Los personajes no son míos y bla,bla,bla,bla……….Pertenecen a Rumiko Takahashi.

Primero de todo mis disculpas, he tenido que estudiar para uno de los parciales de la Facu. Teoria literaria; tanto leer a Aristóteles y Horacio seguro que ha afectado a mi estilo, así que si veis que soy poco clara o que me repito más que Verano Azul (una serie que echaban todos los años por la tele cuando yo aún hacía primaria) ya sabéis a quién echar la culpa.

Más reviews, no me lo puedo creer, y eso que el fic está en español.

Ahora mismo me encuentro un poco en blanco, así que no se que tal estará este capítulo, pero por supuesto intentaré dar lo mejor de mí.

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El techo pintado de beige se resistía a la ardua tarea de encontrar un punto fijo.

Resulta difícil enfocar la vista lo suficiente para volver a la realidad cuando aún te encuentras bajo los efectos embriagadores de un orgasmo. Perfectamente sabes que no hay ninguna prisa, pero no es bueno permanecer mucho tiempo saboreando lo excepcional, lo que te abandona tan rápidamente como una idea perdida, dejándote con una sensación de vacío pleno. Y sin embargo si no fuera por esta otra vida, llena de pequeños momentos, ¿Dónde estarías, ¿Serías cruel entonces, Kikyou?

Sin embargo, manipular de esta forma tus propias emociones tiene, como todo, sus consecuencias. Al final no sientes nada. Miras ahora a Sesshomaru, tumbado sobre su espalda a tu izquierda, y te preguntas una vez más si esto es lo que la vida tiene reservado para ti. Dime Kikyou, si realmente le quieres como tú misma piensas cada vez que entras en esta habitación, o si no es más que una estrategia. Una estrategia con doble fin: equilibrar tu alma atormentada por un lado y mantenerte en una situación que te da acceso al poder, a las decisiones, a las estrategias que tan pulcramente planeas, pues la tuya no es una situación fácil, kikyou, no solo eres ningen, y por tanto mortal, sino que también eres una mujer en una sociedad tan anclada en la tradición como es la ciudad de Ángel, la ciudad fundada por los demonios marginados por el resto del mundo.

Pero una vez más, ¿No es acaso esta sino otra razón más que te ata a él? Él que ha sido tu maestro, tu superior, la única persona en que aún depositas cierta confianza en un lugar donde esta se paga cara. Sesshomaru es un ser bueno, lucha a favor de unos ideales magnánimos, mantiene las promesas hechas a su padre, se ocupa no solo de su hermano sino de todos nosotros. Sesshomaru es un ser sabio, mente privilegiada, instintivo estratega, miles de años vividos, millones de personas conocidas. Él que ha vivido los cambios y la evolución a la que se ha visto sujeta el ser humano desde que comenzó a poblar la tierra. También es sin lugar a dudas hábil; tiene una habilidad natural para la lucha, su sola presencia inspira respeto, incluso a ti Kikyou cuando estáis solos. Y por supuesto es hermoso, con su cabello plateado y sus ojos ambarinos, sus facciones eslavas y su cuerpo esbelto, intemporal. Solo una vez he llegado a ver su forma demoníaca, un enorme perro de ojos rubí, blanco y peludo. Y era hermoso así también, como el más bello y peligroso de todos los seres. Adorable y mortal. La muerte escondida en la más bella de las copas.

Aquella fue la batalla más sangrienta de tu vida, aun imprimías tu castigo a tu arco sagrado, de modo que ibas armada con armas de última tecnología: shikusen láser, pistolas antidemonio, y munición. Como siempre un cuchillo firmemente atado a tu muslo derecho mientras tu uniforme de vinilo negro se pegaba a tu cuerpo. Oh si, en realidad es irónico, pues esta guerra no es solo destrucción, sino que también tienes que conocer tus armas y desde luego, ofrecer una estética adecuada solo se puede definir como un arma, un arma psicologica, un arma reclutadora. Algo que solo puedo xpresar como cool, y todos sabemos que la gente se siente atraída por aquello que es cool , y eso es lo que necesitamos, gente, gente que piensa que por nuestra forma de vestir, por nuestro estilo de vida, siempre tan cerca del riesgo, nuestra vida es más plena, más merecedora de ser vivida, más apasionante. Algo así Kikyou como cuando veías aquellas películas de espías, espías que llevaban una vida que hacía imposible la rutina, películas que veías cuando merendabas chocolate con pan frente a la televisión del santuario, cuando volvías del colegio y tu madre te esperaba al final de las escaleras.

Madre, como ha cambiado todo ahora, ahora que soy responsable de la muerte de cientos de personas, directa o indirectamente.

Pero Sesshomaru siempre está ahí, y su actitud dominante, de jefe absoluto de toda esta organización absorbe toda la culpa, dejándonos al resto con nuestra buena intención, que tiene un sabor a sucia falsedad.

Y si, él es consciente de que sé lo que está haciendo, y si, me deja cargarle a él con todo lo que mancha mi alma pura, y yo lo respeto por eso. Muchos podrían argumentar que el pesar por haber acabado con vidas ajenas podría acabar manchando mi alma, convirtiéndome en una miko oscura, pero yo lo niego, pues no es más que cobardía. Si cobardía pues soy incapaz de enfrentarme a mis propios pecados, y yo se aunque no quiera reconocerlo que de hacerlo saldría fortalecida.

Aquel día luchaste contra Naraku, en los arrabales de la ciudad en toda tu gloria de demonio perro, la vista más aterradora y embelesadora a la vez que he podido sentir. Y yo miraba, mientras intentaba sobreponerme a las heridas que Kagura me había causado, como dos fuerzas de la naturaleza luchaban ante mis ojos.

Y ahora si cierro los ojos mientras descanso desnuda sobre tus suaves sábanas pienso en ti, Sesshomaru, y no te veo como el ángel dormido a mi lado, sino que te me presentas en tu más pura esencia, como el demonio perro que eres, un contraste de sensaciones.

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Y…. eso es todo amigos.

Próximo capítulo? Cuando vuelva mi musa que últimamente un cierto aire a Homer Simpson.