Memorias de un Ser Alado

Por Roxana Janet

SUMMARY: OHAYO! Nuevamente, una historia de Chrno Crusade... en esta ocasión, la historia gira en torno a la vida de Chrno, su relación con Aion y sus compinches, antes de comenzar a ser llamado "Pecador"...

DISCLAIMER: DISCLAIMER: CHRNO CRUSADE NO ME PERTENECE! ... Si lo hiciera, Chrno tendría serios problemas psicológicos (risas desquiciadas de fondo, mientras el demonio mira en helado terror a Janet) ... si pudiera tener mas, claro está.. jejejeje... ñnUUUUU lo siento, tengo complejo de Satella, jejejeje...

Rango Teen por aquello del uso de malas palabras o probable contenido sexual...

Rosette abrió los ojos lentamente, al momento de sentir una calidez viniendo desde la parte inferior de su cara… sus labios húmedos haciendo contacto con los de ella de una forma tan tierna, que era imposible creer que el chico que en esos instantes dormía prensado de ella fuera un demonio… ya fuera por sueño o por que realmente le gustaba esa sensación, la rubia no hizo nada, simplemente disfrutó el momento, hasta que finalmente Chrno separó sus labios y apoyó su cabeza en la almohada, ocultando su rostro contra el cuello de la chica, dando un leve suspiro. El leve cosquilleo causado por el respirar del chico le hizo reir levemente, al momento que la muchacha simplemente le daba un beso en la frente, y nuevamente, cerraba sus ojos disponiéndose a dormir, sin lograr responder la pregunta que tenía en esos momentos rodeando por su cabeza… "¿qué estarás soñando, Chrno…?"

Finalmente, el día tan esperado había llegado, y como si el lugar pudiera predecir lo que estaba por ocurrir, el cielo se mostraba con nubes oscuras, al momento que el atardecer poco a poco iba consumiéndose…varias hordas de demonios, cada una por su dirección, habían comenzado ya a movilizarse hacia donde se llevaría a cabo la revolución que desde hacía siglos se había estado planeando, y que hasta ahora gracias a la dirección y al valor de Aion, se llevaría a cabo… por su parte, el demonio que respondía a dicho nombre se encontraba sentado sobre un montículo de piedras, mientras era observado por sus compañeros… su mirada seria y decidida podían dejar ver que estaba concentrándose en la batalla que pronto iba a comenzar, en cuanto dos cosas pasaran: la primera, en cuanto la noche cayera para dar inicio con el movimiento, y segundo, en cuanto una de las piezas claves del plan llegara… el demonio de cabellos platinados se puso pie, captando la atención de los demonios que estaban con el en ese lugar.

Durante años, hemos vividos sometidos bajo el látigo de la que se hace llamar nuestra reina, quien aún pese su poder y a su gloria decidió someterse ante el poder del cielo y de los que habitan en él, arrastrándonos con ella a un reinado de oscuridad, de esclavitud, donde ella misma ha comenzado a negar su propia naturaleza, considerando como pecado aquello que sabe es lo que nos da poder y autoridad… arrastrándonos, a un reinado donde la servidumbre somos nosotros, dejando que los demás nos aplasten como si no fuéramos mas que parte del suelo que pisan… donde incluso los humanos, debido a las actitudes que "ella" a tomado, parecen ser superiores a nosotros… pero ya no mas… - Aion levanta una mano hacia el cielo, mientras lo mira – yo lo destruiré todo… desde hoy, la era de los hombres ha acabado…

Una sonrisa se dibujó en el rostro del chico al escuchar el sonido típico del viento al ser cortado, girándose hacia el lugar de donde estaba seguro, provenía, esperando ver al responsable… y efectivamente, tras un par de segundos, una figura cayó de pie, pesadamente sobre el suelo, incorporándose a los pocos segundos, revelando su rostro de entre las sombras, encontrando su mirada con la del demonio de cabellos platinados, su lider, su hermano…

Aion… - pensó en voz alta Chrno, sin apartar si mirada de él… estaba a punto de ocurrir una masacre, ¿como podía tener esa sonrisa tan satisfactoria en su rostro? ¿como podía estar tan tranquilo? O la pregunta mas obvia en esos momentos… a Chrno jamás le había gustado pelear… entonces, ¿qué era lo que estaba haciendo ahí? Tal vez en esos momentos había respondido sin pensar demasiado, encontrado agradable aquella idea de poder escoger por si mismo todo lo que el quisiera, o tal vez quería consuelo por lo que había hecho ese día que Aion le había ido a buscar a las montañas… repentinamente, una extraña sensación le recorrió las mejillas, sintiéndolas arder… o doler mejor dicho… cuando buscó que era, pudo ver una fina mano garruda pellizcándole, al momento de hacer que bajara su mirada hacia la dueña…

Llegas tarde, ¿que estabas haciendo? – preguntó una molesta Sheda, con un gracioso puchero en su felino y aniñado rostro, mientras Chrno solo le miraba como si de un niño regañado se tratase.

She-Sheda…

Llegas tarde – la voz inexpresiva de Aion captó la atención de ambos adolescentes, logrando que Sheda soltara las mejillas del hermano de su lider, mientras que tras parpadear, Chrno y ella se giraran a mirarle; tras quitar de su camino a la gata demonio lanzándola despreocupadamente por un lado, Aión quedó frente a su hermano, al momento de tomar con una mano una de sus mejillas. El chico sintió un repentino temor invadiéndole.

Realmente… ¿realmente vamos a hacer esto? – su temor se incrementó al ver a su hermano, en el rostro de éste, una sonrisa malvada y maquiavélica.

¿Estas listo para saltar a la libertad…? – los ojos de Chrno se abrieron ampliamente, al momento que su pupila se contraía, sintiendo una extraña mezcla de sentimientos encontrados…

Nuestro sueño… - el demonio de cabello morado dijo ansioso, mirando fijamente a su hermano….

Asi es… tu podrías hacer lo que fuera por ello, ¿cierto? … - Chrno miró unos instantes a su hermano, para enseguida desviar la mirada.

Realmente… ¿está bien?… - preguntó Chrno, en su voz inseguridad y remordimiento. Aion notó esto al instante, al momento que desvanecía de su rostro aquella sonrisa malvada y ponía una mas cálida, al momento de con la otra mano, le acariciaba el pelo; esto tranquilizó un poco al demonio mas joven de los dos, al momento que cerraba los ojos y dejaba escapar un suspiro, liberando un poco la tensión… un golpe repentino llamó la atención de ambos demonios, y al girarse, vieron a Bit, que acababa de golpear uno de sus puños contra la palma de su otra mano.

HEY! HAGAMOS ESTO RÁPIDO! CUANTO MAS HAY QUE ESPERAR?

Paciencia Bit, pronto oscurecerá… jejejeje… - le calmó Aion, en su rostro de nuevo aquella sonrisa malvada. Chrno llamó a su hermano al momento que éste se giraba a mirarle, sus ojos suplicantes y temerosos, mientras que Aion solo le echaba una mirada, diciéndole "todo estará bien"… ante esa mirada, la demonio que se encontraba por un lado lamiendo sus afiladas garras no pudo evitar ruborizarse, mientras Jenai, que se encontraba por un lado de ella, comenzó a reir maquiavélicamente.

No puedo esperar, Rizzel… quiero destruirlo todo ya… quiero hacerlo… quiero hacerlo mas y mas… jejejejejeje…

Aion dijo que pronto será hora, tendrás que esperar… - le respondió la demonio tras haberse girado a él, volviendo su vista de nueva cuenta hacia el duo de demonios gemelos cuando un leve gemido de sorpresa alcanzó sus oidos, y al hacerlo, pudo ver la misma sonrisa maliciosa de hacía unos segundos en los labios del demonio de cabellos platinados, mientras éstos estaban a escasos milímetros de los del demonio de cabello morado, en los ojos de éste último, incertidumbre y ansiedad reflejados, mientras su hermano le miraba fijamente.

Chrno, te lo preguntaré una vez mas… ¿tienes el valor de saltar a la libertad? … - tras un par de segundos donde Chrno ni siquiera respiró ni parpadeó, finalmente hizo un sonido al momento de asentir con la cabeza, mirando firmemente a su hermano; Aion se separó un poco de él – eso es bueno… - y sin decir mas, le dejó ir, al momento que el chico se alejaba de él, caminando un par de metros delante de todo el grupo… tras detenerse y quedarse de pie un par de segundos, se dio la vuelta, quedando frente a frente con ellos - hermanos mios… observen muy bien a su alrededor… sientan cada hueso que pisen, inhalen cada partícula que esté en el aire, escuchen cada sonido que alcance sus oidos… por que ese, hermanos mios… será la última cosa que harán en este lugar… muy pronto, estaremos pisando tierras nuevas… muy pronto, tendremos una nueva vida! – ante estas palabras, los demonios vitorearon a Aion, quien sonreía orgulloso y altivo, mientras que Chrno solo bajaba la mirada, y se alejaba de ahí… el plan se llevaría a cabo cuando el círculo brillante se pusiera, y para eso, al menos faltaban un par de horas, asi que tenía tiempo para pensar…

Aún no podía creer lo que iba a hacer... simplemente no podía... tras sentarse apoyando sus codos sobre sus rodillas, mientras miraba el suelo, traía mas que nunca las mismas preguntas en su mente… ¿realmente estaba dispuesto a hacerlo? ¿realmente quería hacerlo? ¿por que no se había negado cuando había podido? ¿que iba a pasar si no era capaz de actuar como su hermano le había dicho? ¿que iba a pasar si el plan fracasaba? Chrno agitó su cabeza maldiciéndose así mismo. "A buena hora vienes a pensar eso, Chrno…!" "ahora que falta menos de una hora, no puedes echarte para atrás… tu hermano confía en ti, tienes que apoyarlo!" el chico levantó la mirada al cielo dejando escapar un gran suspiro, al momento de recargar su cabeza contra la pared rocosa, mientras que segundos después, cerraba los ojos, sintiéndose cansado...

Tu eres Chrno...? – una pequeña voz le bajar la mirada; al hacerlo, pudo ver a una niña demonio con un par de alas de murciélago sobresaliendo de la parte superior de sus orejas, mientras uno par de cuernos de carnero le salían de los laterales de la cabeza; tenía el cabello verde, un corte corto, y unos ojos color miel mirándole curiosamente. Chrno parpadeó un par de veces, como si recién hubiera despertado.

Kimi wa...? – preguntó Chrno, no pudiendo reconocer sus facciones... después de todo, si le hablaba con tanta familiaridad siendo un demonio, seguramente era por que ya habían tenido trato alguno...

Yo soy Maya! – respondió alegre la chica, al momento de mirar mas de cerca de Chrno, quien se hubiera echado hacia atrás de no ser que la pared se lo impedía – tu eres Chrno, verdad? – volvió a preguntar la chiquilla, al momento que Chrno finalmente asentía – YAJJJJJJJJJJJJJJUUUUUUUUUUUUUU! LO SABIA, LO SABIA! SABIA QUE ERAS TUUUU! – gritó emocionada la chiquilla, ahora así asustando al demonio de cabello morado; cuando la niña dejó de brincar, miró de nueva cuenta al chico, que parpadeaba rapidamente, sin saber a que venía tanta felicidad – jejeje, lo siento! Es que al mirarte, no pude evitar notar que eras idéntico a Aion-sama! – Chrno frunce un poco el ceño, no entendiendo muy bien las cosas – será genial si realmente eres tan poderoso como dicen! No puedo esperar a que comience!

A-Aguarda un segundo...! de que estas habland...

Tu deberías saberlo, el lider de todo esto es tu hermano, no?

S-si, lo sé, tu hablas de esta Revolución que se llevará a cabo en cuestión de minutos... – la chiquilla asiente – lo que no entiendo, es que tu que tienes que ver en todo esto...? es decir, eres muy pequeña...

Je, tal vez aún sea pequeña, pero mis deseos de ser libre son mas grandes que cualquiera de ustedes! Quiero salir, quiero explorar, quiero experimentar!

Tu también vas a pelear...? es decir... tienes idea de lo que esta "revolución" va a significar! – Maya asiente mientras mueve alegre las alitas de murciélago tras sus orejas – entonces como puedes estar tan tranquila! Muchos morirán! Como puedes estar ansiosa por que pase algo así! – el demonio la tomó por los hombros mientras clavaba su mirada en ella; finalmente, la niña solo dio un suspiro, mientras su voz se mantenía tranquila.

No quiero pasar toda mi vida encerrada aquí... no... mas bien... no quiero desperdiciar mi vida en este lugar... – Chrno se sobresaltó con estas palabras - Así que mientras pueda hacer algo por alcanzar mi sueño, haré lo que sea!

Como puedes estar arriesgarte tanto...? Ni siquiera es seguro que alcances a ver aquello que tanto anhelas... muchos no podrán hacerlo!

No todos los días se encuentra a alguien como tu hermano, asi que es por eso que muchos de nosotros, pese a que sabemos las consecuencias de lo que ésta batalla pueden significar, no tenemos miedo y le seguimos sin importar lo que pueda pasar... – se gira hacia él mientras cierra sus ojos y le sonríe – Chrno, al contrario de mi o de muchos otros, tu eres un demonio muy poderoso, asi que tu no deberías de tener miedo! – el demonio de cabello morado se heló ante estas palabras, mientras nuevamente sentía su mirada nublada y húmeda – Además, tu hermano estará cuidando de tu espalda si tu cuidas de la suya, así que no tengas miedo, que tú no estarás solo... – la chiquilla deja escapar un suspiro al momento de darse una vuelta – bien, tengo que irme, el circulo brillante está a punto de ponerse, me ha tocado proteger el sector 13° y no quiero fallar en mi misión ! Espero que nos volvamos a ver! Mientras tanto, cuídate y buena suerte! Ta-taan! – y sin decir más, se dio la vuelta mientras salía tarareando una cancioncilla. El demonio le miró en silencio por unos instantes.

MAYA! – llamó nuevamente Chrno, mientras la chiquilla se detenía y se giraba a mirarle, atendiendo el llamado - ... CUANDO TODO TERMINE, ME ASEGURARÉ QUE NOS DIVIRTAMOS ALGÚN DIA! – los ojos de la chiquilla se iluminan al momento que asiente.

ES UNA PROMESA, CHRNO! – y tras estas palabras, salió corriendo, mientras Chrno se quedaba mirando en esa dirección, al momento que dentro de sí, sabía que los motivos por los que iba a luchar, eran los correctos...

Tras dar un suspiro y dibujar en su rostro una expresión decidida, levantó vuelo y se dirigió a donde Aion, poniéndose a su lado, mientras éste giraba hacia él, con una sonrisa sádica y sus ojos y las tres gemas de su frente brillando al rojo vivo, al momento que daba un rugido, como la señal que todos esperaban para saber que el momento había llegado, mientras que al igual que el resto de los demonios, también rugía respondiendo al llamado de su hermano. Finalmente, sabiendo que era hora de actuar, Chrno extendió sus alas de nueva cuenta y levantó vuelo, al momento que tomaba una dirección ya conocida: la torre de Pandemonium.

Pronto hubo llegado a una zona restringida para muchos demonios... para muchos, pero no para él, no desde aquél día... pronto aterrizó en un amplio espacio, y observó el lugar, muy parecido a una colmena. Chrno dio una respiración honda, al momento comenzaba a avanzar, empezando a recordar cada parte del plan que Aion había trazado...

"Según los datos que hemos obtenido, hay 13 capas numeradas en orden ascendente rodeando al Pandemonium, las cuales van disminuyendo de fuerza y resistencia mientras mas cerca se encuentren de la superficie, comenzando desde el sector mas bajo pero mas fuerte, o sea el #1..."

Qué es donde está Pandemonium misma... – pensó para si Chrno, mientras que a la distancia podía ver en el centro de la gran colmena, una especie de pilar sobre el cual se podía apreciar la fina silueta de su reina. Por unos instantes se detuvo, sintiendo que en cualquier instante sufriría un ataque de nervios, sin embargo, decidió seguir avanzando.

"En cada sector, sin importar cuántos demonios haya, el requisito para poder pasar al siguiente nivel es vencer a 100 demonios de los rangos mas altos... sin embargo, no habrá problema, porque conforme el número de sector vaya aumentando, probablemente disminuirán también los poderes de los demonios que lo vigilan, mientras los diferentes grupos se encargan de ir abriendo camino hasta la capa superior, nosotros, Jenai, Rizeel, Bit, Sheda, Tú y yo, tendremos que actuar lo mas rapido posible en el sector 1 para lograr el objetivo primordial y mas difícil de la misión..."

Pandemonium... – pensó para sí Chrno, mientras pese a su paso firme, sentía cierto remordimiento dentro de él... después de todo era su madre... y aunque no podía olvidar lo que había pasado, sabía que no había sido culpa de ella totalmente... entonces, ¿por qué tenía ese pequeño sentimiento de rencor impulsándole para seguir avanzando?

Conforme se iba acercando, notó que sus pasos eran cada vez mas titubeantes, hasta que finalmente, no pudo avanzar mas, quedando a escasos 10 metros debajo del pilar donde estaba la mujer, misma que al sentir la presencia y la mirada sobre ella, se giró a verle, al momento que una sonrisa se dibujaba en su rostro.

Vaya, esto es algo que no esperaba... que te trae por aquí, Chrno? – llamó la mujer, al momento que el demonio se estremecía con el llamado.

Yo...– el joven demonio de cabellos violáceos desvió la mirada, mientras podía ver "los nidos" que contenían las futuras generaciones de demonios...

" - ¿Que va a pasar si Deufo y los vizcondes llegan a interferir...?"

" - Ellos no serán problema... estarán bastante ocupados con los "repentinos" alborotos que los grupos de Eros, Golbat y Belcebú estarán causando en la misma capa, asi que tendremos suficiente tiempo para llevar a cabo nuestro objetivo y salir del lugar antes de ser pillados..."

" -¿Crees que Pandemonium nos dejará atacarla sin poner siquiera un poco de resistencia? Sabes lo que su canto puede ocasionarnos a aquellos que nacimos de ella!"

" – Para eso estuvo trabajando Sheda... el campo magnético que su máquina activará cuando Pandemonium comience a cantar, formará un escudo protector que hará inaudible su canto por un lapso de 60 segundos, lo suficiente para realizar nuestro propósito..."

" - ¿Y yo que tengo que ver en esto como pieza clave...?"

" – Pandemonium sospechará inmediatamente si yo me acerco a ella no preguntando de lo mismo... es por ello que tu..."

Chrno? – llamó nuevamente la reina demonio, al momento que se giraba hacia el, con cierta duda en su rostro - ¿pasa algo?

¿Qué estoy haciendo..? – se preguntó Chrno dentro de si una vez mas, mirando al suelo, mientras los nervios nuevamente le invadían – no puedo hacer esto, NO DEBO HACER ESTO!

Chrno, que ocurre...! – insistió la reina nuevamente, mientras ésta vez había mas preocupación que impaciencia. El demonio de cabellos violáceos apretó sus ojos, sus colmillos y sus puños.

REINA PANDEMONIUM, LO SIENTO MUCHO, PERO DEBO HACERLO! – y antes de que la reina pudiera preguntar al no comprender lo que había querido decir Chrno, el demonio cargó esferas de energía en sus manos y las disparó a diestra y siniestra pero con un objetivo específico: los nidos.

La mirada estupefacta de Pandemonium no podía describirse, mientras llena de horror, seguía viendo como Chrno seguía disparando mas y mas rayos hacia los nidos... finalmente, en el rostro de la mujer se dibujó un gesto de ira, al momento que se giraba de nuevo al demonio que continuaba en su labor, hasta que una sensación como agujas atravesándole la cabeza comenzó a invadirle, deteniendo al instante su ataque y llevándose las manos a sus orejas, cubriéndolas, tratando de detener el espantoso dolor que le invadía, pero inútilmente... pronto cayó al suelo, revolcándose y gritando de dolor, sintiendo que la cabeza le iba a explotar. Justo en el momento en que sentía no podía más, el dolor cesó al momento que un ensordecedor y escalofriante grito se escuchaba por los aires, mientras su eco resonaba por el lugar rebotando entre las paredes que cubrían el lugar. Entre sombras y figuras que Chrno no pudo identificar bien en un principio debido a su aturdimiento, pudo escuchar el sonido de un objeto desplomándose pesadamente sobre una superficie, al momento que una carcajada sonaba por los aires... finalmente, tras ponerse de pie y levantar su mirada hacia el pilar, divisó la figura de su hermano que reía descontrolado... Chrno por unos instantes suspiró aliviado al ver que Aion había acudido en su ayuda, sin embargo, toda su tranquilidad se desvaneció cuando con su mirada al recorrer el cuerpo del mismo, lograba divisar el objeto que cargaba entre sus manos, ahora bañadas de sangre...

A-Aion... q-que... has hecho! – la voz temblorosa de Chrno y la mirada llena de horror del mismo era algo indescriptible; el demonio de cabellos platinados dejó de reir al momento de medio girarse inmediatamente a mirarle, la misma sonrisa sanguinaria que le había echado la vez anterior, las gemas de su frente y sus ojos brillando con un rojo intenso.

¿Por qué pones esa cara? Ahora ya nadie podrá castigarnos... jejejejejeje... JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA! – el demonio nuevamente comenzó a reir desquiciado, mientras Chrno trataba de digerir todo lo ocurrido... ahora por fin entendía a lo que Aion se había referido cuando hablaba de "la cabeza de la tonta" o "someter a Pandemonium".

Aion... mataste a Pandemonium... HAS MATADO A PANDEMONIUM! ACASO ESTAS... – logró articular finalmente Chrno sus palabras, mientras Aion solo trataba de calmarse.

Trata de calmarte un poco hermano, que este es uno de los precios que había que pagar, esta es una revolución después de todo, y alguien tenía que morir... ahora finalmente somos libres... jejejeje... – repentinamente, un par de explosiones comenzaron a escucharse por el lugar, al momento que cuando ponían su mirada a su alrededor, veían el motivo de las mismas.

L-Los nidos...! – exclamaba Chrno sin poder asimilar todavía lo que estaba pasando – L-La siguiente generación de demonios está...! – Chrno no logró evitar enfurecerse al escuchar a su hermano volver comenzar a reir – AION! SABIAS QUE ESTO IBA A PASAR! ACASO ESTAS INTENTANDO DESTRUIR LA OSCURIDAD!

Por que estás tan enfadado, Chrno...? – la voz de Rizzel llamándole le he hizo girar su mirada hacia atrás, donde el resto del grupo estaba, mientras Chrno solo apretaba sus colmillos.

Mira a tu alrededor... Todo se quema... se quema... jejejeje... – Jenai decía riendo también, mientras miraba emocionado a su alrededor.

Esto es genial...! – aprobó Bit golpeando nuevamente su puño contra su mano – no puedo esperar a que la verdadera libertad comience!

Todo lo que está por ocurrir va a ser muy divertido! – brincoteaba emocionada Sheda, al momento que aplaudía rapidamente.

Como pueden decir algo así después de lo que acaba de ocurrir...? – preguntaba en su interior Chrno, sin quitar el odio en su mirada ni ésta última sobre ellos, hasta el sonido de los zapatos de Aion haciendo contacto con el suelo llamaron su atención.

Tenemos lo que necesitamos! Ahora, salgamos de este lugar! – y sin decir más, mientras que en una mano traía sujetada con una especie de correas especiales la cabeza de la que había sido una vez la reina demonio, tras dar nuevamente un rugido indicando que habían cumplido su objetivo, levantó vuelo seguido de sus compañeros, Chrno reaccionando al último y aún pese al remordimiento en su interior tras echar una última mirada a su alrededor, finalmente les siguió...

Conforme iban pasando capa tras capa, Chrno era el único al que parecía afectarle el panorama desolado y los cadáveres de sus enemigos y de sus compañeros tirados por doquier... pasaron la capa 4, la 5, la 6, la 7... finalmente, sus ojos brillaron de emoción al ver que solo faltaban dos capas mas para poder salir de ese lugar; estando a punto de pasar la 12ª, un rayo estuvo a punto de golpear al chico de cabellos platinados le hizo detenerse, mientras que otro mas golpeó la superficie del lugar por donde estaba la grieta que les iba a permitir pasar al siguiente nivel. Cuando todos los demonios se giraron hacia el lugar de donde había provenido el ataque, se sorprendieron de ver al dueño...

¿Se dan cuenta de lo que acaban de hacer...! – la voz molesta de Deufo resonó por el lugar, mientras los demonios uno a uno comenzaban a descender hasta tocar suelo; finalmente, Aion bajó con la cabeza de Pandemonium en sus garras.

Je, has llegado un poco tarde Deufo, ¿no crees?...

Aion... eres tu! ERES UN MALDITO! TU Y TODO TU GRUPO ESTARÁN CONDENADOS POR EL RESTO DE SUS VIDAS! TU Y TODO TU GRUPO DE PECADORES! – El demonio que muy pocas veces se le veía alterado finalmente se mostró molesto, mientras que Aion, sínico como siempre había sido, solo se puso una mano en la cintura, mientras dibujaba una de sus características sonrisas burlonas.

¿Por qué te enfadas conmigo, Deufo? ¿Qué acaso no fuiste tu quien no defendió a su reina apropiadamente? – toma la cabeza de la reina mientras cierra sus ojos y frota su mejilla contra la de ella - ¿que diría Pandemonium de ti, que no estuviste ahí para protegerla...? oh, aguarda...! – abre los ojos mientras en seguida, pone una sonrisa divertida en su rostro y se encoge de hombros - no lo podremos saber ya jamás! Deberías estar agradecido conmigo de que jamás le volverás escuchar hablar, o de lo contrario seguro te mataría por tu incompetencia, no crees? JAJAJAJAJAJAJAJAJA!

Asi que finalmente llegará la hora de enfrentarnos con el viejo? – preguntó emocionado Jenai, mientras nuevamente formaba en su brazo las tijeras con las que tanto disfrutaba pelear.

Viejo? No...! Esta es una presa! – exclamó emocionada Rizzel también, mientras preparaba un par de afiladas garras en sus manos.

ELLOS DEBEN MORIR! – gritó Bit mientras se ponía en posición de combate.

La risa de Aion pronto se vio interrumpida al escuchar varios rugidos a la distancia, y su expresión burlona se tornó a una de preocupación al comenzar a ver llegar miles de legiones de demonios por todos lados; el grupo de demonios miró de igual manera a su alrededor.

Mira ese número... son demasiados! – exclamó Chrno bajando un poco la cabeza; el temor era evidente en sus ojos.

No dejes que la cantidad te asuste! Son solo demonios de bajo nivel! Démonos prisa en acabar con Deufo y prosigamos al siguiente nivel para junto con los que hayan sido capaces de sobrevivir, podamos acabar con los 100 demonios que necesitamos para salir de éste lugar! – ordenó Aion, al momento de ponerse en guardia también.

P-pero Aion...! – el demonio que respondía a dicho nombre se giró hacia su hermano, al momento de extenderle su mano.

Vamos Chrno, ya no puedes echarte hacia atrás... tu también eres cómplice... déjame usar tus poderes... – el joven demonio de cabellos morados solo dio un paso atrás, al momento de negar... sin embargo, en seguida, sus ojos reflejaron verdadero espanto.

CUIDADO! – gritó repentinamente Chrno al momento de levantar vuelo y quitarse, mientras que Aion como reacción, solo atinaba a girarse y ver a que le había huido Chrno, mientras veía a Deufo lanzándole un ataque; los demás demonios tampoco tuvieron tiempo de reaccionar, por lo que al igual que Aion, lo único que hicieron fue tratar de recibir el golpe de una forma que no les causara tanto daño.

Cuando el humo se disipó, había una gran grieta donde estaban los demonios, mientras que los primeros caían debilitados a causa del gran ataque, y en cuanto a Aion, lo único que éste hacía era retirar sus alas que había usado como escudo, al momento que no lograba mantener el equilibrio pese a estar hincado y se apoyaba en el suelo, mientras por un lado de su rostro, comenzaba a brotarle sangre; al levantar la mirada, por primera vez en mucho tiempo, sintió verdadero temor... estaba a merced de Deufo, que se dirigía velozmente hacia él, dispuesto a asestarle uno de los famosos golpes mortales que el duque poseía.

TE TENGO! – gritó triufante Deufo al momento de soltar el golpe, mientras Aion solo atinaba a cerrar los ojos y esperar el impacto, no pudiendo reaccionar.

AION! – la voz de Chrno se escuchó de pronto, mientras el chico abría sus párpados y miraba como su hermano menor había salido a su rescate, bloqueando el golpe de Deufo con uno propio, ocasionando una gran explosión.

CHRNO, REGRESA LA CABEZA, AÚN HAY TIEMPO! HAZLO POR LADY PANDEMONIUM, QUIEN INSISTIÓ EN NO HACERTE DAÑO AQUELLA VEZ! – le gritó Deufo aún en su choque de puños, mirando al joven demonio, quien nuevamente recordó a Pandemonium y ese día, al momento que sentía de nuevo ese pequeño rencor en su interior.

LOS SENTIMIENTOS NO TIENEN NADA QUE VER EN ESTO! ESO ES UNA REVOLUCIÓN! – Aion sonrió ante estas palabras, mientras que tras un par de segundos, ambos demonios se separaban y caía cada uno por su lado; Chrno cayó delante de su hermano, en una posición defensora, al momento que Aion se ponía de pie, y miraba a su hermano con mas orgullo que nunca.

NO ENTIENDES NADA! DEBÍ SUPONER QUE ERAS IGUAL QUE AION! – gritó fúrico Deufo, al momento de señalar al pequeño grupo – MATENLOS A TODOS! LEGIONES, HAGAN SU TRABAJO! NO DEJEN A NADIE VIVO!

Y finalmente, las hordas de demonios comandadas por Deufo comenzaron a atacar al pequeño grupo de rebeldes, mientras que pese a que no eran mas fuertes que ellos, habían comenzado a hacerles serio daño debido a la cantidad.

AION, TENEMOS PROBLEMAS! – chilló Sheda, al momento de señalar hacia la grieta que conducía hacia la capa número 13.

¿QUÉ PASA? CUAL ES PROBLEM... IUGHHH! – Aion no pudo terminar de hablar sin ser golpeado por un gran demonio, mismo que el chico acabó sin ningún problema en cuestión de segundos; tras escupir un poco de sangre se giró de nuevo hacia la gata.

AION, ESTÁN ATACANDO EL SECTOR 13! AHÍ ES DONDE SE ORDENÓ QUE LLEVARAN A LOS HERIDOS PARA QUE AL SALIR FUERA MAS FÁCIL CARGAR CON ELLOS! LOS DEMONIOS MAS DEBILES TAMBIÉN ESTAN AHÍ! – las palabras de Rizzel pese a haber sido dirigidas hacia su hermano, resonaron por los oidos de Chrno, quien tras haberse quedado inmóvil pese al grupo de demonios que se dirigía hacia el, finalmente recordaba el por qué le sonaba tanto ese número.

Olvidándose totalmente de la batalla ahí levantó vuelo y se dirigió hacia la grieta del sector 12, pese a los llamados de su hermano de que se quedara y luchara; tras deshacerse de los demonios que trataban de impedir su avance, finalmente llegó a la capa 13, donde el panorama que vio le dejó sin palabras: hordas de demonios matando a los heridos, ya fuera de forma directa con sus armas o quemándolos aún vivos; el chico escuchó un grito agudo y al girarse hacia la dirección de donde había provenido, se quedó perplejo al ver como un demonio de la categoría mas baja, masacraba a la niña que recién había conocido ese día; tras rugir fúrico y dirigirse hacia el demonio a toda velocidad, justo en el momento en que había estado a punto de darle otro golpe a la chiquilla, le tomó por un brazo y tras sujetar su cabeza entre sus garras, tiró de ella arrancándosela sin piedad, arrojando el cadáver por piezas lejos de ahí; inmediatamente, se giró hacia donde estaba la cría, que seguía tendida en el suelo, al momento que la tomaba entre sus brazos, y le llamaba.

Maya, Maya! – le insistía Chrno, implorando en su mente que despertara; tras apretar levemente sus ojos, la niña finalmente logró entreabrirlos, al momento de enfocar sus ojos miel en él – Maya...

C-Chrno... al fin... pensé que no vendrías... – dijo la niña, pese al dolor obvio e inmenso, sonriendo genuinamente - ¿ves como yo tenía razón... al decir que tú no debías preocuparte...?

Maya basta ya, solo conseguirás lastimarte mas... estamos muy cerca de salir de aquí, tienes que resistir... – Chrno no se dio cuenta de su voz quebrada ni sintió el momento en el que se le salieron las lágrimas; simplemente lo notó cuando la niña con una de sus manos le limpió la cara.

Lo siento, Chrno... parece ser que no podré cumplir mi promesa después de todo, verdad...?

MAYA... NO...!

Adiós... Chrno... – y tras sus palabras, al igual que como todo demonio al morir, su cuerpo de hizo cenizas desintegrándose en sus brazos ante la mirada horrorizada del chico, que como única reacción, abrazó contra si lo último que había sido de la chiquilla.

Aion y sus compinches pronto lograron darle alcance en el nivel superior, y el verle hincado, realmente le hizo preocuparse a este último, que pese a sus heridas, logró acercarse a él al momento de comenzar a reprocharle por haberles dejado solos abajo... sin embargo, su voz se cortó al notar el cuerpo del chico temblar y comenzar a rugir levemente, logrando con ello que diera un paso atrás, luego otro, y otro, hasta que finalmente, Bit y Jenai, que en un principio no supieron que pasaba, comprendieron al momento de poner en su rostro el mismo gesto que Aion tenía, y antes de que Rizzel y Sheda pudieran preguntar, las tomaron en brazos y junto con Aion, salieron volando lo mas rápido que sus alas se los permitieron al momento de tratar de encontrar el lugar mas lejano posible, mientras que como ellos habían sido capaces de predecir, los gruñidos de Chrno comenzaron a hacerse cada vez mas rapidos y mas audibles, mientras todos los miles de demonios sirvientes de Deufo se dirigían hacia el dispuestos a matarle, lejos de entender el peligro que se avecinaba; Deufo al notar la reacción de Chrno, ordenó a sus dos sirvientes principales que se alejaran del lugar lo mas que pudieran al momento que el hacía lo mismo, mientras que finalmente, segundos después, Chrno finalmente logró desatar su furia, dando un grito tan salvaje, desgarrador y abrasador como su ataque, que al instante comenzó a acabar con todos y cada uno de los demonios que le rodeaban, pese a que algunos habian tratado de escapar tras haber el daño que le había ocasionado a sus compañeros, sin ningún éxito... Todo esto era observado por Aion, Bit, Jenai, Sheda y Rizzel, que pese a que los primeros habían tenido ya una pequeña prueba de lo que el poder de Chrno podía hacer y pese a por naturaleza ser seres que disfrutaban del dolor y de la destrucción, no lograban quitar de su rostro un gesto de horror ante la masacre que sus ojos presenciaban.

Q-Qué significa esto, Aion...? – preguntaba la gata demonio, por primera vez en su vida, con miedo en su voz.

De donde sacaste a ese monstruo...? – preguntó Rizzel en la misma forma que Sheda, sin lograr quitar su mirada del espectáculo que Chrno les estaba dando.

Ese "monstruo"... – comenzó Aion, sin quitar su mirada del punto a la distancia que debía ser su hermano – solo sale cuando de verdad se le provoca... – mira de reojo a Jenai y a Bit, quienes solo mantienen la boca abierta, y en seguida regresa su mirada al frente – así que si pensaban que a mi debían de temerme, piénsenlo dos veces...

Repentinamente, un ruido se escuchó al momento que una luz cegadora les cubría, cegándoles por segundos; cuando finalmente lograron recuperar la visión, sus ojos brillaron de emoción al momento que una sonrisa se dibujaba en su rostro. Finalmente, la grieta para salir al mundo exterior, se había abierto... finalmente, podían ser libres... sin embargo, la felicidad les duró poco al escuchar una explosión viniendo del lugar de donde estaba Chrno, incluso pese a la distancia al a que estaban, logrando sentir la brisa que la misma había ocasionado; cuando lograron abrir los ojos y ver que había pasado, vieron que en el lugar solo quedaba humo, y sin siquiera esperar a que preguntaran, Aion levantó vuelo y se dirigió de nueva cuenta hacia el lugar donde debía estar su hermano.

Tras aterrizar, Aion comenzó a agitar su mano tratando de disipar el polvo al momento de cubrir con su otra mano su boca, tratando de no vomitar ante la mezcla de olores de la carne quemada y la sangre; finalmente, logró divisar a su hermano a la distancia, que se mantenía de rodillas sobre el suelo, su ropa desgarrada, sus brazos caidas frente suyo y la mirada baja; el demonio de cabellos platinados corrió hacia el sin dudarlo ni un instante.

Hey, siempre había sabido que te gustaba ser el centro de atención, pero esto ya es demasiado...! – trató de hacer la broma Aion, no queriendo dejarle ver lo preocupado que había estado – a este paso y te tendrán mas respeto a ti que a mi... no crees? Jejejejeje... – sin embargo, Aion dejó de reir cuando al estar lo suficientemente cerca de él como para sujetarle por el hombro, le escuchó sollozar – Chrno...?

¿por qué Aion...? ¿por qué esto tuvo que pasar...? – preguntaba el demonio mas joven de los dos, mientras su voz se entrecortaba. Aion solo cerró los ojos al momento de fruncir el ceño melancólicamente.

A veces... el precio que hay que pagar es demasiado grande para conseguir lo que se quiere... y a veces... solo muy pocos son capaces de disfrutar lo obtenido...

ERA SOLO UNA NIÑA Y AÚN ASI DEJASTE QUE VINIERA! – le reclamó Chrno sin siquiera girarse a mirarle; Aion simplemente dejó escapar un suspiro y se hincó al lado de su hermano, poniendo su mano en el hombro del chico.

Chrno... yo solamente abrí las puertas a la posibilidad de escapar, de ser libres... yo jamás los obligué para que me siguieran... todos sabían lo que esto podía significar, y aún asi, quisieron venir... aún asi, prefirieron morir, que vivir el resto de sus vidas sometidos bajo lo mismo... ahora que finalmente las puertas al mundo exterior están abiertas, ahora que finalmente todo esto acabó, no te eches para atrás, por que entonces, su esfuerzo habrá sido en vano... – Chrno levanta su rostro y se gira a verle, su respiración entrecortada por el gimoteo y sus pupilas doradas, cristalinas por las lágrimas acumuladas dentro de sus ojos; Aion solo contiene las suyas – además, piénsalo hermano... ahora ellos también finalmente son libres...

Tras un par de segundos donde Aion y Chrno simplemente se miraron, el demonio mas chico finalmente cerró sus ojos con fuerza al momento de lanzarse sobre su hermano y abrazarlo con fuerza, sus lágrimas resbalando furiosas por sus mejillas, su llanto escandaloso y descontrolado; el demonio de cabello platinado simplemente se limita a consolarlo correspondiendo el abrazo, mientras dentro de sí, se jura así mismo que sin importar el precio que haya que pagar, realmente se encargará de realizar sus objetivos, no solo por él, sino por el sacrificio de todos aquellos, que como él, de ahora en adelante y para siempre, serían llamados pecadores...

El sol se coló a través de las cortinas blancas hasta su cara, logrando despertarle; tras dar un largo y gran bostezo, se giró hacia su lado y vio que su amigo demonio ya no estaba; tras sentarse sobre su cama y estirarse, la chica cedió el paso ante el llamado de la puerta, mientras que por la misma, asomaba su compañero de equipo en sus misiones, con la misma cálida sonrisa en su rostro desde hacía unos años. Cuando éste entró tras darle los buenos días, se dirigió hacia el pequeño clóset que había en la habitación, comenzando a acomodar un par de sábanas dentro del mismo, mientras la chica le seguía con la mirada. Finalmente, tras un par de segundos, la monja habló.

Neh, Chrno... – llamó Rosette, consiguiendo que el chico se girase a mirarle.

Que ocurre, Rosette? – preguntó el demonio de cabello morado mirándole con curiosidad, mientras ésta miraba sus pies durante los primeros segundos, y después, regresaba su vista hacia él.

¿Por qué... es que te llaman "pecador"...? – El chico se queda en silencio y por los primeros segundos, desvia su mirada, pensante; finalmente, da un suspiro y se gira hacia la chica, que aguarda por una respuesta.

Por haber decidido comenzar a vivir en verdad...

Ya veo... – dice, entendiendo un poco de la respuesta limitada de su compañero.

Finalmente, Rosette suspira y le extiende los brazos, al momento que el chico acude a ella y se deja abrazar, su cara contra el hombro de ella, mientras la chica comienza a acariciar su pelo; sin embargo Chrno, pese a que aún la culpa y el remordimiento le comen por dentro, dibuja una sonrisa en labios. "Después de todo, Aion tenía razón... el precio que se pagó realmente valió la pena." Y tras éste último pensamiento, hunde su cara en el hombro de la muchacha, mientras aprieta su agarre, y se dispone a disfrutar de su vida, de su compañía... de su verdadera libertad al haber escogido con quien quería estar...

FIN

Si, lo sé, soy un "poco" mala para los finales, pero aún asi me esfuerzo! Que dicen? Les ha gustado? PLEASE DEJEN REVIEWS! Y si tienen dudas, contáctenme! HASTA LA PROXIMA! n.n