Capítulo 26:
Todos esos cuestionamientos del pelirrojo sucedieron ayer, y después prefirió irse a dormir e intentar tranquilizarse.
Al día siguiente, estaban caminando por uno de los pasillos. Iban a Pociones y nuestros tres amigos estaban que se morían allí mismo del sueño que tenían. Ron y Harry casi se quedaban dormidos mientras caminaban, porque habían entrenado la noche anterior hasta las once de la noche y Hermione se quedó estudiando Aritmeticia hasta las dos de la mañana. Había tanto silencio en la zona de las mazmorras que parecía una película de terror, pero eso poco importaba a los tres jóvenes que se dirigían a sus clases.
Hermione iba mirando a Ron. Se veía tan tierno con esa cara de cansancio...En verdad tenía muchas ganas de hablar con él sobre lo que pasó en navidad. En verdad habían tenido oportunidades, pero ninguno de los dos quería dejar a Harry solo y abandonado en el castillo y pues...cada uno estaba preocupado de los exámenes que tenía que dar y de sus cosas haciendo bastante complicado que se pudieran juntar a solas a conversar de lo sucedido.
Seguían caminando, estaban pronto de pasar entre unos pilares y Hermione seguía como idiota mirando a Ron, parecía hipnotizada y... Hermione chocó con un pilar de piedra y cayó como saco de papas al suelo botando algunos libros que llevaba en su mano y golpeándose muy feo en su trasero.
"¡Hermione!...¿Cómo te caíste?" preguntó Harry preocupado y casi riéndose al verla así sentada en el suelo y llena de papales y libros a su alrededor.
"Cayéndome...Me duele..." sólo pudo decir ella mientras se frotaba su traste.
Cerró los ojos por el dolor que sentía también en su frente por el golpe. Sintió que alguien la levantaba del suelo y ella dijo: Gracias Harry..., pero no, era Ron. Ella abrió los ojos y se encontró con los ojos azules de su amigo...La misma sensación de nerviosismo y de estar a su lado siempre, las mismas sensaciones que sintió y siempre siente al estar tan cerca de él y él...quería besarla, ya no podía más, pero no podían besarse así nada más en un lugar tan público como un pasillo cerca de las mazmorras y ya estaban llegando los estudiantes de Slytherin y sería...vergonzoso y espantoso estar de esa forma ahí mismo.
"Gracias..." dijo Hermione sonriendo y recogiendo todos sus libros muy apurada.
"De nada..." le respondió Ron algo sonrojado.
"¡Oigan, es genial que Hermy esté bien, pero ya casi empieza Pociones y después del castigo por lo de reírnos de cabello a lo Tonks no quiero que me castiguen más!" les reprochó Harry como a unos 40 metros de donde estaban ellos.
"Tiene razón...Vamos" agregó Hermione y se fue corriendo y detrás de ella iba Ron.
'Querido Diario:
Sé que no te he escrito en estas semanas, pero estoy muy ocupada...Tengo sueño, hambre y lo peor es que tuve tantos exámenes esta semana que me estresé muchísimo y no descansé mucho, pero desde mañana será diferente...podré descansar muy bien y ¡habrá una visita al pueblo el fin de semana! así que podré disfrutar plenamente estos últimos meses de colegio que me quedan.
No he podido hablar con Ron sobre el beso...Él por alguna extraña razón se ha puesto a estudiar para los exámenes y con los entrenamientos de Quiddittch no tiene tiempo suficiente para poder hablar, y yo con las materias de Aritmeticia y Ruinas estoy hasta el cogote de tanta información que se acumula en mi mente; sinceramente creo que mi cabeza está al borde de explotar con tanta cosa que tengo.
Pero también...Estoy pensando...Creo que a Ginny le gusta Harry, o sea, sé que le gusta como un amor platónico, que es guapo, simpático, etc...pero desde hace años ella de verdad lo olvidó, rotundamente Harry no sería para ella, pero ahora que han estado más cercanos...no sé, cabe la mínima posibilidad que aquello ocurra. Algo me dice que puedo estar en lo correcto...¡Ah! Hablando de Ginny, cuando me peleé con ella fue porque la vi besándose con Malfoy. Cuando los vi me quedé de piedra y puse el grito en el cielo. En fin...Como mi cerebro no pudo razonar en esos instantes no me di cuenta que Malfoy la estaba forzando a besarse con él y por ende Ginny fue la víctima y por lo tanto...¡Nos vengaremos de él! Ya tenemos una gran idea...prepararemos un filtro amoroso, lo haremos tomar y haremos que se enamore de...bueno...aún no sabemos de quién...
¡Ok, eso es todo por ahora...Cambio y fuera!' terminó de escribir la chica que estaba sentada en una banca cerca de unos rosales en los terrenos del colegio.
El día estaba soleado y no hacía calor, una fresca brisa hacia que los cabellos de la joven se desordenaran. De repente sintió un escalofrío, cerró su diario y sintió como si alguien la observara. Levantó la vista y se encontró con esos ojos azules...Y Ron se acercó a Hermione a darle un beso.
oooooooooo
Estaban saliendo de la clase de Pociones, Harry ya había despertado y estaba con todas las energías renovadas, Ron estaba lleno de hollín porque le explotó una sustancia amarilla en el caldero y Hermione con una cara de amargada porque Snape la retó por saberse los ingredientes de la poción.
Mientras los tres amigos comentaban su muy no agradable clase que acababan de tener en la mañana, el profesor Dumbledore venía caminando muy tranquilo, los tres muchachos al percatarse que él venía se dirigieron inmediatamente a su encuentro.
"Hola muchachos...Que gusto encontrarlos" saludó el profesor amablemente.
"Buenos Días profesor..." saludaron los tres a coro.
"¿Qué pasa profesor?" preguntó Harry que ya por experiencia propia sabía que no por una simple casualidad el profesor se encontraba justamente en las mazmorras dando un paseo.
"Nada importante Harry, sólo necesito hablar con el señor Weasley unos momentos..." respondió él fijando su penetrante mirada a Ron que abrió los ojos como platos de la sorpresa.
"¿Hiciste algo Ron?" le preguntó con reproche Hermione a su lado.
"¡No!...Director, le juro por Merlín que no he hecho nada malo este año...En serio, no he sido yo el de el sombrero de plumas de Filch..." dijo él a punto de llorar por la desesperación.
"No es eso señor Weasley...Sólo tengo que hablar con usted..." repuso Dumbledore con una sonrisa maliciosa, ya que Ron confesó que él fue el de la broma a Filch.
"Oh, claro...Por supuesto..." dijo él mucho más tranquilo y cruzándose de brazos mientras sus amigos se reían.
"Está bien, vayamos a mi oficina señor Weasley..." dijo Dumbledore.
"Bueno...Nos vemos después muchachos...Adiós..." se despidió el pelirrojo y se fue con el director hasta su despacho.
Al llegar al despacho, Fawkes voló hasta donde estaba el pelirrojo en la entrada y comenzó a dar vueltas encima del chico. Ron sonrió y siguió al profesor que se dirigía a tomar asiento en su escritorio. Dumbledore ya sentado le ofreció que él también hiciera lo mismo y Ron se sentó. Comenzó a jugar con sus manos del nerviosismo que sentía...
"Supongo que no sabrá porqué lo fui a buscar para que habláramos¿no es verdad?" preguntó sonriente Dumbledore.
"Pues...sí profesor...¿Qué pasa?" preguntó tímidamente Ron.
"Nada malo señor Weasley, es una larga historia...Veamos, ayer estuve hablando con..." Dumbledore tosió"Con el sombrero seleccionador" dijo él señalando al sombrero que estaba a su lado"y pues...él me dijo que tenía que hablar cosas contigo..."
"Disculpe profesor; con todo respeto, pero...¿Está loco? El sombrero seleccionador sólo habla a principios de año!" comentó él como tratando al director de un viejo loco que habla idioteces.
"¿Perdón Weasley?" se escuchó una voz rasposa y marcando la letra s"¿Crees que me paso todo un año sin hacer nada? Claro que no...Siempre converso con Albus..." y el sombrero comenzó a sonreír maliciosamente.
"Lo-lo siento..." ya Ron estaba muerto de miedo con el sombrero.
"Bien, ya que él tiene que hablar contigo, los dejaré solos y cuando hayan terminado, señor Weasley puede retirarse, hasta luego..." dijo el profesor retirándose y se fue.
"Bien Weasley...Te diré de inmediato lo que tengo que decirte...Sé que has estado muy confundido estos últimos meses, te has estado preguntando si mi elección de ponerte en Gryffindor era la correcta...".
"Pues...¿cómo sabes eso sombrero sucio?" le preguntó sorprendido Ron tomándolo en su mano derecha.
"¡Más respeto con los mayores Weasley! y silencio...".
"Vale, me quedó calladito".
"Bien...Lo que pasa es que crees que no tienes las cualidades de un Gryffindor...El valor y eso no es verdad...Puede ser que porque tu amigo Potter tiene gran valor por enfrentarse a Quien sabes quién, por tener una astucia y orgullo de un Slytherin, la inteligencia de un Ravenclaw o la perseverancia de un Hufflepuff...Granger podría ir perfectamente en las cuatro casas y la menor de las Weasley también no significa que tú eres insignificante a su lado".
"¡Yo no pienso eso!" repuso Ron colorado de rabia.
"Seguro...Sé de lo que te estoy hablando, pero tú eres un Gryffindor puro...Tienes valor, aunque le temas a las arañas..." Ron sonrió"tienes las cualidades que buscaba Gryffindor en sus alumnos...El valor no es sólo enfrentarse a tus miedos y ser el héroe...Valor es también afrontar los problemas y tomar tus decisiones, aceptando las consecuencias, aceptar tus sentimientos".
"Tienes razón...¡Gracias!"agradeció Ron muy contento porque ahora todas sus confusiones ya no existían y casi besó al sombrero"Eres muy cursi, con razón tienes tan profundas canciones a los inicios de años".
"Así es...Cuidado con besarme Weasley, sino cuando tengas hijos los mandaré a Slytherin" con esa amenaza Ron se apartó"Bien, creo que tienes cosas que hacer ahora¿verdad?"
"Sí, gracias nuevamente...¡Adiós!" se despidió el chico y se fue del despacho del profesor.
Se dirigió a los jardines, algo le decía que ella estaba allí. Corrió lo más rápido que puedo y al llegar cerca de unos arbustos con rosas y allí estaba ella, escribiendo en su diario silenciosamente. Ron se quedó observándola muy contento y cuando ella subió su vista él se le acercó y la besó...
Notas de la autora: Una chica tristemente sale en el escenario, con la cabeza cabizbaja y apretando sus puños levanta su mirada de ojos pardos y ustedes, los maravillosos lectores, esperan con algo de confusión que dirá ahora Gaby, la escritora, despidiéndose de esa forma tan extraña después del capítulo.
La muchacha de cabellos cortos y oscuros respira hondo pensando que decirles...
¡Hola¿Cómo han estado? Bien, les quiero decir que estoy triste. No piensen que es por la historia ni por los reviews ni nada de eso; la razón es otra...
Mis padres vieron mis calificaciones en matemáticas y creo que tuvieron que llamar a un doctor por el casi ataque cardíaco que les da. Cuando se repusieron me castigaron, haciéndome estudiar como china las malditas ecuaciones y me han prohibido conectarme a MSN o internet si no es explícitamente para asuntos del colegio; sólo una vez a la semana podré usar el computador para cualquier uso fuera del colegio, lo cual es poco tiempo para poder subir y escribir capítulos...
¡Así que me demoraré en subirlos! Lo siento mucho, de verdad. También lo digo por los demás que leen mis otras historias y las he dejado en la mejor parte, entonces será difícil actualizarlas; pero intentaré conectarme ilegalmente (como ahora lo hago).
Pero para no amargarme mi vida y no darles la lata me gustaría agradecerles por sus reviews que me dejan muy feliz y de verdad me hacen pensar que escribo de una forma "decente".
Espero que estén bien y me dejen algún review con su opinión y bla, bla, bla... lo típico.
¡Mil besos, adiós!
Las luces se apagan y una apurada muchacha sale corriendo, porque su papá llegó del trabajo y si la ve conectada tendrá sus días contados.
