Respuesta a los reviews:
Nyissa: Tranqui, lo adverti al principio y al final de este capi deje una nota. Los pobres tienen que pasar por malos tiempos para llegar a sus paraisos personales.Son efectos del vino fránces o del whisky de fuego. Jiji. Si, a mi también me parece que Draco es lindo... Y. Que bien que te haya gustado mi historia, no sabes lo feliz que me haces. Besos y hasta el proximo capi.
Kirlatan: Hola, te digo lo mismo, tranqui que Harry arregla, para algo es inteligente y enamorado de alguien inteligente. Despues veremos. Besos y espero que continues leyendo mi ff. De todas formas yo escribo para que la gente se divierta leyendo lo que escribo.
Disclaimer: No tengo ningún interés en hacerme rica, famosa o encerrado por plagio, así que aclaró que HP es solo y solito de Jhoanne y de la Warner. Nada es mío. Solo quiero jugar con los personajes, como Harry juega al quiddith. Solo por pura diversión.
RECUERDEN Q LA NARRADORA NO SE ENFADA SI LE DEJAS UN REVIEW.
V. LOS QUE ESTÁN EN EL NORTE
Draco llegó muy de noche de nuevo a su casa, se aseguró de dejar bien lejos al mortifago que lo había descubierto. Esa no era la primera vez que un mortifago los descubría, claro, no podía darse esos lujos, tenia que estar alerta. No solo debía proteger a Andrew y a sí mismo, ahora también estaba en peligro Hermione. Pero si Draco sabia con certeza algo, es que ese era el lugar más seguro en esos momentos. Aunque no fuese el mismísimo cuartel de Hogwarts que era donde había estado casi todo su vida Hermione, protegida por un montón de aurores y maestros de alta categoría, incluyendo a Albus Dumbledore.
Cuando llegó al lugar, no pudo evitar la sensación de saber como se encontraba Hermione. Se acercó lentamente a la puerta con una lucha mental que se debatía entre verla o evitar la tentación, de todas formas podría ser muy peligroso mirarla otra vez, sobretodo porque cuando la veía algo en él se despertaba y no podía controlarlo. No sabia que era lo que le gustaba más de aquella mujer: su cabellos castaños hecho un montón de rizos que le recordaban el brillo del sol, sus ojos marrones con la sinceridad y la inocencia reflejada en ellos, su piel bronceada ya algo pálida que le recordaba que ella era una dama de Hogwarts; sus manos suaves, finas y delicadas como hechas para el fino arte de la música, sus piernas bellas que junto a sus pies siempre le dan ese caminar ligero que tanto a él le gustaba, su boca color carmín, carnosa y bien definida, que emplea siempre para dejar escapar su hermosa voz, era la más linda voz que había escuchado alguna vez. No sabia que era lo que le gustaba más de ella, porque simplemente le gustaba toda ella.
Caminó hacia la puerta que lo separaba de su linda doncella, por supuesto que no le había ganado la conciencia; la vería antes de irse a dormir y tendría los sueños más maravillosos que se podrían haber inventado. Abrió lentamente la puerta, haciendo que esta chillara tenuemente, se asomó a través y fue una gran sorpresa para el no ver el cuerpo perfecto de su damisela entre las sabanas verdes de su cama.
Maldición –maldijo algo asustado -. ¿Dónde est�? Oh, no, Andrew.
Acaso seria posible que el mortifago que atrapó solo fuera una distracción para secuestrar mientras a Hermione y Andrew. Si, era posible. Asustado, pálido e inclusive temblando se apresuró a ir a ver la habitación del niño. De golpe, con estruendo sonoro abrió la puerta de la habitación. Sintió como el corazón casi se partía dentro de su pecho y de pronto como llegaba a la calma. Dormido y con gran tranquilidad, Andrew reposaba en sus aposentos y allí, con su túnica de Hogwarts, con su sonrisa infantil, con sus brazos apretando al niño contra su pecho, allí estaba ella.
Sonrió de una manera que le causó dolor, suspiró aliviado y las gotas de sudor por fin resbalaron de su rostro.
Adiós, tigre. Ya sabes lo que te dije –decía Draco despidiéndose aquella mañana.
Cuidar a Hermione, aunque sea con mi vida –dijo el niño.
Le agregaste
Sí, pero así queda mejor –dijo el niño sonriendo -. Adiós, pero regresa pronto. No me gusta cuando te vas.
Sí, tigre, pero esta vez te quedas con Hermione.
Se inclinó al niño y lo abrazó de manera paternal, con amor y miedo a la vez. Luego, se acercó a una confundida Hermione. Él no tenia muchas ganas de hablarle, pero debía.
¿Señor¿Adonde va¿Qué hay de mi y de su... y su... (¿qué serian¿hermanos¿primos¿su hijo?) –preguntó Hermione.
Tranquila, tranquila, todo estará bien si no salen de aquí. –explicó Draco sin mirarla -. Me temo que debo explicarle al cabeza rajada que usted sigue con vida.
¿Qué? –preguntó con suavidad Hermione.
Adiós –dijo cortante y con frialdad Draco.
Y allí salió Draco dejando a sus dos seres amados bajo la protección del anónimo.
Y en su caballo cabalgando rápidamente, se marchó al otro reino, el reino del norte. Su propio infierno divino de gloria y lujos. Maldito por servir al mal y vivir como rey, alabado por un pueblo maltratado.
Cuando llegó al palacio lo recibió en su propia habitación la mismísima Pansy Parkinson.
No te ves bien. Por lo mínimo necesitamos una ducha en agua de rosas en nuestra tina de oro –dijo Pansy con un tono seductor, mientras le quitaba la capa y luego la camisa. Draco simplemente se dejó llevar. Pansy podía ser muy convincente, mejor dicho, seductora. La rubia tenia buenas tácticas y una belleza que volvería loco a cualquier hombre. Lo encaminó a los baños, mientras lo besaba y lo acariciaba. Lo despojó de todas sus prendas mientras lo metía al agua.
Te fuiste tenso y regresaste peor. Un día tendrás que explicarme lo que haces durante tus misteriosos viajes –dijo con dulzura Pansy a la vez que se separaba un poco de su cuello.
¿Será que la doctora Parkinson puede librarme del estrés? –preguntó Draco también con tono seductor.
Es mi especialidad –dijo y luego lo besó apasionadamente -. Sabes cuanto me gusta esto, pero hoy no podemos jugar a desestresarnos. –respondió Pansy deteniéndose y dándole un ultimo beso a Draco antes de salir de la tina.
¿Qué? –preguntó Draco sin entender. Lo había dejado... "vestido y alborotado". Viendo como la chica salía y se colocaba la bata de baño sobre el cuerpo desnudo.
Viste tus mejores ropas, querido –dijo Pansy sonriéndole -. Hoy nos toca salir a ser alabados por nuestro pueblo.
Esa era una de las cosas malas que tenia Pansy. Le encantaba exhibirse y ser aclamada por todos como si fuera una diosa. De hecho, a veces se hacia llamar la diosa del amor y la belleza. Y quien le diría que no, si era bastante bella. Con su cabello largo y rubio, sus ojos almendrados, sus rasgos delicados y su cuerpo espectacular. Además, de verdad sabia como seducir a un hombre, inclusive al más duro de todos, a Draco Malfoy. El cual parecía que le había vendido el alma a una damisela desconocida por todos. Pansy era la reina del cuadrante norte y siempre exhibía a Draco como su rey.
Somos dioses, Draco –decía con emoción a su compañero.
A Pansy, al igual que la gran mayoría de los mortifagos, le encantaba nadar en lujos. Tenia un gusto divino, digno de las divinidades de la antigua Grecia. Y a veces se vestía como una autentica ninfa dorada. La mayoría de las veces, Draco sonreía y le seguía el juego. Pero hoy no tenia ganas de montarse en una carroza descubierta que los paseara por todo el hemisferio norte. Sin embargo, se hizo la voluntad de Pansy.
Draco parecía absortó en sus propios pensamientos. Pansy disfrutaba, cogia las flores que le tiraba su publico, las besaba y luego las devolvía.
Nos aclaman, nos adoran, Draco –dijo en cierta ocasión.
No, Pansy, sólo nos temen –respondió Draco en un susurro que ni siquiera Pansy escuchó.
Hola, amada hermanita –decía Zabinni entrando a la habitación de Parvati que se probaba su vestido de novia.
¿Me veo linda? –preguntó mientras se acercaba a besar a su hermano.
Claro, nosotros somos perfectos. Fue el don que nuestra amada madre nos dejó, la belleza pura y real –dijo Zabinni sacudiéndose la túnica.
Lavender, Parvati y Blaise, eran hermanos sólo por parte de madre, puesto que sus padres eran diversos. Y aunque se podía decir que se querían, lo que ellos más amaban en el mundo era su propia imagen.
Ay, hermanito, hoy te veo distinto –dijo Lavender que se había acercado a besar a su hermano en forma de saludo.
No eres la unica chica que me ha dicho eso.
Y será por esa chica que estás diferente, Blaise.
Quizás –respondió Zabinni.
¿La conocemos? –preguntó Parvati emocionada -. Por que es de la sociedad¿no es cierto?
No, te equivocas y mucho. Las chica que me tiene así, es la chica que medio mundo busca y la cual es la adoración de cristal y oro de nuestro héroe, Potter –dijo Zabinni satisfecho.
¿Granger? –preguntó Lavender sin entender-. ¿Una chica de Hogwarts¿La del ED? Estás loco.
No, es hermosa y la quiero en mi camita con todo su cuerpito calido arrimadito a este bombón. –dijo Zabinni -. Y no intenten persuadirme de lo contrario, damiselas del fashion.
¿Y que hay de Eva Lestrange? –refunfuñó la otra.
Ella no se tiene que enterar. Otro día tendra la oportunidad de nadar en la suavidad de mis caricias –dijo Blaise tomando del vino que había sobre la peinadora (cómoda).
Lo que digas –finalizó Lavender.
Potter:
Granger está asalvo. No te suicides antes de tiempo. Ella está bien y no pretendo hacerle daño.
No te digo donde estàporque primero no me da la gana y segundo este pajarraco puede ser interceptado.
Anónimo.
¿Qué haces, Draco?
Me quejo al restauran de comida francesa –dijo Draco con naturalidad amarrándole a la pata de la lechuza la carta -. Es un asco. Ahora, nena, podemos ir a relajarnos.
Como guste, mi rey –dijo Pansy atrapándolo en sus brazos.
¡Harry¡Harry! –llamaba cierto pelirrojo. Venia corriendo con un pergamino en las manos -. Es sobre Hermione.
Harry inmediatamente le quitó el pergamino y comenzó a leerlo.
¿Es real? –preguntó Harry.
Sí, el maestro Lupin y yo le hemos probado con el veritaserum –dijo Ron entre emocionado y orgulloso.
Pero... ¿Quién la ha enviado? –preguntó Harry que no parecía tan contento.
Ron se encogió de hombros sin saber nada más.
Eh, Harry. Tenemos un problema. El cuadrante sur continua vacío, luego de lo de Hermione. ¿A quien ponemos? –preguntó Ron -. ¿Tienes alguien en mente?
Nadie como Hermione. Cualquiera estará bien¿por qué no pones a Ginny? –dijo Harry.
¿Sinceramente? No creo que sea buena idea. ¿Que tal Neville? –dijo Ron.
No bromees, Ron –se quejó Harry.
Era un chiste al igual que lo de Ginny¿verdad? Mejor ponemos a Luna –dijo Ron.
Ya lo pensé, Ron. Mejor Ginny, porque de seguro te distraerías muchos con el astro celestial tan cerca de ti y además, corremos el riesgo de que todos nuestros secretos sean publicados en el Quisquilloso.
No exageres –dijo Ron -. Bueno, que sea Ginny. De todas formas, tu eres el jefe.
Flash Back
Sobre su cuerpo desnudo y masculino reposaba la tierna figura de la menor de los Weasley.
Harry¿como cambiara nuestra relación? –preguntó Ginny.
Harry se movió incomodo en la cama. Ya había amanecido y con el sol, también había regresado la cordura y la sobriedad. Se sintió peor que antes de beber. Se sintió el peor ser sobre la tierra. Lo que había hecho no tenia perdón. Había traicionado a su mejor amigo, Ronald Weasley y a su familia que lo había tratado como un miembro más. También había traicionado a Ginny haciéndola ilusionarse con algo que nunca seria. Se había traicionado a sí mismo y lo peor, había traicionado a Hermione. Se había acostado con Ginny, había fornicado toda la noche con ella sobre la cama de Hermione y en cada una de las caricias hacia la pelirroja, había pensado su nombre.
Fin del Flash back
Notas de autora:
Bueno, me ha encantado continuar. Espero que las personas no se vayan a confundir y dejar el ff porque están especulando las posibles parejas. No se irriten, pero es que nuestros personajes tendrán que pasar por muchas cosas para que así se le de más fuerza a la historia y a los romances.
Hoy ando de buenas, por que voy a salir de viaje mañana a un concurso con una editora, y si dios quiere y gano mi libro estará en la librerías pronto.
Pero continuare todos mis ff. Jiji. Deséenme suerte.
Gracias a los que leen mi historia, sobretodo a los que me dejan reviews, me dan ánimos para seguir. Ustedes pensaran que es una tontería, pero escribir ff es tan importante para mi como cuando escribo una obra o un libro, solo que en los ff, me comunico con gente de todo el globo terráqueo.
Besos y abrazos y déjenme un review, plisssss.
MA®1NA P€T1T DE V€N€ZU€LA
