MEMORIA

Acostado sobre su cama, miraba fijamente el techo de su habitación, mientras sobre su pecho, sus manos estrujaban unos pliegues de pergamino.

-"No... realmente nunca me escribió ni una mísera palabra sobre amor... pero... ¿en que momento comencé a dejar que mi imaginación fantaseara de esa manera?... ¿será que mi ego ha crecido tanto?... tanto como para haber dejado que mi mejor amigo creyera algo que no es verdad.

Cerro los ojos, y los recuerdos de aquella tarde le golpearon con fuerza.

Harry recién se había despertado, y miraba por la ventana de la habitación que ocupaba en el Hospital San Mugo.
Hacia ya tres día que todo había terminado.
Voldemort estaba muerto. Y ahora él era un héroe.

-Pero... ¿realmente lo soy?... dijo el joven mientras volvía a leer el encabezado del Profeta.

"HARRY POTTER, EL NIÑO QUE VIVIO, HA VENCIDO DE UNA VEZ Y PARA SIEMPRE AL MAGO TENEBROSO LORD VOLDEMORT:
En un acto de astucia y valentía nuestro aguerrido mago ha salvado a la comunidad mágica de Gran Bretaña y del mundo entero de la amenaza que significaba Lord Voldemort. Arriesgando su vida no solo derroto al maléfico mago tenebroso sino que también salvo de una muerte segura al Señor Ronald Weasley y al Señor Draco Malfoy, convirtiéndose así en un Héroe..."

Harry miro a su alrededor, la habitación estaba llena de hermoso adornos florales, y miles de obsequios habían sido enviados por todos los magos y brujas que realmente lo consideraban el héroe que aquella publicación describía.
Sin embargo en el fondo de su corazón, él sabia que se estaba llevando una gloria que no le pertenecía.

-Harry...

Hermione estaba en la puerta. Había entrado sigilosamente.

-Hola... dijo Harry con una sonrisa.

-¡Que alegría!... ya te has levantado... dijo Hermione corriendo a sus brazos.

Se miraron por unos segundos, antes de que sus labios se buscaran para consumar un deseado beso.

-¡Oh Harry!... he estado tan preocupada... pensé que no te repondrías... dijo Hermione dejando descansar su cabeza en su pecho... pero el curandero tenia razón... ya has pasado lo peor.

-Gracias por estar aquí Hermione... dijo Harry acariciando sus cabellos castaños... gracias por no abandonarme.

Volvieron a besarse y se acariciaron lentamente, dejando que cada sentido se extasiara a su libre albedrío.
Un golpe fuerte y seco los hizo separarse.
Ronald Weasley acaba de entrar en la habitación y había azotado la puerta tras él.

-¡¡Ron!... dijeron al mismo tiempo Harry y Hermione, mientras él se limpiaba los labios de lápiz labial y ella bajaba la mirada con el rostro ruborizado.

-Lamento interrumpirlos... dijo Ron con voz áspera.

-Ron podemos explicarte... dijo Harry con nerviosismo... en realidad debimos haberlo hecho hace tiempo... pero... bueno... con todo lo que ha pasado.

-Si... Ron... deja que te expliquemos... dijo Hermione levantando su mirada hacia el joven pelirrojo.

-Necesito hablar con Harry a solas... por favor Hermione serias tan amable... dijo Ron con una mirada fría.

-¡No!... yo también necesito hablar contigo... dijo Hermione encarándolo... es preciso aclarar las cosas.

-¡¡Yo no tengo nada que aclarar contigo, tu actitud lo ha dicho todo!... dijo Ron con furia... ¡¡es con él con quien tengo que aclarar algunas cosas!.

El dedo anular de la mano derecha de Ron apuntaba al pecho de Harry de forma amenazadora.

-Espera un momento afuera Hermione... dijo Harry sin apartar su mirada de Ron...

-Pero... ¡yo tengo derecho a opinar!... dijo Hermione molesta... mis sentimientos también cuentan... ¡yo no soy un objeto que ustedes se van a disputar!.

-Y... ¿quien ha dicho que tu eres el motivo de esta discusión?... dijo Ron de forma ofensiva... no eres tan importante... ¡al menos no para mi!.

-¡¡Ron por favor!... dijo Harry alzando el tono de su voz... entiendo que estés molesto con todo esto... pero eso no te da derecho a hablarle así a Hermione... ante todo ella es una dama.

-¡No vengas a darme lecciones de moralidad, ni de buen comportamiento Harry Potter!... no ahora... dijo Ron con el rostro rubicundo por la ira... quiero una conversación de hombre a hombre... o es que tengo que hacer una audiencia para hablar con el Señor Héroe...

-YA BASTA RON... grito Harry ofendido.

-¡¡YA BASTA TE DIJO YO A TI!... respondió Ron con mayor fiereza... ¡¡no te es suficiente la gloria y la fama que tu acto heroico te ha dado... que también tienes que quitarme el amor de la mujer que siempre he amado!

Harry trastabillo y debió apoyarse de la pared para no caer. Bajo la mirada. Aquellas palabras fueron como una bofetada, tanto para él, como para Hermione que se había dejado caer sobre la cama

-Ron... dijo Hermione entre lagrimas... no es así... yo...

-¡¡CÁLLATE!... ¡¡no tengo nada que hablar contigo... ya no me importa lo que digas o pienses... para mi eres nada... eres nadie!... grito Ron sin medir sus palabras

Hermione sintió un ahogo, no podía respirar y las lagrimas corrían sin pudor por sus mejillas. Abandono la habitación sin demora.
Harry intento seguirla pero Ron lo detuvo con un golpe de su mano cerrada en un puño sobre su pecho.

-No... no... usted no va a ninguna parte Señor Potter...

-Ron por favor... no es el momento... dijo Harry confuso ante aquella actitud violenta de su amigo... cuando estés mas calmado, quizás...

-¡¡NO!... ¡es ahora!... porque yo quiero que sea ahora... no cuando tu digas... dijo Ron tomándolo con violencia por las solapas de la túnica... ya me canse de ser tu sombra... me canse de ser "el amigo de Harry Potter"...

-Ron... ¿cómo puedes decir eso?... dijo Harry aun mas confundido... hace tan solo tres días arriesgaste tu vida para salvarme...

-¡¡Ah!... ¡el Señor Harry Potter recuerda ese pequeñísimo detalle!... dijo Ron con sarcasmo mientras soltaba con desprecio a su amigo... ¡¡bravo!... ¡¡el Señor Potter ha recordado!

Ron acompaño de sus palabras de frios aplausos.

-Pero bien que tuviste cuidado de no mencionar mi nombre en el relato de tu historia... dijo Ron dolido... claro... es comprensible... dos héroes en una misma batalla no es muy convincente...

-Sabes muy bien que yo no he dado ningún tipo de declaraciones... dijo Harry tratando de defenderse ante aquellas acusaciones... hoy es cuando he podido levantarme de la cama.

-A mi no me vengas con esos cuentos... dijo Ron con voz fría... te conozco muy bien... además no es de eso que vine a hablarte... el tiempo se encargara de desenmascararte...

Ron saco del bolsillo de su túnica una caja pequeña de forma cúbica, la lanzo contra el pecho de Harry, al tiempo que este trataba inútilmente de atraparla entre sus manos.
La caja cayó al suelo y su contenido salió fuera. Era una medalla de forma ovalada con un ave fénix rodeado de hojas de laureles.

Harry miro a Ron con sorpresa y miedo. No se atrevía a levantar la medalla del suelo.

-¡¡VAMOS... TÓMALA!... grito Ron furioso... ¡eso es lo único que te falta por despojarme!... quédatela... te la regalo... ya no me interesa...

-Pero Ron... por favor esa medalla es tuya...dijo Harry molesto... no seas orgulloso... tu eres el Jefe de la Orden del Fenix... porque eres el mejor...

-¡¡NO SEAS HIPOCRITA!... grito nuevamente Ron... crees que no se lo que piensas realmente... crees que no se que añoras mi puesto... tanto como has añorado tener a Hermione entre tus brazos...

-Estas confundido... dijo Harry comenzando a desesperarse ante la actitud de su amigo... yo no... yo nunca...

-¡Tu... Harry Potter... eres despreciable!… dijo Ron con repulsión... siempre con ese aire de niño bueno... de niño huérfano indefenso...

Harry no podía dar crédito a lo que oía. No podía creer que aquellas palabras fueran pronunciadas por su mejor y único amigo.
Sin embargo un brusco cambio en Ron, le hizo retroceder unos pasos.

-Pero... dime Harry... ¿por qué?... ¿por qué?... dijo Ron entre sollozos convulsivos... ¿por qué Hermione?... ¿por qué ella?... ¡si tu puedes tener a cualquier otra!... ¿por qué ella?... ¡si ella era mía!... ¡si yo la amo como tu jamás llegaras a amarla!

-Amigo mío... comenzó a decir Harry en un susurro.

-¡CÁLLATE!... grito Ron otra vez ofensivo, mientras se secaba con violencia las lagrimas que empachaban su mirada... ¡hoy... por mi honor te juro Harry Potter... que jamás olvidaras mi nombre!

Los pensamientos de Harry regresaron al presente.
Se levanto despacio. Se sentía vació.
Ron había cumplido su palabras. Su nombre no había sido olvidado.
Cada día de aquel año vivido lejos en otra ciudad, el nombre de su mejor amigo no se había apartado de la mente de Harry.
Le había causado tanto daño por nada. Por una vana ilusión que termino convirtiéndose en un espejismo.
Tenia que hacer algo.
Tenia que buscarlo. Hablar con él.
Conseguir su perdón.

Harry se recostó de una puerta de madera. Mantenía sus brazos cruzados sobre su pecho.
Miraba alternativamente el suelo y la puerta.
Sentía por instantes el impulso de golpear con los nudillos de su mano derecha la madera. Sin embargo no estaba tan seguro de que fuera buena idea, despertar a esa hora a quien habitaba aquel departamento.
Pero se sentía tan solo. Y ella siempre había sido un refugio seguro, para escapar de su soledad.

Ginny estaba sumida en un profundo sueño, recién hacia varios minutos que había terminado unos informes que debía entregar el lunes a primera hora en el Ministerio de Magia.
De pronto despertó sobresaltada. Abrió los ojos con cautela. Podía sentir la presencia de alguien frente a la puerta de su departamento. Con un chasquido de sus dedos encendió la luz y mientras se colocaba una bata sobre su pijama, camino con paso vacilante.
Sin embargo a escasos metros de su destino, su corazón comenzó a latir emocionado, al comprender quien la esperaba afuera.

Harry dio un pequeño brinco al darse cuenta que el cerrojo de la puerta era abierto.
Un hermoso rostro salpicado de pecas apareció segundos mas tardes.

-¡Harry!... por Merlín... ¿qué ha pasado?... pregunto Ginny sorprendida.

-Disculpa Ginny... dijo Harry apenado... pero... no sabia donde ir...