Undécimo capítulo: "Aniversarios"
Hacía ya tres noches que no lograba conciliar el sueño y de seguro esa noche no sería la excepción... se quedaría pensando hasta tarde en muchísimas cosas, todo lo que pudiera pasar por su cabeza, pero sobre todo, pensando en él.
No sabía por qué le sucedía eso, sólo sabía que hacía exactamente tres noches el sueño no se apoderaba de ella sino hasta que fuera demasiado tarde, tanto como para al día siguiente no querer despertar...
Tres noches... tres noches desde aquél día, como también hacía tres años que había comenzado a salir con él... aquél joven que no era precisamente el que ocupaba sus pensamientos hasta altas horas de la noche... éste era otro, un desconocido a veces, una pasión otras.
Uno, un chico inmaduro que nunca la amaría como ella había aprendido a amarlo...
un amor que en lo único que era real, era en el dolor que sentía, que iba creciendo más y más en su interior... Como dolía amarlo... si lo hubiese sabido nunca se hubiera enamorado de él. Pero lamentablemente nuestro corazón no nos permite elegir de quien se enamora. Si nos diera esa libertad seguramente todo sería tan distinto...
Otro, un joven, casi todo un hombre a pesar de su corta edad, que, a pesar de quererla con todo su corazón, vivía para el trabajo y para superarse. Cuántas veces ella deseó que él estuviera más tiempo con ella. Quizás aprendería a conocerla, porque había veces que sentía que él la desconocía por completo, que no sabía nada acerca de ella. Y no estaba tan equivocada...
Él pasaba más horas en su trabajo y estudios que con ella. Esa relación que, a pesar de la alegría que a veces le producía, también la lastimaba... Él, con su forma de ser, sus descuidos respecto a ella y su lejanía también le dolían. ¿Es que acaso todo en su vida significaba dolor y tristeza?
Sentía un gran pesar en su corazón. Trataba de sonreír pero a estas alturas eso era algo prácticamente imposible. Buscaba en su mente alguna solución, pero al caer en cuenta de su situación y de que no había salida, el dolor en su pecho se agudizaba y lograba que repentinas lágrimas brotaran sin que ella pudiera contenerlas. Necesitaba llorar pero no quería hacerlo... Necesitaba olvidarlo pero no podía. ¿O es que acaso no quería? Hacía tres noches que se atormentaba con lo mismo... y todavía se preguntaba
por qué no lograba conciliar el sueño...
Al pasar su mano por sus ojos para quitar las lágrimas, su brazo pasó tan cerca de su nariz que pudo percatarse de que el aroma de su piel había cambiado... Ahora su piel tenía el aroma de Kouga... Su perfume, sus besos le habían invadido la piel... lograrían invadir también su corazón??
Esa tarde entre tantos besos, en un momento miró directo a los ojos de Kouga y sin separar su mirada de ellos en su mente resonaron las siguientes palabras... "Por qué no me puedo enamorar de ti?? Kouga, por favor, haz que me enamore de ti..."
Tratando de hacer realidad su deseo se acercó más a él y comenzó a besarlo con una intensidad y pasión que nunca había sentido... Por un instante pensó que su beso no era correspondido, pero al abrir los ojos observó a Kouga con los ojos cerrados y que ponía las manos en su cintura, atrayéndola más hacia él para que el beso continuara y se hiciera cada vez más cercano e íntimo...
Era la primera vez que cuando se besaban Kouga cerraba los ojos... siempre era ella la que lo hacía y Kouga al que sorprendía observándola con ternura en sus ojos azules. Ella sintió ganas por primera vez de devolverle un poco del placer que él casi siempre le daba con sus besos y caricias... es que acaso las cosas empezaban a cambiar???
Esa noche festejarían su tercer aniversario... también otras dos personas festejarían... sólo que para lo que Kikyo era su primer aniversario, para Inuyasha sólo era un año de haberla reencontrado... un año de que intentaba en los besos de Kikyo escaparse de Kagome...
.......
Kikyo había preparado un hermoso ambiente. La mesa en perfecto orden con dos velas sobre ella. La luz de la habitación había bajado a tenue para que las velas con aroma a jazmines también sirvieran de iluminación. El perfume de jazmines se iba mezclando y a la vez desapareciendo entre el aroma delicioso de la cena que ella misma había preparado.
Inuyasha observó todo con detenimiento y asombro. Se sacó la corbata, dejando dos botones desabrochados de su camisa celeste, con la cual había ido a trabajar.
Se sentía tan solo en el trabajo desde que Kagome había renunciado... se sentía culpable por ello, pero desde que se había ido de la oficina hacía tres días, no la había vuelto a ver, además de que no se atrevía a pasar por su casa o llamarla. ¿Cómo atreverse después de lo que había pasado?
Pero ese no era el momento de pensar en ella. Delante suyo tenía a Kikyo observándolo con un tinte especial en sus ojos inexpresivos, una llama que dejaba entrever cierto deseo. Vestida con un hermoso vestido rojo, el cual tenía un escote que llegaba apenas a cubrir su pecho. Vestido que se había comprado hacía dos días con parte del dinero que le había dado Toshiro... Estaba realmente hermosa, y para Inuyasha ésto por primera vez no pasó inadvertido.
Se sentaron a cenar y luego... para que describir lo que pasó después. Sólo con decir que cada caricia parecía fuego en la piel... Sin embargo, los pensamientos se hallaban absortos en lugares opuestos: mientras una no escuchaba ya que su mente se encontraba viajando por los terrenos del placer, el otro inconscientemente nombraba a la persona del sexo opuesto que ocupaba por completo cada espacio de su ser... es que acaso jamás podría olvidarla???
...........
El tercer aniversario de Kagome y Kouga fue algo distinto... Cenaron afuera, caminaron largo rato por la ciudad y llegaron al río (no sé si en Tokio hay un río pero imaginen que si). La luz de la luna le daba de lleno en sus cabellos oscuros y en la cara a Kagome que se encontraba con un vestido largo negro y que para Kouga demostraba que era la mujer más hermosa del mundo... La tibia luz de la luna llena también alcanzaba los azules ojos de Kouga que la miraban con tanta dulzura... Al mirarse y comenzar a besarse entendieron que estaban de más en ese lugar... su lugar era otro, quizás en el cuarto de Kagome...
Allí estaba, en su habitación. Kouga se encontraba al lado de ella, mirando la t. v. de manera tranquila mientras con una de sus suaves manos seguía acariciando la figura que minutos antes hubiera probado por completo...
Mientras sentía la mano de Kouga que seguía recorriéndola, todavía podía sentirlo dentro de ella, como había estado minutos antes y un par de lágrimas sin querer comenzaron a rodar por sus mejillas, que todavía se encontraban algo coloradas de tanta excitación.
Había pensado en él... otra vez. ¿Por qué? ¿Por qué si en todo el día que estuvo junto a Kouga él no había pasado siquiera un instante por su mente, ahora si?? Se secó un poco las lágrimas y prendió un cigarrillo... el último del día... aunque también había sido el primero. Sólo fumaba en ocasiones que la ansiedad, el nerviosismo, la intranquilidad o la tristeza se apoderaban de ella. Ese día había sido realmente hermoso, pero la noche... la noche y lo que acababa de hacer con Kouga lo habían traído nuevamente a sus pensamientos.
"Permanecí en silencio unos minutos hasta que el sueño amenazaba con apoderarse de mí... Sin embargo, no podía dejar de pensar en lo sucedido... me sentí tan mal... sucia... y hasta me odiaba un poco más de lo usual... ¿Cómo podía entregarme de esa forma a Kouga, como si él fuera mi dueño, cuándo mi corazón me decía lo contrario?
Es como si yo no tuviera control de mi cuerpo... la pasión me hacía actuar de esa forma, el intento desesperado por sacar aunque sea un instante de mi cabeza a... a..."
-Kagome...-la voz de Kouga me sacó del trance en el que me encontraba- qué haces fumando? Tú solo fumas cuando estás mal... que pasa?
-Nada, Kouga... no-no te preocupes...- contesté tratando de convencerlo en vano, ya que el llanto se apoderó de mí...
"Oh,no... lágrimas... él... él no puede saber lo que me sucede... nunca."
-Na- nada.. en serio- dije tratando de esbozar una falsa sonrisa... sonrisa que
apareció nerviosa en mi rostro, dejando a Kouga para nada conforme y más
confundido aún.
Kouga:-Dime... por favor.
-No... no puedo-dije en un susurro.. "No había nada que decir... no podíamos
hablar... ya era tarde..."
"Sueños que van en bolsas de hielo al mar,
colores sin mezclar, nada que contar..."
Kouga:- No piensas decirme lo que te sucede? No crees que tengo derecho a saber lo que te pasa como para que llores? Te veo llorar desde hace tres días...
Como respuesta Kouga sólo recibió mi silencio... él no lo podría cambiar, mi silencio y lo que me sucedía era algo inevitable...
Al ver que todo intento sería en vano, reaccionó de una forma que me sorprendió, pero sobre todo, me angustió... Se paró, tomó sus cosas y se fue de mi habitación, cerrando la puerta con absoluto silencio y enojo...
"Silencio que estás atento para atacar,
nos enfrentas y te vas"
Las lágrimas a partir de que se fue se hicieron incontrolables... Cada vez dolía más... cada minuto se hacía todo peor... y yo también me sentía así... cada segundo peor...
Es que había caído en cuenta de todo el daño que le estaba produciendo a Kouga,
de todo el mal que le había hecho durante todos esos años juntos... él no se lo merecía... y eso me hacía sufrir muchísimo más de lo que ya estaba sufriendo, porque yo también me había lastimado, y mucho, durante ese tiempo a su lado.
-¿Cómo pude pensar, como pude creer que se podía jugar así con alguien?-dije
entre sollozos-Kouga... ojalá algún día me perdones... yo... yo realmente quería
enamorarme de tí...
En ese instante abrí los ojos para encontrarme con la mirada incrédula y dolida de Kouga...
"No te he oído entrar...
Somos dos novios
que no tienen mes de abril,
que no se miran porque sí,
que no se hacen reír."
Se acerca hacia mí y comienza a besarme, a pasar sus manos por mi cuerpo, a la fuerza tratar de "enamorarme"... yo me opuse... pero finalmente terminé por corresponder sus besos..
"Ahora el cariño envenena la habitación,
llena todo de falso amor, esconde el mal humor"
Pero de pronto reaccioné... ¿qué estaba haciendo? Él... él debía entenderme.. tenía que frenarlo y hacer que me entienda...
Kagome:- Kouga, espera... basta!!! Mírame... mírame y escúchame bien...
"Mírame y dime que es lo que ves,
mírate y dime en que se parecen A y B"
-Nosotros... yo... lo siento... lo siento muchísimo, créeme... pero.. hasta aquí llegamos...
"Y es que tú y yo,
sólo tú y yo,
ni siempre ni nunca,
ni tú ni yo
cabemos cantando
en esta canción."
-¿Qué? ¿Qué dices, Kagome?- murmuró Kouga sin comprender del todo aún...
Aquella joven a la que miraba no era esa que él conocía desde que tenían doce años... no era la persona con la que había compartido los últimos tres años de su vida en esa relación que era tan importante y necesaria para él...
Él ya había reconocido en su interior varias veces que había desplazado su relación y el amor por algo que desde chico le habían enseñado que era mucho más importante: el estudio y el trabajo.
Por eso ella lo miraba así? Por eso aquellos ojos oscuros que él adoraba ahora se habían vuelto tristes y sin brillo? ¿Qué sucedía realmente en el interior de Kagome? Eso era en ese momento "el gran misterio" para él...
"No eran así esos ojos que están
ya cansados de llorar...
Quieren descansar..."
-Que yo... nosotros no podemos seguir más así... yo no quiero seguir así. Entiéndeme... yo quiero enamorarme de ti, pero no... no puedo- dije con la voz entre cortada por el llanto... Las lágrimas caían cada vez más rápido una detrás de la otra... me ahogaban y no me dejaban aire para hablar...
En eso siento los fuertes brazos de Kouga rodeándome... él... ¿me está abrazando? ¿Es que no comprende que todo se terminó? Ya... ya no se puede hacer nada... yo ya no tenía ganas de luchar...
"Dame un abrazo y siente como esta vez
el amor se nos escapa sin poder hacer nada por él.
Mírame y dime que es lo que ves,
mírate y dime en que se parecen A y B."
Kouga:- Todo este tiempo fue una mentira, ¿no es así?
La pregunta de Kouga me sorprendió por completo... y me hizo sentir peor de lo que me sentía... Él... él tenía razón. Y era hora que yo enfrentara lo que había estado tratando de negar estos años... y también que pagara por el daño que le causé, usándolo de esa forma..
-No, Kouga, no digas eso- dije mientras lo abrazaba más fuerte y las lágrimas seguían
agolpándose en mis ojos- yo... yo te quiero muchísimo y más de una vez sentí amor por tí... pero... en mi mente siempre hubo otra persona y ya... ya no quiero lastimarte más.
Al decir esto, Kouga me soltó y mi llanto se hizo incontrolable a tal punto que él mismo se asustó. Pareciera que todo mi ser, todo lo que sentía estaba saliendo a través de esas lágrimas llenas de culpa, tristeza y dolor...
Kouga:-Entonces ya no hay nada más que hablar...
Kagome:- ¿Cómo que no hay nada más que hablar? ¿Cómo puedes seguir siendo tan frío aún en un momento como éste?
- ¿Qué quieres que te diga? ¿Qué te pregunte a quien amaste todo éste tiempo? ¿Quieres que me siga destruyendo?- Preguntó tratando de sonar sarcástico pero el intento dejó ver aún más su adolorido tono de voz.
Kagome:- No... no es así... yo realmente te quise y no sabes cuanto...
Kouga:- Pero no fue suficiente, verdad? No fue suficiente todo el amor que te tengo y te tuve... las millones de veces que te dije que te quería... nada de eso fue suficiente para t
-Claro que lo fue... fue algo maravilloso... contigo me sentí amada por primera vez en mi vida... contigo descubrí lo que es estar con alguien... contigo fue mi primera vez... contigo - y la voz ya no me salía porque nuevas lágrimas habían invadido mis ojos- contigo... me sentí de mil maneras distintas que no conocía...
Kouga:- Pero nunca lograste enamorarte de mí... ¿Cómo pude ser tan tonto? Tantas veces creí en ti, en tu mirada... aunque otras veces me daba cuenta, pero trataba de negarlo, dolía demasiado reconocerlo... tú nunca me amaste...
Kagome:- Claro que te amé... pero de manera distinta a lo que siento en mi interior por esa otra persona. El cariño que te tengo no lo puedo describir... sólo sé que no es amor y te juro que eso me duele todavía más a mí que a tí...
Kouga:- Tú una vez me dijiste que querer era poder... si tu realmente quieres amarme, lo vas a lograr, yo te puedo ayudar... voy a ser lo mejor que pueda para...
-No, Kouga, no- lo interrumpió mi voz desesperada- no es así. ¿Por qué siempre con que tienes que ser el mejor? Pensé que habías cambiado...
-Y lo hice... todo gracias a ti...-dijo Kouga en tono triste- pero ahora nada tendrá sentido... me estás demostrando que siempre tuve razón... debo ser el mejor, al no serlo para tí, te estoy perdiendo...
Kagome:- No es así y lo sabes... tú siempre fuiste más de lo que yo podía pedir...
Claro que tuvimos nuestros momentos en donde todo parecía nublarse, pero...
tú me hiciste increíblemente feliz... Kouga, por favor... que todo lo que vivimos
nos haya servido para algo, a los dos.
Kouga:- ¿pero cómo pretendes que te olvide?
-Yo... no lo sé- dije algo confundida, sintiendo un pesar en mi corazón ante el inminente adiós- prométeme que serás feliz... que seremos felices- le dije finalmente dejando escapar unos últimos sollozos mientras tomaba aire fuertemente para tratar de sentirme mejor en mi interior, aunque sin muchos resultados.
-Kagome, sabes que lo que más quisiera es que seamos felices los dos, pero... juntos- dijo Kouga esta vez en tono decidido- sé que eso ya es imposible... tú has decidido enfrentar la verdad de una vez y eso es bueno... pero... no entiendo por qué hace tres años me dijiste que me querías cuando no era así...
-Claro que te quería, todavía sentía ese amor que me hizo reír y llorar en silencio más de una vez-le dije con una triste sonrisa, mientras recordaba mis doce y trece años, cuando mi amor por Kouga estaba tan intacto... tan vivo- además de que te quería con el alma quería huir de lo que había empezado a sentir... yo... me estaba enamorando de una persona que sabía que jamás me correspondería y que yo no debía amar...
Kouga me miraba dolido y sobre todas las cosas, triste... esa mirada hizo que un escalofrío me recorriera entera.
Kouga:- Entiendo... entonces alguna vez me quisiste?
- Claro que si..- le contesté con toda la dulzura que pude reunir en mi voz para ese susurro- no te pido que me entiendas ni mucho menos que me perdones... sólo quiero verte feliz... Sé que eso ahora va a ser difícil... pero quiero que seas muy feliz en tu vida, porque te lo mereces, porque eres una persona maravillosa tal y como eres... prométemelo
-Te lo prometo, Kagome- dijo Kouga como en un susurro, bajando la mirada- a-adiós.
-Adiós, Kouga... - dije mientras una lágrima que parecía arder en la piel rodaba por mi mejilla- adiós...
"Y es que tú y yo,
sólo tú y yo,
ni siempre ni nunca,
ni tú ni yo
salimos con vida
de esta canción."
Continuará........................................................----------------------------à"Tú y yo" de "La Oreja de Van Gogh" 2003 cd: "Lo que te conté mientras te hacías la dormida".
N/a:
Lamento haber tardado tanto en subir este capítulo, el cual considero uno de los más importantes del fic, sino díganme ustedes, pero entre los exámenes del colegio (quizás la causa principal de tanta demora en todo, tanto en la actualización de fics como en la respuesta a mails) y la falta de inspiración (me costó horrores terminar el capítulo 13 de este fic), no pude escribir nada... Quería terminar el capítulo 13 para poder subir tranquila el resto.
Pero dicen por ahí que tarde pero seguro... ahora... la tardanza valió la pena??? Contéstenme en un review...
Ahora, gracias a todos los que me dejaron sus comentarios en el capítulo anterior:
Miles cuyos reviews me dan mucho apoyo y alegría.
Coolis17 por su apoyo incondicional y las cosas hermosas que dice de mi fic. Creo que en este capítulo les hice un pasar un momento no muy grato, no? Pero creo que era necesario para el fic. Gracias por todo y espero tu review.
Kasim gracias por tu comentario y por siempre apoyarme para que actualice pronto.
Sheila Ruiz un orgullo recibir tu review siempre que actualizo, pero no me mates!! Todo tiene un por qué y me muero de curiosidad por ver que vas a decir de este cap. Perdón por la demora.
Aiosami lamento que no hayamos podido hablar mucho ya que mi msn dejó de funcionar, pero quiero agradecerte por tu review y por ser paciente, lamento haber tardado tanto.
Isumi me alegra saber que pensás que le pongo sentimiento al fic, porque esa es mi intención. Ya vas a ver que Inu va a sufrir, aunque sea un poquito, por hacer llorar tanto a Kagome... Cuidate y si tenes un tiempito dejame tu review.
Sakimi gracias por tanto apoyo y perdón por no responder tu mail, es que como dije antes, estoy llena de exámenes y muy corta de tiempo. Gracias por todo de nuevo. YaShi
Leydi yo también estoy sin msn, si queres mandame un mail cuando puedas. Espero tu review, si? Besos desde Argentina.
Natuchite extraño muchísimo, loka! Dónde estás?? Te extraño!!!!!! Espero recibir tu review en este capítulo, es que desde el mail donde me mandaste el cap. de "Bring me" no supe nada de mi hermana menor correntina. Escribime! Te kiero!
K-gome Ya verás sufrir a Kikyo también, en el próximo capítulo tendrás un adelanto. Espero que sigas dejándome tus valiosos reviews...
Iya No te envié el cap. antes porque quería que fuera una sorpresa su contenido, además de que sé que no tenés tiempo para leer mis cosas y corregirlas, prefiero que lo leas en bruto, tal cual salió de mi mente, porque te lo dedico a vos, para que pronto se solucione todo y logres encontrar la felicidad que tanto te mereces. Te adoro, corazón, escribime!
Blue ningyo: Gracias por el apoyo y perdón por el retraso, pero en recompensa este capítulo es más largo o no? Espero que te haya gustado. Pronto te enterarás del plan de Miroku y Sango, ahora sólo espero tu review para saber tu valiosísima opinión.
Sesskago: Mandy... espero que pronto puedas ponerte nuevamente al día con los fics, cuando lo hagas no dudes en dejarme tu review porque para mi el apoyo de una de mis amigas de siempre es importantísimo. Te quiero, sos demasiado buena!!!!
Morrigan: Gracias por dejarme siempre tu review. Ya me puse al día con tu fic, espero que hayas recibido mi review. Espero que sigas opinando igual de mi historia. Te extraño ahora que ando sin msn! Cuando quieras escribime, besotes.
Ropna Lamento no haber podido hablar con vos en el msn, justo cuando te agregué fue que me dejó de funcionar... Gracias por todo lo lindo que decís de mí y espero que no me mates por haber tardado tanto. Tengo una excusa bien válida: la maldita escuela. Me pone feliz saber que te gusta tanto lo que escribo. Espero tu review en hispa como siempre.
Bueno, sin más, un saludo grande a todos los que leen este fic, espero sus reviews y este capítulo va dedicado a mis dos hermanitas que andan pasando un momento no muy grato: Sayito e Iya-corazón.
A todos los del foro de Inuyasha en el que entré hace poco. Lamento no poder postear tanto como quisiera, casi no tengo tiempo para entrar en el foro!
A mis compañeros del colegio que son los mejores y a mí misma por soportar a la bruja de la nueva profesora de contabilidad ¬¬
YaShi =0)
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