Vivir soñando

Capítulo 2: She Doesn't know

El camionero se bajó de su camión (valga la redundancia), y se acercó hacia Shinichi y Ran.

¡Señorita! ¡Cruce con cuidado! ¡No ve que la pude haber matado!

Yo... yo... lo siento... mucho – estaba algo asustada – usted no tuvo la culpa...

Es que... ¡Por esto puedo ir a la cárcel!

No se preocupe, señor – dijo Shinichi -... no irá a ninguna parte...

¡Ran! ¿Estás bien?

Sólo mi pie...

¡WAA CASI ME QUEDO SIN AMIGA WAA!

No exageres

Ran, si vas a arrancar de mi... hazlo por la esquina con luz verde... no había motivo para que cruzaras

¡Esto es tú culpa!

Ran, no es momento para pelear... disculpe señor... ¿Nos puede llevar al hospital?

¡Claro! ¡Vengan, súbanse!

¿Puedo ir yo? – preguntó Sonoko

Por supuesto

Toda la escuela estaba mirando lo que había sucedido. Pero estaban algo más tranquilos, ya que vieron que Ran estaba bien.

Cuando llegaron al hospital, estaban Kogoro y Eri esperando a Ran. Shinichi ya se preparaba para lo que vendría...

¡Estúpido! – gritó Kogoro - ¡Por arrancar de ti mira lo que le pasó a mi hija! ¡Eres un inepto! ¡El primer día de tu regreso y mira lo que haces!

¡Hey! No fue mi culpa que su hija cruzara la calle habiendo semáforo en rojo para los peatones

¡Eres... Eres...!

El muchacho tiene razón, Kogoro... – dijo Eri - Ran cruzó con rojo... pero por suerte no pasó a mayores, ya que Shinichi la alcanzó a empujar, así que no lo retes tanto, que si no, Ran quizás estuviera muerta... mira, ahí está el doctor

¡Doctor! ¿Cómo está mi hija?

Se fracturó el pie, pero nada grave... le pusimos yeso. Una enfermera la traerá en silla de ruedas para que se la lleven

Arigato

En eso, aparece una enfermera, que llevaba a Ran en una silla de ruedas.

¡Ran, Amiga!

¡Ran, reacciona!

Cálmate, Sonoko. Estoy bien

Gracias a... el tonto de Kudo...

Y la tonta de Sonoko exagerada

¡Ya no peleen! Papá, mamá, me quiero ir a casa... hoy... no ha sido un bueno día – miró a Shinichi

¿Puedo ir contigo?

Si, Sonoko

Yo para qué pregunto... me voy a mi casa. Adiós – caminó hacia la salida, y se fue

Ran ¿Qué pasa con él? – preguntó Eri extrañada - Tan ilusionada esperabas que volviera, y ahora no quieres que te acompañe

Mamá... ya dije... hoy no fue un buen día – suena un celular

Perdón – dice Sonoko -... ¿Aló? ¿Mamá? ¿Una cena familiar? Pero estoy con Ran... tuvo un accidente... ¡por favor!... está bien... voy... adiós... Ran, lo siento... no podré ir... tengo cena familiar – dijo, con mirada enojada

Ok, no importa. Estamos en contacto

Ok, chao

Chao

Ran llegó a su casa, y se acostó. Estaba cansada. Había sido un día agitado. Lo de Shinichi le perturbaba el sueño. Recordó una canción que Sonoko le dijo que había escuchado cuando fue a América que era ideal para que le dedicara a Shinichi. Le pasó un cassette con la canción, pero Ran nunca quiso escucharla. Buscó el cassette en el velador, tomó la radio que tenía al lado, y escuchó la canción.

Si es cuestión de confesar

No se preparar café

Y no entiendo de fútbol

Creo que alguna vez fui infiel

Juego mal hasta el parqués

Y jamás uso reloj

Y para ser más franca

Nadie piensa en ti como lo hago yo

Aunque te de lo mismo

Si es cuestión de confesar

Nunca duermo antes de diez

Ni me baño los domingos

La verdad es que también

Lloro una vez al mes

Sobre todo cuando hay frío

Conmigo nada es fácil

Ya debes saber

Me conoces bien

(Y sin ti todo es tan aburrido)

El cielo esta cansado ya de ver

La lluvia caer

Y cada día que pasa es uno más

Parecido a ayer

No encuentro forma alguna de olvidarte

Porque seguir amándote es inevitable

Siempre supe que es mejor

Cuando hay que hablar de dos

Empezar por uno mismo

Ya sabrás la situación

Aquí todo esta peor

Pero al menos aun respiro

No tienes que decirlo

No vas a volver te conozco bien

(Ya buscare que hacer conmigo)

El cielo esta cansado ya de ver

La lluvia caer

Y cada día que pasa es uno más

Parecido a ayer

No encuentro forma alguna de olvidarte

Porque seguir amándote es inevitable

Siempre supe que es mejor

Cuando hay que hablar de dos

Empezar por uno mismo

Sí. Parece que Sonoko tenía razón. Para Ran era imposible olvidarse del niño que, por tanto tiempo, le provocó maripositas en el estómago. Con una lágrima rodando por su mejilla, Ran cerró los ojos y durmió. Pero al despertar, se llevaría una sorpresa...

N/A: Aquí está el segundo capítulo. Espero les haya gustado. Pobre camionero, casi se muere del susto. La canción que elegí para este capítulo fue "Inevitable" de Shakira. Muchas frases quedan ad hoc hacia la situación que vive esta pareja. ¿Qué hace una frase en cursiva por ahí? Ya verán... de aquí al último capítulo habrán varias... ¿Por qué el capítulo se llama así? Esperen al final... ¿Y qué pasará cuando Ran despierte? ¡Esperen al siguiente capítulo!

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