¡Hola a todos!
Me estaba muriendo por publicar este chap, así que no haré mucha introducción. Gracias por su reviews, gracias a quien me hay nominado en la premiación de FanFic Awards (MIL GRACIAS!!!!), los personajes no son míos sino de JK… contesto reviwes y los dejo con el chap, espero en serio que le guste, porque a mi me encanta!!!!!
Angie Crowe: ¿Perdón? ¿PERD"N? ¡GRACIAS A TI! ¡LOS 29 CAPÍTULOS! Es demasiado, muchísimas gracias de verdad, y además no te preocupes, ¡¡¡¡amo los reviews en todas sus extensiones!!!! Así que no te reprimas y escribe lo que quieras. Me alegra que te guste mi forma de escribir y sobre todo mi recomendación, porque de mis historias esta es mi favorita. Que dicha que no se te hace lío para entenderla, es muy divertido escribir en dos planos, porque tienes puntos de interés diferentes a lo largo de la historia. Me alegra que te guste el enfoque de los personajes, porque la verdad algunos están muy cambiados, (como Draco) o son vistos no muy favorablemente (como Dumbledore), así que que bien que te guste. Draco es muy importante en la historia, si fuera el reparto de una película sería el cuarto en aparecer, Bill… sigue leyendo, Bella y Sara, bueno, jeje… ya lo verás. Lo del diario es uno de mis trucos favoritos de la historia. Lo de que Sara se entere… no te lo puedo decir, ¿qué crees tu? Aquí hay otro capítulo y de nuevo gracias por leer la historia.
Emma Frost- RB: ¡Hola! Esta actualización fue aún más rápida, pero la próxima si tendrá que esperar al Viernes. Yo la verdad aparte de las pelis no sé mucho de X men, pero la historia de mi amiga me gusta, ella escribe muy bien. Lo del capítulo, sí, en Sara B no pasa mucho en esta etapa del fic, pero me alegra que hayas notado los detalles del cansancio y la reconciliación (es que necesito la sabiduría de Herms). Lo de SP, bueno, es la parte fuerte de la tercera parte, ya entra aún más en el mundo de los mortífagos. Tú me dirás que crees de la maldad de Sara Parker al terminar este chap.
Ariadna Creta: ¡Hola wapa! ¡Qué bien que mandaste el review tan rápido! Me encanta recibirlos. Lo de Dumbledore, pues la verdad es que me alegra que estemos de acuerdo en ese punto, y creo que en los libros le haría bien un poco de menos secretismo. Lo del diario es de mis cosas favoritas del fic, aunque aún quedan muchas sorpresas como la de este chap, esa era solo un aperitivo… ¿Te molestó lo del férula? Pues anda, yo pensaba que era de las pocas veces en que Sara B no se porta mal con Dumbledore, porque bien podía dejarlo solo con la pierna mala mientras se iba a jugar de héroe y aún así lo ayudó y lo comparó con ella… muchas concesiones para ser Sara B. Pero bueno… De nada por la explicación, pregunta cuando quieras que yo lo explico, además el fic se va a ir enredando cada vez más (o sí, aunque ya no parezca posible…) ¡Gracias por las felicitaciones y por votar por mi! Yo me enteré hace poco, pero no sé como poner el link que me dices. Y por lo último… ¡vamos chica, no te pongas así que Sirius no te va a volver a mandar saludos! Vamos… ¡no me dejes sin tu review en el mejor capítulo! Espero que tengas mucho que comentar de lo que sucede a continuación (¡que se va a dar uno de los mayores giros de la historia!) Me gustaría saber que te pareció… pero tu sabrás si quieres vengarte de mi que no te he hecho nada… uu…
BellaBlackvad: ¡Hola! Esta vez no tuve que esperar tu review, y me ha gustado mucho, (aunque incluía una amenaza de muerte…) ¡es que si no lo dejo ahí me salía un capítulo de 40 páginas! Sí que el diario es mentira, bueno, verdades modificadas y mentiras puras, tiene un poco de todo. En cuanto a tus suposiciones no te digo nada mejor, lee un poco más abajo y sabrás si estabas en lo correcto. Sí, pobre Sirius, pero ya Dumbly dijo que no se perdería la boda, que iría después. Claro que no lo iba a dejar sin ir a la boda. Bueno, te diré, es una de las cumbres de la historia, después hay un giro aún mayor, pero no te cuento que es. Sí, los capítulos se acortarán, mi única excusa es que es por el bien de la historia… Me avisas cuando escribas tu historia para leerla… y si es de Sirius ¡mejor!
Vales ka: ¡Hola! Sí, extrañé tu review en el chap anterior, espero que te haya ido bien en el paseo. Me alegra que te gustaran los dos chaps, pues lo de que heredara el diario, ya verás como y porqué lo heredó mucho más adelante. Y en este chap verás como se hizo mortífaga… Otra que quiere matar a Snape, pero si no puedo matarlo… tiene que llegar al presente… Lo de que antes te gustaran más las partes de SB y ahora las de SP lo entiendo, porque en la tercera parte lo mejor de la historia está en el lado de SP, tal vez después cambies de nuevo de opinión, como iba cambiando yo mientras escribía. Ah… más adelante se ve que fue lo que le pidió, si tampoco en gran cosa. El mortífago no era Snape, lo importante de eso no era el mortífago en sí, sino que por perseguirlo Sirius reveló que cuidaban la Klein y por eso lo mandaron a él a cuidarla, y eso es importante porque… ya lo verás en este chap.

Isa: ¡si dejaste review dos veces! Pero no importa, gracias, a ver, te contesto rápido. Aquí vas a ver en qué era que ibas bien encaminada. Me alegra que te guste la forma de ser de Sara P, pero hablaste en pasado, ¿ya no te gusta? Pues sí que era falso el diario, pero bueno, así es la vida, no puedo decirte si Sara B se dará cuenta o no. Pues si que es Voldy machista, pero una vez que acepta a una mujer le tiene más confianza que a los hombres. En unos chaps el explica porque las admite. Creo que publicaré los viernes, dos veces por semana no va a poder ser. Me alegra que te gustara mucho este chao y el diario es de mis sorpresas favoritas, aunque es el aperitivo de esta… espero que te guste el chap y que te vaya bien en los exámenes.

Julieta Black Potter: ¡Hola! Gracias por el review!!! Que dicha que te gusten mis historias y mi forma de escribir, me lograste sonrojar, creo que me falta mucho para JK, (y yo no podría matar a Sirius… bueno, eso es otro tema). Recibí tu review en esa chica es mía, espero seguir esta semana en esa historia. Sara Parker y Sirius son el plato fuerte de la tercera parte, así que espero que la disfrutes, y lo de Sara B, ella y sus sentimientos son un enredo, pero ya veremos. Bueno, ¡gracias por el review y espero verte de nuevo por aquí!

Andrea: ¡Hola amiga! Aquí verás en que tenías razón y en que no… lo del diario es una aperitivo para esta parte, pero este giro se dio en partes, empezó con las cartas, luego el diario y …lo de ahora, ¡vamos, a leerlo! Y espero verte pronto en el MSN a ver que te pareció. Si, seguro que la explicación de JK es buena, si lo único malo que ha hecho fue matar a mi niño (no me cuestiones eso, déjame vivir el dolor), pero no se lo puedo reclamar porque ¡ella le había dado vida! No entendí lo que querías decir con Neville. Bueno, nos vemos!

Amsp14: ¡Hola! Creo que esta vez tampoco esperabas la publicación, pero es que ya quería subir el chap, que me gusta mucho. La guía está terminada y en transformación, y la conversación con Snape ahí va, poco a poco. Ya leíste lo que he avanzado, pero espero que puedas leer esa parte a ver que te parece. Las otras historias… ahí van a seguir en algún momento. Nos vemos! Besos!

El sacrificio

Habían pasado otros dos meses. Sara estaba jugando su papel a la perfección. El entrenamiento era más duro y más terrible de lo que habría podido imaginar. Había hecho todo lo que le habían pedido, y ya sólo Lord Voldemort la superaba en su habilidad con las maldiciones imperdonables.

Snape no reconocía en ella a su amiga. Sara casi nunca le hablaba. De hecho, Sara casi sólo hablaba con Voldemort. Pasaba con él todo el tiempo, como la alumna perfecta.

No era difícil pretender que Lord Voldemort era todo para ella. No tenía mucho más. Lo que era difícil era mantenerse haciendo Occlumencia sin que lo notara. Y también acostumbrarse a su verdadera apariencia. A pesar de todo, Sara estaba bien ubicada entre los mortífagos.

No sólo era una de las favoritas, sino que además Voldemort estaba dedicado a ella. Había hecho hechizos para ella y la había ayudado a desarrollar sus poderes mentales, ahora no sólo podía entrar en las mentes de las personas. Podía entrar en su esencia. Podía saber sus sentimientos. Podía saber para que habilidades tenía, de que era capaz, incluso a que estaba destinado. La única persona a quien tenía prohibido hacerle eso era a Voldemort.

La vida era dura, no lo iba a negar. La magia negra siempre le había parecido interesante, y no podía haberla aprendido de nadie mejor, Sin embargo, no quería unirse a los mortífagos realmente o algo así. Seguía con el mismo plan. Y ya tenía mucha información.

En cualquier momento iba a volver. Cuatro meses ya… extrañaba a Sirius montones, se preguntaba constantemente que había sido de él. Unas semanas antes, tal vez hace más de un mes (ya no llevaba muy bien la cuenta del tiempo) había salido en el periódico la noticia de la boda de James Potter y Liliane Evans. Sirius Black había sido el padrino.

Sin embargo, Sara no estaba engañando completamente a Lord Voldemort. Aunque este no se diera cuenta de sus intenciones, él no creía que ella realmente deseara tanto ser mortífaga. Ella solo era una chica despechada, pero enamorada. Y eso era lo que él iba a usar para tenerla por siempre.

- ¿Estas seguro de que está en la habitación de la par? – le preguntó en un susurro al mortífago que tenía frente a él.

- Sí, mi señor.

- Bien – empezó a hablar fuertemente, como siempre que daba órdenes – necesito más poder de inmediato, o no podemos seguir con la conquista de Londres. Vamos a tomar la Klein ahora. ¡Malfoy! ¿está Bellatrix en posición?

- Sí, mi señor. Sólo hay uno del grupo de Dumbledore cuidando la Klein. Lo tiene en la mira. Sólo espera nuestra señal.

- ¿Quién es? ¿Puede darle algún problema?

- Es el chico Black –contestó el mortífago en voz fuerte.

- ¿Sirius Black?

- El mismo. Bella dice que no habrá problema, sólo tiene que lanzar el Avada. No se le puede escapar.

- En ese caso dale la señal. Nos apareceremos ahí en cinco minutos

- ¡NO!

Sara lo había oído todo. No podía permitirlo. No podía permitir que mataran a Sirius.

Entró en el salón.

- ¡Sara! – le dijo Voldemort fingiendo sorpresa - ¿qué haces aquí?

- No lo mate, por favor. – Sara se olvidó de actuar, se olvido de que Lord Voldemort no tiene piedad. Se olvido que supuestamente odiaba a Sirius. Se olvido de su orgullo y se tiró a sus pies.

- Mi niña… –Voldemort era muy cariñoso con Sara. Claro, era parte del plan – sabes que nunca te he negado nada, pero esto es importante.

- Puedes hacer otra cosa, tomarla otro día.

- La necesito Sara. Sabes que mi propósito es la búsqueda de poder.

- Pero al absorber la Klein te debilitarás, no podrás luchar en un tiempo. Hay otras formas de conseguir poder, más rápidas, y menos comprometedoras.

- ¿Y que no incluyen matar al chico Black?

- Sí – Sara estaba llorando.

- No tengo ninguna disponible. Malfoy, que envíen la señal a Bella.

Sara sabía que no podía atacar a Malfoy y evitarlo. Provocar una batalla no tendría sentido. No podían matarla, pero había cosas peores. Sólo vio una salida. Era horrible, imposible, significaba vender su propia vida, pero por Sirius…

Las palabras de Ash volvieron a su mente: "Llegará el momento en que tengas que tomar una decisión. Tendrás que elegir entre darlo todo, absolutamente todo por amor o darle a él tu amor. Esa decisión Sara marcará para siempre tu destino, el suyo y por dramático que suene, el del resto de nosotros. No tienes vuelta atrás."

"Darlo todo por amor " –se repitió a si misma – "ya no hay vuelta atrás".

- ¡NO! ¿Lo que quieres, lo que necesitas es poder? –Sara se había levantado como un rayo- Yo te lo doy. Toma mi poder. Es rápido, es menos comprometedor y no te debilitará. Al contrario, te hará más grande en el mismo momento.

Voldemort hizo una seña a Malfoy para que se detuviera.

- ¿Lo dices en serio, Sara?

- Sí – Sara temblaba, pero no importaba. Si le salvaba la vida a Sirius, no importaba seguir esa farsa. Ya se saldría después – me gustaría haberlo propuesto antes, pues lo mereces. Tómalo. Yo sé como dártelo. No tomará más que un día.

- Bien. Si me das tu poder nada le pasará a Sirius Black hoy.

- ¿Hoy?

- Sí, pero no creo que le pase nada más después.

- ¿Por qué? – a Sara no le había gustado el tono de Voldemort.

- Bien Sara, obviamente aun estás enamorada de él.

- Sí – no podía negarlo.

- Pero a pesar de eso, eres casi una mortífaga. Ya completaste el entrenamiento. Te quiero como mi favorita. Puedes tener un lugar conmigo en el poder. Aun puedes vengarte de Dumbledore. ¿Eso quieres?

Sara dudó. ¿Qué contestar? La mirada de Voldemort se volvió más peligrosa. Sara no sabía que pasaba en realidad, todo estaba sucediendo muy rápido, pero tenía que apegarse a su plan. Sirius sobreviviría y ella saldría de ahí con toda la información de los mortífagos para volver con él. Sólo tenía que seguir jugando.

- Sí.

- En ese caso, ya tenemos lo que te faltaba para serlo.

- ¿Qué? – Sara sintió como le flaqueaban las piernas. La base de su plan era que él no tenía como atarla.

- ¿Recuerdas que te dije que ellos me eran fieles porque sino lo mataba?

- Sí – la voz de Sara tembló un poco, sabía lo que iba a decir a continuación.

- Bien, si me traicionas en algún momento, Sirius Black es hombre muerto.

Sara se dejó caer al piso.

- La sangre de dragón, sangre de unicornio y la pluma de fénix que necesitas están en el cuarto del lado - le dijo Voldemort con un tono de triunfo – quiero tus poderes para mañana. No te preocupes, ya sé que solo puedes darme la mitad. Además, mañana realizarás tu prueba para completar tu preparación y nombrarte mortífaga. Quiero que mates a un miembro de la Orden. Para que veas que Lord Voldemort es bueno con quienes le ayudan, no tiene necesariamente que ser de la célula. Bella irá contigo. Si no cumples, ella matará a Black. Mañana no será un buen día para la Orden del Fénix.

Voldemort se rió malvadamente y dejó el salón.

Sara lo entendió todo realmente. Era una trampa, había caído en una trampa como una estúpida. Él sabía lo que se necesitaba para que ella le pasara el poder, lo tenía todo listo.

Claro, ¿cómo pudo ser tan orgullosa para no notar que Voldemort conocía su punto débil?

Sí, Lord Voldemort engañaba y jugaba sucio para atrapar seguidores. No había vuelta atrás. Sabía que si ella trataba de salirse Sirius estaba muerto, cuatro meses entre mortífagos le habían enseñado que Lord Voldemort cumple su palabra. Y ella no podía permitirse fallar.


La carta estaba escrita con aparente calma, pero Sara sabía que no era así. Draco trataba de sonar tranquilo y casual. No quería dejarla ver que estaba muy preocupado, o al menos más de lo que estaban los demás. Sara se preguntaba si Dumbledore le había dicho a él más de lo que le había dicho a ella.

"Querida Sara:

No puedo creerlo. ¿Metida en líos? ¡Sí acaban de empezar las vacaciones! Parece que no te va a faltar la diversión...

No, en serio. ¿Cómo estás? Dumbledore dijo que te faltaba energía o algo así, como cuando se descarga una batería (tuve que usar el libro que me regalaste para averiguar que había querido decir). Dice que no debo preocuparme, pero me preocupa, y mucho. ¿Te sientes mejor? Si no es así no dudes en decírmelo que me devuelvo de inmediato a Inglaterra.

Espero que te estén tratando bien. Supongo que sí. Después de todo eres una heroína. Dumbledore me contó como salvaste a todos esos chicos. Felicidades, aunque en mi opinión habría sido más prudente que te quedaras fuera de eso. Al menos ya no es Potter el héroe siempre.

En las noticias francesas salieron fotos de lo ocurrido. Se ve muy mal. Parece que el andén quedó inutilizado, y que "un grupo de magos no identificados" dieron muy buena pelea. Supongo que se refería a la gente de la fiesta de Navidad. También te nombran a ti. "La fénix heroína que salvó la vida de diez muchachos que habían sido atrapado los mortífagos".

Además parece que tuviste otra premonición. No voy a negar que estoy un poco celoso de que tengas premoniciones de otras personas a parte de mi, pero al menos yo fui el primero.

Espero que HABLES de lo que paso con alguien, ya sabes que tienes que desahogarte. Además, como sé que te hará falta que te de la mano hoy en la noche –no me digas presumido por eso- te mando esta pulsera. Mi madre me la dio, y es muy especial para mi. Espero que con ella no te sientas sola. Todavía te apoyo, desde la distancia.

Francia es muy bonita. Voy a ver si te mando fotos en la próxima carta. Los amigos de mi tía son agradables. La mayoría son familias completas de magos, así que podré desintoxicar mi sistema de cosas muggles.

He estado investigando alguna cosas, creo que tengo algunas ideas para nuestros proyectos. Por cierto, ¿utilizaste alguno ayer? ¿cómo fue? Espero que haya servido de algo.

Bien, me despido. No te metas en más líos, por favor -ya sé, los líos te siguen, tu no los buscas, aunque a veces no estaría tan seguro – y no dudes en escribirme por cualquier cosa.

Descansa y reponte pronto, para que disfrutes las vacaciones.

Besos y abrazos.

Draco.

PD: ayer no viste la serie, ¿verdad? No te preocupes. No todas las familias amigas de mi tía son de brujos. Ya las chicas perdonaron a Seth."

Sara se rió al leer la posdata. Así que a pesar de estar en Francia estaba siguiendo la serie. Bueno, los muggles también podían hacer magia.

La carta la hizo sentirse mucho mejor. La leyó varias veces. Le llamó la atención el hecho de que Draco hablara en clave, "los de la fiesta de Navidad" en lugar de la Orden… supuso que Dumbledore le había dado indicaciones de ser discreto en las cartas.

El resto de la tarde Sara recibió otras visitas. Al día siguiente la dejaron irse y fue a visitar a Fleur. Tonks estaba ahí con cara de trasnochada junto a un preocupado Bill. La chica aun no había vuelto en si. Sara se quedó con ellos hasta que los señores Weasley llegaron para llevársela a la que sería su casa los próximos meses.


- Está todo listo – dijo Sara. Tenía dos copas de oro vacías frente a sí. Voldemort la miraba intensamente – pero necesito la daga.

- Aquí la tienes – Voldemort le tendió un puñal de plata.

- Supongo que ya conoces el procedimiento – le dijo Sara – aunque no se como.

- ¿Has oído hablar de Ronald Benamburg? – le dijo Voldemort sonriendo.

- No – Sara no temblaba, no se notaba ninguna emoción en su voz. Desde el día anterior estaba como muerta. Muerta, pero Sirius vivo.

- Conoció a tu madre hace un tiempo, se dedicó a estudiar a los fénix, y escribió un libro muy interesante sobre ustedes.

- ¿Y decía como hacer eso? – preguntó Sara horrorizada.

- Oh no, me lo dijo a mi, personalmente – dijo arrogantemente Voldemort- procedamos.

Sara vertió la sangre de dragón en una copa. Luego la mezcló con la de unicornio. Alzó la copa y le dio cinco vueltas a la izquierda. Sumergió la pluma en ella. Después vertió la mitad de la mezcla en la otra copa.

Tomó el puñal y vertió una de las copas sobre la hoja. Voldemort estaba frente a ella. Sara levantó la mano izquierda sobre la otra copa y con el puñal se abrió de lado a lado la mano. Su sangre corrió por su brazo y goteó del codo hasta la copa llenándola. La mezcla brilló. Sara cerró la mano para que saliera más sangre.

Después alzó la copa y le dio cinco vueltas a la derecha.

Luego, tras ver un momento a Voldemort directamente a los ojos, se bebió la mitad.

- Su turno.

Voldemort tomó la copa y bebió lo que quedaba. Una luz los unió rápido como un rayo, y los dos cayeron en tierra. Estaba hecho.

°°°

- ¡Aghh!

- ¡Sirius, ¿que te pasa?!

Sirius había caído al piso tras lanzar un horrible grito. James se inclinaba preocupado sobre él. Había vuelto de su luna de miel dos días antes y su amigo había llegado esa mañana. Había una reunión importante.

- Ella está sufriendo – logró decir Sirius.

- ¿Ella?

- Sara, James, algo malo le pasó a Sara. – Sirius respiraba con dificultad.

- Sirius, ¿qué estás diciendo?

- ¿Recuerdas cuando te conté que Sara y yo teníamos una especie de conexión?

- Sí, pero Dumbledore dijo que no debía durar largo rato. Ya debería haber desaparecido.

- Eso creía – dijo Sirius – pero como estaba lejos no había vuelto a sentirla.

- ¿Crees que esté cerca? – le preguntó James preocupado.

- No, pero algo le pasa. Algo grave para que hasta yo lo haya sentido.

°°°

- Vamos Parker, ¿a que esperas?

- Trabajo sola Lestrange.

Sara tenía que cumplir su prueba. Ya habían pasado doce horas desde el ritual de traspaso de poder. Se sentía débil, pero no había querido postergarlo. Bellatrix la seguía de cerca.

- No creas que a mi me gusta jugar de niñera contigo – le dijo Bellatrix – lo que no puedo esperar es para matar a mi primo…

- Ni lo sueñes, Lestrange – le dijo Sara de mal humor. Sólo ella sabía del trato. Malfoy había estado presente cuando se llevó a cabo, pero Voldemort le había modificado la memoria. – ahora desaparécete.

- Ni hablar.

- Desde el edificio del frente sabrás si mate a alguien o no – le dijo Sara – ahora, largo.

- Te estaré vigilando. Nada de trampas, Parker, o Sirius es historia.

Bellatrix despareció de mala gana. Su señor la había mandado a seguir las indicaciones de Sara. El plan estaba casi completo. Ya tenía el poder de Sara y esperaba tener su fidelidad. Eso se probaría ahora. Si mataba a alguien, así era. Y si no, mataría a Sirius y ya no habría nada que la ligara al lado bueno. Irremediablemente caería al lado oscuro. Ya sabía demasiado.

La Orden se reunía en el antiguo apartamento de Harold. Una vez avisado sobre los miembros de la Orden, Voldemort había puesto a vigilar a la mayoría.

Sara conocía la entrada. Había una larga fila de pinos. Sara se escondió detrás de uno. Oyó aproximarse a alguien. Su víctima…

Se asomó. Remus Lupin avanzaba lentamente por la calle. Sara sintió que se le helaba la sangre. No podía matar a Remus. Trató de reunir el valor, pero cuando lo vio de nuevo, tan frágil, no se atrevió. Pasó de largo.

Sabía que Bellatrix la veía. Tenía que ser el siguiente. Oyó pasos de nuevo. ¡Excelente! Potter… lo odiaba lo suficiente, aunque pensándolo bien Sirius nunca la perdonaría. Y hablando de Sirius…

La sensación de conexión se hizo presente. ¡Estaba pensando en ella! Sara cerró totalmente su mente. Si Sirius la sentía estaba perdida. Pero no la sintió. Sara no solía usar todo su nivel de Occlumnecia, pero sabía que si lo hacía ni siquiera Voldemort podía entrar en su mente.

En eso entró Sirius en el campo visual que tenía desde su escondite. Se veía tan guapo como siempre, pero se restregaba la sien derecha como si tuviera un fuerte dolor de cabeza.

- ¡Cornamenta! Espérame.

- Eres muy lento.

- No es cierto.

"Nunca va a cambiar" – pensó Sara al verlos correr a ver quien llegaba primero a la casa. Sentía un dolor casi físico al verlo de nuevo. Su respiración se había acelerado y por un momento tuvo ganas de salir de su escondite. Tenía unas ganas locas de besarlo, de tenerlo de nuevo sólo para ella… pero tenía que conformarse con verlo vivo. Y si quería que así siguiera tenía que matar a la siguiente persona que apareciera en el camino.

Oyó pasos, voces y risas. Eran dos chicas. Rose y Madeline. Sara dudó un momento. ¿Cuál de las dos? Su misión era matar a una persona, nada más. Rose era la novia de Remus… y no soportaba la idea de que Madeline pudiera ponerle un dedo encima a Sirius de nuevo, ahora que ella ya no estaba. No fue una decisión difícil.

Sara se apareció frente a ellas.

- ¡Sara! – exclamaron las dos sorprendidas.

- ¿Dónde habías estado? Sirius te ha extrañado mucho, hay una… – empezó a decirle Madeline, pero al ver a Sara alzar la varita se detuvo.

- ¡Avada Kedavra!

Madeline cayó al piso frente a Sara. Esta la miró atónita. No podía creer que de verdad lo había hecho. Por un momento se olvidó de Rose.

- ¡Maldita! ¡Desmaius! ¡Ayuda! – empezó a gritar Rose. El hechizo dio a Sara, pero no le hizo nada.

- Cállate –le dijo Sara, pero en eso oyó como bajaba la gente a la entrada de la casa. - ¡Stupify! – Rose cayó al piso inconsciente. Sara se volvió con la varita en alto, y sintió como su estómago daba un vuelco. Frente a ella apareció Dumbledore que la miraba atónito. No había reaccionado.

- Sara, ¿qué has hecho? – le preguntó Dumbledore con voz temblorosa. Sara sintió ganas de gritar todo lo que había pasado, pero tenía que seguir el juego, y tenía que salir de ahí antes de que Sirius bajara.

- ¡Te arrepentirás de todo lo que me hiciste, Dumbledore – le gritó Sara - y lamentarás el día que no me dejaste unirme a la Orden cuando Lord Voldemort tome el poder de todo!

Sara iba a desaparecer en ese momento, pero no pudo. Todos empezaron a aparecer junto a él. Lily, James, Alice, Frank, Moody, Remus y… Sirius. Miraron el cuerpo de Madeline y luego a Sara con la varita en alto. La miraron con odio y alzaron las varitas. Todos menos Sirius, quien clavó su mirada en la de Sara. Fue menos de un segundo, pero sus miradas se conectaron y Sirius entró en su mente.

- ¡No! – gritó Sara desapareciendo rápidamente, para evitar que Sirius lo supiera todo.

Dejó tras sí una atmósfera de terror y espanto. Ninguno podía creerlo. Sara había matado a Madeline. Sara se había unido al lado oscuro. Sara era una mortífaga. Pero uno de todos ellos sabía algo más.


- Lo quieres de vuelta ¿no?

- Sí.

- Entonces explícamelo.

- ¡No hay nada que explicar Remus!

Sara había tratado ya varias veces que Remus le devolviera su preciado cinturón, pero inevitablemente la respuesta era la misma.

- Yo creo que sí.

- ¡Está bien! – dijo Sara dándose por vencida- es un cinturón de batalla.

- ¿Cinturón de batalla?

- Sí.

- ¿De donde lo sacaste? – le preguntó Remus sacándolo de la gaveta donde lo tenía guardado y examinándolo con atención.

- Yo lo hice.

- ¿Tu? – Remus la miró sorprendido.

- Draco me ayudó – añadió Sara. No se sentía muy comunicativa sobre el tema.

- ¿Y me puedes explicar que son estas cosas?

- ¿De verdad?

- Sí.

- No creo que tenga otra opción, vamos a ver –Sara se acercó a Remus y extendió el cinturón frente a sí – estos de los extremos son cuchillos direccionables..

- ¿Direccionables? ¿Esa palabra existe?

- Son cuchillos que una vez que se les da un objetivo no lo pierden – le explicó Sara – esto es veritaserum inyectable, veneno inyectable, los dos ya listos en sus jeringas, estos son venenos en polvo, polvos de conjuntivitis (son como el gas de pimienta), estas de aquí son granadas explosivas y las de adentro son granadas de poción adormecedora, que por cierto creo que no funcionó por más rato porque lo probamos en un espacio cerrado y la estación era abierto.

- ¿De donde sacaste los materiales? – le preguntó Remus muy serio.

- ¡No voy a rebelar mis fuentes! – reclamó Sara.

- Soy yo o es Dumbledore – le dijo Remus tranquilamente – él te vio usar algo de aquí y está muy intrigado.

- Le prometí a mi fuente que no la revelaría – dijo Sara firmemente, pero de manera más amable. Prefería mil veces tener esa conversación con Remus que con Dumbledore.

- ¿Son legales? – le preguntó Remus – los materiales, y todo…

- Sí – dijo Sara – bueno, más o menos. No lo sé.

- Sara…

- No te preocupes, lo tengo todo cubierto.

- Es peligroso – le dijo Remus doblando el cinturón.

- ¡Gracias a uno de mis inventos pude sacar a Fleur de ahí! – le reclamó Sara – les hizo efecto poco rato e igual pudieron lanzarme sus hechizos, pero si no lo hubiera lanzado no habría podido entrar por ella, se la hubieran llevado, la habrían torturado y la habrían matado.

- Aún así, es peligroso – repitió Remus.

- ¿Entonces? – le preguntó Sara con algo de miedo, ¿y si le prohibían aquello?

- Tengo que hablar con…

- ¿Dumbledore? Estoy perdida – dijo Sara volviendo a sentarse- nunca va a aprobarlo.

- Ya veremos – le dijo Remus – de momento creo que debo guardármelo.

- ¿Pero me lo vas a devolver? – le preguntó Sara con ansiedad. Tenía más de todos los inventos, pero sólo había hecho un cinturón.

- Ya veremos. ¿Por qué lo hiciste?

- Para pelear. Hay que estar listos. Estamos en guerra. Ellos tienen sus armas, pues nosotros tenemos las nuestras.

- ¿Nosotros? De momento las tienes sólo tu.

- Draco sabe usarlas.

- ¿Alguien más sabe de esto?

- Eh… Phineas.

- ¿Phineas Nigellus?

- Sí. – Remus la miró asombrado.

- Bien – dijo– en la noche hablamos.

- Pero…

- Ibas a salir con los chicos, ¿no?

- Sí, pero…

- ¿Y vas a ir por Harry?

- Eh… sí, tal vez, pero…

- No te preocupes – Remus le sonrió de una manera que hizo que Sara se sintiera más tranquila – todo va a estar bien, ya verás.


¿Qué les pareció? Espero que les haya gustado, insisto me gusta mucho esta parte (si ya se que con Sara B no pasó casi nada, ¡¡¡¡¡pero es que en el lado de Sara P pasaba demasiado!!!! ) ¿Qué piensan de Sara Parker ahora? ¡Espero sus reviews con ansias!

Y esto no queda aquí, el chap que sigue podría haber sido parte de este... ¿qué sabe Sirius? ¿donde irá Sara B con los chicos? Y claro... Sara tiene que presentar cuentas a Lord Voldemort.

Sara Fénix Parker