Bueno chicas! Primero que nada MUCHAS GRACIAS POR SUS MENSAJES! SON MUY FELIZ! Quisiera poder dejarles individualmente una contestación pero ahora estoy algo apurada ya que tengo que terminar una tarea... espero que el Cáp. Les guste! me divertí muchísimo haciéndolo!
"She"
Cáp. V
"Entre Clases de Quidditch y Paredes"
La luna llena mostraba sus mas hermosos rayos aquella noche. Mientras los furtivos pasos asechaban los alrededores, los penetrantes ojos de brillante café miraban a su alrededor en busca de su presa. Estaba solo. ¿Quién era su presa?.
El mismo.
Sabia que aquella Luna llena tendría que estar solitario, ya que su querido amigo James estaba molesto y no quería involucrar tampoco a Sirius , por otra parte estaba Peter...¿Qué podría aportar el, aparte de sus comentarios extraños?.
No quería estar tan solo, se había acostumbrado a la compañía de sus amigos las noches de Luna Llena... Hecho una furia se daba vueltas en circulo por la casa de los gritos, derribando todo a su alrededor con su perfecta cola lobezna. Era un lobo macho realmente hermoso, un ejemplar perfecto que en esos momentos era presa de su propia jaula de luna. Mientras los constantes aullidos del lobo resoban en las calles de Hogsmeade y en gran parte de los castillos, era impensable imaginar que el tímido y simpático muchacho de mirada serena estaba sufriendo gracias a la horrible maldición que lo había atrapado para el resto de sus días.
Los campos de Quidditch eran realmente hermosos en las mañanas. El clima aun era muy bueno en esos meses y era necesario aprovecharlo. Miles de capas y de alumnos estaban felices en el campo, sin embargo, una imponente figura femenina bastante singular por su expresión, parecía ser el único punto detectable a kilómetros.
Lily tomo titubeante el palo de madera mientras todos sus compañeros hacían lo mismo. Muchos de ellos ya sabían hacerlo, pero ella simplemente no era capaz de hacer nada realmente bueno con aquel singular y mágico objeto.
Su miedo a las alturas no le ayudaba en lo mas mínimo en esa situación, es mas, al parecer todos disfrutaban al obligarla a tomar aquella clase de Educación Física (Mas que nadie, Kari y Kitty las cuales disfrutaban mucho con las frustraciones ajenas, ellas realmente tenían un lado maquiavélico terrible dentro de ellas, solía decir Ginger cuando recordaba los incidentes que ellas provocaban siempre..). Según los resultados del ultimo censo del ministerio de educación mágica, los alumnos de los colegios mágicos no tomaban las suficientes clases adicionales para el cuidado de su físico. Muchos estaban en pésimo estado, pero eso no significaba que ella, Lilliane Evans, tenia que tomar clases obligatoriamente por culpa de los flojos que detestaban hacer ejercicios. (entre los cuales, destacaban Peter Petegrew, y para poco orgullo, ella misma)
Lily tembló levemente cuando vio que la maestra se llevaba el silbato a la boca.
Instintivamente cerro los ojos esperando que el sonido delatara su mayor miedo, sin embargo este no sonó.
Al abrir sus ojos verdes esmeraldas, comprobó que la maestra Hooch se había detenido en ultimo momento para ver una escoba en la estado de una chica de Slytherin.
Complacida , se llevo la mano al pecho para calmar su agitada respiración. Mirando de soslayo a su lado se encontró con una muchacha de energética presencia. Virginia Weaspott, mas conocida como Ginger se encontraba analizando alegre su escoba de singular y extraña forma.
Esta tenia un extraño y misterioso brillo en sus penetrantes ojos violetazos que la hacia parecer mucho mas intrépida de lo que era. Para la pequeña Ginger, era fácil montar una escoba.
Su hermana mayor Athenea, que al igual que ella era una bruja, había llevado una escoba a su hogar muggle cuando ella era una niña muy pequeña. Fue en esos tiempos, en que ella secretamente, robaba la escoba y mientras todos estaban en sus asuntos, pegaba una voladita alrededor del comedor chillando llena de emoción y con la secreta esperanza de algún día hacerlo a campo abierto y sin restricciones de una madre muggle histérica por ver a su pequeña niña volando en ese extraño artefacto. (Una imagen algo aterradora para una madre conservadora que recién se entera que su perfecta hija mayor es una bruja)
"Estarás bien, Lil..es solo un vuelo rutinario para comprobar como vamos progresando" –dijo Ginger al ver que Lily la miraba nerviosamente.
"Sabes que le tengo terror a las alturas..."-atino a decir la muchacha rápidamente –" No puedo creer que esto me suceda a mi¿es que acaso no podía mejor hacer un trabajo escrito?"
"Claro que podías hacer uno pero es mucho mejor volar"-dijo Ginger sonriente –"el aire sobre tu rostro acariciando tus cabellos, y las maravillosas piruetas que puedes hacer te hacen una con el viento y el espacio.."
"No te pongas poetisa..no te resulta.."-dijo Lily rodando los ojos mientras veía divertida como Ginger fantaseaba despierta-
Junto a Ginger, una melena castaña apareció. Giovanna Moonseal también se encontraba con ellas, y por la sonrisa que había en su rostro, Lily sospecho que ella era la única que parecía disgustada con estas clases.
"Guuai! Estamos perdiendo Pociones por este maravillosos invento del ministerio! Me parece de lujo esta implementación de deportes!" –dijo Giovanna riéndose sola mientras miraba enternecedoramente a su Rayo Dorado, una nueva escoba que le habían dado en su cumpleaños 16 y que no había tenido la oportunidad de poner a prueba en los 2 meses de entrada las clases.
"Si! Es realmente genial! Además, es una buena forma de sacar los enormes traseros de las modelitos de Hogwarts de sus butacas!" –dijo Ginger riéndose ante la idea de ver a las "barbies" corriendo de un lado a otro mientras eran perseguidas por sus escobas.
"¡Venga¿de veras pensáis que una clase magistral de deportes logra sacarlas de sus butacas? Por lo que e escuchado, ellas no piensan subirse a una escoba.."-dijo Lily mirando a sus dos amigas –" por una extraña y mística razón, concuerdo con ellas.."
"Pero lo tuyo es diferente Lil! Tu no quieres montarte en una escoba por miedo a caerte, pero ellas no quieren subirse por que "podría deformar sus supuestamente bien formados traseros" ¿puedes creerlo? Parecen viejas de 60 años quejumbrosas!" –las 3 muchachas rieron ante el comentario de la inocente Ginger.
"Tengo la impresión de que ellas preferirían estar montadas sobre "otra cosa" –insinuó Kitty con una mirada pervertida en su rostro. Lily frunció el seño con una leve sonrisa y Ginger parpadeo sin entender.
"No entiendo..."-dijo ella sonriendo inocente. Lily y Kitty se miraron y se largaron a reír mientras veían que su amiga aun era una pequeña niña, aun que físicamente no lo aparentara.
Mientras las chicas reían, una mirada penetrante observaba a la muchacha de cortos cabellos rojizos oscuros.
James Potter tenia la clara impresión de ver por primera vez en mucho tiempo, a Lily flaquear ante algo que el consideraba rutinario.
Por una parte, era bueno que se hubieran agregado clases nuevamente de E.F para los alumnos mayores, ya que así, muchos de los que no habían tenido la oportunidad de aprender a volar o jugar deportes mágicos podía volver a intentarlo aun con mas ganas y energías. Otra razón por la cual se encontraba bastante feliz, era porque así tenia otra oportunidad de lucirse delante de las muchachas.
Mientras miraba a Lily Evans, sintió nuevamente un extraño movimiento en su estomago, como si algo lo hiciera dudar y sentirse mas débil que aquella chica. El, un perfecto conquistador, sentía como algo empezaba a cambiar dentro de el cada vez que la miraba o ella hablaba con sus delgados y delicados labios rosas.
El fuerte silbato resonó en el campo de Quidditch (Para desgracia de Lily XD) y muchos alumnos con sus túnicas negras se elevador por lo menos 5 metros desde el suelo hasta las alturas.
Mientras la maestra observada desde abajo orgullosa a sus pupilos, noto con extrañeza, que aun quedaba algo en el suelo.
La profesora algo confundida se acercó a una muchacha de melena rojiza oscura hasta los hombros que miraba desesperada la escoba, que por mas intentos le hacia, no lograba hacerla elevarse.
"Srta. Evans..¿se encuentra usted bien¿Tiene problemas con su barredora?" –pregunto Madame Hooch sonriéndole mientras se acercaba con precaución a la muchacha que pateaba el suelo con claras intenciones de elevarse.
La muchacha se dio vuelta a mirarla y negó energéticamente moviendo su melenita roja. Sus ojazos verdes parecían a punto de salirse de sus orbitas.
"No tengo problemas maestra..solo...espero..hacerla..elevar"-gruño la muchacha entrecortadamente aun intentando hacerla partir.
Madame Hooch negó con la cabeza mientras se cruzaba de brazos.
"Un maldito palo de madera no vencerá a Lily Evans...si Petegrew logro elevar su escoba (y suponiendo que el si es malo en esto..) ¿por qué no puedo hacerlo yo?" –murmuro en voz baja la muchacha.
Mientras la resignada maestra miraba con desanimo a su "peor alumna de vuelo", noto que extrañamente la muchacha se empezaba a elevar junto con la escoba. Tubo la esperanza de que el destino de la muchacha cambiara para transformarla, no solo en la mejor alumna en trabajos escritos, si no también en una de las mejores voladoras de Hogwarts. Sin embargo su expresión cambio radicalmente cuando comprobó que algo no andaba del todo bien...
"Valla, Lily se aun no sube" dijo Ginger a Kitty, que se encontraba a solo unos cuantos metros. –"¿Crees que le paso algo?"
Giovanna se encogió de hombros sin encontrar respuesta. Una muchacha que volaba junto a ellas se detuvo junto a Ginger, mientras se quitaba unas cortísimas coletas que adornaban sus chillones cabellos verdes.
"Creo no ver a "Lilita la monstruo".."-dijo Kari mientras miraba a todas direcciones cómicamente sobre su escoba, que al igual que su cabello, era de color verde con unas pequeñas pierdas incrustadas en el mango de la misma.
"No la hemos visto desde que nos elevamos.. se notaba muy nerviosa, le temblaban las manos y tenia un especie de tic en el ojo derecho.."-dijo Ginger rascándose la cabeza confundida –" no entiendo ese miedo a las escobas..no es tan malo estar a las alturas..."
"No claro que no, pero recuerda lo que le sucedió a Lily..."-le contesto Kitty mientras recordaba la situación en la que se había encontrado Lily hacia unos años.
Como todos los alumnos de 11 años, Lily Evans no seria la excepción en asistir a las clases de vuelo. Hasta ese entonces le gustaba mucho la idea de volar sobre una escoba. Siempre había escuchado que las brujas volaban en escobas, y cuando se entero que era una bruja, su primer pensamiento fue que volaría en una escoba con un enorme gorro, calderos y además, tendría horribles granos en la cara.
Esa era la descripción que se le daba las brujas, pero comprobó un tiempo después que eso no era así.
Amigablemente, Lily se monto en su escoba. Sin embargo, algo había salido mas...muy mal, ya que al momento que se monto sobre la escoba, esta había salido volando con Lily sobre ella. La escoba, totalmente descontrolada, había volado contra una torre y sin piedad por la espantada chica, la había dejado colgando de un fierro que sobresalía de una torre.
Los gritos de Lily se escuchaban en todo el colegio. Cuando al fin la lograron bajar de la torre, la muchacha temblaba histérica y daba miradas de terror absoluto a todo el mundo.
"Jamás..volveré a subir en una escoba..JAMAS!" –había dicho ella apenas recobro la cordura. Sus amigas pensaron que era una broma, pero desde ese día Liliane Evans había sostenido su palabra ,y si no fuera porque esas clases valían una impórtate calificación, Lily no se habría subido por nada del mundo a un escoba.
"Si me hubiera ocurrido a mi"-agrego Kari entre risas –"creo que estaría aun peor que ella... estuvo subida en esa torre mucho tiempo y además de cabeza, el mundo tiene otra perspectiva"
Mientras Kari reía desesperada recordando la anécdota de Lily, Kitty escucho unas fuertes porras y gritos prevenientes de algún sitio muy cercano a ellas. Instintivamente se dio vuelta y para su sorpresa encontró que nuevamente estaba lo que ella llamaría "La aglomeración de taradas de la cabeza en busca de algún chico guapo para pasar la noche" (Cifrado como: ATCBACGPN para que no sonara tan ofensivo en caso de cortesía xD)
"¿Aun esta parloteando Potter?" –dijo de repente Kitty mientras las risas de Kari aun se escuchaban. Ginger que no lo había notado, dio vuelta su rostro y comprobó que lo que decía Kitty era verdad.
A unos metros de ellas estaba James Potter y Sirius Black, sobrevolando un área que se encontraba arriba de las bancas. En dichas bancas, unas muchachas reían exageradamente mientras los miraban y los apuntaban pestañeando a la velocidad de la luz.
Mientras los miraban, ambos jóvenes aprovechaban para parlotear de lo mucho que sabían hacer sobre sus escobas.
James Potter era rapidísimo .Volaba de un lado a otro formando un rayo, mientras que Sirius Black, un excelente golpeador del equipo de Gryffindor, se movía elegantemente con un dejo de ferocidad, mientras subía a una enorme altura y luego bajaba hasta rozar con sus pies el césped.
Ginger miraba a Sirius con ambas cejas levantadas. Por la expresión que percibió Kitty, a su pelirroja amiga no le gustaba para nada ver como esas mujeres le lanzaban piropos "algo subiditos de tono" a su enemigo numero uno.
"De veraz a ellos les grada mucho la idea de mostrarse públicamente.."-dijo suspirando resignada Kari mientras miraba a los muchachos y extrañamente buscando algo entre ellos- "deberían ser bedetes aun que sean chicos"
Kitty que la miraba se puso a reír ante el pensamientos de ver a Sirius y a James con una cortísimas y apretadas faldas rojas de cuero y unas flamantes plumas multicolores rodeando sus bien formados cuerpos.
Ginger parecía claramente estar fuera de la conversación. Mientras sus dos amigas conversaban riéndose sobre sus curiosos pensamientos, Ginger noto que faltaba algo..o mas bien dicho alguien.-
"...Remus no esta por ninguna parte" dijo Ginger comprobando que su mejor amigo no estaba por los alrededores de la cancha. "Es extraño, no falta a ninguna clase (de seguro se le pego el gen Evans...)."-agrego Kitty mirando a Kari de manera picara, haciendo que instantáneamente esta se sonrojara y por poco perdiera el equilibrio en su escoba.
"Ayer estaba muy pálido.. desde su pelea con Potter, a estado muy mal.."–dijo Kari sonrojada mientras sonreía tímidamente. Kitty percibiendo esto le pego un codazo.
"Quizás necesita que alguien juegue con su "amiguito"...¿qué te parecería Galletona?" –Kari que aun no entendía el mensaje asistió involuntariamente mirando a Remus. Ginger las miro sin entender, y solo cuando Kari se le abalanzo a Kitty entendiendo el mensaje, Ginger pensó que quizás el comentario no era del todo agradable.
Mientras tanto en el lado de las fans y de los ególatras...
James Potter surcaba el cielo a una velocidad majestuosa. Con sus cabellos negros flameando era un verdadero espectáculo verlo. Realmente era muy guapo, y eso no pasaba desapercibido por nadie y menos para las Slytherins.
James echando un vistazo a su alrededor una vez que paro, se extraño muchísimo de no ver a Lily chillando histérica para que la bajaran. Pudo ver a sus amigas hablando animadamente, pero no había rastro de la persona que le interesaba.
Encogiéndose de hombros siguió con su travesía por todas partes del cielo azul, dejando aun mas histéricas a las fans de la banca (que parecían enardecidas por las piruetas que Jamesi hacia sobre ellas XD)
Una vez hubo terminado su intrépido giro de cabeza por un aro de piedra muy pequeño, James volvió relajadamente (como si fuera MUY normal hacer aquellos actos suicidas..XD) hacia Sirius que descansaba volando en su escoba, justo arriba de las bancas. Mientras Sirius arreglaba sus cabellos y un extraño arete que se había puesto en la oreja, James se le acerco y al verlo sonrió macabramente.
"¿Sigues con esa cosa del arete?" –pregunto riéndose cuando Sirius de la sorpresa casi se cae de su escoba.
"No se, eso creo" –respondió sarcásticamente Sirius sonriéndole a su amigo mientras arreglaba una pequeña colita que sobresalía de la parte posterior de su cabeza.
James miro hacia abajo y codeo a Sirius cómplice.
"Están bien buenas esas muchachas.."-dijo Sirius riendo morbosamente mientras su vista iba claramente a las piernas desnudas de las muchachas que reían estruendosamente, para hacer que ellos les vieran.
"Creo que últimamente Gaph me esta provocando para llevármela una noche a la Torre de Astronomía" –respondió James con una voz lujuriosa que causo la risa de Sirius instantáneamente.
"No estaría mal, quizás no me vendría nada mal probar mis derechos de prometido con Lienne" –dijo Sirius moviendo su cabeza distraídamente hacia una pelusa que volaba cerca.
"No le veo problema el estar con McGraw" –dijo James alzando ambas cejas
"No es fea, es realmente muy guapa, pero el hecho de que mis padres la hallan elegido como mi esposa, me da la impresión de que me mandan y eso me molesta.."
"Réstale importancia, solo aprovéchate de las circunstancias"
James miro a su amigo un tanto agobiado. A Sirius no le gustaba nada el hecho de tener que conversar de su familia, y cuando sacaba el tema era porque realmente era necesario o porque de eso dependía alguna cosa importante. Dando unas palmaditas cariños, James se alejo de Sirius.
Sirius lo quedo viendo y suspiro cansado. Miro hacia todas direcciones esperando encontrar a su amigo Remus. No lo había visto, y era extraño que no se hubiera aparecido ya a esas horas.
Estaba bastante preocupado, pero no quería que James empezara a darse cuenta que Remus faltaba, ya que no quería que también James se preocupara.
Restándole importancia Sirius tomo su hermosa y atlética escoba y dándole una impulsada, esta se elevo a lo alto haciendo que este desapareciera entre las nubes de increíble blanco.
James había trazado una volada perfecta sobre el campo de Quidditch, mientras volaba podía sentir el agradable zumbido de el aire rajándose en su cuerpo. Era una sensación divina de la cual se enorgullecía sentir y saber que era uno de los afortunados al sentirla. De pronto, un extraño sentimiento se apodero de el.
Era una sensación a alerta que lo hizo disminuir la velocidad a la que iba. Unos gritos desesperados empezaron a escucharse muy cerca.
"¡CUIDADO!"
Cuando supo de donde provenían dio vuelta su rostro, sin embargo algo venia a gran velocidad y no tubo tiempo de reaccionar. Una extraña forma se había abalanzado sobre el haciendo que perdiera por poco el equilibrio.
Cuando logro componerse aun volando, vio que había surcado el cielo una hermosa melena roja oscura.
Parpadeo sorprendido, y tardo unos segundos en procesar que Lilliane Evans volaba en una escoba fuera de control.
Cuando la escoba de Lily se elevo, sintió que algo no andaba bien. Los gritos de Madame Hooch la hicieron ponerse nerviosa, y solo cuando la muchacha intento bajarse del artefacto, noto que este ya se había elevado unos 10 metros. Histérica noto que la escoba parecía tener vida propia.
Su mayor miedo parecían estar a flor de piel. La escoba estaba descontrolada y parecía no querer ceder a sus intentos desesperados de salvarse.
Mientras se aferraba firmemente a la escoba, noto que había una figura delante de ella. Cuando noto que era un muchacho solo atino a gritarle antes de matarlo.
"¡CUIDADO!"
Un horrible golpe le dio y cuando salió del enrredo de pies y de túnicas noto que el muchacho era nada mas ni nada menos que James Potter.
Este la miraba confundido mientras ella le devolvía una mirada de terror absoluta.
James voló tras de Lily a toda velocidad. Le parecía casi imposible alcanzarla. Lily por otra parte estaba prácticamente pegada con un potente pegamento mágico ya que sus manos estaban apretadas de tal manera que era imposible pensar lo contrario. (Realmente estaba muy asustada ooUu)
Lily miro de reojo a James. El parecía desesperado por llegar a ella.
Cuando la muchacha se dio la vuelta para mirar a donde se dirigía su escoba , vio con terror que toda escapatoria estaba perdida, gracias a un enorme murallón de piedra que se había cruzado en su camino.
Ginger se encontraba realmente aburrida. Estaba sentada en su escoba mirando como todos gritaban y se divertían volando de un lado a otro. Mientras suspiraba cansadísima vio ante sus hermosos y grandes ojos violetas pasar un hombre realmente guapo. Se sonrojo mucho y solo cuando se dio cuenta de quien se trataba palideció y sobreponiendo su enorme orgullo y ego corrió la vista indignada con ella misma.
Mientras esto sucedía, la figura masculina paso hecha un rayo hacia lo alto desapareciendo en el acto. Sin embargo, la tranquilidad de Virginia duro bastante poco, ya que mientras su mirada estaba perdida donde la figura había desaparecido, algo se había acercado por detrás macabramente.
Unas fuertes y bronceadas manos le taparon la vista provocando un gritito de sorpresa de parte de la misma.
No sospechaba en lo mas mínimo de quien se trataba realmente.
"Venga! Déjame ya Kari! No me gustan estas bromas en altura!" –chillo esta riéndose alegre mientras Sirius Black la miraba coquetamente con sus manos sobre su vista.
Al no recibir respuesta Ginger pareció confundida.
"Bueno, si no eres Kari entonces eres Kitty. Simple" –sin embargo un nuevo silencio se apodero de la escena y Ginger empezó a impacientarse.
"Es que acaso no reconoces mis manos?"-pregunto una acariciante voz cerca de su oído. Ginger salto de la sorpresa e intento zafarse inútilmente.
"SIRIUS BLACK! BAJAME AHORA MISMO!"-grito desesperada dando patadas al aire mientras Sirius los esquivaba divertidísimo.
"Tranquila Calabacita! Puedes caerte!" –dijo divertido Sirius nombrando por primera vez en mucho tiempo el apodo que tanto molestaba a Ginger.
"Calabacita" era un apodo muy particular para una muchacha. Para algunas seria una ofensa ser comparada con esta singular verdura, sin embargo, para Ginger no era mas que un defecto que ella no consideraba del todo malo.
Sirius le decía calabacita desde que la había conocido. Era un simpático apodo para una muchacha pelirroja y que además era metamórfica, lo cual provocaba que muchas veces ella misma cambiara sus cabellos a uno naranjo (mas común era cuando estaba molesta). Sirius había optado por ese apodo porque su sabor favorito era el del zumo de calabaza.
"¿Por qué tendría que dejarte?" pregunto Sirius al sentir que Ginger se ponía muy tensa –"créeme que estarás mas segura en mis brazos que en libertad"
"Para nada!"- se defendió esta ofendida –"preferiría estar con un agradable y aromático Troll a tener que permanecer un minuto mas contigo Black!"
"¿De veraz? Y eso porque lo dices?" –pregunto este riéndose.
"Pues porque—" Ginger fue cortada por una voz muy familiar. Al mismo tiempo, Sirius la soltó percibiendo lo mismo que Ginger.
¡CUIDADO!"
La voz de Lily hizo que ambos se miraran sorprendidos ante la imagen de Lily volando aterrorizada sobre una escoba sin control que en ese momento se había estrellado contra James.
Sirius tenia la boca totalmente abierta de la impresión, y Ginger parecía estar a punto de desmayarse.
Los gritos de Kari y Kitty cerca la hicieron salir de sus pensamientos. Ambas se encontraban haciéndole señas mientras le señalaban una pared a la cual se dirigía Lily.
"¡Van a estrellarse!" –grito Ginger jalándole la túnica a Sirius histéricamente. Sirius que miraba la escena veía como su amigo se dirigía hacia una horrible situación.
Solo cuando vio que James sacaba su varita, sintió que nuevamente el alma le volvía al cuerpo.
Fin del Cáp. 5!
Jajajajajaj espero les haya gustado! Espero sus reviews! Para saber como seguir y no se, si me dan ideas MEJOR! Espero sus criticas como siempre.. ¿Qué les cuesta dejarme un mensajito? Muchos besitos de su amiguita, Haru (Vale)
PD: Perdón por lo corto que esta pero tuve que cortarlo para dejarlo en suspenso! ..¿Se estrellara Lily¿James se dará cuenta que sus fans observan la escena¿¿Echarán a la maestra Hooch por su descuido? TODO y mas en el próximo Cáp.
¡Alohomora Reviews!
