Capitulo 5 "Parece un sueño"
Ambos se miraron a los ojos unos instantes, después Arima empezó a besar cada vez, más a bajo el cuello de Yukino, cuando llego a sus aun pequeños senos, mirando y acariciándolos, los comenzó a besar y ella se apeno, pero sentía mucho calor y eso le agradaba; ambos se estaban dejando llevar, ninguno de los dos planeo nada, sólo deseaban estar juntos por todo el amor que se tienen, al cabo de un rato, Arima bajo, besando su abdomen, su vientre y después sus piernas, aun no sabia si ella se enojaría si la besaba en su sexo.
Cada vez que bajaba más, Yukino se alteraba, perdía momentáneamente su voluntad y no quería pensar en nada, sólo en él, nunca se sintió así en su vida, ahora, estando junto a su ser amado, sentía que ya no le faltaba nada y con cada beso de él a su cuerpo, no aguantaba y se movía mucho, pues sentía explotar, de repente, él paro y ella lo observo, se dio cuenta de lo que pasaba, Arima la vio a los ojos y ella le lanzo una sonrisa que hizo que él tomara una decisión.
Con mucho cuidado, acaricio las piernas de ella y las fue abriendo, mientras bajaba su cabeza, al tener sus labios en su monte de venus, bajo y rozo despacio a todo el largo de sus labios, ella dio un jadeo muy fuerte y él en ese momento se poso en el centro, ahora besándola y Yukino levanto sus caderas y eso Arima lo aprovecho para meter sus brazos y abrazarla de las caderas, mientras la besaba, primero era con ternura, después, enloquecido por lo que sentía, sus besos se tornaron algo violentos, pero sin lastimarla, he hizo algo que ni siquiera llego a imaginarse, entre sus besos, lentamente introdujo su lengua y le repasaba por toda su parte, ella entre gemidos, daba gritos ahogados en placer, en el momento que él escucho eso, instintivamente, introdujo un poco más su lengua y toco un lugar muy sensible de Yukino y eso provoco que ella se mojara, mientras lanzaba un fuerte suspiro envuelto en un jadeo de satisfacción, mientras él le besaba sus muslos.
Arima se trato de sentar en la cama, ya que estaba muy mareado, Yukino trato de sentarse a su lado, pero aun estaba demasiado aturdida y se dejo caer en las piernas de él, Arima trato de levantarla para acomodarla en la cama, pero ella comenzó a acariciar sus piernas, Yukino pensó que era justo hacerle sentir lo mismo que ella sintió y más que eso, ya era por instinto y beso sus piernas juguetonamente, hasta toparse con aquello que le daría la misma satisfacción a él, con torpeza trato de besarlo, mientras con su lengua y sus oídos exploraba, tomando como aceptación algún gemido de él para repetir lo que hacia, sorprendiéndose por el extraño sabor que emanaba y al mismo tiempo le gustaba, intento hacer algo más, lo metió a su boca tratando de succionar, al principio le dieron horcajadas, por lo que lo hacia más lento y después volvió a lamer. Para cuando se percato, Arima estaba casi con los ojos en blanco, arqueándose y esto le provoco una risita que lo despertó de su transe.
Arima: Yukino jamás pensé que me harías algo así.
Yukino: Ni yo - risitas - me siento muy apenada.
Arima: Ya no puedo más, déjame... - Se acerca a su oído - Déjame hacerte mía.
Yukino ya no respondió nada, simplemente se dejo besar mientras lentamente iban dejándose caer a la cama, llenándose de caricias uno al otro, dejando escapar suaves gemidos, algunos con sus nombres, sintiendo el calor que se brindaban uno al otro haciendo que el mundo desapareciera dejándolos a ellos dos ser uno, como si una canción mágica los transportara a otra dimensión desconocida hasta ese momento para ambos, sintiéndose consumir en el fuego del amor.
Arima empezó a entrar en ella, tan lento como fuera posible para él aguantar, tratando de ser muy tierno, hasta que alcanzo el limite de la niñez y sólo pudiendo ver en ella la respuesta que buscaba, cerrando ambos los ojos y abrazándose con fuerza, ambos dejaron la niñez atrás, Yukino en un gritito y gemidos se hizo mujer, Arima en la locura de los sonidos que ella hacia mientras repetía su nombre, dejaba de tener la cordura suficiente para aguantar, afortunadamente pasaron algunos minutos antes que él diera desenfreno a sus sentidos, pues ella ya se había adaptado lo suficiente para moverse en unísono sintiendo amor y placer el uno por el otro, pasando así los segundos como si fueran una eternidad, hasta que llego el momento de la culminación de su acto amoroso, entonando la misma melodía al llegar al éxtasis.
Ambos cayeron en un profundo sueño, sin dejar de abrazarse, entregándose al silencio de la paz interna, dejando dulces momentos en las imágenes de sus sueños, tal vez reales, tal vez parte de sus deseos, pero enfocados en uno y otro. Tras unos minutos el cansancio iba desapareciendo para dar paso a la felicidad más grande sentida, Arima iba poco a poco abriendo los ojos, dejando que su olfato aspirara el delicioso olor de Yukino, sintiendo su calor junto a él, como si fuera uno de esos tantos sueños prohibidos. La miro con ternura percatándose con un poco de miedo de las lágrimas que de sus ojos salían.
Arima: Yukino despierta, dime si estas bien.
Yukino: Hmmmm, si, si lo estoy.
Arima: Dime si te hice daño, estas llorando.
Yukino: No te preocupes... - Diciendo casi dormida - Sólo... me siento un poco adolorida.
Arima¿Estas segura?
Yukino: La verdad es de felicidad, jamás pensé que se sentiría así, no te preocupes mi amor.
Arima la abrazo con fueraza, le daba ligeros besos haciéndola sentir muy amada, descansaron unos minutos más, pues se dieron cuenta que la lluvia había pasado, pronto sería el momento de irse y tenían que llegar sin rastros de lo ocurrido, por lo que al poco rato ambos se metieron a bañar, aun con un poco de pena, pero rápido paso cuando empezaron a jugar y terminaron a un paso de volver a hacer el amor, de no ser por el poco tiempo que les quedaba, lo habrían echo.
El teléfono de la habitación sonó, era una señorita de la recepción que les informaba que sus padres ya habían llegado. Ambos se miraron con tristeza, pero era mejor aparentar las cosas delante de ellos, pues no comprenderían el que ellos quisieran pasar más tiempo juntos.
Arima: Si es tu deseo que volvamos a estar juntos, encontraremos el momento.
Yukino: Claro que quiero estar contigo de nuevo, muchas veces más. (Sonrojada)
Tomados de la mano salieron del cuarto, hasta casi llegar a donde estaban sus padres se soltaron. Las miradas de sus padres estaban llenas de inquietud, aunque el padre de Yukino se le veía muy celoso, la mamá lo trataba de controlar, esto en cierto modo les causo un poco de gracia, aunque Arima tenía el temor de pasar a mejor vida.
Papá: Arima, espero que te hayas comportado con mi bebe.
Arima: Señor no se preocupe.
Mamá: Cariño ya déjalo, no es necesario que exageres.
Yukino: Ya no soy un bebe y me se cuidar sola papá.
Papá: Eso espero hija.
Arima: Muchas gracias por venir a recogernos.
Mamá: Bien, queda más cerca tu casa, te pasaremos a dejar primero.
Así subieron al auto, en unos minutos llegaron a casa de Arima y al no poderse despedir como deseaban, Yukino con cuidado le mando un besito seguido de una sonrisa coqueta y una mirada muy provocativa que dejo temblando al muchacho. Por su lado Arima le toco la cabeza como si fuera una niña diciendo muy bajito - traviesa, ya me desquitare - para luego bajarse del auto.
Arima: Hasta luego señores y muchas gracias.
Mamá: No te preocupes, saludos a tus padres.
Papá: Hasta luego... (cara de felicidad)
Arima: Nos vemos Yukino.
Yukino: Nos vemos Arima - Chan
El padre de Yukino se volvió a encelar y arranco el auto dejando a Arima despidiéndose con la mano, parado en la banqueta al igual que Yukino desde el auto. Esa noche el sueño de ambos era compartido, con el deseo de volver a sentir sus vidas así de unidas y con la esperaza de que algún día nadie los separaría para amanecer juntos cada día.
¿FIN?
NOTA AUTORA: Me muero, me muero, este fin sin mentirles, me tarde como 3 años escribiéndolo, para cuado lo subí a fanfiction ya tenía hasta el 4 cap. pero no lo quise subir todo por lo mismo de la dificultad para escribirlo, mejor lentamente para ir imaginando algunas situaciones, T.T creo que me pase verdad, pero seguro abra a quien no le parezca y a quienes si, bueno pues eso fue lo que salio después de 3 años de estarle pensando jajajajaja.
Les agradezco a mis hermanas Z quienes me dieron algunas ideas (no diré quienes para no pasarlas a traer) y a algunos otros comentarios de otras personitas jejejejeje (estoy apenada), en fin, espero hayan disfrutado de este fic hot y también espero que lean mis fic de Inuyasha y Sailor Moon, ya veré de que más hago, aclaro que no todos son Lemmon, ya allí diré cuales si lo serán.
Espero que me sigan mandando sus Reviers con comentarios y sugerencias, gracias por leer mis locuras y hasta luego.
