Cap. 2 Un nuevo samurai...

En la comisaría de Tokyo se encontraba un hombre mirando por la ventana, fumándose un cigarrillo y ensimismados en sus sin fines de pensamientos pero fue interrumpido por un subordinado de policía- Señor Fujita, el señor Himura desea verle- avisa.

Saito, sin girarse ordena- Háganle pasar.

El pelirrojo entra en el despacho del lobo, este sigue de espaldas- Hola Saito- saluda.

Qué diablos quieres tú ahora?- da una calada al cigarro.

Venía para ver si me podías dar información sobre un hombre.

Esto último interesó al otro samurai, se giró y apagó el tabaco en un cenicero que estaba a rebosar de colillas- A quién quieres matar ahora?

Muy gracioso, pero no he venido para hacer chistes malos- expresa serio.

No tengo tiempo para jugar a los espías, battosai- asquea.

Sólo te estoy pidiendo información- replica.

El hombre alto suspira resignado y pregunta- Sobre quién?

Conoces la leyenda de Kyô ojos de demonio?

El hombre que mató a más de mil hombres en una batalla?- arquea una ceja.

Sí- afirma serio.

Claro que la conozco, que samurai no la conoce- se enciende otro cigarro- algunos dicen que existe y otros que es solo un mito.

Y tú qué piensas?

Yo?- se gira hacia la ventana y explica- Hace poco nos ha llegado un informe de que han visto a un hombre con esas características, mis hombres fueron a investigar pero en realidad era un vendedor de medicinas, cuando quisieron conseguir algo más de información desapareció.

Kenshin se queda por unos instantes pensativo.

Y a ti por qué te importa tanto ese hombre?- pregunta con resignación el lobo.

En el dojo está viviendo durante unos días ese vendedor de medicinas.

Estás seguro? Y qué hace allí?- cuestiona interesado.

Kaoru y Sano se hicieron amigos de él, parece buena persona pero detrás de ese espíritu apacible hay algo que me inquieta.

Asi que la señorita Kamiya ya ha vuelto a hospedar a otro loco vagabundo.

A quién te refieres?- pregunta con sarcasmo.

A ti, está claro.

Gracias por ser tan explícito…- con una gota.

Cómo se llama ese vendedor de medicinas?

Kyôshiro Mibu- aclara.

El nombre completo hizo que ha Saito se le cayese el cigarro de la boca.

La noche estaba cayendo, pero aún unos rayos de luz caían sobre las colinas de las montañas, Kaoru iba junto a Kyôshiro, quien llevaba una gran tanda de compras sobre sus espaldas- Oiga, Kaoru-dono…

Si, Kyôshiro?

Hacía falta comprar todo esto?- intenta decir agotado del peso.

Kaoru mira hacia arriba pensante sin parar de caminar, cambia el gesto de risa tonta y responde- La verdad es que no, jeje!- Al vendedor errante le cae una gota de sudor sobre la cabeza.

En la comisaría...

Has dicho Kyôshiro Mibu?- pregunta esta vez serio.

Sí, por qué?- dice sorprendido ante la reacción anterior del policía.

Ese hombre, es quién venció a Kyô ojos de demonio…

Qu-qué!- exclama.

En esa batalla final, ambos lucharon sin descanso, Mibu estuvo apunto de vencerle pero un meteorito cayó justo donde ellos se encontraban, desde entonces nunca más se supieron de ellos, ni siquiera se encontraron sus cuerpos.

Esto ya no puede ser tanta coincidencia… pero…- se para unos segundos- entonces, qué habrá pasado con Kyô?

En eso ya no te puedo ayudar, aunque… ese samurai porta una espada de 5 shaku?

Así es.- afirma.

Quizás es un trofeo que se quedó por vencer a Kyô…

Es posible- mira por la ventana y observa que ya va siendo muy tarde- oh, no! Kaoru me va a reñir, es muy tarde!

Tu mujercita te tiene controlado, eh?- sonríe irónico.

Muy gracioso Saito, gracias por todo- se marcha.

No, gracias a ti Battosai…- una mueca de felicidad retorcida se dibuja en su cara.

Ya hemos llegado!- grita Kaoru de alegría.

E- en serio? – resopla un pobre Kyôshiro cansado de llevar toda la compra.

Ya era hora! Me muero de hambre!- se queja Yahiko mientras le recibe- Oye, Ken, qué hay para cen…- no termina la frase al ver que el hombre que acompañaba a Kaoru no era el pelirrojo- Ey! Y Kenshin?

Aún no ha vuelto?- pregunta extrañada.

No! Pensé que estaba contigo… pero creo que te has encontrado a otro pobre sustituto para aguantar todas tus compras…- señala al pobre vendedor que yacía en el suelo.

Kyôshiro!- corre a ayudarle- lo siento! Se me había olvidado… ahora te quito las cosas de la espalda.

Gr-gracias- balbucea mientras coge aire.

Y quién va a hacer la cena?- dice el más joven.

Qué os parece si vamos al Akabeko?- propone la kendoka.

SIIIIII!- gritan Yahiko y Sanosuke.

Todos se quedan mirando al nuevo "invitado".

Y tú cuando apareciste?

Je, je, acabo de llegar y además justo a tiempo!- dice alegremente.

El señor Himura no viene?- cuestiona el vendedor de medicinas.

Le dejaré una nota diciendo que se dirija allí cuando llegue- añade la morena.

Seguro que no le importará si vamos antes?

Claro que no! Mi querido amigo! Vayamos!- agrega el guerrero cogiendo del brazo al chico y arrastrándole.

Ya has terminado de escribirle la nota, tardona?- pregunta impaciente el pequeño.

Sí, vayamos!

Se me ha pasado el tiempo volando- se dice un Kenshin caminando deprisa- seguro que Kaoru está preocupada por mi, conociéndola…- entra al dojo pero ve que no hay ruidos ni nadie- Dónde se habrán metido?- el rato observa en una mesita una nota con la letra de Kaoru; " Kenshin, nos hemos ido a cenar al Akabeko, sentimos no haberte esperado pero no sabíamos dónde estabas, te esperamos, a no ser que Sanosuke y Yahiko se hayan comido todo antes… Kaoru"- deja de nuevo la nota y se dirige hacia el restaurante.

Comidaaaaa!- gritan al unísono los dos más glotones de los cuatro.

Que aproveche!- dice Tae.

Gracias Tae!- agradece Kaoru.

Kenshin?

Ah! Vendrá algo más tarde, no creo que tarde…- dice algo preocupada.

He dicho que no! (voz desconocida)

Todo el grupo se gira hacia el gran grito y ven unas mesas mas adelante un hombre de pie gritando a un grupo de "amigos"- Otra vez unos borrachos- dice con indiferencia Yahiko.

Cómo me vuelvas a contradecir te la cargas, estúpido!

Estúpido yo?- replica otro- mira quién fue a hablar!

Al rato llega Tae a calmar la situación para no ahuyentar la clientela- Perdonen señores, creo que no deberían beber más y sobre todo no griten.

Uno de los borrachos se levanta y grita furioso- UNA MUJER NO TIENE QUE DAR ÓRDENES A UN HOMBRE!- apunto estaba de pegarla pero un puñetazo hace caerle al suelo.

Borrachos inútiles! Les ha dicho la señorita que se callen, pero yo os ordeno iros!- exclama Sanosuke buscando bronca (qué raro en él… �.�)

Todos los hombres se levantan y enseñan sus puños.

De acuerdo… Vayamos fuera…

Oh! No! Otra vez peleas…- se lamenta la pobre dueña del restaurante.

Una vez fuera, Yahiko y Sano hacen frente a una veintena de hombres.

De dónde han salido tantos de repente?- pregunta el joven samurai.

Por lo que se ve, han llamado a más de sus amiguitos… jeje… será divertido…- ríe divertido el castaño.

Un hombre gigantesco y gordo encabeza al grupo y dice- Bien muchachos, acabar con esa cabeza de pollo y ese renacuajo! Adelante!- hace señal de atacar pero el se queda atrás observando.

Golpes, puñetazos, envestidas… El grupo de los borrachos iban perdiendo.

Este Sano siempre está igual- dice malhumorada Kaoru desde un lado mientras observaba la pelea.

Sí, es algo broncas, pero no hay motivos para pelearse así…- agrega Kyôshiro al lado de la kendoka.

Sí, la pena es que no esté aquí……- un brazo se desliza por su cuello y la levanta estrangulandola- AAAAAGH!

Kaoru!- grita mientras ve como el hombre alto y gordo, que había estado sólo mirando, la tenía cogida.

Mierda! Han cogido a Kaoru!- exclama el guerrero mientras se defiende de los ataques.

No podemos ir a ayudarla!- replica Yahiko- Cada vez salen más tipos de estos!- golpea con su espada de madera.

Kyôshiro! Ayúdala! No te quedes parado!

Cómo no os rindáis, ahorco a esta preciosidad, o mejor aún creo que me la llevaré como diversión personal… JOJOJO!- ríe el gordo victorioso.

S-suéltala!- advierte el joven moreno.

Quién lo dice? Tú?- le mira de arriba a bajo- si eres un flacucho y encima estás temblando de miedo- le lanza una patada al estómago dejando al joven en el suelo. Este se vuelve a levantar vomitando algo de sangre por el golpe.

Ky- Kyôshiro- la chica intenta pedir ayuda pero cada vez la estrangulaba más.

Por favor, suéltala o vendr�!

Quién vendr�?- pregunta extrañado- estúpido! Me has cansado! Mejor la mato delante de ti!- Kaoru se queja de dolor cada vez que apretaba más y más.

Kaoru!- gritan sus amigos sin poder moverse ante tantos contrincantes- Joder! Dónde se ha metido Kenshin?- se enfada Sano.

De pronto, un aura de poder aparece dejando a todos paralizados.

Ese poder? –se dice.

Eso es que Kenshin está por aquí, nadie tiene ese poder de espíritu!- grita victorioso Yahiko pero se desvanece esa felicidad al ver que no se encontraba dicho samurai ante ellos.

Si no es Kenshin, entonces…- se giran hacia Kyôshiro que aún permanecía inmóvil, de pie, con la cabeza agachada y con la espada desenfundada.

No puede ser! Esta energía proviene de… Kyôshiro!- dice sorprendido.

Ha desenfundado su espada! Nunca lo había hecho!

Vaya, vaya… Asi que el flacucho se ha enfadado, eh?- dice sarcástico el hombre que amenazaba.

El samurai desaparece y a continuación reaparece detrás del gran hombre.

Qué demonios has hecho? Así es como luchas? Si no me has tocado!

Es que no lo has oído?- una voz grave sale de la boca de Kyôshiro.

Oír el qué?- pregunta enfadándose.

Kaoru se percata de que la voz del vendedor de medicinas había cambiado a un tono más grave y cruel.

La voz del viento divino! JAJAJAJA- exclama riendo vilmente.

Un chorro de sangre sale de la boca del que sujetaba a la chica, las fuerzas le desaparecen y tira aun lado a la muchacha, una de sus piernas se desprende del resto de su cuerpo, a continuación los brazos, la cabeza, el torso,… dejándolo descuartizado totalmente.

Todos los secuaces huyen de miedo dejando de acosar a Sano y Yahiko, estos aprovechando se acercan a socorrer a la joven.

Estás bien?- ayuda a levantar a su tutora.

El alto guerrero sigue mirando estupefacto a su conocido- Qué es ese instinto asesino?

Kaoru alza la cabeza y observa horrorizada el cadáver que yacía ante ellos, luego mira a su frente y ve al que había hecho tal carnicería- Kyôshiro?- pregunta con miedo.

Yo no soy Kyôshiro!- grita furioso- Soy Kyô!- levanta su cabeza dejando ver una mirada asesina color carmesí.

No puede ser! Eres… Kyô ojos de demonio!- dice asustado Sanosuke.


Notas de autor:

JUJUJU... Kyo xfin aparece!

Gracias por leer mi fic a Yume, Kaoken y Kaoryu! Aunque no haya tenido muchos reviews seguiré escribiéndolo!

JA NE Y DEJEN REVIEWS XFI! Q ESO ME ANIMA!

atte: Maky Kaos