CAPITULO IV

"MEJOR O PEOR"

Caminaba entre las sombras de los árboles, cantando una canción que llevaba todas las cosas vivas que estaban a su alrededor. Los dorados rayos del sol atravesaron el pasillo del bosque mientras las hojas se sacudían por una ligera brisa. Su voz era tranquila y calmada y los árboles se despertaron con la voz del primer nacido. Se sentó en la base de un gran árbol y cantó la canción que llenaba su corazón

Lamento de Luthien.

Aunque aún era hermosa y romántica, el profundo dolor y el sufrimiento de todas las partes ferozmente implicadas de su corazón. Ése era el destino de Arwen. Guardaba luto por la estrella caída, perdida en el mundo de los hombres.

Examinó su decisión de mantenerle ocultos sus verdaderos sentimientos y permitirle que se casara con Aragorn. ¿Estaba mejor o peor por eso? Seguramente era mejor que guardara silencio. La carga que ella llevaba sobre si era demasiado pesada, no había necesidad de agregarle peso. Y la carga que llevaba por todos los que fueron testigos de la unión entre el Rey de los Hombres y la Estrella de la Tarde era bastante como para deshacerle el corazón. Ciertamente, era agridulce. Como su amor era puro y hermoso, nadie podría corromperlo, aunque habría partidas tristes y corazones rotos a causa de su estela. Corazones como el suyo.

Era mejor ocultarlos. Había aceptado sus sentimientos hacia Arwen, pero lo habían traicionado. Estaban equivocados. Él estaba equivocado. Y desesperado. Ella nunca podría darle todo el tiempo, amarlo como él la amaba.

".si solo sintieras lo que siento por él. si supieras como se siente. sabrías por que elegí este camino."

Sabía lo que ella sentía por Aragorn. lo que era estar enamorado. Era como lo que él sentía hacia ella. Y sabía que era bastante. Bastante como para sacrificar su existencia entera por ella. Ella era razón suficiente para que abandonara todo lo que quería. Era su todo.

"Solamente puedo esperar a que un día encuentres el amor que brille en la oscuridad de tu corazón. Que puedas experimentar también el amor que desvanezca tus penas y ahuyente tus sombras. Un amor que traerá tranquilidad a tu corazón y a tu alma. Entonces sabrás que no importa lo que pueda suceder, nunca me apartaré de ti. hay un lugar en mi alma que nadie puede tocar o quitar. y allí tu y yo viviremos hasta el final de los días."

Él encontró a quien amar, a ella.

Tanto Legolas como Arwen, habían hecho una elección. Él había elegido amarla y esta elección lo condenó a vivir su vida sin amor. Siempre sería su compañero fuerte y silencioso, viéndola pasar muchas estaciones, pero nunca algo más. Nunca su amante.

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Se acostó silenciosamente en la cama, contenta por estar sola. Siempre que Arwen tenía un momento tranquilo para ella sola, solo podía pensar en Legolas.

¿A dónde lo conduciría su camino? Estaba tan insegura y asustada por su querido amigo.

"Envejecerás y morirás, dejándome solo. No habrá tranquilidad para mí. Nada de tranquilidad que permita pasar el dolor. En todo camino que recorra me seguirá una sombra por esta pérdida. Me quedaré en la oscuridad y la duda. Como una noche de invierno sin estrellas. Moraré limitándome a sufrir por el dolor, bajo los árboles desvaneciéndose, hasta que el mundo entero cambie y los largos años de mi vida terminen completamente. La muerte te apartará de mí y nunca nos volveremos a reunir. Éste será mi destino. Y aunque estés lista para aceptar el tuyo, le temo al mío."

Sus palabras la sorprendieron. La cruda e intensa emoción que él exteriorizó, conmovió su corazón e, incluso ahora, traía lágrimas a sus ojos. Había subestimado lo mucho que ella significó para él. Lo mucho que él significaba para ella.

No podría ser tan vanidosa como para decir que él nunca encontraría alguien que ocupara su lugar, si no estaba ella. ¿Quién entonces? En su corazón deseaba que él encontrara a alguien. Sufriría un terrible destino si todo lo que había dicho era verdad.

Y ella sería la fuente de su sufrimiento.

"¿Y estás lista para hacer tal sacrificio? Para dejar a toda tu gente. a tu padre. ¿Y yo?"

No lamentó su decisión. Se sentiría peor si no se hubiera casado con Aragorn, aunque hubiera deseado no haber pagado tan alto precio. Si bien no podía hacer nada, pensaba en lo que significaba su amistad con Legolas. Por supuesto que su relación sería diferente. Ahora estaba casada y era Reina de Hombres. eso dejaba poco tiempo para pasar algunos días despreocupados en las tierras de su gente. La arrastraba la obligación del mundo mortal, donde tenía que hacer todo inmediatamente por que el tiempo era precioso y no estaba de su lado.

Legolas había sido el más cercano a ella casi toda su vida, pero tuvo que escoger sus papeles como esposa y reina sobre él. Casi podía sentir que un abismo se abría entre ellos, y le dolía saber que no había nada que pudiera hacer. Sus vidas estarían separadas para siempre, ella lo sabía, pero no sabía como su historia cambiaría afuera.

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Su matrimonio con Aragorn era duro, quedarse sin hacer nada y mirar. Ella amaba a Aragorn demasiado, él la amaba aún más y no quería perderla. Ella sería siempre su señora y ahora la estaba perdiendo por algo con lo que no podía luchar ni matar a flechazos. La estaba perdiendo por su destino. No había nada que él pudiera hacer por eso, y lo sabía, aunque estaba enfadado por ese viaje. se portó perfectamente civilizado durante toda la ceremonia. Había sido tan difícil para él, se veía feliz en el exterior y se sentía miserable con cada fibra de su ser en su interior. pero lo hizo por ella. También hizo algo que ella no le pidió.

La dejó ir.

Sin juicio ni enojo, pero con una tristeza silenciosa se quedó inmóvil y la observó elegir su camino. Arwen le agradeció silenciosamente con todo su corazón.

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Ella estaría mejor con Aragorn. Legolas podría ofrecerle todo lo que tenía. todo su amor. pero, ¿sería suficiente? Sabía en su corazón que no lo era. Ella sería para siempre de Aragorn.

Él era el mejor elfo restante, leal y auténtico, aún y cuando se había suicidado por dentro. Se sentía mal porque no quedaba esperanza para él. Y ningún amor podría salvarlo, excepto el suyo.

Ella se sentía peor por que perdería a su querido Legolas en nombre del amor.

Pero ninguno de los dos se sentía mejor o peor por sus decisiones, sentían simplemente.

Y sus destinos los conducirían a lugares en los que nunca pensaron que estarían.

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Uff, es algo difícil esto de la traducción, pero una historia así lo vale, ¿no creen?

Sus reviews motivan para que uno siga publicando. Hasta el próximo capítulo.