Capitulo 19 – De comida a cena


El día estaba por terminar ya, y Sakura aun no sabía nada de Syaoran. Su última clase ya casi terminaba y no sabía si el plan e salir aun estaba en pie. Una vez terminada la clase, Sakura guardo todas sus cosas, tratando tardarse lo más posible para darle tiempo a Syaoran de encontrarla. Después de diez minutos, se desespero de esperar y salió del salón. Y en la puerta estaba Seiji esperándola con una nota en la mano.

Seiji – (dándole la nota) Me pidieron que te diera esto.

La hoja estaba doblada en cuatro, y en la parte de adelante decía Sakura. Ella creía reconocer la letra, e inmediatamente supo que era Syaoran.

Sakura – Gracias, debo irme ya. Nos vemos mañana.

Y sin abrir aun la nota, se fue caminando hacia el jardín. Y una vez sentada en el jardín, leyó la nota, esperando que le explicara por que nunca la busco ni le cancelo. En verdad quería verlo, y estaba triste por no ser correspondida. Y al abrir la nota tan solo leyó…

"Debo terminar de preparar algo, nos vemos a las seis en el parque
Syaoran…"

Ahora entendía un poco más, estaba ocupado, se sintió mejor, pero le molesto que no la buscara y le dijera las cosas en vez de mandar un papel. Eran las tres de la tarde, y debía matar tiempo, una llamada de Tomoyo diciendo como estaba la alegro, y quedaron de verse para platicar un rato. Hacia las tres y media se vieron en un café cerca del parque.

Tomoyo – (algo molesta) ¿Así que se verán hasta las seis¿No sabes por que o que pasó?

Sakura – No se nada, solo me mando esa nota (con cara molesta), pero no entiendo por que no me lo dijo de frente.

Tomoyo – Ni yo

Sakura – Bueno, no importa, cuéntame¿cómo vas con Eriol?

Tomoyo – (roja) Bien… aunque estamos algo preocupados.

Sakura – ¿Por qué?

Tomoyo – Unos amigos nuestros tienen problemas, y aun n o sabemos cual será la consecuencia de eso.

Tomoyo se refería a Syaoran y ella, pero no quería comentar nada, era trabajo de Syaoran arreglar las cosas, iba bastante bien, pero le molesto lo que hizo, aun que esperaba tuviera un buen plan.

Sakura – ¡Qué mal plan! Espero todo se arregle pronto. Y bueno¿ustedes cómo van? Solo se que Eril regreso de Inglaterra a estudiar un rato aquí.

Tomoyo – Si, pero no se que tanto tiempo sea, aun que espero sea mucho.

Sakura – ¡Qué bellos! Estas enamoradísima ¿verdad?

Tomoyo – (rojitas otra vez) Eso parece, hehehe… aun que a veces me desespera que sea tan frío.

Sakura – Supongo que es por la esencia de Clow. Cuando lo conocí no parecía muy calido que digamos, pero si se veía que era una excelente persona.

Y entonces recordó el día que regresó en el tiempo para ver a Clow, y el vago recuerdo de una promesa de regresar llego a su mente.

Sakura – Tomoyo… ¿aun tienes todos los videos de las cartas?

Tomoyo – ¡Si! Son mi tesoro… ¿Por qué?

Sakura – ¿No recuerdas si tienes video de esa vez que conocí a Clow?

Tomoyo – A ver, espera…

Y sacó de su mochila un catálogo.

Tomoyo – (chocando el catálogo) Mmm… ¡Si¡Aquí esta!

Sakura – (viendo a Tomoyo como un freak) ¿Tienes un catálogo?

Tomoyo – ¡Si! Es más fácil así, lo malo es que últimamente no he podido agregar más videos…

Sakura – Este… bueno, Tomoyo… ¿crees que podrías prestarme ese video?

Tomoyo – Claro, te lo doy la próxima vez que nos veamos.

Sakura – ¡Gracias! Pero bueno, yo creo que ya me voy…

Tomoyo – (molestándola) Eh… No quieres hacerlo esperar eh… hehehe…

Sakura – (rojita) No… hehehe… Ya me voy (deja dinero en la mesa para el café que tomo). Gracias por escucharme, deséame suerte.

Tomoyo – Creeme, no la necesitas, mejor te deseo éxito.

Sakura abrazó muy fuerte a Tomoyo y se despidió.

Sakura – (viendo otra vez raro a Tomoyo) Este…

Tomoyo – (terminando de pintarle los labios) Lista (sacó la cámara de la mochila) Te ves divina…

Sakura – (-.-¡) Gracias… ya me voy. Te quiero.

Tomoyo – (grabándola) Yo también, besos.

Sakura – Bye…


Al llegar al parque vio a Syaoran de lejos, un ramo de flores de Sakura estaban en sus manos. Al verlo, una enorme sonrisa se adueño de su boca, y aun a lo lejos Sakura pudo ver que Syaoran se había puesto rojo de tan solo verla. Al estar ya frente a el, ella dijo…

Sakura – Estuve a punto de odiarte por tu nota, pudiste habar sido mas expresivo¿no?

Syaoran – Perdería el encanto, debía terminar un par de cosas. Ven, cenemos¿te gustaría cenar en mi casa?

Sakura – (rojita y no tan enojada) Si, gracias…

Y caminaron para llegar a asa de Syaoran, y durante el trayecto, platicaron de cómo habían estado sus días.

Syaoran estaba ansioso de llegar a su casa, había pasado todo el día preparando la casa y la cena para Sakura. El se sorprendió de lo linda que se veía, e inmediatamente se dio cuenta que fue Tomoyo quien la había arreglado. Le gusto mucho volver a ver la estrella que traía en el cuello, le traía buenos recuerdos. Y al llegar al departamento, antes de abrir la puerta…

Syaoran – Te ves muy linda, se ve muy linda la estrella…

Sakura se puso roja, le gusto bastante que le gustara como se veía. Después de todo Tomoyo tenía razón, le gusto como se veía. A Sakura también le había gustado como se veía Syaoran. Quizá para todo mundo ese pantalón negro y la camisa azul le pareciera sin chiste, pero a Sakura cada vez le gustaba mas y mas Syaoran, aun que no entendí muchas de las cosas que sucedían a su lado.

Y entonces, antes de que Sakura pudiera contestar al cumplido de Syaoran, este abrió la puerta del departamento. Y fue entonces cuando Sakura comprendió por que Syaoran había tardado tanto en aparecer y encontrarse con ella. Todo el comedor y la sala estaba llena de velas, no había mas luz que la que la luna y las velas podían dar. En el centro, una mesa con un mantel rojo y rosas en el centro, pétalos de rosa por todos lados. Dos lugares para cenar, dos lugares para enamorarse. Sakura simplemente no sabía que decir.

Syaoran – Lamento haber tardado tanto, pero esto de ser hombre de casa no se me da mucho que digamos. (y jaló la silla para que Sakura se sentara).

Sakura – (roja y sentándose) No te preocupes, me sorprendiste…

Syaoran – Creeme, tú también me sorprendiste. Voy por la cena.

Y durante más de una hora estuvieron sentados, cenando, platicando. Syaoran muriendo de ganas por enamorarla, Sakura muriendo de ganas por enamorarse. Después de unas cuantas copas, y mucho tiempo platicando, Syaoran se levanto…

Syaoran – (poniendo música) Me permite esta pieza señorita (y extendió la mano)

Sakura – (rojita) Claro…

Syaoran había conseguido, después de mucho esfuerzo, la canción que bailaron juntos durante la obra donde el terminó siendo el príncipe de Sakura. Ella se dio cuenta una vez más de que la escena le era familiar, una canción familiar nunca antes escuchada, y un baile sin recordar. Sakura siguió bailando, pero una cara de incertidumbre apareció en ella.

Syaoran – ¿Qué tienes¿Te ha molestado algo?

Sakura – (algo apenada) No, lo siento, es solo que esa pieza me es familiar, es todo.

Syaoran – Me trae buenos recuerdos… pero si te molesta puedo cambiarla.

Sakura – (recargando su cabeza en Syaoran y sin dejar de bailar) No… es linda, es solo que quisiera saber por que e es familiar.

Por primera vez en mucho tiempo Syaoran volvía a sentirla entre sus brazos, volvió a oler esa esencia que tanto amaba, una sensación entre tristeza y felicidad se adueño de el.

Sakura – (con miedo) Syaoran¿qué significo para ti?

Sakura llevaba toda la noche queriendo esa respuesta, y con mucho miedo y desesperación logro decirlo, y esperando con ansias la respuesta, Syaoran dijo…

Syaoran – Mucho mas de lo que puedas imaginar, mucho mas de lo que cualquiera pueda sentir, mucho mas de lo que cualquiera pueda imaginar…

Sakura estaba feliz, la respuesta fue justo lo que deseaba, pero sintió que llevaba mucho mas tiempo deseando esa respuesta, mucho mas tiempo extrañándolo, mucho mas tiempo enamorada de el. Y por un momento, ese baile pareció eterno, bello, único. Estaba enamorada.