Capítulo 19.
Lily y Genzo eran felices como lombrices nadando con los delfines. Uno de ellos se había prendido de la chica y no dejaba de hacer monerías para llamar su atención. Dejó que Lily se le colgara para llevarla a nadar y le dio un par de besitos muy coquetos, haciendo que la chica se riera con muchas ganas. Lily se veía muy feliz y eso satisfacía enormemente a Genzo. Había pensado que la presencia de Touya y de Hotaru entristecería a la muchacha pero al parecer eso no había impedido que Lily disfrutara de las maravillas de X-caret.
- ¡Mil gracias!.- expresó Lily, muy feliz, cuando salieron de la piscina en donde estaban los delfines.- Esto nunca lo olvidaré. Algún día te pagaré con creces lo que has hecho por mí...
- No tienes que hacerlo. Me basta con verte feliz.- respondió Genzo.- ¿Qué quieres hacer ahora?
- Uhm, me muero de hambre, vamos a comer.
- Muy bien.
Lily y Genzo se dirigieron al primer restaurante que vieron, el cual estaba localizado a un lado de una de las caletas en donde se podía snorkelear. La vista era hermosa y la brisa del mar les acariciaba el rostro. En el mismo sitio se encontraron con Alisse y Misaki, quienes se veían algo más alegres que lo usual...
- ¡Hola!.- gritó Taro, muy contento.- ¿Qué es lo que quiere el Seguro Social?
- ¡Saluuuuuuuud!.- respondió Alisse, muy feliz también.
Lily y Genzo los miraron con cara de: "hello con tu hello...".
- ¿Qué rayos les pasa?.- preguntó Lily, aguantándose la carcajada.
- ¡Nadaaaaaa! ¡Nomás somos felices como lombrices!.- gritó Alisse. Lily alcanzó a darse cuenta de lo que pasaba.
- Oye... ¿Andas jarra?.- preguntó Lily, en español.
- ¿Qué si ando qué?.- Alisse se extrañó.
- Jarra. Happy. Beoda. Ebria. Como cola de perro. Hasta las chanclas.- contestó Lily, haciendo que Genzo sonriera.
- ¡Ahhhhhh! Nope, nomás estamos un poquitín tomados... .- contestó Alisse, riéndose como histérica. Genzo no aguantó más y se rió también.- Es que aquí el vino tinto es delicioso...
- ¡Vámonos, Alisse, mi amoooooooor! Hay que ir a ver a las tortugas cuando les dan de comer... .- gritó Misaki, de pronto.
- ¡Síiiiiii! A ver si conseguimos convencer a los guardianes del parque de que las alimenten con Touya a la parrilla...
Alisse y Taro salieron del restaurante. Afortunadamente, solo Lily y Genzo se habían dado cuenta de su estado...
- ¿Crees que sea prudente el dejarlos ir así?.- preguntó Lily, algo preocupada.
- No creo que les pase nada, no están tan ebrios... .- contestó Genzo, encogiéndose de hombros.- Por cierto que la respuesta que dio Alisse fue la misma que tú me diste la otra noche que andabas ebria...
- ¿Cuál respuesta?
- La de que "nomás están un poquitín tomados".
- Ahhh.- Lily se puso rojísima y le dieron muchas ganas de arrojarse a la caleta o de ofrecerse ella misma como alimento de tortuga... .- ¿Te contesté eso?
- Sí. Esa fue la respuesta que me diste cuando te pregunté que si estabas ebria...
- ¡Válgame! ¡Pero qué vergüenza!
- No te lo tomes tan a pecho. Nomás yo lo escuché y ya no lo recordaba...
Genzo le guiñó un ojo a Lily, haciendo que ella se pusiera más colorada todavía.
Por fin les llevaron lo que habían ordenado. La comida era exquisita y la naranjada era un elíxir divino. "Comida paradisíaca", pensó Lily, "Nunca he comido nada más delicioso en mi vida...".
- ¿Qué le ponen a la comida aquí?.- preguntó Genzo.- Creo que nunca había probado algo tan rico.
- No tengo idea. Hemos de estar en el paraíso.- respondió Lily.
Y ni hablar del postre. Dejó a ambos muchachos flotando en un limbo de dicha (y nomás con un postre...). Aunque al final, la cuenta era tan elevada que Lily quería vomitar todo lo que había comido para no tener que pagar tanto...
- No manches. La comida aquí es carísima. Está bien que es deliciosa pero a esos precios... ¿Qué es lo que tiene? ¿La bendición Papal? ¿Te volverás más joven o más guapo si te la comes?.- se quejó Lily, en voz baja.
- Quizás comimos animales en peligro de extinción.- bromeó Genzo.- No te preocupes por la cuenta, yo pago.
- No inventes. Ya es demasiado lo que te debo: el boleto de entrada, el nado con delfines, la comida...
- Algún día te lo he de cobrar a mi manera.- Genzo miró a Lily de una manera diferente, como con deseo. Lily volvió a ponerse muy roja, pero deseó que ojalá y en verdad él quisiera cobrárselas todas después...
Lily y Genzo ya no se encontraron a nadie después de salir del restaurante, cosa que no les pareció extraña dado que el sitio era muy grande. Decidieron realizar el tour selvático, para "bajar la comida". En un tramo del recorrido se toparon con Ishizaki, Yukari, Urabe, el cuarteto Shutetsu, Sanae y Tsubasa. Kenji y Kumi también iban con ellos, pero iban tan acaramelados que no se dieron de cuenta de su presencia y continuaron con su camino.
- ¡Vaya! Hasta que los vemos.- comentó Ishizaki, sonriendo con picardía.- Ya pensábamos que se habían ido a lo oscurito...
- Cállate, Ishizaki.- gruñó Genzo.- No molestes.
- Además, todavía no se pone oscuro.- observó Urabe, riéndose a carcajadas. Lily quería que se la tragara la tierra.
- Creo que a ti no te conozco.- intervino Yukari, para evitar más comentarios incómodos.- Yo soy Yukari Nishimoto. Tú eres Lily Del Valle, ¿cierto?
- ¿Me conoces?.- preguntó Lily, sorprendida.
- Claro. Eres una de mis escritoras favoritas. Algún día me tienes que autografiar un libro tuyo.- Yukari sonrió.
- Muchas gracias.- Lily le devolvió la sonrisa.- ¿Cuál es tu favorito? Perdón, creo que esa fue una pregunta muy engreída...
- Para nada. Todos me gustan mucho, pero en definitiva "Róbate mi corazón" se lleva las palmas.
- ¿Eso crees?
- Claro. Me encantó el final, fue un giro inesperado... ¿En qué te inspiras para escribir?
- Ah. Pues muchas veces uso experiencias propias y en otras simplemente me basta una idea para pensar en una historia...
Mientras tanto, Ishizaki y Urabe seguían burlándose de Wakabayashi (Genzo). Éste tenía deseos de agarrar una liana y colgarlos de un árbol... Tsubasa sonrió al verlos a todos.
- En el mar, la vida es más sabrosa... .- comenzó a cantar Tsubasa, haciendo que todos voltearan a verlo.
- ¿Qué cantas?.- preguntó Kisugi, extrañado.
- Una canción que escuché por ahí. Creo que es verdad lo que dice... .- respondió Tsubasa, sonriendo.
- ¡Ésa es mi canción!.- gritó Ishizaki.
- Jajaja, para nada. Tu canción es la que dice: Las manos hacia abajo, las manos hacia arriba, y como los gorilas, todos caminamos... .- cantó Urabe.
- ¡El baile del gorila!.- Lily soltó la carcajada.
- ¿Me estás diciendo que soy un gorila?.- increpó Ishizaki a Urabe.
- ¿Acaso estoy mintiendo?
- ¡Oye!
Ishizaki intentó golpear a Urabe, pero éste salió huyendo. Ishizaki lo persiguió como el loco gorila que era. El cuarteto Shutetsu los siguió, armando escándalo. Yukari salió detrás de ellos, moviendo la cabeza de un lado a otro. Los cuatro restantes los miraron divertidos.
- Se nota que se llevan muy bien.- habló Lily, con algo de envidia.- Se nota que se tienen mucho aprecio.
- Por supuesto.- Tsubasa también sonrió.
- ¿Y qué tal les ha parecido X-caret?
- Hermoso.- respondió Sanae.- Aunque enorme. Hemos visitado muchos lugares y estoy segura de que no llevamos ni la mitad...
- Lo que me recuerda que debemos seguir adelante.- intervino Tsubasa, haciéndole una señal muy obvia a Sanae.- Vámonos, querida.
- Nos veremos después.- se despidió Sanae.
- Hasta pronto.- contestaron Lily y Genzo.
- Se ven muy bien juntos.- comentó Lily, al verlos alejarse.- Se nota que son un matrimonio feliz.
- Así es, aunque tuvieron que pasar años para que Tsubasa se diera cuenta de lo que sentía por Anego... .- respondió Genzo, pensativo.
- ¿En serio?
- Sí. Él es muy despistado...
- Ahhh...
Los dos se quedaron en silencio por varios minutos. La tranquilidad invadió el trozo de selva en el cual se encontraban. La luz del sol se colaba a través de las ramas de los árboles. Se escuchaba el susurro suave de los insectos... Lily sintió en su interior mucha paz...
- Lily, quiero decirte algo.- dijo Genzo de pronto, acercándose a la muchacha.
- ¿Qué cosa?
- Debí haber hecho esto hace mucho tiempo.- Genzo tomó a la chica por la cintura y la atrajo hacia él. Lily respingó pero no se separó de él.- Debí haberte dicho desde hace mucho que por más que lo intento no puedo dejar de pensar en ti...
- ¿Qué cosa?.- el corazón de Lily comenzó a latir a mil por hora.
- Que no dejo de pensar en ti. Desde hace mucho que he deseado decírtelo pero el saber que aun sientes algo por mi hermano me detenía porque no deseaba confundirte más. Pero ahora debo decirte que yo te a...
De pronto, una guacamaya pasó volando sobre ellos, lanzando un chillido tan fuerte que los espantó a ambos e hizo que se separaran. Genzo soltó una maldición, pues al separarse de Lily se golpeó accidentalmente contra un árbol, rasguñándose levemente un hombro.
- ¿Estás bien?.- inquirió Lily.
- Sí, no es nada.- respondió él, revisándose el hombro.- Vi un arroyo por aquí cerca, voy a echarme un poco de agua... Espérame aquí.
- Como gustes.
Lily se quedó admirando la belleza del lugar. De pronto se dio cuenta de que hacia ella se dirigía Touya, aparentemente muy molesto.
- ¿Qué crees que haces?.- inquirió el hombre, tomando a Lily del brazo con mucha fuerza, lastimándola.
- ¡Suéltame, me lastimas!.- gritó Lily.
- ¡No voy a dejar que te burles así de mí!
- ¿Qué yo me estoy burlando de ti? ¡Cómo te atreves!
- ¿Cómo te atreves tú a enamorar a mi hermano?
- ¿Qué cosa?
- ¡Te he visto con él! ¡No te atrevas a negármelo! ¡Sé que él te ha hablado de amor!
- ¡Por supuesto que no! ¡Y aunque así fuera eso no te importa!
- ¡Tú eres mía!.- gritó Touya, lastimando aún más a Lily. Ella gritó.
- ¡Suéltala!.- gritó Genzo, jalando a Touya por la camisa, haciendo que éste soltara a la chica.- Si la lastimas otra vez te juro que esta vez no responderé.
- No te vas a salir con la tuya. Bien sabes que esta chica es mía.- Touya miró a su hermano con rabia.
- Ella no te pertenece. No es ningún objeto con el cual puedas jugar cuando se te antoje.- Genzo encaró a su hermano.- Desde hace mucho tiempo que debí de ponerle un alto a tus abusos...
- Quiero ver que lo intentes.
Genzo apretó los puños. Touya se puso a la defensiva. Parecía que en cualquier momento se liarían a golpes. Lily los miraba aterrada... Genzo al fin rompió la barrera que lo detenía y le dio un izquierdazo a su hermano en la mandíbula. Éste se levantó y atacó a Genzo, pero él fácilmente esquivó el golpe. Iba a Genzo a devolver el ataque cuando un grito lo detuvo.
- ¡Genzo! ¿Qué estás haciendo?.- era Hotaru.
Genzo detuvo su brazo. Touya se irguió lo más derecho que pudo. Lily miró a la japonesa con cara de espanto.
- Ya nos cayó el chahuistle.- murmuró Lily, en español.
- ¿Por qué estás golpeando a Touya? ¿Qué está pasando aquí?.- volvió a gritar Hotaru.- ¿Por qué se están peleando?
Nadie pudo responder. Hotaru miró a ambos hombres, quienes aún estaban fúricos y después volteó a ver a Lily, quien se sobaba el brazo, muy adolorida. Hotaru ella una chica ingenua, pero no era tonta...
- ¿Se están pelando por ella?.- preguntó, muy seria.
- Por supuesto que no.- respondió Touya, rápidamente.- Lo que pasa es que Lily se asustó por una serpiente y se me colgó del cuello, Genzo nos vio y se molestó y vino y me golpeó así sin más.
- ¡Eso no es verdad!.- gritó Lily, iracunda.- ¡Maldito mentiroso de mierda!
- Más vale que te retractes de esa mentira.- Genzo habló tan fríamente que hasta Hotaru se sintió asustada.- Bien sabes que eso no fue lo que pasó. Dile a Hotaru la verdad.
- No sé de qué me hablas.- Touya miró a su hermano, mirándolo con cara de: "No me estarás hablando en serio...".
- Bien que lo sabes. Eso no fue lo que pasó. Dile la verdad a Hotaru.
- Para mí eso fue lo que pasó y punto. No me harán decir lo contrario.
Touya se alejó por donde vino. Hotaru miró primero a Genzo, luego a Lily y después a su prometido. Y se percató de que era éste último el que mentía...
Notas:
- En el mar, la vida es más sabrosa, es una canción súper conocida, pero... ¿Me creerán que no sé quién la canta?
- El baile del gorila es interpretado por Melody.
- En verdad, en verdad. La comida en X-caret es deliciosísima. Lo más sabroso que he probado en mi vida...
