Capitulo 12.- Reencuentro
"Hey… chavalín… despierta" Jack se dirigió a Tails de forma suave mientras le agitaba con suavidad…
Tails entreabrió los ojos… y nada mas abrirlos notó su cuerpo como estaba de rígido… como le dolía casi todo… y como casi no se podía ni mover…
Jack acaricio la mejilla derecha al pequeño zorro mientras este seguía tumbado, totalmente desnudo únicamente tapado con una fina sabana al nivel de sus caderas y con un aspecto más bien deplorable…
"Se acabo Tails… ya esta… tan solo quiero volver a casa… no te voy a pedir nada mas…"
Tails se quedo casi inerte en la cama mientras unas leves lágrimas recorrieron su rostro…
"Y…yo también he de volver a casa… debo volver…" Jack sonrió a Tails y casi sin inmutarse le lanzó al lado de su cuerpo un par de billetes de 500 rings… Tails pudo ver el gesto y acto seguido Jack se dirigió a la puerta…
"Considéralo un pequeño aumento por tu trabajo… has estado muy bien… espero no volver a verte nunca mas por las calles¿me has oído bien?" Tails se reincorporo y se quedó mirándole impasible…
Jack sonrió a Tails y cerró la puerta a su paso sin añadir nada más…
La habitación se quedó en absoluto silencio y Tails cogió con sus temblorosas manos los dos billetes y se miró todo el cuerpo… vio como había perdido su inocencia por dinero… sentía como un ardor en el pecho… pero no tenia tiempo para mas tonterías… se levanto como pudo… y se puso su ropa interior… su ropa y sus zapatillas… sin siquiera entrar al lavabo para ver que aspecto presentaba, se sentía verdaderamente mal…
"Knuckles…" Tails sin hacer nada más en aquella habitación se dirigió a la puerta de la habitación y ya en el pasillo no podía ni siquiera esperar al ascensor… corriendo y tratando de no sentir dolor en su magullado cuerpo bajó las escaleras del hotel y pasó corriendo por la zona de ascensores. No había nadie ni en el lobby del hotel ni en la entrada, era extraño, parecía que el hotel estuviese abandonado, ni un solo coche... comenzaba a amanecer en ese momento…
Con los ojos medio llorosos comenzó a caminar dirección a ninguna parte, hacia la carretera general…
Iba pensando en todo lo que había pasado… había perdido su dignidad en ese hotel de Moon Tear… era algo que jamás podría olvidar… saco los dos billetes y los miró… tenia una profunda cara de decepción consigo mismo…
"Hey… oye tu… ¡zorro!"
Tails miró detrás suya… en tan solo dos segundos su cara se puso muy alegre… era un coche patrulla…
"¿Qué haces solo a estas horas de la mañana por esta zona¿No sabes que es de las zonas mas peligrosas de todo Moon Tear?"
Tails se dirigió corriendo hacia el coche con lágrimas de alegría…
El león policía observo al pequeño zorro…
"¿Te ha pasado algo? No tienes buen aspecto… ¿Quiénes son tus padres¿De donde vienes?"
Tails se quedó con la primera pregunta… pensó en contarle todo al agente… pero metió la mano en su bolsillo y notó el rugoso tacto de los dos billetes…
"N…no agente… tan solo es que me he perdido… por favor señor agente… ¿me podría usted llevar a Mistfield?"
El león se le quedó mirando un momento y sacó una pequeña libreta… miró la libreta, miro las dos colas….
"¡Un momento¿¿¿Tu eres Miles Prower?"
Tails se extraño un poco… "S… si soy yo…"
"Toda la policía de la ciudad te esta buscando, tu padre dio una orden de búsqueda… dijo que te escapaste de casa…"
Tails miró al suelo y esbozó una ínfima sonrisa y acto seguido miró al agente…
"Si… bueno, no es mi padre de todas formas…"
El león sonrió y le dijo que subiera al coche… y juntos se dirigieron hacia Mistfield…
Al poco rato de ir en el coche…
"Miles… ¿Cómo has acabado aquí? Mistfield esta muy muy lejos de este distrito…"
Tails noto el suave tacto del asiento del coche policía y cerrando los ojos le contesto…
"Es una larga historia… ahora tan solo… quiero volver… a casa"
"De acuerdo… puedes dormir tranquilo… en unos 20 minutos llegaremos…"
Tails sonrió y siguió con los ojos cerrados…
"Voy a llamar al cuartel general y al señor Knuckles para decirles que te he encontrado…"
El teléfono llenaba la casa de un ruido histriónico, era un ruido ausente en medio de la quietud… no había nadie para cogerlo en aquel apartamento de Mistfield…
Knuckles llego al portal de su casa… miro hacia el cielo y vio que ya era completamente de día…
No podía ni siquiera pensar… había fallado en muchos aspectos… la culpabilidad que sentía le llenaba todo su ser…
Pero acto seguido un sonido de sirena policial le despertó de sus penas… y pudo ver como el coche se detenía y bajaba Tails del coche acompañado de un agente…
"¡D..di…dios mío¡Tails!" Knuckles se dirigió a toda velocidad a coger al pequeño zorro… Tails tenía miedo de que Knuckles le fuera a pegar o algo por el estilo pero lo único que hizo el equidna nada mas estar a su lado, fue abrazarle y llorar… llorar a moco tendido…
"Tonto… eres tonto… pensaba que te había perdido para siempre…"
El agente miraba la escena sonriente… "Si me disculpan tengo que seguir con mi ronda… no se preocupe señor Knuckles, en el cuartel ya saben que esta de nuevo con usted…"
"Agente…" Knuckles le dirigió una mirada sincera… "Le debo la vida…"
El agente sonrió y acto seguido se marchó con su coche… Knuckles y Tails se quedaron en medio de esa mañana soleada de verano…
"Pero Tails… mírate… ¿Dónde has estado? Hueles fatal… y estas hecho polvo… ¿Qué te ha pasado?"
Tails miró a Knuckles y bajo la mirada…
"Knuckles… yo… siento mucho lo que he hecho… no he actuado de manera correcta… y… por favor… perdóname…necesito que me perdones…"
Tails comenzó a llorar sin poder evitarlo… Knuckles le miró fijamente y con sus dedos pulgares le secó las lágrimas de los ojos…
"No llores pequeño… no llores que ya ha pasado todo… de hecho… la culpa es mía…tu tenias razón… no cuidaba de mi casa… no hacia nada… tu me has abierto los ojos… me has hecho ver lo importante que es el hacer las cosas bien… gracias Tails…"
Los dos se abrazaron intensamente mientras Tails sonreía… y Knuckles también sonreía…
"Vamos arriba pequeño…"
Entraron en el portal y ya arriba, nada mas abrir la puerta del apartamento, Tails miró asombrado el piso… estaba reluciente, sin nada de basura ni suciedad…
"Kn..Knuckles… has… ordenado tu piso…" Tails miró sonriente a Knuckles y este se puso algo colorado…
"Como te he dicho antes… tenias razón… pero bueno basta de charla ves a ducharte inmediatamente… vamos…que te hace buena falta"
Knuckles acompaño a Tails al baño y empezó a llenar la bañera y miraba al pobre Tails…
Mientras se llenaba la bañera observó que Tails estaba distante… como afligido por algo…
"Pero loco… ¿Dónde demonios has estado¿Qué te ha pasado pequeño?"
Tails se quedó un rato en silencio…
"He… he dormido en la calle estos días…y he sobrevivido… como he podido" Tails metió la mano en el bolsillo y agarró fuertemente los dos billetes… de alguna manera no quería que Knuckles los viera…
Knuckles le miró enfadado… "Eres tonto Tails… muy tonto…"
Tails agachó la cabeza y Knuckles pudo notar definitivamente que algo le pasaba…
"Knuckles… por favor... ¿puedes salir del baño? Me gustaría estar a solas un rato…"
Knuckles le miró sonriente… "Claro, claro… pégate un buen baño que te hace falta, ya eres mayorcito para bañarte tu solo" Knuckles sonrió de manera picaresca a Tails…
Antes de que Knuckles saliera por la puerta Tails se dirigió a el….
"Knuckles…" Tails miró fijamente al equidna…
"Solo te quiero pedir un favor…" Knuckles se quedó sorprendido…
"Claro… dime…"
"Nunca… nunca me preguntes ni digas nada sobre estos dos días¿vale?"
Knuckles se quedo bastante sorprendido… pero se lo prometió…
"Ok zorro, te lo prometo, nada de preguntas sobre estos días… lo importante… es que volvemos a ser amigos… ¿verdad?"
Tails sonrió a Knuckles y le contesto…
"…amigos" mostrándole una dulce sonrisa…
Knuckles sonrió y cerró la puerta… miro el piso… se miro a si mismo… y se quedo pensativo pegado a la puerta del baño…
"Menos mal que todo ha pasado…" Y tras decir en alto sus pensamientos se dirigió al sofá…
Tails por su parte se comenzó a desvestir como podía, no quería que Knuckles le viera el cuerpo magullado… le dolía todo… y cuando se quedo sin ropa miró los pantalones en el suelo y pudo ver como los billetes asomaban en el bolsillo del pantalón… 1000 rings… esos 1000 rings eran su virginidad y su dignidad… ¿tan poco valía su inocencia?... no quería sentir ese peso encima… nunca mas… y sin pensarlo… cogió los billetes, los tiró al váter… y tiró de la cadena mientras se quedó sentado en el suelo desnudo y escuchando el ruido del agua caer en la bañera… era el primer paso para poder olvidar todo lo que había sucedido… y así poder ser fuerte y seguir adelante… nunca mas volvería a hacer una locura semejante… nunca…
FIN
