~girahistoria~
Por CieloCriss*
El giratiempo descompuesto
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James Potter tuvo la sensación de que volaba muy rápidamente hacia atrás, pensó que hubiera sido más agradable volar hacia el frente, le temblaban las piernas. A su alrededor veía pasar manchas de objetos que no se delineaban correctamente. Notaba que le zumbaban los oídos. Uno de sus amigos intentó gritar; pero no pudo hacerlo... las voces sonaban como eco, no se distinguían.
Ni siquiera se dio cuenta cuando sus pies tocaron tierra firme, definitivamente estaba mareado, llevaba mucho tiempo viajando sin saber cuándo dejaría de volar en la nada; observó que Sirius cayó de rodillas, a comparación de él, estaba mucho más pálido, con el sudor jugando carreras por todo su rostro. Remus Lupin, el otro que había sufrido esa pesadilla, ni siquiera tenía conciencia de sí mismo, estaba tirado en el césped... ¡un momento! ¿Césped?, James no recordaba que en ese lugar hubiera zacate con anterioridad; eso significaba que... que...
—¡Sirius, hay césped!
—¿No me digas?, con razón lo estoy viendo, ¡dugh!
—No seas bobo, piensa una vez en tu vida: hay césped... si mal no recuerdo, en esta parte del Bosque Prohibido no había nada.
—Ahora que lo mencionas, tienes toda la razón James, era un sitio rocoso en el que por mala suerte se nos ocurrió hacer el experimento con nuestro giratiempo, ¿nos habremos trasladado de sitio? — Sirius intentó caminar, pero antes de eso, se quitó una fina, larga y delgada cadena de oro que colgaba de su cuello y del de sus amigos — Mmmh, interesante.... creo que sí estamos en el Bosque Prohibido de Hogwarts... ¡maldición!, estoy seguro de que no le moví mucho tiempo... fueron unas cuantas vueltas al futuro, o sea, horas, ¡lo juro!... en la prueba que hicimos ayer, todo fue un éxito ¿Por qué ahora nos sale mal?
—Después pensamos en eso, Sirius... temo que, nuestro compadre Lupin está inconsciente.
—¿Que Lunático qué?... entonces deberíamos llevarlo a la enfermería — sugirió Sirius Black, pateando con simpatía al bulto de su amigo que yacía en el pasto, según él, parecía una tierno cachorrito (y eso que no estaba convertido en hombre lobo).
—No podemos hacer eso si no sabemos en qué tiempo estamos, además, como todo parece indicar que algo hicimos mal al fabricar nuestra versión de giratiempo, las cosas pueden estar distorsionadas.
—James, si Remus despierta y le digo que no quisiste llevarlo a la enfermería, querrá comerte cuando sea luna llena.
—Sirius, ya sé que no podemos dejarlo así... cárgalo y llevémoslo a la enfermería, le explicaremos todo a Dumbledore, en caso de que siga siendo el Director, sino, pues supongo que el encargado del colegio no nos lo prohibirá, le diremos que fuimos exalumnos o algo así, mantendremos el anonimato ¿Te parece?
—Todo está bien menos la parte en la que mencionaste que debo cargar a Remus, creo que eres más apto que yo para eso.
—Tampoco podemos alterar esta época... nadie conocido debe vernos...
Unas extrañas pisadas sacaron a los jóvenes confundidos de sus pensamientos, ambos agarraron a Lupin por las manos y comenzaron a arrastrarlo, pero era inútil, cada vez oían más de cerca el ruido, no sabían de dónde provenía. Sirius mencionó que los licántropos tenían un oído muy fino, pero James le recordó a su mejor amigo que Remus estaba indispuesto para cualquier petición. Cuando ya creían haber escapado del peligro, una voz ronca, gruesa, pero amable, los interrumpió, haciendo que los pobres chicos, perdidos en el tiempo, palidecieran.
—¿Harry? ¿Qué haces en el Bosque Prohibido en estos momentos? ¡Qué barbaridad! ¿Estás bien? ¿Te atacó Quien-tú-sabes y huiste de la casa de los Dursley? ¿Y esos chicos? ¿Dónde están Ron y Hermione?
James sabía quien le hablaba y le sujetaba los hombros, pero por el contrario, no sabía quién era Harry, lo estaban confundiendo. El aparecido, causante del susto de su vida, era Rubeus Hagrid, el simpático guardallaves de Hogwarts, quien según los merodeadores, siempre ofrecía pésimos pasteles pero una agradable velada. James Potter y sus amigos lo veían por las tardes cuando terminaba la clase de Adivinación, o la de Pociones... "A lo mejor no ha pasado tanto tiempo" pensó ingenuamente Sirius "Quizá uno o dos años.... aún debemos estar en Hogwarts, lo extraño es que Hagrid le haya dicho a James de otra manera".
—Oye muchacho, ¿te comieron la lengua los ratones? ¡Deberías estar en casa de tus tíos!, sabes que las cosas están horribles, lo mejor será llevarte con Dumbledore... Madame Maxime y yo acabamos de llegar de... de un sitio que no debo decirte. ¿Sirius no te ha escrito?, ¡Dumbledore me ha contado todos los secretos y la verdad sobre él! — Hagrid hablaba mucho, lucía asustado. James seguía sin entender ni jota de la conversación.
—Pues... Sirius está... a mi lado. — explicó, no sabía porqué Hagrid le había preguntado si su mejor amigo le había escrito.
—¿Cómo? ¿Se transformó en Hocicos y anda merodeando como perro?
—¡Fatalidad!, ¡conoce mi secreto! – chilló Sirius, de 15 años, comiéndose las uñas.
—Hagrid... Errr, este chico — empezó James, apuntando a Remus, no dijo quién era porque no sabía si eso pondría en riesgo el pasado — necesita atención médica... ¿estará disponible la señora Pomfrey?
—¡Claro que sí!, es verano y todos los estudiantes están de vacaciones, en sus casas, justo como deberías hacerle tú, ¡mira que preocuparnos a todos!, sé que tus tíos son los muggles más muggles del mundo, pero Dumbledore les mandó una carta... en fin, este chico ciertamente necesita una enfermería, Harry, ¿quién es?
—Mi amigo...
—¿Y el otro chico?, oye, ahora que los miro... ustedes dos — apuntó a Remus y a Black — me parecen conocidos...
—¿No me digas Hagrid?, jeje... — indagó con nerviosismo James, subiéndose las gafas que enmarcaban sus oscuros y destellantes ojos.
Rubeus tomó en sus brazos a Lupin sin analizarlo bien por la poca luz que ofrecía el Bosque Prohibido, le pidió a "Harry" y a Sirius que lo siguieran y comenzaron a avanzar.
Sí, estaban en su colegio, pero no sabían en qué época, James tenía ligeras sospechas que mejor no se ponía a analizar.
—Oye James... en chico lío nos hemos metido ¿Verdad?... no me explico cómo se descompuso el giratiempo, ayer revisé que todo estuviera bien ¡Lo juro!, a menos que Peter haya jugado otra vez con mis cosas, está bien demente el pobrecito.
—Sirius, habla más bajo, Hagrid puede oírnos — regañó Potter —. Lo que yo no entiendo es quien puede ser Harry, lo ha mencionado mucho.
—Alguien que se parece a ti, pero quien sabe si en verdad se parezca a ti, ya sabes cómo es Hagrid, ve parecidos en todas partes, ¿recuerdas cuando dijo que Lily se parecía a una arañota gigante que vivía en este bosque?
—Aragog.
—Sí, Aragog... bueno, sé que Lily es cascarrabias muchas veces, pero no me parece que tenga pinta de araña.
—Sí, recuerdo ese día. A lo mejor Harry es un dragón, ¿no recuerdas que Hagrid siempre quiso uno?, ¡vaya, es estúpido pensar eso!, aunque, no sé... ese nombre de Harry...
—¿Ese nombre qué?
—Lily lo menciona... habla de que le gusta...
—¿El nombre de Harry?... James, date cuenta de lo que dices, hablas como si...
—¿De qué hablan, chicos?, ya llegamos a los terrenos del colegio, ¡es increíble lo mucho que puede cambiar el día nada más con salir del Bosque Prohibido!
—Yo agregaría lo siguiente: cómo cambia el castillo con el tiempo — agregó Black, observando a Hogwarts con unos cambiecitos que para el animago ilegal no pasaron desapercibidos.
Siguieron desplazándose, sabían de antemano que estaban haciendo mal, su presencia en esa época estaba alterando las cosas, ahora Hagrid creía que James era un tal Harry, y cada vez que le decían así, James sentía una punzada en el vientre.
—¿En dónde estoy? —despertó Remus. Al abrir sus ojos se encontró en el regazo de los brazos del semi-gigante guardabosques de su colegio, se asustó, ¿qué había pasado con el loco experimento que habían hecho sus amigos con el giratiempo que crearon en base a uno que tenía McGonagall en su despacho?, a Lupin le dolía ligeramente la cabeza —¡Hagrid!... hey chicos, ¿qué pasa aquí?
Rubeus dejó al joven delgado y castaño en el suelo, éste se mantuvo de pie mientras se recargaba en la pared, lucía débil.
—¿Qué dices?, ¿me conoces?... tu rostro me parece conocido, muchacho.
—¿Eh?, pues claro que soy Luuuu... – dijo Remus sin comprender.
Sirius le tapó la boca al canelo de ojos grises y sonrió como si fuera un angelito malvado. James también sonrió con nerviosismo.
—Es... es mi amigo Hedwig...
—¿Hedwig? — rió Black, estallando en carcajadas, a Remus no le gustó el apodo.
Sin embargo Hagrid se puso serio y comenzó a pensar.
—¿Qué no Hedwig es tu lechuza?... cielos Harry, no pareces ser Harry.... ¡Un momento!
—¿Qué? – dijeron los tres al mismo tiempo.
—¿Y si son impostores y buscan hacerle daño a Dumbledore?
—¿Qué?
—Mortífagos disfrazados de Harry Potter, ¡cómo no me di cuenta de eso!
—¿HARRY POTTER? – exclamó James, con los ojos desorbitados.
—¡Claro! — siguió Hagrid —¡Eres un impostor! — entonces le descubrió la frente, la cicatriz en forma de rayo no estaba —¡No tienes la cicatriz!, la cicatriz que le hizo Quien-ustedes-saben cuando era bebé...
El joven de lentes resopló, debió volarle mucho la imaginación, casi pierde el sentido común que le quedaba. Sin embargo Sirius Black fue más veloz para atar cabos suelos: Estaban en el futuro, había un tal Harry Potter... y si... y si...
—Disculpa Hagrid, si no es mucha molestia, ¿podrías decirme de quién es hijo Harry Potter?
—¡¿Cómo?! ¿No lo saben?, eso ni los impostores ignorarían, Harry Potter es el niño que vivió, derrotó a... a...
—¿Voldemort? — interrogó Lupin, sin temor de pronunciar el nombre.
—Ehhh... sí, eres valiente al decirlo, muchacho.
—¿Entonces?
—Harry Potter, por supuesto, ¡es hijo de los Potter!, de James y Lily Potter.
A James le comenzó a girar la cabeza de manera más fea que con el giratiempo, se jaló los cabellos y se puso lívido, toda su sangre bajó a sus talones y desapareció de su rostro. Respiró fuertemente dos veces seguidas, y sin poder seguir atento a lo que acababa de oír, se desmayó.
—Caramba... tendremos de todas formas qué ir con Madame Pomfrey — suspiró Hagrid, ya no pensaba en que esos chicos fueran impostores.
—¿Hijo de James y Lily? ¡INCREÍBLE! —opinó Sirius, bufando de la impresión.
—Creo Sirius, que viajamos muchísimos años al futuro... en donde Lily es esposa de James y tienen un bebé.
—¿Te parece un bebé un joven de nuestra edad, Remus?
—¡Era un decir!
—No puedo creer que James se haya casado con Lily...
—Él tampoco — opinó Remus, señalando al pobre y desmayado James —, pero yo ya lo veía venir... tenemos qué regresar a nuestra época, estamos trastornando todo aquí, le adelantamos al giratiempo unas horas, pero las horas fueron años...
—¡Hey!... ¡Esperen un poco chicos! —rogó Hagrid, comenzando a recordar —ustedes son... pero, pero, pero no es posible...
—Bueno, todo tiene una explicación, Hagrid....
—¿Sirius Black y Remus Lupin, verdad? ¡Dios mío!, ¿qué clase de poción han tomado para volverse chicos?
—No Hagrid, no has entendido. Sí somos nosotros: Remus Lupin, James Potter y Sirius Black. Pero venimos del pasado, resulta que nos ocurrió un accidente con un giratiempo y...
—¿Es James Potter realmente? – inquirió Hagrid, mirando al muchacho desmayado para luego levantarlo.
—Sí... – respondió Remus, supuso que algo entristeció de repente a Hagrid, porque se puso melancólico.
—Se le parece mucho a Harry, el mismo cabello y tono de piel, ¡hasta el diseño de las gafas!, la única diferencia radical son los ojos, esos los tiene de Lily, verdes como la esmeralda, ¿cómo no me di cuenta? ¿Cómo puede ser posible?, ¡tengo qué llamar a Dumbledore!, ojalá le permita a Harry ver a James, sería muy importante para Harry, lo haría tan feliz, conocería a su padre.
Los jóvenes se quedaron algo confundidos con las palabras de Hagrid, lo miraron fijamente.
—¿Harry no conoce a su padre?...
—Ohhh. Temo que no debí decirles esto a ustedes dos —renegó el gigante, arrepentido.
—Hagrid, ahora nos lo dices, ¿por qué Harry Potter no conoce a su padre? —rogó Lupin en forma de cuestión..
—Escuchen muchachos... todo esto es muy enredoso... hemos tenido épocas muy difíciles, si vienen del pasado no deberían saber el futuro.
—¡Al diablo con las reglas, Hagrid!, se trata de nuestro James, ¿está enfermo?, ¿lo capturó Voldemort?
—...James... y Lily Potter... fueron asesinados el día en que Quien-ustedes-saben fue vencido por última vez...
Lupin y Black abrieron los ojos al triple por asombro que les causó esa revelación, ¡uno de los merodeadores estaba muerto!, ¡su mejor amigo! ¡Cornamenta!... Sirius apretó los puños y pateó el suelo. Remus miró fijamente a Hagrid, esperando una broma, ¡no podía ser posible!
—Me parece que te apresuraste en decirles esas cosas, Hagrid. — se escuchó de repente. Los adolescentes del pasado vieron entonces al imperioso profesor Dumbledore.
—¡Profesor Dumbledore! – dijeron al unísono Sirius y Remus.
Albus les sonrió con candidez, se inclinó hasta James y lo visualizó un rato.
—Así que tuvieron un accidente con el giratiempo que Minerva perdió hace tantos años — sonrió tras su frase, miró a los Merodeadores.
—Bueno, técnicamente teníamos qué regresar el giratiempo de la profesora, sólo lo tomamos para tratar de hacer nuestra versión — susurró Black—. Realmente lo sentimos, Señor...
—Me impresiona mucho verlos jóvenes, y del pasado —admitió el Director —. Querido Hagrid, el joven Potter necesita ir a la enfermería, llévalo con Poppy para que le administre un poco de glucosa, te ruego que esperes ahí con él, no quiero que James se escape, nadie debe saber de quien se trata.
—Claro... —murmuró el gigante.
—Señor Black, señor Lupin, ustedes, si no les importa, tendrán una larga charla conmigo acerca de cómo fueron a llegar a esta época.
Los dos asintieron y siguieron al Director muy contrariados.
Sabían que James estaba muerto, y no sólo él, también Lily. Ambos temían tampoco no existir, Sirius casi lo aseguraba porque anteriormente había escuchado que Hagrid le reclamaba a Harry el que no estuviera en casa de sus tíos muggles... todo era muy confuso, digo, si Harry era hijo de su mejor amigo, era ilógico que en vez de estar con él estuviera con otros que ni siquiera aceptaban la magia; sin embargo, por otra parte, Hagrid lo había mencionado. Ninguno de los dos quería que su camarada estuviera muerto, era totalmente injusto. James siempre había sido un chico listo, inteligente y líder, ¡tenía tanto futuro por delante!, ¡Maldito sea Voldemort!
El interior del Castillo tenía ese aire solemne y tradicional; pasaron cerca de la entrada a la Torre de Gryffindor, y pudieron ver que la Señora Gorda aún seguía siendo la "guardiana". También miraron pasar a Nick Casi Decapitado, quien seguro iba pensando en algo interesante porque no los saludó.
—Todo parece seguir igual... —optó por decir Sirius —no puedo creer que hayan pasado tantos años.
Por unos instantes sus ojos azules vieron una vitrina en donde estaba un artículo en donde decía algo de un Torneo de los Tres Magos.
—Pero hay mucho silencio por ser verano. Yo nunca había venido en verano a Hogwarts – opinó Remus.
—Es posible que venga una época de mucho silencio, Remus.
Llegaron hasta un recoveco y los jóvenes vieron una escultura con forma de águila.
"Betún de cereza" dijo Dumbledore; su contraseña era... inusual.
El águila se elevó y aparecieron unas escaleras en forma de caracol, los jóvenes siguieron a Dumbledore.
—¿James no sabrá lo que hablaremos? – preguntó Sirius.
—Por supuesto, pero deberé hablar con él a solas. No sé en cuanto tiempo podré arreglar su giratiempo, y de no estar advertidos, podrían alterar seriamente toda la realidad.
—¡Eso estaría bien! – renegó Sirius —¡Podríamos impedir la muerte de James si seguimos viajando por el tiempo!, no es justo que esté muerto, ¡no es justo!
—Señor Black, le ruego que se calme. Entren por favor... ¡Fawkes!, tenemos visitas.
Una hermosa ave Fénix apareció de entre las cenizas, era un pimpollo acabado de nacer, que piaba con gracia adorable.
—Tomen asiento, por favor, tenemos mucho de qué hablar...
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Continuará...
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Notas de la autora: ¡Hola a todos, gracias por leer!, espero esta primera parte les haya agradado, espero no tener muchos errores en el fic, ya que siempre opino que hacer fanfics de libros es más complicado porque a veces no seguimos el estilo de la autora. Ojalá mi historia les parezca interesante, les aseguro que cada vez estará mejor, porque ¿Acaso no hay un mundo de posibilidades con el paréntesis abierto?, el simple hecho de pensar en cuando James se entere de su futuro es escalofriante, ¡y cuando se encuentre con Harry!, espero no decepcionarlos.
Esta idea me venía rondando por la mente desde hace mucho, pero tengo qué admitir que gracias a la película 2 retorné decidí elaborarla (la idea). Quizá no les quedó muy claro el concepto de "giratiempo" que usé para el fic, poco a poco la trama verdadera surgirá y la comprenderán. Creo que será un fic elaborado y tendré que trabajar para que quede decente, así que espero lo sigan y me ayuden a mejorar.
¿Qué pasará con James?
¿Se cambiará la historia de Harry Potter por la intervención de los Merodeadores? ¿Se encontrarán a sus YO grandes? ¿Se enterarán de lo de la rata?
¡Sigan leyendo!, el próximo capítulo será: Siguiendo a Pigwidgeon.
¡Gracias por leer, no se olviden del Review!
Este FIC está dedicado a varias personas. Primeramente a mi sobrino Alberto (debería decir mi primo), ¡espero te guste, Champ-kun!, (él siempre ha soportado que le lea mis creaciones). También a mi hermano, quien espero algún día lo lea.
De una manera especial, lo dedico a mis dos mejores amigas: a mi hermanita Dikana, quien es una excelente escritora y una grandiosa amiga (¡Gracias por todo Pili-chan). Y a mi querida amiga Dadaiiro, quien me ha impactado con su fic "Hechizo del pasado", además, ella me ha ayudado mucho en la realización de este escrito (me diste muchos ánimos, ¡gracias!).
Por último, se lo dedico a mi amigo Sergio (el único de mi escuela que aprecia los libros de HP).
