Este es un mini fic, asi que perdón porque sea tan corto. Los personajes no me pertenecen. Son de J.K.R., asi que no demanden.


Era otro día caluroso de verano en Privet Drive. Hacia solo dos semanas desde que Harry llegó de Hogwarts. La herida que la muerte Sirius le dejó todavía estaba muy fresca. Pero los Dursley no lo sabían y por tanto no se daban cuenta que infeliz era Harry. Infeliz, pero no ciego. Él sabía bien que su primo había recibido una carta del colegio donde asistía, en la que le decía que tenía que asistir a un campamento como castigo por una pelea en la que se metió y terminó mal.

Lo grave de la situación no era tanto que Dudley hubiera cometido algo malo o grave, sino que los Dursley ya habían planeado unas vacaciones y todo estaba pago, por lo que este campamento lo dañaba todo. Lo que no sabia Harry era que ellos ya habían solucionado el asunto.

- Prepara tus cosas – le dijo el tío Vernon a Harry – nos vamos dentro de poco. Harry dudaba mucho que él estuviera incluido en el paquete vacacional, pero de todos modos empacó.

Poco después se encontraron frente a un lugar lleno de jóvenes, autobuses y militares. El tío Vernon les indicó a los chicos que se desmontaran. Harry pensó que aquel era el lugar donde dejarían a su primo. Los militares harían un buen trabajo con Dudley.

- ¿¡El nombre de su hijo! – preguntó con voz a pecho uno de los militares en la entrada.

- Dudley Dursley – dijo Vernon mientras el hombre buscaba el nombre del chico

- ¡Si, aquí está! ¿¡Cuál de ustedes es! – le preguntó a los dos chico y para sorpresa de Harry, lo empujaron a él dentro.

- ¡Bien! – Exclamó el militar – Está algo flaco, pero indicaciones son indicaciones. Cuando usted reciba de nuevo a este muchacho verá que no volverá a cuasar estragos

- Eso espero - dijo Vernon. Harry trató de replicar pero su tío y Dudley ya se habían dado la vuelta y el militar lo arrastró tan fuerte por la oreja que no pudo hacerlo.

No había más que hacer. Sus tíos lo habían engañado y lo dejaron en lugar de Dudley. Cerca de donde estaba, pasaba una escena análoga.

- ¡No! ¡Déjenme aquí! Yo no quiero ir a la Academia de Señoritas – se quejaba una chica mientras la arrastraban a la salida y su hermano le decía adiós.- ¡Aoshi!

- Lo siento, pero no puedo hacer nada – le dijo el chico. Se la llevaron. Y el joven se puso a conversar con otro chico rubio, que parecía estar acostumbrado a ese tipo de trato.

Mientras…

Desde que había llegado a su casa su vida había sido un infierno. Le agradaba la idea de entrar al lado oscuro, pero el encarcelamiento de su padre, sin contar la obsesión fanática que este sentía por el Señor Oscuro, era demasiado para él. A Draco Malfoy le molestaba en realidad que en su casa ya no le pusieran atención como antes. Ni siquiera le tenían confianza. Decidió huir. "Por su bien y el de los suyos" pensaba.

Hacía varios días desde aquello y Draco había tenido que estar en el mundo muggle, escondiéndose por aquí y por allá. Aquel día volaba en su escoba protegido por una capa de invisibilidad (no tan buena como la de Potter) que había obtenido en su casa. De repente reconoció la figura de alguien en una estación de buses. Era Harry Potter. Draco se preguntaba si él también estaría huyendo. Cualquier cosa que estuviera haciendo no le debería importar, pero de todos modos bajó por un lugar seguro y fue a molestarlo pues, según él, Harry era el responsable de todo lo que le estaba pasando.

- Potter – dijo con su odiosa voz

- ¿Qué haces aquí Malfoy? – Pregunto Harry y después se dio cuenta de que estaba en un lugar totalmente muggle - ¿Acaso te echaron de casa? – preguntó para molestarlo

- Desearías Potter – dijo lanzándole una mirada desafiante

- ¡Oye tú rubio! Sube al bus – dijo un militar que apareció de repente. – ¡Y tú también! – gritó refiriéndose a Harry

- Hay un error - dijo Malfoy rápido – yo no estoy en esto.

- Si claro y yo soy el rey de Inglaterra – exclamó el hombre algo irritado – sube o te subo

- Pero… - Malfoy no pudo terminar de decir lo que fuera a decir porque el irritado militar lo agarró por el cuello y lo entró al autobús. Harry entró por su propia cuenta. Esto iba a ser más interesante de lo que pudo haber imaginado.


Espero que les haya gustado. Por favor, reviews.