Capitulo 2º
CONTRATOS PRE-MATRIMONIALES POR SIRIUS BLACK.
Harry y Ginny saltaron de pie al instante, e iniciando una competición de sonrojos, se apartaron cada uno a una esquina del cuarto, sin mirar al profesor Dumblendore.
- A mis queridos muchachos, me alegra mucho ver que se llevan tan bien. - Dijo el profesor Dumblendore señalando a la cama, continuo. - Tomarían asiento por favor.
Cuando Harry y Ginny se apresuraron a sentarse, cada uno en una punta de la cama, el profesor Dumbledore con un golpe de su vara desterró la silla, que havia estado usando Harry, a una esquina de la habitación, y procedió a conjurar un cómodo sillón, en el que se sentó.
- ¿Un caramelo de limón? - Les ofreció el director del colegio, sacándolos de su túnica. Una vez Harry y Ginny, habían cogido uno cada uno, continuo.- Realmente estoy sorprendido, señor Potter.
- Señor, si me permite explicarlo... - Tartamudeo Harry, mientras Ginny, mostraba un repentino interés por la pared.
- Sus tíos son realmente extraños. - Afirmo Dumblendore con ojos centelleantes. - ¿Sabe, que no les gustan los caramelos de limón?
- Eh, no realmente no lo sabia, señor. - Atino a contestar Harry.
- Curioso, realmente curioso. - Dijo pensativo el profesor Dumblendore. Volviéndose a Ginny siguió. - Señorita Weasley, le alegrara saber, que Fawkes me atraído hace breves instantes, desde San Murgo, una carta de Ojoloco Moody, con noticias de su familia.
- ¿Que decía la carta?¿Cómo están? - Pregunto angustiada Ginny.
- Ah, no debe preocuparse, su familia esta bien, como les dije, nada que no tenga solución. - Dijo calmadamente el profesor. - Su madre y su hermano Ronald, han respondido maravillosamente al tratamiento, y tras una noche de sueño, les darán el alta.
- En cuanto su hermano William, deberá pasar varias semanas ingresado. - Dirigiendo una sonrisa calurosa a Ginny, explico. - La regeneración de un miembro es un trabajo delicado, pero los médicos están plenamente convencidos, de una completa recuperación.
Ginny sonriendo entusiasmada, salto a abrazar a Harry, que igual de contento le devolvió el abrazo. Pasada la euforia inicial, se separaron sonrojados, pero quedándose sentados juntos. Ginny una vez recompuesta, se dirigió al profesor Dumblendore.
-¿Cuándo voy a verlos?¿Cuándo podré volver a casa? - Pregunto Ginny esperanzada.
El profesor Dumbledore, procedió a murmurar varias encantaciones mientras señalaba, las paredes, techo y suelo, con la varita. Pareciendo satisfecho, después que la habitación resplandeciera momentáneamente con una luz plateada, respondió a Ginny.
- Me temo, que eso no va ha ser posible, durante algún tiempo - Dijo apenado el profesor.
- ¿Que?¿Por que? - Pregunto alterada Ginny.
- Aun que, como ya le he dicho, su familia salió bien librada del ataque, lamento tener que decirle, que la Madriguera no corrió la misma suerte. - Explico el profesor Dumbledore. - Su padre junto a varios miembros del orden, se hayan recuperando todo lo posible de la vivienda en estos momentos.
Varias lagrimas resbalaron de los ojos de Ginny, mientras Harry, la abrazo intentando confortarla.
- Mañana, cuando su madre y su hermano Ronald dejen San Murgo, ellos y su padre, se instalaran en los viejos cuarteles generales del orden. - Continuo con un tono apagado. - El resto de sus hermanos, ya no vivían en la Madriguera, o en el caso de los gemelos, estaban en el proceso de mudarse.
- Pero, ¿porque no puedo ir con mis padres y Ron? - Pregunto Ginny.
- Desgraciadamente, los viejos cuarteles del orden, no son tan seguros como el numero 12 de Grimauld. - Dijo despacio el Profesor Dumblendore. Mirando fijamente a Harry continuo. - Si uno... O dos, de sus objetivos principales estuvieran allí,... Voldemort no dudaría de realizar otro ataque.
- ¿Por que no puede instalarse Ginny, junto con Ron y los señores Weasley, en el numero 12 de Grimauld, si es mas seguro? - Pregunto Harry, mientras se sentía desfallecer, al comprender, que quería decir Dumblendore. - ¿No se podría lanzar un encanto fidelius, en los viejos cuarteles del orden? Eso debería evitar, que Voldemort los pudiera atacar. ¿No?
Dumblendore reflexiono durante unos segundos, mientras Harry y Ginny lo miraban con ojos esperanzados.
- Los viejos cuarteles del orden, están en los sótanos de la Cabeza del Cerdo, los dos pueden comprender las dificultades inherentes, de lanzar el encanto fidelius, en una taberna. - Expuso despacio Dumblendore. - En lo que se refiere, al numero 12 de Grimauld, en estos momentos, y sospechamos que por algún tiempo, no esta disponible.
-¿Por que no esta disponible la casa de Grimauld? - Pregunto sorprendido Harry.
- Tras la muerte de Sirius, los pupilos defensivos sellaron la casa, hasta que el nuevo dueño decida abrirla. - Contesto Dumblendore.
Harry bajo la cabeza, sin atreverse a cruzar la mirada, con el profesor Dumblendore. En cambio Ginny pregunto.
- ¿Quién es el nuevo dueño? - Dijo con curiosidad. - Yo pensaba que dejaría la casa a Harry, o tal vez, al profesor Lupin o el orden del Fénix.
- Esa es una pregunta muy interesante, el profesor Lupin, y la señorita Nymphadora Tonks y su madre, ya han recibido importantes legados. - Dijo el profesor Dumbledore, con destellos en los ojos. - Pero, desconocemos el destinatario, de la casa del numero 12 de Grimauld, así como de la mayor parte de la fortuna Black.
- Yo creía, que una familia tan antigua y rica como la Black, utilizarían una pluma de herencia. - Dijo Ginny.
- Así es, y justamente las plumas de herencia pueden ser el problema. - Afirmo Dumblendore, mirando aprobadoramente a Ginny. - La pluma de herencia de la familia Potter, nombro a Sirius el guardián del señor Potter, y administrador de sus bienes, tras las muertes de sus padres.
Harry levanto la cabeza, y miro desconcertado, a Ginny y el profesor Dumblendore.
- Al ser encerrado Sirius en Azkaban, fue incapaz de completar la vinculación con la pluma. - Un amago de dolor, cruzó los ojos del profesor, mientras hablaba de la condena de Sirius. - A raíz de esto, la pluma me nombro administrador de la bóveda personal de los padres del señor Potter, con instrucciones de velar por su educación y manutención, y bloqueo el resto de bienes de la familia, hasta su mayoría de edad.
Dirigiéndose a Harry, el Profesor Dumblendore continuo.
- Esa es la bóveda, de la que Hagrid le dio la llave, cuando usted entró en Hogwarts. - Aclaro Dumblendore.
Harry cada vez mas desconcertado, continuo observando el intercambio, entre Ginny y el profesor Dumblendore.
- Cualquier legado, que haya dejado Sirius a Harry, seria gestionado por pluma de herencia de los Potter. - Dedujo Ginny, mientras Dumblendore cabeceaba aprobadoramente. - En consecuencia, la casa del numero 12 de Grimauld, y el resto de la fortuna Black, están bloqueados hasta que Harry, sea mayor de edad.
- Una excelente deducción, señorita Weasley. - Felicito el profesor Dumblendore a Ginny.- Esa es exactamente nuestra suposición.
Finalmente Harry, intervino en la conversación.
- ¿Que es una pluma de herencia? - Pregunto Harry. - ¿Mi familia tiene una?
- ¿No sabes que es una pluma de herencia? - Pregunto Ginny con gran sorpresa.
- Yo, me he criado con mugles, recuerdas. - Respondió Harry algo exasperado. - Y hasta ahora, nadie havia mencionado delante mío, esas plumas.
- ¿Me permite, profesor Dumblendore?. - Pregunto Ginny con una sonrisa traviesa. Cuando el profesor asintió, Ginny empezó realizando su mejor imitación de Hermione. - Como sabrías, si hubieras leído "Hogwarts, una historia", la primera pluma de herencia fue creada por Merlín, hace 1500 años.
- ¡Oh! No. - Susurro Harry tapándose la cara con las manos. - Que he hecho.
- Con mas de 1000 años, la pluma de Hogwarts, es la más antigua existente en la actualidad. - Siguió Ginny, asiendo oídos sordos. - Las plumas de herencia, sean usado durante generaciones en el mundo mágico, para administrar y asegurar la correcta sucesión, del patrimonio familiar.
Tras mirar al profesor Dumblendore para buscar su aprobación, Ginny continuo explicando.
- Para crear una pluma de herencia, se debe elaborar una poción, en la que el destinatario verterá tres gotas de su sangre, y tras ingerir tres gotas de la mezcla, introducirá el resto en un tintero, que será encantado junto a la pluma. - Explico Ginny. - Una vez encantados, la pluma forma un vinculo con el destinatario, que le permite conocer su estado y sus pensamientos este donde este.
Cansada de ver a Harry, con los ojos tapados, y murmurando por lo bajo, Ginny lo pincho con un dedo en las costillas, y exclamo.
- ¡¡¡Eeeh!!! Si haces una pregunta, lo menos que puedes hacer, es escuchar la respuesta. - Dijo reprobatoriamente.
- ¡¡¡Ahh!!! No hace falta que me hagas daño. - Se quejo Harry.
- No seas pusilánime. - Lo reprendió Ginny, con los brazos en jarro. - ¿Quieres saber para que sirven las plumas de herencia?¿ O no?
- Sí, continua. - Dijo Harry encogiéndose de hombros, mientras el profesor Dumblendore intentaba, sin demasiado éxito, ocultar una sonrisa. - Ya te estaba escuchando.
- Sí, seguro. - Contesto Ginny irónicamente. - Las plumas, pueden escribir solas cualquier instrucción o orden que el dueño desee, pero lo mejor, es que si el dueño no esta en el pleno uso de sus facultades, por un hechizo, una poción, una enfermedad, e incluso si esta siendo coaccionado, no escribirá nada.
- ¿Y eso es todo? ¿Solo sirven para escribir cartas? - Pregunto Harry sorprendido.
- Ves como no estabas escuchando. - Dijo Ginny con aire triunfal. - Como ya havia dicho, los magos y las brujas las usan para administrar sus bienes, la mayoría están en bóvedas especiales en Gringots, donde los duendes se ocupan de cumplir las instrucciones que dan.
- ¿Me permite, que interrumpa su excelente explicación, señorita Weasley? - Pregunto el profesor Dumblendore dando una ligera inclinación de cabeza a Ginny.
- Por favor profesor, agregue lo que desee. - Respondió Ginny con una sonrisa.
- Fue gracias a la pluma de herencia de la familia Black, que Sirius, mientras estaba huyendo, pudo comprar y enviarle su Firebolt, Harry. - Explico Dumblendore. - Sirius envió la orden a los duendes a través de la pluma, y estos cogieron los galeones de la bóveda de su padrino, y le enviaron la escoba a cambio de una jugosa comisión.
- ¿Pero como puede la pluma de mi familia, impedir que nadie entre en el numero 12 de Grimauld? - Pregunto Harry, mas interesado en las consecuencias, que en las plumas.
- ¡Ah! Eso se debe, a otras dos características de las plumas. - Respondió Ginny. - Cuando el dueño de una pluma muere, sus últimos pensamientos y deseos, quedan gravados en la pluma.
Harry, fue realmente sorprendido, por esta información.
- Como la pluma, no puede ser influenciada de ninguna manera, son realmente, la verdadera ultima voluntad del difunto. - Continuo Ginny. - Se considera, una profunda muestra de desprecio al finado, el negarse a cumplir las instrucciones de la pluma, siempre que estas sean posibles.
- La pluma de su familia estaba siguiendo los últimos deseos de su padre, cuando nombro a Sirius su guardián, y posteriormente a mí, como administrador de la bóveda personal de sus padres, o cuando bloqueo el resto de sus bienes hasta que usted fuera mayor de edad, Harry. - Continuo explicando el profesor Dumblendore.
- Profesor, usted a mencionado en varias ocasiones, que mi bóveda es la bóveda personal de mis padres. - Interrogo al profesor Dumblendore, Harry. - ¿Hay mas de un tipo de bóveda?
- Gringots tiene varios tipos de bóvedas, las personales son las mas corrientes, se usan para los gastos diarios, y basta la llave de la bóveda, para poder acceder a ellas. - Explico Ginny, adelantándose a la respuesta del profesor Dumblendore. - La mayor parte de familias adineradas, tienen también bóvedas familiares, donde están la mayoría de sus fortunas, para acceder a estas hay que pasar varias pruebas, incluyendo ser interrogado con Veritaserum.
- ¿Eso no resulta poco practico? - Atino a preguntar Harry.
- Bien, lo seria si no fuera por las plumas de herencia. - Contesto Ginny rápidamente. - Las familias, las usan para transferir sus bienes, de una bóveda a otra, sin tener que pasar ninguna prueba.
- ¿Pero, no es demasiado complicado? - Pregunto Harry extrañado. - ¿No seria más sencillo tenerlo todo en una bóveda?
- Es por protección, es muy fácil, robar una bóveda personal usando un metamorfomagus, una poción polijuice, una maldición Imperius,... O extorsionar a una familia, mediante un chantaje, o un secuestro. - Expuso Ginny. - Los duendes descubrirían cualquiera de esas circunstancias con las pruebas que realizan, e impedirían el acceso a las bóvedas a los afectados, y las plumas tampoco funcionan en esos casos.
- Y como todo el mundo lo sabe, nadie lo intenta. - Concluyo Harry.
- ¡¡¡Muy bien!!! Aun hay esperanzas para ti. - Dijo Ginny con aires de superioridad. - Sabia, que en tu cabeza había algo mas que aire.
- Hermione. - Acuso Harry.
- ¡¡¡Eeh!!! - Dijo Ginny, dándole un golpe amistoso a Harry en el brazo, con una gran sonrisa.
Tras pensar unos segundos, Harry se dirigió al profesor Dumblendore.
- ¿Mis padres tenían una bóveda familiar? - Pregunto Harry, mientras Ginny, repentinamente conciente de la presencia del director de Hogwarts, se sonrojo profusamente.
- Harry, su familia nunca ha hecho gran ostentación de su riqueza, y por eso es poco conocido, pero la familia Potter, junto a las familias Black y Malfoy, son las más ricas de Inglaterra. - Contesto Dumblendore. - Usted posee o poseerá cuando sea mayor de edad, un gran numero de bóvedas, propiedades y bienes, realmente, solo sus padres sabían la totalidad de bienes de su familia.
Harry se quedo helado, mirando al profesor Dumblendore.
- Merlín ¿Porque yo?¿Por que todo me pasa a mí? - Susurro Harry.
- Harry, no es tan malo. - Dijo Ginny consoladoramente. - Piensa en Lucius Malfoy, y todo el daño que ha hecho con su influencia, y piensa el bien que podrías hacer tu.
- Es cierto, su padre, y Sirius cuando heredo la fortuna Black, fueron de una ayuda inestimable en la ultima guerra contra Voldemort, Harry. - Afirmo Dumblendore.
Harry pareció mas animado, ante las palabras del profesor Dumblendore y Ginny.
- Pero no podré hacer nada, hasta que sea mayor de edad. - Dijo defraudado Harry.
- No se preocupe por eso, Harry. - Dijo alegremente el profesor Dumblendore. - Solo queda un año hasta que sea mayor de edad, y tras ser arrestado, Lucius Malfoy a perdido la mayor parte de su influencia.
Harry se quedo callado meditando unos instantes. El profesor Dumblendore respetando su retiro, se entretuvo escogiendo, que caramelo de limón, parecía más apetitoso. Ginny recuperada de su sonrojo, se hallaba perdida en sus pensamientos, pareciendo algo alicaída.
- Aun tengo algunas dudas. - Dijo finalmente Harry. - ¿Cómo supo la pluma de mi familia, que yo havia heredado de Sirius?¿Y como pudo impedir la entrada al numero 12 de Grimauld? Los Duendes no podrían encontrar la casa y cerrarla, debido al encanto fidelius. ¿No?
- Unas preguntas interesantes, Señor Potter. - Dijo el director del colegio Hogwarts con una sonrisa. - A la muerte de Sirius, la pluma de la familia Black, notificó al profesor Lupin, A la señorita Nymphadora Tonks y a su madre, los legados que les havia dejado, y les transfirió las diferentes propiedades, de las bóvedas de Sirius, a las suyas, junto a un recipiente, con varias gotas de tinta de la pluma, para cada uno.
El profesor Dumblendore se detuvo unos instantes, pensando la mejor manera de continuar.
- Sirius sabia, que usted no podría heredad hasta que fuera mayor de edad, y que informándolo de su herencia inmediatamente después de su muerte, solo lo haría sufrir más, así que creemos que la pluma de Sirius envió la notificación de su legado, y el recipiente con las gotas de tinta, a su bóveda familiar. - Respondió el profesor Dumblendore. - Las bóvedas de Gringots, están vinculadas a las plumas de sus dueños, y están encantadas para conocer e identificar su contenido, incluso interpretar documentos y contratos, la pluma de su familia al recibir la notificación de su herencia, debió ordenar verter la tinta en su tintero, tomando el control de los bienes que Sirius le ha dejado, y bloqueándolos.
- ¿Tomo control de los bienes de Sirius, vertiendo la tinta en el tintero? - Pregunto Harry extrañado. - ¿Para que sirven los recipientes de tinta?
- En el caso de que el heredero ya tenga una pluma de herencia, como usted, o en el caso de los restantes beneficiarios, los recipientes de tinta sirven para transferir las propiedades vinculadas a la pluma. - Respondió el profesor Dumblendore. - Basta con verter las gotas de tinta en otra pluma, para transferir el vinculo a ella, o ingerir las gotas, para vincularlas las propiedades a uno mismo.
Viendo la sorpresa de Harry, continuo.
- Los magos nunca han usado documentos, para establecer la propiedad sobre un lugar o objeto. - Explico el profesor Dumblendore. - Antiguamente, se usaban complejos rituales de magia de sangre, para vincular una propiedad a su dueño.
- Cuando el dueño moría, el heredero debía repetir el ritual, antes que la magia del difunto desapareciera, si no lo realizaba a tiempo, cualquiera podía quedarse con la propiedad. - Siguió el profesor Dumblendore. - Las plumas acabaron con esta situación, con un siempre encanto y unas gotas de tinta de una pluma de herencia, un lugar o un objeto queda vinculado a la pluma, y la muerte del dueño no termina el vinculo.
- El heredero tiene que vincularse a la pluma. ¿No? - Pregunto Harry más interesado. - Cuando sea mayor de edad, yo tendré que vincularme a la pluma de mi familia, igual que tenia que haber hecho Sirius, al ser nombrado mi guardián.
- Así es, aunque los herederos acostumbran a ya estar vinculados a la pluma, como es su caso, y Sirius debía realizar un vinculo parcial, y no uno completo. - Aclaro El profesor Dumblendore.
- ¿Yo ya estoy vinculado a la pluma de mi familia? ¿Cómo? ¿Cuándo? - Inquirió Harry desconcertado ante la nueva información.
- La mayoría de familias vinculan a sus hijos al nacer, como hicieron sus padres, la pluma mantiene un vinculo latente con ellos, que le permite conocer su situación y estado general, igual que un reloj de mago, y se puede convertir en cualquier momento en un vinculo parcial o completo, en su caso, cuando sea mayor de edad se convertirá en un vinculó completo. - Respondió el profesor Dumblendore. - Para realizar un vinculo latente, basta con verter en el tintero de la pluma, tres gotas de sangre de la persona a vincular, y que esta ingiera tres gotas de la mezcla.
- ¿Qué diferencia hay entre un vinculo u otro? - Continuo preguntando Harry.
- Un vinculo completo es el que tiene el dueño con la pluma, solo en muy raros casos, una pluma tiene mas de un vinculo completo. - Dijo el profesor Dumblendore. - Es una muestra de gran confianza, otorgar un vinculo completo a otra persona, su padre lo hizo a su madre tras su boda.
Harry algo emocionado por este comentario, miro de reojo a Ginny esperando verla sonreír, pero ella estaba perdida en sus pensamientos, o no le havia dado importancia al comentario.
- Un vinculo parcial funciona como uno completo con algunas limitaciones, el dueño de la pluma establece las limitaciones, y puede cambiarlas o anular el vinculo a voluntad. - Siguió el profesor Dumblendore. - Un ejemplo de este vinculo, es el que un mago suele otorgar a su esposa, permitiéndole exclusivamente, disponer de una cantidad fija de galeones al mes, y controlar la casa familiar.
- ¿Cómo se puede controlar una casa? - Inquirió Harry. - ¿Es así como mi pluma, cerró el numero 12 de Grimauld?
- Si, algunos lugares son mágicos y semi-sensibles, como el numero 12 de Grimauld, han sido encantados para dar mentalmente información al dueño, y cumplir las instrucciones de este. - Afirmo el profesor Dumblendore. - El dueño debe estar presente para percibir la información, y dar o cambiar las instrucciones de la casa, a menos que esta este vinculada a una pluma.
Ante la cara sumamente desconcertada de Harry, el profesor Dumblendore intento clarificarlo un poco.
- La mansión Black es una casa sumamente mágica, capaz de sentir la firma mágica de las personas, localizar su ubicación en la casa o su alrededor, e identificarlas si conoce su nombre. - Detallo el profesor Dumblendore. - Los pupilos defensivos de la casa pueden, limitar el acceso a algunas partes de la casa a determinadas personas, o dejar entrar en la casa a unas personas, e impedir el paso a otras.
Viendo que Harry no acababa de entenderlo, agrego.
- El invierno pasado después de cada reunión del orden, el profesor Snape tuvo que visitar la enfermería para una poción de pimienta, por que Sirius ordeno a su casa, que siempre esperara una hora para dejarlo entrar. - Explico el profesor Dumblendore, intentando aclarar las dudas de Harry. - Cuando el profesor Snape llamaba, la casa no abría la puerta hasta que havia pasado una hora, si intentaba entrar con otra persona, antes de que hubiera transcurrido el tiempo, un hechizo lo lanzaba al suelo a varios metros de la puerta.
Harry empezó a reír descontroladamente, Ginny ensimismada en sus pensamientos, tardo unos minutos en revocar lo que havia dicho el profesor Dumblendore, y unir sus risas a las de Harry.
- Niños por favor, no creo que sea cosa de risa. El pobre profesor Snape, de pie impávido bajo la lluvia y la nieve, durante una hora cada semana, es algo lamentable. - Con destellos en los ojos, el profesor Dumblendore reprendió suavemente, a Harry y Ginny.
La ultima declaración, solo sirvió para avivar la hilaridad de Harry y Ginny. Viendo el profesor Dumblendore, que no iba conseguir nada, se dispuso ha esperar cómodamente, un largo rato. Finalmente, una vez recompuestos los dos adolescentes, Harry comento.
- Realmente las plumas de herencia son muy útiles. - Dijo Harry con admiración. Tras una pausa, una idea le paso por la mente, y pregunto inquieto. - ¿Qué ocurriría si Voldemort destruyera las plumas de herencia?
El profesor Dumblendore sonrió a Harry y contesto.
- Realmente nada, una pluma puede ser reconstruida a partir de la sangre de alguien vinculada a ella, completamente intacta. - Contesto agradado por la pregunta el profesor Dumblendore.
- Bien, han pensado en todo. - Dijo Harry aliviado.
- Claro que han pensado en todo. ¿No te he dicho que las plumas de herencia las invento Merlín? -Dijo Ginny agriamente.
El profesor Dumblendore y Harry, se volvieron hacia Ginny sorprendidos por la rudeza del comentario. Viendo Harry, a Ginny algo alterada, pregunto.
- Ginny. ¿Qué pasa?¿Te encuentras Bien? - Dijo Harry claramente preocupado.
Bajando la cabeza avergonzada de su arranque Ginny, contesto con voz suave.
- Sí, perdona. Estoy algo nerviosa, solo... - Levantando la cabeza, y mirando al profesor Dumblendore visiblemente angustiada, pregunto. - Si no puedo ir con mis padres, ni al numero 12 de Grimauld. ¿Dónde voy a quedarme?
- Yo esperaba, que se quedara aquí. - Afirmo el profesor Dumblendore, con una gran sonrisa en la cara, causando estupor en los dos adolescentes.
CONTRATOS PRE-MATRIMONIALES POR SIRIUS BLACK.
Harry y Ginny saltaron de pie al instante, e iniciando una competición de sonrojos, se apartaron cada uno a una esquina del cuarto, sin mirar al profesor Dumblendore.
- A mis queridos muchachos, me alegra mucho ver que se llevan tan bien. - Dijo el profesor Dumblendore señalando a la cama, continuo. - Tomarían asiento por favor.
Cuando Harry y Ginny se apresuraron a sentarse, cada uno en una punta de la cama, el profesor Dumbledore con un golpe de su vara desterró la silla, que havia estado usando Harry, a una esquina de la habitación, y procedió a conjurar un cómodo sillón, en el que se sentó.
- ¿Un caramelo de limón? - Les ofreció el director del colegio, sacándolos de su túnica. Una vez Harry y Ginny, habían cogido uno cada uno, continuo.- Realmente estoy sorprendido, señor Potter.
- Señor, si me permite explicarlo... - Tartamudeo Harry, mientras Ginny, mostraba un repentino interés por la pared.
- Sus tíos son realmente extraños. - Afirmo Dumblendore con ojos centelleantes. - ¿Sabe, que no les gustan los caramelos de limón?
- Eh, no realmente no lo sabia, señor. - Atino a contestar Harry.
- Curioso, realmente curioso. - Dijo pensativo el profesor Dumblendore. Volviéndose a Ginny siguió. - Señorita Weasley, le alegrara saber, que Fawkes me atraído hace breves instantes, desde San Murgo, una carta de Ojoloco Moody, con noticias de su familia.
- ¿Que decía la carta?¿Cómo están? - Pregunto angustiada Ginny.
- Ah, no debe preocuparse, su familia esta bien, como les dije, nada que no tenga solución. - Dijo calmadamente el profesor. - Su madre y su hermano Ronald, han respondido maravillosamente al tratamiento, y tras una noche de sueño, les darán el alta.
- En cuanto su hermano William, deberá pasar varias semanas ingresado. - Dirigiendo una sonrisa calurosa a Ginny, explico. - La regeneración de un miembro es un trabajo delicado, pero los médicos están plenamente convencidos, de una completa recuperación.
Ginny sonriendo entusiasmada, salto a abrazar a Harry, que igual de contento le devolvió el abrazo. Pasada la euforia inicial, se separaron sonrojados, pero quedándose sentados juntos. Ginny una vez recompuesta, se dirigió al profesor Dumblendore.
-¿Cuándo voy a verlos?¿Cuándo podré volver a casa? - Pregunto Ginny esperanzada.
El profesor Dumbledore, procedió a murmurar varias encantaciones mientras señalaba, las paredes, techo y suelo, con la varita. Pareciendo satisfecho, después que la habitación resplandeciera momentáneamente con una luz plateada, respondió a Ginny.
- Me temo, que eso no va ha ser posible, durante algún tiempo - Dijo apenado el profesor.
- ¿Que?¿Por que? - Pregunto alterada Ginny.
- Aun que, como ya le he dicho, su familia salió bien librada del ataque, lamento tener que decirle, que la Madriguera no corrió la misma suerte. - Explico el profesor Dumbledore. - Su padre junto a varios miembros del orden, se hayan recuperando todo lo posible de la vivienda en estos momentos.
Varias lagrimas resbalaron de los ojos de Ginny, mientras Harry, la abrazo intentando confortarla.
- Mañana, cuando su madre y su hermano Ronald dejen San Murgo, ellos y su padre, se instalaran en los viejos cuarteles generales del orden. - Continuo con un tono apagado. - El resto de sus hermanos, ya no vivían en la Madriguera, o en el caso de los gemelos, estaban en el proceso de mudarse.
- Pero, ¿porque no puedo ir con mis padres y Ron? - Pregunto Ginny.
- Desgraciadamente, los viejos cuarteles del orden, no son tan seguros como el numero 12 de Grimauld. - Dijo despacio el Profesor Dumblendore. Mirando fijamente a Harry continuo. - Si uno... O dos, de sus objetivos principales estuvieran allí,... Voldemort no dudaría de realizar otro ataque.
- ¿Por que no puede instalarse Ginny, junto con Ron y los señores Weasley, en el numero 12 de Grimauld, si es mas seguro? - Pregunto Harry, mientras se sentía desfallecer, al comprender, que quería decir Dumblendore. - ¿No se podría lanzar un encanto fidelius, en los viejos cuarteles del orden? Eso debería evitar, que Voldemort los pudiera atacar. ¿No?
Dumblendore reflexiono durante unos segundos, mientras Harry y Ginny lo miraban con ojos esperanzados.
- Los viejos cuarteles del orden, están en los sótanos de la Cabeza del Cerdo, los dos pueden comprender las dificultades inherentes, de lanzar el encanto fidelius, en una taberna. - Expuso despacio Dumblendore. - En lo que se refiere, al numero 12 de Grimauld, en estos momentos, y sospechamos que por algún tiempo, no esta disponible.
-¿Por que no esta disponible la casa de Grimauld? - Pregunto sorprendido Harry.
- Tras la muerte de Sirius, los pupilos defensivos sellaron la casa, hasta que el nuevo dueño decida abrirla. - Contesto Dumblendore.
Harry bajo la cabeza, sin atreverse a cruzar la mirada, con el profesor Dumblendore. En cambio Ginny pregunto.
- ¿Quién es el nuevo dueño? - Dijo con curiosidad. - Yo pensaba que dejaría la casa a Harry, o tal vez, al profesor Lupin o el orden del Fénix.
- Esa es una pregunta muy interesante, el profesor Lupin, y la señorita Nymphadora Tonks y su madre, ya han recibido importantes legados. - Dijo el profesor Dumbledore, con destellos en los ojos. - Pero, desconocemos el destinatario, de la casa del numero 12 de Grimauld, así como de la mayor parte de la fortuna Black.
- Yo creía, que una familia tan antigua y rica como la Black, utilizarían una pluma de herencia. - Dijo Ginny.
- Así es, y justamente las plumas de herencia pueden ser el problema. - Afirmo Dumblendore, mirando aprobadoramente a Ginny. - La pluma de herencia de la familia Potter, nombro a Sirius el guardián del señor Potter, y administrador de sus bienes, tras las muertes de sus padres.
Harry levanto la cabeza, y miro desconcertado, a Ginny y el profesor Dumblendore.
- Al ser encerrado Sirius en Azkaban, fue incapaz de completar la vinculación con la pluma. - Un amago de dolor, cruzó los ojos del profesor, mientras hablaba de la condena de Sirius. - A raíz de esto, la pluma me nombro administrador de la bóveda personal de los padres del señor Potter, con instrucciones de velar por su educación y manutención, y bloqueo el resto de bienes de la familia, hasta su mayoría de edad.
Dirigiéndose a Harry, el Profesor Dumblendore continuo.
- Esa es la bóveda, de la que Hagrid le dio la llave, cuando usted entró en Hogwarts. - Aclaro Dumblendore.
Harry cada vez mas desconcertado, continuo observando el intercambio, entre Ginny y el profesor Dumblendore.
- Cualquier legado, que haya dejado Sirius a Harry, seria gestionado por pluma de herencia de los Potter. - Dedujo Ginny, mientras Dumblendore cabeceaba aprobadoramente. - En consecuencia, la casa del numero 12 de Grimauld, y el resto de la fortuna Black, están bloqueados hasta que Harry, sea mayor de edad.
- Una excelente deducción, señorita Weasley. - Felicito el profesor Dumblendore a Ginny.- Esa es exactamente nuestra suposición.
Finalmente Harry, intervino en la conversación.
- ¿Que es una pluma de herencia? - Pregunto Harry. - ¿Mi familia tiene una?
- ¿No sabes que es una pluma de herencia? - Pregunto Ginny con gran sorpresa.
- Yo, me he criado con mugles, recuerdas. - Respondió Harry algo exasperado. - Y hasta ahora, nadie havia mencionado delante mío, esas plumas.
- ¿Me permite, profesor Dumblendore?. - Pregunto Ginny con una sonrisa traviesa. Cuando el profesor asintió, Ginny empezó realizando su mejor imitación de Hermione. - Como sabrías, si hubieras leído "Hogwarts, una historia", la primera pluma de herencia fue creada por Merlín, hace 1500 años.
- ¡Oh! No. - Susurro Harry tapándose la cara con las manos. - Que he hecho.
- Con mas de 1000 años, la pluma de Hogwarts, es la más antigua existente en la actualidad. - Siguió Ginny, asiendo oídos sordos. - Las plumas de herencia, sean usado durante generaciones en el mundo mágico, para administrar y asegurar la correcta sucesión, del patrimonio familiar.
Tras mirar al profesor Dumblendore para buscar su aprobación, Ginny continuo explicando.
- Para crear una pluma de herencia, se debe elaborar una poción, en la que el destinatario verterá tres gotas de su sangre, y tras ingerir tres gotas de la mezcla, introducirá el resto en un tintero, que será encantado junto a la pluma. - Explico Ginny. - Una vez encantados, la pluma forma un vinculo con el destinatario, que le permite conocer su estado y sus pensamientos este donde este.
Cansada de ver a Harry, con los ojos tapados, y murmurando por lo bajo, Ginny lo pincho con un dedo en las costillas, y exclamo.
- ¡¡¡Eeeh!!! Si haces una pregunta, lo menos que puedes hacer, es escuchar la respuesta. - Dijo reprobatoriamente.
- ¡¡¡Ahh!!! No hace falta que me hagas daño. - Se quejo Harry.
- No seas pusilánime. - Lo reprendió Ginny, con los brazos en jarro. - ¿Quieres saber para que sirven las plumas de herencia?¿ O no?
- Sí, continua. - Dijo Harry encogiéndose de hombros, mientras el profesor Dumblendore intentaba, sin demasiado éxito, ocultar una sonrisa. - Ya te estaba escuchando.
- Sí, seguro. - Contesto Ginny irónicamente. - Las plumas, pueden escribir solas cualquier instrucción o orden que el dueño desee, pero lo mejor, es que si el dueño no esta en el pleno uso de sus facultades, por un hechizo, una poción, una enfermedad, e incluso si esta siendo coaccionado, no escribirá nada.
- ¿Y eso es todo? ¿Solo sirven para escribir cartas? - Pregunto Harry sorprendido.
- Ves como no estabas escuchando. - Dijo Ginny con aire triunfal. - Como ya havia dicho, los magos y las brujas las usan para administrar sus bienes, la mayoría están en bóvedas especiales en Gringots, donde los duendes se ocupan de cumplir las instrucciones que dan.
- ¿Me permite, que interrumpa su excelente explicación, señorita Weasley? - Pregunto el profesor Dumblendore dando una ligera inclinación de cabeza a Ginny.
- Por favor profesor, agregue lo que desee. - Respondió Ginny con una sonrisa.
- Fue gracias a la pluma de herencia de la familia Black, que Sirius, mientras estaba huyendo, pudo comprar y enviarle su Firebolt, Harry. - Explico Dumblendore. - Sirius envió la orden a los duendes a través de la pluma, y estos cogieron los galeones de la bóveda de su padrino, y le enviaron la escoba a cambio de una jugosa comisión.
- ¿Pero como puede la pluma de mi familia, impedir que nadie entre en el numero 12 de Grimauld? - Pregunto Harry, mas interesado en las consecuencias, que en las plumas.
- ¡Ah! Eso se debe, a otras dos características de las plumas. - Respondió Ginny. - Cuando el dueño de una pluma muere, sus últimos pensamientos y deseos, quedan gravados en la pluma.
Harry, fue realmente sorprendido, por esta información.
- Como la pluma, no puede ser influenciada de ninguna manera, son realmente, la verdadera ultima voluntad del difunto. - Continuo Ginny. - Se considera, una profunda muestra de desprecio al finado, el negarse a cumplir las instrucciones de la pluma, siempre que estas sean posibles.
- La pluma de su familia estaba siguiendo los últimos deseos de su padre, cuando nombro a Sirius su guardián, y posteriormente a mí, como administrador de la bóveda personal de sus padres, o cuando bloqueo el resto de sus bienes hasta que usted fuera mayor de edad, Harry. - Continuo explicando el profesor Dumblendore.
- Profesor, usted a mencionado en varias ocasiones, que mi bóveda es la bóveda personal de mis padres. - Interrogo al profesor Dumblendore, Harry. - ¿Hay mas de un tipo de bóveda?
- Gringots tiene varios tipos de bóvedas, las personales son las mas corrientes, se usan para los gastos diarios, y basta la llave de la bóveda, para poder acceder a ellas. - Explico Ginny, adelantándose a la respuesta del profesor Dumblendore. - La mayor parte de familias adineradas, tienen también bóvedas familiares, donde están la mayoría de sus fortunas, para acceder a estas hay que pasar varias pruebas, incluyendo ser interrogado con Veritaserum.
- ¿Eso no resulta poco practico? - Atino a preguntar Harry.
- Bien, lo seria si no fuera por las plumas de herencia. - Contesto Ginny rápidamente. - Las familias, las usan para transferir sus bienes, de una bóveda a otra, sin tener que pasar ninguna prueba.
- ¿Pero, no es demasiado complicado? - Pregunto Harry extrañado. - ¿No seria más sencillo tenerlo todo en una bóveda?
- Es por protección, es muy fácil, robar una bóveda personal usando un metamorfomagus, una poción polijuice, una maldición Imperius,... O extorsionar a una familia, mediante un chantaje, o un secuestro. - Expuso Ginny. - Los duendes descubrirían cualquiera de esas circunstancias con las pruebas que realizan, e impedirían el acceso a las bóvedas a los afectados, y las plumas tampoco funcionan en esos casos.
- Y como todo el mundo lo sabe, nadie lo intenta. - Concluyo Harry.
- ¡¡¡Muy bien!!! Aun hay esperanzas para ti. - Dijo Ginny con aires de superioridad. - Sabia, que en tu cabeza había algo mas que aire.
- Hermione. - Acuso Harry.
- ¡¡¡Eeh!!! - Dijo Ginny, dándole un golpe amistoso a Harry en el brazo, con una gran sonrisa.
Tras pensar unos segundos, Harry se dirigió al profesor Dumblendore.
- ¿Mis padres tenían una bóveda familiar? - Pregunto Harry, mientras Ginny, repentinamente conciente de la presencia del director de Hogwarts, se sonrojo profusamente.
- Harry, su familia nunca ha hecho gran ostentación de su riqueza, y por eso es poco conocido, pero la familia Potter, junto a las familias Black y Malfoy, son las más ricas de Inglaterra. - Contesto Dumblendore. - Usted posee o poseerá cuando sea mayor de edad, un gran numero de bóvedas, propiedades y bienes, realmente, solo sus padres sabían la totalidad de bienes de su familia.
Harry se quedo helado, mirando al profesor Dumblendore.
- Merlín ¿Porque yo?¿Por que todo me pasa a mí? - Susurro Harry.
- Harry, no es tan malo. - Dijo Ginny consoladoramente. - Piensa en Lucius Malfoy, y todo el daño que ha hecho con su influencia, y piensa el bien que podrías hacer tu.
- Es cierto, su padre, y Sirius cuando heredo la fortuna Black, fueron de una ayuda inestimable en la ultima guerra contra Voldemort, Harry. - Afirmo Dumblendore.
Harry pareció mas animado, ante las palabras del profesor Dumblendore y Ginny.
- Pero no podré hacer nada, hasta que sea mayor de edad. - Dijo defraudado Harry.
- No se preocupe por eso, Harry. - Dijo alegremente el profesor Dumblendore. - Solo queda un año hasta que sea mayor de edad, y tras ser arrestado, Lucius Malfoy a perdido la mayor parte de su influencia.
Harry se quedo callado meditando unos instantes. El profesor Dumblendore respetando su retiro, se entretuvo escogiendo, que caramelo de limón, parecía más apetitoso. Ginny recuperada de su sonrojo, se hallaba perdida en sus pensamientos, pareciendo algo alicaída.
- Aun tengo algunas dudas. - Dijo finalmente Harry. - ¿Cómo supo la pluma de mi familia, que yo havia heredado de Sirius?¿Y como pudo impedir la entrada al numero 12 de Grimauld? Los Duendes no podrían encontrar la casa y cerrarla, debido al encanto fidelius. ¿No?
- Unas preguntas interesantes, Señor Potter. - Dijo el director del colegio Hogwarts con una sonrisa. - A la muerte de Sirius, la pluma de la familia Black, notificó al profesor Lupin, A la señorita Nymphadora Tonks y a su madre, los legados que les havia dejado, y les transfirió las diferentes propiedades, de las bóvedas de Sirius, a las suyas, junto a un recipiente, con varias gotas de tinta de la pluma, para cada uno.
El profesor Dumblendore se detuvo unos instantes, pensando la mejor manera de continuar.
- Sirius sabia, que usted no podría heredad hasta que fuera mayor de edad, y que informándolo de su herencia inmediatamente después de su muerte, solo lo haría sufrir más, así que creemos que la pluma de Sirius envió la notificación de su legado, y el recipiente con las gotas de tinta, a su bóveda familiar. - Respondió el profesor Dumblendore. - Las bóvedas de Gringots, están vinculadas a las plumas de sus dueños, y están encantadas para conocer e identificar su contenido, incluso interpretar documentos y contratos, la pluma de su familia al recibir la notificación de su herencia, debió ordenar verter la tinta en su tintero, tomando el control de los bienes que Sirius le ha dejado, y bloqueándolos.
- ¿Tomo control de los bienes de Sirius, vertiendo la tinta en el tintero? - Pregunto Harry extrañado. - ¿Para que sirven los recipientes de tinta?
- En el caso de que el heredero ya tenga una pluma de herencia, como usted, o en el caso de los restantes beneficiarios, los recipientes de tinta sirven para transferir las propiedades vinculadas a la pluma. - Respondió el profesor Dumblendore. - Basta con verter las gotas de tinta en otra pluma, para transferir el vinculo a ella, o ingerir las gotas, para vincularlas las propiedades a uno mismo.
Viendo la sorpresa de Harry, continuo.
- Los magos nunca han usado documentos, para establecer la propiedad sobre un lugar o objeto. - Explico el profesor Dumblendore. - Antiguamente, se usaban complejos rituales de magia de sangre, para vincular una propiedad a su dueño.
- Cuando el dueño moría, el heredero debía repetir el ritual, antes que la magia del difunto desapareciera, si no lo realizaba a tiempo, cualquiera podía quedarse con la propiedad. - Siguió el profesor Dumblendore. - Las plumas acabaron con esta situación, con un siempre encanto y unas gotas de tinta de una pluma de herencia, un lugar o un objeto queda vinculado a la pluma, y la muerte del dueño no termina el vinculo.
- El heredero tiene que vincularse a la pluma. ¿No? - Pregunto Harry más interesado. - Cuando sea mayor de edad, yo tendré que vincularme a la pluma de mi familia, igual que tenia que haber hecho Sirius, al ser nombrado mi guardián.
- Así es, aunque los herederos acostumbran a ya estar vinculados a la pluma, como es su caso, y Sirius debía realizar un vinculo parcial, y no uno completo. - Aclaro El profesor Dumblendore.
- ¿Yo ya estoy vinculado a la pluma de mi familia? ¿Cómo? ¿Cuándo? - Inquirió Harry desconcertado ante la nueva información.
- La mayoría de familias vinculan a sus hijos al nacer, como hicieron sus padres, la pluma mantiene un vinculo latente con ellos, que le permite conocer su situación y estado general, igual que un reloj de mago, y se puede convertir en cualquier momento en un vinculo parcial o completo, en su caso, cuando sea mayor de edad se convertirá en un vinculó completo. - Respondió el profesor Dumblendore. - Para realizar un vinculo latente, basta con verter en el tintero de la pluma, tres gotas de sangre de la persona a vincular, y que esta ingiera tres gotas de la mezcla.
- ¿Qué diferencia hay entre un vinculo u otro? - Continuo preguntando Harry.
- Un vinculo completo es el que tiene el dueño con la pluma, solo en muy raros casos, una pluma tiene mas de un vinculo completo. - Dijo el profesor Dumblendore. - Es una muestra de gran confianza, otorgar un vinculo completo a otra persona, su padre lo hizo a su madre tras su boda.
Harry algo emocionado por este comentario, miro de reojo a Ginny esperando verla sonreír, pero ella estaba perdida en sus pensamientos, o no le havia dado importancia al comentario.
- Un vinculo parcial funciona como uno completo con algunas limitaciones, el dueño de la pluma establece las limitaciones, y puede cambiarlas o anular el vinculo a voluntad. - Siguió el profesor Dumblendore. - Un ejemplo de este vinculo, es el que un mago suele otorgar a su esposa, permitiéndole exclusivamente, disponer de una cantidad fija de galeones al mes, y controlar la casa familiar.
- ¿Cómo se puede controlar una casa? - Inquirió Harry. - ¿Es así como mi pluma, cerró el numero 12 de Grimauld?
- Si, algunos lugares son mágicos y semi-sensibles, como el numero 12 de Grimauld, han sido encantados para dar mentalmente información al dueño, y cumplir las instrucciones de este. - Afirmo el profesor Dumblendore. - El dueño debe estar presente para percibir la información, y dar o cambiar las instrucciones de la casa, a menos que esta este vinculada a una pluma.
Ante la cara sumamente desconcertada de Harry, el profesor Dumblendore intento clarificarlo un poco.
- La mansión Black es una casa sumamente mágica, capaz de sentir la firma mágica de las personas, localizar su ubicación en la casa o su alrededor, e identificarlas si conoce su nombre. - Detallo el profesor Dumblendore. - Los pupilos defensivos de la casa pueden, limitar el acceso a algunas partes de la casa a determinadas personas, o dejar entrar en la casa a unas personas, e impedir el paso a otras.
Viendo que Harry no acababa de entenderlo, agrego.
- El invierno pasado después de cada reunión del orden, el profesor Snape tuvo que visitar la enfermería para una poción de pimienta, por que Sirius ordeno a su casa, que siempre esperara una hora para dejarlo entrar. - Explico el profesor Dumblendore, intentando aclarar las dudas de Harry. - Cuando el profesor Snape llamaba, la casa no abría la puerta hasta que havia pasado una hora, si intentaba entrar con otra persona, antes de que hubiera transcurrido el tiempo, un hechizo lo lanzaba al suelo a varios metros de la puerta.
Harry empezó a reír descontroladamente, Ginny ensimismada en sus pensamientos, tardo unos minutos en revocar lo que havia dicho el profesor Dumblendore, y unir sus risas a las de Harry.
- Niños por favor, no creo que sea cosa de risa. El pobre profesor Snape, de pie impávido bajo la lluvia y la nieve, durante una hora cada semana, es algo lamentable. - Con destellos en los ojos, el profesor Dumblendore reprendió suavemente, a Harry y Ginny.
La ultima declaración, solo sirvió para avivar la hilaridad de Harry y Ginny. Viendo el profesor Dumblendore, que no iba conseguir nada, se dispuso ha esperar cómodamente, un largo rato. Finalmente, una vez recompuestos los dos adolescentes, Harry comento.
- Realmente las plumas de herencia son muy útiles. - Dijo Harry con admiración. Tras una pausa, una idea le paso por la mente, y pregunto inquieto. - ¿Qué ocurriría si Voldemort destruyera las plumas de herencia?
El profesor Dumblendore sonrió a Harry y contesto.
- Realmente nada, una pluma puede ser reconstruida a partir de la sangre de alguien vinculada a ella, completamente intacta. - Contesto agradado por la pregunta el profesor Dumblendore.
- Bien, han pensado en todo. - Dijo Harry aliviado.
- Claro que han pensado en todo. ¿No te he dicho que las plumas de herencia las invento Merlín? -Dijo Ginny agriamente.
El profesor Dumblendore y Harry, se volvieron hacia Ginny sorprendidos por la rudeza del comentario. Viendo Harry, a Ginny algo alterada, pregunto.
- Ginny. ¿Qué pasa?¿Te encuentras Bien? - Dijo Harry claramente preocupado.
Bajando la cabeza avergonzada de su arranque Ginny, contesto con voz suave.
- Sí, perdona. Estoy algo nerviosa, solo... - Levantando la cabeza, y mirando al profesor Dumblendore visiblemente angustiada, pregunto. - Si no puedo ir con mis padres, ni al numero 12 de Grimauld. ¿Dónde voy a quedarme?
- Yo esperaba, que se quedara aquí. - Afirmo el profesor Dumblendore, con una gran sonrisa en la cara, causando estupor en los dos adolescentes.
