Capítulo 06 Cerrando y Abriendo Capítulos de la Vida
A las 8.30 de la mañana siguiente a la fiesta, todos los adultos estaban desayunando cuando Harry volvió a los Cuarteles de la Orden. Con un descomunal bostezo, el adolescente se sentó a la mesa saludando a los adultos.
"¿Viste que hora es?" Preguntó Molly enojada viendo la hora.
"8.30 A. M." Contestó Harry viendo el reloj de la cocina, antes de agregar: "Ninguno de ustedes son mis padres, así que ahórrense todo discurso que tengan sobre el horario de mi llegada."
"¿Ganaste dinero anoche?" Quiso saber Bill mientras su madre se calló, lanzando una última mirada de severidad.
"Gané 1.3." Contestó vagamente el joven.
"¿1.3 qué?" Preguntaron todos al mismo tiempo.
"1.3 millones de Euros. La cifra exacta fue de 1350000 Euros." Respondió Harry con una sonrisa de oreja a oreja.
"¿¿¿CUÁNTO???" Preguntaron todos shockeados con sus palabras. Remus y Tonks, que estaban tomando un café, escupieron la bebida.
"Les dije que se iba a jugar muy fuerte anoche!" Dijo el Profesor con una sonrisa inocente.
"Dijiste que la cifra máxima tendría 6 números, no 7!" Exclamó Remus recordando la charla de la noche anterior.
"Si éramos 7 u 8, sería lo máximo. Anoche fuimos 14! Y muchos comenzaron con 100000 de base!" Se defendió el adolescente antes de anunciar su retiro a dormir.
"Me temo, Harry, que tu descanso deberá esperar un poco. Habrá reunión del Profesorado y estás obligado a ir a ella como el nuevo Profesor de Defensa." Informó el Director seriamente.
"¿A qué hora será?" Inquirió Harry sentándose de nuevo en su silla.
"A las 9.15. Te recomiendo que te bañes y te despejes antes de ella." Recomendó Dumbledore.
"Sra. Weasley, prepáreme un termo con café bien cargado, más de lo habitual para mis gustos habituales." Pidió Harry antes de irse a bañar.
Cuando Harry bajó de nuevo, Albus y Minerva estaban hablando sobre cosas del nuevo año escolar, mientras Karen desayunaba junto a los adultos.
"Me olvidé de decirle, Profesora. Ya tengo listos los planes de enseñanza desde septiembre hasta Febrero. Si me da otra semana, les tengo listos los de la última parte del año." Anunció Harry a McGonagall tomando la taza de café y el termo que Molly le había dado.
"Con eso me bastará para tener todo listo al menos para el comienzo de las clases. Para la última parte, no necesitaré eso hasta al menos diciembre." Indicó Minerva, mientras Harry fue a buscar los papeles.
"Aquí los tiene." Dijo el Profesor dándole una carpeta llena de papeles a la Jefa de Gryffindor.
"Los escribí ayer en la Laptop y los imprimí esta mañana. En un par de días los tendré escritos en pergaminos." Explicó Harry cuando Minerva vio que estaban impresos en papel Muggle. La Vice Directora asintió mostrando su conformismo a esto.
"La reunión será en el Colegio. Di 'Salón De Profesores de Hogwarts' y allí estarás." Indicó Albus dándole a Harry un puñado de Polvos Flu.
"Salón de Profesores de Hogwarts!" Gritó Harry usando la Red Flu.
****
Cuando aterrizó, Harry comenzó a mirar alrededor y vio que nada había cambiado desde que había ido allí en su tercer año. Luego de limpiar sus ropas, tomó asiento y se dispuso a esperar a los otros Profesores.
Dumbledore, McGonagall y Snape fueron los primeros en llegar debido a que venían del mismo lugar que Harry. Unos minutos después llegaron Sprout y Flitwick. La jefa de Hufflepuff lo saludó con una sonrisa antes de ir a hablar con el Director, mientras que el diminuto Profesor de Encantamientos se acercó a él con intenciones de conversar.
"¿Cansado?" Preguntó Flitwick viendo el termo de café y que Harry apenas lograba mantener los ojos abiertos.
"No me acosté todavía. Estuve toda la noche jugando al Poker con conocidos." Explicó Harry tomando otra taza de café, esta vez de un solo sorbo, cosa que lo puso un poco más despierto de lo que estaba.
"¿Ganó algo, Sr. Potter?" Preguntó la Profesora de Aritmancia, Vector, escuchando la charla.
"1350000 Euros en una noche de juego fuerte. Bastante más fuerte de lo habitual." Explicó Harry mientras Firenze, Trelawney, Sinistra, Binns y otros Profesores que Harry reconoció como el de Estudios Muggles y Grubby- Plank, la reemplazantes de Hagrid, y Madame Hooch entraron y tomaron asiento. Unos momentos después, llegaron Filch, el Conserje, Madame Pince, la Bibliotecaria, y Madame Pomfrey, la enfermera.
"Bastante dinero." Comentó Flitwick a Vector, antes de que Dumbledore llamara a silencio para comenzar la reunión. La Profesora de Aritmancia, asintió en silencio.
"Como ustedes ya saben, el Sr. Potter se hará cargo este año, y esperemos que por algunos más, de la posición de Profesor para Defensa Contra las Artes Oscuras." Anunció el Director dando comienzo a la reunión de forma oficial.
Varios de los otros Profesores lo felicitaron y le dieron la bienvenida al Profesorado. Filch no hizo comentarios y Snape le lanzó una mirada de odio que el adolescente ignoró por completo.
"Como siempre, Argus me ha pasado la lista actualizada con los productos prohibidos. Encontrarán varios productos de los Mellizos Weasley en ella." Comentó con una leve risa el Director dándole a los Profesores una lista.
Harry la ojeó y vio que todas las invenciones usadas por los mellizos el año pasado estaban en ella: los pantanos portátiles, los fuegos artificiales además de todos los otros.
"Deberé recordar de mencionarle esto a Fred y George." Murmuró para si mismo Harry, mientras el Director continuaba hablando sobre la Torre de Astronomía, sitio bastante visitado por parejas estudiantiles, la Zona Restringida de la Biblioteca, el Bosque Prohibido y otros temas menores....
"Estoy empezando a odiar este celular." Murmuró Harry cuando el teléfono sonó, interrumpiendo al Director. "Hable... Sí, habla Ángel Negro... General, llámeme en un par de horas... Estoy en una reunión importante... De acuerdo, lo llamaré para indicarle el lugar de la reunión... Si me disculpa debo atender otros asuntos."
"Tema arreglado. No volverá a sonar en algunos días. Y si lo hace, lo destruyo." Informó Harry al Director apagando el teléfono y guardándolo en su bolsillo.
"Ahora debo pasar a otros temas de más importancia: la seguridad del Colegio." Anunció Dumbledore con un tono de máxima seriedad.
"Este año, los Profesores deberán tomar turnos con los Prefectos para hacer guardia en la Escuela." Comenzó a enumerar Albus, con todos los demás escuchando con total atención.
"Nuevamente las practicas de Quidditch serán supervisadas por Profesores y / o miembros de la Orden del Fénix. Varios Prefectos están en los equipos así que no pueden hacer guardia durante ellas.
"Hasta nuevo aviso, solo los alumnos a partir de Cuarto Año podrán ir a Hogsmeade y sus permisos deberán ser vueltos a firmar." Aquí Dumbledore hizo una pausa y se dirigió a Harry: "Como eres Profesor y tienes tu propia custodia legal, eso no será necesario en tu caso." Harry asintió, indicando que entendía y Albus continuó:
"Ahora un tema más grave: Draco Malfoy no será expulsado de la Escuela." Anunció el anciano mago esperando una pequeña explosión de los Profesores.
Todos se quejaron diciendo que Malfoy había sido arrestado en el ataque de Mortífagos al Callejón Diagon y que debía ser expulsado. Para sorpresa del Director, Minerva y Snape, el único que no hizo comentarios o quejas fue Harry. Este solo se limitó a levantar su ceja y encender un cigarrillo, pero no abrió la boca para decir una palabra.
"¿Cuál es la excus... perdón, razón, por la que no será expulsado?" Preguntó Harry cuando las quejas se apagaron. Todos entendieron la palabra que no había terminado de decir con completa claridad.
"Como sucedió luego de la caída de Voldemort hace 15 años, muchos de los que estuvieron en el ataque, adujeron que estaban allí bajo la influencia del Maleficio Imperius." Comenzó a explicar Dumbledore.
"Esta vez, todos los que lo adujeron y no eran Mortífagos reconocidos, fueron puestos bajo un hechizo que indicaría si esa persona había estado bajo la influencia de ese maleficio o alguno de los otros Imperdonables.
"El Sr. Malfoy, además de unos pocos otros, resultaron ser positivos en esa prueba y se ha decidido darles el beneficio de la duda." Completó la información Albus seriamente.
"Pregunta idiota si las hay: ¿se puede saber si la persona estuvo bajo el Imperius en el momento del ataque por casualidad?" Preguntó Harry con sumo interés en la contestación, mientras los demás mostraban su entendimiento a la situación.
"Tomaré eso como un no." Murmuró el adolescente ante el silencio del Ministro.
"Como dije, se le dará el beneficio de la duda permitiéndole reingresar en la escuela, pero será supervisado totalmente. Ante el menor indicio de que pertenece a las filas de Voldemort, será expulsado del Colegio y enjuiciado por su participación en el ataque y sus actividades como Mortífago." Completó Dumbledore la explicación.
"Quiero creer perderá su status de Prefecto de su Casa, ¿verdad?" Preguntó Sprout a Dumbledore y Snape.
"Así es." Contestó el Director antes de que Snape pudiera responder.
"¿Algún tema más que discutir? Debo reunirme con un General de la OTAN en una horas y debo decidir el lugar de la reunión aún." Preguntó Harry a Dumbledore y McGonagall.
"Ve. Luego hablaremos de los atributos y deberes de los Profesores además de mostrarte tus habitaciones." Indicó Minerva. Harry asintió y se fue del Castillo usando la chimenea.
****
Unas horas más tarde, Ángela McKinnon, Agente del MI5, esperaba sentada en un bar junto al General Blutther por la llegada de Harry Potter, o Ángel Negro como se lo llamaba habitualmente.
Pero ellos no eran los únicos que lo esperaban. Junto a Ángela y el General había otros 2 hombres: Jonathan Plutru, Agente de la CIA, y Scott Millgred, hombre fuerte del Pentágono. Ambos tenían dudas acerca de Harry y querían hablar con él. Lo único que no le cerraba a Ángela eran los 2 francotiradores que habían colocado en los techos cercanos al bar.
"McKinnon." Dijo Ángela cuando sonó su celular.
"Si quieren que entre saca a los 2 francotiradores o desaparezco. Tienes 10 minutos." Respondió Harry al otro lado de la línea telefónica, antes de colgar sin darle chance de contestar.
"Los vio a los 2. O los sacan o no entra." Indicó McKinnon a los dos hombres con seriedad.
"Parece nerviosa, Ángela." Comentó Blutther mientras Millgred daba ordenes a los francotiradores para que dejaran sus sitios.
"Nerviosa no es la palabra, General. Estos 2 idiotas tratan de engañar a alguien que es una bomba de tiempo andante. Tranquilo, es tu mejor aliado en una batalla. Enojado, tu peor enemigo.
"Harry no juega. Él quiere algo que nosotros le podemos dar y él tiene algo que nosotros queremos. Me explica por que hay un agente de la CIA y un hombre del Pentágono, cuando esto no debería ser más que un tramite sencillo." Respondió Ángela mientras en el bar entraba Harry.
"Ángela, General." Saludó el joven sentándose a la mesa con ellos.
"Sr. Potter." Saludó Blutther, mientras Ángela solo lo saludó con un gesto con la cabeza.
"Creí que iba a ser privada la reunión." Dijo Harry haciendo un movimiento de cabeza hacia los 2 hombres.
"Harry, te presento a Jonathan Plutru, CIA, y Scott Millgred, Pentágono." Presentó McKinnon a los hombres y Harry.
"¿Tienen lo que les pedí?" Preguntó Harry a Ángela y Blutther sin preámbulos e ignorando a Millgred y Plutru.
"¿Tiene lo nuestro?" Repreguntó Blutther, mientras sacaba una carpeta y se la entregaba al joven, que se la puso a revisar en silencio.
"Aquí lo tienen." Dijo el adolescente dándoles una carpeta y
guardándose la que le habían dado en una mochila.
"Espero que esté todo en orden, General." Dijo Harry mientras el
hombre la revisaba.
"Lo está." Contestó Blutther luego de leer la carpeta por varios
minutos.
"General, Ángela, ha sido un placer." Dijo Harry levantándose de la
mesa.
"No todo lo está, Sr. Potter." Anunció Millgred cuando Harry se
disponía a dejar el lugar.
"¿Qué no está en orden?" Inquirió el adolescente retornando a su
asiento.
"Nos preguntamos las razones del pedido." Comentó Plutru seriamente.
"Eso es asunto mío." Declaró Harry seriamente.
"¿Qué nos asegura que usted no vendió una copia de esos papeles a
terroristas?" Interrogó Millgred sin rodeos.
"¿Y qué les hace pensar que sí lo hice?" Repreguntó Harry con un tono
de reto.
"Un deposito bancario de 1350000 Euros realizado esta mañana a una cuenta a su nombre en un banco." Contestó Plutru antes de preguntar: "¿Qué explicación tiene a eso?"
"El Sr. Potter participó anoche de una partida de Poker donde la apuesta mínima fue de 10000 Euros. Los 1350000 Euros depositados fue el dinero obtenido al final de la noche." Explicó Ángela luego de que Harry le lanzara una significativa mirada en su dirección.
"También nos preguntamos sobre la falta de información sobre su pasado. Sus padres murieron cuando era bebé, fue a vivir con familiares..." Comenzó Plutru pero Harry lo interrumpió.
"Al grano." Dijo Harry sin muy buen animo.
"Ciertas cosas no cierran. ¿Por qué pidió a una familia amiga adoptar a Karen Hiller, si ni siquiera la conocía?" Preguntó Millgred.
"La hubiera pedido yo en persona, pero no me la hubieran dado siendo menor de 18, aun si tuviera mi custodia legal, como lo hago luego de ser emancipado." Contestó Harry simplemente.
"Aún no nos ha contestado." Comentó Plutru.
"Caballeros, esa niña estaba a punto de suicidarse. Estaba haciendo todo lo que podía para evitarlo. No sabía que eso fuera un crimen." Comentó con sarcasmo el adolescente.
"¿Cómo Jennifer Lower?" Interrogó Plutru haciendo referencia a la chica que se había suicidado en frente de Harry.
"Ya he dado contestaciones sobre ese tema, caballeros. Además, creo recordar que el padre, era un General del Pentágono que era nexo entre su país y el nuestro. ¿Por qué no me explica por que se ignoraron o borraron las denuncias contra el General?" Preguntó Harry dando vuelta el tablero a su favor, al memos momentáneamente.
"Esa no es información confirmada. Y si así lo fuera, no se puede divulgar." Contestó Millgred, nervioso por el cambio de tema.
"Digo lo mismo con respecto a mi vida personal. No se metan porque no soy alguien con quien quiera verse enfrentado." Advirtió Harry a los 2 hombres.
"¿Nos está amenazando?"
"Advirtiendo. ¿O quiere que su esposa sepa sobre su amante, Sr. Plutru? Sr. Millgred, ¿desea que sus jefes se enteren de sus negociados?"" Preguntó Harry con una sonrisa.
"¿Cómo...?" Comenzó Plutru shockeado con sus dichos.
"Si alguno de ustedes, se mete conmigo, Karen, mis amigos o familia, juro por la tumba de mis padres que lamentarán el haberlo hecho. ¿Quedó claro, caballeros?" Preguntó Harry seriamente.
"General, fue un gusto conocerlo. Ángela, olvídate de que existo." Dijo Harry levantándose de nuevo para salir.
Justo cuando iba a abrir la puerta, algo le dijo que se quitara del lugar de inmediato. Gracias a la velocidad y reflejos obtenidos en Quidditch, Harry se corrió para la izquierda, al tiempo que una bala pasó por el lugar en donde había estado parado un momento antes. El proyectil siguió su trayectoria y le dio en la cabeza a Millgred matándolo de inmediato.
"Buena puntería tienen sus francotiradores." Comentó Harry ácidamente a Plutru, tomando su arma y matando a los 2 tiradores que estaban situados en el mismo sitio de antes.
"¿Alguna otra sorpresa tienen para mí?" Preguntó el joven guardando su arma en su cintura de nuevo.
"¿No? Adiós entonces." Dijo Harry dejando el lugar luego de un silencio sepulcral por parte de las 3 personas.
"Se lo advertí: no debían meterse con él." Comentó McKinnon marchándose también del sitio, furiosa con el hecho de haber estado allí además de haber perdido uno de sus mejores elementos como lo era Harry.
****
"Otra hermosa reunión has tenido, he de suponer." Comentó Amelia Bones cuando Harry retornó a los cuarteles, al ver la cara del joven que daba más miedo que la del día anterior.
Harry no respondió. Antes de que alguien supiera que pasaba, tomó su arma, la apuntó contra una pared y vació el cargador entero de su revolver en ella, ante la mirada atónita de todos.
"Así de bien fue." Dijo Harry antes de anunciar que se iría a dormir de inmediato y que no lo molestaran hasta que el se levantara.
"Debe encontrar una nueva manera de descargar toda su furia." Comentó Remus mientras Albus arreglaba la pared y los huecos de bala desaparecían de ella.
****
Pasaron dos días antes de que Harry volviera a dar alguna señal de vida. En esa ocasión fue para desayunar junto a los Miembros adultos de la Orden.
"Pido disculpas por lo del otro día. Mis nervios llegaron a un limite nunca antes visto y necesitaba descargar tensiones de una manera más... práctica a mi manera habitual." Explicó el joven mientras tomaba una taza de café y comenzaba a leer el Profeta.
"¿Llamas 'manera práctica' a vaciar un cargador completo en una pared?" Preguntó con ironía Snape.
"La otra es hacerlo contra una persona. ¿Quiere que lo haga con usted, Snape?" Contestó Harry con una sonrisa. Leyendo el diario, levantó la vista y le preguntó a Dumbledore: "¿Esto es una broma?"
En el articulo de la primera pagina, el diario informaba de una demanda liderada por Draco Malfoy contra Harry por lo que había hecho contra su Padre y otros Mortífagos 'inocentes que estaban bajo la influencia del Imperius'.
"Fue presentada luego del proceso para determinar quienes habían estado allí voluntariamente o no." Explicó Amelia.
"Y como los muertos no hablan, no se puede determinar si eran Mortífagos por su voluntad o no." Dijo Harry irónicamente, antes de agregar: "Si ustedes esperan que yo me siente a explicar mis acciones de ese día, les sugiero que en vez de una silla lo hagan en una cama."
"La demanda no avanzará demasiado. No lo permitiremos." Anunció Bones seriamente, quien se esperaba esa reacción del adolescente.
"Lo que diga, Madame Bones." Murmuró Harry sin dejar de leer el periódico.
"Estamos interesados en saber algo, Harry." Dijo Albus de repente abriendo la carpeta que Harry había traído de la reunión y leyendo los documentos.
"Los papeles de Karen son simples. A partir de ahora Karen Hiller deja de existir en el Mundo Muggle y pasa a ser Karen Weasley, con historial medico y escolar incluidos." Anunció el adolescente sin levantar la vista.
"Ese no es el documento que atrajo nuestra atención precisamente, sino tu certificado de defunción a causa de..." Dijo Albus antes de añadir: "un accidente de automóvil."
"Certificado que no tiene fecha si lo leyó con atención." Comentó Harry, cambiando de página el diario.
"La otra cosa que atrajo nuestra atención." Informó Remus seriamente.
"Sencillo. Entre la opciones que he estado pensando para cuando acabe la guerra, dejar el Mundo Mágico e ir a vivir entre Muggles es una de ellas." Comenzó el adolescente cerrando el diario, enfocando toda su atención a los adultos.
"Cuando acabe la guerra, Voldemort estará muerto y yo seré el responsable de esa muerte, lo que solo contribuirá en subir mi fama a niveles astronómicos, mayores a los actuales.
"Si quiero obtener paz, lo mejor es hacer pensar a todos que estoy muerto. El certificado de defunción tiene ese objetivo." Informó Harry abriendo el diario de nuevo, retomando su lectura.
"¿Por eso no tiene fecha?" Preguntó Tonks con curiosidad.
"La fecha será puesta cuando decida hacerlo." Informó Harry sin inmutarse de su lectura.
"No puedo negar que es un buen plan a futuro." Comentó Albus escuchando la historia con atención. A su alrededor, los demás asintieron en acuerdo a esto.
"¿No lo vas a atender?" Preguntó Remus cuando el celular comenzó a sonar, y Harry no hizo ningún movimiento hacia el aparato.
"No." Contestó el adolescente viendo el número de quien lo llamaba.
"¿Por qué no?" Preguntó confundida Minerva.
"No estoy de humor para escuchar a Ángela hoy." Informó Harry en tono duro.
"Creo que será mejor que la atiendas." Comentó Albus luego de media hora donde el teléfono no cesó de sonar.
"Ahórrate las excusas, no estoy de humor para ellas." Dijo Harry atendiendo la llamada finalmente luego de otros 10 minutos. "Ángela, maldición, la bala del francotirador era para mí si te has olvidado!... Nosotros teníamos un trato, yo obtenía lo que les pedí y ustedes recibían los papeles. Ni el Pentágono ni la CIA debían estar ahí!... ¿Llamaste solo para eso?... ¿Cuándo y dónde será?... Gracias por el aviso." Terminó la charla el adolescente escribiendo algo en su agenda.
"¿Qué ocurre?" Preguntó Dumbledore luego de unos momentos de silencio.
"Debo ir a la lectura del testamento de mis tíos en 45 minutos." Informó el Profesor de Defensa escuetamente antes de irse a cambiar, y dejar los cuarteles una vez más.
****
Cuando Harry regresó, su humor no era precisamente el mejor, pero al menos no estaba tan malo como últimamente lo había estado. Se sentó a cenar, colocando un bolso al lado de su silla, sin hacer comentarios.
"Veo que la lectura del testamento ha sido mejor que tus últimas reuniones." Comentó Moody comenzando a cenar.
"No hubo nada de que sorprenderse. Le dejaron la casa y el dinero a Marge. Fui a Privet Drive a buscar cosas antes de regresar aquí." Informó Harry señalando el bolso.
"Pocas cosas, ¿eh?" Preguntó con ironía Remus.
"Está todo encogido para que quepa en el bolso. Traje un equipo de música de mi primo, CD suyos, que van a escuchar mucho aquí y en Hogwarts, algunos libros, y otras cosas." Explicó Harry.
"¿Qué clase de música?" Preguntó Bill con curiosidad.
"Latina. Vaya a saber por que, a mi primo le comenzó a gustar esa música. La escuché este verano y me gustó." Comentó el adolescente.
"¿Qué ritmos?" Quiso saber Charlie.
"Rock y baladas de amor principalmente. Alejandro Sanz, Ricardo Arjona, Charly García y otros." Dijo Harry antes de ir a la Biblioteca a hacer algunas cosas, pidiendo no ser molestado excepto que haya una reunión de la Orden o una reunión del Profesorado. Inmediatamente después a que entrara allí, la Orden escuchó música que indicaba que Harry había encendido el equipo musical.
****
Dos horas más tarde, Harry aún seguía en la Biblioteca con la música encendida. Decidiéndose a entrar, Karen fue hasta allí y golpeó la puerta suavemente.
"Alohomora!" Escuchó la niña una exclamación desde adentro.
"Cerró la puerta mágicamente. Ese es el encantamiento para abrirlas." Explicó Albus al tiempo que las puertas se abrían y los dos entraban a revisar al adolescente.
Sobre una de las mesas, había un tablero de ajedrez con algunas piezas puestas. Cerca de allí, estaba el equipo musical, mientras Harry miraba el tablero con un cigarrillo en una mano y su varita en la otra.
"¿Sucede algo?" Preguntó el joven levantando su vista y bajando el volumen de la música.
"Teníamos curiosidad por saber que estabas haciendo." Explicó Dumbledore mientras él y Karen se acercaron a revisar el tablero. Harry asintió antes de subir la música de nuevo a su volumen anterior
"Lindas piezas." Comentó el Director observándolas.
"¿Qué es cada una de ellas?" Quiso saber Karen con curiosidad.
"Solo he hecho las negras. No he decidido que representará cada pieza blanca." Explicó Harry antes de detallar.
"Los peones son Mortífagos, las Torres son Trolls, los Caballos son Dementores, Los Alfiles son vampiros, la Reina es una Banshee y el rey es Voldemort."
"Buena creatividad." Comentó Remus entrando con Minerva, escuchando la charla. Los dos adultos observaron el tablero con atención antes de comenzar a observar las piezas.
"¿Piezas de ajedrez mágico o simples como los Muggles?" Preguntó Ron entrando con Hermione y los otros observando las piezas también.
"No lo he decidido, además no conozco el encantamiento para hacerlas mover como las otras." Informó Harry observando su agenda y tomando una pequeña roca y comenzando a transformarla en una nueva pieza.
"Los Aurors serán los peones blancos." Informó el joven concluyendo su nueva pieza: un mago vistiendo túnica de Auror. Luego repitió el mismo proceso otras 7 veces antes de colocarlas en su lugar del tablero.
Repentinamente, Harry levantó su vista a sus 2 mejores amigos y una sonrisa apareció en sus labios antes de comenzar otra pieza. Esta sería claramente una estudiante con una pequeña pila de libros en sus manos.
"Harry, ¿tú no...?" Comenzó a preguntar Hermione creyendo entender el significado de la pieza.
"¿Lo has olvidado, Hermione? ¿El tablero de Primer Año? Tú fuiste una Torre. Ron fue un caballo. Yo fui el Alfil esa vez. Esta vez, no seré un Alfil, seré el rey en este juego." Dijo Harry mientras hacía uno de los 2 Caballos. Estos, al igual que las Torre, era un estudiante, solo que en vez de tener libros, iba montado en una escoba.
"¿De qué tablero están hablando?" Preguntó confundida Molly, mientras Harry agregaba las 4 nuevas piezas al tablero.
"Larga historia." Dijeron Harry, Ron y Hermione al mismo tiempo antes de Dumbledore o McGonagall contestaran.
"¿Quiénes serán la Reina y los Alfiles?" Preguntó Bill con curiosidad, mientras Harry seguía leyendo su agenda.
"Fawkes es la Reina. Aún no he decidido el Alfil." Comentó el adolescente sin levantar la vista de su lectura.
"¿Ahora qué?" Exclamó Harry cuando su celular sonó: "Hable... Sí, habla HP... No, salgo del juego... Lo de la otra noche me alcanza para bastante tiempo... Lo lamento pero no... Mándale mis condolencias a los perdedores de esa noche, pero no doy revancha... Adiós." Terminada la charla, Harry guardó su celular antes de decirle a los adultos: "Se acabó el Harry jugador de Poker."
"Y yo que quería jugar." Se lamentó Bill.
"¿Sucede algo que están todos aquí? Antes de entrar pedí no ser molestado excepto que haya una reunión.." Preguntó Harry tomando sus los peones de ambos lados, las 2 torres blancas y moviendo los dos caballos a posiciones de Alfiles.
"¿A qué se debe el cambio?" Inquirió Dumbledore con curiosidad viendo los movimientos.
"Cambié de opinión en algo y he decidido hacer unos cambios en las piezas." Explicó Harry cambiando los peones negros de Mortífagos a Basiliscos y los blancos de Aurors a Fénixes.
"No han contestado mi pregunta." Repitió el adolescente con tono de impaciencia ante la interrupción de su trabajo.
"Queríamos ver que estabas haciendo." Contestó el Director en nombre de todos.
"Si se quedan no hagan ruido y no me bajen la música!" Exclamó Harry viendo que Charlie se acercaba al equipo musical.
"Quería ver los CDs." Informó Charlie tomándolos, comenzándolos a ver.
"Lo que digas." Murmuró Harry antes de comenzar a trabajar en las 2 torres: estas eran un lobo apoyado en una especie de torre pequeña.
"Gracias por incluirme." Comentó Remus viendo la nueva pieza.
Harry solo asintió con una sonrisa antes de comenzar con los Caballos: un gran perro negro, la forma Animaga de Sirius. Todos los demás, incluyendo Karen a quien se le explicó el significado de ambas piezas, miraban maravillados el trabajo que realizaba el joven.
"¿A mí me sacaste del tablero?" Preguntó Hermione haciéndose la ofendida.
"Tú eres la Reina." Informó Harry tomando una de las Torres, y haciéndole solo une modificación: le agregó una corona de Reina a la pieza.
"¿Por qué ella es la Reina?" Preguntó Ron con curiosidad.
"Siempre está al lado del Rey, mientras que el Alfil siempre acompaña a los Reyes. Al menos así se comienza en el tablero." Explicó el adolescente antes de comenzar la última de todas: el Rey. Esa pieza era una réplica miniatura de Harry, con la cicatriz incluida. Sobre su cabeza había una corona, en su mano derecha estaba su varita, y en su cintura una espada.
"Les presento mi tablero de ajedrez." Dijo Harry al incluir al Rey y la Reina en sus sitios del tablero.
"Un trabajo impresionante." Dijo Bill revisando todo el tablero y sus piezas mientras los demás hacían lo mismo, felicitando a Harry por su trabajo.
"¿Lo vas a hacer un ajedrez mágico?" Preguntó Ron a su amigo.
"Este no lo será. Si hago algún otro, sí, pero este no." Contestó Harry antes de preguntarle a McGonagall que miraba el tablero con una cara pensativa, como si eso le hubiera dado una idea: "¿Ocurre algo, Profesora?"
"Me ha solucionado un problema, Sr. Potter." Respondió Minerva con una sonrisa.
"Y ese es..." Comenzó el adolescente con curiosidad.
"Sencillo. Cada año para los EXTASIS, todos los alumnos de Sexto y Séptimo año deben hacer un proyecto personal. Este año, debo admitir que me estaba costando encontrar alguno que no haya realizado ya en el pasado. Usted me acaba de dar la idea para ello." Explicó la Profesora de Transformación viendo el tablero cuidadosamente.
"Un tablero con piezas de ajedrez. La mitad hechas por Sexto y la otra por Séptimo. ¿Estoy en lo correcto?" Preguntó Harry creyendo entender la situación.
"Exactamente." Asintió la Jefa de Gryffindor, antes de agregar al trío: "Por supuesto que Ustedes tres deben actuar como si no conocieran sobre esto."
"¿Harry continuará yendo a clases siendo Profesor?" Preguntó Ginny confundida, mientras los 3 asentían al pedido.
"El Sr. Potter recibirá clases en forma separada al resto de sus compañeros, pero continuará recibiéndolas. Después de todo aún no se ha graduado de Hogwarts." Explicó Dumbledore.
"¿Eso significa que podrá seguir jugando al Quidditch?" Preguntó Ron con esperanza en su voz.
"Para desgracia de Severus, sí. Al ser arrestada Umbridge, todos sus decretos y decisiones al frente del Colegio han quedado anuladas, incluyendo la prohibición del Sr. Potter para jugar Quidditch." Dijo Minerva con una sonrisa de oreja a oreja.
"Volvemos al aire!" Exclamó Harry chocando los 5 con Ron.
"Necesitamos rearmar el equipo. Fred, George, Alicia y Angelina se graduaron y necesitaremos reemplazantes además de un equipo de Reserva." Comentó Ginny con sus 2 compañeros de equipo.
"¿Quién será el Capitán?" Preguntó Ron a Minerva.
"Por antigüedad y experiencia en el Equipo, será el Sr. Potter." Informó McGonagall a los 3 jugadores.
Mientras tanto, Dumbledore y Karen habían empezado a probar el tablero y las piezas jugando la revancha del juego del cumpleaños de Harry. Karen jugaba con la blancas y Dumbledore con las negras.
"¿Quién dio permiso para jugar con mi tablero?" Preguntó Harry cuando se dio cuenta de esto, con un fingido enojo con los 2.
"Probábamos como era." Comentó Karen moviendo su Alfil, haciendo jaque en el proceso.
"La próxima vez avisen. Y ni se les ocurra convertir las piezas en mágicas." Informó el adolescente sentándose a ver el juego.
"Realmente realistas son las piezas, Harry." Comentó Dumbledore saliendo del jaque en el que estaba, luego de asegurarle al joven que permanecerían como estaban.
"Gracias por el elogio, Profesor." Sonrió Harry.
"¿Encontraste una nueva forma de descargar toda tu ira?" Preguntó Molly con esperanzas de que fuera una respuesta afirmativa.
"Es demasiado pronto para saberlo, pero puede que sí lo sea." Dijo Harry simplemente.
Karen y Albus continuaron su partida antes de que Molly llamara a todos a cenar, dejando el juego en tablas de nuevo. En el tablero solo quedaban del lado de las piezas blancas, el Rey (Harry), la Reina (Hermione), un alfil y una torre (Ron y Remus respectivamente) y 2 peones (Fénixes). De las negras, solo quedaban el Rey (Voldemort), 2 Peones (Basiliscos), 1 Caballo (Dementores) y un Alfil (Vampiro).
Alguien amigo de la adivinación, podría llamarlo una premonición de futuro, otros solo las piezas de un juego inconcluso. Harry al ver las piezas sobrantes del tablero, quería inclinarse por la segunda, pero algo le decía que eso estaba más cerca de la primera opción que de la última.
"Ruego que me equivoque." Pensó Harry antes de sentarse a cenar con los demás.
A las 8.30 de la mañana siguiente a la fiesta, todos los adultos estaban desayunando cuando Harry volvió a los Cuarteles de la Orden. Con un descomunal bostezo, el adolescente se sentó a la mesa saludando a los adultos.
"¿Viste que hora es?" Preguntó Molly enojada viendo la hora.
"8.30 A. M." Contestó Harry viendo el reloj de la cocina, antes de agregar: "Ninguno de ustedes son mis padres, así que ahórrense todo discurso que tengan sobre el horario de mi llegada."
"¿Ganaste dinero anoche?" Quiso saber Bill mientras su madre se calló, lanzando una última mirada de severidad.
"Gané 1.3." Contestó vagamente el joven.
"¿1.3 qué?" Preguntaron todos al mismo tiempo.
"1.3 millones de Euros. La cifra exacta fue de 1350000 Euros." Respondió Harry con una sonrisa de oreja a oreja.
"¿¿¿CUÁNTO???" Preguntaron todos shockeados con sus palabras. Remus y Tonks, que estaban tomando un café, escupieron la bebida.
"Les dije que se iba a jugar muy fuerte anoche!" Dijo el Profesor con una sonrisa inocente.
"Dijiste que la cifra máxima tendría 6 números, no 7!" Exclamó Remus recordando la charla de la noche anterior.
"Si éramos 7 u 8, sería lo máximo. Anoche fuimos 14! Y muchos comenzaron con 100000 de base!" Se defendió el adolescente antes de anunciar su retiro a dormir.
"Me temo, Harry, que tu descanso deberá esperar un poco. Habrá reunión del Profesorado y estás obligado a ir a ella como el nuevo Profesor de Defensa." Informó el Director seriamente.
"¿A qué hora será?" Inquirió Harry sentándose de nuevo en su silla.
"A las 9.15. Te recomiendo que te bañes y te despejes antes de ella." Recomendó Dumbledore.
"Sra. Weasley, prepáreme un termo con café bien cargado, más de lo habitual para mis gustos habituales." Pidió Harry antes de irse a bañar.
Cuando Harry bajó de nuevo, Albus y Minerva estaban hablando sobre cosas del nuevo año escolar, mientras Karen desayunaba junto a los adultos.
"Me olvidé de decirle, Profesora. Ya tengo listos los planes de enseñanza desde septiembre hasta Febrero. Si me da otra semana, les tengo listos los de la última parte del año." Anunció Harry a McGonagall tomando la taza de café y el termo que Molly le había dado.
"Con eso me bastará para tener todo listo al menos para el comienzo de las clases. Para la última parte, no necesitaré eso hasta al menos diciembre." Indicó Minerva, mientras Harry fue a buscar los papeles.
"Aquí los tiene." Dijo el Profesor dándole una carpeta llena de papeles a la Jefa de Gryffindor.
"Los escribí ayer en la Laptop y los imprimí esta mañana. En un par de días los tendré escritos en pergaminos." Explicó Harry cuando Minerva vio que estaban impresos en papel Muggle. La Vice Directora asintió mostrando su conformismo a esto.
"La reunión será en el Colegio. Di 'Salón De Profesores de Hogwarts' y allí estarás." Indicó Albus dándole a Harry un puñado de Polvos Flu.
"Salón de Profesores de Hogwarts!" Gritó Harry usando la Red Flu.
****
Cuando aterrizó, Harry comenzó a mirar alrededor y vio que nada había cambiado desde que había ido allí en su tercer año. Luego de limpiar sus ropas, tomó asiento y se dispuso a esperar a los otros Profesores.
Dumbledore, McGonagall y Snape fueron los primeros en llegar debido a que venían del mismo lugar que Harry. Unos minutos después llegaron Sprout y Flitwick. La jefa de Hufflepuff lo saludó con una sonrisa antes de ir a hablar con el Director, mientras que el diminuto Profesor de Encantamientos se acercó a él con intenciones de conversar.
"¿Cansado?" Preguntó Flitwick viendo el termo de café y que Harry apenas lograba mantener los ojos abiertos.
"No me acosté todavía. Estuve toda la noche jugando al Poker con conocidos." Explicó Harry tomando otra taza de café, esta vez de un solo sorbo, cosa que lo puso un poco más despierto de lo que estaba.
"¿Ganó algo, Sr. Potter?" Preguntó la Profesora de Aritmancia, Vector, escuchando la charla.
"1350000 Euros en una noche de juego fuerte. Bastante más fuerte de lo habitual." Explicó Harry mientras Firenze, Trelawney, Sinistra, Binns y otros Profesores que Harry reconoció como el de Estudios Muggles y Grubby- Plank, la reemplazantes de Hagrid, y Madame Hooch entraron y tomaron asiento. Unos momentos después, llegaron Filch, el Conserje, Madame Pince, la Bibliotecaria, y Madame Pomfrey, la enfermera.
"Bastante dinero." Comentó Flitwick a Vector, antes de que Dumbledore llamara a silencio para comenzar la reunión. La Profesora de Aritmancia, asintió en silencio.
"Como ustedes ya saben, el Sr. Potter se hará cargo este año, y esperemos que por algunos más, de la posición de Profesor para Defensa Contra las Artes Oscuras." Anunció el Director dando comienzo a la reunión de forma oficial.
Varios de los otros Profesores lo felicitaron y le dieron la bienvenida al Profesorado. Filch no hizo comentarios y Snape le lanzó una mirada de odio que el adolescente ignoró por completo.
"Como siempre, Argus me ha pasado la lista actualizada con los productos prohibidos. Encontrarán varios productos de los Mellizos Weasley en ella." Comentó con una leve risa el Director dándole a los Profesores una lista.
Harry la ojeó y vio que todas las invenciones usadas por los mellizos el año pasado estaban en ella: los pantanos portátiles, los fuegos artificiales además de todos los otros.
"Deberé recordar de mencionarle esto a Fred y George." Murmuró para si mismo Harry, mientras el Director continuaba hablando sobre la Torre de Astronomía, sitio bastante visitado por parejas estudiantiles, la Zona Restringida de la Biblioteca, el Bosque Prohibido y otros temas menores....
"Estoy empezando a odiar este celular." Murmuró Harry cuando el teléfono sonó, interrumpiendo al Director. "Hable... Sí, habla Ángel Negro... General, llámeme en un par de horas... Estoy en una reunión importante... De acuerdo, lo llamaré para indicarle el lugar de la reunión... Si me disculpa debo atender otros asuntos."
"Tema arreglado. No volverá a sonar en algunos días. Y si lo hace, lo destruyo." Informó Harry al Director apagando el teléfono y guardándolo en su bolsillo.
"Ahora debo pasar a otros temas de más importancia: la seguridad del Colegio." Anunció Dumbledore con un tono de máxima seriedad.
"Este año, los Profesores deberán tomar turnos con los Prefectos para hacer guardia en la Escuela." Comenzó a enumerar Albus, con todos los demás escuchando con total atención.
"Nuevamente las practicas de Quidditch serán supervisadas por Profesores y / o miembros de la Orden del Fénix. Varios Prefectos están en los equipos así que no pueden hacer guardia durante ellas.
"Hasta nuevo aviso, solo los alumnos a partir de Cuarto Año podrán ir a Hogsmeade y sus permisos deberán ser vueltos a firmar." Aquí Dumbledore hizo una pausa y se dirigió a Harry: "Como eres Profesor y tienes tu propia custodia legal, eso no será necesario en tu caso." Harry asintió, indicando que entendía y Albus continuó:
"Ahora un tema más grave: Draco Malfoy no será expulsado de la Escuela." Anunció el anciano mago esperando una pequeña explosión de los Profesores.
Todos se quejaron diciendo que Malfoy había sido arrestado en el ataque de Mortífagos al Callejón Diagon y que debía ser expulsado. Para sorpresa del Director, Minerva y Snape, el único que no hizo comentarios o quejas fue Harry. Este solo se limitó a levantar su ceja y encender un cigarrillo, pero no abrió la boca para decir una palabra.
"¿Cuál es la excus... perdón, razón, por la que no será expulsado?" Preguntó Harry cuando las quejas se apagaron. Todos entendieron la palabra que no había terminado de decir con completa claridad.
"Como sucedió luego de la caída de Voldemort hace 15 años, muchos de los que estuvieron en el ataque, adujeron que estaban allí bajo la influencia del Maleficio Imperius." Comenzó a explicar Dumbledore.
"Esta vez, todos los que lo adujeron y no eran Mortífagos reconocidos, fueron puestos bajo un hechizo que indicaría si esa persona había estado bajo la influencia de ese maleficio o alguno de los otros Imperdonables.
"El Sr. Malfoy, además de unos pocos otros, resultaron ser positivos en esa prueba y se ha decidido darles el beneficio de la duda." Completó la información Albus seriamente.
"Pregunta idiota si las hay: ¿se puede saber si la persona estuvo bajo el Imperius en el momento del ataque por casualidad?" Preguntó Harry con sumo interés en la contestación, mientras los demás mostraban su entendimiento a la situación.
"Tomaré eso como un no." Murmuró el adolescente ante el silencio del Ministro.
"Como dije, se le dará el beneficio de la duda permitiéndole reingresar en la escuela, pero será supervisado totalmente. Ante el menor indicio de que pertenece a las filas de Voldemort, será expulsado del Colegio y enjuiciado por su participación en el ataque y sus actividades como Mortífago." Completó Dumbledore la explicación.
"Quiero creer perderá su status de Prefecto de su Casa, ¿verdad?" Preguntó Sprout a Dumbledore y Snape.
"Así es." Contestó el Director antes de que Snape pudiera responder.
"¿Algún tema más que discutir? Debo reunirme con un General de la OTAN en una horas y debo decidir el lugar de la reunión aún." Preguntó Harry a Dumbledore y McGonagall.
"Ve. Luego hablaremos de los atributos y deberes de los Profesores además de mostrarte tus habitaciones." Indicó Minerva. Harry asintió y se fue del Castillo usando la chimenea.
****
Unas horas más tarde, Ángela McKinnon, Agente del MI5, esperaba sentada en un bar junto al General Blutther por la llegada de Harry Potter, o Ángel Negro como se lo llamaba habitualmente.
Pero ellos no eran los únicos que lo esperaban. Junto a Ángela y el General había otros 2 hombres: Jonathan Plutru, Agente de la CIA, y Scott Millgred, hombre fuerte del Pentágono. Ambos tenían dudas acerca de Harry y querían hablar con él. Lo único que no le cerraba a Ángela eran los 2 francotiradores que habían colocado en los techos cercanos al bar.
"McKinnon." Dijo Ángela cuando sonó su celular.
"Si quieren que entre saca a los 2 francotiradores o desaparezco. Tienes 10 minutos." Respondió Harry al otro lado de la línea telefónica, antes de colgar sin darle chance de contestar.
"Los vio a los 2. O los sacan o no entra." Indicó McKinnon a los dos hombres con seriedad.
"Parece nerviosa, Ángela." Comentó Blutther mientras Millgred daba ordenes a los francotiradores para que dejaran sus sitios.
"Nerviosa no es la palabra, General. Estos 2 idiotas tratan de engañar a alguien que es una bomba de tiempo andante. Tranquilo, es tu mejor aliado en una batalla. Enojado, tu peor enemigo.
"Harry no juega. Él quiere algo que nosotros le podemos dar y él tiene algo que nosotros queremos. Me explica por que hay un agente de la CIA y un hombre del Pentágono, cuando esto no debería ser más que un tramite sencillo." Respondió Ángela mientras en el bar entraba Harry.
"Ángela, General." Saludó el joven sentándose a la mesa con ellos.
"Sr. Potter." Saludó Blutther, mientras Ángela solo lo saludó con un gesto con la cabeza.
"Creí que iba a ser privada la reunión." Dijo Harry haciendo un movimiento de cabeza hacia los 2 hombres.
"Harry, te presento a Jonathan Plutru, CIA, y Scott Millgred, Pentágono." Presentó McKinnon a los hombres y Harry.
"¿Tienen lo que les pedí?" Preguntó Harry a Ángela y Blutther sin preámbulos e ignorando a Millgred y Plutru.
"¿Tiene lo nuestro?" Repreguntó Blutther, mientras sacaba una carpeta y se la entregaba al joven, que se la puso a revisar en silencio.
"Aquí lo tienen." Dijo el adolescente dándoles una carpeta y
guardándose la que le habían dado en una mochila.
"Espero que esté todo en orden, General." Dijo Harry mientras el
hombre la revisaba.
"Lo está." Contestó Blutther luego de leer la carpeta por varios
minutos.
"General, Ángela, ha sido un placer." Dijo Harry levantándose de la
mesa.
"No todo lo está, Sr. Potter." Anunció Millgred cuando Harry se
disponía a dejar el lugar.
"¿Qué no está en orden?" Inquirió el adolescente retornando a su
asiento.
"Nos preguntamos las razones del pedido." Comentó Plutru seriamente.
"Eso es asunto mío." Declaró Harry seriamente.
"¿Qué nos asegura que usted no vendió una copia de esos papeles a
terroristas?" Interrogó Millgred sin rodeos.
"¿Y qué les hace pensar que sí lo hice?" Repreguntó Harry con un tono
de reto.
"Un deposito bancario de 1350000 Euros realizado esta mañana a una cuenta a su nombre en un banco." Contestó Plutru antes de preguntar: "¿Qué explicación tiene a eso?"
"El Sr. Potter participó anoche de una partida de Poker donde la apuesta mínima fue de 10000 Euros. Los 1350000 Euros depositados fue el dinero obtenido al final de la noche." Explicó Ángela luego de que Harry le lanzara una significativa mirada en su dirección.
"También nos preguntamos sobre la falta de información sobre su pasado. Sus padres murieron cuando era bebé, fue a vivir con familiares..." Comenzó Plutru pero Harry lo interrumpió.
"Al grano." Dijo Harry sin muy buen animo.
"Ciertas cosas no cierran. ¿Por qué pidió a una familia amiga adoptar a Karen Hiller, si ni siquiera la conocía?" Preguntó Millgred.
"La hubiera pedido yo en persona, pero no me la hubieran dado siendo menor de 18, aun si tuviera mi custodia legal, como lo hago luego de ser emancipado." Contestó Harry simplemente.
"Aún no nos ha contestado." Comentó Plutru.
"Caballeros, esa niña estaba a punto de suicidarse. Estaba haciendo todo lo que podía para evitarlo. No sabía que eso fuera un crimen." Comentó con sarcasmo el adolescente.
"¿Cómo Jennifer Lower?" Interrogó Plutru haciendo referencia a la chica que se había suicidado en frente de Harry.
"Ya he dado contestaciones sobre ese tema, caballeros. Además, creo recordar que el padre, era un General del Pentágono que era nexo entre su país y el nuestro. ¿Por qué no me explica por que se ignoraron o borraron las denuncias contra el General?" Preguntó Harry dando vuelta el tablero a su favor, al memos momentáneamente.
"Esa no es información confirmada. Y si así lo fuera, no se puede divulgar." Contestó Millgred, nervioso por el cambio de tema.
"Digo lo mismo con respecto a mi vida personal. No se metan porque no soy alguien con quien quiera verse enfrentado." Advirtió Harry a los 2 hombres.
"¿Nos está amenazando?"
"Advirtiendo. ¿O quiere que su esposa sepa sobre su amante, Sr. Plutru? Sr. Millgred, ¿desea que sus jefes se enteren de sus negociados?"" Preguntó Harry con una sonrisa.
"¿Cómo...?" Comenzó Plutru shockeado con sus dichos.
"Si alguno de ustedes, se mete conmigo, Karen, mis amigos o familia, juro por la tumba de mis padres que lamentarán el haberlo hecho. ¿Quedó claro, caballeros?" Preguntó Harry seriamente.
"General, fue un gusto conocerlo. Ángela, olvídate de que existo." Dijo Harry levantándose de nuevo para salir.
Justo cuando iba a abrir la puerta, algo le dijo que se quitara del lugar de inmediato. Gracias a la velocidad y reflejos obtenidos en Quidditch, Harry se corrió para la izquierda, al tiempo que una bala pasó por el lugar en donde había estado parado un momento antes. El proyectil siguió su trayectoria y le dio en la cabeza a Millgred matándolo de inmediato.
"Buena puntería tienen sus francotiradores." Comentó Harry ácidamente a Plutru, tomando su arma y matando a los 2 tiradores que estaban situados en el mismo sitio de antes.
"¿Alguna otra sorpresa tienen para mí?" Preguntó el joven guardando su arma en su cintura de nuevo.
"¿No? Adiós entonces." Dijo Harry dejando el lugar luego de un silencio sepulcral por parte de las 3 personas.
"Se lo advertí: no debían meterse con él." Comentó McKinnon marchándose también del sitio, furiosa con el hecho de haber estado allí además de haber perdido uno de sus mejores elementos como lo era Harry.
****
"Otra hermosa reunión has tenido, he de suponer." Comentó Amelia Bones cuando Harry retornó a los cuarteles, al ver la cara del joven que daba más miedo que la del día anterior.
Harry no respondió. Antes de que alguien supiera que pasaba, tomó su arma, la apuntó contra una pared y vació el cargador entero de su revolver en ella, ante la mirada atónita de todos.
"Así de bien fue." Dijo Harry antes de anunciar que se iría a dormir de inmediato y que no lo molestaran hasta que el se levantara.
"Debe encontrar una nueva manera de descargar toda su furia." Comentó Remus mientras Albus arreglaba la pared y los huecos de bala desaparecían de ella.
****
Pasaron dos días antes de que Harry volviera a dar alguna señal de vida. En esa ocasión fue para desayunar junto a los Miembros adultos de la Orden.
"Pido disculpas por lo del otro día. Mis nervios llegaron a un limite nunca antes visto y necesitaba descargar tensiones de una manera más... práctica a mi manera habitual." Explicó el joven mientras tomaba una taza de café y comenzaba a leer el Profeta.
"¿Llamas 'manera práctica' a vaciar un cargador completo en una pared?" Preguntó con ironía Snape.
"La otra es hacerlo contra una persona. ¿Quiere que lo haga con usted, Snape?" Contestó Harry con una sonrisa. Leyendo el diario, levantó la vista y le preguntó a Dumbledore: "¿Esto es una broma?"
En el articulo de la primera pagina, el diario informaba de una demanda liderada por Draco Malfoy contra Harry por lo que había hecho contra su Padre y otros Mortífagos 'inocentes que estaban bajo la influencia del Imperius'.
"Fue presentada luego del proceso para determinar quienes habían estado allí voluntariamente o no." Explicó Amelia.
"Y como los muertos no hablan, no se puede determinar si eran Mortífagos por su voluntad o no." Dijo Harry irónicamente, antes de agregar: "Si ustedes esperan que yo me siente a explicar mis acciones de ese día, les sugiero que en vez de una silla lo hagan en una cama."
"La demanda no avanzará demasiado. No lo permitiremos." Anunció Bones seriamente, quien se esperaba esa reacción del adolescente.
"Lo que diga, Madame Bones." Murmuró Harry sin dejar de leer el periódico.
"Estamos interesados en saber algo, Harry." Dijo Albus de repente abriendo la carpeta que Harry había traído de la reunión y leyendo los documentos.
"Los papeles de Karen son simples. A partir de ahora Karen Hiller deja de existir en el Mundo Muggle y pasa a ser Karen Weasley, con historial medico y escolar incluidos." Anunció el adolescente sin levantar la vista.
"Ese no es el documento que atrajo nuestra atención precisamente, sino tu certificado de defunción a causa de..." Dijo Albus antes de añadir: "un accidente de automóvil."
"Certificado que no tiene fecha si lo leyó con atención." Comentó Harry, cambiando de página el diario.
"La otra cosa que atrajo nuestra atención." Informó Remus seriamente.
"Sencillo. Entre la opciones que he estado pensando para cuando acabe la guerra, dejar el Mundo Mágico e ir a vivir entre Muggles es una de ellas." Comenzó el adolescente cerrando el diario, enfocando toda su atención a los adultos.
"Cuando acabe la guerra, Voldemort estará muerto y yo seré el responsable de esa muerte, lo que solo contribuirá en subir mi fama a niveles astronómicos, mayores a los actuales.
"Si quiero obtener paz, lo mejor es hacer pensar a todos que estoy muerto. El certificado de defunción tiene ese objetivo." Informó Harry abriendo el diario de nuevo, retomando su lectura.
"¿Por eso no tiene fecha?" Preguntó Tonks con curiosidad.
"La fecha será puesta cuando decida hacerlo." Informó Harry sin inmutarse de su lectura.
"No puedo negar que es un buen plan a futuro." Comentó Albus escuchando la historia con atención. A su alrededor, los demás asintieron en acuerdo a esto.
"¿No lo vas a atender?" Preguntó Remus cuando el celular comenzó a sonar, y Harry no hizo ningún movimiento hacia el aparato.
"No." Contestó el adolescente viendo el número de quien lo llamaba.
"¿Por qué no?" Preguntó confundida Minerva.
"No estoy de humor para escuchar a Ángela hoy." Informó Harry en tono duro.
"Creo que será mejor que la atiendas." Comentó Albus luego de media hora donde el teléfono no cesó de sonar.
"Ahórrate las excusas, no estoy de humor para ellas." Dijo Harry atendiendo la llamada finalmente luego de otros 10 minutos. "Ángela, maldición, la bala del francotirador era para mí si te has olvidado!... Nosotros teníamos un trato, yo obtenía lo que les pedí y ustedes recibían los papeles. Ni el Pentágono ni la CIA debían estar ahí!... ¿Llamaste solo para eso?... ¿Cuándo y dónde será?... Gracias por el aviso." Terminó la charla el adolescente escribiendo algo en su agenda.
"¿Qué ocurre?" Preguntó Dumbledore luego de unos momentos de silencio.
"Debo ir a la lectura del testamento de mis tíos en 45 minutos." Informó el Profesor de Defensa escuetamente antes de irse a cambiar, y dejar los cuarteles una vez más.
****
Cuando Harry regresó, su humor no era precisamente el mejor, pero al menos no estaba tan malo como últimamente lo había estado. Se sentó a cenar, colocando un bolso al lado de su silla, sin hacer comentarios.
"Veo que la lectura del testamento ha sido mejor que tus últimas reuniones." Comentó Moody comenzando a cenar.
"No hubo nada de que sorprenderse. Le dejaron la casa y el dinero a Marge. Fui a Privet Drive a buscar cosas antes de regresar aquí." Informó Harry señalando el bolso.
"Pocas cosas, ¿eh?" Preguntó con ironía Remus.
"Está todo encogido para que quepa en el bolso. Traje un equipo de música de mi primo, CD suyos, que van a escuchar mucho aquí y en Hogwarts, algunos libros, y otras cosas." Explicó Harry.
"¿Qué clase de música?" Preguntó Bill con curiosidad.
"Latina. Vaya a saber por que, a mi primo le comenzó a gustar esa música. La escuché este verano y me gustó." Comentó el adolescente.
"¿Qué ritmos?" Quiso saber Charlie.
"Rock y baladas de amor principalmente. Alejandro Sanz, Ricardo Arjona, Charly García y otros." Dijo Harry antes de ir a la Biblioteca a hacer algunas cosas, pidiendo no ser molestado excepto que haya una reunión de la Orden o una reunión del Profesorado. Inmediatamente después a que entrara allí, la Orden escuchó música que indicaba que Harry había encendido el equipo musical.
****
Dos horas más tarde, Harry aún seguía en la Biblioteca con la música encendida. Decidiéndose a entrar, Karen fue hasta allí y golpeó la puerta suavemente.
"Alohomora!" Escuchó la niña una exclamación desde adentro.
"Cerró la puerta mágicamente. Ese es el encantamiento para abrirlas." Explicó Albus al tiempo que las puertas se abrían y los dos entraban a revisar al adolescente.
Sobre una de las mesas, había un tablero de ajedrez con algunas piezas puestas. Cerca de allí, estaba el equipo musical, mientras Harry miraba el tablero con un cigarrillo en una mano y su varita en la otra.
"¿Sucede algo?" Preguntó el joven levantando su vista y bajando el volumen de la música.
"Teníamos curiosidad por saber que estabas haciendo." Explicó Dumbledore mientras él y Karen se acercaron a revisar el tablero. Harry asintió antes de subir la música de nuevo a su volumen anterior
"Lindas piezas." Comentó el Director observándolas.
"¿Qué es cada una de ellas?" Quiso saber Karen con curiosidad.
"Solo he hecho las negras. No he decidido que representará cada pieza blanca." Explicó Harry antes de detallar.
"Los peones son Mortífagos, las Torres son Trolls, los Caballos son Dementores, Los Alfiles son vampiros, la Reina es una Banshee y el rey es Voldemort."
"Buena creatividad." Comentó Remus entrando con Minerva, escuchando la charla. Los dos adultos observaron el tablero con atención antes de comenzar a observar las piezas.
"¿Piezas de ajedrez mágico o simples como los Muggles?" Preguntó Ron entrando con Hermione y los otros observando las piezas también.
"No lo he decidido, además no conozco el encantamiento para hacerlas mover como las otras." Informó Harry observando su agenda y tomando una pequeña roca y comenzando a transformarla en una nueva pieza.
"Los Aurors serán los peones blancos." Informó el joven concluyendo su nueva pieza: un mago vistiendo túnica de Auror. Luego repitió el mismo proceso otras 7 veces antes de colocarlas en su lugar del tablero.
Repentinamente, Harry levantó su vista a sus 2 mejores amigos y una sonrisa apareció en sus labios antes de comenzar otra pieza. Esta sería claramente una estudiante con una pequeña pila de libros en sus manos.
"Harry, ¿tú no...?" Comenzó a preguntar Hermione creyendo entender el significado de la pieza.
"¿Lo has olvidado, Hermione? ¿El tablero de Primer Año? Tú fuiste una Torre. Ron fue un caballo. Yo fui el Alfil esa vez. Esta vez, no seré un Alfil, seré el rey en este juego." Dijo Harry mientras hacía uno de los 2 Caballos. Estos, al igual que las Torre, era un estudiante, solo que en vez de tener libros, iba montado en una escoba.
"¿De qué tablero están hablando?" Preguntó confundida Molly, mientras Harry agregaba las 4 nuevas piezas al tablero.
"Larga historia." Dijeron Harry, Ron y Hermione al mismo tiempo antes de Dumbledore o McGonagall contestaran.
"¿Quiénes serán la Reina y los Alfiles?" Preguntó Bill con curiosidad, mientras Harry seguía leyendo su agenda.
"Fawkes es la Reina. Aún no he decidido el Alfil." Comentó el adolescente sin levantar la vista de su lectura.
"¿Ahora qué?" Exclamó Harry cuando su celular sonó: "Hable... Sí, habla HP... No, salgo del juego... Lo de la otra noche me alcanza para bastante tiempo... Lo lamento pero no... Mándale mis condolencias a los perdedores de esa noche, pero no doy revancha... Adiós." Terminada la charla, Harry guardó su celular antes de decirle a los adultos: "Se acabó el Harry jugador de Poker."
"Y yo que quería jugar." Se lamentó Bill.
"¿Sucede algo que están todos aquí? Antes de entrar pedí no ser molestado excepto que haya una reunión.." Preguntó Harry tomando sus los peones de ambos lados, las 2 torres blancas y moviendo los dos caballos a posiciones de Alfiles.
"¿A qué se debe el cambio?" Inquirió Dumbledore con curiosidad viendo los movimientos.
"Cambié de opinión en algo y he decidido hacer unos cambios en las piezas." Explicó Harry cambiando los peones negros de Mortífagos a Basiliscos y los blancos de Aurors a Fénixes.
"No han contestado mi pregunta." Repitió el adolescente con tono de impaciencia ante la interrupción de su trabajo.
"Queríamos ver que estabas haciendo." Contestó el Director en nombre de todos.
"Si se quedan no hagan ruido y no me bajen la música!" Exclamó Harry viendo que Charlie se acercaba al equipo musical.
"Quería ver los CDs." Informó Charlie tomándolos, comenzándolos a ver.
"Lo que digas." Murmuró Harry antes de comenzar a trabajar en las 2 torres: estas eran un lobo apoyado en una especie de torre pequeña.
"Gracias por incluirme." Comentó Remus viendo la nueva pieza.
Harry solo asintió con una sonrisa antes de comenzar con los Caballos: un gran perro negro, la forma Animaga de Sirius. Todos los demás, incluyendo Karen a quien se le explicó el significado de ambas piezas, miraban maravillados el trabajo que realizaba el joven.
"¿A mí me sacaste del tablero?" Preguntó Hermione haciéndose la ofendida.
"Tú eres la Reina." Informó Harry tomando una de las Torres, y haciéndole solo une modificación: le agregó una corona de Reina a la pieza.
"¿Por qué ella es la Reina?" Preguntó Ron con curiosidad.
"Siempre está al lado del Rey, mientras que el Alfil siempre acompaña a los Reyes. Al menos así se comienza en el tablero." Explicó el adolescente antes de comenzar la última de todas: el Rey. Esa pieza era una réplica miniatura de Harry, con la cicatriz incluida. Sobre su cabeza había una corona, en su mano derecha estaba su varita, y en su cintura una espada.
"Les presento mi tablero de ajedrez." Dijo Harry al incluir al Rey y la Reina en sus sitios del tablero.
"Un trabajo impresionante." Dijo Bill revisando todo el tablero y sus piezas mientras los demás hacían lo mismo, felicitando a Harry por su trabajo.
"¿Lo vas a hacer un ajedrez mágico?" Preguntó Ron a su amigo.
"Este no lo será. Si hago algún otro, sí, pero este no." Contestó Harry antes de preguntarle a McGonagall que miraba el tablero con una cara pensativa, como si eso le hubiera dado una idea: "¿Ocurre algo, Profesora?"
"Me ha solucionado un problema, Sr. Potter." Respondió Minerva con una sonrisa.
"Y ese es..." Comenzó el adolescente con curiosidad.
"Sencillo. Cada año para los EXTASIS, todos los alumnos de Sexto y Séptimo año deben hacer un proyecto personal. Este año, debo admitir que me estaba costando encontrar alguno que no haya realizado ya en el pasado. Usted me acaba de dar la idea para ello." Explicó la Profesora de Transformación viendo el tablero cuidadosamente.
"Un tablero con piezas de ajedrez. La mitad hechas por Sexto y la otra por Séptimo. ¿Estoy en lo correcto?" Preguntó Harry creyendo entender la situación.
"Exactamente." Asintió la Jefa de Gryffindor, antes de agregar al trío: "Por supuesto que Ustedes tres deben actuar como si no conocieran sobre esto."
"¿Harry continuará yendo a clases siendo Profesor?" Preguntó Ginny confundida, mientras los 3 asentían al pedido.
"El Sr. Potter recibirá clases en forma separada al resto de sus compañeros, pero continuará recibiéndolas. Después de todo aún no se ha graduado de Hogwarts." Explicó Dumbledore.
"¿Eso significa que podrá seguir jugando al Quidditch?" Preguntó Ron con esperanza en su voz.
"Para desgracia de Severus, sí. Al ser arrestada Umbridge, todos sus decretos y decisiones al frente del Colegio han quedado anuladas, incluyendo la prohibición del Sr. Potter para jugar Quidditch." Dijo Minerva con una sonrisa de oreja a oreja.
"Volvemos al aire!" Exclamó Harry chocando los 5 con Ron.
"Necesitamos rearmar el equipo. Fred, George, Alicia y Angelina se graduaron y necesitaremos reemplazantes además de un equipo de Reserva." Comentó Ginny con sus 2 compañeros de equipo.
"¿Quién será el Capitán?" Preguntó Ron a Minerva.
"Por antigüedad y experiencia en el Equipo, será el Sr. Potter." Informó McGonagall a los 3 jugadores.
Mientras tanto, Dumbledore y Karen habían empezado a probar el tablero y las piezas jugando la revancha del juego del cumpleaños de Harry. Karen jugaba con la blancas y Dumbledore con las negras.
"¿Quién dio permiso para jugar con mi tablero?" Preguntó Harry cuando se dio cuenta de esto, con un fingido enojo con los 2.
"Probábamos como era." Comentó Karen moviendo su Alfil, haciendo jaque en el proceso.
"La próxima vez avisen. Y ni se les ocurra convertir las piezas en mágicas." Informó el adolescente sentándose a ver el juego.
"Realmente realistas son las piezas, Harry." Comentó Dumbledore saliendo del jaque en el que estaba, luego de asegurarle al joven que permanecerían como estaban.
"Gracias por el elogio, Profesor." Sonrió Harry.
"¿Encontraste una nueva forma de descargar toda tu ira?" Preguntó Molly con esperanzas de que fuera una respuesta afirmativa.
"Es demasiado pronto para saberlo, pero puede que sí lo sea." Dijo Harry simplemente.
Karen y Albus continuaron su partida antes de que Molly llamara a todos a cenar, dejando el juego en tablas de nuevo. En el tablero solo quedaban del lado de las piezas blancas, el Rey (Harry), la Reina (Hermione), un alfil y una torre (Ron y Remus respectivamente) y 2 peones (Fénixes). De las negras, solo quedaban el Rey (Voldemort), 2 Peones (Basiliscos), 1 Caballo (Dementores) y un Alfil (Vampiro).
Alguien amigo de la adivinación, podría llamarlo una premonición de futuro, otros solo las piezas de un juego inconcluso. Harry al ver las piezas sobrantes del tablero, quería inclinarse por la segunda, pero algo le decía que eso estaba más cerca de la primera opción que de la última.
"Ruego que me equivoque." Pensó Harry antes de sentarse a cenar con los demás.