Capítulo 16.
Genzo se quedó callado unos instantes antes de responder, pero sabía que no debía de tardarse mucho o de lo contrario Hotaru comenzaría a sospechar...
- Pues es una buena amiga.- respondió Genzo, simplemente.- Conocida mía. Mis hermanos la conocieron aquí.
- Ahhh... .- Hotaru no creyó las palabras de Genzo.- ¿Ni Touya ni Kenji ni Hana la conocían antes de llegar a Cancún?
- No.- Genzo cruzó sus dedos.- Solo yo la conocía desde antes...
- Ah, bueno... Sé que no es de mi incumbencia pero... ¿Alguien de ustedes está interesado en ella de otra manera?
- Eh... ¿A qué te refieres?.- Genzo trató de fingir demencia.
- No te hagas, si bien que me entiendes. Te pregunto que si alguien de ustedes está tratando de conquistarla...
- Pues Touya no, obviamente.- Genzo se sorprendió de lo veraz que sonó su respuesta.- Me parece que Kenji sí está interesado y espero que Hana de plano no lo esté...
- ¿Y tú?.- preguntó Hotaru, a quemarropa.
- Te mentiría si te dijera que no.- por primera vez, Genzo fue sincero.- Estoy mucho más que interesado en esa chica pero con la actual situación...
- ¿La actual situación?
- Este... Tú sabes, todo el lío de la boda...
- Eso no tiene por qué afectarte a ti... A menos que no quieras decirle lo que sientes porque sabes que quizás ella te rechazaría...
- Yo no acepto un no por respuesta.- dijo Genzo, con firmeza.
- ¿Entonces por qué dudas tanto?.- inquirió Hotaru.
Genzo ya no respondió. Hotaru supo que estaba tocando un tema prohibido y prefirió no insistir.
- Entonces, ¿Touya no tiene relación alguna con esa chica?.- volvió a preguntar Hotaru.
- No.- volvió a mentir Genzo.
- ¿Seguro?
"Las mujeres tienen radar", pensó Genzo, pesaroso. "Y además de eso, son muy tercas...".
- Sí, estoy seguro. ¿Por qué eres tan insistente en eso?
- Porque siento que todos ustedes están ocultándome algo y que ese algo tiene que ver con esa chica Lily.
"Me lleva... ¿Cómo le hacen las mujeres para ser tan intuitivas?", gritó una voz en el cerebro de Genzo.
- No tienes por qué preocuparte. Estate tranquila.- respondió Genzo.- Confía en mi.
- De acuerdo. Lo haré.- Hotaru sonrió a medias.- Gracias por tu sinceridad.
Genzo volvió a sentirse mal. Ahora le había mentido a su futura cuñada... Las cosas no podían ponerse peor...
Pero, obviamente, las cosas iban a ponerse peor o de lo contrario éste no sería un fic escrito por Lily de Wakabayashi...
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Alisse estaba buscando a Taro. Quería agradecerle por haberla defendido de la furia de Touya. Aunque, en realidad, deseaba verlo. Quería decirle que su deseo de venganza ya no era tan intenso como cuando llegó...
Le preguntó a todos los miembros de la Selección con los que se topó sobre el paradero del chico Misaki, pero nadie pudo darle razón. Alisse no tuvo más remedio que aguantarse e ir a buscarlo a la playa. La arena estaba muy caliente y se metía entre sus sandalias, pero ella tendría que aguantarse si deseaba encontrar a Taro.
Y efectivamente, el joven estaba en la playa, pero no se encontraba solo... Una chica de cabellos castaños claros y ojos verdes estaba con él, coqueteándole descaradamente. Alisse sintió que la rabia crecía en su interior.
- Hola, Taro.- dijo Alisse, interrumpiendo a los jóvenes.
- ¡Ah! Hola.- respondió Misaki, simplemente.- Ella es Hazel.
La chica de cabellos castaños claros miró de arriba abajo a Alisse, con cierto desdén.
- ¿Quién es ésta?.- preguntó.
- Ésta tiene su nombre.- replicó Alisse, con fiereza.- Me llamo Alisse.
- Ah... .- la chica se encogió de hombros.- Me da lo mismo.
- Te estoy buscando por todas partes.- le dijo Alisse a Taro.- Y ya veo en lo que andas metido...
- Pensé que estabas muy ocupada vengándote.- respondió Taro, secamente.- Así que decidí venir a divertirme un rato...
- Ahh, ya veo qué tipo de diversión andabas buscando...
- ¿Y te importa?
- No puedo creer que caigas tan bajo...
- ¿Yo caer tan bajo? ¿Quién es la que le echó orina de perro al hermano de Wakabayashi?
- ¡Se lo merecía!
Alisse y Taro discutían a gritos. Hazel los miraba con fastidio.
- Misaki, ya vamónos.- le dijo.- Ya me harté de estar aquí.
- ¡Tú no eres nadie para decirle lo que tiene que hacer!.- gritó Alisse.- ¡Y además, estoy hablando con él, maleducada!
- ¡Tú no eres nadie para hablarme de esa manera!.- rugió Hazel.
- ¡No le hables así!.- gritó Taro.
Hazel miró a Taro con sorpresa.
- ¡Bah! Como quieran, peléense entre ustedes. Yo no vine a Cancún para meterme entre peleas de enamorados.- refunfuñó Hazel, antes de darse la vuelta e irse.
- ¿Ya viste lo que hiciste?.- gritó Misaki, enojado.- Ahora mi compañera se ha ido.
- Pues qué bueno.- replicó Alisse.- Esa resbalosa no tiene nada que estar haciendo contigo...
De pronto, Misaki se dio cuenta de algo...
- Alisse, ¿estás celosa?.- inquirió.
- ¿Te has vuelto loco? ¿Por qué he de estar celosa? ¿De ti? ¿Y de ella?.- Alisse lo miró incrédula.
- Sí, sí estás celosa.- Taro sonrió.- Eso significa que tú también sientes algo por mí...
- ¡Deja de decir babosadas! ¡Hello con tu hello!
- ¿Hello con mi hello?.- Taro rió.- ¿Qué significa eso?
- Algo así como: "¿Qué onda con tu vida?". Es una frase de Lily. ¡Pero eso no importa ahora!
- No, tienes razón, eso no importa.- Taro tomó a Alisse por la cintura. Ésta intentó zafarse.
- Suéltame.- gritó.- No seas aprovechado.
- Vamos. Yo sé que sí quieres...
Taro tomó impulso y se dejó caer con la chica a la arena, justo cuando una ola rompía sobre la playa. Ambos rodaron al tiempo que el agua del mar los envolvía. Alisse quedó completamente llena de arena, cosa que en verdad odiaba... Ese Taro Misaki se las iba a pagar...
- ¡Maldito! ¡Sabes que odio estar cubierta de arena!.- comenzó a gritar ella, pero Taro la calló con un beso.
- Y yo odio que seas tan terca.- murmuró Misaki, cuando el beso concluyó.- Pero aun así te adoro...
Alisse iba a replicar, pero nuevamente Taro no la dejó. Volvió a besarla, al tiempo que las olas seguían rompiendo sobre ellos.
Era inevitable. A Alisse se le olvidó todo, hasta su desagrado por la playa...
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Genzo encontró a Lily en el bar de playa. La muchacha estaba muy pensativa, mirando hacia el mar, con un vaso que contenía un líquido oscuro entre las manos. Genzo deseó que eso no fuera excremento de foca marina o algo así. Con esas chicas ya no se sabía...
- Hola.- saludó, suavemente.- ¿Puedo sentarme contigo?
- Claro. Como le dije a Kenji: éste es un país libre... .- murmuró Lily, como respuesta.
- ¿Qué es lo que hay en el vaso?.- preguntó él, con curiosidad.
- Una bebida llamada Alfonso XIII. Es deliciosa pero un poco fuerte... No te preocupes, no me emborracharé...
- Ah, bueno, aunque yo no preguntaba por eso...
- ¿Ah, no? ¿Entonces por qué?
- Bueno, pues porque Alisse le arrojó a mi hermano orina de perro y pensé que quizás tú querrías aventarle excremento de foca o algo así...
- ¡Jajajaja!.- Lily se rió con muchas ganas.- ¿Alisse le arrojó orina de perro a tu hermano? ¿Cuándo fue eso?
- Hace un par de horas...
- ¿Cómo fue que encontró orina de perro? ¿Y cómo fue que me lo perdí?
- Sabe de dónde sacó la orina. Y el perro... Y si te lo perdiste fue porque tú aun estabas algo afectada... Y hablando de eso... ¿Cómo te sientes?
- ¿En verdad quieres saberlo?
- Si no fuera así no te estaría preguntando...
- La verdad, creo que tu hermano es un maldito infeliz desgraciado hijo del maíz.- contestó Lily, con rabia contenida.- Pienso que es un maldito mujeriego engreído que se merece que lo cuelguen y le corten el pen...
- ¿Qué cosa?
- ... samiento... No seas malpensado...
- ¡Ahhh! Bueno, no te culpo por pensar eso... .- Genzo soltó la carcajada.
- Y al verdad, también llegué a pensar que todos los demás Wakabayashi eran igual.- dijo Lily, cortando la risa de él.
- ¿Cómo dices?
- Bueno, cuando te conocí a ti no pensaba eso pero... Luego apareció Kenji. Se comportaba igual que Touya así que pensé que Alisse tenía razón, quizás eso de ser mujeriego era un mal de familia...
- Ya veo. ¿Y aún sigues pensando eso?.- habló Genzo, cabizbajo.
- Déjame continuar.- pidió la chica.- Luego Kenji me besó y llegué a creer que ustedes eran de cuidado...
A oír esto, Genzo sintió unos celos horribles en su interior.
- ¿Kenji te besó?.- preguntó Genzo, algo iracundo.- ¿Cuándo fue eso?
- Pues la noche en que me invitó a cenar.- respondió Lily, bajando la mirada.
- ¿Y por qué no me lo habías dicho? ¿Y por qué él no me dijo nada?
- Pues porque el hecho quedó oculto por mi intento de violación. A mí se me olvidó el suceso, de hecho... No sé por qué Kenji no te lo habrá comentado, quizás no le guste hacer partícipe a sus hermanos de sus conquistas... De todas maneras, para mí no significó nada...
- Quizás... .- Genzo prefirió no seguir ahondando en el tema.
- Como te decía... Entonces yo pensaba eso de ustedes.- Lily continuó.- Que todos eran muy mujeriegos. Pero después…
- ¿Después?
- Tú me rescataste de la playa. Me has apoyado con todo este lío de tu hermano. Y todo sin pedirme nada a cambio. Cualquier otro hombre me estaría cobrando don cuerpomático...
- ¿Con cuerpomático?
- Jajaja, tú sabes... Alguien más me habría pedido que me acostara con él...
- Ah, ya veo... Pero yo no quiero eso... Yo solo... .- comenzó a decir Genzo.
- Lo sé, lo sé.- lo interrumpió Lily.- Sé que tú no eres así. Tú no eres como Touya. Cosa de la cual me alegro...
Lily miraba a Genzo con admiración. Él se sintió embrujado por sus ojos negros.
- Eres un hombre responsable, serio, maduro, honesto.- continuó diciendo ella.- E increíblemente te hiciste a un lado para que tu hermano fuera feliz... Eso no lo hace cualquiera... Y además de eso, llegaste a mi vida justo cuando más te necesitaba. Eres mi ángel... Bien valió la pena haber venido a Cancún solo por conocerte...
Genzo se sorprendió muchísimo. No se esperaba este tipo de confesión. Quizás sí podía tener una oportunidad con Lily.
- Lily.- Genzo tomó la oportunidad al vuelo y tomó a la chica de la mano.- Quiero confesarte algo...
- ¿Qué cosa?.- ella se puso algo nerviosa.
- Solo quiero decirte que desde que te conocí no soy el mismo. Llevamos muy poco tiempo tratándonos pero aun así yo estoy seguro de que te...
- Genzo.- habló una voz masculina, interrumpiendo la escena.
Touya Wakabayashi estaba parado a pocos metros de ellos.
- Lamento interrumpir, pero quiero pedirte un favor: déjame hablar unos momentos a solas con Lily.- pidió.
Los dos jóvenes miraron al hombre con sorpresa y desilusión. Touya se dio cuenta de esto y sonrió para sus adentros. Había llegado justo a tiempo, había evitado que su hermano le confesara a la mexicana sus sentimientos...
Touya había decidido hacer todo lo que estaba a su alcance para evitar que Genzo y Lily terminaran juntos. No se puso a pensar en que estaba destruyendo cualquier oportunidad que Genzo pudiera tener para ser feliz. Eso no le importaba. Porque si Lily no era de Touya, no sería de nadie... Genzo tendría que buscarse a otra, porque Lily jamás sería suya... De eso se encargaría Touya...