Capítulo 3
Linda sorpresa
Harry despertó en la madrugada a causa de que tres lechuzas estaban picoteando la ventana, al ponerse sus gafas les abrió la ventana y las lechuzas entraron dejando en la cama de Harry unas cartas junto con unos paquetes. De pronto recordó que hoy cumplía 15 años.
Las lechuzas al entregar el encargo se fueron volando atravesando de nuevo la ventana.
Harry cogió un paquete que le enviaba su padrino Sirius junto con una carta.
Al abrir el paquete Harry se quedo mudo y de sus ojos brotaron unas lágrimas al ver el contenido de este..
El paquete contenía una foto donde él era un bebé, su madre Lily, lo cargaba con amor y a su lado estaban su padre James, su padrino Sirius y ex-profesor de defensa contra las artes oscuras, Remus, todos estaban muy felices, parecía que ese día lo estaban bautizando, pero no era lo único que contenía el paquete, adentro estaba una cadena de oro con escarlata, tenía una forma muy extraña, pero se percato de que había otra cadena igual, y por último un libro muy antiguo forrado de piel, color negro y con letras doradas: "Godric Gryffindor".
Harry se quedo anonado mirando el libro, las cadenas, y la foto, cuando por fin salió de su trance miro la carta que Sirius le envío, la cual decía:
Querido Harry:
Feliz cumpleaños, espero que te guste lo que te regale, la fotografía la tenía yo y las cadenas las tenía Remus, antes de morir tu padre y tu madre, nos entregaron a mi y Remus el libro, tu padre nunca nos dijo cual era su contenido, para nosotros es un libro viejo, roto y sin contenido, pero el nos dijo que no cualquier persona puede ver su contenido, que solo tú podrías ver el contenido de este libro y descubrir lo que contiene.
Nos ordeno que cuando cumplieras los 15 años de edad te lo entregáramos, dijo que con el tiempo sabríamos que contiene el libro, ya que el dijo que no podría obtener esa oportunidad.
Las cadenas, son especiales, una era de tu madre Lily y otra de tu padre James, esas cadenas simbolizan la unión a la persona a la que amas, cuando encuentres el verdadero amor, tendrás que entregárselo a esa persona.
En cuanto a la fotografía, fue el día en que te bautizaron con el nombre de Harry, por esa razón traes esa ropa, es algo parecido al estilo muggle, a diferencia de la ropa, la forma en como se llevo a cabo y el lugar donde se llevo a cabo.
Espero que te hayan gustado.
Remus y Sirius.
PD. Te tenemos otro regalo, pero ese, te lo entregaremos personalmente.
Harry estaba realmente agradecido con esos regalos, se preguntaba cual sería el otro regalo que darían personalmente, pero Harry no quería arriesgar a su padrino de que el ministerio de magia lo atraparan y lo enviaran a Azcaban.
Agarro otro paquete junto con la carta...
Feliz Cumpleaños Harry, no lo puedo creer, 15 años, no los cumples todos los días ¿no crees?. Espero que te guste mi regalo, dentro esta el mío, uno de parte de los gemelos, otro de mamá y por último el de Ginny.
Que te parece si nos vemos en el Callejón Diagon, pasado mañana al medio día, espero pronto tu respuesta.
Ron.
Harry cogió el paquete, que pesaba más de lo normal, al abrirlo su rostro se lleno de felicidad. Dentro estaba un pastel de parte de la Sra. Weasley junto con golosinas, después estaba el de Ginny, el cual era una hermosa pluma de halcón, el de los gemelos eran los nuevos Sortilegos Weasley que habían creado apenas junto con una nota, donde decía cada una de sus funciones, pero al ver lo que su mejor amigo le regalo, le fascino mucho más, era un libro de Quidditch, titulado "Las mejores jugadas del Quidditch".
Harry observo por un buen rato aquel libro, estaba seguro de que le iba a servir para aquel año.
Cogió el último paquete, también junto con la carta...
Feliz Cumpleaños:
Espero que te la pases muy bien este día Harry, no puedo creer que ya tengas 15 años, recuerdo que cuando nos conocimos teníamos 11 años , que rápido pasa el tiempo ¿no?.
Espero que te guste mi regalo de cumpleaños, lo compre en Callejón Diagon, mientras compraba mis útiles para este curso.
Hermione.
PD: Ron me envío una nota en la cual me decía que si no comprábamos los útiles los tres juntos, pero yo le respondí que no por que ya los tenía, te veré en el Expreso de Hogwarts.
Al mirar el regalo dentro del paquete, se sorprendió mucho, ya que era vasija de piedra poco profunda, con tallas muy raras alrededor del borde: era un pensadero. Al lado tenía una nota en la que se explicaba que era y la forma en como utilizarla, pero Harry ya sabía todo eso ya que el año anterior, sin querer, encontró uno igual, al que pertenecía al profesor Dumbledore.
Mientras pensaba en Hermione, una lechuza entro por la ventana trayendo un paquete con una carta adjunta; Harry extrañado desato el paquete de la pata de la lechuza y esta salió volando de nuevo. Se sentó en su cama y desdoblo la carta.
Feliz Cumpleaños Harry:
Hola Harry, perdona que no este contigo en el colegio (Dumbledore ya me contó todo lo sucedido y espero que realmente ya te encuentres bien). La razón por la que no estoy en el colegio ahora, es por un encargo ultra secreto del director, algo que no voy a decirte.
Te envió este regalo por tus quince años. Quien lo diría, ya eres todo un adolescente. Espero que te guste mi regalo, Olympe... Madame Máxime para ti, también te envía uno.
Espero verte cuando inicie las clases, hasta entonces quiero que te cuides mucho.
Hagird.
Dentro del paquete se encontraba una tarta de manzana con una pequeña nota que decía que era de Hagrid, hecho por el mismo. Harry no lo toco pues ya tenía experiencia con la comida que Hagrid le hacía. El otro regalo también venía con una nota que decía que era de Madame Máxime.
Era un cristal transparente en forma de un Sol, pero dentro de este se podía ver una pequeña figura de luna (esta de color azul cielo). Harry la miro fascinado. Era un cristal magnifico, no era tan pequeño el cristal y claramente se podía ver la luna.
Como no tenía sueño y no sabía que hora era, decidió mirar su reloj, pero se acordó de que este no funcionaba desde el año pasado, durante la segunda prueba del torneo.
Se baño y se puso ropa de mago ya que como estaba en el colegio, casi no tenía ropa muggle, la habían dejado, sólo le trajeron su ropa de mago y sus demás cosas.
Bajo a la sala común y estuvo un buen rato ahí mirando aquel viejo libro viejo roto y sin contenido (según lo que decía Sirius en la carta), pero para él, ese libro era antiguo, no veía de donde se encontraba roto, el forro de piel color negro daba el aspecto de ser un libro interesante.
Después de observar un rato la superficie del libro decidió abrirlo, la primera página estaba en blanco, pero al pasar a la siguiente la hoja tenía escrito algo en medio del libro.
Este libro solo es para los descendientes, nadie más que ellos puede ver lo que hay escrito en este libro que yo escribí. Lo que contiene son secretos míos.
Yo Godric Gryffindor, te revelaré cosas que te servirán en un futuro, pero tendrás que tener cuidado y ser muy responsable. Sólo un verdadero Gryffindor puede ser mi descendiente.
Harry se quedo pensando estas palabras detenidamente. Solo alguien que pertenezca a Gryffindor puede saber este contenido, pero además tiene que ser un descendiente del mismo Godric Gryffindor, lo cual significaba... pero, él no podía ser descendiente de uno de los fundadores de Hogwarts... pero si el no era, entonces por que su padre lo tenía y le dio a su padrino el libro para que se lo entregara cuando cumpliera quince años.
Ahora que lo pensaba, nunca nadie ha mencionado la familia de su padre, no sabe nada de ellos, si murieron, si están vivos, que fue de ellos, no podía decir que no era descendiente de Godric Gryffindor, pero tampoco podría saber si es cierto o no. Pero algo por dentro le decía que podría ser cierto, sino fuera cierto, porque su padrino le dijo en la carta que era un libro viejo, roto y sin contenido, él lo veía diferente, además esta el hecho que su padre lo tuvo cuando estaba vivo.
Harry pensaba sobre aquello y al final llego a la conclusión que si realmente era descendiente de Godric Gryffindor, lo sabría de alguna manera, mientras durante todo el curso leería el libro.
Cuando los primeros rayos del sol salieron, Harry decidió bajar para desayunar, pero antes subió de nuevo su habitación guardando el libro y todas los demás regalos en su baúl.
Al entrar no había nadie ahí, la mesa no tenía los cubiertos, platos, vasos de cristal y mucho menos el desayuno, así que decidió salir, para ir en busca de algún profesor, camino por las mazmorras, los invernaderos, las aulas, la cabaña de Hadrid, pero no encontró a nadie, Harry se empezó a preocupar, así que decidió ir al despacho del profesor, pero al decir la contraseña y entrar al despacho del profesor, no lo encontró, sólo a Fawkes dormido en su percha.
Salió y de pronto se le ocurrió buscarlos mediante el mapa merodeador, corrió lo más que pudo hasta llegar a la torre de Gryffindor...
Feliz Cumpleaños Harry, exclamaron dos o tres voces con alegría y un hombre se acerco a Harry y lo abrazó muy fuerte diciendo...
Me da mucho gusto verte Harry, el hombre era Sirius Black, había regresado a Hogwarts con Harry.
Sirius, Profesor Lupin y Profesor Dumbledore, exclamo Harry al ver a los tres en la sala común.
Hola Harry, cuanto tiempo sin verte, pero que grande estas, has cambiado mucho, y eso que no te vi durante un año entero, se que tus padres donde quiera que estén, están orgullosos de ver a su hijo cumpliendo 15 años, dijo el profesor Lupin abrazando a Harry.
Te gusto la sorpresa Harry, pregunto amablemente Dumbledore con una amplia sonrisa.
Mucho, pero por que no encontré a los demás profesores por ningún lado, pregunto Harry alegre y sorprendido a la vez.
El profesor Snape no quiso estar aquí, así que decidió salir hoy, pero regresara en la noche por que tiene que estar presente y arreglado, la profesora McGonagall fue a comprar algo en el Callejón Diagon y en cuanto a los demás profesores se están arreglando en sus dormitorios, explico un Dumbledore bastante alegre de ver Harry junto a su padrino Sirius.
Arreglándose, ¿para que, no entiendo, dijo Harry confuso por la respuesta de Dumbledore.
Verás, hoy hay luna llena, hoy será un día especial, ya te enterarás más tarde, además de que sabrán toda la verdad sobre Sirius.
Toma, es mi regalo de cumpleaños, dijo Dumbledore extendiendo sus manos con un cofre o algo por el estilo, con runas extrañas color dorado, para dárselo a Harry.
Lo cogió y al abrirlo sentado en uno de los sillones dio un grito de asombro al ver a un Fénix hermoso salir por el cofre y posándose en el hombro derecho de Harry.
Un Fénix, murmuro Harry con voz casi inaudible. Lo miraba fijamente a los ojos del Fénix, y esté le devolvía la mirada.
Te presento a tu nueva mascota, te compre este Fénix, tu padre tenía uno, pero intervino en la batalla que tuvo tu padre con Voldemort antes de morir, pero aún así perdieron la vida los dos; si el Fénix de tu padre no hubiera muerto, sería tu mascota.
¿Mi padre tenía un Fénix, pregunto Harry sorprendido.
Por supuesto, todos los he... quise decir, que tu padre tuvo uno por que se lo compraron sus padres como un regalo, respondió Sirius con una mirada nerviosa, estaba a punto de decir algo que Harry no debía saber, no por ahora al menos.
Y como le pondrás Harry, pregunto el ex-profesor Lupin cambiando de tema rápidamente.
No lose aún, más tarde le pondré su nombre, ahora quiero decirle algo al profesor Dumbledore, respondió Harry mirado muy sospechosamente a su padrino.
¿Qué es lo que me quieres decir Harry, pregunto Dumbledore calmadamente y mirando a Harry con sus gafas de media luna.
Ron me escribió una carta, preguntándome si me podría reunir con él en el Callejón Diagon pasado mañana a medio día y me preguntaba si me dejaría ir.
Lo siento Harry, pero me temo que eso será prácticamente imposible, ya que mañana iremos al Callejón Diagon y yo personalmente iré contigo para cuidarte, no se sabe si Voldemort vaya a atacarte cuando estés con tu amigo Ron, explico Dumbledore a Harry.
Entiendo, no se preocupe, por lo menos puedo enviarle una carta diciéndole que no podré ir, dijo Harry con la esperanza de escribirle a Ron.
Me temo que eso tampoco podrá ser Harry, yo le enviaré una carta a los señores Weasley que no podrás ir, dijo Dumbledore mirando a Harry quién estaba triste al escucharlo.
Bueno, que les parece si vamos al gran comedor a comer algo, yo me estoy muriendo de hambre, dijo Sirius para despejar los pensamientos de su ahijado.
Claro, yo también muero de hambre, dijo Lupin, apoyando a su amigo en su intento.
Esta bien, dijo Harry tratando de alegrarse un poco.
Los cuatro bajaron hacia al gran comedor, en el camino Sirius y Remus trataban de entablar una conversación con Harry y Dumbledore, a lo cual lo lograron después de unos minutos.
Buenos días, contestaron los profesores de Hogwarts al verlos entrar.
Buenos días, respondieron los tres, ya que Sirius se transformo en perro antes de entrar al gran comedor.
Harry se extrañaba de ver vestidos a los profesores con esas túnicas diferentes, no eran las que ocupaban normalmente. Todos se veían bien, las profesoras traían un peinado muy diferente. Pero dejó de pensar en eso cuando comenzó a comer.
Después de desayunar alegremente Harry quería hablar su padrino y el profesor Lupin, pero no sabía como hacerlo.
Harry te importaría hablar conmigo unos minutos, le pregunto el profesor Lupin mirándolo a él y a Hocicos.
Por supuesto profesor Lupin, dijo Harry respondiendo y levantándose para salir junto con su padrino en forma de perro y el profesor Lupin.
Salieron del gran comedor y se dirigieron hacia los terrenos de Hogwarts, muy cerca de donde estaba el campo de Quidditch.
Queríamos hablar a solas contigo, ya sabes para entregarte el regalo personalmente y conversar contigo sobre Ya-Sabes-Quién, comenzó hablar Sirius en cuanto miraron a todos los lados para después transformarse de nuevo.
Losé, respondió Harry mirándolos a los dos seriamente.
Ten, dijo el profesor Lupin entregándole un paquete largo a Harry, creo que te gustara mucho.
Harry miro el largo paquete extrañadamente, tenía la vaga idea de que era, pero... no podría ser lo que él pensaba, ya que no lo necesitaba realmente, aunque le gustaría si fuera lo que creía que era.
No lo puedo creer, exclamó Harry acertando lo que pensaba que era.
Una Saeta de Trueno, la mejor escoba de carreras que existe, es el más reciente modelo que hay, dijo Sirius con una sonrisa de oreja a oreja.
Gracias, me fascino mucho, pero esta escoba cuesta mucho, no debieron haberse gastado su dinero en comprármela, dijo Harry mirándolos.
Te lo mereces, a tu padre le hubiera gustado, este año tendrás que ganar la copa de Quidditch, sino, te las verás con nosotros, exclamaron ambos adultos sonriendo.
Después de estar platicando con Sirius y Remus sobre Voldemort, surgió una conversación que Harry no esperaba...
Te gusta alguien Harry, pregunto Sirius mirando de pronto a Harry con una sonrisa.
No, por que lo preguntas, respondió Harry nervioso al recordar a Hermione.
Seguro, entonces por que te estas poniendo nervioso, pareciera como si te gustara alguien a quien yo conozco, respondió Sirius mirando a su ahijado de forma pícara.
Ya te dije que no, no me gusta nadie, respondió Harry poniéndose más nervioso.
Creo que mejor le preguntare a Hermione, como ella es tu mejor amiga, de seguro debe de saberlo, pregunto esta vez el profesor Lupin mirando también a Harry en forma pícara.
A Hermione, ella no sabe nada, no tienes por que preguntarle ya que no me gusta nadie, dijo Harry poniéndose colorado.
Tanto Sirius como Remus se dieron cuenta de eso, se miraron por un momento preguntándose lo mismo, así que Lupin comentó.
Esta bien, supongo que tampoco Ron sabe, ahora que recuerdo, cuando les di clases a ti y a los demás en tercero, note que Hermione te tenía un cariño especial, tu no has notado eso Sirius.
Ahora que lo dices, si es cierto, ella siempre se preocupaba por ti, recuerdo que te miraba diferente, y eso lo note más en el curso pasado, para ser más preciso cuando te enojaste con Ron por un tiempo, entre otras cosas.
Pero que locuras dicen los dos, Hermione me tiene un cariño especial por que somos amigos, además Ron también es su amigo y yo la quiero mucho por que es mi mejor amiga, explico Harry que en ese momento estaba más rojo que el cabello de Ron.
Me doy cuenta de que tu también la mirabas de manera diferente en tercero, tal vez no se notaba como ahora, por que eras más pequeño, creo que te gu..., comenzó Lupin a decir pero fue interrumpido por Harry.
A Hermione creo que le gusta el tal Victor Krum por que se fue a Bulgaria este verano, ya que él la invito el día de la segunda prueba, dijo Harry poniéndose algo enojado, no lo sabía, pero desde que Hermione le comento esto, Harry se enojo mucho.
Así que Victor Krum quiere con Hermione y tu no hiciste nada para impedirlo, creo que ya tienes competencia Harry, dijo Sirius cuando su ahijado termino de hablar.
Ya te dije que no me gusta Hermione, dijo Harry poniéndose rojo y nervioso a la vez.
Nunca dije que Hermione te gustara o sí, yo sólo pregunte que ella te miraba diferente, esa mirada no se ve cuando esta con Ron ó con alguien más, dijo Sirius arqueando las cejas.
Mientes, Hermione nunca se fijara en mi de esa forma, dijo Harry poniéndose un poco triste.
Sirius y Lupin notaron la expresión de Harry y la tristeza que reflejaba su rostro en ese momento, no se habían equivocado al pensar que él la amaba, estaban casi seguros de que Hermione sentía lo mismo con Harry.
Me doy cuenta de que estas enamorado de Hermione, no tienes por que ocultárnoslo a nosotros.
Yo no estoy ena... enamorado de ella dijo tartamudeando.
Si lo estas, tu mirada lo expresa, por que lo niegas, acaso tienes miedo de que ella te rechace por ese tal Krum, comento Sirius poniendo su mano en el hombro de Harry, quién tenía su cabeza agachada.
Esta bien, lo confieso, si me gusta Hermione y tengo miedo de enamorarme más de ella, ya que si ama a Krum no se que haría, creo que me moriría, confeso Harry en esos momentos, ahora que lo pensaba mejor, si era cierto, estaba enamorado de ella.
No te preocupes, estoy seguro de que ella siente lo mismo por ti, solo es cosa de que le digas, no pierdes nada intentándolo, exclamó Lupin apoyando también a Harry.
Pero no tengo el valor suficiente de decírselo, se excuso Harry.
Ya se esta haciendo de noche, será mejor que regresemos al castillo, y no te preocupes por eso, ya verás que todo saldrá muy bien, dijo Sirius dándole ánimos a Harry.
Regresaron al castillo y tanto Lupin como Sirius lo llevaron al cuarto secreto.
Veo que ya regresaron, los estábamos esperando para dar inicio al ritual, dijo Dumbledore al verlos entrar. Por favor, si quieres hacerme el favor, dijo Dumbledore mirando a Sirius, que estaba en su forma animaga.
AAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHH... ES SIRIUS BLACK; exclamaron asombrados los profesrores a excepción de Snape, quién miro a Black con un odio intenso, mientras los demás profesores levantaron sus varitas en dirección a Black.
Les pido de favor que guarden sus varitas, Sirius es inocente, es hora de que ya todos sepan la verdad sobre lo que ocurrió hace 15 años, dijo Dumbledore interponiéndose entre Sirius y los profesores.
Harry se puso al lado de su padrino y miro a cada uno de los profesores discutiendo sobre aquello, pensaba demasiadas cosas, pero de pronto una idea cruzo por su mente, si todo quedaba claro para los profesores de que Sirius era inocente, entonces el podría estar en el castillo (aunque en forma de perro), ya que todo el profesorado lo sabría y sólo su padrino tendría que cuidarse de que los estudiantes no supieran quien era realmente.
Y comenzaron con la explicación Dumbledore y el profesor Lupin junto con la ayuda de Harry, sobre la inocencia de él y la traición de colagusano, estuvieron por más de tres horas, pero al final todos los profesores les creyeron.
Bueno ahora comencemos con el ritual, dijo de nuevo el profesor Dumbledore.
Sirius se puso en el centro de un circulo que estaba dibujado en el suelo, los profesores estaban alrededor de él y Dumbledore exclamo unas palabras extrañas que Harry no entendía, parecían como un canto hermoso, pero aún así no entendía ni una sola palabra.
Poco a poco el cuarto se fue iluminando de una luz que se producía dentro del circulo, la luz se hizo tan fuerte que Harry tuvo que cubrirse los ojos, cuando volvió abrirlos, una marca de un Fénix en llamas con una ojos azules estaba en el brazo derecho de Sirius.
Harry se quedo boquiabierto al ver esa marca, Dumbledore al darse cuenta le comenzó a explicar...
Harry, la marca que tiene Sirius en su brazo derecho, es la marca de La Orden del Fénix, yo personalmente cree esa orden para combatir a Voldemort, todos aquellos que quieren poner resistencia a él, forman parte de la orden, apenas hace 5 meses fue creada, y Sirius interesado, quiso ser parte de la orden, por eso es este ritual, explico Dumbledore.
Quienes forman parte de la orden profesor, pregunto intrigado Harry.
Todos los profesores de Hogwarts, algunos aurores y algunos miembros del ministerio, la orden es altamente secreta, ni siquiera Fudge lo sabe, respondió Dumbledore.
Bueno creo que es hora de que te vayas a dormir, mañana temprano iremos al Callejón Diagon a comprar tus útiles... y lamento informarte que Sirius no podrá quedarse este año en el castillo en su forma animaga ya que tendrá que hacer muchos encargos a la orden; le comunico Dumbledore a Harry.
Esta bien, hasta mañana, y dicho esto salió del cuarto secreto en dirección a la sala común, pensando como fue que Dumbledore sabía que él, hace unos minutos, pensaba que su padrino podría estar con él durante todo el curso, con esos pensamientos se fue rumbo a su casa..
Al entrar por el retrato aquel Fénix hermoso estaba apoyado en uno de los sillones; sus hermosos ojos azules miraban a Harry y este lo miro y de pronto se le ocurrió el nombre de su nueva mascota.
Que lindo eres, acabo decidir cual va a ser tu nombre, te llamare Dalwerd, dijo Harry al ver al Fénix.
El ave hizo una especie de canto muy agradable y reconfortable, Harry se fue rumbo a las escaleras con el Fénix en su hombro; se puso su pijama e intento dormirse pero no lo logró, comenzó a pensar en la platica que tuvo en la tarde con Sirius sobre Voldemort, de pronto pensó en Hermione, se preguntaba el por que Sirius y el profesor Remus pensaban que ella lo amaba como él a ella; ¿Sería cierto eso, ¿Cuál sería su reacción al confesarle que la amaba, ¿Por qué la amaba, ¿Porque a su amiga, si ama a Hermione, ¿Qué siente por Cho, con esos pensamientos se durmió y soñó con su adorada Hermione Granger.
