Capítulo 3: 'Día de brujas Parte 1'
¡Hola, hola¡¡¡Lo dije, iba a actualizar este fic , además¿¿¿cómo no acabarlo si es para mi súper amigusha Nekilla :3? (Nekilla, se te quiere un MONTONONAL X3! Grax x todo Amigosha :D!)
Nuevamente les pido disculpas por la tardanza. No hay razón muy lógica para que me haya tardado tanto en actualizar :(, pero lo digo de nuevo, los voy a continuar, de eso que no les quepa duda alguna¿oks? ;)
Bien, debo decir, que también aquí no pondré respuesta a los reviews debido a lo tarde que estoy actualizando y que por lo tanto, muchos ya ni estarán por aquí y ya se habrán olvidado de la historia, pero no se preocupen, para el siguiente capítulo si pondré respuestas ;)
Por otro lado... Este fic era antes el de 'Here With Me', pero ya cambió de nombre igual que el de 'La verdad en tu interior', jeje.
Bien... ¡Adelante con el fic!
Beyblade no me pertenece (¡oh, gran desgracia :(! )
Advertencia: Este fic contiene Shounen-Ai (chico/chico). KaixRei (4 ever and ever!)
Capítulo 3: 'Día de Brujas'
Los días habían pasado rápidamente para Rei. Entre clase y clase, entre charla y charla, los días volaban. ¿Quién hubiera pensado que octubre ya casi estaba terminando? Había llegado a la escuela a finales de Agosto, y en un abrir y cerrar de ojos ya estaban próximos al día de las brujas.
"¿Qué crees que hagan este año para el día de brujas, Maxie?" preguntó Tyson a su amigo rubio mientras comían ellos y Rei debajo de un árbol que se había convertido en su lugar especial de reunión.
Max lo pensó por unos instantes. Era difícil saber, y después de unos instantes pensando, finalmente respondió. "Mmm... no tengo idea Ty."
Fue entonces cuando Rei se metió en la conversación. Había estado acostado observando como la luz del sol se colaba entre las hojitas de los árboles, produciendo bellas luces brillando en un verde obscuro.
"¿Hacen algo para el día de brujas?" preguntó con curiosidad.
"Oh, sí. Ésta escuela hace varios proyectos alrededor del año. Son muy buenos. Me extraña que no hayas escuchado nada de ellos" dijo Tyson ladeando ligeramente la cabeza en muestra de extrañeza "es algo que siempre comentan aún faltando dos meses para el evento"
Max rio. "Jeje, sí, son cosas que todos esperamos con gran ansiedad. Nos libran de la misma rutina de siempre, ya sabes, son cosas que elaboran con esa razón. Como se supone que esta escuela es de gran prestigio, deben no sólo concentrarse en el nivel académico, sino también en cosas como el bienestar de los alumnos y en este caso de métodos de entretenimiento, que permitan que no nos hartemos de estar dentro del instituto."
Rei miró a Max, pensando en lo que había dicho. ¡Claro, de no hacer nada, una gran parte de los alumnos se retirarían a otras escuelas donde pudieran tener más actividades y no estar tan aburridos.
Asintió para indicar que entendía. "¿Como qué clase de eventos pueden realizar?"
"Mmm... déjame pensar..." respondió Tyson mientras se ponía una mano en la barbilla tratando de recordar los eventos pasados. "Pues verás, el año pasado, para Navidad hicieron una posada y para esta fecha hicieron un baile... aunque dudo que este año lo hagan, porque ya lo hicieron el año pasado..."
"¿Un baile?" preguntó Rei.
"Sí. Un baile de disfraces." Continuó Max "Fue bastante divertido. De echo, teníamos que confeccionar el traje nosotros mismos. Claro, al final había unos bastante extraños¿verdad, Ty?" volteó a ver al chico ligeramente moreno.
Tyson se sonrojó y volteó hacia arriba, "¿Lo estás diciendo por el mío?"
Max soltó una ligera risita. "Jaja, bueno, no sólo por el tuyo" volteó a ver a Rei, quien tenía una mirada llena de su curiosidad característica, queriendo saber que tipo de disfraz había llevado Tyson. "El año pasado dejó a todos boquiabiertos con el disfraz con el que apareció. Intentó hacer uno de hombre lobo, pero al final, en lugar de un atuendo ligeramente andrajoso, llegó pareciendo uno de esos mendigos que se pueden ver en la calle acabados de salir de una pelea donde resultaron perdedores".
Rei se le quedó viendo a Tyson unos instantes e instantáneamente soltó una gran risa al imaginárselo con cara de mendigo bien alimentado. Seguramente nadie daría dinero a un mendigo como Tyson.
"¡Rei!" lo regañó Tyson con molestia falsa "¡Y tú también, Maxie!" dijo cuando vio como su amigo soltaba ligeras risitas ahogadas "No hubieras sido tan detallista" se volteó Tyson como si estuviera enojado cruzando los brazos.
Max al ver esto dejó de reír creyendo que Tyson de verdad estaba enojado. Lentamente se fue acercando a su amigo moreno, levantando un brazo temblorosamente para tratar de tocarlo en el hombro. "¿Ty-Tyson?" dijo con notable tristeza y temor en la voz.
Inmediatamente fue sorprendido por Tyson, que volteó rápidamente y lo agarró, haciendo que cayera bajo él mientras soltaba unas risotadas.
"¡Jajajaja, te la creíste!" dijo mientras veía la cara de impacto y sorpresa en el pequeño rubio al tiempo que lo soltaba para poderse levantar.
Max tardó en reaccionar un rato, pero después le llegó a la mente que todo el enojo había sido actuación de Tyson. "¡Ty¡eso es injusto!" dijo sentándose en el pasto.
Ésta vez, era él el que tenía aspecto de enojado, y Tyson al darse cuenta de esto se preocupó bastante, acercándose a Max con cara de 'Dime que no estás enojado, por favor'. Cuando ya estuvo lo suficientemente cerca de Max, fue ésta vez el rubio quien lo tomó por sorpresa y le hizo caer completamente al suelo.
El rostro de Tyson mostró gran sorpresa ante lo ocurrido, pero pronto recobró la razón. "¡Eso es más injusto aún, Maxie!" dijo Tyson con una gran sonrisa en labios al tiempo que empezaba con Max una lucha de cosquillas que alegraba el ambiente que los rodeaba.
Rei los veía con entretenimiento y alegría. Esos dos siempre se la pasaban así, y lograban contagiarle esa alegría que siempre los había caracterizado. Ellos dos eran grandes amigos, y aunque ninguno de los dos lo sabía, sentían una gran atracción el uno por el otro, un amor sincero y puro, de los amores tiernos y verdaderos difíciles de encontrar y tener.
Rei se había dado cuenta de eso días antes. Claro, Rei era algo distraído en cuanto a aspectos del amor, pero algo como lo que ocurría entre Max y Tyson era MUY evidente, y aunque se había tardado en descubrirlo, ya lo sabía, la manera en que se miraban y se sonrojaban, la manera en que se sonreían y trataban de estar juntos. Todo era perfectamente claro, y todo el instituto lo sabía, aunque por alguna razón, ni Maxie ni Ty lo habían notado aún.
'Algún día se darán cuenta', pensó Rei mientras sonreía viendo a los chicos ahora jalándose juguetonamente de los cabellos 'Y cuando lo vean, estoy seguro de que serán mucho más felices de lo que lo son ahora'. Los pensamientos llegaban a la mente de Rei, y sin aviso alguno, llegó la imagen de Kai a su cabeza. Su mirada se alejó de Max y Tyson y se colocó en las nubes que se desplazaban lentamente en el claro cielo azul.
Azul... Kai...
Sin saber cómo ahora era aquel chico quien ocupaba la mayor parte de sus pensamientos. Su compañero de cuarto, su amigo, el chico más popular de todo el instituto. ¿Era tonto imaginar que algo bonito como una relación podría surgir entre ellos? Rei sentía que sí, pero no sabía por qué, no podía dejar de soñarlo y anhelarlo. Había llegado un punto en el que los dos se habían vuelto tan cercanos, que era imposible dejar de saber cuando algo malo le había ocurrido al otro.
Aunque Kai era una persona de pocas palabras, sus conversaciones siempre habían sido significativas. Para Rei, Kai era su mejor amigo en todo el instituto, no sabía si el chico de cabello azul sentía lo mismo, pero tenía la esperanza de que así fuera, sin embargo, el sentimiento de ser mejores amigos aún lo dejaba vacío. Necesitaba ese algo más que sólo ocurría en las relaciones, necesitaba algo mucho más que sólo amistad.
Aún así, ser amigo de Kai lo ponía bastante feliz, y el sólo pensar que le hablaba hacía que una sonrisa se colocara en sus labios cada que pensaba en ello.
Sabía que lo quería, sabía que Kai ahora era el centro de su corazón¿estaba mal aquello? A él en realidad no le importara querer a un chico, pero ¿y Kai¿y qué le hacía pensar que éste correspondía sus sentimientos?
Rei dio un ligero suspiro y se dejó caer nuevamente en el pasto, volviendo a admirar aquellas luces brillantes formadas entre las hojas del árbol mientras miles de pensamientos dirigidos al chico de cabello azul se formaban en su mente.
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"Kai¿has visto mi cepillo de dientes?" preguntó Rei asomando la cabeza por la puerta del baño, observando al otro chico que se mantenía recostado en la cama con los brazos cruzados detrás de su cabeza y con los ojos cerrados.
Un ojo carmín se dejó ver y volteó hacia la puerta del baño para lograr ver a Rei. Hubo un momento de silencio, y finalmente Kai respondió. "Cuál¿el del gatito rojo que es muy infantil o el del otro gatito azul que también es muy infantil?" dijo con la más ligera de las sonrisas asomándose entre la comisura de sus labios.
Rei abrió unos instantes un poco más de lo normal sus ojos ámbar, y después infló ligeramente las cachetes, lo que le daba la expresión de enojo ligero "Para tu información no son gatitos, son t-i-g-r-e-s que es muy distinto, y ¡no¡no son infantiles!" dijo ahora enseñándole la lengua ligeramente "No es mi culpa que no te gusten los cepillos con figuras".
Kai volvió a cerrar su ojo carmesí y volvió su cabeza en dirección al techo "Tigres, gatos, da lo mismo, igual son felinos", dijo ahora con una sonrisa ligeramente más marcada.
Rei salió del baño y se paró cerca de la cama de Kai "¡Claro que no!" respondió Rei alegándole.
Kai continuaba con la ligera sonrisa en los labios, contradiciendo lo que Rei decía por pura diversión de molestarlo "Claro que sí"
Hubo un ligero silencio en el que Kai pensó que Rei ya no diría nada, pero entonces vino la rápida respuesta "¡En ese caso puedo decir que un fénix es igual a un pollo! Igual son pájaros¿no?"
Kai abrió rápidamente los ojos ante esto, una leve expresión de sorpresa en su rostro ante la barbaridad que Rei acababa de decir, pero más sorpresa le causó ver que Rei ya se encontraba agachado ligeramente sobre él, con las manos en la cintura mientras una sonrisa de victoria se dejaba ver en sus labios.
"Un fénix es muy diferente a un pollo"
"Un tigre es muy diferente a un gato"
Otro ligero silencio. "Está bien, ganaste por esta vez" resopló Kai, con ligera muestra de molestia no grave ante la nueva victoria de Rei.
Rei al escuchar esto le dirigió una gran sonrisa. "Jaja, ya lo sabía" dijo al tiempo que se sentaba en la orilla de la cama de Kai. Después de unos instantes, recordó algo que le había querido preguntar a Kai desde que se enteró. "Oye, Kai".
"Mm" contestó Kai, nuevamente con los ojos cerrados.
"¿Qué crees que hagan para el día de brujas?"
Kai abrió sus ojos carmesí para encontrar unos ojos ámbar que mostraban toda la curiosidad del mundo. Esa expresión, aunque Rei no lo sabía, fascinaba a Kai.
'Tanta curiosidad concentrada en una sola persona es dañino' pensaba, ya que aquella mirada era muy linda y atraía mucha atención. Todo Rei atraía gran atención, no sólo de Kai, sino para el disgusto del chico de cabello azul, también para muchas chicas y chicos, pero aún así, Rei pasaba por alto todo aquello.
Kai se volteó nuevamente cerrando los párpados con una sonrisa en labios "No tengo idea".
Rei sabía que aquella respuesta no era verdadera por la sonrisa que se vislumbraba en el rostro de Kai, era ese tipo de gestos que te hacían saber que la respuesta era sólo para molestar "¡Kai, ya se que sí sabes".
"¿De verdad quieres saber?" lo volteó a ver Kai.
Rei asintió.
"Entonces... debes admitir que tus cepillos son infantiles"
"¡Kai!" se molestó Rei volteándose a otro lado para mostrar su enfado.
Kai sonrió un poco más al ver el gesto de Rei. "Si te enojas no te puedo decir".
Rei lo volteó a ver quitando su rostro de enojo falso.
"Al parecer, creo que van a realizar algo así como una salida a pedir dulces. También eso me parece muy infantil si quieres saber mi opinión."
Lo siguiente que sintió Kai fue un almohadazo suave en el rostro.
"A ti todo te parece infantil, Hiwatari" sonrió Rei.
Kai se quitó la almohada del rostro y vio la sonrisa de Rei. Aquel gesto de Rei era lo que más le atraía a Kai, lo que de alguna manera lograba llegarle a su solitario corazón, lo que lo llenaba de calidez interna y hormigueos en el estómago. Un simple gesto como una sonrisa. Era increíble lo mágico y poderoso que podía ser ese simple gesto.
Sin saber como, Kai se encontró sonriéndole de regreso, una sonrisa genuina que sólo Rei había podido ver en ocasiones anteriores. En opinión de Rei, el gesto que le sentaba mejor a Kai, y que le hacía saber que Kai era humano, que le transmitía la calidez escondida dentro de él.
Ese momento en que los dos se dirigieron aquellas cálidas sonrisas eran de los momentos en los que el tiempo se congelaba, dejándolos tan sólo en un lugar donde lo único que sabían es que se encontraban ellos dos, y tan sólo eso bastaba.
"Es bueno tenerte de compañero¿sabías, me puedo enterar de muchas cosas" dijo Rei mostrando en una nueva sonrisa sus blancos dientes.
"Me halagas" respondió Kai un tanto sarcásticamente, pero aún con una ligera sonrisa.
Rei rio ante el comentario y se levantó de la orilla de la cama, dirigiéndose nuevamente al baño. Pasaron unos instantes y la cabeza de Rei se asomó otra vez por la puerta.
"¡Ey¡no me dijiste si habías visto alguno de mis cepillos!"
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Al parecer Kai sí tenía idea de lo que iba a pasar en el instituto, ya que pocos días después de que le había informado a Rei sobre la salida a pedir dulces, Emily, que era la alumna encargada del orden de secundaria, les informó sobre aquella salida el treinta y uno de octubre.
Los llevarían hasta un pueblo menos alejado de lo que estaba la ciudad del instituto, y ahí pedirían dulces en grupos, después acamparían en un lugar cercano donde habría fogata y lo clásico de ese tipo de noches. El disfraz nuevamente, para desilusión de Tyson, sería confeccionado por ellos mismos.
El tiempo, si era posible, había transcurrido con mayor rapidez que en los días anteriores, todos se morían de ganas porque el treinta y uno llegara. La emoción invadía la escuela, comentarios al respecto eran audibles cada momento que pasaba, las sonrisas y los planes comenzaban a realizarse. Todo era alegría en el instituto, y pronto el día esperado llegó.
Después de mucho tiempo planeando lo que pondría en la mochila que se llevaría, Rei logró terminar de empacar las pequeñas cosas que necesitaría. No llevaba mucho en realidad, sólo lo fundamental, pues claro, no se irían de vacaciones o algo así, sino que era una pequeña salida durante sólo una noche.
Otras personas sin embargo, como Tyson, que parecía haber metido en la maleta todo lo que había podido caber.
"¿No crees que se te dificulte caminar, Tyson?" le preguntó Rei viendo a su amigo apenas respirando bajo todo aquel peso de la mochila una vez que se encontraban a punto de subir al autobús que los llevaría al pueblo.
Tyson respiró profundamente "Nah" dijo casi sin aliento, mientras Maxie lo veía con preocupación e intentaba ayudarle a cargar la mochila a su amigo. "Soy muy fuerte, y la mochila no pesa casi nada" resopló.
Rei lo miró incrédulo, con una ceja levantada, pero después sonrió. Ésta vez, Maxie había ayudado a disfrazar a Tyson. Fue un gran problema con el disfraz que estaban confeccionando, ya que cuando estuvo terminado, no logró entrarle a Tyson, así que al final, terminaron usando vendas y papel de baño para disfrazarlo de momia, y para el caso, estaba bien, ya que por lo desarreglado quedaba perfecto para aquel día de brujas. Ya tenían planeado que en un siguiente día de brujas así, lo que harían sería hacerle dos hoyitos a una sábana blanca para disfrazarlo de fantasma sin tantos problemas.
Max, por otro lado, había preferido el disfraz de calabaza. Le había quedado un poco aguado, pero se le veía bien. Su cabello rubio combinaba con el naranja de la forma de calabaza, aunque en lugar de hacerlo ver terrorífico, lo hacían verse aún más tierno de lo que normalmente era.
El disfraz de Rei era un poco más sofisticado, simple, pero sofisticado al mismo tiempo. Se encontraba disfrazado de vampiro, pero no aquel vampiro estilo Drácula con aspecto terrorífico, gotas de sangre por la boca y cosas de aquel estilo, no, su apariencia más bien era elegante. En cuanto salió del cuarto, las miradas se dirigieron a él, los sonidos al contener el aire comenzaron a escucharse. Por donde pasaba, las personas se quedaban perplejas. Aquel no era un monstruo horrendo de aspecto grotesco, aquel era un ángel disfrazado, que de tener maldad, lograría hacer que todos cayeran en ella.
Su cabello no se encontraba recogido en la forma ligeramente despeinada de siempre, se veía más lacio y suavemente recogido en un moño negro, mientras algunas partes estaban sueltas, volando con cada susurro del viento. El maquillaje usado había sido para emblanquecer más su rostro, marcando con un tono un poco más rosado los labios, que sobresaltaban en la pálida tez, pero lo que más robaba la atención, lo que más dejaba a todos sin aliento, eran sus cálidos ojos ambarinos. Los había hecho resaltar con un poco de delineador, y por alguna razón, habían adquirido un brillo sin igual, como de oro derretido, de una profundidad sorprendente. Su porte era elegante, con una capa obscura detrás, mientras usaba una camisa blanca con pantalones negros. Lo clásico, sólo que en él se veían extremadamente bien.
Rei no se había dado cuenta de todas las miradas que robaba por donde pasaba, de los murmullos y suspiros, él simplemente pensaba que se encontraba disfrazado de una forma normal como cualquier otro estudiante, aunque esperaba con ansias ver el disfraz de su frío compañero de cuarto.
Sabía que era impactante, se lo habían dicho varias personas. Kai Hiwatari era todo un príncipe andante.
No había tenido oportunidad de verlo, ya que Kai había salido antes de que le hubiera podido dar un vistazo. Al parecer el director lo había llamado, y era deber de Kai acudir inmediatamente a él. No había visto ni rastro de él en toda la noche, y al entrar al autobús, tampoco se encontraba ahí. Quizá estaría en otro. Una luz de desilusión se posó sobre sus ojos, pero nadie la notó.
El trayecto hacia el pueblo fue bastante divertido con Max y Tyson alado de Rei. Estuvo lleno de risas y comentarios bobos por parte de Ty, y todo eso había hecho que el tiempo se acortara. Pronto habían llegado al pueblo y lentamente los alumnos iban bajando del autobús al tiempo que conversaban alegre y excitantemente con sus amigos.
Rei había logrado bajar del autobús después de Max y Tyson con un suave salto desde los escalones finales. Sus ojos ambarinos comenzaron a admirar el lugar mientras sus dos amigos caminaban tratando de explorar un poco.
Parecía ser uno de esos pueblos adornados de infinitas luces que resplandecían en la noche, lleno de decoraciones relativas a la celebración. Calabazas por aquí y por allá, niños disfrazados por todo el lugar, tocando de puerta en puerta. El aroma de dulces y calabaza en jarabe era una sutil invitación a disfrutar. Ornamentos y estatuillas hechas a mano eran visible por doquier. El piso limpio y pavimentado hacía que el lugar se viera rústico, pero con una belleza singular.
Todo parecía hecho para la ocasión, un pequeño pueblo que había trabajado en cada detalle para hacer ver el lugar mucho más bello de lo normal.
"Parece que has quedado impactado"
Rei volteó al escuchar la voz familiar, aquella voz que conocía de memoria y con la que solía soñar.
"¡Kai!" exclamó ligeramente Rei al ver al chico de cabello azul.
Sin duda alguna, los comentarios que había escuchado no habían exagerado. Kai parecía todo un príncipe andante en persona.
Al parecer, su disfraz tenía un tipo estilo de jinete sin cabeza, aunque claro, Kai sí la tenía, pero en lugar de que su aspecto fuera horrendo, al igual que Rei lucía espectacularmente atractivo. Su tez normalmente pálida ahora resplandecía de forma sobrenatural, sus ojos carmín parecían arder bajo aquella luminosidad, sus labios estaban ligeramente pálidos, pero tenían un toque muy sensual. Su ropa se veía antigua, con una especie de armadura negra con toques plateados en el pecho, una capa negra y gris colgada desde el cuello. Kai se veía como un chico obscuro, pero de belleza sin igual.
Pronto Rei recobró control sobre sí mismo, y no pudo más que dedicarle una sonrisa alegre al chico de cabello azulado.
La mirada de Kai se mostró entretenida, con un pequeño toque de sorpresa y admiración.
Desde lejos había notado cuando el chico había bajado del autobús, no sólo por los miles de comentarios y anhelos que soltaban sus demás compañeros respecto a la belleza de Rei, sino también porque la presencia del chico se había vuelto algo muy fácil de distinguir para Kai.
Al verlo, sin duda se quedó sin aliento como todos los demás, Rei no lo había notado, pero Kai se quedó observándolo durante un gran rato, viendo como las luces hacían parecer a Rei toda una obra de arte en un ambiente natural. Finalmente, cuando había vuelto a conciencia, pudo acercarse a él para dirigirle algunas palabras.
"Jaja, sí, este lugar es muy bonito" dijo Rei mirando a su alrededor.
Los ojos carmesí de Kai no dejaron de admirar a Rei ni por un solo momento, sus expresiones, sus labios moviéndose, la forma en la que el suave viento jugaba con sus cabellos, todo hacía que Kai no dejara de preguntarse por tanta perfección en un solo individuo.
"Bien, chicos, el pueblo no es tan grande, así que nos repartiremos en grupos pequeños para poder organizarnos mejor, en cuanto vuelvan todos los grupos nos iremos a un lugar cerca de aquí donde podremos acampar, mientras tanto, si quieren pueden dejar sus mochilas en el camión, ya que de todas formas volveremos al rato, o si quieren llevárselas con ustedes pueden hacerlo, como ustedes gusten."
Los comentarios nuevamente se hicieron escuchar aquí y allá, las pláticas amenas comenzaron a salir por la boca de todos los alumnos.
"¿Te vas a llevar la mochila?" le preguntó Rei a Kai al ver que éste no iba con todos los demás a dejarlo en un espacio en la parte inferior de un lado del camión reservado para las mochilas.
"Sí" Vio los ojos interrogativos de Rei "Prefiero estar preparado por cualquier cosa" añadió.
Rei se encogió de hombros. Él sí había dejado su mochila en el autobús, prefería no tener que cargar con ella todo el trayecto que hicieran en el pueblo.
"La repartición será así," se escuchó la voz de uno de los profesores mientras comenzaba a ver las listas de los salones "nos dividiremos por grupos de diez u once personas. Pueden juntarse con sus amigos, pero recuerden, sólo diez u once personas."
Todos los chicos comenzaron a moverse de un lado a otro en un dos por tres, juntándose con sus mejores amigos y viendo como integrar sus grupos. Rei veía como casi todos ya tenían formado su grupo, aunque él no lograba divisar a Tyson ni a Max. Desde antes que hubiera llegado Kai los había perdido de vista, y hablando de Kai... ¿con quién se iba a juntar el chico de cabello azul?
Eso mismo estaba cruzando por la mente de Kai. No es que le importara, en realidad, como no era sociable no tenía alguien en específico con quien juntarse, le daba igual, siempre se esperaba al final para que lo colocaran con algún grupo. Si por cuestión de Kai fuera, ni siquiera tendrían que repartirse en grupos absurdos.
"¿K-K-Kai?" preguntó suavemente una vocecita alado de él.
Kai volteó para encontrarse con los hermosos ojos ambarinos del chico chino. Intentó controlarse en ese momento. Sabía que algo pasaba cada vez que veía a Rei, era algo que por mucho que quisiera no podía evitar.
Intentando esconder aquellos sentimientos que se mezclaban en su interior, levantó una ceja de forma un tanto cuanto indiferente, cuestionando la razón del por qué Rei lo había llamado.
Rei logró ver aquella mirada de indiferencia, así que el valor que había tomado para preguntarle lo que le quería preguntar se estaba esfumando, sin embargo, ya había atraído su atención, no podía echarse para atrás, sonaría muy tonto.
"N-Nada" Al final de cuentas se rindió, había querido decir un '¿quieres estar conmigo en el mismo grupo?', pero al parecer las palabras se habían cambiado en su garganta y terminó diciendo un simple nada.
Kai había notado aquello, aquel cambio de actitud en Rei. Quizá había sido su culpa al hablarle con aquella indiferencia falsa¿por qué lo había echo¿Había querido negar todo aquello que sentía por el chico de cabello negro?
Sin embargo, no importó que Rei no le hubiera pedido aquello a Kai, puesto que inmediatamente, la profesora Lucía los puso juntos con otros chicos que sobraban, y entre ellos estaban Tyson y Max.
"¡Que suerte que nos tocó juntos¿no creen?" preguntó Tyson agitando los brazos emocionadamente dirigiéndose a Rei y Max.
Kai lo miró fríamente mientras caminaba detrás de los tres chicos que seguían al grupo que les había tocado mientras pedían los dulces.
Tyson de alguna manera sintió la mirada penetrante de Kai, lo volteó a ver, y le mostró la lengua "Sin embargo, es malo que nos haya tocado con aguafiestas como Kai".
Kai todavía intensificó más su mirada, pero instantáneamente, pensando que no valía la pena gastar miradas frías en el moreno, se volteó hacia otro lado.
Rei sonrió ligeramente y se alejó de Tyson y Max, quienes charlaban alegremente, para ir con el chico de cabello azul. Tyson habiendo olvidado su enojo con Kai.
"Ey" dijo Rei en forma de saludo.
Kai volteó la vista hacia él, viéndolo con un estilo '¿qué pasa?' pero no en su usual modo frío.
"Estaba pensando..." Rei se veía un poco más nervioso, quizá por el pequeño problema que se había presentado entre él y Kai momentos antes. "Nunca antes había ido de campamento¿son divertidos?"
Kai alzó ligeramente una ceja, tanto por la sorpresa de que Rei no había ido de campamento nunca antes en su vida, como por la inocencia con lo que lo había dicho. Era difícil no contestarle a alguien como Rei. "Bien, la mayoría los disfrutan, al parecer se divierten mucho."
"¿Qué tú no?" preguntó sorprendido Rei.
Kai negó con la cabeza. Al ver el interrogativo en el rostro de Rei, continuó. "Nunca me han divertido cosas así."
Rei se mantuvo un poco pensativo. De repente, una idea cruzó por su mente, y alegre, volteó a ver a Kai. "Quizá es porque no estás usualmente con alguien¿no?"
Kai se mantuvo inexpresivo, sin embargo, sabía que en el fondo, Rei tenía razón. ¿Se estaba negando la alegría el mismo? No era que las personas no se acercaran a él, sino que él siempre los alejaba, no permitiendo que llegaran a su corazón. ¿Forma de autoprotección? Quizá.
Rei entendió. "No te preocupes." Fue entonces cuando le dirigió una gran y cálida sonrisa a Kai, la cual hizo que el chico de cabello azul se detuviera un poco en su caminar, deteniendo su aliento al ver la expresión de Rei. Era una de las sonrisas más bellas que le había visto hacer, una gran sinceridad puesta en ella. Simplemente hizo que el corazón de Kai palpitara un poco más rápido, y que un jalón se formara en su estómago. "Esta vez yo estaré contigo."
Kai se había quedado ligeramente paralizado ante aquellas palabras. El pensamiento coherente era difícil de llegar a su mente. Finalmente, logró recuperar el control sobre sí mismo.
Ahora fue el corazón de Rei el que se agitó. No lo había esperado...
Kai le dirigió una sonrisa igual de sincera, igual de significativa, igual de cálida, asintiendo.
Rei entonces volvió a sonreír.
El cielo con sus estrellas y la ciudad con sus luces, envolviéndolos en un momento que aunque ninguno de los dos era sumamente significativo para ambos.
En la mente de Kai, las palabras de Rei se habían quedado plasmadas.
¿Sería que acaso el chico al cual todos consideraban frío como el hielo finalmente se estaba abriendo ante el cariño y amistad tierna que le ofrecía el ángel de cabellos negros?
'No te preocupes. Esta vez yo estaré contigo'
TBC...
¿Y bien¿Les gustó:3
¡Bueno, esperemos que sí :D!
Quiero hacer rápidamente un agradecimiento a todos los que han dejado review en 'Dentro del corazón' (Gracias a todos, de verdad muchísimas gracias, no saben lo mucho que me alientan y alegran, en serio, GRACIAS X TODO a todos!)
Je, bueno, yaps, ahora, a convencerlos de que pongan review:P, jejeje. Esperemos que dejen algún comentario por ahí ;), de veras, sigo insistiendo en que son la fuerza de todo escritor (pequeño o grandote).
Gotta go! Los veo muy pronto :)¿oks?
See you later!
