Hola!! Vais a pensar que no tengo nada mejor que hacer que escribir fics jejeje. Pues no es así! Es que estoy de exámenes y comiendo mucho chocolate (ya se sabe, quita las penas). Escribir es mi vía de escape. Por cierto, el final del último capítulo (si, el tomate Ron/Herm) esta un poco mal escrito porque iba a toda pastilla... Sorry, sé que faltan comas y que no es de mis mejores redacciones. Ahora mismo debería estar estudiando Cultural pero... ayer tuve un sueño revelador con todo el final del fic. Sip. El final... ya termina... snif snif... tampoco os quiero eternizar... ¿¿o si?? Muaks.
PadmaPatilNaberrie: Ay mi niña... que leí tu review cuando ya había colgado el capítulo... no me olvide de ti que conste. Hubo tomate! Tomate, Tomate... Bueno pues para ti va dedicado este capítulo por maja y simpática. Muaks
ophelia dakker: ¡¡Déjate de reverencias que me vas a sonrojar!! Jajajaja, muchísimas gracias por el review. Un beso gordísimo y... qué pasará desues de....? Ahhhh, ahora lo sabremos... Muaks!
amsp14: Hola Ana!! ¿Por qué soy mala? Si yo soy un angelito... Jamás había oído la expresión "muerde quedito" ¿significa que le gustan todos? Pobre Luna... dale una oportunidad... que se explique... jejeje. Muchos besos guapa.
banshee87: Hola, hola!! Te gusto el final? Me alegro! Qué quieres exactamente de Herm con Draco ¿tomate? ¿pareja? Yo creo que estos dos están entablando cierta "amistad" y no sé... ¿me atrevería a decir que Malfoy está comenzando a sentir respeto por Herm? Muchos besoss.
Gaby Weasley: Jejeje, hola guapísima, ¿crees que cambio la historia muy rápido? Es que vosotros no sabéis lo que yo sé! Es un secreto que lo está dejando de ser por momentos... no has entendido nada... pero tranqui enseguida lo averiguarás... Muchos besossss y me alegro de que te guste!
Nenufar: Hola guapa, guapísima! Tengo verdaderos problemas con la arroba el dichoso quick me la esconde! Bueno, bueno muchas de nada por el tomate me alegro de que te gustara. Y si, la despedida fue muy fría pero porque como dijo nuestro Ron esa noche no existía... Por cierto!! Tengo dos mensajes para ti! Chiquilla me los tienes a todos revolucionados! Bueno mas bien son telegramas. Ron: Nenu, no te fies de las apariencias. Muchos besos. Ron Draco: Es tu día de suerte Nenufar, Draco Malfoy alias "pedazo de pivón" te manda un beso por apreciar su belleza. Ciao Amore. ¿Como se te ocurre llamar a Malfoy pedazo de pivon? Lo que me faltaba. Muchos besossss wapisimaaa.
Tbata: Hola!! Ya he arreglado lo de los reviews anónimos. Muchas gracias. Sé que os vuelvo locos con tanto cambio repentino, jejeje, al menos te gusta. Y sip, Herm como verás en este cap, era virgen (por eso lo del dolor... cachis tenía que haberle puesto mas énfasis) Ta muy loca pero lo mas que había hecho era el magreo con Malfoy (QUIEN LO PILLARA) Muchos besosssssss.
Krlota Riddle: Mi niñaaaa desde cuando me llamo Patrix?? Jajajaja, a estas altura y no te sabes mi nombre? (Carlota no bebas tanto tequila...Luna no es mala, Luna es muy inteligente lo que pasa que nadie se entera, grrr, pero no sufras... TODO SE SABRÁ. Muchos besitos amore mio. ¡Y sigue con tu fic!
Annie Malfoy Merodeadora: Holaa!! Jejeje, me alegro de que te gustase el último capitulo. ¿Qué pasara con esta noche? Aahhh, ¿Y con Ron y Luna? Aaaahhh, soy mala... tranqui en este cap te enterarás de casi to. Muaks mu grandes,
padma721: Hola, Hola! Gasias por tu review. Luna no es ninguna puta, es más, a mí me cae estupendamente .... ya te enterarás. Te gustó el super plan Malfoy? Típico de él! Jejeje, bueno un beso muy grande y muchas gracias.
Dorian Crow: Hola!! Me imaginaba que eras chico, perdona si alguna vez te he tratado como chica (creo que no lo hice pero por si acaso) Gracias por aclarármelo, muy bueno tu comentario sobre Ron y Luna (chico listo) Gasias por leer y por los reviews. Un besazo.
Capítulo 12: Una gota de sangre
- Buenos días, soy tu despertador automático. ¡¡DESPIERTA, DESPIERTA, DESPIERTA, DESPIERTA!! – Hermione dio un gran bote en la cama cuando Ginny apareció brincando y voz en grito sobre su cama. La pelirroja reía como una loca y se la veía resplandeciente.
- Gin... que pasa... – dijo con voz de sueño la castaña- es muy pronto...
- Tenemos muchísimas cosas que hacer Herm. Comprar pintalabios, perfume, sombra de ojos, pendientes, quizá algún colgante, y lo mas importante... ¡¡Un vestido!! – Ginny bajó de la cama de su amiga y comenzó a buscar por la habitación ropa para que Hermione se vistiera.
- Ginny, ¿has estado bebiendo? ¿De qué narices estás hablando? – La pelirroja se quedó quieta delante de su amiga chasqueando la lengua y negando con la cabeza.
- ¿Vives en Hogwarts Herm? Es viernes. Tenemos el día libre para ir de compras. ¡Solo quedan dos días! – Ginny le arrojó un papel a la cama y continuó sacando ropa para su amiga del baúl.
Hermione leyó el papelito que Ginny le acababa de tirar a la cama.
¡¡GRAN FIESTA ROMEO Y JULIETA!!
Enemigos por un apellido, Romeo y Julieta fueron unidos por el amor a pesar de tener el mundo en contra. ¡¡Porque los enemigos se conviertan en amigos!! Happy Lovegood se complace en invitar a todos los estudiantes de Hogwarts a la gran fiesta Romeo y Julieta, donde entre enemistades, surgirá el amor. Este domingo a las 6 de la tarde en el gran salón.
- Solo a Happy Lovegood se le podía ocurrir una idea así – comentó la castaña con el gesto torcido. Ginny se echó a reír.
- Herm, perdemos un día de aburridas clases, ganamos una fiesta con todo Hogwarts, ¿sabes la de chicos que habrá? ¡¡VIVA HAPPY LOVEGOOD!! – Gritó la pelirroja – Venga toma, vístete, tenemos que llegar las primeras para elegir los mejores vestidos. ¡Lavender y Parvati ya se han ido! – Hermione arqueó las cejas, Ginny recogía todo la ropa que se encontraba esparcida por el suelo.
- Un momento... – dijo la pelirroja recogiendo una camisa blanca mucho mas amplia de lo que su amiga usaba – esta camisa... no es tuya Herm – la castaña dio un respingo – ¡¡Por Merlín!! – gritó Ginny tirando la camisa al suelo – ¡Tiene una W bordada!
- Gin, Gin, Gin, Gin... por favor, tranquilizate. No es lo que crees...
- ¿No es de mi hermano? – preguntó escéptica.
- Si, si es de tu hermano... Bueno vale, ¡lo siento! Si que es lo que parece.
- ¿Tu y Ron habeis...? – dijo tímidamente la pelirroja. Hermione bajó la mirada al suelo y asintió con la cabeza. Ginny continuó hablando – Y... ¿que tal fue?
- ¿Y qué tal fue? – preguntó asombrada la castaña - ¿Y qué tal fue? Ginny, Ron tiene novia. ¿Me oyes? ¡Tiene NOVIA! ¿Cómo puedes preguntarme qué tal fue?
- Ah, si claro... Luna... – Ginny parecía haberse olvidado completamente de la situación de su hermano. Miró a su amiga con pena. Hermione no dejaba de mirar al suelo y una lagrima le resbalaba por la mejilla.
- Ginny... – A Hermione no le salían las palabras- no significó nada... ni siquiera me miró a los ojos al despedirse de mí... – La pelirroja abrazó a su amiga con fuerza intentando consolarla mientras maldecía al idiota de su hermano.
- Herm.. ya pasó... venga... irnos de compras te levantará el ánimo. Gastemos todo lo que podamos, ¿Quién necesita a los tios? – La castaña se secó las lagrimas y forzó una sonrisa. Ginny le besó en la mejilla – Venga vístete y vámonos ya. Desayunaremos por ahí.
- ¿Y qué hago con la camisa? – preguntó Herm con un hilo de voz. Ginny la cogió.
- Ya se la devuelvo yo. Tú vístete amor, ahora mismo vengo a buscarte – La pelirroja salió de la habitación con la camisa en las manos y se dirigió muy enfadada a la habitación de los chicos.
- ¡Ronald Weasley! – Ginny entró en la habitación sin llamar y con un tono de voz que recordaba bastante al empleado por la Señora Weasley cada vez que tenía que regañar a uno de sus hijos. En la habitación de los chicos Dean Thomas, Neville y Harry se encontraban en calzoncillos. La pelirroja no se avergonzó y continuó hasta la cama de su hermano. Ron seguía durmiendo.
- Cinco minutos mas... – protestó el pelirrojo entre las sabanas. Ginny le lanzó con furia la camisa a la cabeza. Ron despertó de golpe al reconocer su camisa. Los ojos azules de su hermana brillaban de enfado.
- ¿Hasta cuando piensas seguir con esta farsa? – le reprendió Ginny. Ron agachó la cabeza y no contestó. La pelirroja emitió un grito de desesperación y salió como un rayo de la habitación de la misma manera que había entrado.
- Ginny tiene razón – comentó Harry – deberías hablar con Herm.
- Primero tendré que hablar con Luna – resopló Ron arrepentido.
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Hermione y la pelirroja habían estado dando vueltas por el callejón Diagon de arriba abajo sin encontrar nada, todo el callejón estaba repleto de alumnas de Hogwarts con el mismo propósito que el de las dos amigas. Rendidas, se sentaron en una terraza dispuestas a tomarse dos batidos extra de chocolate tamaño gigante. Ginny no hacía mas que decir tonterías a la castaña para intentar animarla, y poco a poco parecía que lo conseguía. La compañía de su amiga y las grandes dosis de chocolate y azúcar que el batido tenía, reconfortaron a Hermione que ya comenzaba a pensar en el baile del domingo.- Siempre podemos llevar algo que tengamos por el armario – dijo la castaña refiriéndose al vestido. La pelirroja puso cara de pena provocando que Hermione riera. Una voz masculina ciertamente sensual se unió a la conversación de las chicas.
- Qué hacen estas dos preciosidades aquí sentadas en vez de ir de compras – Las dos chicas se giraron hacia la voz que les hablaba. Era Blaise Zabini, un atractivo slytherin que tenía un ojo azul y otro verde. Ginny le sonrió.
- Hola Blaise – el tono de voz de Ginny era extrañamente familiar. Hermione la miró inquisitivamente. Ginny volvió a sonreir – ¿Blaise conoces a Hermione?
- Si, es de mi curso, y la he visto no hace mucho por slytherin, ¿verdad Hermione?- Zabini guiñó un ojo a la castaña. Hermione sabía perfectamente que Blaise había estado presente cuando Malfoy la besó en la sala de slytherin. Le sonrió algo nerviosa.
- ¿Estás solo? – le preguntó Ginny – te puedes unir a nosotras si quieres – La pelirroja miró con cara de súplica a Hermione. Esta sonrió dándole a entender que no le importaba.
- Me encantaría – contestó Blaise- pero he venido con Draco Malfoy, no creo que sea una buena idea... – dijo mirando a Hermione. Ginny emitió un sonido de resignación. Detrás de ellos una voz habló arrastrando las palabras.
- A mí me parece una muy buena idea – sonrió Draco – Wesley, Sangre sucia- dijo saludando a las chicas. La pelirroja retorció la boca ante el último comentario del slytherin, Hermione evitó sonreir. En público Malfoy era así.
- De acuerdo- aceptó Zabini – qué tienda quieren ver las bellas damas para elegir un bonito vestido. ¿Harapos finos? – Malfoy puso cara de asco y, típico en él, chasqueo la lengua.
- Salgamos al Londres muggle, será mas divertido y dudo que haya tanta gente como aquí – sugirió el rubio.
- Claro que no habrá tanta gente. Está prohibido – le recordó Hermione reprobatoriamente .
- ¿¿Y.......?? – sonrió el chico. Zabini y Ginny se mostraban encantados con la idea. Hermione arqueó las cejas y finalmente sonrió accediendo.
Los cuatro chicos salieron del callejón Diagon a hurtadillas. Tras salir del mundo mágico Ginny alucinó cuando Draco Malfoy le ofreció su brazo a Hermione. Blaise no parecía sorprendido. Hermione aceptó gustosa el ofrecimiento del slytherin. Delante de ellos Ginny y Blaise también cogidos del brazo conversaban animadamente.
- ¿Qué tal anoche Granger? – le preguntó Draco. Hermione bajó la mirada con tristeza - ¿No funcionó mi plan?
- Si, bueno, tu estuviste genial, muchas gracias- Malfoy alzó la cabeza con orgullo- Pero Ron y Luna van a seguir juntos pese a todo...
- ¿Eso te ha dicho el pobretón?- preguntó el rubio- Joder, ese imbecil no se entera de nada – murmuró con los dientes apretados
- ¿Cómo dices? – preguntó Hermione.
- Nada, cosas mías. Parece que tu amiga ha encontrado una tienda – comentó el chico mientras observaba como la pelirroja se separaba de Zabini y corría hacia un escaparate.
Los chicas entraron en la tienda para disgusto de los slytherin ya que no era nada ostentosa ni lujosa. Era una tienda de aspecto sencillo y limpio repleta de ropa por todas las paredes. Además para placer de la pelirroja el precio era muy asequible. Ginny comenzó a cargar a Blaise con todos los vestidos que encontraba. La cara de Zabini era todo un poema. Hermione, separada de Malfoy observaba con cuidado y detenimiento vestido tras vestido. Descolgó finalmente uno de la percha: Un vestido con escote palabra de honor largo hasta los pies en color verde. Malfoy apareció detrás de la castaña.
- Bonito color. Buena elección Granger- Hermione sonrió-Ya lo estoy viendo, una gryffindor vestida de slytherin bajo la atenta mirada de todos los alumnos. Lleva del brazo a un Hufflepuff y ya sería total – le sugirió el rubio.
- No voy a llevar a nadie del brazo, pienso ir sola – comentó la chica.
- Me rompes el corazón Granger – dijo el slytherin de forma dramática – Y yo que pensaba invitarte porque me dabas pena.
- Delante de todo Hogwarts – rió la gryffindor- ¿Y tu reputación?
- ¿Qué importa mi reputación si vas llevas ese vestido tan sly? Yo también iré solo. Abierto a todas las posibilidades – Malfoy sonrió seductoramente – Venga pruébate el vestido, igual no entras.
Hermione se probó el vestido. Era precioso, y de su talla. No se lo pensó mas veces. Echó un vistazo a su amiga que se estaba probando el sexto. Un precioso vestido azul de tirantes largo y muy sencillo adornaba el cuerpo de su amiga. Hermione la piropeó, Ginny complacida decidió llevárselo.
- Volvamos a Hogwarts – dijo la pelirroja radiante de felicidad por sus compras. Cogió a Zabini del brazo y echaron a andar. Hermione no pudo reprimir su curiosidad.
- ¿Zabini y Ginny...? – preguntó la castaña a Draco. Este se echó a reír.
- Son amigos Granger. Zabini es gay. Ginny lo sabe, le pilló con un chico el curso pasado. Ella guardó su secreto y desde entonces Zabini aprecia mucho a tu amiga.
- Vaya – exclamó Hermione sorprendida ante la revelación – ¿Quien lo iba a decir? ¿Tu eres gay Malfoy?
- Precisamente tu Granger deberías saber que no – se molestó el rubio – casi una semana haciendo un trabajo sobre mí... ¿y ahora me preguntas esto? Indignante.
- Draco Malfoy es un dios del sexo heterosexual, un líder nato y el mas popular de todos los estudiantes de Hogwarts – dijo la chica como si se tratase de un discurso. El slytherin sonrió complacido.
- Antes de que lleguemos al castillo... – dijo el chico mientras sacaba algo de un bolsillo del pantalón-... esto es para ti – Malfoy le entregó una cajita.
Un precioso colgante rojo en forma de gota de sangre apareció en la caja. Una cadena muy fina sujetaba la gota de sangre. Hermione abrió la boca sorprendida y miró al slytherin sin saber que decir.
-La gota de sangre es por lo de sangre sucia... quedará bien con el vestido. Te lo advierto Granger, no te emociones y no se lo cuentes a nadie, solo es un colgante de poco valor – El tono de Malfoy mostraba indiferencia. Hermione le sonrió, sabía que aunque el rubio jamás lo reconociera, le apreciaba a su manera.
- Guardaré tu secreto – prometió la castaña.
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Hermione no volvió a pensar en el pelirrojo ni en lo sucedido la noche anterior hasta que regresó al castillo. Acababa de dejar todo en su habitación, cuando, al bajar a comer, se encontró con Ron en la sala común. La chica se quedó quieta y miró a su amigo. Ron, sentado en el sofá, le hizo una señal con la mano para que se sentara a su lado. La castaña así lo hizo. Nada mas sentarse notó como el olor del pelirrojo la envolvía al igual que la noche anterior. Ron habló:- Quería hablarte de lo de anoche – comenzó el pelirrojo, su voz era seria – quería decirte que siento lo que ocurrió – Hermione notó como algo se rompía en mil pedazos dentro de ella – Se supone que la primera vez para una chica debe ser especial, con alguien del cual estés enamorada, con sentimientos. No debería ser simplemente sexo. Siento que no haya sido así – Ron se levantó y se dirigió hacia su habitación sin mirar hacia atrás. Hermione no pudo reprimir por mas tiempo las ganas de llorar.
- Para mí fue especial – sollozó en voz baja mientras lloraba. No quería que el pelirrojo la escuchase. Sin embargo Ron, frente al pasillo que conducía a las habitaciones de los chicos, paró en seco. Lo había escuchado. Sin mirar a su amiga cambió de dirección y, a paso decidido salió de gryffindor.