CAPITULO 5 - VEINTICUATRO AUTOS
Por otro lado la lluvia seguía en Londres y ahora era Audrey quien miraba por la venta aburrida con el puño de su mano usándolo como recargadera para su mentó y contando los autos que pasaban.

-veinticuatrooo, mmmm, no, veintitreees

-Audrey, me llego una lechuza - interrumpió Ginny bajando de las escaleras -

-¿Ah si? - dijo desinteresada audrey -

-que haces? - le pregunto ginny a su amiga que no despegaba la vista de la ventana

-cuento los autos que son manejados con chicos guapos van 23 autos.
-¿y los que van de copiloto? - dijo ginny un poco divertida.

-catorce - dijo audrey - ¿te escribió el nefasto de colin?

-mmm, no, - contesto ginny - llegó erol con una carta de mama, quiere que regrese a casa esta noche porque acaba de llegar mi hermano ron de la universidad.

-¿que? - dijo audrey brincando de la alegría - uuy, sabría que algo bueno vendría este día, se que no pudimos salir por culpa de la lluvia, pero me conformo con ir a la madriguera un fin de semana a conocer tu otro hermano, iré a hacer maletas.

pero ginny no parecía contenta, de hecho se había paralizado al terminar de leer la carta y detuvo a audrey, doblo la carta y le dijo:
-¡Estas loca! no iremos

-¿Porque? -dijo triste audrey - no me la pasare aburrida metida aquí, al menos allá podremos caminar por el campo y...

-Harry vino acompañando a Ron -dijo por ultimo ginny, sabia bien a que se enfrentaría cuando llegara a su casa, con algo de lo que nunca se había enfrentado, que era aun mas fuerte que años anteriores, resistirse a sus sentimientos y hacerse la fuerte enfrente de el, y era algo que no quería hacer.

-Perfecto - dijo audrey jalando de una mano a ginny obligándola a que se subiera por las escaleras para ir por su maleta - hasta que conoceré al mentado Harry Potter, ahh y viajaremos con los polvos flu que traes.