Bueno, yo otra vez aquí, como cada fin de semana. Puf. Que semanita más dura he tenido, no os la imagináis. Hoy he dormido hasta las 12 de la mañana de tanto sueño que tenía, ya sé, eso no interesa a nadie, así que me voy a olvidar de mi vida, que parece un chiste por cierto, y pasaremos a los rewiews.

kaoru himura.- A ti te respondí personalmente el rewiew, no sé si te ha llegado ¿lo ha hecho? Me dejas un rewiew y me lo dices porfa. Y por supuesto me alegro que te gustara el capi

LaDy KaHoRu.- Bueno, lo de las clases, te entiendo, yo estoy igual, jeje, y sé que es una pregunta indiscreta pero ¿ por qué andas deprimida? La vida es muy corta para deprimirse, y yo, te lo digo por experiencia, cuando tengo depres, que por suerte no son muy largas me pongo a escribir y meto todos los sentimientos en la escritura (normalmente ya lo hago pero entonces más aun) y parece que con cada palabra que escribo mi depre se va haciendo menos pesada, quiza te ayude verlo de esta manera. ¡Mejórate! P.D.- No me importa que me hayas agregado a "My favorites histories list" me alegra mucho, jiji.

Y por supuesto muchísimas gracias a: naoko L-k, giuliana, Silence-messiah y holly rainard ( que junto a mi, somos ¡Mamas! jeje, me emocioné cuando lo dijiste Holly, xD)

Ahora si os dejo, que desfrutéis, nos vemos al final.


- ¿Dónde estamos? – preguntó Kaoru, otra vez aquel sueño, cuando se despertó se encontró a unos preciosos, pero preocupados, ojos violetas

- Pues, al parecer Yumi utilizó parte del poder del viento y nos "traslad"

- ¿Cómo que nos "traslad"?

- Pues... se dice que si llegas a dominar el poder de viento por completo puedes trasladar a varias personas a sitios lejanos y a nosotros nos ha tocado el Reino del Fuego

- Pero está loca porque aquí podemos ir a...

- No estaremos solos ¿recuerdas? Tomoe nos tiene la vista puesta encima y antes de nada... es tu vida

- ¿Mi vida? Mi vida vale lo mismo que la tuya

- Para ellos no – respondió Kenshin tajante

- ¿Kenshin?

- Dime

- ¿Tu... - era una pregunta indiscreta pero tenia que preguntársela, no podia seguir con las dudas - ¿Tu alguna vez... quiero decir... tus ojos cambian de color?

- ¿Mis ojos?

- Da igual, no importa. Olvídalo – sonrió, una sonrisa que ha Kenshin le llegó al alma - ¿Y ahora qué?

-------------------------------------------

- ¡Sanosuke Sagara! ¡¿Me puedes decir dónde estamos?! – gritaba Megumi

- Cállate Kitsune, estoy intentando averiguarlo, con tus gritos de vieja histérica no me dejas pensar

- ¡Vieja... vieja histérica!!!! ¡No soy tan vieja! ¡Me oyes! ¡Solo soy un año mayor que tu y...

- Y no tienes ni un pobre pretendiente – Sanosuke se giró hacia ella –

- Permíteme decirte que soy yo los que los hecho

- Es verdad, perdona, tu los espantas con tu mal humor –sonrió, ahora Megumi estaba que echaba humo por las orejas

- ¡Eres un idiota! – le gritó.

- Ya está – dijo de repente el chica

- ¿El qué? – Megumi aun estaba de mal humor

- Ya sé donde estamos

- ¿Dónde?

- Pues... o en el Reino de la Tierra o en el del Trueno

- Con eso no aclaras mucho las cosas

- Sube al caballo

- ¿Cómo?

- Nos vamos

------------------------------------------

- Está clarísimo – decía Aoshi, iban al galope encima del animal – Estamos en el Reino de la Tierra y eso significa que tenemos que dirigirnos al templo

- ¿Sabes dónde está? – preguntó Misao

- No, coge mi colgante, en teoría tendría que reaccionar e indicarnos la dirección – Misao paso las manos por el cuello de Aoshi, se sonrojó, aun recordaba cuando se había despertado

---------------- Flash Back ---------------------

Sentía una mano cálida acariciándole el rostro, le agradaba esa sensación, se sentía protegida y querida.

Abrió los ojos y se encontró con unos ojos azules, preciosos pero no eran fríos, en ellos había ¿ternura?

- Aoshi-sama – susurró.

- Sabes... eres preciosa – la chica se sonrojó furiosamente, Aoshi reaccionó a sus palabras y sin aun apartar la mano de la mejilla de la chica le susurró – Levántate, tenemos que irnos

---------------- Fin Flash Back ---------------------

El colgante de Aoshi tenía forma de monte, sonrió, era lógica, el suyo tenía forma de tornado

- A la izquierda, el colgante brilla cuando lo inclinó hacia la izquierda

- A la izquierda – repitió – Misao cógete a mi, nos siguen

----------------------------------------------

- ¿El mar? – preguntó Kenshin

- ¿Qué quieres decir? – Kaoru iba detrás de él

- Que el colgante nos ha llevado al mar

- ¿Mar? – repitió Kaoru nerviosa - ¿Qué quiere decir? ¿Tú eres del Reino del Fuego? Todo lo contrario al agua y... - "Ayuda" "Fuego" "Acéptate" "Sumérgete" – Basta – susurró, las palabras resonaban dentro de su cabeza, ¿pero qué le pasaba?

- ¿Kaoru? – preguntó Kenshin

- ¡Basta! – Kaoru saltó del caballo y con las manos en la cabeza se alejó - ¡Basta! ¡No quiero oírte! ¡No puedo ir contigo! ¡No lo entiendes! ¡No puedo sumergirme!

- ¡Kaoru! – Kenshin la siguió.

- ¡No te me acerques! ¡El templo está dentro del agua! ¡No puedo ir! – grit

- ¿Pero por qué?

- ¡No puedo! Además tus ojos cambian Kenshin, no puedo – lloraba – Me duele tanto tenerte cerca

- ¿Por qué?

- Vuestro destino es... estar juntos – dijo una voz

-----------------------------------------------

- Así que este es el tan buscado templo – dijo Sanosuke ayudando a Megumi a bajar del caballo

- Pues si, según tu medallón es esto – delante suyo solo había una pequeña cabaña de madera

- ¿Seguro?

- ¡Que si! ¡Tu medallón está brillando mucho! – Megumi tenia un colgante en forma de rayo entre sus manos

- No entiendo porque no reaccionaba mientras lo tenia yo entre las manos

- Debe ser que también tiene sentimientos

- Hombre, eso no es posible

- ¿Por qué?

- Porque no querría que un Bruja Kitsune le cogiera

- ¡Cállate! ¡Entraremos! – Sanosuke se extrañó, ¿era posible que la Kitsune malhumorada no se hubiera rebelado? Dentro de la cabaña había un pequeña altar, elegante pero que no encajaba con el resto de la decoración, antiguo y mal cuidado

- ¿Y ahora qué?

- No sé, lo has de averiguar tu, porque yo no sé absolutamente nada

- Puf. Es muy tarde, empecemos a hacer el campamento

- Será lo mejor

- ¿Seguro? – preguntó una voz

- ¡Enishi! – Sanosuke en una décima de segundo se situó delante de Megumi - ¿Qué quieres?

- A Takani Megumi

- ¿Por qué?

- Ya lo sabes Sagara, para pasar una noche de pasión y deseo

- Siento decirte que ella no te desea

- Vaya Sagara, así que ya te has enamorado de ella – rió divertido

- ¿Y qué si lo he hecho? – Megumi se sorprendió, después sonrió, estaba siguiendo el juego a Enishi, seguro "¿y entonces por qué me siento tan mal?" se preguntó a ella misma

- Es lógico, su cuerpo bien formado y tiene bastante inteligencia – sonrió – y la quiero para mi – una sonrisa fría – Además... su hermana Sayo está muy mal herida

- ¿¡Qué le has hecho a Sayo!? – habló Megumi por primera vez en toda la conversación

- Yo... nada... Soujirou se encarga de eso

- ¿Soujirou? ¿Y qué pinta él aquí?

- Cariño, no lo sabes – Enishi esbozó una sonrisa maléfica – El querido prometido de tu hermana la ha traicionado y por poco la mata

- No... no puede ser

- Si cielo, la verdad, él es el traidor del Reino de la Humanidad y claro, como sabe todo acerca de las defensas del Reino y además los propios reyes no serán capaces de matarlo él los podrá matar

- ¡Eres un mentiroso! ¡Soujirou no haría nada como esto! – intentó avanzar hacia él pero Sanosuke la agarró de la cintura - ¡Déjame Cabeza de Pollo! ¡Quiero que me lleve hasta Sou-chan para que pueda verlo con mis propios ojos!

- ¡Y después que! ¡¿Serás el objeto sexual de este cerdo?!

- ¡Suéltame!

- ¡Eres muy testaruda!

- ¡Déjame! ¡No soy de tu propiedad ni de tu responsabilidad! – Megumi consiguió alejarse de Sanosuke, no mucho, Sanosuke la agarró del brazo, la giró y... ¿la besó?

- A ver si te calmas – le dijo cuando se separaron, Megumi abrió la boca para volver a gritar – Eres de mi responsabilidad, tu padre me ordenó que te cuidará y así lo haré, lucharé contra Enishi

- Pero... el trueno es débil contra el fuego

- Estamos en el templo del trueno, algo de ventaja me dará ¿no?

- Supongo – una cachetada

- ¡Au! – se quejó Sanosuke

- Nunca, me has oído, nunca me vuelvas a besar sin mi permiso – le grit

- ¿Quieres decir que algún día podré besarte con permiso? – preguntó sabiendo que había caído en su misma trampa

- ¡Vete de mi vista! – le ordenó.

- Que bonito – dijo Enishi – Ahora podemos empezar – Sanosuke se puso en posición de ataque y Megumi se apartó un poco

- ¡Fuego!

--------------------------------------------

- ¿Quién eres? – preguntó Kenshin

- Tomoe – la chica apareció delante de ellos

- ¿Qué decías? – susurró él

- ¿No lo sabes?

- ¿El qué?

- La historia de Kaoru y vuestro futuro – sonrió ella

- ¿La historia de Kaoru? ¿Nuestro futuro?

- La profecía dice que, cuando los seis descendientes más poderosos de las realezas sean reunidos solo ellos podrán desatar el poder de los dioses

- ¿Dioses?

- Así es, los dragones

- ¿Dragones?

- Kenshin no repitas todo lo que te digo – se enfadó Tomoe

- Gomen – se sonrojó el chico

- Los dragones son las aspiración máxima del poder y casualmente los más poderosos son los del agua y los del fuego, solo dos personas serán capaces de controlarlas

- ¿Y cómo sabes que somos nosotros?

- Según la leyenda, el hombre capaz de controlar el Dragón del Fuego tendría el cabello del mismo color que el fuego ardiente y los ojos ámbar

- ¿Ámbar? Kaoru también me ha preguntado eso

- Battousai, ese es el nombre del hombre que logrará controlar al legendario dragón

- ¿Y Kaoru?

- Kaoru es la más clara de todas, ¿sabes por qué no quiere sumergirse?

- ¡Basta! ¡No hables Tomoe! ¡Basta! – gritaba Kaoru aun con las manos en la cabeza

- ¿Kaoru?

- Kaoru es un impura, no es digna de poseer el Reino del Agua

- ¡Basta!

- ¡Tu madre era sucia y sedució a papa! – lanzó un ataque de agua, Kenshin alcanzó coger a Kaoru de la cintura y evitar el ataque

- ¡No es verdad! ¡Mi madre era pura! ¡La más pura de las...

- ¿De las qué Kaoru? Vamos, respóndeme si eres capaz. Tu madre se enamoró de un mortal y murió, tu madre dio a luz a una hija medio mortal y murió y papa tuvo que cargar con eso en su conciencia y cargará con ello durante toda su vida. ¡Está sufriendo con vuestra vida! ¡Tu madre era una miserable sirena que te abandonó cuando naciste y le encargó a papa controlar todo tu poder!

- ¿Sirena? – Kenshin se giró hacia Kaoru que lloraba


Ya está ¿cómo quedó? Poquito a poco las cosas van avanzando. Jeje, ¿qué les pareció a Sou-chan como prometido de Sayo? Es que se me ocurrió en el último momento. Y me dió mucha ilusión desvelar el pasado de Kaoru, su madre era una sirena, jeje, después ya se verá que pasa. Misao y Aoshi avanzan por su lado, los dos solitos, siento si dejó a esa pareja un poquita abandonada pero... ¡me cuesta mucho escribir de ellos! Así que gomen nasai

Y ya sabéis, alguna suggerencia duda, crítica y/o felicitación mándeme un rewiew

Nos vemos en el próximo capi

Se despide

Aya-Mery