CAPITULO 10: LA OSADÍA DE BORIS

Milekha subió corriendo a través de las Doce Casas, sin la compañía de nadie. Lily se había quedado en la casa de Aries por obvias razones. La princesa esperaba encontrarse a Camus dormido, y se sorprendió mucho de verlo de pie en la entrada del templo.

¡Camus!- exclamó Milekha, una vez que llegaron al templo de Acuario.

¿Milekha? ¿qué haces aquí?- preguntó el caballero.

Hay algo importante que tengo que decirte- dijo Milekha- Selene tuvo un sueño muy extraño... soñó que estaba en París, que un hombre fue a secuestrarla...-

¿De que hablas?- dijo Camus.

Y cuando me contó lo que había soñado, prácticamente me describió a Vladimir como el que lo hizo- dijo Milekha.

No te preocupes, Milekha- dijo Camus con calma- puedes estar segura que ni Selene ni Vladimir van a ir a París, y mucho menos esta noche...-

¿No lo entiendes?- dijo Milekha, con cierto grado de preocupación- ¿no me dijiste que Selene te recordaba a tu hermana? Helene está en peligro...-

En absoluto- dijo Camus con su habitual tranquilidad- ella está a salvo en París; no tienes ninguna razón para temer por ella...-

¿Porqué no me crees?- preguntó Milekha- recuerda que puedo predecir el futuro por medio de los sueños de otras personas... te estoy diciendo la verdad...-

Camus no respondió.

Camus...- insistió ella.

No te preocupes por Helene- dijo Camus de nuevo- te agradezco tu preocupación por mi hermana, pero estoy seguro que ella está a salvo...-

Pues eso espero- dijo Milekha, un tanto molesta- odiaría tener que decir 'te lo dije'-

Vuelve al recinto de las amazonas- dijo Camus, ignorando el último comentario de la princesa- necesitas dormir un rato, porque hoy fue un día muy largo para ti, y mañana lo será también...-

Gracias, Camus- dijo Milekha. Le dio un beso en la mejilla y bajó a la casa de Aries a encontrarse con Lily y volver con ella al recinto de las amazonas. Camus se quedó algo sonrojado.

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

A la mañana siguiente, el rey Rustam, el zar Aleksandro e Igor ya habían llegado a Atenas. Acamparon a las afueras. El príncipe Dimitri, el hijo menor del rey Rustam, fue a acompañar a su padre. El zarevich Alexéi y Timofei, el amigo de éste, acompañaban al zar. También estaban Vladimir y los esposos de Danushka y de Anna.

En la tienda del zar se reunieron éste, Igor y el rey Rustam.

Se hace tarde- dijo el rey Rustam con impaciencia- ¿atacaremos ya?-

No, hasta que caiga la noche- dijo Igor, cruzando los brazos- los espías que enviamos al Santuario de Atena me han informado que los guardias abandonan sus puestos durante la noche, y que los caballeros duermen...-

Perfecto- dijo el rey Rustam.

Pero no creo necesario atacar por sorpresa- dijo Igor- tengo algo que creo que los caballeros querrán...-

¿Y eso que es?- preguntó el zar.

Uno de los soldados del zar dio un paso adelante. Era rubio, de piel blanca y ojos negros, e impresionantemente alto. A todos los presentes les pareció familiar, y Vladimir lo reconoció de inmediato. Su hermano mayor.

¿Boris?- dijo Vladimir.

El mismo, Vlad- dijo Boris- y traigo una sorpresa para todos, pero en especial para uno de los caballeros de Atena...-

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

Esa tarde hubo una nueva reunión en la casa de Aries.

Seiya y Shiryu acaban de informarnos que por fin hallaron algo- dijo Mu- en las afueras de Atenas hay un campamento ruso. Tenemos que estar alertas, y sospechar un ataque, muy probablemente esta noche...-

Si nos atacan, entonces será una larga noche- comentó Shura.

Así es- dijo Saga- tenemos que idear una manera de iluminarnos, pues no previmos la oscuridad en el plan de Máscara Mortal...-

Y tenemos que traer a las chicas a las Doce Casas lo más pronto posible- añadió Aioria- porque el recinto de las amazonas no es seguro-

Kiki- dijo Mu. El pelirrojo apareció frente a ellos- ve al recinto de las amazonas por Milekha, Selene y Lily-

Kiki asintió y desapareció.

Bueno, como acordamos- dijo Máscara Mortal- todos tomaremos los puestos indicados, excepto cuatro: Kanon, Shaka, Aioros y Afrodita, quienes permanecerán en sus respectivos templos para contener cualquier defecto en el plan, aunque dudo mucho que se produzca-

Exacto- dijo Shura- se arrepentirán de querer atacarnos...-

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

Cuando Kiki volvió con las chicas y las llevó a la casa de Aries, Milekha y Lily dejaron bien en claro que a ninguna de las dos les agradó la idea de quedarse en las Doce Casas mientras los caballeros y las otras amazonas peleaban.

Yo puedo pelear, Mu- reclamó Lily.

No, claro que no- dijo el caballero de Aries en el mismo tono que usaba con Kiki- tú no pelearás contra ellos...-

Pero Mu...- dijo Lily.

Pero nada, amor- dijo el caballero- no quiero que te lastimen...-

Lily no parecía muy dispuesta a dejarse convencer sin discutir un rato más, así que Mu le dio un suave beso en los labios, y eso terminó por convencerla.

Está bien- dijo Lily, cruzando los brazos derrotada- pero si veo que hay problemas iré a ayudarlos...-

Dudo mucho que tengamos algún problema, Lily- dijo Mu- el plan de Máscara Mortal es bastante bueno...-

Eso espero- dijo ella.

Milekha, por su parte, trató de convencer a Camus de que la entregara.

Camus, tenemos que hablar con mi padre- dijo Milekha- él entenderá y detendrá el ataque-

Es demasiado tarde para hablar con él, Milekha- dijo Camus- debiste hacerlo cuando tuviste la oportunidad. Si hablas con tu padre ahora, el rey Rustam aprovechará para atacar a tu padre por no cumplir con el compromiso...-

¿Qué puedo hacer?- dijo ella.

Espera aquí con Selene y Lily- dijo Camus- tienes que esperar a que se calmen un poco las cosas... verás que todo saldrá bien-

Eso espero- dijo Milekha, quien tenía una mirada de terror. Camus la besó en la frente y salió hacia su puesto.

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

La noche llegó muy pronto, y con ella el ataque de los ejércitos ruso y ucraniano. El rey, el zar y los príncipes estaban al frente.

No se detengan hasta que Iván y Milekha estén a salvo- dijo el rey Rustam- y aniquilen a todos los caballeros y sus aprendices, y quemen todo lo que puedan. No dejen a nadie con vida-

Los soldados entraron al Santuario, el cual estaba totalmente en silencio. No había nadie a la vista. Igor miró alrededor.

Que extraño- dijo el consejero- este sitio está muy silencioso...-

Máscara Mortal, junto con el resto de los caballeros de oro, plata y bronce estaban escondidos, esperando el momento propicio para lanzarse al ataque.

¡Ahora!- exclamó el caballero de Cáncer. Los caballeros se lanzaron contra los intrusos, rodeándolos, mientras los gemelos Saga y Kanon abrían un par de portales a otra dimensión para deshacerse de los enemigos, mandándolos de vuelta a Rusia.

Igor miró eso, enfurecido. Si el plan de los caballeros funcionaba, su ejército perdería. Entonces decidió usar el último recurso.

¡Tregua!- gritó el consejero. La pelea se detuvo, y los soldados rusos y ucranianos se sd y se retiraron, separándose de los caballeros, hacia la entrada del Santuario.

¿Qué crees que haces?- preguntó el rey Rustam entre dientes.

Tenemos un rehén, señor, y creo que es el momento de usarlo- dijo Igor. Con una bandera blanca, Igor se acercó a los caballeros.

Camus- gritó Igor al ver al caballero de Acuario- acércate, porque tenemos algo de que hablar...-

No tengo nada que hablar contigo- le respondió Camus.

Yo creo que sí- dijo el anciano- tengo algo en mi poder algo... mejor dicho, alguien que te interesa...-

¿Ah, sí?- dijo Camus- ¿y quién es esa persona?-

Ya lo verás- dijo Igor con una horrible sonrisa- Boris, ven acá-

Boris dio un paso delante de entre los soldados rusos. Llevaba consigo a una chica, y la sostenía fuertemente por los hombros. La joven tenía dieciocho años, más o menos, cabellos azul oscuro y ojos color aguamarina que estaban llenos de lágrimas. Sus facciones eran finas y recordaban un poco las de Selene.

Helene...- murmuró Camus, abriendo los ojos sorprendido.

Tu hermana...- dijo Milo.

Veo que sí has reconocido a tu hermanita- dijo Igor sin dejar de sonreír- Boris me hizo el favor de... invitarla, porque imaginaba que llevabas bastante tiempo sin verla, ¿no es así? Y sería una lástima para todos que algo malo le pasara, ¿no?-

Te atreves a dañarla de algún modo y te juro que no quedará nada de ti cuando termine contigo...- dijo Camus entre dientes.

No hay necesidad de ello- dijo Igor, acentuando aún más su sonrisa- si cooperas y entregas a Milekha y a Iván, te la regresaré sin un solo rasguño...-

Camus frunció el entrecejo.

El príncipe Iván no se encuentra en el Santuario- dijo Camus.

Mientes...- dijo el rey Rustam.

No miento- dijo Camus.

No importa- dijo Igor- si no entregas a los dos príncipes mañana a esta misma hora cuando volvamos aquí, no respondo por la seguridad de tu hermana...-

Los caballeros vieron como los enemigos se alejaban de la batalla. Camus golpeó el suelo lleno de ira, y un viento helado recorrió todo el Santuario.

Desde la casa de Aries, Milekha había observado toda la escena. Su corazón latió con fuerza al ver a su padre, a su hermano Alexéi y a su primo Tima. Pero le dio un vuelco al ver que Igor tenía como rehén a la hermana de Camus. Y fue entonces cuando comprendió por completo el sueño de Selene: el hombre que la gitana había visto en su sueño no había sido Vladimir, sino Boris, el hombre que había estado tanto tiempo obsesionado con Helene.

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

Al amanecer, Alexéi y Timofei charlaban en la entrada de la tienda del zarevich. Ambos estaban muy impresionados por lo que acababan de ver en el Santuario, y cómo los caballeros lo habían defendido.

Esto tiene que parar pronto- dijo Alexéi- quisiera decirle a mi padre lo que ocurrió en realidad, para que detenga esto de una vez-

No puedes hacer eso, Alex- dijo Timofei- recuerda es el secreto de tu hermana...-

Lo sé, Tima- dijo Alexéi- pero hay una chica en medio de todo esto, y ella no es responsable de nada... yo solo quisiera que nada de esto hubiera pasado...-

¿Esa chica es...?- comenzó Timofei.

Sí, la hermana del caballero Camus- dijo Alexéi.

Me parece injusto- dijo Timofei- vamos a verla...-

¿Para qué, Tima?- preguntó Alexéi.

Camus ayudó a tu hermana, sacándola de Moscú, Alexéi, aunque solo nosotros conozcamos ese secreto- dijo Timofei- nosotros tenemos que ayudar a su hermana... al menos para asegurarnos de que no la lastimen mientras esté aquí...-

De acuerdo- dijo Alexéi.

Con cuidado de no ser descubiertos, el zarevich y su amigo se introdujeron en la tienda de Boris cuando éste salió hacia la tienda de Igor. Vieron a Helene profundamente dormida sobre una manta en el suelo, y encadenada por un pie al poste principal de la tienda.

Chica... despierta- dijo Timofei, sacudiéndola ligeramente. Helene despertó sobresaltada y se alejó de ellos lo más que pudo.

No temas- le dijo Alexéi en un tono tranquilizador, para no asustarla más de lo que ya estaba- no queremos hacerte daño-

Vinimos a asegurarnos de que Boris no te lastime...-añadió Timofei.

Gracias- dijo Helene, sorprendida que entre los rusos hubiera quien la tratara bien.

¿Qué fue lo que sucedió?- preguntó Alexéi.

No lo sé- dijo la joven francesa- yo estaba en mi casa, y de pronto alguien forzó la puerta, y llegó ese demonio de Boris... yo traté de escapar, pero no llegué muy lejos y me atrapó...-

¿Y en realidad Camus es tu hermano?- preguntó Timofei, y Helene asintió.

No te preocupes, nosotros no permitiremos que Boris te lastime- dijo Alexéi- si alguna vez nos necesitas, no dudes en avisarnos-

No es que no se los agradezca- dijo Helene- pero, ¿porqué hacen esto por mí?-

Porque sabemos que esto es injusto- dijo Alexéi- además, tu hermano ha protegido a mi hermana de muchos peligros-

Escucharon un ruido fuera de la tienda.

Demonios- dijo Tima- es él-

Volveremos luego- dijo Alexéi rápidamente, y ambos salieron de la tienda con cautela, sin que Boris los viera.

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

¿Qué vamos a hacer?- dijo Milo. Mu y Camus estaban en el templo de Aries, ambos muy serios y preocupados- no podemos entregarles a Milekha, pero tampoco podemos dejar a Helene con ellos...-

Entréguenme- les dijo Milekha- ya veré yo lo que hago...-

Esa no es una opción- dijo Milo.

Tengo que volver con ellos- dijo Milekha- a menos que ustedes puedan sacar a Helene de entre más de mil soldados, no veo otra opción-

De todas maneras, eso no los detendrá. Necesitamos también traer al príncipe Iván, y él está al sur de Rusia, como dijiste- dijo Mu.

Podemos ir a Rusia por él...- comenzó Milo.

No podemos estar en dos lugares al mismo tiempo- dijo Camus- Milekha es la única que sabe donde encontrarlo, pero no podríamos ir y volver antes de que se termine el plazo que nos dieron...-

Tengo una idea- dijo Lily de pronto. Los caballeros y Milekha la miraron.

¿Qué se te ocurrió ahora, amor?- preguntó Mu.

Muy simple- dijo Lily- Camus y Milekha irán por el príncipe a Rusia...-

¿Y si llegamos demasiado tarde para el intercambio?- dijo Milekha- ¿qué pasará con Helene?-

A eso iba- dijo Lily- si llegan tarde, yo me haré pasar por ti, Mu por el príncipe Iván y Milo por Camus...-

Todos los presentes miraron sorprendidos a Lily.

No podemos hacer eso, Lily- dijo Milekha, cruzando los brazos- es muy arriesgado para ti, sobre todo si llegan a descubrirte...-

Milekha tiene razón, Lily- dijo Mu- es muy arriesgado para ti...-

Pero es la mejor opción que tenemos hasta ahora- admitió Milo pensativo- excepto por el riesgo que corre Lily si lo hace...-

¿Estás segura, amor?- dijo Mu, poniendo sus manos en los hombros de ella- ¿sabes el riesgo que corres?-

Lo sé - dijo la hechicera con resolución.

¿Pero cómo lo harás?- dijo Milekha- nuestros cabellos son casi del mismo tono, pero es imposible que no te reconozcan...-

Como respuesta, Lily sacó su vara de mango dorado y se dio un golpecito en la cabeza. Milekha vio con asombro como la hechicera frente a ella se convirtió en su clon.

No puedo creerlo- dijo Milekha al verla, abriendo los ojos grandemente.

Más vale que lo creas- dijo Lily, mientras que se daba otro golpecito para volver a ser ella misma.

Quieran o no- dijo Milo- es lo mejor que tenemos hasta ahora... yo estoy de acuerdo-

Entonces lo haremos así- dijo Camus- Milekha y yo partiremos en una hora, no tenemos tiempo que perder... iré a hablar con Saori, porque necesitaremos el jet-

Y mientras tanto- dijo Lily, volviéndose hacia la princesa rusa- tienes una hora para decirme todo lo que necesite saber sobre ti para que no me descubran...-

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

Después de las explicaciones que Milekha le dio a Lily para ayudarla en su farsa, ella y Camus tomaron el jet de Saori rumbo al sur de Rusia para buscar al príncipe Iván. Los dos iban mortalmente callados.

¿Crees que tengamos problemas para encontrarlo?- preguntó Milekha, rompiendo el silencio de pronto.

Lo dudo- dijo Camus- me dijiste que él te dijo que se refugiaría en la ciudad de Smolensk, ¿no?-

Así es- dijo Milekha, recordando la plática que ella e Iván habían tenido, cuando acordaron escapar del palacio de Moscú.

Solo espero no perder mucho tiempo- dijo Camus- no me gustaría que Igor descubriera a Mu y a Lily. Su venganza puede ser terrible. Mu puede defenderse, pero Lily...-

Creo que estás más preocupado por tu hermana- dijo Milekha- está bien, yo también me sentiría mal si algo malo le sucediera a mi hermanito Alexéi...-

Camus suspiró. De verdad mataría a Igor y a Boris Balcov con sus propias manos si algo malo le sucedía a su hermana Helene...

x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x

CONTINUARA...