Miércoles 8:47 AM

En una de las habitaciones de las chicas

- Ya conseguí el permiso del jefe

- ¡Excelente, Mia! Entonces ya podemos ir decoran...

- Con la condición de que por favor dejemos el lugar bien limpio...

- Pero eso igual lo íbamos a hacer el domingo

- ... y limpiemos todos y cada uno de los rincones de su oficina dejándola arregladita y reluciente. UU

Anna solo había soltado un bufido que sospechosamente sonó como explotador cuando Sora entró como un tornado en el cuarto.

- ¡NO PUEDE SER! Faltan 3 días y aún no consigo el regalo

- Tranquila amiga que todavía hay tiempo. Y hablando de éste, anda separando la mañana del domingo, por lo menos.

Y la puso al tanto del "favor" que el jefe les pidió

- Pues, ni modo. ¡Todo sea por Ken!

- oO ¿Qué? – Mia la miraba suspicaz

- Todo sea por la alegría de un amigo. Oigan... ¡¡¡ES TARDISIMO! EL PROFESOR ME VA MATAR! Nos vemos. -

- Anna, ¿te diste cuenta? – Sora ya había salido

- ¿De qué, Mia?

- Yo creo que nuestra amiga siente algo por Ken

- Anda, lo dudo mucho. Lo quiere como a un hermano pero otra coas no.

- Mmm, yo no estaría tan segura. "Creo que ni ella se ha dado cuenta"

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10:26 AM

" ¿Qué puedo hacer? ¿Qué puedo comprarle a Ken?"

El profesor no dejaba de renegar y corregir a Sora. Esta, tan distraída como siempre, estaba haciéndolo más mal que de costumbre, y pronto iba a sacarle canas al sensible profesor.

Afortunadamente para el pobre hombre, acabó la hora y media de clases. Sora seguía con la misma pregunta en la cabeza. Iba tan distraída que ni se fijaba hacia donde iba, solo cuando escuchó una voz conocida, se detuvo y reaccionó. Estaba frente al taller de utilería.

- Oye Ken, ¿y que hay el sábado? – el que hablaba era Zach, uno de los mejores amigos de Ken, que también ayudaba a montar los escenarios. Un chico muy apuesto de cabello negro y ojos verdes

- Nada, ¿por qué lo dices?

- Por nada... nada más suponía que en el aniversario del día en que naciste se debería hacer algo especial... – dijo Zach con ironía

- Sora, ¿qué haces a...?

Con una agilidad que no concordaba con el sobresalto que le dio Mia, Sora jaló a su amiga hacia los arbustos, donde estaba escondida ella, y le pidió por señas que guardara silencio. Ambas se apretujaron contra las plantas y se quedaron quietas como piedras. Nadie las había oído: todos estaban tan concentrados en su trabajo que solo un cañoneo los habría hecho reaccionar.

- ¡Cómo molestas! – dijo Ken, suspirando resignado- Bueno en mi casa no va a haber nada porque a mi padre lo llamaron para un trabajo al interior del país y yo convencí a mi madre que fuera con él y disfrutara de unas bien merecidas vacaciones. Claro que lograr que subiera al avión fue terriblemente difícil...

- ¿Me estás diciendo que tu maravilloso plan para el sábado era quedarte solo en tu casa?

- Esto... sí.

- Te pasaste. ¿Y para qué están los amigos? ¿Qué soy yo, estoy pintado en la pared? Bien sé que soy muy bonito para ser real pero no todavía no han tenido el honor de retratarme –sus palabras, su mirada pícara y el guiño muy coqueto que hizo lograron que Ken se tirara al piso matándose de la risa. Si alguien hubiera puesto atención, hubiera pensado que las plantas también se estaban riendo. – Oye ya, deja de reirte que estoy diciendo la verdad y además no quiero que después te hagas el bestia y me digas que no me escuchaste –dijo con una seriedad que lo único que hizo fue acelerar el ritmo de risas que salían de la garganta de Ken, pero esta vez Zach lo ignoró y continuó- Oye si me entero que el sábado tú solo estás viendo televisión, te juro que voy a tu casa y con los muchachos armamos algo decente, como una chupeta mínimo.

Ya desde que idearon el plan, Mia se preguntó como iba a hacerle para hacer que Ken se quede hasta la noche. Así que vio una buena oportunidad para conseguirlo en ese momento y, ante la mirada atónita de Sora, se levantó y acercó rápidamente al chico pelinegro.

- Disculpa... ¿tú... eres Zachary, ... verdad- no sabía porque pero cuando un par de ojos verdes se enfocaron en ella, se sintió terriblemente fuera de lugar y cohibida pero recordando el motivo que la había impulsado a hacer eso, levantó la cabeza y clavó sus ojos en los esmeraldas que la miraban con curiosidad, y habló tratando de sonar convincente – el jefe te llama...

- ¿A mí? Pero si dudo que conozca mi nomb...- Ahora la mirada de Mia era una de súplica, a Zach lo venció la curiosidad – Está bien, te sigo. Y tú - dijo pateando amistosamente a Ken que seguía en el suelo tratando de recuperar el aire – más te vale que sigas aquí cuando regrese – y dicho esto siguió a Mia, que le esperaba más adelante.

- Ahora, señorita, me vas a decir quién eres y qué quieres porque ese cuento que el jefe me llama no me lo creo ni aunque me lo dijeran en chino

- Eso Mia. ¿Para qué llamaste a este chico? – dijo Sora, saliendo de los arbustos, sorprendiendo un poco a Zach pero después este la ignoró

- Porque creo que él nos puede ayudar, Sora. – Y luego mirando al ojiverde le contó en pocas palabras el plan de las 3 amigas. – ...Tenemos el lugar, las luces, pero nos faltan algunas cosas. Y sería genial si tú pudieras hablarles los demás y a Ken ...

- ¿Iban a organizar la fiesta ustedes solas? –interrumpió él - Seguro habría piñata y payasos y todas esas cosas que les gustan a ustedes las niñas – Ambas chicas le lanzaron miradas fulminantes pero él ni caso- Todos los muchachos nos habríamos muerto de aburrimiento. ¿Y la música?

- Estoy en eso– dijo Mia, con orgullo– Conozco varias canciones ya sean de salsa, reggae, hip hop, merengue, balada, rock...

- Tendré que encargarme de la música también –dijo, ignorándola- Y también de las bebidas. No es que piense que ustedes no sepan de fiestas solo…

- Haz lo que quieras – dijo Mia de mala gana – Total, tienes razón, encargarnos nosotras solas del asunto es mucho trabajo, así que qué mejor ayuda que un chico TAN listo y fuerte como tú – dijo, con mucho énfasis en la palabra "tan" - Pero yo te ayudaré con la música: no quiero que ninguno de los invitados quede sordo, mucho menos el homenajeado- agregó, radiante.

Ambos se quedaron mirando con hostil desconfianza. Sora, intentando romper la tensión se dirigió a Zach.

- Entonces –dijo poniendo su voz más dulce- ¿me podrías decir como qué cosas le gustan a Ken? Como eres uno de sus mejores amigos…

- Mira, ¿tú eres Sora, no, Ken es buena gente, pero es muy tímido, y la verdad es que, como lo conozco desde hace poco, no sé mucho. Lo más que sé es que nunca toma yogur porque cuando tenía 6 años una cucaracha estaba en su vaso, y le quedó el trauma.

Sora y Mia: OO

"Y eso que Zach no sabe casi nada de Ken" pensaba Sora

"Con razón puso esa cara tan rara la semana pasada cuando le quise invitar mi yogur de durazno en el desayuno" pensaba Mia con consternación

- ¿De verdad que no sabes que le gusta? – le preguntó nuevamente Sora

- No tengo la menor idea, lamento no poder decírtelo. Tú, no como otras, sí eres amable y simpática.

- Este… gracias… supongo – Sora dijo esta palabra en un tono muy bajo y con poca convicción, estaba un tanto abochornada – Bueno supongo que ya encontraré algo. Nos vemos, chicos.

Sora se fue dejando a Mia y Zach solos.

Nada malo podía pasar.

¿Verdad?

- Bueno – Mia se dio cuenta que estaba sola con… ése… y que además ya se estaba haciendo tarde así que aprovechó y…- supongo que tendremos que ponernos de acuerdo con la música. ¿Te parece si empezamos mañana a las 4 que tenemos descanso? Es que hoy en la tarde tenemos ensayo ¿Sí? Entonces ahí te veo… adiós.– Y diciendo esto, se dio la vuelta y rápidamente se alejó hacia el comedor, suspirando de alivio al verse libre de ese pesado. Nunca hubiera creído que alguien le pudiera caer tan mal después de haber hablado con él solo media hora.

Definitivamente todo es posible.

Zach solo se quedó mirando como se iba con cara de fastidio, pero luego regresó donde aún estaba Ken. Y siguió trabajando sin hablarle ni mirarlo.

- Oye ¿por qué estás tan callado? ¿Para qué te llamó el jefe?

- ¿Que? Ah… Quería decirme algo acerca de… un trapecio al que hay que echarle más aceite.

- Ah, ya veo. Pero te demoraste bastante…

- Es que de regreso me vine haciendo cálculos. Mejor celebramos tu cumple aquí pues a todos nos queda lejos tu casa, ¿y después cómo regresamos a nuestro dulce hogar... si es que estamos en condiciones de regresar?

- Jajaja, está bien.

Silencio

- Zach, ¡Ey, ¿por qué sonríes tanto?

A partir de ahí, Zach se la pasó silbando toda la tarde.

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Sora seguía mortificándose con dilemas mentales.

"¿Es que nadie conoce bien a Ken? ¿En donde puedo saber qué cosas le gustan?"

Y la respuesta le pegó en la cabeza.

"Esta noche"

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6:43 PM

Casa de los Robbins.

Una sombra se deslizó por un bastante poblado jardín. Luego intento forzar la puerta de esa casa pero al no poder regresó al cobijo de las sombras. Luego decidió probar con las ventanas. Después de un rato de forcejeo, por fin pudo abrir una de las ventanas. Menos mal que era delgada que si no…

Al parecer, ya había estado allí antes pues apenas estuvo dentro y tuvo el cuidado de cerrar la ventana, se dirigió a uno de los cuartos. Estando allí, cerró las cortinas y prendió la luz.

Era Sora…

….y estaba en la habitación de Ken.

Cuando ella salió de Kaleido, Ken no había salido pero debía estar por llegar. Se las había arreglado para salir lo más temprano posible sin que nadie lo supiera. Ahora miraba rápidamente toda la habitación en busca de indicios de preferencias de su dueño.

Ante todo, la pared estaba limpia. Mala señal: eso significaba que no le gustaba ningún cantante o grupo musical en especial, y al no haber señal de pelotazos eso significa que no le gusta el deporte.

Se puso a buscar rápida pero cuidadosamente. En una esquina del cuarto, había una mesa y estaba llena de papeles y cosas. Sora siguió revolviendo el escritorio ya de por si desordenado y de repente abrió mucho los ojos en un gesto de total asombro.

- I-Increíble !

Un ruido se escuchó afuera. En efecto Ken acababa de llegar y estaba buscando las llave para abrir. Sora apagó rápidamente la luz y salió, quedándose escondida detrás en un closet donde la señora Robbins guardaba las cosas que ya no usaban. Contuvo la respiración hasta que Ken entró a su cuarto. Entonces ahí salió velozmente y con cuidado abrió la puerta de la casa y salió. Una vez afuera empezó a correr y no paró de hacerlo hasta que se creyó estar a por lo menos 1 kilometro de la casa de Ken.

"Jamás hubiera imaginado una cosa así de ti, Ken"

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¿Qué habrá encontrado Sora? ¿Una colección de Playboy? XDDDDDD

Como ven ha tenido que tomar medidas extremas, bueno, la pobre estaba ya MUY desesperada. Y me invente a Zach en un impulso, no se me ocurrio hacer personajes nuevos. Pero ahora que lo pienso Ken debe pasar su tiempo con alguien, no puede esytr suspirando por Sora todo el dia o si? Por mas timido q sea debe tener amigos asi q.. me salio una version con el fisico d Harry Potter jejeje

Y es mi imaginación o se viene algo entre mia y zach? De repente les parecio muy rapido y zach es muy masoquista y antipatico pero a mi me gusta asi

Creo q yo tb soy masoquista y en cuanto a lo d antipatica… oO

Solo por si acaso. Zach y los demás aún no sabían del plan de las chicas, porque

ellas, precavidas, querían tener el permiso del jefe antes de hablar con ellos.

Chupeta viene de chupar, que es tomar bebidas alcoholicas.

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MUCHISIMAS GRACIAS psfc, Syaoran Li Clow, tonks, IrIs-OdY, varina-saku, SORA, yoo, por sus lindos reviews. Me dan mucho animo y ojala les haya gustado este capi. Espero escribir un capitulo d alguno d mis fics diario pero pero dudo qu pueda subir uno el sabado 19: es el 80 cumple de mi abuelita. Asi q…

GRACIAS POR TODO