Capítulo 8 Revelaciones dolorosas
Gritando ¡¡¡Hisashi Mitsui!
Despertando, de pronto ¿Eh¿Qué ocurre?
Mitsui levanta la cabeza del pupitre¡se había quedado dormido en clase! Se vuelve hacia su izquierda para ver al profesor de inglés a su lado, golpeteando el suelo con el pie, visiblemente mosqueado.
Y, evidentemente, a Mitsui le toca salir al pasillo a contemplar las musarañas y "pensar en porqué no se debe quedar dormido durante la clase de inglés". Él lo sabe perfectamente: porque volverá a suspender y le tocará otra vez ir a estudiar a casa de Akagi (¡Qué horror¡Con lo severo que es!). Hisashi empieza a recordar la última vez que ocurrió. Estaban todos en el comedor: Akagi pegando gritos, Hanamichi perdiendo el culo por Haruko y Rukawa... dormido como un angelito sobre la mesa... ¡Estaba tan mono!
¡MIT – SU – IIIIIIIII!
Se pega un susto de muerte ¡Aaaaaaah¡Kogure¿Pero qué te pasa¡¿Por qué gritas así hombre!
Perplejo ¿Que yo qué? Mitsui, hoy estás en las nubes ¿eh? Llevo un buen rato llamándote. La clase ha terminado hace 5 minutos... ¿qué¿no quieres entrenar hoy?
Avergonzado por haberse empanado así He he he... Sí, sí, por supuesto... Para sí mismo Joder, Hisashiúltimamente no estás en "tus plenas facultades" ¿eh? Se gira para Kogure ¡Venga, vamos!
Riéndose ¡Sí!
De camino a los vestuarios, Mitsui intenta no pensar en sus dudas sentimentales mientras Kogure se pregunta en qué estará pensando Michi y porqué estará tan raro últimamente... Al llegar al gimnasio, todo el mundo está ya cambiado y Kogure y Mitsui se quedan solos en los vestuarios.
Mitsui... hace mucho que nos conocemos y... quería preguntarte algo.
Intrigado ¿El qué?
Bueno, no sé si será muy personal...
Temiéndose una declaración o algo por el estilo No sé... verás... es que... sin poder evitar la curiosidad Dispara.
Riéndose amablemente ¿Qué te pasa?
Extrañado ¿Cómo?
Es la pregunta que quería hacerte. ¿Qué te pasa Mitsui? Hace mucho que nos conocemos y nunca te había visto tan raro como estos últimos días... ¿Es que tienes algún problema?
Mitsui se queda descansado por un momento pero, de pronto, siente una gran necesidad de sincerarse, de contarle a alguien sus dudas para, quizás, sentirse mejor consigo mismo.
Verás... es que ayer... ocurrió algo.
¿Algo¿Algo como qué?
Bueno,... cuando os fuisteis yo me quedé para entrenar un poco... hace días que estoy como fuera de mí mismo y... no me concentraba. Así que decidí recuperar el tiempo que no había aprovechado durante el entrenamiento.
Intrigado Sí¿y?
Pues... cuando llevaba un rato entrenando apareció Sendou y...
¿Sendou¿Aquí? Pero...
Vino para jugar un 21 conmigo. Se produce un silencio, aunque no tenso ni violento El caso es que jugamos tanto rato que perdió el tren... y me vi obligado a invitarle a mi casa. Le da vergüenza ¡Hombre¡No le podía dejar tirado en la calle¿No?
Dándole la razón ¡No, no, claro! Habría sido de muy mala educación...
Siguiendo con el relato Para colmo de todo, llegamos a mi casa y mi madre no estaba: se ha ido unas semanas al pueblo con mi abuelo. Así que nos quedamos solos. Cenamos, miramos la tele y, a la hora de dormir, Sendou me dio un beso. Esta mañana, al levantarme, ya se había ido.
Perplejo ¿Qué Sendou te qué?
se levanta del banco, dándole la espalda a Kogure avergonzado Pues eso, que me besó. Me dio un beso de buenas noches y cerró la puerta antes de que pudiera reaccionar.
Todavía asombrado Y tú...
Alzando la voz ¿Yo qué¡Yo nada! Yo... dudoso no sé... me quedé perplejo, sin saber que hacer, como un gilipollas en medio del pasillo. Se sienta otra vez Estoy hecho un lío.
De repente, Akagi entra en el vestuario pegando gritos porque ya se han perdido medio entrenamiento. Así que Mitsui y Kogure salen pitando para la cancha.
En el lavabo de los vestuarios, Rukawa se seca el agua de la cara y agarra la toalla con rabia: lo ha oído todo y está claro que no se alegra por Michi. Sale del lavabo y entra en la cancha procurando que Mitsui no le vea. Le evita durante todo el entretenimiento: no le habla, no le escucha, ni siquiera le pasa el balón. Mitsui se da cuenta.
Al acabar el entrenamiento...
¡Rukawa¡Espera¿Qué te ocurre?
Nada.
Estás rarísimo. A parte de los demás ¿Te pasa algo Kaede? Ya sabes que puedes contarme...
Le corta, yéndose a los vestuarios No me pasa nada Mitsui.
"¿Mitsui¿Me ha llamado por mi apellido? A éste le pasa algo seguro." Le coge del brazo Quiero hablar contigo. Espérame aquí, cuando todos se hayan ido.
Se deshace de él con un tirón algo violento Vale.
Rukawa se mete en el vestuario y Mitsui detrás de él. Cuando Mitsui acaba de cambiarse sale del gimnasio. Llueve. Fuera, Hanamichi, Akagi, Riota y Kogure esperan a que Ayako salga con los paraguas. Rukawa no está, aunque tampoco estaba ahora en el vestuario.
Despistando Esto... ¿y Ayako?
¡Ah! Ha ido a por los paraguas. Si te esperas seguro que te trae uno. La verdad es que no apetece nada echarse a andar con esta lluvia.
¡He he he! Tienes razón, Gori¡sólo alguien tan estúpido como Rukawa se echaría a correr de repente lloviendo así¡Y encima se ha olvidado la bici!
¿Qué¿Qué has dicho Sakuragi?
Sin darle tiempo a responder, Mitsui se echa a correr instintivamente en dirección a la playa. Los cuatro compañeros se quedan perplejos, aunque Kogure empieza a comprender la actitud que tiene Mitsui últimamente.
Capítulo 9 Lágrimas bajo la lluvia
