Hola!! Lamento mucho lo del beso y espero q ahora entiendan porqué se lo dieron y esperemos q Ron esté bien...

Capítulo 12:

Hermione puso un pie en la escalinata de piedra que estaba frente a la puerta de roble que era la entrada a su colegio. Estaba contenta por volver y sentir ese aroma tan natural de los jardines y ansiosa por ver a sus amigos.

Al levantar la vista vio a Draco Malfoy frente suyo, parecía que la había estado esperando.

- Hola – saludó Draco de una forma muy amigable - ¿Dónde fuiste estos días?

- Hola – saludó fríamente la chica – Fui a Londres por asuntos familiares.

- Bien...Te tengo que decir una cosa Granger – ahora dijo esto último con el típico tono amargado de Malfoy.

- ¿Qué?

- He sido amable contigo, porque hice una apuesta y... – le costaba decir lo que tenía – tengo que darte un beso.

- ¡Qué coincidencia yo también! – dijo irónicamente la chica – créeme que ha sido terrible ver que con esa asquerosa boca que tienes pronunciabas mi nombre y más encima ser amable contigo.

- Para mí también lo ha sido y prefiero terminar con esto de una buena vez ¿si?

- Por supuesto, aunque después de esto Malfoy...

- Te voy a seguir tratando como la mugrosa sangre sucia que eres ¿entendiste?

- Y yo como el asqueroso niñito engreído gusano que eres... – y sus labios se acercaron hasta que se dieron un beso, pero no fue un beso muy largo, fue un beso simple, sólo un roce de labios que duró unos tres segundos.

Pero nada de todo esto lo sabía el chico pelirrojo que observó aquella escena desde lejos, quien dio media vuelta y salió corriendo por el pasillo hasta subir a las escaleras chocando con Padma Patil, mas eso no le importó, sólo siguió corriendo sin rumbo fijo con los ojos lagrimosos y con un dolor enorme en su corazón.

La chica se separó del rubio y lo vio con una sonrisa maliciosa.

- Ahora ya me tengo que ir – dijo la chica recogiendo su bolso – Además...no besas bien Malfoy, con razón sólo Pansy anda detrás de ti – agregó la chica con asco y se dirigió a su sala común.

Al entrar a la sala común, Hermione se encontró con una escena nada cotidiana, más bien era una escena bastante divertida y anormal: Harry y Ginny se estaban gritando a cinco metros de distancia cosas hirientes, al estilo de Ron y ella.

- ¡Lo que pasa es que nunca me gustaste Ginny! Ese es el problema...Estás celosa – le gritó Harry desde la escalera.

- ¡Ja!, no me hagas reír, me gustaste, una cosa es que ya no me gustes y todo haya sido una casualidad y que te creas el centro del mundo para que todo lo que haga tenga que ver contigo... – dijo la Ginny ya con su cara roja, ya un signo de peligro a Harry, ya que cuando Ginny estaba enojada era mejor alejarse de ella.

- ¡¿Me dices esas palabras tan hirientes Weasley?! Eso es mentira...Sólo aquí hay una cosa que es verdad...

- ¡La cosa que es verdad es que me están copiando mi estilo para pelear con Ron! – gritó Hermione bastante divertida viendo como los dos discutían y posando sus manos en las caderas – Nunca imaginé esto de ustedes...primero me copian mi estilo para discutir con Ron, segundo ni me saludan y tercero...se ven tan tontos discutiendo de esa forma – agregó la chica feliz.

Ginny y Harry se sorprendieron por la llegada de las castaña, pues esperaban que Ron fuera a recibirla y más encima que los hayan encontrado peleando. Los dos se miraron de reojo y ya no siguieron con su "agradable" conversación y era mejor saludar a su amiga que recién llegaba.

- Disculpa...¡Hola! – le dijo muy alegre Ginny abrazándola - ¿Cómo te fue¿Qué pasó en el funeral¿Cómo llegaste?

- No...puedo...respirar – sólo alcanzó a decir Hermione ya casi morada, ya que Ginny la había estrangulado – Me fue muy bien, bueno...en el funeral no pasó nada extraordinario – dijo más tranquila Hermione después de que la había soltado.

- Que bueno, te ves muy bien – le dijo Harry abrazándola.

- Gracias, aproveché de ir de compras y bueno...ver personas – agregó en un tono muy inocente que nadie le creía.

- ¿Con quién te encontraste? – le preguntó Ginny pícaramente.

- Después te cuento...¿y Ron? – preguntó la chica sentándose en un sillón.

- No sé, después de vernos discutir por un buen momento se fue...Debe andar en los jardines o quién sabe donde – dijo sin importancia Hermione.

- ¿Y qué hicieron mientras no estuve? – le preguntó animadamente la chica.

- Bien...Además de que tengo un castigo por Snape por llamarlo: Pelo grasiento en su presencia... – comenzó a explicarle Harry y así se pasaron la tarde conversando y riéndo.

"Diario:

Es muy divertido ver como Ginny y Harry se peleaban cuando yo llegué, al estilo mío y de Ron...hablando de Ron, me ha estado evitando todo el día, cuando llegué ni Harry ni Ginny sabían donde se había metido y a la hora de la cena se sentó con Dean Thomas, para que llegue a sentarse con él es que algo malo está pasando y no me ha dirigido la palabra...¿Qué habrá pasado¿Por qué no me hablará?

En fin, dejaré de cuestionarme por un momento y te contaré que le di el famoso beso a Malfoy, ahora tengo mis 25 galeons en mi mano y con un gran dolor de dientes, pues ¿esperabas que iba a quedarme con el sabor de los asquerosos y mugrosos labios de Malfoy¡Eso si que no! Así que me he estado cepillando durante treinta minutos los dientes.

Aunque pensándolo bien...Ron salió justo a la hora que llegué y en esos momentos yo estaba..." el corazón de Hermione estaba desesperado "Tal vez Ron me vio besándome con Malfoy" terminó de escribir la oración y cerró su diario. Tenía que analizar lo que había escrito, si sus suposiciones eran correctas lo que estaba ocurriendo era muy grave, demasiado, Ron puede llegar a hacer una locura o peor aún, dejarían de ser amigos.

Hermione vio que todas sus compañeras de dormitorio estaban dormidas y decidió bajar a la sala común para poder acurrucarse en una manta cerca del fuego y poder aclarar su mente. Si Ron no estuviera en su mente todo sería mucho más fácil, estaría preocupada de sus estudios no de él, de sus sentimientos, de su apariencia, de su bienestar, de sus hermosos ojos, de sus virtudes que le encantaban y sus defectos que la exasperaban y daban ganas de matarlo. Tan distintos los dos, pero parecidos a la vez, lo quería mucho, pero a veces tenía ganas de ahorcarlo por su inmadurez e irresponsabilidad.

Al bajar el último peldaño de la escalera se encontró con un chico de cabellos negros, hermosos ojos verdes que estaban observando la nada, con sus lentes mal puestos y sentado en un sillón absorto en sus pensamientos, por lo cual no se dio cuenta de la llegada de Hermione a su lado.

- ¿En qué piensas?- le preguntó la chica sentándose en el suelo, frente a él.

- En...mi desgraciada vida – le respondió Harry dándose cuenta de la presencia de su amiga - ¿y tú?

- La verdad, vengo a aclarar mi mente, tengo unos pensamientos horribles y prefiero sacarlos de mi cabeza por un momento.

- ¿Cuáles?...Ron está muy raro, cuando subí a preguntarle por qué te había evitado me gritó y se escondió bajo las sábanas¿sabes qué le puede pasar?

- No – mintió la chica, no quería preocuparlo - ¿Qué pasó entre Ginny y tú para que estuvieran gritándose de esa manera?

- Pues...estaba en el lago con Josephine y estábamos a punto de darnos un beso cuando Ginny empujó a Josephine al lago y ahí terminó mi cita – respondió tristemente el chico.

- ¿Por qué hizo eso?

- Ni idea...Entonces me enojé con ella y empezamos a discutir y ahí llegaste encontrándonos en esa incómoda situación.

- Ya veo – agregó con una sonrisa maliciosa la chica "Por Dios Harry...¿Cómo puedes ser tan despistado? Pobre idiota¿no se da cuenta?" - ¿y no tienes ni la más mínima idea de la "razón" Harry? – preguntó Hermione enfatizando la palabra "razón".

- No ¿tú si sabes?

"Por supuesto que si, pero mejor no te digo nada...Pobre Ginny, le costará trabajo..."

- No, la verdad es algo extraño todo esto, pero de seguro fue una casualidad, porque no creo que Ginny haya planeado eso para interferir en tu cita. No hay ninguna razón que lo haya justificado.

- No lo sé¿te pasa algo? – le preguntó Harry después de unos momentos de silencio y se acercó a Hermione.

- La verdad sí. Tengo una pequeña sospecha del porqué Ron me trata de esa forma... – dijo en un tono muy serio y preocupado, colocando su cabeza en el hombro del chico.

- ¿Y cuál es?

- Es una historia larga...Parvati, Lavander y Ginny me hicieron una apuesta, tenía que besar a Malfoy – cuando Harry escuchó eso sus ojos se abrieron notablemente por aquella apuesta – Por eso fue mi amable con él esta semana y cuando llegué hoy día al castillo lo besé y sacando conclusiones de seguro Ron justo me vi dándole ese asqueroso, baboso, repugnante beso a Huroncito Malfoy.

- ¡Qué horror¿Cómo pudiste hacerlo¿Cómo aceptaste? – inquirió anonadado Harry después de tal acto por Hermione y entendiendo en enojo del pelirrojo.

- Pues...acepté para que no se rieran de mi y quería ver si podía hacer algo osado, era un desafío personal llevarlo a cabo, pero el que me preocupa es Ron.

- A mi también, es obvio que si te vio besándote con Huroncito Malfoy se iba a poner así...No sé que aconsejarte, deberías tratar de hablar con él y explicarle.

- ¿De qué manera si siquiera se atreve a mirarme a los ojos? Te juro que me siento muy culpable, debí haber pensado que esto iba a suceder.

- No te lamentes por algo que ya pasó, hay que encontrarle solución a todo esto pronto, pero ¿cómo lo besaste? Nos traicionaste...

- ¿Perdón? Fue una apuesta, el hecho que lo haya besado no significa que lo odio. Sé que tengo que hablar con él e intentaré hacerlo mañana...Hoy no podré hacer nada Harry – agregó al ver la mirada de reproche de su amigo – Tú debes ayudarme a que tenga la disposición de escucharme.

- Por supuesto, lo menos que quiero es que estén peleados y yo esté al medio de todo esto, en fin... – Harry bostezó – creo que ya es hora de que nos vayamos a dormir.

- Sí, mañana tenemos Pociones y no será muy agradable – dijo la chica levantando su cabeza del hombro del chico y le sonrió – Gracias por conversar conmigo Harry.

- De nada, yo también te agradezco, creo que esto me sirvió para conocerte mucho más – le contestó el chico levantándose del sillón y ayudando a la chica a pararse del suelo.

- Pues eso es verdad...Ojalá esta charla tan amena se haga más común.

- Ojalá¿puedo preguntarte algo?

- ¿Qué?

- ¿Puedo llamarte Hermy?

- Bueno...la verdad me parece muy corto, además así me llama el hermano de Hagrid.

- Es que es más corto que Hermione, bueno, nos vemos hasta la mañana Hermy.

- Adiós Harry que duermas bien – se despidió la chica.

- Tu también - le respondió el chico y cada uno se fue para su habitación.

Sólo se escuchaban algunos ronquidos en la habitación y los pasos de Harry entrando. Sintió como se acostó y dejó sus lentes en el velador y poco a poco todo volvió la calma al ambiente. No quería ver a nadie, en especial a la castaña que trataba de evitar para no poder ver su mirada y escuchar de sus palabras mentiras dolorosas, que hacían que sus ojos salieran lágrimas que se las secaba al instante, pues el orgullo que tenía le hacía imposible demostrar su debilidad, aunque aquél acto de evitarla era de cobardía, pero ya no quería sufrir más.

Se acabó, dejaría de pensar en ella, dejaría de suspirar por ella, dejaría de soñar con un dulce beso proveniente de sus labios, dejaría de tener hasta la más mínima esperanza de algo más que simple amistad y sobre todo dejaría de hacerse ilusiones que sólo lograban aumentar ese sentimiento de dolor en su corazón.

- Ronald Weasley, te olvidarás de ella para siempre, para siempre... – murmuró el chico en tumbado en su cama.

Notas de la autora: Bien, como ven en la telenovela "Querido Diario..." hay muchos conflictos y vamos a tener q seguir esperando haber si la pareja Ron y Hermy podrán estar juntos...

Pues, eso ha sido todo. Espero con ansias sus reviews haber q tal ha quedado este capítulo y en el próximo veremos cómo Ron afronta los problemas d la forma fácil y las locuras q hace Hermy x los celos...

Gracias x los reviews q me han llegado hasta el momento, en verdad me halaga y espero q lo sigan haciendo...

Besos,

Sirenita