Capítulo 26.

El juez de paz miraba a Hotaru fijamente, al igual que el resto de la concurrencia. Genzo, Lily, Taro y Alisse llegaron a la entrada del centro ceremonial; los cuatro deseaban gritar e impedir esa unión, pero la expectación los había dejado mudos. Todos esperaban a que la novia diera su respuesta...

- ¿Hotaru?.- volvió a insistir el juez de paz.- ¿Aceptas o no a Touya como tu esposo?

- Yo... .- Hotaru tartamudeó.

- ¿Amor?.- habló Touya, en voz muy baja.- ¿Qué ocurre?

- Es que yo... Yo... .- la chica miró a su prometido con cierta angustia.- Lo siento, pero yo... No puedo...

- ¿Se van a casar o no?.- preguntó el juez, mirando a uno y a otro alternativamente.

- No.- respondió Hotaru, fuerte y claro.- No quiero casarme.

Todos los presentes miraron a la novia con ojos como platos.

- Lo siento, Touya.- dijo Hotaru, en voz baja.- Pero no quiero casarme contigo.

La chica dio la vuelta y comenzó a caminar por el pasillo. Touya la siguió y la tomó por el brazo.

- Espera.- le dijo.- No puedes dejarme así. ¿Por qué ya no quieres casarte conmigo? Tú me amas y yo te amo. Nos amamos. Queremos estar juntos. Vamos preciosa, cásate conmigo, es nuestro sueño...

- Es que no sé... .- Hotaru luchaba por zafarse de Touya.

- Ya basta, Touya.- intervino Genzo.- Todo acabó y bien lo sabes.

- Tú cállate.- Touya encaró a su hermano.- Mi amor, no le creas nada de lo que te va a decir, está celoso porque vamos a casarnos... La verdad es que nunca dejó de amarte...

- ¡Deja ya de mentir!.- Lily gritó y dio un paso al frente.- ¿Por qué no le dices la verdad? ¿Por qué no le dices que en realidad lo único que has querido es arruinar la felicidad de tu hermano?

- ¡No le hagas caso a esta ardida!.- gritó Touya.- Vino hasta Cancún a pedirme que volviera con ella pero como no le hice caso...

- Ahora sí te voy a dejar sin dientes... .- Alisse gruñó e intentó atacar a Touya, pero Hotaru la detuvo.

- Esperen, por favor.- dijo.- Quiero escuchar lo que Lily Del Valle me tiene que decir. Algo me dice que ella tiene la respuesta a todas mis dudas...

- Seré sincera.- Lily se puso muy seria.- Hace unos cuantos meses conocí y me enamoré de Touya, aunque yo no lo conocí con ese nombre sino con el de Hitori Wakamatsu.

Hotaru respingó. Wakamatsu no solo era el contador de la familia Wakabayashi sino también el mejor amigo de Touya.

- Yo no tenía ni idea de que estaba comprometido o de que su nombre real es en realidad Touya Wakabayashi.- continuó Lily.- Él simplemente un buen día se marchó sin decirme nada y si no hubiera sido por Alisse, aquí presente.- la chica puso su mano en el hombro de su amiga.- No me habría dado cuenta de nada. Ella fue quien me dijo que Touya no solo había estado jugando conmigo sino también con ella.

- Exactamente.- afirmó Alisse.- Ya muy tarde descubrí que Touya se había marchado para casarse. Por casualidad o quizás por obra del destino conocí a Lily y nos dimos cuenta de que ambas habíamos sido víctimas de un engaño. No mentiremos, la verdad era que vinimos a Cancún a detener esta boda, por puros deseos de vengarnos, pero ahora nuestros motivos son diferentes...

- Ya veo... .- musitó Hotaru.

- ¿Por qué les vas a creer a estas dos? ¡Ni siquiera las conoces!.- gritó Touya.

- Cállate, por favor.- pidió Hotaru, sorprendiendo a todos. Ésa no era su manera habitual de comportarse.

- Hotaru, ellas no tienen por qué mentirte.- intervino Taro, en esos momentos.- Yo he estado con ellas casi desde el momento en que llegaron a Cancún y puedo asegurarte que el único que se ha comportado mal desde el principio es Touya. Soy testigo de que intentó lastimar a Alisse y quiso también propasarse con Lily.

- ¿Intentaste lastimar a Alisse?.- Lily miró con ojos fúricos a Touya.- ¿Cómo te atreviste?

- Quitaré de mi camino a cualquiera que intente destruir mis planes.- gruñó Touya, amenazadoramente. Genzo se interpuso entre él y Lily.

- Genzo.- habló Hotaru.- ¿Tú sabías esto?

El joven miró a su amiga y ex novia por varios instantes antes de responder. Sabía que el momento había llegado y que si él guardaba silencio entonces ella quizás no creería nada de lo que le habían confesado.

- Sí. Yo lo sabía todo.- respondió, mirando a la chica muy seriamente.

- ¿Desde un principio?

- Desde un principio.

- ¿Y por qué no me dijiste nada? ¿Por qué me mentiste cuando te pregunté que qué relación tenían ustedes con Lily Del Valle?

- Porque no quería lastimarte. Y porque tampoco quería traicionar a mi hermano. Cobardemente me callé poniendo como excusa el hecho de que no quererlos lastimar ni a ti ni a él...

- ¿Y por qué cambiaste ahora tu decisión.- se quejó Hotaru, amargamente.

- Porque no puedo permitir que Touya se salga con la suya y te lastime. Eres mi amiga y no deseo que arruines tu vida... .- Genzo agachó la cabeza. Lily le tomó la mano y se la apretó con fuerza.- Así que ahora voy a decírtelo todo. Bueno, solo diré lo que falta, ya que Lily y Alisse te han contado el comienzo. Touya intentó hacer que Lily regresara con él, acosándola a cada momento. Incluso ayer la invitó a cenar...

Todos los presentes ahogaron un: ¡Ohhh! La verdad es que ninguno se perdía detalle. Incluso el juez de paz estaba de lo más interesado...

- ¿Me engañaste una noche antes de nuestra boda?.- le recriminó Hotaru a Touya.- ¿Cómo pudiste? ¿Y estuviste persiguiéndola? ¿En mi cara?

- ¡Eso no es verdad! ¡No creas nada de lo que te dice!.- contestó Touya, enojadísimo.

- ¿Recuerdas cuando golpeé a Touya en X-caret?.- continuó Genzo.- Ésa vez él intentó lastimar a Lily y llevársela con él a la fuerza y por eso yo lo golpeé, para que la dejara en paz. Recuerdo la expresión de tu rostro en esos momentos, estoy casi seguro de que creíste nuestra versión y no la de él...

- ¡NO LO ESCUCHES!.- gritaba Touya.

- ¿Y en dónde crees que estaba Touya hace apenas hora y media? ¡Estaba encerrando a Lily y a Alisse en un lugar apartado para que no vinieran a contarte lo ocurrido!.- Genzo gritó aun más fuerte.

- Maldito traidor... .- murmuró Touya, apretando los puños. Quiso lanzarse contra su hermano, pero Ken y Kenji lo detuvieron por detrás.

- Ya basta.- gritó Hotaru, tratando de controlar sus emociones.- No puedo creer todo lo que estoy escuchando... Es increíble... Ahora estoy plenamente segura de que no quiero casarme contigo, Touya Wakabayashi...

Hotaru se arrancó de su cabello negro su velo de novia, se quitó del dedo el anillo de compromiso y se lo arrojó a Touya en la cara, en donde le hizo una cortada muy cerca del ojo derecho; el joven cayó de rodillas, gimiendo de dolor. Acto seguido, la chica se marchó con paso firme y decidido, dejando al novio plantado, arrodillado y adolorido a mitad del pasillo. Los padres de Hotaru se marcharon detrás de su hija, aunque antes el papá agarró a Touya por el saco y lo arrojó contra la mesa en donde se encontraba el pastel. Touya se estampó contra el delicioso pastel de tres pisos, quedando su cara y cabeza completamente embarrados de betún. Después, el padre de Hotaru le dio una patada en el trasero al joven y se marchó en compañía de su esposa.

Touya, humillado y derrotado, se levantó como pudo y salió a paso presuroso del lugar. Nadie hizo el intento de detenerlo.

- Por fin, todo acabó.- murmuró Lily, algo apesadumbrada.- Me siento muy mal por Hotaru...

- Ella estará bien.- Genzo le sonrió débilmente.- Es una chica fuerte y encontrará a alguien que verdaderamente la merezca. Deberías de sentirte mal en el caso de que ella hubiera llegado a casarse con Touya...

- ¿Y cómo te sientes al respecto?.- preguntó Lily, en voz baja.- ¿No te sientes mal por haber traicionado a tu hermano?

- Sinceramente, no.- respondió Genzo.- Me habría sentido mucho peor si me hubiera callado todo lo que sabía y hubiera dejado que Touya se saliera con la suya...

Los presentes murmuraban y se miraban entre sí. Ya no habría boda. Ahora, ¿qué harían?

- Lamentamos lo sucedido.- anunció Genzo.- Sé que vinieron aquí esperando una boda pero...

- Pero la tendrán, aunque no sea la que esperaban.- interrumpió Ken, de pronto.

- ¿De qué hablas, Wakashimazu?.- Genzo lo miró con extrañeza.

- De que alguien se va a casar el día de hoy, en este lugar.- respondió Ken. Acto seguido, se arrodilló delante de Hana.- Mi amor, sé que esto quizás te suene precipitado y loco pero... Te amo. Quiero pasar contigo el resto de mi vida. ¿Quieres casarte conmigo, aquí y ahora?

Hana se quedó sin aliento. Lily y Alisse soltaron unos grititos de emoción. Genzo no creía lo que oía...

- ¡Sí! ¡Quiero casarme contigo en este instante!.- gritó Hana, feliz. Ken se levantó y abrazó a la chica.

- ¡Pero se volvieron locos!.- gritó Genzo.- ¿Cómo es que van a casarse en estos momentos? ¡Apenas y se conocen!

- No empieces, Genzo.- intervino la señora Wakabayashi.- Deja que tu hermana sea feliz...

- ¡Pero, madre! ¡No me digas que estás de acuerdo!

- Claro que lo estoy.

- ¡Kyoko!.- gritó el señor Wakabayashi.- ¿Te has vuelto loca, mujer? ¡Nuestra hija apenas es...!

- Una mujer.- interrumpió la señora Wakabayashi.- Yo me casé a la misma edad que tenía ella...

- ¡Pero tu caso es diferente! Yo ya había heredado, en cambio ese joven... .- el señor Wakabayashi volteó a ver a Ken con cierto recelo.- A ver, ¿cómo va a mantener a mi pequeña Hana?

- Ese joven es futbolista profesional, al igual que tu hijo, y si él puede mantenerse solo perfectamente bien y sin usar nuestro dinero entonces ese muchacho también podrá mantener a nuestra Hana.- la señora Wakabayashi puso punto final a la discusión.

- ¿Entonces puedo contar con su bendición?.- preguntó Hana, mirando a su familia esperanzada.

- Por supuesto que sí, querida.- asintió la señora Wakabayashi.

- Claro que sí, mi amor.- dijo el señor Wakabayashi, más a fuerza que de ganas.

- Tú cásate y sé feliz.- Kenji se encogió de hombros.

- ¿Y tú, Gen-chan? ¿Estás de acuerdo?.- Hana miró a su hermano con cariño.

Genzo no estaba muy de acuerdo que digamos, pero Lily le hizo una señal sutil con la cabeza y después le sonrió. Él no pudo negarse a esa sonrisa...

- Sí.- aceptó, al fin.- Estoy de acuerdo...

Así que, en un dos por tres, todo estuvo listo nuevamente para una nueva boda. El pastel arruinado se reemplazó por otro que tenían en las cocinas y Hana consiguió en cuestión de minutos un lindo vestido blanco que combinó con unas sandalias del mismo color. Alisse y Lily consiguieron arreglarle el velo que Hotaru había arrojado al suelo. Hana pronto estuvo lista para desfilar por el pasillo del brazo de su padre. Detrás de ellos, Kenji volvió a desfilar, esta vez con Kumi, y Genzo hizo lo propio con Lily. Hyuga se convirtió en el nuevo padrino y desfiló del brazo de una Maki Akamine que apenas y sabía qué era lo que estaba ocurriendo. Total, la cosa era que al final sí había una pareja de enamorados que deseaban jurarse amor eterno...

- Ken, ¿aceptas a Hana por esposa?.- preguntó el juez de paz, muy contento.

- Sí, la acepto.- respondió Ken, al tiempo que ponía la sortija de bodas que originalmente era de Hotaru en el dedo anular izquierdo de Hana.

Taro miró a Alisse. Quizás en un futuro a ellos dos les tocaría protagonizar una historia similar... La sonrisa de Alisse le dijo a Taro que así sería...

- Hana, ¿aceptas a Ken como tu esposo?.- volvió a preguntar el juez de paz.

- Sí, lo acepto.- respondió Hana, al tiempo que colocaba en el dedo de Ken la sortija de boda que debió de haber usado Touya.

Genzo y Lily se miraron. Él tomó las manos de ella entre las suyas y se las acarició. Ella sonrió y se recargó en su hombro...

- ¿Alguien se opone a esta unión? Que hable ahora o calle para siempre...

Se hizo un silencio total... Nadie quería interrumpir esa boda...

- Muy bien.- el juez miró a los novios.- Ahora los declaro marido y mujer... Puedes besar a la novia...

Ken y Hana se besaron, en medio de una lluvia de ovaciones. Genzo no se quedó atrás y besó a Lily, mientras que Taro seguía el ejemplo y besaba a Alisse.

Durante la fiesta, nadie volvió a mencionar al mentado Touya. Los invitados rieron y bailaron como si en realidad hubieran estado invitados a la boda de Ken y Hana desde un principio. A mitad de la celebración, la novia arrojó el ramo por los aires, como es la costumbre, el cual por cierto fue a caer a las manos de Lily... Genzo tuvo que soportar las burlas de todos sus compañeros... Alisse y Taro bailaron una cumbia muy movida, que hizo sorprender a más de uno ya que no se imaginaban que el dulce Misaki se supiera mover de una manera tan ardiente...

Ya pasada de la medianoche, cuando la mayoría de las parejas bailaba canciones suaves y románticas, Genzo llevó a Lily a un promontorio que se elevaba sobre el mar, un tanto apartado del sitio en donde se encontraban los demás. La tomó por la cintura y lentamente comenzó a bailar con ella, haciendo equilibrio sobre las rocas.

- Nos vamos a caer.- comentó Lily, un tanto nerviosa, un tanto divertida.

- No nos caeremos.- la contradijo Genzo, besándola suavemente.

- ¿Por qué estás tan seguro?

- Porque desde que estás conmigo tengo alas...

- ¡Qué cursi eres!.- Lily se sintió muy conmovida.

- Quizás. Es una parte de mí que no conocía pero que estaré encantado de conocer... Por cierto, quiero que me digas algo...

- ¿Qué cosa?

- ¿Aun estás arrepentida de haber venido a Cancún?

- Para nada.- Lily besó los labios de su amado.- Ahora, más que nunca, le doy gracias a mi buena suerte por haber conocido a Touya... Porque si eso no hubiera ocurrido, jamás me habría topado con el hombre tan maravilloso e increíble que tengo ahora frente a mí...

- Ni te habrían dado deseos de vengarte...

- ¡Malvado! ¿Por qué me reclamas eso ahora?

- Jajaja. Yo no estoy reclamándote nada... .- Genzo abrazó a Lily y le habló con suavidad al oído.- Yo no he dicho que la venganza no sea buena... Ni dulce...

- ¿Y lo es?

- ¿Tú qué crees?

Lily no respondió, solo sonrió. Pero no hacían falta las palabras. Genzo conocía la respuesta...

Fin.

Notas:

- ¡MOMENTO! ¡Esto no puede acabar aquí! ¡Quedan muchas cosas por aclarar!