, al crujir el suelo bajo sus pies, el maestro lanzó un bastonazo hacia su dirección, pero de un salto, Don consiguió esquivarlo cayendo justo al otro lado que, aprovechando el impulso de la caída, agarró un cascabel de un movimiento rápido.

Éste no sonó.

El maestro no se percató de ello y continuó alerta al no haberle dado. Permaneciendo completamente quieto en dónde había caído, Donatello agarró otro de un movimiento fugaz y, moviéndose hacia las espaldas de Splinter, logró alcanzar otro.

Ninguno de los dos sonó.

Pero algún mal gesto lo delató y Splinter consiguió alcanzarlo de otro bastonazo tirando a la tortuguita levemente por los suelos. La anciana rata apartó la venda de sus ojos y se miró las pulseras. Faltaban 3 cascabeles.

Confundido, miró a su alumno que permanecía en el suelo sentado con una sonrisa arrogante en la cara mientras sostenía en sus manos los tres cascabeles robados:

.- Vaya – soltó el maestro perplejo – me percaté de uno, pero no del resto. Felicidades hijo, te los has ganado. – Donatello sonrió triumfante cuándo Splinter posó su zarpa en su cabeza mientras le revolvía la bandana descolocándosela.

Leonardo levantó a Michelanggelo que observaba la escena sacando morros por el trabajo de Don:

.- Si Donny hubiera sido el primero en hacerlo, seguro que también hubiera terminado en el suelo.

.- Acéptalo, Mickie. Donny es el más rápido de entre nosotros – Leonado posó su mano en el hombro de Michelanggelo mientras éste se cruzaba de brazos algo ofendido.

.- Oye Raph¿verdad que puedes superarle? – mickie se quedó perplejo cuándo descubrió que le hablaba a la pared. Fue entonces cuándo se percató de que Raphael no había estado presente durante el entrenamiento. Solía ocurrir a veces que llegaba más tarde o pasaba desapercibido por completo hasta que no le tocaba hacer ningún ejercicio.

Tal vez por eso Mickie llegó a considerar que Raph había estado con ellos todo el rato. Confundido, agarró el brazo de Leo cuándo éste empezó a marchar:

.- Leo. ¿dónde está Raph?- Leonardo echó un vistazo rápido por la sala frunciendo el ceño:

.- Es verdad…..no lo he visto en mucho rato – la pequeña tortuga se acercó a Splinter que colocaba los cascabeles que Don le había arrebatado de nuevo en su sitio de la pulsera – sensei……Raphael no está. – la anciana rata arqueó una ceja interrogando con la mirada mientras seguía hurgando por las enormes mangas de su kimono.

.- Ésta mañana había salido al drenaje…….no lo he vuelto a ver entrar – Donatello apareció por detrás del maestro con aire preocupado.

Sin embargo Splinter no les contestó. Por unos instantes perdió la mirada en un punto de la pared divagando sobre las horas que habían pasado des de que la tortuga había salido. Empezó a preocuparse:

.- …….que raro……-susurró bajo la atenta mirada de sus pupilos que esperaban alguna decisión por su parte. Pero, por el momento, no la hubo.

.-

.- Parece que te dignaste a acercarte.

.- No vas a hacerme daño – el viejo echó a reírse de nuevo.

.- ¿Cómo lo sabes?

.- Me lo has dicho.

.- ¿te fías de mi palabra? – Raphael negó lentamente con la cabeza sin dejar de mirar al hombre - ¿entonces?

.- Aunque lo intentaras, no lograrías alcanzarme.

.- Pareces seguro de ello.

.- Lo estoy.

.- así me gusta. Voy a creerte – sentado en una esquina agazapado con algunas mantas, el hombre alargó la mano para alcanzar una mugrienta mochila de cuero negro que se adornaba con unos cuántos años de trote. La piel, desgastada, dejaba entreveer los filamentos de un cuero falso y sintético que, con un par de rasguños más, acabaría por perder su contenido.

Hurgó en su interior hasta que alcanzó algo envuelto en papel de aluminio. Con tranquilidad, lo desenvolvió mostrando algo parecido a un bocadillo no con muy buena pinta.

Raphael arrugó la nariz de asco, pero tenía tanta hambre que no le importaría comérselo. Por unos segundos, se quedó sentado en una de las cajas junto a ese humano que, a pesar de su pinta desaliñada y sucia, guardaba más amabilidad y sabiduría que cualquier otro que la pequeña tortuga hubiera alcanzado a ver por la televisión.

O eso parecía.

Ese hombre había estado viviendo en la calle durante mucho tiempo. Seguro. Podía notarse mil y un paisajes que quedaban guardados detrás de las inmensas bolsas que adornaban sus enrojecidos ojos.

Raphael no pudo evitar preguntarse si él mismo hubiera logrado sobrevivir durante tanto tiempo en aquellas condiciones:

.- ¿Tienes hambre? – la pregunta del humano le cogió desapercibido por completo y, meciendo la cabeza para centrarse, dudó durante varios segundos si decir que si o que no. Finalmente negó con la cabeza:

.- ¿seguro? Tienes cara de estar hambriento.

.- Bueno – Raph acabó por ceder y, agachando la mirada con algo de vergüenza por admitirlo, acabó diciendo la verdad – pues…..en realidad si…….- el humano le alargó el bocadillo colocándoselo en frente de las narices. Raphael se tiró hacia atrás por el susto y luego lo miró:

.- Tómalo – la tortuga negó con la cabeza con consistencia – vamos ¿qué te lo impide? No lo he envenenado.

.- No es eso – el hombre arqueó las cejas – es que……..tu pareces necesitarlo más que yo – perplejo, el humano abrió los ojos de par en par y permaneció en silencio por unos minutos justo antes de echarse a reír de nuevo de una manera muy escandalosa. Finalmente, acabó por tirarle el bocadillo a la falda dónde Raph lo agarró por miedo a que se cayera:

.- Eres demasiado pequeño para decidir esas cosas ¿no crees? Además…….no hay nada en este mundo que tu no puedas merecer tanto cómo yo. Eso deberían saberlo en esas alturas de las que suele hablar la gente……tal vez si el estado tuviera más en cuenta y velara por la igualdad entre su población, tú y yo ahora mismo no estaríamos compartiendo un mugriento bocadillo en un almacén abandonado y viejo…….- el humano se tomó una larga pausa, cómo si por su mente estuvieran pasando una a una todas sus vivencias. No muy agradables, a juzgar por las muecas que puso mientras parecía recordar. Raphael se lo miraba prestando atención mientras comía con ansias del bocadillo que le había ofrecido. Al cabo de unos segundos, el hombre prosiguió - ………………pero…..¿sabes?……me da igual……en este estado soy mucho más rico anímica y espiritualmente que cualquier otro ricachón que ahora mismo pueda estar comiendo un filete…….no me importa tener que dejar de comer un día, si con ello puede comer otra persona….

.- No soy persona.,….tal vez no deberías dejarme comer.

.- ¿Tu le das importancia a eso? – Raphael no contestó y se quedó mirando el bocadillo de sus manos. Con un gesto rápido, lo devolvió a su dueño con un par de bocados menos:

.- Cómete eso niño, o tendré que llamar a tu madre.

.- Vas a morir si no comes. – el viejo pareció suspirar y se volvió a mirar a la tortuga con una pizca de compasión y ternura en su cansada mirada:

.- Hace tiempo que eso me dejó de importar. Alguien tiene que empezar de nuevo…….

.- ¿Me lo das por eso¿para empezar de nuevo?…..¿el que?- el viejo se rió mientras se acurrucaba aún más entre sus mantas.

.- Eres muy crío para entenderlo aún……..pero pareces más inteligente de lo que creía. Hay que empezarlo todo de nuevo. O eso es lo que creo….las cosas actualmente están así de mal porque empezaron mal….batallas, guerras, egoísmo…..tal vez, aunque sea una pequeña parte de la población, si todos empezamos de nuevo con un principio diferente al de entonces….tal vez todo vaya mejor…..

.- ¿tu has empezado?- el viejo le sonrió.

.- Si – frunciendo el ceño y divagando en su interior. Raphael intentó comprender lo que el viejo le decía. Se trataba de algo demasiado abstracto para que pudiera comprenderlo con facilidad, pero aún y así, se percató de que si las cosas se empezaban bien des de un principio, era más posible que acabasen bien - ¿y tu? – nuevamente, la pregunta del viejo le tomó por sorpresa, pero aquella vez Raph no dudó en cómo contestar. Tal vez era eso lo que le faltaba:

.- No……no he empezado……..¿debería hacerlo?

.- Cuánto antes mejor…….- el hombre se incorporó estudiando uno a uno los rasgos de la pequeña tortuga que, sentada al borde de una de las cajas, permanecía con el bocadillo entre las manos y mirándose los pies pensativa mientras jugaba con éstos. La mirada de Raphael lo sorprendió estudiándolo y, despreocupadamente, el humano volvió a recostarse hacia atrás, apoyándose en la pared y cubriéndose de nuevo con las mantas. La tortuga lo miró – tú……..serás bueno, Raphael.

.-

Leonardo empezó a andar en círculos sin ningún destino aparente. Se mordía con insistencia el labio inferior mientras permanecía con la mirada fija en el suelo. En una de las esquinas, junto al sofá, Splinter permanecía arrodillado sin quitar la vista del reloj que tenía en frente colgado de la pared. Mickie y Don restaban sentados con la televisión encendida pero sin ver ningún programa en concreto.

La anciana rata abrió los ojos lentamente y frunció el ceño cuándo descubrió a Leonardo trazando círculos a su paso:

.- Leonardo, hijo. Cálmate.

.- ¡No puedo! – el primer grito del chico sonó desesperado, pero tras verse a sí mismo se calmó hundiendo sus hombros – hace más de medio día que Raph no aparece……

.- Rapha estará bien – comentó Mickie des de el sofá sin ni siquiera girarse.

.- ¿ cómo lo sabes? Puede estar herido de gravedad y perdido por las alcantarillas…..o puede que le haya pasado algo peor……..pueden haberle secuestrado – con el comentario Don y Mickie se voltearon mirando a Leo de una manera cansada poniendo cara de circunstancias:

.- Está bien….- continuó Leonardo entornando los ojos – nadie sería capaz de secuestrar a Raph…….¡pero puede estar mal! – Splinter se levantó lentamente para acercarse luego a su hijo que permanecía de pie con el rostro enfocado al suelo. Se agachó frente a él para ponerse a la altura del pequeño:

.- ¿Qué te preocupa?

.- ….puede haberle pasado algo….- Splinter asintió

.- Dale tiempo Leonardo. Raphael tiene mucho que descubrir sobre sí mismo por sí solo. Y me da la sensación que no va a tardar en hacerlo…..- la respuesta del maestro no pareció tranquilizar a la tortuguita que volvió a agachar la cabeza entristecida – si al caer la noche no ha vuelto, saldremos a por él.

Michelanggelo permaneció girado, de rodillas apoyándose en el respaldo del sofá prestando atención a lo que el maestro le decía a Leo. Luego, volvió a sentarse con normalidad y abrazó uno de los cojines con fuerza escondiendo el rostro en él.

Don lo observó de reojo y, suspirando, le agarró el cojín sacándoselo de la cara:

.- Todavía es de día Mickie, hay luz. – Michelanggelo pareció no escuchar el comentario agrio de su hermano y, de golpe, volvió al mundo levantando la vista con insistencia hacia Donatello que lo observaba confundido:

.- Raph es fuerte ¿verdad? – Don arqueó las cejas frente a esa pregunta de su hermano.

.- Claro – Donatello pareció comprender que Mickie solo buscaba algo de apoyo en lo que mantener viva la esperanza de que Raphael se encontraba bien y decidió dárselo para que la tortuga no se derrumbase cómo Leo – es muy fuerte. Podría patearle el trasero a cualquiera. ¿No te ha pegado nunca?

.- Sí…..más bien pregunta cuándo no lo ha hecho – contestó Mickie algo confundido.

.- Y ¿te dolió?

.- Ajá

.- Pues ya está – Don volvió a mirar a la pantalla cambiando de canal con el mando en las manos – es fuerte – Michelanggelo agachó de nuevo la mirada mientras sonreía y volvía a mirar la televisión. La admiración que el hermano pequeño podía tener por Raphael era tan grande que le bastaba con imaginarse que podría escapar de cualquier barullo por muy peligroso que fuese, así se mantenía tranquilo.

A pesar de creer que Raph lo odiaba, él mantenía viva una gran admiración por él.

Era valiente…..tal vez eso fuese lo suficiente para que Mickie mirase a su hermano cómo una pauta a seguir, por muy mala que fuera esa pauta:

.- Si no vuelve pronto….iré a buscarlo.

.- sensei no va a dejarte Mickie – volvió a contestar Donatello

.- Me escaparé

.- Te vas a ganar una buena bronca. Además¿qué más te da? El maestro ha dicho que saldríamos a buscarlo si para esta noche no venía¿no puedes esperarte antes de irte solo? – Mickie lanzó una mirada furtiva hacia atrás, descubriendo a Splinter volviéndose a arrodillar para meditar.

.- A sensei no parece importarle lo que le pase a Raph…….- Donatello se asombró por ese comentario de su hermano¿cómo diablos con 6 años podía pensar de aquella forma? Se tomó el comentario muy en serio y miró a Mickie con seriedad:

.- No digas eso, sabes que no es verdad – Michelanggelo no contestó, únicamente volvió a mirar a la anciana rata de reojo que permanecía en el suelo sobre su cojín mientras Leo seguía dando círculos con la mirada perdida en el suelo.


Uoooh! Bueno, este ca. se ha quedado algo más cortito xk ya sta llegando el final y quería alargarlo un poco XD, ske si no la cosa quedaba mu corta, xro bueno¿y eso ke más da?

Eisss! Tranqui Medeah, no me tomo a mal ninguno de los comentarios, al contrario, aunke suenen malos los miro con buenos ojos, así me ayudan a arreglar algunas cosillas. Y tengo super-claro ke kada uno da su opinión personal sin intención de ofender. así pues, considero muy posible que Leo no tenga miedo en el cómic (más que nada xk no tengo ni un numero, aki en España no han llegado que yo sepa) y seria muy posible que solo se tratase de una triquiñuela de la serie de TV para poder enlazar el desarrollo del cap. de "Tales of Leo" con el final de éste, es decir, el líder no tenía que parecer perfecto y le metieron un defecto que Splinter utilizó para demostrarle a Leo que era capaz de superar cualquier cosa si se lo proponía, poniendo cómo ejemplo el miedo a las alturas. Queda claro que únicamente se trata de un pedazo de guión ensganchado, una pegatina que hacía más bonito el capítulo, pues es extraño que un crío a esa edadpueda superar su miedo y, por otra parte, estamos hartas de ver saltar a Leo x los tejados, así que mucho miedo no le puede tener ni siquiera siendo de mayor.

En mi pinión, es por eso que pusieron que superaba el miedo cuándo era un crío, xk así no tenían excusa alguna si alguién les decía :"aps, pues si Leo tiene miedo a las alturas ¿xk siempre está en lo alto?", así que introduciendo esa característica, no les rebentaría para nada el resto de capítulos.

Buah, yo no sé que hago escribiendo, tendría que estar trabajando cómo guionista en alguna serie hombre! juasjuasjuasjuasjuas XD, no se si me habéis entendido, pero bueno, yo divago y punto . jejejeje

A mi por mi parte me resulta muy tierno que Mickie tenga dos facetas: la despreocupada y la de su miedo interior. Porque claro, si Leo, el mayor , tiene 9 años, Mickie tiene que tener 6 (yo eske les pongo un año menos a cada uno, así es más fácil), entonces me resulta muy entrañable el instinto protector (o no) que puedan demostrar sus hermanos por él.

Se ha producido un momento de tensión entre Medeah e Otsuki, jejejejeje, ya! ya! bajad las zarpas! jejeje, no hombre no, una confusión y nada más, yo en ningún caso malinterpreté nada ni hacia ami ni hacia vosotas. a este paso vamos a tener que abrir una línea telefónica para poder hablarnos mejor! Así evitamos malentendidos! juasjuasjuas (valdría una buena pasta...)

Bueno nenas, esta vez la cosa ha sido más de análisis que de contestar reviews, bueno bueno, pero ya me perdonaréis una ya, jejejeje. Pues nada cariñus, nos estamos leyendo!

YaS