¿VENGANZA O SENTIMIENTO?
(por Uialwen)
Cap. 4.
El Heredero de HogwartsDeclaimer: Este fic contiene personajes que no son míos. Todos pertenecen a JK Rowling. No los utilizo con ánimo de lucro, si no para la diversión y disfrute de los lectores de FF.net.
Advertency: Este fic contiene SLASH (relación CHICO/CHICO). Si no te gusta el género, sal del fic. Si ya te has enganchado al SLASH o te pica la curiosidad, adelante, pero quedas advertido, nada de amenazas.
Notas: Ya estoy aquí de nuevo.
Gracias a todas por los reviews, me hacéis muy feliz.
Os dejo ya sin más demora con el cap. que sé que lo estáis deseando.
¡Nos vemos abajo!
Besos.
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Los mortífagos no se esperaban tal reacción por parte del director de Hogwarts y mucho menos por parte de los alumnos; pero ello, no impediría que vinieran a cumplir lo que el Lord les había mandado: Capturar a Harry Potter vivo.
Entonces, a una señal del mortífago que iba en cabeza, los demás mortífagos comenzaron a lanzar maleficios a diestro y siniestro. Los Gryffindor y los Ravenclaw (que fueron los que aquel día habían tenido Defensa Contra las Artes Oscuras) se protegieron con los escudos. Mientras, los Hufflepuff y los Slytherin debían protegerse esquivando los maleficios.
Harry vio que Malfoy lo pasaba mal por el mero hecho que debía esquivar algún que otro maleficio dirigido en la dirección en la que él se encontraba. Al tenerle tan cerca y al ver que una maldición crucio iba hacia el Slytherin se puso delante de él y los englobó con el escudo protector a tiempo para que la maldición chocara contra el globo dorado y explotara.
- Gra-gracias, Harry- dijo atónito por la acción de su "archienemigo".
Harry deshizo el hechizo y le mandó un hechizo aturdidor al primer mortífago que pudo ver, dándole de lleno.
- No hay de que, Draco. Debemos estar juntos en esto. No querrás que me tenga que enfrentar tan pronto a Voldemort. No hemos acabado lo que habíamos comenzado, ¿verdad?- Harry sonrió a Draco y los dos volvieron a la lucha contra los intrusos.
Casi siempre estuvieron rodeados de gente, pero cuando no era así, Harry rodeaba a ambos con el globo protector.
Pasaban las horas y algunos alumnos estaban en el suelo desmayados. Mas una imagen llegó a ojos de Harry. Una imagen que provocó que saliera corriendo.
Una luz verde salió del centro de los mortífagos y se dirigía hacia una joven Ravenclaw morena. Cho Chang. Harry corrió hacia allí y justo cuando empujaba a Ron, el maleficio Avada Kedavra le daba de lleno a la morena.
Harry se arrodilló y la cogió entre sus brazos. Una repentina furia obró en él, provocando que unas negras nubes cubrieran la estrellada noche.
Los ojos de Harry se volvieron de un escarlata intenso, para pasar a un verde intenso, luego a un azul eléctrico y después a un amarillo, para quedar de los cuatro colores de las cuatro casas y se levantó con Cho en los brazos.
-"Por Godric Gryffindor, Salazar Slytherin, Rowena Ravenclaw y Helga Hufflepuff, llamo a la antigua magia del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Que vengan los antiguos fundadores de las Cuatro Casas. Que nos ayuden a mantener lejos la oscura magia del que desea hacer daño; Lord Voldemort. Que atrapen a los que han hecho daño. Os reclamo aquí y ahora. Os lo pide el Heredero de Hogwarts, ¡ha llegado el momento de dejar las diferencias aparte y de volveros a juntar contra la maldad de Tom Marvolo Riddle!"- Harry cayó al suelo y Cho cayó encima de él.
Entonces, cuatro figuras aparecieron y atraparon a los desprevenidos mortífagos sin dejarles tiempo a reaccionar y huir.
Luego, Godric Gryffindor se acercó a Cho Chang y la levantó. Para sorpresa de todos, y tras que Godric la besara, Cho despertó y no recordaba lo que le había sucedido después de ver la maldición de un verde intenso dirigirse directamente a ella. Entonces vio a Harry en el suelo. Los cuatro fundadores habían desaparecido en una voluta de humo de los colores de cada casa. Cho creyó que fue a Harry a quien tocó la maldición en un intento de salvarla y cayó de rodillas llorando a su lado.
Un sorprendidísimo Dumbledore se acercó y la levantó.
- Señorita Chang, Harry se encuentra bien. Ahora debe descansar en la enfermería. Tranquilícese que no es fruto de la maldición mortal.
Dumbledore le indicó a McGonagall y a Remus que llevaran a Harry a la enfermería. Entonces, Snape apareció y le dijo a Dumbledore.
- Albus, debo hablar con usted- estaba algo nervioso y preocupado.
- Sí, yo también. Vamos a mi despacho- antes de comenzar a partir añadió-. Ahora todos vayan a sus respectivas casas, que algunos lleven a sus compañeros desmayados a la enfermería y que después regresen a sus casas.
Todos obedecieron. Algunos se dirigían a las casas, otros con sus compañeros flotando les llevaban a la enfermería y después de haberles dejado en manos de Madame Pomfrey volvían a sus respectivas casas.
Mientras tanto, Severus Snape y Albus Dumbledore se dirigían al despacho del director.
Al llegar al despacho de Dumbledore, ambos tomaron asiento y un Snape histérico, contó los planes del Lord más inmediatos. Pues ahora Voldemort estaba furioso por el fallido ataque a Hogwarts, además no sabía el motivo de que 1000 mortífagos hubieran fallado en el secuestro del niño que vivió.
- Albus- comenzó de nuevo Severus-, el Señor Tenebroso va a actuar más a menudo y pretende un soberano ataque a Azkaban.
- No me extraña- dijo Dumbledore intentando aparentar calma, pero el temblor de su labio inferior le delataba.
- Señor, creo que deberíamos tener más gente en la Orden e intentar aplacar a cuantos más mortífagos posibles.
- Lo sé, pero eso es precisamente lo que Voldemort pretende que hagamos. Que cojamos más miembros de la orden para que en cuanto cometamos el error de ser demasiado numerosos, él pueda descubrirnos y atacarnos.
- Es posible... ¿Cómo han ido las cosas por aquí?
- Tenemos un nuevo problema- dijo Dumbledore con pesadez.
- ¿Cuál?- preguntó preocupado Severus.
- Por lo visto, Harry es el Heredero, no sólo de Godric Gryffindor, como pensábamos, si no que también de las Cuatro Casas.
- Las Cua... ¡Por Merlín! ¡De los Cuatro Fundadores!
- Sí... Hizo el llamamiento a la antigua magia de Hogwarts y los Cuatro Fundadores acudieron en pos de su ayuda. Ahora más que nunca es cuando debe recibir clases de Oclumancy. No debemos permitir que Tom sepa a lo que pueda enfrentarse, no antes de tiempo. Severus, deberás olvidar lo ocurrido la última clase con Harry, lo del accidente con el pensadero, porque como no domine la Oclumancy , estará a alcance de Voldemort algo que podría ponerle en aviso.
- Si no hay más remedio... Albus- dijo a regañadientes Severus-. Ahora sólo falta la opinión del chico.
- Por supuesto, por supuesto. En fin, ya es tarde, Severus. Mañana es sábado, pero habrá trabajo, mucho trabajo que hacer. Buenas noches, Severus.
- Buenas noches, Albus- dijo Severus y salió del despacho del director maldiciéndose a sí mismo por no saber decir que "No, lo que hizo Potter había sido deliberadamente. ¡Cobarde!"
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Madame Pomfrey iba de una cama a otra, como loca, maldiciendo a los mortífagos y la incursión en el colegio.
Ron y Hermione estaban junto a la cama de Harry, pero estaban algo nerviosos por la revelación que hacía apenas unos minutos antes habían presenciado y preocupados por lo que el-que-no-debe-ser-nombrado podría estar viendo en la mente de su amigo.
La señora Pomfrey se acercó a la cama de Harry con una poción y se la hizo beber. Pronto, Harry, despertó, pero no por la poción, si no por la nueva incursión del Lord en sus pensamientos y recuerdos.
- ¡Harry! ¡Estás pálido! ¿Qué ocurre?
- No... Es él... Ha vuelto a hurgar en mis pensamientos...
- ¿Quién?- preguntó Hermione alterada.
- Vol-Voldemort... Me ha preguntado por Ma-Malfoy...- dijo Harry.
- ¿Por Malfoy?- se extrañó Hermione.
- ¿No será que sabes algo que no nos has contado, Harry?- preguntó Ron levantando la cabeza. Su tono era sereno, pero serio.
- Más bien es algo que no sabía que sentía, pero aún es confuso.
- ¿Me he perdido algo?- preguntó aturdida Hermione.
- Nah, sólo que Harry estaba CON Malfoy en la Sala de los Menesteres cuando Dumbledore ha llamado a los prefectos.
- ¿Cómo?- dijo Hermione extremadamente alterada por el reciente descubrimiento.
- Como lo oyes- dijo Ron levantando y comenzando a caminar de un lado a otro-. Lo que no entiendo, es lo que has dicho. ¿"Algo que no sabías que sentías"?
- Ron, ¿no es evidente?- le espetó Hermione con una sonrisita tonta.
- ¿El qué?- dijo Ron alzando una ceja.
- Pues que después de haber leído ese diario, pues estás confundido, no sabes lo que sientes o, no como querrías saberlo.
Ron hizo ademán de no entender lo que Hermione quería decir y volvió al tema principal.
- ¿Qué te ha preguntado exactamente el que no debe ser nombrado, Harry?
- Pues, ¿cómo está el pequeño dragoncito?
- ¿Dragoncito?- preguntaron al unísono Ron y Hermione.
- Es un mote que me he inventado para que no sepa nadie a quien me refiero, ¿vale?
- Vale, vale... Pero, ¿tú le contestaste?
- No como él quería...
- Harry, ¿qué se te ocurrió decirle?
- Pues...- dudó Harry-. "No tengo porque decirte nada, pienso volver a retomar las clases de Oclumancy". Eso fue lo que le dije.
- Tampoco es tan horrenda contestación...- dijo Hermione.
- Por supuesto, eso le puso aún más furioso...- opinó Harry.
- Pero fue lo más sensato- intervino Ron.
Pero Madame Pomfrey volvió y les dijo que Harry necesitaba descansar. Literalmente les estaba echando de la enfermería. Harry se tomó la poción del sueño mientras que Ron y Hermione salían de la enfermería y se dirigían a su Casa.
A Harry le invadió el sueño y poco a poco, los ojos se le fueron cerrando hasta caer en brazos de Morfeo.
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¡Hola!
¿Qué tal chicas? Espero que bien. Como veis, aquí está el 4º cap. del fic ¿Venganza o sentimiento?
Espero que haya sido de vuestro agrado y que me dejéis opiniones, quejas, sugerencias, ideas, amenazas aparte ¬.¬
Besos,
Uialwen
