Capítulo 12 Incidentes Nocturnos en los Dormitorios
El discurso de Harry fue el comentario de la Escuela todo el día durante ese fin de semana, el primero desde el inicio de las clases. Tanto el Profeta como el Quibbler sacaron ediciones especiales hablando sobre él y sobre las consecuencias que había traído.
El correo a Harry aumentó en grandes cantidades desde ese momento. Cuando el correo matutino las traía, las dejaba a un lado y continuaba desayunando.
El lunes recibió más de 15 Vociferadores en el correo. Sacudiendo la cabeza, el adolescente tomó su varita y murmuró algunas palabras antes de retirarse del Salón.
A punto de salir, se giró a la mesa de los Profesores, donde las cartas aún estaban y les dijo: "Les sugiero que se corran de allí de inmediato."
Antes de que alguien preguntara la razón, la vieron: los vociferadores comenzaron a temblar antes de abrirse. En vez de que salga voz, comenzaron a salir fuegos artificiales en todas las direcciones. Tanto los profesores como los alumnos, se escondieron debajo de sus mesas para cubrirse de los artificios, que seguían saliendo.
Harry continuaba en la puerta, viendo el espectáculo con una sonrisa en los labios. Hermione, que había tardado haciendo algo en la Sala Común, llegó justo a tiempo para ver el espectáculo y a su mejor amigo en la puerta.
"Lindo el show, ¿no crees?" Preguntó Harry a su amiga notándola junto a él.
"¿Quién los soltó?" Preguntó Hermione mientras los fuegos comenzaban a apagarse.
"Convertí 15 vociferadores en eso." Informó el Profesor antes de que los últimos artificios se dirigieran al techo y estallaran creando una imagen: el escudo de Hogwarts.
"Excelente." Comentó Hermione viendo el Escudo en el techo.
Los alumnos y Profesores, viendo que los fuegos artificiales habían terminado, salieron de debajo de las mesas y vieron la imagen en el techo. Varios aplaudieron a Harry, quien sonrió e hizo una reverencia a todos en gratitud antes de irse a su salón de clases a esperar a Sexto Año.
"Excelente uso de transformaciones con encantamientos, ¿no lo creen así, Minerva, Filius?" Preguntó Dumbledore a los dos Profesores, mientras en la mesa, todos se recuperaban del shock de los fuegos artificiales.
"Realmente impresionante su trabajo." Coincidió el Jefe de Ravenclaw.
"Una obra de arte." Comentó Minerva mientras todos se levantaban de sus asientos e iban a enseñar sus clases.
"¿Alguien logró algo nuevo en su Patronus?" Preguntó Harry a los alumnos de sexto luego de tomar lista.
Hermione, Ron y, para sorpresa de varios, Neville levantaron la mano. Harry anotó algo en un pergamino antes de pedirles que se adelantaran a mostrarlo.
Hermione fue primera. Su forma, al igual que el año anterior era una nutria. Esta salió de su varita por varios segundos antes de esfumarse. La chica tenía una sonrisa en sus labios al ver eso.
"Vas bien. Todavía te falta camino, pero vas muy bien." Dijo Harry indicándole que regresara a su asiento. Hermione le sonrió antes de hacerlo.
Ron fue el próximo. Su forma fue un gran dragón, que se mantuvo algunos segundos más que el de Hermione. Harry reconoció la forma del animal como la de un Ridgeback Noruego.
"¿Norbert?" Le preguntó Harry en un susurro conteniendo la risa.
"Puede ser." Contestó el pelirrojo volviendo a su asiento.
El de Neville, fue por lejos, el más sorprendente de los 3 Patronus: un gran Fénix salió de su varita y dio una vuelta alrededor del Aula. Unos momentos más tarde, apareció un ciervo que dio vueltas junto al Fénix, antes de regresar ambos a quienes los convocaron, hacer una reverencia y desaparecer de la vista.
"Necesitaba ejercitar el mío." Informó Harry a los alumnos que lo miraban con sorpresa. Excepto Ron y Hermione, nadie parecía saber que Harry podía hacer uno.
"Los demás continúen practicando el encantamiento, mientras llevo a ellos 3 a hacer una pequeña práctica." Dijo Harry a los alumnos señalando al trío, antes de añadir: "Sr. MacMillan, Srta. Abbott, la clase queda a su cargo momentáneamente hasta mi regreso, ¿entendido?" Preguntó Harry a los 2 Hufflepuff.
"Sí, Profesor." Contestaron los 2 Prefectos seriamente a la vez.
"Vengan conmigo. Vamos a probar su Patronus." Indicó Harry a sus amigos guiándolos fuera de la clase.
"¿Adonde y cómo los vamos a probar?" Preguntó Neville confundido.
"El Patronus solo sirve contra dos cosas: los Dementores y los Lethifolds. Los últimos son demasiado peligrosos, así que lo haremos con un Dementor falso." Explicó Harry haciéndolos entrar en el Aula de Profesores, donde Minerva estaba corrigiendo algo.
"Buenos días a los 4." Saludó la Vice Directora al verlos entrar.
"Buenos días, Profesora." Saludaron los adolescentes mientras Harry los guiaba hacia un armario.
"¿Boggart?" Preguntaron los 3 Gryffindor al mismo tiempo.
"Encontré uno el otro día y lo iba a usar con tercero. No creía que ni ustedes ni séptimo, estuvieran listos para enfrentar a un Dementor todavía." Explicó Harry mientras les explicaba que iban a hacer: por turnos, los 3 probarían el Patronus en el Boggart-Dementor.
"¿Les molesta si miro?" Preguntó McGonagall a los 4.
"En absoluto." Contestó el Profesor antes de indicarle a Hermione, antes de abrir el armario: "Ahora!"
Del armario salió un Dementor y se fue caminando hasta Hermione quien pareció quedarse congelada. Ron viendo que ella no podría, lanzó su Patronus, pero no logró detenerlo y continuó avanzando hasta Hermione que parecía aterrada. Neville lo intentó pero no tuvo mucho éxito tampoco.
"EXPECTO PATRONUM!" Vociferaron a la vez dos voces cerca del trío de alumnos.
De repente frente a ellos, aparecieron una gata y un ciervo que avanzaron hasta el Dementor y lo obligaron a retroceder hasta el armario. Viendo que la amenaza estaba acabada, Neville se apresuró a cerrar las puertas, mientras la gata desaparecía frente a la Jefa de Gryffindor y el ciervo frente al Profesor de Defensa.
"Hermione, ¿estás bien?" Preguntó Harry preocupado acercándose a su amiga, junto a los demás.
"No sé que me pasó... Me congelé..." Dijo Hermione aún aterrada por todo lo que sucedió.
"Neville, en mi Oficina hay varias barras de chocolate de Honeydukes! Trámemelas!" Ordenó Harry a su amigo, quien se apresuró a hacerlo.
"No sé que me pasó." Repitió Hermione sin mirar a Harry.
"Tranquila, ¿de acuerdo? Tal vez no debería haberte hecho enfrentar al Dementor en este momento. Debería haber esperado que el tuyo sea más fuerte. No hay nada de que disculparse." Le dijo Harry a Hermione mirándola a los ojos.
"Aquí está el chocolate!" Exclamó Neville que llegó corriendo, con varias barras de chocolate.
"Coman una cada uno de Ustedes." Ordenó el Profesor a los tres, antes de abrir una él mismo, ofreciéndole una a Minerva también.
"Gracias por su ayuda." Dijo Harry a McGonagall mientras comían el chocolate los 5.
"No hay de que." Dijo Minerva asintiendo con la cabeza el agradecimiento.
"¿Necesitas ir a la Enfermería?" Preguntó Ron preocupado a Hermione, que tenía los ojos cerrado fuertemente sin mirar ni a nada ni a nadie.
"Vuelvan a la Clase. La llevaré a la Torre de inmediato." Ordenó Harry a sus amigos, quienes asintieron y salieron. Cuando Hermione abrió la boca para protestar, Harry le dijo: "O vienes conmigo o pasas el próximo mes en detención con Filch."
"Como usted ordene, mi General." Bromeó Hermione, saliendo de la sala con el otro adolescente, diciéndole adiós a su Jefa de Casa.
"¿Qué te pasó allí?" Preguntó Harry a su amiga seriamente cuando los dos estaban ya en la sala común.
"No lo sé. Creía estar lista para esto, pero estaba equivocada." Dijo Hermione sin mirar a su amigo.
"Déjame rehacer la pregunta: ¿qué te pasa?" Preguntó Harry esta vez en tono muy serio.
"No fue un verano fácil. Tengo problemas personales." Dijo Hermione de repente.
"¿Tus padres?"
"Se van a divorciar. Mi padre estuvo manteniendo una relación paralela a la de mi madre por 2 años y nos enteramos hace poco." Dijo Hermione antes de estallar en llanto.
Harry se acercó y la abrazó con fuerza, dándole su hombro para que llorara en él. Hermione se aferró a su amigo con fuerza, llorando con más fuerza a cada momento.
Luego de 20 minutos en esa posición, con la chica sin dejar de llorar, el retrato de abrió y Minerva entró. Afortunadamente, Hermione no la notó, pero Harry sí lo hizo.
En un susurro, apenas audible, le dijo a la Profesora, que los miraba con preocupación: "más tarde se lo explico, ahora no."
Minerva asintió y salió de la Torre dejando a los 2 jóvenes en esa posición, haciendo una nota mental de hablar con Harry esa noche en la reunión de Profesores sin falta.
Un rato más tarde, Hermione se durmió después de tanto llorar. Harry la apoyó en un sillón y llamó a Dobby y le pidió que la depositara en su cama, mientras él retornaba a su salón de clases.
Cuando arribó a él, Ron y Malfoy se miraban con profundo odio, los dos apuntándose el uno al otro con la varita. Harry tomó la suya, la apuntó a los dos y dijo el encantamiento de desarme. Las dos varitas fueron a parar a sus manos mientras los 2 estudiantes se giraban para ver quien les había quitado la varita de las manos. Harry en ese momento, también vio a Hannah y a Ernie inconscientes en el suelo.
"Quiero una explicación de esto, y la quiero YA!" Gritó Harry a todos, ordenándoles regresar a sus asientos de inmediato, luego de despertar a los 2 Prefectos inconscientes.
Todo el mundo comenzó a hablar a la vez, haciendo imposible que Harry lograra entender algo de lo que decían Luego de un rato, logró entender una parte de todo.
Malfoy había insultado a Hermione cuando escuchó a Ron y Neville hablar del incidente en la Sala de Profesores, diciendo que era una cobarde. Ron, furioso con esto, lo insultó a él y a su padre, tildándolos de cobardes y sucios Mortífagos. Eso había ocurrido justo antes de que él llegara.
"¿Por qué terminaron inconscientes ustedes dos?" Le preguntó Harry a Hannah y Ernie.
"Nos aturdió!" Exclamaron los dos a la vez señalando a Draco.
"Sr. Malfoy 50 puntos de Slytherin por insultar a otro alumno comenzar una pelea y otros 50 por aturdir a dos Prefectos. Además de 2 semanas de detención con el Sr. Filch. Sr. Weasley 50 puntos de Gryffindor por iniciar una pelea y una semana de detención con Filch." Informó Harry a los dos seriamente antes de que sonara el timbre del fin de la clase.
"Quédate un minuto. Necesito hablar contigo urgente." Indicó Harry a Ron, que no estaba feliz por el castigo, mientras los demás salían.
"Escucha, Harry..." Comenzó Ron, pero Harry lo cortó.
"Sabes que si no te castigaba, me hubieran acusado de favoritismo por ti, Ron." Declaró el Profesor seriamente, antes de agregar: "No te llamé por eso, Hermione tiene problemas." Acto seguido, Harry le contó lo que Hermione le había dicho hacía un rato.
"No lo sabía." Murmuró Ron dejándose caer en una silla de repente.
"Yo me acabo de enterar." Dijo Harry antes de añadir con un tono muy serio: "Escucha, Hermione nos necesita más que nunca. Haznos un favor a los tres, no discutas con ella debido a tonterías, habla con ella si lo necesita o está callado si no desea hablar."
"Tranquilo, así lo haré." Prometió Ron antes de abandonar el salón e ir a Adivinación con Firenze, mientras Harry se preparaba para su siguiente clase: tercero.
"O calma a Malfoy o lo calmo yo!" Le gritó Harry a Snape esa noche en la reunión de Profesores, luego de la clase que Harry tuvo con Severus.
En todo el día, había habido más problemas con el ex-Prefecto que en toda la última semana. Al menos, 6 peleas había habido en el Colegio ese día, y en todas estaba Malfoy echando maleficios alguien.
"Caballeros, no comiencen una discusión." Dijo Minerva en tono autoritario antes de que Snape le contestara a Harry y se arme una pelea entre los 2 Profesores.
"¿Y como lo vas a calmar, Potter? ¿Matándolo?" Replicó Snape ignorando a McGonagall.
"Ganas no me faltan! Si el idiota de su Jefe de Casa no sabe controlar a sus alumnos como Dios manda, alguien debe hacerlo!" Le gritó Harry a Severus en la cara.
"Intulgios!" Vociferó Snape apuntando su varita a Harry.
Antes de que Harry levantara su escudo, el hechizo desapareció. Ambos Profesores giraron para ver que había pasado y vieron a Dumbledore en la entrada con su varita levantada, mirándolos a los dos bastante furioso.
"Siéntense los dos." Ordenó Albus a los 2 hombres, que lo hicieron de inmediato lanzándose miradas de puro odio.
"Uno de los dos no termine vivo el año." Comentó Minerva a Dumbledore en un susurro, mientras el resto de los Profesores tomaba asiento.
"¿¿QUÉ PARTE DE NO DEBEN ATACARSE MUTUAMENTE NO ENTENDIERON??" Gritó Albus a los 2 miembros de Profesorado.
"Pregúntele a él. Yo no levanté mi varita para atacar." Contestó Harry simplemente.
"Todavía no lo hiciste." Replicó Snape con odio.
"Si se vuelve a producir otro incidente así, los dos están despedidos," Informó Albus a los dos Profesores antes de agregarle a Harry: "y tú expulsado. ¿Quedó claro, caballeros?"
"Como el cristal." Aseguró Harry seriamente.
"Lo entendí." Murmuró el Profesor de Pociones seriamente.
"Comencemos la reunión entonces." Señaló el Director, dando comienzo a la misma.
Por la siguiente hora y media, los miembros del Profesorado discutieron los eventos de la última semana y ese día. La mayoría se quejó también de Malfoy y sus actitudes.
"Contrólalo o será expulsado." Dijo en tono cortante Dumbledore a Severus, quien asintió sin hacer comentarios.
"¿Cómo se encuentra la Srta. Granger?" Preguntó Minerva preocupada a Harry cuando terminó la reunión.
"Saltando en una pata." Contestó sarcásticamente Harry, con algo de dureza que no deseaba incluir. Al darse cuenta de esto, añadió: "Perdóneme, no ha sido un buen día en absoluto."
"¿Qué le sucedió? Estaba bastante mal esta tarde en la Sala Común." Reiteró la Pregunta Minerva, haciendo caso omiso al tono usado por el adolescente. Conocía todos los sucesos de ese día y sabía que no había sido muy bueno para el joven.
"Sus padres van a divorciarse." Informó Harry antes de contarle todo lo que sabía con respecto a la situación.
"¿Tú o el Sr. Weasley conocían esta situación?" Preguntó Minerva shockeada por la revelación.
"Ron se enteró cuando se lo dije hoy a la mañana." Contestó el Profesor, antes de añadir con frustración: "Deseo hablar con ella y no puedo!"
"Dudo que puedas esperar hasta mañana." Comentó McGonagall viendo la frustración.
"Mañana doy clases todo el día, tengo la suya a la noche y hay reunión del Equipo también. Si me dice donde hacer un hueco en mi horario para hablar con ella, le doy un premio." Respondió Harry, antes de preguntarle a la Vice Directora: "Si encuentro la manera de llegar a sus dormitorios sin activar las alarmas de intrusión, ¿me deja pasar la noche allí?"
"¿Crees poder hacerlo?" Preguntó Albus acercándose al dúo, escuchando la charla.
"No lo sé, pero voy a hacer el intento." Respondió Harry repitiendo la pregunta a Minerva.
"Si lo haces sin tu escoba o un Elfo Doméstico u otra cosa que no sea tu varita e ingenio, puedes hacerlo." Replicó Minerva.
"¿Es un reto eso?" Preguntó Harry con una sonrisa.
"Así es. Y yo estaré allí para asegurarme de que cumplas esas reglas." Dijo Minerva yendo con Harry a la Torre Gryffindor, mientras Albus lo siguió unos momentos después, curioso por ver que pasaría con el desafío.
Hermione esta shockeada al ver a Dumbledore con Minerva en sus dormitorios esa noche. Lavender y Parvati estaba durmiendo desde hacía un rato, sin saber de la visita de los directivos.
"¿Qué ocurre?" Preguntó Hermione a McGonagall.
"Harry quedó bastante preocupado por lo de esta tarde, y como mañana no iba a poder hacerse un hueco en sus horarios para hablar con usted, decidió hacer una visita nocturna." Informó Dumbledore antes de contarle sobre el reto entre los 2 Profesores.
Apenas concluyó Dumbledore su historia, la puerta del dormitorio se abrió y Harry entró literalmente volando. En su espalda había dos alas como de un ángel. Mientras Hermione y los dos Profesores lo miraban con shock por esto, Harry apuntó su varita al suelo e hizo aparecer una bolsa de dormir, donde se sentó antes de removerse las alas con la varita.
"Usted dijo que solo podía usar mi varita y mi ingenio. Esta fue la única cosa que se me ocurrió." Dijo Harry a McGonagall, antes de sacarse la túnica y ponerse el pijama.
"Debe admitir, Profesora, que fue creativo y siguió sus reglas al pie de la letra." Dijo Hermione conteniendo la risa ante la cara de su Jefa de Casa.
"Estoy segura que puedo dejarlos a los dos solos sin que haya ningún problema o que suceda algo de lo que me arrepienta por la mañana, ¿verdad?" Preguntó Minerva seriamente a los dos adolescentes.
"Profesora, si quisiera tener sexo con Hermione, lo haría en mis habitaciones, no en un dormitorio de chicas con dos durmiendo cerca nuestro." Contestó Harry.
"HARRY JAMES POTTER!!" Exclamó escandalizada la Vice Directora, mientras Hermione trataba de no reírse con la cara de Minerva. Dumbledore hacía lo mismo, encontrando la situación extremadamente divertida.
"No pasará nada, Profesora, tranquilícese." Aseguró Harry seriamente a McGonagall.
"Eso espero o tendré tu cabeza en la mañana." Amenazó Minerva antes de dejar el dormitorio con Dumbledore.
Harry y Hermione se miraron por un segundo antes de estallar en carcajadas al mismo tiempo. Les costó varios minutos lograr calmarse a los dos.
"Hace rato que no me reía así." Dijo Hermione cuando se calmaron los dos.
"La última vez creo que fue cuando Neville comió la galleta de canario de los Mellizos en Cuarto Año!" Recordó Harry con una sonrisa ante esa imagen.
"Que tiempos aquellos, ¿verdad?" Dijo Hermione pensativa.
"Los extraño demasiado." Admitió el Profesor con melancolía.
"¿Recuerdas a Fluffy?" Preguntó Hermione con una risa.
"¿Y Norbert?" Preguntó Harry también riéndose.
"¿Y yo qué?" Preguntó una nueva voz sorprendiendo al dúo, que giraron hacia la voz, Harry con su arma y Hermione con su varita.
"Dobby, nos asustaste!" Exclamó la Prefecto guardando su varita mientras su amigo guardaba su arma.
"Dobby, lo siente mucho! No fue su intención asustarlos!" Exclamó el Elfo golpeándose la cabeza con el marco de la cama.
"Dobby si Parvati y Lavender me ven aquí, tendré a todas las chicas de la Torre lanzándome maleficios y acusándome de pervertido y violador! Cálmate!" Pidió el adolescente, deteniendo a Dobby y callándolo colocándole una mano en la boca.
"Dobby lo siente mucho, Harry Potter!" Exclamó en voz baja el Elfo.
"Dobby, ¿qué sucede?" Preguntó Hermione a Dobby antes de preguntarle a Harry: "¿No llamaron a reunión, verdad?"
"Dumbledore no me dijo nada." Negó Harry.
"El Profesor Dumbledore le pidió a Dobby que les trajera esto." Dijo Dobby dándoles una bandeja con 2 tazas de café, antes de añadir: "Negro, cargado y sin azúcar como siempre para el Señor Harry Potter y chocolate caliente para la Srta. Granger." Acto seguido, Dobby se esfumó del dormitorio.
"Ese elfo es único!" Se rió Harry, pero se calmó cuando escuchó ruidos de la cama de Parvati.
"A ellas no las despierta ni una bomba debajo de su cama!" Aseguró Hermione riéndose.
"Si tú lo dices." Comentó el Profesor con una sonrisa.
"Sube a la cama. No te puedes quedar ahí todo el tiempo." Dijo Hermione señalando la bolsa de dormir donde Harry estaba sentado en posición india, con las dos piernas cruzadas.
"Solo porque lo pides tú." Dijo Harry sentándose en una punta de la cama, mientras Hermione ocupaba la otra.
"A veces me gustaría volver a tener 11 años y entrar en Hogwarts de nuevo." Dijo Hermione de repente.
"No eres la única. Esta guerra nos va a cambiar a todos, sobre todo a nosotros 3." Dijo Harry pensativamente.
"¿No nos cambió ya?" Preguntó Hermione.
"Por supuesto que lo hizo. Los 3 dejamos de ser niños cuando bajamos por la piedra, solo que nadie quiso darse cuenta. Era más fácil tratarnos como a 3 niños en vez de adultos. Las consecuencias fueron obvias." Contestó el adolescente.
"¿Piensas mucho en él?" Preguntó Hermione. Harry no necesitaba preguntar en quien: Sirius.
"A veces. Es lo que me hace continuar: la sed de justicia por él, Cedric y mis padres. Si no tuviera eso, ya habría salido después de lo del año pasado." Contestó Harry luego de meditar varios segundos su respuesta.
"Harry! ¿Qué haces en un dormitorio de chicas?" Preguntó Katie en voz baja entrando en ese momento y viendo a su compañero de equipo sentado en la cama de la Prefecto.
"Larga historia." Contestó simplemente el Profesor antes de añadir señalando a las camas de Lavender y Parvati: "Dumbledore y McGonagall saben que estoy aquí, pero apreciaría que ellas no se enteren, Katie."
"¿Les molesta si me agrego a su charla o es privada?" Preguntó la Premio Anual.
"Da igual." Contestó Hermione, mientras Harry asintió.
"¿De que hablaban?" Preguntó Katie sentándose en la bolsa de dormir.
"La guerra y como quedaremos al final de ella." Comentó Harry antes de que la puerta se abriera y entrara Ginny corriendo.
"Hermione, necesito..." Comenzó la pelirroja pero vio a Harry y gritó: "Harry, ¿qué haces en un dormitorio de chicas?"
"¿Qué pasa?" Preguntó Lavender que se despertó por el grito de Ginny. Al ver a Harry, gritó: "AAAAAAAHHHHHHHH!"
"Chau visita sorpresa." Comentó Harry sarcásticamente antes de decirle a Ginny: "Intentaba pasar desapercibido."
"Desmaius!" Gritó Lavender apuntando su varita a Harry, desconociendo la situación.
"Pervertido!" Gritó Parvati lanzándole a Harry un par de maleficios, quien se había lanzado atrás de la cama para no ser alcanzado.
"Cálmense las dos!" Ordenó Katie, intentando rescatar a su amigo antes de que la situación pasara a algo peor.
"Parvati, Lavender, Ginny, Harry vino a verme porque necesitaba hablar conmigo de urgencia y mañana no podría hacerlo." Explicó Hermione a las 3 chicas, antes de añadir: "Dumbledore y McGonagall saben que está aquí, así que no hay nada de que preocuparse."
"¿Puedo salir ya?" Preguntó Harry tímidamente, desde atrás de la cama.
"Sal, cobarde!" Se rió Katie, mientras las 2 chicas de sexto guardaban sus varitas.
"Creo que será mejor que hablemos en otro momento. Obviamente a cierta gente le molesta que un chico haga esfuerzos para ver a una amiga que lo necesita. Veré cuando puedo hacerme un hueco en mis horarios para hablar contigo." Le dijo Harry a Hermione, enrollando la bolsa de dormir.
"Te necesito conmigo. Quédate." Rogó la Prefecto a su amigo en tono algo desesperado.
"Si ellas no tienen problemas con que esté aquí esta noche, me quedo." Dijo Harry apuntando a Lavender y Parvati, que lo miraban con desconfianza.
"Ustedes dos nos acompañan!" Exclamó Ginny tomando a Lavender mientras Katie hacía lo mismo con Parvati. Ambas habían escuchado la desesperación en el tono de Hermione y sabían que necesitaba a alguien que la conociera tanto como Harry o Ron en ese momento.
Unos minutos después, en los cuales los dos amigos terminaron sus cafés en silencio, entraron de nuevo Katie y Ginny. Las dos fueron hasta el dúo. Katie se volvió a sentar en la bolsa de dormir mientras Ginny se sentó a su lado.
"Linda mezcla esta noche en este dormitorio: un chico, la Premio Anual del Colegio, una Prefecto de Sexto y otra de quinto. Solo uno de nosotros debería estar acá." Comentó Katie.
"Lavender fue a mi dormitorio y Parvati al de Katie." Explicó Ginny, mientras Dobby apareció de nuevo. Los 4 alumnos le pidieron otra ronda de cafés, el de Hermione tan fuerte como el del Profesor de Defensa.
"Mañana todo el mundo me va a llamar Sátiro y violador." Comentó sarcásticamente Harry.
"¿Qué esperabas viniendo aquí?" Preguntó Ginny con ironía.
"La idea era que solo lo supieran Dumbledore, McGonagall y nosotros 2! No todos los demás!" Exclamó Harry.
"¿Qué hacen ustedes dos en mi dormitorio a la medianoche?" Preguntó Hermione a Katie y Ginny de repente.
"Necesito tu ayuda de urgencia!" Exclamó Ginny sacando a rastras a Hermione de su dormitorio.
"No me mires así! A mi no me lo contó!" Exclamó Katie cuando Harry giró para verla con una mirada de pregunta.
"¿Qué haces TÚ aquí?" Replicó Katie a Harry.
"Hermione necesitaba hablar con alguien de urgencia. Tiene problemas personales y quiero tratar su depresión antes de que pase a otro nivel más alto." Informó el Profesor seriamente antes de que las dos chicas retornaran al dormitorio. Con ellas, estaban algunas otras más, todas de quinto y séptimo, junto a Lavender y Parvati, que miraron a Harry con desconfianza, todas apuntándoles con sus varitas.
"Mejor me largo de aquí antes de que esto empeore!" Le dijo Harry a Hermione, con su mano en la varita en caso de que tuviera que defenderse.
"Tú te quedas ahí!" Exclamaron Katie, Ginny y Hermione al mismo tiempo.
"No me gustan las orgías." Dijo Harry con humor negro, MUY negro, a Katie en un susurro.
"Cállate o no podrás tener hijos en el futuro!" Le contestó Katie seriamente, haciendo caso omiso al humor negro de su amigo.
"¿¿¿QUÉ HACE UN CHICO EN UN DORMITORIO DE CHICAS???" Gritó una alumna de séptimo a Harry y el resto del grupo.
"El chico es su Profesor, Srta. Miller, y si vuelve a levantarme la voz de esa manera, pasará bastante tiempo en detención con Filch. ¿Quedó claro eso?" Amenazó Harry seriamente levantándose de la cama y yendo al grupo.
"Sí, Profesor Potter." Contestaron todas a la vez.
"Estoy aquí, porque mi mejor amiga tiene un problema y necesitaba hablar conmigo de urgencia. Como mañana, ni ella ni yo, podemos hacernos un momento para hablar, vine aquí hoy." Informó Harry a las alumnas antes de agregar: "Los Profesores Dumbledore y McGonagall, los directivos de esta escuela, están al tanto de mi visita. Mi intención era hablar con ella a solas, nadie enterándose de mi visita de esta noche. Obviamente esto no salió como se esperaba."
"Obviamente la discreción no es su fuerte, Sr. Potter." Comentó Minerva entrando en el dormitorio vistiendo una bata escocesa. Todos vieron detrás suyo a varias chicas, que se despertaron obviamente con los gritos.
"¿Usted cree que quería despertar a todas las chicas de la Casa, Profesora?" Preguntó Harry sarcásticamente, levantándose de la cama, pero vuelto a sentar allí por Katie, Ginny y Hermione. Obviamente no lo iban a dejar salir hasta que no terminara lo que había venido a hacer: Hablar con Hermione.
Repentinamente varios hechizos aparecieron en el dormitorio desde la puerta y Harry debió lanzarse detrás de la cama nuevamente para no ser alcanzado. Quien si fue alcanzada, fue Minerva, que cayó aturdida al suelo. Katie, levantó un escudo alrededor de ellos, luego de que Ginny trajera a McGonagall hacia la cama, donde Harry la revivió, mientras las chicas seguían atacando.
"Levanten escudos! El mío no va a durar mucho más!" Exclamó Katie a los otros.
"TOTALLUS ESCURDETA!" Gritó Harry haciendo varios movimientos de varita alrededor de la cama y del grupo.
"¿Me pueden explicar como una charla privada de ustedes dos, terminó en esto?" Preguntó la Jefa de Gryffindor a Harry y Hermione viendo que el escudo continuaba siendo atacado, pero sin romperlo, haciendo desaparecer todos los ataques al tocarlo.
"En realidad fue culpa mía, Profesora." Admitió Ginny antes de contarle lo que había sucedido luego de su entrada.
"Sé que no tuvo intención de causar todo esto, Srta. Weasley." Dijo Minerva antes de decirle a Harry y Hermione: "Mientras el Sr. Potter continué en esta habitación, habrá problemas. Les propongo que la pasen para mañana por la mañana."
"¿Cómo hacemos los huecos en los horarios?" Quiso saber Hermione con curiosidad.
"Los dos estarán exentos de las clases matutinas. Inventaremos alguna excusa en los dos casos." Dijo Minerva luego de pensar unos momentos, antes de decirle a Harry: "Baja el escudo, saldré a hablar con ellas."
"Si usted lo dice." Comentó Harry bajando su escudo lo suficiente para que Minerva salga de él. Inmediatamente después de su salida, el Profesor levantó el escudo nuevamente.
"Nunca me dijeron que ellas eran peores que los Mortífagos!" Le reprochó Harry a las chicas, que se rieron ante la comparación, mientras Minerva continuaba hablando con el lado femenino de la Torre.
"Puede salir, Sr. Potter." Informó Minerva luego de unos minutos.
"¿Segura de que si salgo no vuelvo a ser atacado?" Preguntó Harry sin bajar el escudo.
"Segura." Afirmó McGonagall, lanzándoles miradas de advertencia a las alumnas por si alguna decidía hacerlo.
"Tengo una duda, ¿cómo llegaste sin activar las alarmas?" Preguntó Katie a Harry.
"Me ayudó un Ángel." Respondió Harry con una sonrisa antes de preguntarle a Minerva: "¿Las reglas para llegar aquí cuentan para salir, o puedo utilizar a un Elfo?"
"Llámalo a Dobby. Causarías más shock si sales de la misma forma que entraste." Dijo McGonagall.
En ese momento, el Elfo apareció y Harry le pidió que lo llevara a sus habitaciones al lado de su Salón de Clases. Dobby asintió y desapareció con Harry luego de que el adolescente se despidiera de sus amigas, asegurándole a Hermione que hablarían en la mañana y que fuera a su Oficina en vez de a desayunar, que lo harían allí.
"Si llego a escuchar alguna versión alejada de la verdad que la Srta. Granger y yo hemos dicho esta noche, que es la verdad debo decir, esa alumna pasará el resto del Trimestre en detención y será reprobada en mi materia." Amenazó la Jefa de Gryffindor antes de abandonar el dormitorio.
"Me voy a dormir. Nos vemos mañana." Se despidió Hermione de Ginny y Katie, sin siquiera dirigirle la palabra a las otras.
"Parvati, Lavender, ¿qué demonios pensaban antes de vociferarle a todas las chicas que Harry estaba aquí?" Preguntó Ginny furiosa a las otras chicas de Sexto, cuando todas habían salido del dormitorio.
"¿Qué hubieras hecho si te despiertas y en tu dormitorio hay un chico?" Replicó Parvati.
"Parvati, hablamos de Harry Potter con Hermione Granger. Dos amigos desde su primer año, que arriesgarían sus vidas por el otro. ¿Crees que Harry vendría aquí para hacer algo más que hablar con ella, estando tú y Lavender cerca de la cama donde estaban?" Preguntó sarcásticamente Katie.
"¿Estaban durmiendo juntos?" Preguntó una alumna de Cuarto.
"Cuando entré, estaban hablando sentados cada uno en una punta de la cama con una taza de café en la mano los dos. Y si nadie la vio aparte de mí y Ginny, al pie de la cama de Hermione había una bolsa de dormir que Harry enrolló cuando aparecieron ustedes." Informó Katie apuntando a las chicas que habían entrado luego de que Parvati y Lavender se fueran del dormitorio.
"Si alguna de ustedes se pone a inventar historias de lo que pasó aquí y se la comunican al resto de la Escuela, aparte de la ira de McGonagall se las verán conmigo, y con mis hermanos. Estoy segura que a Ron le encantará practicar sus hechizos con alguna de ustedes si difaman a sus mejores amigos." Dijo Ginny con una sonrisa muy parecida a la de los mellizos antes de irse a su dormitorio, despidiéndose solo de Katie, que la siguió al suyo propio luego de repetir una amenaza similar.
Cuando Parvati y Lavender entraron de nuevo a su dormitorio, vieron la bolsa de dormir que Katie había mencionado, al lado de la cama, además de varias tazas de café, algunas sin terminar. Hermione, por su lado, tenía las cortinas cerradas alrededor de su cama y dormía. Al acostarse, las dos vieron una nota en las sabanas. Al leerlas, sintieron vergüenza por sus acciones:
"Pensé que me conocían mejor. Es obvio que a Ustedes como amigas no las puedo contar. Aquí se acabó la amistad entre nosotras.
Hermione Granger.
Su ex-amiga."
El discurso de Harry fue el comentario de la Escuela todo el día durante ese fin de semana, el primero desde el inicio de las clases. Tanto el Profeta como el Quibbler sacaron ediciones especiales hablando sobre él y sobre las consecuencias que había traído.
El correo a Harry aumentó en grandes cantidades desde ese momento. Cuando el correo matutino las traía, las dejaba a un lado y continuaba desayunando.
El lunes recibió más de 15 Vociferadores en el correo. Sacudiendo la cabeza, el adolescente tomó su varita y murmuró algunas palabras antes de retirarse del Salón.
A punto de salir, se giró a la mesa de los Profesores, donde las cartas aún estaban y les dijo: "Les sugiero que se corran de allí de inmediato."
Antes de que alguien preguntara la razón, la vieron: los vociferadores comenzaron a temblar antes de abrirse. En vez de que salga voz, comenzaron a salir fuegos artificiales en todas las direcciones. Tanto los profesores como los alumnos, se escondieron debajo de sus mesas para cubrirse de los artificios, que seguían saliendo.
Harry continuaba en la puerta, viendo el espectáculo con una sonrisa en los labios. Hermione, que había tardado haciendo algo en la Sala Común, llegó justo a tiempo para ver el espectáculo y a su mejor amigo en la puerta.
"Lindo el show, ¿no crees?" Preguntó Harry a su amiga notándola junto a él.
"¿Quién los soltó?" Preguntó Hermione mientras los fuegos comenzaban a apagarse.
"Convertí 15 vociferadores en eso." Informó el Profesor antes de que los últimos artificios se dirigieran al techo y estallaran creando una imagen: el escudo de Hogwarts.
"Excelente." Comentó Hermione viendo el Escudo en el techo.
Los alumnos y Profesores, viendo que los fuegos artificiales habían terminado, salieron de debajo de las mesas y vieron la imagen en el techo. Varios aplaudieron a Harry, quien sonrió e hizo una reverencia a todos en gratitud antes de irse a su salón de clases a esperar a Sexto Año.
"Excelente uso de transformaciones con encantamientos, ¿no lo creen así, Minerva, Filius?" Preguntó Dumbledore a los dos Profesores, mientras en la mesa, todos se recuperaban del shock de los fuegos artificiales.
"Realmente impresionante su trabajo." Coincidió el Jefe de Ravenclaw.
"Una obra de arte." Comentó Minerva mientras todos se levantaban de sus asientos e iban a enseñar sus clases.
"¿Alguien logró algo nuevo en su Patronus?" Preguntó Harry a los alumnos de sexto luego de tomar lista.
Hermione, Ron y, para sorpresa de varios, Neville levantaron la mano. Harry anotó algo en un pergamino antes de pedirles que se adelantaran a mostrarlo.
Hermione fue primera. Su forma, al igual que el año anterior era una nutria. Esta salió de su varita por varios segundos antes de esfumarse. La chica tenía una sonrisa en sus labios al ver eso.
"Vas bien. Todavía te falta camino, pero vas muy bien." Dijo Harry indicándole que regresara a su asiento. Hermione le sonrió antes de hacerlo.
Ron fue el próximo. Su forma fue un gran dragón, que se mantuvo algunos segundos más que el de Hermione. Harry reconoció la forma del animal como la de un Ridgeback Noruego.
"¿Norbert?" Le preguntó Harry en un susurro conteniendo la risa.
"Puede ser." Contestó el pelirrojo volviendo a su asiento.
El de Neville, fue por lejos, el más sorprendente de los 3 Patronus: un gran Fénix salió de su varita y dio una vuelta alrededor del Aula. Unos momentos más tarde, apareció un ciervo que dio vueltas junto al Fénix, antes de regresar ambos a quienes los convocaron, hacer una reverencia y desaparecer de la vista.
"Necesitaba ejercitar el mío." Informó Harry a los alumnos que lo miraban con sorpresa. Excepto Ron y Hermione, nadie parecía saber que Harry podía hacer uno.
"Los demás continúen practicando el encantamiento, mientras llevo a ellos 3 a hacer una pequeña práctica." Dijo Harry a los alumnos señalando al trío, antes de añadir: "Sr. MacMillan, Srta. Abbott, la clase queda a su cargo momentáneamente hasta mi regreso, ¿entendido?" Preguntó Harry a los 2 Hufflepuff.
"Sí, Profesor." Contestaron los 2 Prefectos seriamente a la vez.
"Vengan conmigo. Vamos a probar su Patronus." Indicó Harry a sus amigos guiándolos fuera de la clase.
"¿Adonde y cómo los vamos a probar?" Preguntó Neville confundido.
"El Patronus solo sirve contra dos cosas: los Dementores y los Lethifolds. Los últimos son demasiado peligrosos, así que lo haremos con un Dementor falso." Explicó Harry haciéndolos entrar en el Aula de Profesores, donde Minerva estaba corrigiendo algo.
"Buenos días a los 4." Saludó la Vice Directora al verlos entrar.
"Buenos días, Profesora." Saludaron los adolescentes mientras Harry los guiaba hacia un armario.
"¿Boggart?" Preguntaron los 3 Gryffindor al mismo tiempo.
"Encontré uno el otro día y lo iba a usar con tercero. No creía que ni ustedes ni séptimo, estuvieran listos para enfrentar a un Dementor todavía." Explicó Harry mientras les explicaba que iban a hacer: por turnos, los 3 probarían el Patronus en el Boggart-Dementor.
"¿Les molesta si miro?" Preguntó McGonagall a los 4.
"En absoluto." Contestó el Profesor antes de indicarle a Hermione, antes de abrir el armario: "Ahora!"
Del armario salió un Dementor y se fue caminando hasta Hermione quien pareció quedarse congelada. Ron viendo que ella no podría, lanzó su Patronus, pero no logró detenerlo y continuó avanzando hasta Hermione que parecía aterrada. Neville lo intentó pero no tuvo mucho éxito tampoco.
"EXPECTO PATRONUM!" Vociferaron a la vez dos voces cerca del trío de alumnos.
De repente frente a ellos, aparecieron una gata y un ciervo que avanzaron hasta el Dementor y lo obligaron a retroceder hasta el armario. Viendo que la amenaza estaba acabada, Neville se apresuró a cerrar las puertas, mientras la gata desaparecía frente a la Jefa de Gryffindor y el ciervo frente al Profesor de Defensa.
"Hermione, ¿estás bien?" Preguntó Harry preocupado acercándose a su amiga, junto a los demás.
"No sé que me pasó... Me congelé..." Dijo Hermione aún aterrada por todo lo que sucedió.
"Neville, en mi Oficina hay varias barras de chocolate de Honeydukes! Trámemelas!" Ordenó Harry a su amigo, quien se apresuró a hacerlo.
"No sé que me pasó." Repitió Hermione sin mirar a Harry.
"Tranquila, ¿de acuerdo? Tal vez no debería haberte hecho enfrentar al Dementor en este momento. Debería haber esperado que el tuyo sea más fuerte. No hay nada de que disculparse." Le dijo Harry a Hermione mirándola a los ojos.
"Aquí está el chocolate!" Exclamó Neville que llegó corriendo, con varias barras de chocolate.
"Coman una cada uno de Ustedes." Ordenó el Profesor a los tres, antes de abrir una él mismo, ofreciéndole una a Minerva también.
"Gracias por su ayuda." Dijo Harry a McGonagall mientras comían el chocolate los 5.
"No hay de que." Dijo Minerva asintiendo con la cabeza el agradecimiento.
"¿Necesitas ir a la Enfermería?" Preguntó Ron preocupado a Hermione, que tenía los ojos cerrado fuertemente sin mirar ni a nada ni a nadie.
"Vuelvan a la Clase. La llevaré a la Torre de inmediato." Ordenó Harry a sus amigos, quienes asintieron y salieron. Cuando Hermione abrió la boca para protestar, Harry le dijo: "O vienes conmigo o pasas el próximo mes en detención con Filch."
"Como usted ordene, mi General." Bromeó Hermione, saliendo de la sala con el otro adolescente, diciéndole adiós a su Jefa de Casa.
"¿Qué te pasó allí?" Preguntó Harry a su amiga seriamente cuando los dos estaban ya en la sala común.
"No lo sé. Creía estar lista para esto, pero estaba equivocada." Dijo Hermione sin mirar a su amigo.
"Déjame rehacer la pregunta: ¿qué te pasa?" Preguntó Harry esta vez en tono muy serio.
"No fue un verano fácil. Tengo problemas personales." Dijo Hermione de repente.
"¿Tus padres?"
"Se van a divorciar. Mi padre estuvo manteniendo una relación paralela a la de mi madre por 2 años y nos enteramos hace poco." Dijo Hermione antes de estallar en llanto.
Harry se acercó y la abrazó con fuerza, dándole su hombro para que llorara en él. Hermione se aferró a su amigo con fuerza, llorando con más fuerza a cada momento.
Luego de 20 minutos en esa posición, con la chica sin dejar de llorar, el retrato de abrió y Minerva entró. Afortunadamente, Hermione no la notó, pero Harry sí lo hizo.
En un susurro, apenas audible, le dijo a la Profesora, que los miraba con preocupación: "más tarde se lo explico, ahora no."
Minerva asintió y salió de la Torre dejando a los 2 jóvenes en esa posición, haciendo una nota mental de hablar con Harry esa noche en la reunión de Profesores sin falta.
Un rato más tarde, Hermione se durmió después de tanto llorar. Harry la apoyó en un sillón y llamó a Dobby y le pidió que la depositara en su cama, mientras él retornaba a su salón de clases.
Cuando arribó a él, Ron y Malfoy se miraban con profundo odio, los dos apuntándose el uno al otro con la varita. Harry tomó la suya, la apuntó a los dos y dijo el encantamiento de desarme. Las dos varitas fueron a parar a sus manos mientras los 2 estudiantes se giraban para ver quien les había quitado la varita de las manos. Harry en ese momento, también vio a Hannah y a Ernie inconscientes en el suelo.
"Quiero una explicación de esto, y la quiero YA!" Gritó Harry a todos, ordenándoles regresar a sus asientos de inmediato, luego de despertar a los 2 Prefectos inconscientes.
Todo el mundo comenzó a hablar a la vez, haciendo imposible que Harry lograra entender algo de lo que decían Luego de un rato, logró entender una parte de todo.
Malfoy había insultado a Hermione cuando escuchó a Ron y Neville hablar del incidente en la Sala de Profesores, diciendo que era una cobarde. Ron, furioso con esto, lo insultó a él y a su padre, tildándolos de cobardes y sucios Mortífagos. Eso había ocurrido justo antes de que él llegara.
"¿Por qué terminaron inconscientes ustedes dos?" Le preguntó Harry a Hannah y Ernie.
"Nos aturdió!" Exclamaron los dos a la vez señalando a Draco.
"Sr. Malfoy 50 puntos de Slytherin por insultar a otro alumno comenzar una pelea y otros 50 por aturdir a dos Prefectos. Además de 2 semanas de detención con el Sr. Filch. Sr. Weasley 50 puntos de Gryffindor por iniciar una pelea y una semana de detención con Filch." Informó Harry a los dos seriamente antes de que sonara el timbre del fin de la clase.
"Quédate un minuto. Necesito hablar contigo urgente." Indicó Harry a Ron, que no estaba feliz por el castigo, mientras los demás salían.
"Escucha, Harry..." Comenzó Ron, pero Harry lo cortó.
"Sabes que si no te castigaba, me hubieran acusado de favoritismo por ti, Ron." Declaró el Profesor seriamente, antes de agregar: "No te llamé por eso, Hermione tiene problemas." Acto seguido, Harry le contó lo que Hermione le había dicho hacía un rato.
"No lo sabía." Murmuró Ron dejándose caer en una silla de repente.
"Yo me acabo de enterar." Dijo Harry antes de añadir con un tono muy serio: "Escucha, Hermione nos necesita más que nunca. Haznos un favor a los tres, no discutas con ella debido a tonterías, habla con ella si lo necesita o está callado si no desea hablar."
"Tranquilo, así lo haré." Prometió Ron antes de abandonar el salón e ir a Adivinación con Firenze, mientras Harry se preparaba para su siguiente clase: tercero.
"O calma a Malfoy o lo calmo yo!" Le gritó Harry a Snape esa noche en la reunión de Profesores, luego de la clase que Harry tuvo con Severus.
En todo el día, había habido más problemas con el ex-Prefecto que en toda la última semana. Al menos, 6 peleas había habido en el Colegio ese día, y en todas estaba Malfoy echando maleficios alguien.
"Caballeros, no comiencen una discusión." Dijo Minerva en tono autoritario antes de que Snape le contestara a Harry y se arme una pelea entre los 2 Profesores.
"¿Y como lo vas a calmar, Potter? ¿Matándolo?" Replicó Snape ignorando a McGonagall.
"Ganas no me faltan! Si el idiota de su Jefe de Casa no sabe controlar a sus alumnos como Dios manda, alguien debe hacerlo!" Le gritó Harry a Severus en la cara.
"Intulgios!" Vociferó Snape apuntando su varita a Harry.
Antes de que Harry levantara su escudo, el hechizo desapareció. Ambos Profesores giraron para ver que había pasado y vieron a Dumbledore en la entrada con su varita levantada, mirándolos a los dos bastante furioso.
"Siéntense los dos." Ordenó Albus a los 2 hombres, que lo hicieron de inmediato lanzándose miradas de puro odio.
"Uno de los dos no termine vivo el año." Comentó Minerva a Dumbledore en un susurro, mientras el resto de los Profesores tomaba asiento.
"¿¿QUÉ PARTE DE NO DEBEN ATACARSE MUTUAMENTE NO ENTENDIERON??" Gritó Albus a los 2 miembros de Profesorado.
"Pregúntele a él. Yo no levanté mi varita para atacar." Contestó Harry simplemente.
"Todavía no lo hiciste." Replicó Snape con odio.
"Si se vuelve a producir otro incidente así, los dos están despedidos," Informó Albus a los dos Profesores antes de agregarle a Harry: "y tú expulsado. ¿Quedó claro, caballeros?"
"Como el cristal." Aseguró Harry seriamente.
"Lo entendí." Murmuró el Profesor de Pociones seriamente.
"Comencemos la reunión entonces." Señaló el Director, dando comienzo a la misma.
Por la siguiente hora y media, los miembros del Profesorado discutieron los eventos de la última semana y ese día. La mayoría se quejó también de Malfoy y sus actitudes.
"Contrólalo o será expulsado." Dijo en tono cortante Dumbledore a Severus, quien asintió sin hacer comentarios.
"¿Cómo se encuentra la Srta. Granger?" Preguntó Minerva preocupada a Harry cuando terminó la reunión.
"Saltando en una pata." Contestó sarcásticamente Harry, con algo de dureza que no deseaba incluir. Al darse cuenta de esto, añadió: "Perdóneme, no ha sido un buen día en absoluto."
"¿Qué le sucedió? Estaba bastante mal esta tarde en la Sala Común." Reiteró la Pregunta Minerva, haciendo caso omiso al tono usado por el adolescente. Conocía todos los sucesos de ese día y sabía que no había sido muy bueno para el joven.
"Sus padres van a divorciarse." Informó Harry antes de contarle todo lo que sabía con respecto a la situación.
"¿Tú o el Sr. Weasley conocían esta situación?" Preguntó Minerva shockeada por la revelación.
"Ron se enteró cuando se lo dije hoy a la mañana." Contestó el Profesor, antes de añadir con frustración: "Deseo hablar con ella y no puedo!"
"Dudo que puedas esperar hasta mañana." Comentó McGonagall viendo la frustración.
"Mañana doy clases todo el día, tengo la suya a la noche y hay reunión del Equipo también. Si me dice donde hacer un hueco en mi horario para hablar con ella, le doy un premio." Respondió Harry, antes de preguntarle a la Vice Directora: "Si encuentro la manera de llegar a sus dormitorios sin activar las alarmas de intrusión, ¿me deja pasar la noche allí?"
"¿Crees poder hacerlo?" Preguntó Albus acercándose al dúo, escuchando la charla.
"No lo sé, pero voy a hacer el intento." Respondió Harry repitiendo la pregunta a Minerva.
"Si lo haces sin tu escoba o un Elfo Doméstico u otra cosa que no sea tu varita e ingenio, puedes hacerlo." Replicó Minerva.
"¿Es un reto eso?" Preguntó Harry con una sonrisa.
"Así es. Y yo estaré allí para asegurarme de que cumplas esas reglas." Dijo Minerva yendo con Harry a la Torre Gryffindor, mientras Albus lo siguió unos momentos después, curioso por ver que pasaría con el desafío.
Hermione esta shockeada al ver a Dumbledore con Minerva en sus dormitorios esa noche. Lavender y Parvati estaba durmiendo desde hacía un rato, sin saber de la visita de los directivos.
"¿Qué ocurre?" Preguntó Hermione a McGonagall.
"Harry quedó bastante preocupado por lo de esta tarde, y como mañana no iba a poder hacerse un hueco en sus horarios para hablar con usted, decidió hacer una visita nocturna." Informó Dumbledore antes de contarle sobre el reto entre los 2 Profesores.
Apenas concluyó Dumbledore su historia, la puerta del dormitorio se abrió y Harry entró literalmente volando. En su espalda había dos alas como de un ángel. Mientras Hermione y los dos Profesores lo miraban con shock por esto, Harry apuntó su varita al suelo e hizo aparecer una bolsa de dormir, donde se sentó antes de removerse las alas con la varita.
"Usted dijo que solo podía usar mi varita y mi ingenio. Esta fue la única cosa que se me ocurrió." Dijo Harry a McGonagall, antes de sacarse la túnica y ponerse el pijama.
"Debe admitir, Profesora, que fue creativo y siguió sus reglas al pie de la letra." Dijo Hermione conteniendo la risa ante la cara de su Jefa de Casa.
"Estoy segura que puedo dejarlos a los dos solos sin que haya ningún problema o que suceda algo de lo que me arrepienta por la mañana, ¿verdad?" Preguntó Minerva seriamente a los dos adolescentes.
"Profesora, si quisiera tener sexo con Hermione, lo haría en mis habitaciones, no en un dormitorio de chicas con dos durmiendo cerca nuestro." Contestó Harry.
"HARRY JAMES POTTER!!" Exclamó escandalizada la Vice Directora, mientras Hermione trataba de no reírse con la cara de Minerva. Dumbledore hacía lo mismo, encontrando la situación extremadamente divertida.
"No pasará nada, Profesora, tranquilícese." Aseguró Harry seriamente a McGonagall.
"Eso espero o tendré tu cabeza en la mañana." Amenazó Minerva antes de dejar el dormitorio con Dumbledore.
Harry y Hermione se miraron por un segundo antes de estallar en carcajadas al mismo tiempo. Les costó varios minutos lograr calmarse a los dos.
"Hace rato que no me reía así." Dijo Hermione cuando se calmaron los dos.
"La última vez creo que fue cuando Neville comió la galleta de canario de los Mellizos en Cuarto Año!" Recordó Harry con una sonrisa ante esa imagen.
"Que tiempos aquellos, ¿verdad?" Dijo Hermione pensativa.
"Los extraño demasiado." Admitió el Profesor con melancolía.
"¿Recuerdas a Fluffy?" Preguntó Hermione con una risa.
"¿Y Norbert?" Preguntó Harry también riéndose.
"¿Y yo qué?" Preguntó una nueva voz sorprendiendo al dúo, que giraron hacia la voz, Harry con su arma y Hermione con su varita.
"Dobby, nos asustaste!" Exclamó la Prefecto guardando su varita mientras su amigo guardaba su arma.
"Dobby, lo siente mucho! No fue su intención asustarlos!" Exclamó el Elfo golpeándose la cabeza con el marco de la cama.
"Dobby si Parvati y Lavender me ven aquí, tendré a todas las chicas de la Torre lanzándome maleficios y acusándome de pervertido y violador! Cálmate!" Pidió el adolescente, deteniendo a Dobby y callándolo colocándole una mano en la boca.
"Dobby lo siente mucho, Harry Potter!" Exclamó en voz baja el Elfo.
"Dobby, ¿qué sucede?" Preguntó Hermione a Dobby antes de preguntarle a Harry: "¿No llamaron a reunión, verdad?"
"Dumbledore no me dijo nada." Negó Harry.
"El Profesor Dumbledore le pidió a Dobby que les trajera esto." Dijo Dobby dándoles una bandeja con 2 tazas de café, antes de añadir: "Negro, cargado y sin azúcar como siempre para el Señor Harry Potter y chocolate caliente para la Srta. Granger." Acto seguido, Dobby se esfumó del dormitorio.
"Ese elfo es único!" Se rió Harry, pero se calmó cuando escuchó ruidos de la cama de Parvati.
"A ellas no las despierta ni una bomba debajo de su cama!" Aseguró Hermione riéndose.
"Si tú lo dices." Comentó el Profesor con una sonrisa.
"Sube a la cama. No te puedes quedar ahí todo el tiempo." Dijo Hermione señalando la bolsa de dormir donde Harry estaba sentado en posición india, con las dos piernas cruzadas.
"Solo porque lo pides tú." Dijo Harry sentándose en una punta de la cama, mientras Hermione ocupaba la otra.
"A veces me gustaría volver a tener 11 años y entrar en Hogwarts de nuevo." Dijo Hermione de repente.
"No eres la única. Esta guerra nos va a cambiar a todos, sobre todo a nosotros 3." Dijo Harry pensativamente.
"¿No nos cambió ya?" Preguntó Hermione.
"Por supuesto que lo hizo. Los 3 dejamos de ser niños cuando bajamos por la piedra, solo que nadie quiso darse cuenta. Era más fácil tratarnos como a 3 niños en vez de adultos. Las consecuencias fueron obvias." Contestó el adolescente.
"¿Piensas mucho en él?" Preguntó Hermione. Harry no necesitaba preguntar en quien: Sirius.
"A veces. Es lo que me hace continuar: la sed de justicia por él, Cedric y mis padres. Si no tuviera eso, ya habría salido después de lo del año pasado." Contestó Harry luego de meditar varios segundos su respuesta.
"Harry! ¿Qué haces en un dormitorio de chicas?" Preguntó Katie en voz baja entrando en ese momento y viendo a su compañero de equipo sentado en la cama de la Prefecto.
"Larga historia." Contestó simplemente el Profesor antes de añadir señalando a las camas de Lavender y Parvati: "Dumbledore y McGonagall saben que estoy aquí, pero apreciaría que ellas no se enteren, Katie."
"¿Les molesta si me agrego a su charla o es privada?" Preguntó la Premio Anual.
"Da igual." Contestó Hermione, mientras Harry asintió.
"¿De que hablaban?" Preguntó Katie sentándose en la bolsa de dormir.
"La guerra y como quedaremos al final de ella." Comentó Harry antes de que la puerta se abriera y entrara Ginny corriendo.
"Hermione, necesito..." Comenzó la pelirroja pero vio a Harry y gritó: "Harry, ¿qué haces en un dormitorio de chicas?"
"¿Qué pasa?" Preguntó Lavender que se despertó por el grito de Ginny. Al ver a Harry, gritó: "AAAAAAAHHHHHHHH!"
"Chau visita sorpresa." Comentó Harry sarcásticamente antes de decirle a Ginny: "Intentaba pasar desapercibido."
"Desmaius!" Gritó Lavender apuntando su varita a Harry, desconociendo la situación.
"Pervertido!" Gritó Parvati lanzándole a Harry un par de maleficios, quien se había lanzado atrás de la cama para no ser alcanzado.
"Cálmense las dos!" Ordenó Katie, intentando rescatar a su amigo antes de que la situación pasara a algo peor.
"Parvati, Lavender, Ginny, Harry vino a verme porque necesitaba hablar conmigo de urgencia y mañana no podría hacerlo." Explicó Hermione a las 3 chicas, antes de añadir: "Dumbledore y McGonagall saben que está aquí, así que no hay nada de que preocuparse."
"¿Puedo salir ya?" Preguntó Harry tímidamente, desde atrás de la cama.
"Sal, cobarde!" Se rió Katie, mientras las 2 chicas de sexto guardaban sus varitas.
"Creo que será mejor que hablemos en otro momento. Obviamente a cierta gente le molesta que un chico haga esfuerzos para ver a una amiga que lo necesita. Veré cuando puedo hacerme un hueco en mis horarios para hablar contigo." Le dijo Harry a Hermione, enrollando la bolsa de dormir.
"Te necesito conmigo. Quédate." Rogó la Prefecto a su amigo en tono algo desesperado.
"Si ellas no tienen problemas con que esté aquí esta noche, me quedo." Dijo Harry apuntando a Lavender y Parvati, que lo miraban con desconfianza.
"Ustedes dos nos acompañan!" Exclamó Ginny tomando a Lavender mientras Katie hacía lo mismo con Parvati. Ambas habían escuchado la desesperación en el tono de Hermione y sabían que necesitaba a alguien que la conociera tanto como Harry o Ron en ese momento.
Unos minutos después, en los cuales los dos amigos terminaron sus cafés en silencio, entraron de nuevo Katie y Ginny. Las dos fueron hasta el dúo. Katie se volvió a sentar en la bolsa de dormir mientras Ginny se sentó a su lado.
"Linda mezcla esta noche en este dormitorio: un chico, la Premio Anual del Colegio, una Prefecto de Sexto y otra de quinto. Solo uno de nosotros debería estar acá." Comentó Katie.
"Lavender fue a mi dormitorio y Parvati al de Katie." Explicó Ginny, mientras Dobby apareció de nuevo. Los 4 alumnos le pidieron otra ronda de cafés, el de Hermione tan fuerte como el del Profesor de Defensa.
"Mañana todo el mundo me va a llamar Sátiro y violador." Comentó sarcásticamente Harry.
"¿Qué esperabas viniendo aquí?" Preguntó Ginny con ironía.
"La idea era que solo lo supieran Dumbledore, McGonagall y nosotros 2! No todos los demás!" Exclamó Harry.
"¿Qué hacen ustedes dos en mi dormitorio a la medianoche?" Preguntó Hermione a Katie y Ginny de repente.
"Necesito tu ayuda de urgencia!" Exclamó Ginny sacando a rastras a Hermione de su dormitorio.
"No me mires así! A mi no me lo contó!" Exclamó Katie cuando Harry giró para verla con una mirada de pregunta.
"¿Qué haces TÚ aquí?" Replicó Katie a Harry.
"Hermione necesitaba hablar con alguien de urgencia. Tiene problemas personales y quiero tratar su depresión antes de que pase a otro nivel más alto." Informó el Profesor seriamente antes de que las dos chicas retornaran al dormitorio. Con ellas, estaban algunas otras más, todas de quinto y séptimo, junto a Lavender y Parvati, que miraron a Harry con desconfianza, todas apuntándoles con sus varitas.
"Mejor me largo de aquí antes de que esto empeore!" Le dijo Harry a Hermione, con su mano en la varita en caso de que tuviera que defenderse.
"Tú te quedas ahí!" Exclamaron Katie, Ginny y Hermione al mismo tiempo.
"No me gustan las orgías." Dijo Harry con humor negro, MUY negro, a Katie en un susurro.
"Cállate o no podrás tener hijos en el futuro!" Le contestó Katie seriamente, haciendo caso omiso al humor negro de su amigo.
"¿¿¿QUÉ HACE UN CHICO EN UN DORMITORIO DE CHICAS???" Gritó una alumna de séptimo a Harry y el resto del grupo.
"El chico es su Profesor, Srta. Miller, y si vuelve a levantarme la voz de esa manera, pasará bastante tiempo en detención con Filch. ¿Quedó claro eso?" Amenazó Harry seriamente levantándose de la cama y yendo al grupo.
"Sí, Profesor Potter." Contestaron todas a la vez.
"Estoy aquí, porque mi mejor amiga tiene un problema y necesitaba hablar conmigo de urgencia. Como mañana, ni ella ni yo, podemos hacernos un momento para hablar, vine aquí hoy." Informó Harry a las alumnas antes de agregar: "Los Profesores Dumbledore y McGonagall, los directivos de esta escuela, están al tanto de mi visita. Mi intención era hablar con ella a solas, nadie enterándose de mi visita de esta noche. Obviamente esto no salió como se esperaba."
"Obviamente la discreción no es su fuerte, Sr. Potter." Comentó Minerva entrando en el dormitorio vistiendo una bata escocesa. Todos vieron detrás suyo a varias chicas, que se despertaron obviamente con los gritos.
"¿Usted cree que quería despertar a todas las chicas de la Casa, Profesora?" Preguntó Harry sarcásticamente, levantándose de la cama, pero vuelto a sentar allí por Katie, Ginny y Hermione. Obviamente no lo iban a dejar salir hasta que no terminara lo que había venido a hacer: Hablar con Hermione.
Repentinamente varios hechizos aparecieron en el dormitorio desde la puerta y Harry debió lanzarse detrás de la cama nuevamente para no ser alcanzado. Quien si fue alcanzada, fue Minerva, que cayó aturdida al suelo. Katie, levantó un escudo alrededor de ellos, luego de que Ginny trajera a McGonagall hacia la cama, donde Harry la revivió, mientras las chicas seguían atacando.
"Levanten escudos! El mío no va a durar mucho más!" Exclamó Katie a los otros.
"TOTALLUS ESCURDETA!" Gritó Harry haciendo varios movimientos de varita alrededor de la cama y del grupo.
"¿Me pueden explicar como una charla privada de ustedes dos, terminó en esto?" Preguntó la Jefa de Gryffindor a Harry y Hermione viendo que el escudo continuaba siendo atacado, pero sin romperlo, haciendo desaparecer todos los ataques al tocarlo.
"En realidad fue culpa mía, Profesora." Admitió Ginny antes de contarle lo que había sucedido luego de su entrada.
"Sé que no tuvo intención de causar todo esto, Srta. Weasley." Dijo Minerva antes de decirle a Harry y Hermione: "Mientras el Sr. Potter continué en esta habitación, habrá problemas. Les propongo que la pasen para mañana por la mañana."
"¿Cómo hacemos los huecos en los horarios?" Quiso saber Hermione con curiosidad.
"Los dos estarán exentos de las clases matutinas. Inventaremos alguna excusa en los dos casos." Dijo Minerva luego de pensar unos momentos, antes de decirle a Harry: "Baja el escudo, saldré a hablar con ellas."
"Si usted lo dice." Comentó Harry bajando su escudo lo suficiente para que Minerva salga de él. Inmediatamente después de su salida, el Profesor levantó el escudo nuevamente.
"Nunca me dijeron que ellas eran peores que los Mortífagos!" Le reprochó Harry a las chicas, que se rieron ante la comparación, mientras Minerva continuaba hablando con el lado femenino de la Torre.
"Puede salir, Sr. Potter." Informó Minerva luego de unos minutos.
"¿Segura de que si salgo no vuelvo a ser atacado?" Preguntó Harry sin bajar el escudo.
"Segura." Afirmó McGonagall, lanzándoles miradas de advertencia a las alumnas por si alguna decidía hacerlo.
"Tengo una duda, ¿cómo llegaste sin activar las alarmas?" Preguntó Katie a Harry.
"Me ayudó un Ángel." Respondió Harry con una sonrisa antes de preguntarle a Minerva: "¿Las reglas para llegar aquí cuentan para salir, o puedo utilizar a un Elfo?"
"Llámalo a Dobby. Causarías más shock si sales de la misma forma que entraste." Dijo McGonagall.
En ese momento, el Elfo apareció y Harry le pidió que lo llevara a sus habitaciones al lado de su Salón de Clases. Dobby asintió y desapareció con Harry luego de que el adolescente se despidiera de sus amigas, asegurándole a Hermione que hablarían en la mañana y que fuera a su Oficina en vez de a desayunar, que lo harían allí.
"Si llego a escuchar alguna versión alejada de la verdad que la Srta. Granger y yo hemos dicho esta noche, que es la verdad debo decir, esa alumna pasará el resto del Trimestre en detención y será reprobada en mi materia." Amenazó la Jefa de Gryffindor antes de abandonar el dormitorio.
"Me voy a dormir. Nos vemos mañana." Se despidió Hermione de Ginny y Katie, sin siquiera dirigirle la palabra a las otras.
"Parvati, Lavender, ¿qué demonios pensaban antes de vociferarle a todas las chicas que Harry estaba aquí?" Preguntó Ginny furiosa a las otras chicas de Sexto, cuando todas habían salido del dormitorio.
"¿Qué hubieras hecho si te despiertas y en tu dormitorio hay un chico?" Replicó Parvati.
"Parvati, hablamos de Harry Potter con Hermione Granger. Dos amigos desde su primer año, que arriesgarían sus vidas por el otro. ¿Crees que Harry vendría aquí para hacer algo más que hablar con ella, estando tú y Lavender cerca de la cama donde estaban?" Preguntó sarcásticamente Katie.
"¿Estaban durmiendo juntos?" Preguntó una alumna de Cuarto.
"Cuando entré, estaban hablando sentados cada uno en una punta de la cama con una taza de café en la mano los dos. Y si nadie la vio aparte de mí y Ginny, al pie de la cama de Hermione había una bolsa de dormir que Harry enrolló cuando aparecieron ustedes." Informó Katie apuntando a las chicas que habían entrado luego de que Parvati y Lavender se fueran del dormitorio.
"Si alguna de ustedes se pone a inventar historias de lo que pasó aquí y se la comunican al resto de la Escuela, aparte de la ira de McGonagall se las verán conmigo, y con mis hermanos. Estoy segura que a Ron le encantará practicar sus hechizos con alguna de ustedes si difaman a sus mejores amigos." Dijo Ginny con una sonrisa muy parecida a la de los mellizos antes de irse a su dormitorio, despidiéndose solo de Katie, que la siguió al suyo propio luego de repetir una amenaza similar.
Cuando Parvati y Lavender entraron de nuevo a su dormitorio, vieron la bolsa de dormir que Katie había mencionado, al lado de la cama, además de varias tazas de café, algunas sin terminar. Hermione, por su lado, tenía las cortinas cerradas alrededor de su cama y dormía. Al acostarse, las dos vieron una nota en las sabanas. Al leerlas, sintieron vergüenza por sus acciones:
"Pensé que me conocían mejor. Es obvio que a Ustedes como amigas no las puedo contar. Aquí se acabó la amistad entre nosotras.
Hermione Granger.
Su ex-amiga."
