Leyenda Urbana
Por Dark Wing Fairy
Capítulo uno
-Estoy aburrida,- dice una chica de pelo corto color púrpura.
-Yo también…… pero¿Qué podemos hacer,- contestaba otra jovencita que tenía el pelo de color naranja sujeto con dos coletas a los lados.
-No lo sé, tal vez si nos vamos a la playa,- respondía una tercera cuyo pelo era largo de color rosa.
Estas chicas que en total son tres, se encontraban platicando en un inmenso comedor, el cual pertenece a las instalaciones del renombrado Escenario Kaleido; la razón por la que el lugar esta tan vació es, porque son vacaciones de fin de temporada. Todo el elenco se ha marchado a diferentes lugares, y estas jóvenes son las únicas que permanecen en el lugar.
-Oh, este sitio está muy tranquilo,-
-Si, creo que demasiado,-
-Ey¡ chicas, se me acaba de ocurrir una gran idea,-
-Cuál Mia,- responden las otras dos muy asombradas por el entusiasmo repentino de su amiga.
-Que les parece si organizamos una pijamada; así no nos sentiremos tan solas en la noche y sirve que pasamos un rato ameno,-
-Pues, a mí me parece bien,-
-Si, Mia tú la organizas; y Anna y yo te ayudamos en lo que podamos,-
-Entonces va,-
Y así las tres chicas se levantan del comedor y se dirigen muy entusiasmadas a organizar su fiesta de pijamas; pero no contaban con que alguien las estaba escuchando, a decir verdad ellas no son las únicas en ese lugar; entre las sombras asecha una persona…
-Je, con que una fiesta de pijamas, bueno, aprovechare ese momento para ver todo lo que yo quiera,- efectivamente un espíritu chocarrero estaba rondando el lugar; y es nada menos que Fool, el que se hace nombrar ESPÍRITU DEL ESCENARIO.
Después de unas cuantas horas de preparativos, las chicas están listas para iniciar su fiesta, y se reunieron en el mini departamento de Mia.
-Vaya, cuantas cosas hemos conseguido,-
-Si, no la pasaremos en grande,-
Se acomodan en la recámara, y apagan las luces, prenden unas lámparas sordas y comienzan la diversión…
-Bueno pues, ya está todo listo y ahora,- preguntaba Sora algo preocupada.
-Este, pues yo no sé, platiquemos de algo,-
-Como de que Mia,- decía Anna mientras se recostaba en los futones que habían puesto en el suelo (N/A: dichos futones fueron patrocinados por Sora, XDDD, esto es por si se preguntaban de donde los habían sacado XDDD),- Ya sé, que tal si les cuento unos chistes,-
-Este mejor otra cosa no,-
-Qué insinúas Sora, qué mis chistes son malos,-
-No, claro que no Anna, pero… este Mia tú que propones,-
-Pues no sé, que les parece si contamos historias,-
-Qué tipo de historias,-
-De las que sean,-
-No, historias no,- replico Anna, -tú eres buena en esa materia, en cambio yo solo soy buena para los chistes, saldré perdiendo,-
-Anna¿como crees, de seguro quién quita y eres mejor para las historias que para los chistes,- dice muy quitada de la pena Sora, pero se arrepiente puesto que la susodicha (es decir Anna) le lanza una mirada que la deja helada.
-Bueno entonces yo empezaré…- interviene Mia con el fin de calmar los ánimos subidos del momento, -Qué les parece si comenzamos con una leyenda urbana,-
-Y si nos ponemos borrachas,-
-Haremos como no escuchamos eso Anna ,- dijeron al unísono Mia y Sora.
-Pero por qué, no creo que sea tan malo XDDD,-
-No. Pero estamos aquí para divertirnos,-
-Con mayor razón XDDD,-
-A lo que iba,- dice Mia haciendo caso omiso al comentario de su amiga, -Esta historia trata sobre una mujer, más bien dicho una cantante, que murió muy cercas de aquí… sucede que hace unos cuantos años, esta chica no era una artista reconocida, pertenecía a un grupo de actores callejeros. Una vez en uno de sus espectáculos un importante empresario musical escuchó su voz, le cautivo tanto el canto de la mujer que decidió convertirla en una gran estrella. Convencida por él abandono a sus amigos actores y emprendió su carrera, prometiéndoles a ellos que volvería para ayudarlos a triunfar cuando ella lo hubiera hecho,-
-Eso no me suena a leyenda urbana,- reclamaba Anna, pero fue acallada por un codazo que le propino Mia.
-Todavía no termino…(sonido de aclarado de garganta), pero lo más grave del asunto fue que ella estaba enamorada de uno de sus compañeros, y nunca se había atrevido a confesarle su amor, así pues cuando ellos fueron a despedirla al aeropuerto (ya que iba a iniciar una gira mundial para darla a conocer), decidió reunir todo su valor y confesar su amor. Para su fortuna el chico le correspondía, y le prometió que la esperaría hasta que ella volviese hecha toda una estrella,-
En esos momentos, tanto Sora como Anna estaban absortas en las palabras que emergían de la boca de su amiga, ninguna de las tres prestaba atención a lo que estaba ocurriendo alrededor de ellas, y mucho menos de la presencia de cierto engendro del mal que andaba viendo lo que no debía.
-Después de algún tiempo la chica volvió y espero con ansias el encuentro con su amado, estaba segura que a su llegada, él y su otro compañero estarían esperándola en el aeropuerto… pero..,-
-Pero qué,- dijo Sora con ansiedad.
-Pero él no se encontraba, sólo su otro compañero fue a recibirla; sin poder disimular su decepción la chica saludo con poco entusiasmo a su amigo, el cual mantenía un semblante muy extraño, aparentaba felicidad, sin embargo una sombra cubría su rostro, esto no paso desapercibido por la chica e inmediatamente le vino a la mente su amado. Sus sospechas eran ciertas, meses atrás habían sufrido un accidente; al estar presentando uno de sus actos callejeros, un camión repartidor perdió el control, yendo a parar en contra de todos los espectadores que ellos tenían. Para su desgracia el hombre que ella amaba murió al tratar de salvar a una niña…-
-Ay, no puede ser…,- decía Sora con lágrimas en los ojos; hasta Anna estaba a punto de derramar algunas.
-La chica que en esos momentos había vuelto como una famosa estrella, no aceptaba nada de lo que estaba escuchando, no podía creer que había perdido al ser que más amaba en la tierra, y sin embargo esa era su cruda realidad, por perseguir un sueño, por querer ser TODO LO QUE EN ESE MOMENTO ERA, y brillar como la ESTRELLA más luminosa del firmamento, había sacrificado su felicidad. Una enorme tristeza inundo su corazón, sentía que no podía respirar y salio huyendo, sin importar las protestas de su apoderado, ni las quejas de los reporteros; no quería saber nada, el mundo que tenia a sus pies no era suficiente, puesto que ya nada valía para ella…-
-Wuaaaaaaaaaaaaaaaa,-
-Sin embargo esta historia no termina aquí, la chica al salir corriendo sin dirección alguna, y con los sentidos embotados por la tristeza, no se percató del lugar a donde iba y fue a dar a una autopista muy peligrosa; un auto que venia a toda velocidad, la impacto, haciendo que la chica cayera inconsciente al suelo, lo último que alcanzo a pronunciar fue el nombre de su amado…-
-Que tragedia, snif, snif,- decía Sora mientras se limpiaba las lágrimas.
-El tiempo ha pasado, y dicen que…-
-Pero es que todavía no termina,- replico Anna mientras hacia como que no lloraba.
-Y dicen que, en el mismo lugar en donde ella murió, se escucha cada noche el canto lleno de amargura de una mujer…-
-MMMM,-
-Su muerte trágica no le permitió abandonar este mundo, así que está vagando por esa avenida, hasta el momento en el que acepte que ella murió y que su amado la está esperando en el más allá,-
-Mia esa historia ya no me está gustando,- reclamaba Sora, mientras se apretaba más a Anna, la cual había quedado tiesa al escuchar esa parte del relato.
-Así que cada vez que la noche es cubierta por un manto de estrellas y la luna brilla con todo su esplendor, se escucha el canto triste de una mujer; muchos dicen que es una sirena, otras tantos dicen que es la imaginación, pero la verdad es que la Cantante busca desesperadamente a su amado y lo llama a través de esa canción,-
-Ah, tonterías nada de eso es verdad,- dijo Anna en tono burlesco
-Y qué tal que es verdad,- replico Sora, mientras miraba con atención a Anna.
-Si te topas con ella en la noche, no importa si eres mujer u hombre ella te llevara consigo para que la acompañes en su eterna búsqueda, dicen que muchos han muerto solo por el simple hecho de escuchar su voz…- de pronto Mia enmudeció, su cara se puso pálida y solo esto se escucho, -Miren que hay por ahí, esa sombra, que es?- dijo la chica mientras dirigía la luz de su lámpara hacia la ventana del balcón.
-WOOOOOAAAAAAAAAAAAA,- gritaron Sora y Anna.
-JAJAJAJAJAJAJA, pero como van a creer que esas historias son verdad, - decía Mia mientras apagaba la lámpara.
-Ay, MIA COMO ERES MALA,- reclamaban las chicas mientras comenzaban una guerra de almohadas.
-LAAAAAA,LALALA,LAAAAAAAAAAA,ALALALALAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA,-
-Eh, Mia ya deja de hacer eso,- reclamaba Sora mientras prendía su lámpara.
-Yo no estoy haciendo, nada,- contestaba la chica de coletas.
-Si tú no eres entonces,-
-Laaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, lalalalaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa,lalaaaaaaaaaaaalalalala,-
A lo lejos se escuchaba el canto de una mujer, y poco a poco se iba acercando a los dormitorios del escenario Kaledio.
-Eh, no es nada, solo es el viento, además esa es solo una leyenda, no es verdad,-
-Estas segura Mia,-
-Claro, uno de mis amigos de la red me la contó, y si se fijan bien, si la mujer se aparece, en caso de que así fuera, lo haría en la autopista en donde murió, dudo mucho que ande vagando por estos dormitorios,-
-Aja, y si el día de hoy por estar nosotras solas se le ha ocurrido venir a visitarnos,- aclaro irónicamente Anna al momento de encender su lámpara.
-LAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA,ALALALAAAAAAAAAA,- la voz se escuchaba más cercas.
-Esta bien, yo no me quedo con la duda, vamos a ver,- dijo Sora mientras se armaba de valor.
-Sora, pero que estas loca,-
-No. No vamos a pasar la noche en vela mientras esos sonidos se escuchan,-
-Creo que tienes razón. Pero siiii,-
-Nada de peros, si es un fantasma pues lo espantamos y ya,-
-Aja, como si fuera tan fácil,-
-Bueno si vamos las tres yo me apunto,- dijo Mia la cuál ya estaba a punto de abrir la puerta de su dormitorio.
Las chicas estaban dispuestas a averiguar lo que estaba ocurriendo, y cuando iban dar un paso fuera de los dormitorios, algo se escuchó.
-AAAAAAAAAAAAAAAAAA, Vengooooo por ti y nunca te dejareeeeeeeeee,-
-AAAAAAAAAAAAAAYY,- Sora emitió un grito que fue ahogado al momento por las manos de sus dos amigas.
-Eso ya no me gusto, ahora si lo escucharon bien,- dijo en un susurro Mia.
-Si Mia, era la voz de una mujer, y esta en la planta de baja,-
-Y ahora que vamos a hacer Anna,-
-mmamoamamomomaoa,-
-Ay, perdón Sora,-
-Puaj, (suspiro) me estaban ahogando,-
-Shussss, eso no es importante… bueno si lo es, pero lo más importante es averiguar a quien pertenece esa voz,-
-Claro¡; en este día no hay nadie del escenario Kaleido, solo estamos nosotras tres,-
-Y si es la chica muerta, de la que nos hablo Mia,- preguntó Sora mientras sus ojos se hacian cada vez más grandes como los de un bebé a punto de soltar el llanto.
-Calmadas,- dijo Anna, -si es un fantasma le contaré un chiste y estará tan feliz que se ira a descansar en paz,-
-Eh, creo que eso no es una buena idea,- dijo Mia mientras volvía a dirigirse a la puerta, -Lo único que se me ocurre es ir a ver que es lo que está sucediendo,-
-Bueno,- dijeron las chicas muy poco convencidas, nuevamente se habían armado de valor, se colocaron las tres frente a la puerta del dormitorio y estaban a punto de abrirla cuando.
-LAS ENCONTREEEEEEEEEEEEEEEEEEEE,-
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHH HHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH- (n/a: el grito se escucho a cinco millas a la redonda ).
-Chicas, calma me van a dejar sorda,-
-SARA, PERO QUE DEMONIOS HACES AQUÍ,- preguntaron al unísono las muchachas.
Fin capítulo uno.
